Sei sulla pagina 1di 2

DEFINICIÓN DEALOTROPÍA

La noción de alotropía se utiliza en el ámbito de la química para denominar a la propiedad que


tienen ciertos elementos químicos de aparecer con diferentes características en cuanto a la
física o con distintas estructuras moleculares. Una molécula que está compuesta por un único
elemento y que tiene diversas estructuras recibe el nombre de alótropo. En su etimología
encontramos que está compuesta por los conceptos otros, dar vueltas y un sufijo que indica
«cualidad».

Es importante señalar que las propiedades alotrópicas tienen


lugar en elementos de composición equivalente pero distintos
aspectos, si se encuentran en estado sólido. Dicho de otra
manera, el estado de agregación de la materia debe ser el mismo
para que ocurran las propiedades.

La diversidad de propiedades se vincula al modo en que se


disponen los átomos en el espacio. Esta particularidad hace que
un mismo elemento químico pueda presentar varias conformaciones. El fósforo, por ejemplo,
puede aparecer como fósforo blanco o como fósforo rojo. En un sentido similar, el carbono,
de acuerdo a distintos factores, se presenta como diamante o grafito.

La alotropía también se hace presente en el oxigeno. El O2 (oxígeno ambiental) que está en la


atmósfera puede ser respirado por los seres vivos y posibilita la combustión. El O3 (ozono), en
cambio, resulta tóxico y absorbe las radiaciones ultravioletas. Como se puede advertir, el
oxígeno es un elemento químico que cuenta con alotropía.

En el azufre también se puede advertir la alotropía. Podemos hallar estructuras como el azufre
plástico, el azufre alfa, el azufre monoclínico y el azufre fundido, entre otros alótropos del
mismo elemento.

Cabe destacar que, en el caso del azufre, se trata de diferentes formas cristalinas, con
unidades estructurales que están empaquetadas de modo distinto. Por eso hay expertos que
hablan de polimorfismo y no de alotropía. Para evitar potenciales confusiones entre ambos
conceptos, se recomienda entender la alotropía como varias formas de un mismo elemento
con diferentes unidades moleculares. En el carbono y en otros elementos, lo que cambia son
los enlaces químicos que establecen los átomos.

Continuando con el polimorfismo, el azufre es


capaz de producir cristales monoclínicos de una tonalidad amarilla intensa (en este caso su
forma se parece, a cada extremo, a la hoja de un escoplo, una herramienta manual de corte
que se usa para dar forma o labrar la madera) o bien cristales rómbicos de color ámbar (la
forma de estos cristales se puede definir como la de un paralelepípedo, un cuerpo geométrico
compuesto por seis paralelogramos, de los que solamente los opuestos entre sí son paralelos e
iguales).

Si bien el ser humano conoce el azufre desde tiempos remotos, que nos llevan a la prehistoria,
fue recién a finales del siglo XX que comprendió del todo la alotropía que posee este elemento.
En la naturaleza, el más común de ellos es el ciclo octazufre, el cual si no alcanza
una temperatura de 95°C forma cristales de relativo grosor, mientras que por encima de la
misma los cristales resultantes son aciculares (o sea que tienen aspecto o forma de aguja).

La primera síntesis de un alótropo del azufre, por otra parte, se llevó a cabo en el año 1891,
con uno que tenía anillos de un tamaño diferente de ocho. Se trataba del ciclo hexazufre, el
segundo de todos los alótropos reales de este elemento en ser descubierto.

Los límites de medidas de anillo de los alótropos del azufre que ha sido posible sintetizar hasta
el momento son 6 y 20, aunque la ciencia estima que ha algunos con anillos que se encuentran
por encima de este último valor. De todos ellos, el que ha mostrado una mayor estabilidad,
más allá del ciclo octazufre, es el ciclo dodecazufre (su tamaño es 12).

Potrebbero piacerti anche