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'IIEDO GOZAÍM
MERECX{O
PROCESAL CTWL
TOMO I
Volumen 1: Jurisdicción -
Acción Y Pr-oceso
EDIAR
ocIEDAD ¿¡lÓ¡nnn BDIToRA
s
COMERCIAL, INDUS]BIAL Y FINANCIERA
lE'
Cepfrulo I
EL DERECHO PROCESAI
1. _Nc¡ciones previas; 2. Función del derecho procesal: 3. Contenid.o
rlel derecho. proce-sal; 4. Caracteríslicas del derecho procesal; 5.
Carácter_ público del derechg procesal; 6. Unidad del derecho pro_
cesa); 7" Las norma,s proces"lei, 7.1 Apiicación de Ia norma procbsal
en el tiempo, 7.2 Vigencia de la ,rorm.n procesal en el espácio, 7.J
Interpretación de las normas procesales, 7.4 El control de consti-
tucionalidad: ,a) origen de loi grondes sistemas de control de la
cr¡nstitt¿ción; b) ln jurisdicción-como intérprete de la constitucio-
nalidad en el sistema difuso; c) Formas de'lleuar a cabo eI control
de oficio y.la Corte Nuestra opiníón; e) Et controL d.e
-supretna;'d)
oficio y la Corte Suprerna, Z.S Lo integiación'di tas normas.
$ 1. NOCIONES PREVIAS
Este corseú predispuesto no le dió mayor esperanza para liligi0, o el control hacia el ejer-
conr0 soll lns cuestiones sin
avanzar. No oividemós q.re toda ta vida del derecho hasta cicio razonable de los restantes poderes del Estado'
.t rigto XIX c1rcundó sóbre los carriles del derecho aten-
civil, Bn realidad, cuando hablamos de derecho procesal civil
dondé cómodamente se instalaban y desprendÍan otras no limit¡mos su alcance al simpl.e procedimiento, porque
ciones. como lo explica CouruRe , es derecho porque tiene. autonomía
En l-856, BenNlnn WlNoscl-tstn publica un trab'jo donde científi.ca y académica, aun cuando inserta en el todo orgá-
cuestiona Ia actio del derecho civil romano. La posición, de nico vincuiante del ordenamiento jundico; es procesaL porque
alguna manera polémica, encuentra distintos enfoques, como el objeto del estud.io es, por *q d-u principio, el.proceso' "La
io| a" Murspn. bsta d.isóusión científica permitió aislar las idea de proceso es una i-dea teleológica. se haila necesaria-
nociones de derecho (subjetivo) y de acción' mente taf"tida a un fin" 2. Y, I veces' es ciuil, porque pre'
tende encolumnar todo el derecho privado y aún ramificacio-
Se d.ieron entonces los primeros pasos hacia Ia autono- nes del público (laboral, social, fiscol-, administrativo);lo cierto
mía, hasta que VoN Bur,bw esboáó una teoría indivi- es que, verdader"-enie, hay un sólo derecho procesai, y por
¿"ái ¿o"¿u, po. vez primera, se destaca Ia necesidad
- ello particularizamos esta teoría general'
de presupuestos y condiciones para tramitar un proceso
válido.
Esta escuela alemana, continuada por Wecu, KoHLER'
KIscH, Rosut'{ssttc y GolnscgMIDT, entre muchos más, influyó $ 2. FUNCION DEL DERECHO PROCE-SAL
notoriamente en Europa, particularmente en Italía'
En 1903, CHlovr:¡¡on dió definitiva consagración al dere- va de suyo que, conforme ios antecedentes descriptos
cho procesi.o*o ciencia, porqué ai iniciar sus clases en la sum ariamentl, tenemos com o caracterís ti ca y de ñnici ón.p ara
Universidad de Bolonia, eiponi una teoría por Ia que con- él derecho proóesal el ser operativo de la función jurisüccio-
,ig"u áemostrar Ia naturaléza de las instituciones que for- nal.
;;ü;" ei procedimiento; la hilación vertebrai de sus prin- ¿Qué significa esto? En primer -lugar, da¡ efectividad
al
cipios; la regularidad y continuidad de los pres.upuestos; en priricipio pór el cual el Esiado, ai asuair la potestad de
.ü-u, el deiecho procesal obtenía la importancia que otrora iu.otrrlr los conflictos intersubjetivos puede reguiar la disci-
añoraba. plina social y un orden normál de convivencia, despejando
Conviene advertir que' no obstante la trascendencia ios pe5gtos áe la autocomposición irrazonable. Seguidamen-
ut.unrá¿" por Ia escuelá ii,aliana (son contemporáneos de te, ia f|rmación deliuicii, conscientiza ala sociedad sobre
curovgNne:'Q4RNSLU1TI, cALAMANDnEi Y REDENTI, entre otros), ioá de la justicia.y ia equid.ad en laponderación; por
la verdadera disciplina propia se alcanza cuando se dá el este consecuente se aplican lás leyes y las legla-s de la
"Aorur
paso del procedimentalismo,al procesalismo' judicial, como también refleja la.finalidad que las
En efecto, habíase observado que el procedimiento.era tal "*p"riu".ia
,roi-u. p"ttsatot tuteiar cuando fueron dictadas'
solamente cuando lo resoiua un tercero ajeno a la litis, pero Este claro vlnculo entre el derecho y el proceso es la
;;;tti;. y autoridad. De alguna manera' conserya Francia fuente común de toda obra jurisdiccional, una sirve a la otra,
..u i-ug.o, pila denominar- a la ciencia como derecho pri' recíprocamente.
,raáo j,rái"iario; y también España, qu9 lo- lla.mó derecho
jurisdiccional o júdicial. Pero la explicación desde esta pers- Fundamentos d,c derccho proaes.al ciuit, S'edición pós'
2. Coun¡ne, EpulRoo ,i..
pectiva aparece-desconociendo otras realidades del proceso, tuma, ed. Dspalma, Bs. As., tr987' P. 8-
I )¡:ttt.tllo l'lrr x't,;:l¡t, ( ltvtt, 2L
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Osv¡,r.rxr At,!'trt:txr (krz¡f N I
O bien cuando se üstingue entre peticiones abstractas y s\ 3. (lON'ft'lNIt)0 I)hll' l)l'itllr)(ltlO PROCESAL
generales de inconstitucionali.d'ad que no pueden -revestir
forma contenciosa por ia ausencia de interés inmediato del Ilabilualmente, si inLerrogamos cuál es el contenidoserá: dei
particular que efectúa la solicitud, y las acciones determína' .1..;;h; ;;;..rul, ,ug",-,ru-."t-e la respuesta inmediata
iiuas de deréchos de base constitucional cuya titularidad alega el proceso.
quien demanda y que tienden a prevenir o impedir las le- Ello está bien, pero es insufi'ciente' Observemos que la
siones de tales derechos como son la acción de mera certeza Ia qrrl se encuentra planteada la incertidum-
y de amparo o el juicio sumario en materia constitucional, -*r*¡á .á¡." ante la
medios por los cuáles el sistema de tutela jurisüccional de
¡.."p".¿" ,., d"'á¡á""ut diferenies' Un conflicto contrac'
administración; en Ia empresa; un incumplimiento.
las garántías constitucionales adoptado en los inicios del tuJfiri;.u., iu ,it"";,ó; familiar; en f,rn, el sinnúmero de
sistefua judicial federal, adquiere el desarroilo adecuado al de relación' todos pueden
cumplimiento de su fina-lidad propia. ;;;üiüd"áes que ;;;¡t la. vida
originar *rn p.o.".l-j;A;.á, y en,estos casos' es indudable
El derecho procesal moderno, en cambio, ha reiegado su el interés por captar ese contenido'
rol netamente ádjetivo, o sen'idor de leyes sustantivas. No Pero ¿qué ocurre si las partes en -conflicto recurren
a una
lo posterga Lotalmente, simplemente se compenet¡a de no- forma de proceso q.,.-"o tiene como órgano {",ti:o: 1T,{i"i
-r"do.o. p-"rincipios que entonan la socialización del de-recho,
con iurisdicción, elto es, con poder y autondad
constr[ucro-
otorgando la posibilidad de una justicia funcional, efrcaz y if r.*áli-i."to a atbltraje, amisable composición,
solidaria. "riZl
iuicio de peritos, y de*ás fórmulas de heterocomposición
-evitar individual se aligeran
Ante el planteo las cargas con '¿..""*"'t-'"ti".- aui hut"cho pro.cesal?, entendemos que sí' y
tendencia a el exceso ritual manifiesto, claro que sin !rr. tu"ott"s las aportamos más adelante'
ocupar el espacio que le corresponde a Ia responsabilidad Similar problema se crea en los procesos sin c.onfiicto'
propia del proponente. ¿ooá. upureie la fi*l.f del Juez resoiviendo situaciones
de
En materia de prueba, se propicia una búsqueda de la también estos' cometidos
d;;;ú:;;ri ua-itt'itirativas' Son
verdad real, abriendo los cami¡es de demostración y prgci- del derecho Procesal.
sando en ios medios de prueba un método de comprobación Ahora bien, ia naturaleza de cada proceso impone.unay
que no sea oscurecido o descartado por cuestiones simpie- serie de conceptuaciones técnicas que orqrrestan
prrncr'plos
mente formalistas que destruyan dicho ideal. presupuesto, propiot á" fu asignátura' En este sentido' el
Evid.ent,emente el porvenir del derecho procesal debe ;¿ñ;;; j"ti¿i"o ¿L iut partes ! peticibnantes' como de re-
responder a estos novedosos encuadres. La continuidad de présentantes, mandatarios y patrocinantes'
jurisdicción, Ia acción
-base de la
su óstudio en el clásico arquetipo La regularidad del proceso.imP.ot" ocuparse de los pro-
y el proceso, es hoy una apriorística i.nsuficiente, de blemas de compete*l^ y jurisdicción, lo que.supone
invoiu-
m.arlela que el investigador detie completar los fundamentos .ráiiáJr"-.-"ríra"r, á"6,itus, derechos y obligaciones del
evitando ser fugitivo de 1a realidad denunciada 5. órgano jurisdiccional y sus auxiliares'
En este ámbii'o, es natural además, estudiar en la la asig-
iatura las formasi;á;rig"ación de m.agistrados co'1o de
;;pl.;á;; y funciona¡oJdel Poder Judicial'
1942'
Finalmente, el contenido intrínseco de cada uno de los
5. PoDEmt,R¡.lttRoJ.:Teoríaytécnbad¿Iprocesociuil,ed.Ediar,Bs'As',
p. 78.
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Osv¡t,lx¡ Al,¡'lutx¡ ( ioz¡l¡¡ r
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?. I)¡r¡clo,i.r*-oE.: DereihoProccsd/ cjr'ü, lomol,cd.AbclcdoPcrrot,Bs.As., 8. Ou$p, J,rtMs: Derecho Procesal Ciuil' ed'InstituLo de Estudios Polfticos'
1979, p. 28. Madri4 35'
1956, P.
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g.MBncloenA¡lttc,ur:ELprr'jesoylaunídatJdelordenjurídí'co'J'A''1968-Ill'
p.746.
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28 Osv¡.t,rxr At,r'u¡:rxr (.krz¡ ir.l r
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exceso ritual manifiesto que destruye al fallo del fundamerrto rrrrrtitttlgs st:gtitt tlttit:tt lrrs lrlrlitlrrtl' por lo que resu,lta crite-
suficiente para sustentarlo" 21. ri()s0 csllrlrl,ic,lr. t,i t:orrbroi de aplicación a través del meca-
La elaboración de las doctrinas sobre ia arbitrariedad de rris¡uo clc los rocurs()s (V.gr: ¡rulidad, casación, etc')'
Ia sentencia; la gravedad institucional y ei exceso ritual ['or lo demás, Ia aulonomía que persuade la dicción de
comentado, son otras deducciones de la interpretación üná- Lrs normas procesales no priva la utilidad de cualquier sis-
mica que debe reaiizarse en las normas procesales. tcrna para investigarla'
En este contexto se incluye Ia obligación del Juez de ser En verdad, es común observar en este esquema un método
atento a las realidades que lo circundan, dando preeminen- ql,.-,ru ie.orti.odo, secuencialmente, cada aspecto de 1a
cia a los fi.nes que informan las leyes, más que a letra fría rIOrlna.
del precepto que, no obstante su consagració! introducen El ltamad o método gramatical o exegetíco, no hace sino
,-,na li-itáción angustiante que frena Ia posibilidad de rea-
Iizarla.
,.oJi, testimonio de lo que cada palabra expresa y transmi-
le. A su vez, el tiempo histórico de su dictado muestra una
La Qorte tiene dicho que "por encima de Io que las leyes .lr**tuttcia particuiar que reconoce la oporbunidad y necesi-
parecen decir literalmente, es propio de la interpretación dad de su épdca. Esta interpretación progresiva transporba
indagar Io que elLas dicen jurídicamente, es decir, la conexión La realidad hiutóri.u. del tiempo de la sanción al futuro
pro-
con Iás demás normas que integran el ordenamiento general yectado para la generalidad.
del país. En esta indagación no debe prescindir, por cierto, con igual intensidad. debe analizarse el conjunto de las
de ias palabras de la iey, pero tampoco atenerse rigurosa- leyes, poique no existe norma procesal que no se recueste
mente á ellas cuando la interpretación razonable y sistemá- en otrá o le sirva de fundamento.
tica asÍ lo requiere" 22.
Finalmente, 1a voluntad que inspira Ia norma no puede
Como agldamente 1o destaca Putc Bnutau: "puede tener quedar desprendida del estudio global'
más fuerzaireadora el valor persuasivo que se desprende de
los fundamentos de unas decisiones justas que el autorita- cossro ha sostenido en este punto que la labor del Juez
rismo abstracto de una disposición legal cuya raz6n de ser no es nunca la interpretación de la ley, sino de interpretación
se haya oh'idado" 23. Ju iu conducta humana meüa¡te la ley. El mérito de. esta
álstincion estriba en destacar eI empeño dei órga*o jurisdic-
Orgánicamente, la interpretación de Ia norma procesal dá ;i;;;i-t". adecuar las conductas h'manas enmás el marco de
cuenta de una relación inmedi.ata entre quien apiíca, crea y ias nor^mativas aplicables, pero no incorpora que una
recrea las normas que utiliza. sutil d.iferencia eitable"ida al afirmar que Io aplicado es el
Si las normas procesales abastecen la movilidad del Derecho que parte de la leY.
proceso, 1o diseñan y estructuran, el destinatario de ellas En cambio crnovrNo¡ , lraza distancias notables con la
iesulta el órgano que las realiza. Es cierto que Ia adjetivación u"to"o*iu fara interpretar las normas_ procesales, conside-
en los procedimientos registra transformaciones creativas o rando que esta tarea áebe elaborarse sobre lo actuado en los
del derecho ?a. R'SENBER. comparte y
principios generales
sigue los
;gt;d' "Lí interpretación de las leyes-procesalesgenerai.
21. MoRELt¡, Aucusro M¡nro - Sosn, Guer-nnRro Luc¡^s - BsRtzoNce, RogPRro
Omat: Códigos pro<:osales en lo'ciuil y conercí,ol de Ia prouincio de Buenos Aires y ill.riár principioi que informa'' la de la teorÍa del
la Na¿ión, tomo I, ed. Plat¿nse - Abeledo Perrot, Bs. As., 1982, p. 499.
22. Fl't.r,og 24I:227; .244:129: 263:23O, entre otros.
23. Pr.¡c BRtneu, JosÉ,: Introductión ol derccho ciuil, ed. Bosch, Mad¡id, 1981, 24. Cn¡oveNDA, Jost: Principios de derechn procesal ciuil' fiad' de José Casais
p. 257. y Santaló, tomo I, ed. Reus, Madrid, 1977' p. \51'
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40 O:;v¡rt,r x¡ At.r'l¡rirxl (krz¡f r.fl
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poderes de los mismos, es inimaginable dentro de esLc cs- rln rrr[o¡rtrrrIo crr llr (]lr[¡r l,'urrrl¡rnrr:ntnl cle I]onn y en la
quema. Si son justamente los jueces quienes deben inter- (lo¡rslilrrt:i15n rlc It¡rlin. Mrls ¡lrtlxintn, lrt Constitución espa-
venir en "todas las causas" que se susciten como consecuen- ¡loln h¡r instnrrnentado sr-t Tribunal de Garantfas Constitu-
cia de la aplicación de la Constitución; es dentro de sus t:ionnlt:s particndo en gran mcdida de la sistemática kelse-
expresas facultades que les corresponde ejercer este tipo de n ilr.¡ta.
control. Planteados los dos grandes sistemas de control
Se ubica así.el problema del control como componente de rlc constitucionalidad, debemos considerar que las formas
la tarea de tnterpretación" que compete al Poder Judicial. ()n que se ejerce el mismo en los diferentes regÍmenes polí-
Licos, permite clasi-ficarlos por la manera en que se efectúa
En cambio, el sistema de control polttbo, original de cl control en la relación con ia vigencia o no de la ley cues'
Francia, encuentra su funda-ento en ia voluntad del pueblo
bionada; asÍ como por los efectos que Ia declaración de incons-
como supremo legislador y, como contrapartida, la descon-
fiartza hacia los jueces, que ai producirse la Revolución for- titucionalidad produce respecto de la vigencia futura de Ia
ley.
maban parte iniegrante-de tas estructuras sociales que la
misma habría de revertir.
El pueblo como cread.or racional d.e la iey no podía ser b) Lo jurísdieción eorno intérprete de lo' constíttt'
superado en ningún orden relativo a la misma, ni siquiera cionalidad en eI sisterna difuso; Nuestro sistema insii-
en cunnto a la revisión de su correspondencia con la norma tucional organiza eI mecanismo de control con base en el
suprema. Cierto es que la aplicación-de esa ley correspondía sistema ¡mericgno, es decir, que otorga a todos y a cada uno
como hasta entonce! a loslueces. Pero desde entonces se de los jueces, ia potestad de controlar la constitucionalidad
estructura una limitación que sólo persigue la racionaliza- de las ieyes. El razonamiento es seiicillo: el juez en ejercicio
ción de la sanción buscando Ia más adecuada al caso en del poder junsdiccional dimanante de l¿ 56fos¡nnía del Es'
estudio. tado, está obligado a interpretar la ley a fin de adecuarla
Respetando este concepto es eüe, luego de algu- al caso parlicular que se somete a su d.ecisión; si encuentra
que exiJten leyes o normas en conflicto, debe aplicar aquella
nos intentos por el estilo, en la Constitución de 1946 se que cuente con preeminencia constitucional, y si son de igual
determina concretamente un tipo de control político de la jérarqura, debe recurrir a los principios generales:. Iex pos-
constitucionalidad de la leyes, a través del "Comité Cons-
titucional". A partir de la Constitución de 1958, el proble- terior derogat legi priorí; Iex "specíalis derogat legi generali,
ma se resuelve en el Consejo Constitucional, órgano de etc.
estructura e integración política, fiel al más puro concep- Precisamente esta potestad interpretativa es la que
to jundico de la Revolución. Reconocida la necesidad de le otorga el gran poder, que algunos autores consideran
preservar Ia supremacÍa de la Constitución, no se despoja un "verdadero poder político" pues si éste consiste en el po-
de tal función a quienes hqn sido los autores de la ley; der de "im,pedir", y si el control de constitucionalidad
es nuevamente el pueblo quien controlorá Ia constituciona- se traduce en la no aplicación de ciertas normas que
lidad. son estimadas repugnantes con relación a las superiores,
la conclusión lógica es que losjueces están investidos de cier-
Entre ambos sistemas fue l(¡meu quien, para la Cons- to ""poder político", en virtud del cual proceden a la des'
titución austríaca de 1920, i.maginó una idea innovadora: caiiñcación (aunque sólo sea para el caso concreto) de
un órgano destinado específicamente a controlar la consti- las leyes y demás normas que aparecen en'contradicción
tucionalidad de las leyes, u:ra verdadera Corte de Justi- eon la supremacÍa constitucional: al no aplicar esas nor-
cia. Este si.stema se difundió rápidamente en Europa, sien-
rür.r
42 O.sv^t,rxl At.r'trr.:rxr (irlrr'rl¡.; 43
)r:rrr.r,ilil lrltr i't.:¡A¡, ( llVll,
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O:;vnr,rxr Ar,r'rr¡:rxr Coz-¡f Nt [ )!:nt,tr'¡ ¡, r lrlr¡ ¡'!,r¡¡1, ( ll v¡ t 4l¡
fundamental, cuadra interrogarse: ¿Qué es más imporlante t,rr jrrristlic:t:iritr stl tt¡¡oLtt ltsf tltl- Itt sortbcnsia (y en su
para eI Estado? ¿Qué un juez conozca y resueiva el conflicto ,rvr:¡[ut"rl cjccLrció1), y cn'coltsocr,rc¡rciit se limita al control de
individual, preservendo los derechos particulares? ¿O.es más i,, ,r,ir*lit,icion:rlicláá, que por otra parte, se ha constreñido
trascendente la defensa social, aunque Ia composición del ii,rrino.*.nlc, si al ponersé en marcha la acción, no se Plar-
litigio importe desatención aJ problema concreto, individua- ICó l¿r crresbión consiitucional, o se acusó la inconstituciona-
lizido, q.te s" planteó? Es probable que pueda haber oposi- I idad correspondiente.
ción entre una y otra exPectativa. se agrega a esta iclea que, las funciones de la jurisücción
¿Cuál es el verdadero sentido de la juri-sdicción? ¿Es un .'urrj"-Sooirol y de creación (ai resolver eI conflicto 'crea"
debér-poder? o ¿Hay que variar la posición de funciones, esto .r;;;;;á ndíotdual) con lo que no existeque limitación fun-
.l;;"i a Ia tarea del magistrado, toda vez s-oluciona ei
es, deber-poder?
problema controverti.do, y controla la legalidad de los actos
-.oostitucionalidad
Un planteo similar podría enfrentarnos a esta dislrrntiva las partes han
¿Qué valores predominantes protegen los
juecesl iQué los á I"y", en juego, ..rya
3r' cuestionado,
ái.ierencia de áquellos que préserván los legisladores?
La Corte Suprema de Justicia de la Nación ha decidido con ello -se d.ice- no habría necesidad de otorgarle
*uri*t lol"ttades pues Ia cautela naturai que p.ondera la
reiteradamente que el Poder Judicial sólo puedp resoiver compromet"irla o ten-
colisiones efectivas de derecho y no hacer decla_raciones i"tá**""ión d.e uqrr.éllos, puede verse
generales que establ ezcan normas para lo futuro, dado que iáJu u rebasar, pe.,oitietrao, por ejemplo, el control de ofi"cio
á;;; I.y; 'ieotoocet sÍ podría criticarse +I gobierno de los
ño existen'en el orden nacional ácciones declarativas de jueces" 34.
io.oortit.rcionalidad 32, pues tiene entendido que Ia decla_ra-
ción de inconstitucionaiidad es un acto de suma gtavedad Esta visió4 que d.escalifi.ca el criterio moderador que
que debe considerarse \a úItima ratio del orden jurídico. De pri"if.gi" ta funá0" jud,icial, tiene a nuestro entender un
álii que tal expresión no pueda ser'purt-ánte teórica o iiAo iriicial que la deimerece y que pretendemos demostrar
abstrácta, como que tiene que referirse a situaciones concre- más adelante.
tas de la causa y disponefse con el alcance'que resulte de En cuanto a los demás interrogantes, pueden arriba¡se
circunstancias áspecificas. Agregándose que el eventual algunas conclusiones:
desacierto de polílica legislativa, es ajeno al exáme¡r del Examen d.e constitucionalidad: necesidad de
Supremo Tribunal y no implica su descaiificación por.lesión -
caso concreto. El conflicto entre el interés individual
a principios constitucionalés si éstos no se hallan directa- ;;l i,,¡.réi social. En tanto los jueces necesita¡r del planteo
ménte afectados en forma tal que imponga al tribunal la i.rieresudo de Ia cuestión constiiucional, sea por- una inter-
necesidad de invalidar las normas impugandas en salvaguar- deducida, el control se
da de aquellos principios 33.
;;ftó" dit..tu, "indirecto'- -(Algunos autores
o por una excepción
prefieren
determinará como
áu"o*1"* el control como por "-,rJde acción" o por 'vra de
35.
excepción")
31. AlgunoscieestosplanteossonexpuesLosporV,rNosst,enlasobs'cits',p'1021
y 1024 respectivamente.
259:l9t y 263:231. En el orde¡ provincial
32. F¡.t¿os, 184:358; 245:2'o2i 258:284;
(Buenos Ai¡es) existe una'acción autónoma declnrativa de inconslilucionaiidad, a
semejanza de la que prevé el art. 149, inc. 1', de la Constitución bonaerense' p'
34. IgÁñez Fhocru'u, I\{,r¡rnnr: La. jurisdicción, ed' Astrea, Bs' A3' 1'972' 67'
33. CSIN "in ¡e": "Sabella", nov. 2&/9?8 citado por Mon¿¡-rp, Aucusró M'mto;
Sos4 Guer,sunro Lucas; Brauolcr, Ro¡pnro Ovxtt, Cóáigos Procesales.'., tomo I, cit,
35.Bnr¡ucouarC,A.Lucto:Controlejurisd,i,ccionoldaconslitucionali.dad¿dns
p. 247. leis, Revista Forense, Rfo de Janeiro, 1949' ps' 97 y ss'
r-lff'
46 Osv.,rt,rxr At.r'¡r¡:txr Goz¡lN
trt:,'lt', I'lt' r'l'rlt, ('tvlt.
I
I )¡ 47
Siendo así, la prótección sólo ampara a los concretasente áttu;¡l¡;;;^ ei Lnu*to social; rompiendo la mfstica de la legitimación
y a"it."" judicala *o*"nt, simplemcnte c{n¡o un reto que al ampam clásico
perjudicados por la medida inconstitucional. con vcrdadera fucrza potenciel un rcanismo técnico procesal del
á;;;;";" y" miras *bti. *n pereatoriedad y s.rliciencia, la tutela
ii.r"nü tno del futuro) en a
38. Del contro! jurisdiccianol de conttitucionali<tad, Ed. Depalmg Bs. As', 1952,
p. 80. dilercneiada.
39. Cstct-l¡.v¡, At¡.¡¡.r¡no E., ob. cil.' p. 8?.
ürrr-
48 Ow,tnp Aluru.:rx-¡ Cloz¡lx I I )r ttt','tt,r l!ttr x'¡';Al, ( ilvll. 411
d¿ control dz Ia
40, EI d-erecho conslitucional dzl poder, tomo II, cd. Ediar, Bs. As., 196?, ps.34V 41. V¡xossr, JoRce REDJItoo A', Introducción a los sístemas
constítuciona!ídod, LL, 1980-.{' p. 87'
342.
42. Fx Z,r.vr,oto, i{É'cron' ob' cit', 25 oños"'' p' 65'
IITTE
I )¡ tt¡r'tt,r l'¡¡¡ ¡'¡"!¡¡, ( ltvtt fil
Osr'rrt,rx-r ALr.Rurx¡ G<¡z-¡rf w t
terse ni plantearse en un proceso constitucionar autónomo (lr¡r: rt[,tlroctl, t:tttl¡ttl() . I)or t''jtrrlt ¡llo' tt¡¡lI ¡llistntl norma eg
y especÍñco a3, iniciado ad h.oc por medio de una acción ,i,'l¡,ttitn pui r',,', nrn¡;iitrrrclo y tltrsttplicnda por otro'
especial (iniciativa); por el contr-ario, el planteaniento es t'ln los Flstlrdos Unidos, cl principio del. sto're .decLsís
incidental, o por r'ía de excepción y de aplicación estricta Bl que el asunto cons'
precepto que se cu_estiona y para el caso en que se aplica ¡,,,r,rrite, a Lrirvés de las impugnaci.ones' juüciales superiores y' en
i.it,,cional sea resuelto por cuerpos
(alcances); queriéndose signiñcar además, q.re ia compé.uen- ;:rñid, p;t fu S"pr"áa Corte todos los jueces Federal crryo fallo resulta, a
cia para resolver estos conflictos de constilucionalidád, co- .rrrtir de entonces,ibiigatorio para inferiores
rresponden al mismo órgano judicial que debe conocer y con efácto ño ya limitado al caso' sino erga on'ürcs
decidir el caso concreto (es decir, que hemos salido de li ;, ;;; ""a", {5.
(cfectos)
abstiacción del sistema político). rompe- la
b) Concentra"d.n. Esta tercera alternativa' -que
Sin perjuicio de volver al téma (a fin de fundamentar los ¿i.io-ia-l.rtr. "f titt.*" polÍtico v elporque trene judicilJ' tu gnsapbll
motivos que dan causa a compartir la experiencia de este i,.r u.t" último tipo como variettte, tunclones
sistema), debemos observar que el control jurisdiccional, en. j urisdiccionales.
los Estados Unidos, puede provocarse a través de la oposición
a Ia acción, o de ia excepción dentro-del caso concieto. 'Este sistema d.e control concentrado de la constituciona'
Iidad signiñca unl- ittzu"4t-gferencia en relación con el
Si las acsiones dadas por el derecho común (common law), difuso" s, no se-aplica el método
sistema ameticanÑá.o.t¡tof y ryl-
en cambio no son adecuadas, quienes se consideran agravia- á; iñ;.ehción "luborado por los jueces FI¡nu,roN
dos tienen a su disposición las aceiones de equidad (iquíty),
cuyo objeto inmediato es obtener que se libie la orden de
;;;ñ;; *i.r"i".lproblenia en u',a cues,uión de aplicación
o desaplicación de la IeY.
suspende,r ia apiicación del acto. Finalmente por una ley
federal de 1934 (28 USCA-400), han sido admitidas iai 'Enverdad,enelsistemad'econtrolconcentrado'la (y por
acciones declaratorias aa. io.ooriit,rAoo*Íi¿uá, y por consigui.ente, Ia invalídez
La influencia del sistema americano, prácticamente ha
;;; por Julq;;t Juez óonno una
e. s u',q
i; t"up li. u¡Iüáá ai á" I a I evl n o pu e d sinple-manifesta-
"l-"11i""du
v declarada y
sido decisiva en Ia adopción del mismo para esta parte del irñi"ál." iJ¿*r_i"uer de interpreLación, a su de-apticación del
continente áurecho io= .uro. concretos iometidos corlocimiento'
Sin embargo, existen algunas diferencias que particula- Fár "
ü-.""tr*io, los jueces comunes (civiles, penales' o en su
rizan el control de constitucionalidad de nuestro país. ."*, administrati"J-f son inclmpetentes para conocer la
cuestión de lncorr"ti-ñcionalids¿ de las leyes' así sea' lnci-
La interpretación que pueda hacerse es en los hechos Ia
denter tantum, es decir, con eficacia limitada al
caso concre-
mis-ma: es decir, se autoriza al magistrado a iriaplicar la
regla que no se compadece al Estatuto Fundatoental; de
modo que tanto los jueces norteamericanos como los argen- '"" J; forma en que se vent'a la cuestión constitucionai
tinos, poseen ei poder-deber de declarar la inconstitucióna- pgt yía de promoción directa (lra de
lidad de la ley, én el caso sometido a su decisión. ái"iO"l fégid*""áo 'J efecto r ior óganos poiÍticos, a los
"p;il";;;."iü
Pero diferencia a ambos el problema de la incertidumbre jueces ordinarios Y a las Parbes'
flrrrl
(,) ():;t'¡r,r xl Al,l lil..lx r ( krzliNl
É-fIIL
()r;v¡t¡x¡ At,r¡r¡:rxr (ioz¡f Nl
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O¡;r',rr,rx-r At,r'ru: tx.r Goz¡ f ¡.¡ r I)!,I¡¡ r llr l'¡¡,, l':¡nl, ( ltv¡¡
til
La declaración de inconstitucionalidad sin invocación -- l)¡ttlrl t¡ttr: llt lttt:ltcrlr tlo llt ( lolrstibución sobre ias
irrf
-
de parte no sólo no constituye u¡ desborde del Poder Judicial nol'nlls illfi:ritlrt:s t:s vtlrLic¿tl y ilun cuando a Ia casación
sino que, por eI contrario, hace a su razón de ser, en cuanto rl,llrr:rt lrltttrsc Ilorn.l¿ls precislts, la obvia restricción de la
una de sus misiones específicas es la de controlar la cons- ,',r:,lll i,rro tLt¡uit curict en secle extraordinaria no es invocable
titucionalidad de las normas jurídicas en su aplicación al ,',,1|,1,, I¿r trccosaria constitucionalidad de los preceptos lega-
caso concreto. de los jueces'
lrrs r¡ttc sc someten a consideración
- Si el derecho es un sistema en que las normas d,e l)enlro de los límites en que se haya trabado la litis
menor jerarquia se nutren de las superiores, no se adüerte -
la iurisdicción tiene ia obligación jurídica de declarar 1a
cóm.o podría practicarse un corte horizontal del ordenamiento con ia Nor-
t;..i;;t;i;;;""tli¿ta ¿e las nirmas incomp.atlblqs.
inmeüatamente por debajo de la Constitución, de modo que, ,ri"-rt,-¿"mentd, ánt.que las partes no-lo hubieren solici-
prod'uci-
ante el silencio de las partes, los jueces resuiten apiicando Laclo exprero-unt"; Já.la¡ación que, naturalmente'
el de¡echo de menor nivel e ignorando la mayor jerarquía. ril efectos en el caso concreto'
Así como Ia regla íura nauit curia obsta a que en dos Constitución Nacional encabeza el sistema
juríüco
- iguales
casos se apliquen normas üstintas, de igual modo -La dentro y .lo áesde fuera d'el mismo; en consecuencia'
-r""t*tia
clesde
la Carta
se impide a través del control que en un caso se desplace la l^ ¡LaiAd debe asegurar el impeto.ded.t las partes,
norma inconstitucional que fue opuesta por la parte respecto S"ñ;; iñépendientemente áe la comportamientos voluntad
de un caso idéntico donde no existe tal introdueción. ;t":;;;;t.t" á" r*!."l.rl"iu. v demás de
sufiiente apoyo en la
al pedido d.e }as partes la potestad de los Ios litigantes que, a su vez, tengan
- Condicionar
órganos judiciales para declarar ia inconstitucionalidad de propia Constitución-
las normas legales, pugna con el texto expreso del art. 31 La doctrina que considera que los jueces no pueden
de la Constitución Nacional, que impone la conformiciad con -
declarar Ia inconstiüuciona-tidad de-las normas legal,es
si no
el ordetta*iento y no sólo t".u rrot-ur particulares. i""-¿i" p"li.iáo ae p*tu, no-sóll carece de apovo
:i l1,C""t-
"oo
titución, sino que iampoco lo tiene en normas procesales
en
ei juez decla¡a inconstitucional una norma sin
- Cuando
previo planteo de parte, no sentencía ertra petíta, ya que se i^r q".,'p"r el contrari'o, sustentan la tesis de la preeminen-
atiene a las acciones deducidas y a los hechos invocados, ;i; á; ü Norma Fundamental, habida cuenta lo dispuesto
50'
condicionando el derecho aplicable a que resulte legitimado en los arts. 34 *.t. Z;l i63 inciso 6t" del Código Procesal
por la Constitución, desde que, con Ia saivedad apuntada Por su parte quienen 5s5lienen ia tésis prohibitiva48, se
respecto de la "casación", el derecho inclusi- fundan en la inte$rátación de los arts. 14 15 y de la ley
ve- no es una cuestión que pueda no -Constitución
ser sometida a juz- interposición oportuna deJ acuse
gamieiito no transgreüéndose el derecho de defensa pues la ;;;I;t ;^les se ,"-qniur. yIasu mántenimiento en todas ias
de inconstit,rcionáiiáad
constitucionalidad o inconstitucionalidad de las normas no es instancias
imprevisible y no requiere debate previo.
La Corte Nacional desde 1941 en los autos "Los -Lagos
se declara la inconstitucionalídad de una dlU¡rr"o Wa"ciiial;, sentó el criterio de que es indjspen-
- Cuando
sin previa argrrmentación de parte no se omite aplicar "t qu-e la inconstitucio-
nor:ma r"¡f" ¡*" el derect o pri¡tito argentinopueda pronunciarse a
derecho I'igente, pues su ci¡cunscripto des¡llazamiento en un ¡ái¿J¿ de 1as teyes y decretoJsólo
iitigio concretb obedece a que es repugrlante a la Constitu-
ción y recorda¡lo-- la Constitución es también dere- Aires' en las causas
-cabey ei de mayor jerarquía.
cho vigente 50. Fallos de la Suprema Corte de la Provincia de Buenos
sl julio 6/984; idem "l'eiva'
"Chaparro, Dominga . éili; Á;;;;t S'A' despido''
S A' V despido"'
c""","il,:--v-"Vrart'i¡o c' Swift Armour
Horacio..."; Cirrrino
".
5fl ( )l;vrrt.t x.r Al,f lrt.:txr (loz¡lt'l I
EITIlI¡
{;l
bU Osr'¡l,txr Ar.¡ i¡1,;txr ( i<¡z¡ltt
En cuanto a La renuncia, habría que identificar Ia nalu- l.r:;rr1rr,r.ior., l.rtrl,ir;flrr.ir,rrtl,r rr¡t ri{:ill.rrlo llrrlrLictl tlbjcLivo conte-
raleza del conflicto. rrrrl,t ltot' llr lrt.y flrlrrllrtrrt'rtt'ltl'
No debe perderse de vista que el cometido de la función l'or' r'so cl-i, rlic:tl ()i\l'l'l'll,l,l'l'l'l'l' qtto cuando eI Juez interpre-
judicial es résponder con justicia a las controversias de in- l;r l;r rr()t-lrr¡r 0 rntis bit:ll el rlrden¿rmientO ConStituCiOnal y eSOS
iu."t.t que lós particulares exponen; de modo -que si la ,,,,,,:,,¡,t,,, .y t)sits fórrnuiiLs, debe tener en cuenta eI carácter
d.isputa ,r"tsa sob.e inter:eses privados (disponibies) naüe
Y debe por_consi.guien-
, ,,,ii,1,,f ,,.'tl,rl rlerccho constituciona-1. del mismo modo pero con
-ejot que las partes para señalar ei embiente en el que i , 1,,,, ¡tt:ctrsicl¿rd cle las cosas' siempre en
con lo que-queremos decir ,,,'u,,,1irrfcnsiclaci y penetración de sucede
quilren ventilai sus pioblemas; lo qYp indetermi¡ados
jundicos
que si no hay críticas a la legalidad, Ia conformación puede i,,' ;,,i,,,ri,."tr.if," áe' los concep-tos
v l,:xiblirs, integrar la norma t tu t"" de los valores' y
a la ley que rige haciendo
ser interpreiada como un consentimiento f
objetivo
particular, muy a pesar de la tacha de in- ;rr;r (luc su pronunciamiento s6¡¡p''ponda al rntimo
el tema en constitucional, o sea a los
constitucionalidad que puede el Juez encontrar 55.
,,iil,,lii..i,i,r'político Je Ia volu¡.tad
r,,,i,,r,,. políiicos, .o-o p.teden ser objetivamente deducibles
En cambio si Ia controversia resuelve cuestiones de in- 58'
terés público, razonable sería añrmar que no es admisible ,lt: lrt Co¡rstitr-rción
Ia renuncia dei titular al derecho consagrado por esa norma
y, en consecuencia, el Juez puede declarar de oñcio la incons- 7.1> f,a integración de las normas
titucionalidad del precepto que se Ie opone 56.
Ei matiz político que ilumina todo el sistema del control Ill Civil argentino üce en ei art' f 1tu9; "Lo.s jueces
código
de la constitucionali¿á¿ ¿e las leyes, tiene en nuestro orde- ,,.,, ;;;d;;"dr¡o, d'e iuzgar baio el-pretexto de
silencio' oscu''
namiento una concreción más restringida, desde que sólo rírLád o insuficiencia d'e las leyes''
atiende a la tutela jurisdiccional.
Esta norma introduce un problema aj_eno a la interpre-
Por eso cualquier atisbo de redimensión se acusa como Lación, porque eI déficit acusado radica en Ia ausencla
de una
"gobierno de los jueces", precisamente por teyor a q-ue, en ;;1""i¿; práctica que la norma ensaye' Esta consecuencia no
el ejercicio de la a:aulación por lta judicial de una ley, se ;;;;;;; ti-io há.", esLá prím-a.facie invalidada por su
intrbduzcan vaioraciones de naturaleza política, o de análisis ,,mbigtiédad o carente de 1a suficiencia necesana'
al poder discrecional del Parlamento 57. Son las d.enominad x lagunas de la ley'- lYg el
derecho
De todas formas, la preocupación por evitar una inter- pto.".uf-ttatá de *putt. "i.bt"" a 1a posibilidad creadora
ferencia del Poder Judicial en el ámbito de los restantes iue tiene en Ia realización del derecho'
poderes, o el desequilibrio que consecuentemente provocaría, un
Para C¿n¡.'sLUTTl' esta cuestión puede enfocarse como
ie diluye rápidaménte al comprender que el pronuncinmien- proUtr*,o d'e actos impreuistos a.ios que .PYtq:i i-"rsersolu-
to que tildó de inconstitucional una disposíción, sólo ha iio" .o" la,analogla ó eI jui.ci,o singular. '¿En teona se habla
efecluado un proceso de adaptación de la norma inferior a para significar que
l" áili¡itnsrarió,"n o d-e ieterointegración
sistema con la lev misma;
ü;;;;;6btiuo" la solciadura del que es la i¡tervención del
55. La Corte,en ese sentido ha dicho que "la garantfa, el derecho, o el privilegio
ii!.ñ"¿t, con url medio diverso,
formal que asistie¡a al litigante puede sei renunciada por vfe del consentimiento' iú*r]C.,utrdo se recurre a este seglndo expediente, el'juicio al
(Fallos, 187:409; 189:l-24 áo-fo,.rro al vaior del acto corresponde exclusivamente
56. Peoru-4 MrcuBr, M.: El ordzn público y la declaración dz ofrcín d¿ Ia íncons'
titucionalídzd., LL, 1S85-C, p. 808.
57. CAI'pE¡IFTn, M¡uno, Proceso..., cit., p. í375. 58. Proceso..., cit-, P. 404'
62 Osv¡t'lxr At'tttl:txr (loz'rlN¡
d. e r e'c h o, t en i e ndo
;; ; ;;;A'ái ¡o ci rc un
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