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ideas y valores • número 145 • abril de 2011 • issn 0120-0062 • bogotá, colombia
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Los veintitrés pequeños ensayos que Estados Unidos” (66). Es en este sentido
conforman la sección segunda son, a que el turinés habla de una “cubaniza-
la vez, un gran argumento que “da ra- ción” de Europa: Estados Unidos ha
zones” para (volver a) ser comunistas. “embargado” a Europa, en cuanto que
Para Vattimo, la situación actual de la ella ha dependido largo tiempo de la
democracia es –usando jerga kuhnia- economía norteamericana y no tiene a
na– “normal”. El problema se halla en donde ir (¿el euro como salvación?).
la voluntad de los teóricos respecto a la Una vez más, si esto [...] no es un
democracia: la dejan trabajar sin más. régimen, nos falta muy poco. La demo-
No hay crítica. No hay búsquedas de cracia, tal como todavía se nos predica
mejoras. No se permiten alternativas. (y se impone en Irak), está práctica-
Los políticos mismos, en vez de ser la mente en coma. (67)
voz de los débiles, se dedican a perse-
guir a los cismáticos. Hay una falta de Más adelante, Vattimo se refiere
vanguardia en la política, una falta de al evento 9/11: la caída de las Torres
disidencia; poco le falta a los gobier- Gemelas de Wall Street, y lo compara
nos italianos para ser “regímenes”, con el atentado terrorista de Oklahoma
en cuanto sistemas de gobierno cer- City, en el que un estadounidense hizo
rados, a juicio de nuestro filósofo. La estallar un edificio de oficinas federa-
respuesta a la vocación vanguardista les. El autor del atentado declaró que
de la política es, para Vattimo, volver actuó de tal manera en venganza por la
a ser comunista. Para ello nuestro au- matanza de Waco: aquella vez en que
tor, situado en su propia circunstancia el FBI asesinó a “ocupantes ilegales”
política, la italiana, se muestra en con- (¡fijémonos en las nuevas “leyes” mi-
tra de esa “misión de paz” que se creó gratorias que permiten encarcelar a los
para apoyar la invasión en Afganistán que “parecen” inmigrantes y, si se re-
(lo mismo que ocurriría con el apo- sisten, golpearlos!).
yo a la guerra en Irak). No sólo por la Por lo que sabemos de este episodio
nefastas consecuencias que habrían [la matanza de Waco], se trató de un
–y que ahora ya las vemos–, sino tam- acto de sumisión a la razón, de com-
bién porque el recorte estatal en pos pactación disciplinaria de una sociedad
de aumentar el presupuesto de defen- que simplemente se siente amenazada
sa deterioró el apoyo al sector salud y por cualquiera que no comparta su esti-
educación. Lo peor del asunto es que la lo de vida, sus expectativas y sus ideales
izquierda italiana, desplazada al centro consumistas. (76)
y no muy diferente en la práctica de
la derecha, apoyó esa “misión de paz” Es decir que en la “madre de to-
convocada por la OTAN. Así, decla- das las democracias”, como llamó con
ra Vattimo, “es muy probable que la ironía alguna vez a EE. UU. Vittorio
izquierda desaparezca durante muchos Zuccone (39), hay una animadver-
años” (65). Este apoyo de la izquierda sión hacia todos aquellos que no son
al “sistema”, que sería inevitable en la como ellos, una incomodidad poco
política italiana, y quizás en la europea, “solidaria” respecto a los “otros”, a los
se debe a que las democracias europeas “no-nosotros”. Para Vattimo ha habido
están “cerradas dentro del horizonte un evento, con todo el sentido heideg-
de la economía capitalista liderada por geriano que connota esta palabra, luego
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de 9/11: Irak. Irak se alza, acaece como do en el centro del globo, se cuestiona:
evento. “El Evento Irak”, lo llama “¿qué hacemos con los condenados de
Víctor Samuel Rivera en su “Ex oriente la tierra? [...] ¿Ex Oriente salus?” (81).
salus. Pensar desde el margen” (2009). Entonces ¿por qué no podemos
Luego del “Evento Irak” no es posible creer más en la democracia “normal”?
volver a pensar la democracia liberal y Porque tenemos la sensación de que está
el capitalismo de la misma manera. Los acaeciendo en los gobiernos y regímenes
abanderados de la libertad se muestran occidentales una nueva forma de autori-
como verdaderos metafísicos: imponen tarismo, de totalitarismo, de “fascismo”,
el ser verdadero al resto, a los otros. que tiene como carta de presentación el
Esa imposición no es meramente dis- tema de la seguridad, que ha llevado a
cursiva, es efectivamente violenta; los “demócratas y sus amigos” a movi-
violenta por las armas, por las armas lizarse contra Irak y dominar el tipo de
tecnológicas. política (“correcta”) que se debe dar en el
Vattimo ve como urgente, frente a globo. Pero, además:
este horizonte, regresar a las reflexiones A ello se suma la constatación de
de Marx. Marx preveía que la revolu- que hasta ahora, después de una década
ción del proletariado vendría cuando de globalización y de liberalismo, las
el poder capitalista fuera intolerable. promesas de mayor bienestar no se han
Ese proletariado ha desaparecido, se cumplido, ni siquiera en la capital del
ha disgregado. Vattimo ya no cree en imperio, Estados Unidos. (82)
la dictadura del proletariado, ni en el
historicismo teleológico positivista del Por lo tanto, “ya ‘no podemos’ pen-
marxismo. A lo que el debolista apunta sar [...] que el capitalismo democrático
es a que: de estilo occidental sea una vía lo bas-
El impulso de volver a ser comu- tante segura para alcanzar bienestar y
nistas tiene que ver con que el poder mayor libertad” (82-83). Por ello, para
capitalista [...] se ha hecho intolerable y, Vattimo, el futuro que nos espera es
por lo tanto, suscita (o puede suscitar) la oscuro, lleno de tinieblas y de incerti-
rebelión del ‘proletariado’ mundial. (79) dumbre, quizá en el borde casi (¿ya?)
comenzado de una “guerra infinita”,
El (nuevo) proletariado se ha devela- para usar la infeliz frase de Bush. La
do en internet, en la Babel informática filosofía para pasado mañana, operada
actual. Es desde el plano virtual donde, por Vattimo, es trágica y pesimista.
sin distinción de clases ni conciencia ¿Qué más le queda?
de estas, el “proletariado” mundial se Ante este panorama, nuestro filósofo
ha manifestado contra la invasión de apuesta por un anarco-comunismo o un
Irak. Vattimo ve aquí una señal o, para comunismo libertario. Sí: comunismo
decirlo más oscuramente, presiente el y anarquismo. Esto se debe a que, “a
relampagueo del evento que nace, del todas luces”, en el régimen actual no se
Ge-stell. Este nuevo proletariado es vislumbra una salida a los riesgos a los
“minimalista”, sin conciencia de clase que nos estamos aproximando. Por lo
y sin lucha de clases; una mera masa que “es necesario poner en marcha pro-
anárquica da origen a este nuevo comu- cesos que destruyan este orden” (84).
nismo anárquico y sui generis. Y es en Anarquismo, señores, anarquismo. Pero
este momento cuando Vattimo, senta- débil. “Evolución y no revolución” (85),
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