Sei sulla pagina 1di 12

Física en la Ingeniería Mecánica de Fluidos

Desde fuentes de agua potable en parques infantiles, sistemas de agua en hogares y


baños de trabajo en escuelas hasta puentes hidráulicos y sistemas de diques, la
mecánica de fluidos es una parte esencial de la vida diaria.

La física y la mecánica de fluidos son partes integrales de la ingeniería, y ambas se


presentan generalmente como cursos obligatorios en la mayoría de las universidades
para la mayoría de las especialidades de ingeniería. Los ingenieros aplican la ley de
Pascal, el principio de Arquímedes y el principio de Bernoulli para diseñar y construir
varias embarcaciones flotantes, sumergibles, aviones, automóviles, tuberías y sistemas
de transporte, estructuras hidráulicas e incluso tanques de almacenamiento
petroquímico. Los ingenieros oceánicos y marinos estudian el entorno marino para
diseñar plataformas petroleras y plataformas de producción, así como también buques
flotantes y sistemas de tuberías submarinas necesarios en el proceso de producción de
petróleo. Otros ingenieros diseñan diferentes tipos de vehículos sumergibles y de control
remoto que se utilizan para explorar entornos de aguas profundas. Otros ingenieros
aplican estos conceptos científicos para convertirse en especialistas en sistemas
hidráulicos (el uso de energía líquida para hacer el trabajo) y diseñan maquinaria
pesada, sistemas de distribución de agua, redes de alcantarillado, sistemas de gestión
de aguas pluviales, puentes, presas, canales, canales y diques.

Fluidos Magnetorreologicos

Una sustancia gris se desliza por las paredes de un vaso de laboratorio. Se dirige a la
mesa, pero antes de que llegue, un leve zumbido llena el aire. Alguien ha prendido un
electroimán. El fluido se endurece, tiembla, y sólo vuelve a deslizarse cuando el zumbido
se apaga.

¿Está vivo?

No, solamente magnetizado.

"Los llamamos fluidos magnetoreológicos, o fluidos MR para abreviar", dice Alice Gast,
profesora de ingeniería química en el MIT. "Son líquidos que se endurecen o cambian
de forma cuando detectan un campo magnético".

Se denominan fluidos magnetoreológicos (MR) a aquellos fluidos compuestos por


partículas ferro-magnéticas, de tamaño nano o micrométricas, dispersas en un líquido
portador, que poseen propiedades viscoelásticas controlables mediante campos
magnéticos externos.
Los fluidos magnetorreológicos pueden aplicarse en el sector de la amortiguación de
automóviles, construcción civil y electrodomésticos, sistemas de freno, medicina y
máquina-herramienta.
Propiedades y aplicaciones de los fluidos magnetorreológicos

Los fluidos magnetorreológicos (FMR) son fluidos cuyas propiedades reológicas se ven
alteradas por la presencia de un campo magnético. Su viscosidad al aplicar un campo
magnético se puede regular desde un fluido poco viscoso hasta un estado similar a una
masilla o lodo muy espeso, sin modificar ni su forma ni su volumen. Estos fluidos son
útiles en dispositivos donde se requiera una disipación de energía controlada (como
frenos o amortiguadores), así como elementos de fijación en base a su variación de
viscosidad. Debido a su aplicabilidad y su capacidad para conseguir rápidas y simples
interfaces de respuesta entre sistemas electrónicos y mecánicos, Gaiker-IK4 ha
estudiado estos fluidos y ha desarrollado una solución para el apelmazamiento por
decantación del fluido cuando se encuentra en reposo, simplificando el proceso de
fabricación.

Visualmente, los fluidos magnetorreológicos son de color muy oscuro, prácticamente


opacos. Si el fluido se encuentra en un recipiente abierto caerá, pero si se aplica
suficiente campo no caerá y su aspecto y superficie se mantendrá invariable en el
interior del envase.

Comportamiento de un fluido magnetorreológico ante un estímulo magnético.

Su comportamiento activo ante un campo magnético se debe a que estos fluidos son, a
grosso modo, suspensiones de partículas magnéticas en un fluido portador, estabilizado
por un surfactante y otros aditivos. Al aplicar un campo magnético, las partículas tienden
a polarizarse y alinearse con el campo, formando una estructura fibrilar encadenada en
unos pocos milisegundos. Así, la viscosidad de estos fluidos aumenta en función de la
intensidad del campo aplicado. Este aumento no es ilimitado sino que se termina por
exhibir una saturación magnética gradual. Esta saturación del fluido se produce a un
valor igual al producto de la polarización de saturación del material magnético. En caso
del hierro 2,1 Teslas (T) por el porcentaje de partícula contenida en el fluido.
Estructura fibrilar generada en presencia del campo magnético que provoca un incremento de la
viscosidad.

Es importante distinguir los fluidos magnetorreológicos (FMR) de los Ferrofluidos (FF).


Los FMR presentan en su composición partículas de tamaño micro y nano, sin embargo,
en los FF todas las partículas son entorno a los 10 nm con lo que el fluido es
prácticamente una suspensión coloidal, no sedimenta y ante el campo magnético las
partículas tienden a seguir las líneas de fuerza y forman agujas que sobresalen de su
superficie, siendo sus propiedades y precio muy diferentes.

Composición y propiedades de los FMR

Las variables responsables de las características de los fluidos magnetorreológicos son


varias y muy diferentes: el tipo de partícula así como el tamaño, geometría, distribución
de tamaños y la cantidad utilizada; el fluido portador, que tiene una influencia importante
en la viscosidad del fluido, comportamiento térmico, químico y en la sedimentación de
las partículas; y los diferentes aditivos añadidos para el control de variables tales como
sedimentación, viscosidad, tixotropía y estabilización del fluido.

El estudio de estas variables y su influencia sobre la resistencia al flujo de los fluidos


magnetorreológicos es en lo que Gaiker-IK4 ha centrado sus esfuerzos en los últimos
años. El conseguir predecir de una manera más o menos aproximada el comportamiento
de los fluidos en base a su composición ha permitido conocer el comportamiento de
estos materiales y ajustarlos a la medida de las aplicaciones.

Se han estudiado las diferentes variables que pueden afectar el comportamiento de


estos materiales como los aditivos o la viscosidad del fluido portador, que tiene un efecto
muy grande en la sedimentación de manera que cuanto menor sea ésta mayor es la
sedimentación, independientemente de que ésta sea aditivada, para aumentar la
viscosidad. También se han estudiado diferentes combinaciones de tamaño, forma y
naturaleza de las partículas para alcanzar una óptima distribución.

Gaiker-IK4 ha elaborado a lo largo de los últimos años fluidos con diversas propiedades
y calidades entre los que se aprecian diferencias en el valor de ratio F. El punto de
fluencia ‘Yield Point’ es el momento en que el fluido comienza a fluir. El esfuerzo
necesario para llegar a este punto se llama ‘esfuerzo de fluencia’ o esfuerzo umbral,
más conocido como ‘yield stress’. Los FMR muestran habitualmente yield strengths de
50-100 kPa para campos magnéticos aplicados de 150-250 kA/m (~2-3 kOe) y una
viscosidad sin campo magnético de 200-300 mPa•s a 25°C.
El Esfuerzo Umbral Estático se considera el esfuerzo mínimo para que el fluido sufra
una deformación que se pueda considerar como flujo. Para ello, se ha diseñado un
ensayo de reología rotacional en el que se realiza una rampa de esfuerzo, con un tiempo
de integración de 4 segundos para permitir que el equipo obtenga una buena medida
del esfuerzo.

Otra propiedad a controlar es la inevitable sedimentación. Cuando el fluido queda en


reposo, las partículas tienden a decantar, siendo necesario considerar para las
aplicaciones las siguientes premisas: minimizar lo más posible la sedimentación desde
la formulación; ante periodos largos de reposo del dispositivo que contiene los FMR,
considerar sistemas de reflujo para mantener dispersas las partículas; y caracterizar
adecuadamente el fluido para asegurar su rápida y óptima dispersión una vez se
redispersa el fluido. Evitar que tras la sedimentación se generen aglomeraciones que
modifiquen su dispersión y modifiquen las condiciones iniciales del fluido.

El comportamiento a fatiga, tanto del fluido magnetorreológico como de los dispositivos,


se ensaya a distintas frecuencias y representa la fuerza frente al desplazamiento a
distintas intensidades de campo. Por su lado, el efecto ‘In-Use-Thickening’ (IUT) se
produce, por ejemplo, cuando un líquido es de relativa baja viscosidad y se convierte en
una pasta con la consistencia de un betún.

Actualmente este problema ha sido identificado y, en muchos casos, resuelto ya que


todos los FMR muestran un cierto grado de deterioro en función de las condiciones que
hayan tenido que soportar según su aplicación. Se cree que la causa de este incremento
de la viscosidad es debida a la destrucción de la superficie que se desmenuza fácilmente
de las partículas de hierro. Por lo tanto, dependiendo del tipo de mecanismo en el cual
se va a emplear el fluido, las condiciones a las que el fluido es expuesto y la duración
de dicha exposición, puede inicialmente partir de una formulación genérica, pero si se
desea un óptimo rendimiento necesitará de un desarrollo particular de la formulación.

Ventajas e inconvenientes de los MRF

Las ventajas de los MRF son varias. Muestran, bajo la acción de un campo magnético,
una rápida variación en sus propiedades reológicas (15 – 25 milisegundos). Se rigen por
la intensidad de corriente que genera el campo magnético. Sus rangos de voltaje son
inferiores a 10 V y corrientes inferiores a 2 A pueden ser suficientes, lo cual permite
contar, para el diseño de un dispositivo, con fuentes normales de energía. Los MRF son
capaces de alcanzar valores altos de esfuerzos de cizalla (sobre 50-100 kPa) lo cual
implica que solo es necesario activar una pequeña cantidad de fluido para llegar a las
prestaciones requeridas. Esto afecta positivamente al tamaño y peso del diseño. No son
muy sensibles a los contaminantes e impurezas que pueden aparecer durante su
fabricación y posterior uso. Esta misma insensibilidad del principio de funcionamiento
hacia los contaminantes permite estabilizar los FMR frente a la sedimentación sin afectar
por ello a sus propiedades magnetorreológicas. Se puede lograr un modo ‘a prueba de
fallos’ en los dispositivos introduciendo imanes permanentes de manera que se active
el FMR sin necesidad de otra fuente de energía. Son capaces de operar en un amplio
rango de temperaturas, en base al fluido portador y se adaptan fácilmente a diferentes
geometrías. Son apropiados para ser empleados en utillajes de piezas de geometría
compleja, de piezas muy flexibles y de piezas que se van debilitando a medida que se
van mecanizando.

En cuanto a los inconvenientes, los campos magnéticos no son fáciles de aplicar ni de


usar. La intensidad de campo se ve afectada por la presencia de materiales férricos, son
pesados y requiere de espacio para albergar los electroimanes. La discordancia entre
las densidades de la partícula metálica y el fluido portador es muy grande con lo que la
tendencia a la sedimentación es alta. La alta densidad de la partícula también deriva en
una alta densidad del FMR en conjunto (3-4 g / cm3). La viscosidad típica inicial (en
ausencia de campo magnético) ya es relativamente alta, lo que conlleva una alta fricción
o perdidas de carga en dispositivos como en los frenos rotatorios cuando no se requiere
su activación. Su tiempo de respuesta, aun siendo muy rápido, es más lento que el de
los fluidos electrorreológicos (FER).

Aplicaciones de los fluidos magnetorreológicos

Los fluidos magnetorreológicos son útiles en dispositivos donde se requiera una


disipación de energía controlada (amortiguadores, frenos, embragues, etc.) así como
elementos de fijación en base a su variación de viscosidad. El interés en estos
materiales viene de su capacidad para conseguir rápidas y simples interfaces de
respuesta entre sistemas electrónicos y mecánicos, por lo que es aplicable en los
siguientes sectores:

 Amortiguación de automóviles. Pruebas realizadas por Monroe, uno de los


principales fabricantes de amortiguadores del mundo, determinó que la
distancia de frenado con amortiguadores en mal estado aumentaba la distancia
de frenado a 70 km/h de 23,2 metros hasta los 34,5 metros. Empresas
fabricantes de automóviles como Cadillac y Audi, en el TT y R8, ya han
empezado a incluir en algunos modelos amortiguadores basados en esta
tecnología, como el sistema MagneRide de Delphi.

A la izquierda amortiguador normal y en la derecha amortiguador con respuesta magnética. Sistema de


Delphi MagneRide de suspensión activa.

 Amortiguación en electrodomésticos, adaptando la rigidez del amortiguador


a las distintas fases del ciclo de lavado y carga de ropa en la lavadora.
 Amortiguadores en construcción civil, como pueden ser en puentes o
edificios con dispositivos antiseísmos, entre otros. Permiten contrarrestar el
movimiento que se produce en un puente debido al viento.
 Medicina, como sistema de control en las prótesis de rodillas.
 Sistema de freno, donde destaca la aplicación de frenos de bicicletas
estáticas con sistema de freno de disco basado en presencia de fluidos
magnetorreológicos.

Esquema simple de freno rotatorio basado en fluidos magnetorreológicos.

Máquina-herramienta, se trabaja en dispositivos de amortiguación de vibraciones y


en posibles dispositivos de fijación para la realización de utillajes flexibles. En este
sentido, cabe destacar la experiencia de la Universidad de Nottingham, que ha
patentado un sistema de amarre para el mecanizado de álabes de turbina de avión,
mediante un sistema de ‘pins’.

Aplicación de FMR en utillajes flexibles de fijación en Nottingham Inovative Manufacturing research


Center, 2007.
La Inducción Electromagnética

En 1820 desde que Oersted, descubrió que una corriente eléctrica genera un
campo magnético, la simetría de las relaciones entre el magnetismo y la electricidad
llevó a los físicos a creer en la proposición inversa: si la corriente eléctrica en un
conductor genera un campo magnético, entonces un campo magnético debe
generar una corriente eléctrica. La cuestión era saber cómo se podría hacer, y fue
algo que terminó por ser descubierto por Faraday en 1831.

La creencia en la época de que la corriente eléctrica fuera un fluido, llevó a Faraday a


suponer que algún tipo de movimiento o variación del campo magnético podría
provocar el movimiento de ese fluido. Esta fue la hipótesis a partir de la cual Faraday
llegó al descubrimiento de la inducción electromagnética.

Flujo de Campo Magnético

El flujo de campo magnético está relacionado con el número de líneas de campo


magnético que atraviesan determinada superficie de área A. Como se muestra en la
siguiente figura. Cuánto mayor sea el número de líneas de campo, mayor será el valor
del flujo magnético.

Fórmula del Flujo Magnético

En la figura anterior, N es una recta normal a la superficie y forma un ángulo θ con el


vector inducción magnética B. El flujo del vector inducción magnética Φ a través de la
superficie plana de área A se define por la expresión:
Dónde:

Φ = Flujo Magnético, su unidad es el weber (Wb)

B = Densidad del flujo magnético, en el SI se mide en (Wb/m²)

A = Área sobre la que actúa el flujo magnético, se expresa en metros cuadrados (m²)

¿Qué es un Weber?

El símbolo Wb es una unidad del flujo magnético o de inducción en honor al físico


Wilhelm Eduard Weber (1804 – 1891)

Un weber es el flujo de inducción a través de una superficie plana de área igual a un


metro cuadrado, dispuesta perpendicularmente a un campo uniforme de inducción
magnética de intensidad igual a un tesla (T).

Como Φ = BA cos θ y cos θ = cos 0° = 1 (según la imagen)

Entonces, la intensidad del vector B puede ser medida en weber por metro
cuadrado, que equivale a la unida de tesla. Por eso, el vector inducción magnética B
también se denomina densidad de flujo magnético, lo que significa “flujo magnético por
unidad de área”.
El Vector normal “N”

En realidad, el segmento normal N, es un vector que tiene una orientación


determinada por el sentido de recorrido del contorno de una superficie plana A
establecido arbitrariamente. En este sentido, la orientación del vector N es obtenida
por la regla de la mano derecha, como muestra la figura abajo. Se trata de una
construcción matemática que no será adoptada aquí porque huye del alcance del nivel
medio superior.

Ejercicios Resueltos de Densidad de Flujo Magnético

Problema 1.- En una placa circular de 7cm de radio existe una densidad de flujo
magnético de 5 teslas. Calcular el flujo magnético total a través de la placa, en webers
y maxwells.

Este problema de densidad de flujo magnético, es un tipo de problema muy básico y


principal para entender hacer uso correcto de la fórmula, si vemos nuestros datos
contamos con un radio por lo que será necesario calcular el área a partir de esta dato,
también contamos directamente con el flujo magnético de 5 Teslas.

Datos:

a) Obtener el flujo magnético.

Lo primero qué tenemos que realizar, es calcular el área de la placa circular.

Ahora si podemos colocar nuestra fórmula de densidad de flujo magnético

Despejando al flujo magnético Φ :

Sustituyendo datos en la fórmula:

Por lo que obtenemos un valor de 0.07695 Wb


b) Convertir Webers a Maxwells

Aplicando el factor de conversión:

Obtenemos un valor de 7.695×10^(6) Maxwells

Problema 2.- Una espira de 30 cm de ancho por 10 cm de largo forma un ángulo de


30° con el plano de la espira. Determinar el flujo magnético que penetra por la espira
debido a un campo magnético cuya densidad de flujo es de 2 Teslas

Si analizamos el plano de la espira con las líneas de densidad de flujo magnético, nos
daremos cuenta de lo siguiente:

Entre la recta normal y la densidad de flujo magnético, se forma un ángulo de 60° que
será θ, y no 30° como se pudo haber creído.

Datos:
Convertimos el largo y ancho a metros:

El dato del área sería:

a) Obtener el flujo magnético

Colocando la fórmula de la densidad de flujo magnético

Despejando al flujo magnético Φ :

Sustituyendo datos en la fórmula:

Por lo que obtenemos un valor de 0.03 Wb


Bibliografia

https://www2.uned.es/ribim/volumenes/Vol16N1Abril2012/V16N1A03%20Laessig%20
%2027-36.pdf
https://www.interempresas.net/MetalMecanica/Articulos/115833-Propiedades-y-
aplicaciones-de-los-fluidos-magnetoreologicos.html
https://www.interempresas.net/MetalMecanica/Articulos/115833-Propiedades-y-
aplicaciones-de-los-fluidos-magnetoreologicos.html
https://ciencia.nasa.gov/science-at-nasa/2003/02apr_robotblood
http://www.actimat.es/web/magnetoreologicos.asp
https://www2.uned.es/ribim/volumenes/Vol16N1Abril2012/V16N1A03%20Laessig%20
%2027-36.pdf

Potrebbero piacerti anche