La creacion y los angeles

Creación

Crear es hacer cosas de la nada, sin utilizar ningún material. No podemos preguntar: por qué Dios
esperó tanto tiempo antes de crear el mundo, porque antes de la creación, no hay tiempo. El tiempo es
una medida de cambio en una escala de antes y después (Aristóteles, Física 4:11). Por lo tanto, cuando,
si podemos usar esa palabra para hablar de la eternidad, no hubo cambio, no hubo tiempo. El tiempo
comenzó a ser cuando surgieron criaturas cambiantes. El tiempo es un conjunto continuo de cambios
inquietos. A continuación está un momento que llamamos futuro: cambia rápidamente al presente y
luego cambia rápidamente al pasado.

Dios podría haber creado un mundo eterno, sin principio ni fin. Pero eligió crear un mundo con un
comienzo, un tiempo "anterior" en el que no había nada. Génesis 1: 1 nos dice: "En el principio, Dios
creó los cielos y la tierra". Y Cristo le dijo a su Padre: "Me amaste antes de la fundación del mundo"
(Juan 17:24).

¿Por qué creó Dios? El propósito del mundo creado está ligado al propósito del hombre. San Ireneo
escribió: "Al principio, Dios formó a Adán, no porque necesitara humanos, sino para que pudiera tener
a alguien que recibiera sus beneficios" (Contra las herejías 4. 14. 1). Entonces podemos decir que
siempre nos amó, ya que siempre nos ha querido el bien más básico, la existencia. Más allá de eso,
quiere que "todos se salven y lleguen al conocimiento de la verdad" (1 Timoteo 2: 4). Si hacer el bien a
otro es amar, entonces esto es realmente amor. Pero cuando amamos, necesitamos un entrante,
necesitamos ver algo bueno o bueno en otro. Pero Dios nos amaba cuando no existíamos.

Cuando decimos que Él creó para Su propia gloria, debemos entender estas palabras de la manera en
que el Vaticano las quise decir: Él hizo una criatura que por su propia naturaleza daría gloria a Dios,
aunque Dios no gana nada con esa gloria. (Leemos esto en los actos y decretos del Vaticano I, que se
encuentran en Collectio Lacensis, VII. 116). Del mismo modo, Él quiere que obedezcamos porque toda
bondad dice que las criaturas deben obedecer a su Creador, y porque, como dijo San Ireneo, quería
tener a alguien a quien ser generoso en infinita bondad, pero debemos cooperar para recibir sus regalos.

Dios mantiene todas las cosas en existencia por el mismo poder por el cual las sacó de la nada. "¿Y
cómo podría algo continuar si no lo hicieras?" (Sabiduría 11:25). Nuestra dependencia de Él para
continuar existiendo es como la de las imágenes en la pantalla de cine del proyector.

Ángeles buenos y malos

Un ángel es un espíritu puro, es decir, un ángel no tiene materia ni cuerpo. Cada ángel es una persona y
tiene una mente y una voluntad como la nuestra, pero los ángeles son de una naturaleza más alta que la
nuestra. A menudo son enviados por Dios para ciertos deberes en esta tierra, de hecho, la palabra ángel
significa "alguien que es enviado" o "mensajero". Las referencias más antiguas a los ángeles en el
Antiguo Testamento podrían dejarnos preguntándonos si los ángeles son seres separados, ¿o la frase
"mensajero de Dios" simplemente significa Dios? (cf. Jueces, capítulo 6). Pero en la parte posterior del
Antiguo Testamento y en el Nuevo Testamento, queda completamente claro que son criaturas distintas.
Vemos esto por muchas referencias a ellos en la Escritura, por ejemplo, Salmos 148: 2; 103: 20-21;
Mateo 22:30; Lucas 1:26; 2 Pedro 2: 4; Apocalipsis / Apocalipsis 5:11.

Los ángeles no fueron creados en el cielo, es decir, con la visión de Dios. Si hubieran tenido eso, el
pecado habría sido imposible. Pero Dios les dio a los ángeles algún tipo de orden, no sabemos qué, y
algunos obedecieron, otros no. Los que desobedecieron fueron fijados en el mal y se convirtieron en
demonios. Cuando pecamos, nuestra inteligencia está limitada por la parte material de nuestro intelecto,
el cerebro en nuestras cabezas. Porque un cerebro material es mucho menos poderoso que la
inteligencia espiritual que tienen nuestras almas. Esto significa que rara vez vemos las cosas lo más
completamente posible a la vez. Pero un ángel no tiene ese límite y, por lo tanto, ve todo lo más
completo posible a la vez. Por lo tanto, no puede retroceder en su decisión y decir: "Ahora lo veo de
manera diferente; ojalá no hubiera hecho eso".

Los ángeles caídos, los demonios, aún mantienen los grandes poderes naturales de un espíritu puro.
Para que puedan hacer cosas que nos parecen milagros.

Los buenos ángeles son enviados para guiarnos y protegernos. Ellos también tienen grandes poderes.
Cada uno de nosotros tiene un ángel guardián. Esto está implícito en las Escrituras y se encuentra en la
Tradición constante de la Iglesia. Después de que Pedro fue liberado de la prisión por un ángel, los
discípulos dijeron con asombro: "Era su ángel" (Hechos 12:15).

Nuestros ángeles guardianes pueden poner buenos pensamientos en nuestras mentes y protegernos. El
Salmo 91:11 dice: "Él ordenará a sus ángeles acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos". En
tiempo de tentación nos pueden dar tanto luz como fuerza. Nunca dejan de orar por nosotros y
presentan nuestras oraciones ante Dios.

Claramente, es lógico venerar a nuestro ángel guardián, cultivar su amistad, agradecerles, pedirles
ayuda. Entonces Dios dijo en Éxodo 23: 20-21: "He aquí, estoy enviando un ángel delante de ti para
que te proteja