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3) Vemos una verdadera política criminal cuando la legislación coincide con las
recomendaciones que hacen los investigadores, si las modificaciones legislativas
no están presididas por investigaciones entonces la política criminal es irreal.
3. TENDENCIAS POLITICO-CRIMINALES
El Derecho penal mínimo parte del supuesto que el derecho penal es violento,
selectivo, inadecuado para afrontar los problemas sociales, que a la vez produce
más problemas de los que pretende resolver, debido a estas características se
aconsejaría, con la línea abolicionista, la desaparición del derecho penal. Sin
embargo debido a que el derecho es garantía ciudadana, debe mantenerse. Pero la
vigencia del derecho penal dependerá de que sean efectivos dos exigencias o
requisitos:
2. amplíen las garantías y derechos de los ciudadanos dentro del proceso penal, es
decir, que tales derechos y garantías deben ser plenamente observados dentro del
proceso
Así la política criminal del derecho penal mínimo pretende la menor intervención
penal posible, es decir llevar el derecho penal a si mínima expresión, además busca
evitar la venganza privada, hacer efectivos los derechos del imputado dentro del
proceso y aumentar la libertar debido a que se reduce en cuantitativamente las
conductas prohibidas.
4. POLITICA CRIMINAL EN LATINOAMERICA
Queda claro que la política criminal es una actividad del Estado y no de los
particulares o determinadas oficinas del gobierno; todo pasa por el Poder
Legislativo. Los investigadores de la realidad (criminólogos, penólogos,
criminalistas) proveen de posibles soluciones al Estado y sus poderes, pero no por
eso hacen política criminal; hacen criminología, penología, etc., pero es el Estado
que como parte de su política de gobierno, debería hacer política criminal. Muchas
veces esto es imposible ya que la delincuencia se encuentra en el propio grupo
gobernante.
Prevención: es la política que se adopta para evitar que los crímenes se cometan,
se refiere a la finalidad de las penas. Esto se puede hacer mejorando las condiciones
de vida, salud, educación, trabajo. El Art. 20 de la constitución nacional dice:”las
penas privativas de libertad tendrán por objeto la readaptación de los condenados
y la protección de la sociedad.” La Constitución apunta a una concepción moderna
de pena, cuyo objetivo es la resocializacion del delincuente.
– Prevención primaria: evitar por la ley que el individuo delinca. La ley como
medio de prevención, afecta solo al 0,5% de la población: existe en el país un tasa
de 94,4% de analfabetismo (2005), y es más alto en hombres que mujeres. En la
cárcel de Tacumbú, los reclusos sufren de hacinamiento y malos tratos, mientras
que el Poder Judicial sigue lento en sus funciones, preocupándose en que
beneficios económicos u políticos propios puede obtener, y no defendiendo los
intereses nacionales. El resultado ha sido una fuerte desigualdad en la distribución
del ingreso. Esto significa que la brecha entre los ingresos percibidos por las
familias de menores recursos y las mas ricas se fue ampliando a través de los años,
esto ha producido un gran auge en la delincuencia, por los bajos niveles de
educación, la falta de oportunidades de empleo, que han que las personas se vean
incapaces de contar con los medios apropiados para satisfacer sus necesidades mas
inmediatas. Bandas organizadas se han especializado en asaltar bancos, casas de
cambios y hasta transportes blindados de caudales. También la delincuencia
juvenil ha tomado proporciones alarmantes. Jóvenes de 12 o mas años asaltan y
matan sin pestañear. Los “caballos locos” asaltan a pasajeros de colectivos en
pleno centro de la ciudad, con numerosas victimas fatales.
– Prevención secundaria: evitar que el que está preso vuelva a delinquir; para esto
no hay infraestructura (reformatorios). A contrario, en Paraguay el sistema
penitenciario se ha vuelto una “escuela de la delincuencia”, los establecimientos
son irónicamente los lugares donde mas se promueve la delincuencia, se aprende
a fabricar armas, contrabandear celulares, bebidas alcohólicas y drogas, excavar
túneles, y lo mas importante, recibir lecciones para perfeccionarse en la
“profesión”. En estos lugares no hay ninguna perspectiva ni esperanza de
readaptación social. Si, hay un sufrimiento, a veces hasta sádico, que conduce a un
mayor odio y una posterior actitud de cruel violencia. Es urgente el saneamiento y
la reforma del sistema penitenciario.
3. POLÍTICA
¿Qué significa la palabra Política, dentro de este contexto? VÉRSELE, al afirmar
que si no nos ocupamos de la modificación de estructuras político-sociales en las
cuales se dan las conductas antisociales, no estamos resolviendo en realidad el
problema, solo es una lucha parcial y superficialmente inútil. Por esto es necesario
vincular la prevención y lucha contra el crimen con la acción política, partiendo de
la definición de que política es la ciencia, arte y virtud. LUKIC la política es: "El
conjunto de actividades socialmente conscientes encaminadas a conseguir unas
metas determinadas, mientras que en el sentido más estrecho del término, estas
actividades se realizan en el estado, o más bien por intermedio del estado"
Vodopivec que: "La ciencia^ explora la realidad mientras la política evalúa la
oportunidad".2i3
4. POLÍTICA CRIMINOLÓGICA
En lo que se refiere al adjetivo "criminal", éste se utiliza como sinónimo de criminoso.
Por lo que autores como GRAMÁTICA y BE_ LLONI prefieren usar el término
anticriminal. Son Utilizados los términos de "Desviación" y de "Patología Social" ya
que, como afirma FRANCISCO CANESTRI, ^" hay una nueva gama de hechos
como los accidentes de tránsito, el abuso de las drogas, la polución tóxica. el crimen
es una amenaza para la salud pública y conducta antisocial. Estos hechos que
alteran la paz, la seguridad y la salud públicas, deben estudiarse como una
expresión de Patología Social. Entendiendo el crimen en esta amplia acepción, la
política que ha de seguirse es anti-criminal y no criminal,
5. POLÍTICA CRIMINOLÓGICA Y DERECHO
La Política Criminológica es simplemente "el aprovechamiento práctico, por parte
del legislador, de los conocimientos adquiridos por las ciencias penales, a fin de
dictar las disposiciones pertinentes para el logro de la conservación básica del orden
social". Previamente afirma que la Política Criminológica, que se enfrenta con los
fines y contenidos sociales del Derecho Penal, está situada fuera de lo jurídico. La
Política Criminológica no es en primer lugar, ni exclusivamente, la tarea de los
juristas. La Política Criminológica no está ya fundada en una Criminología del
derecho tal que la impostura de formas más amplias escapa al dominio de lo Jurídico
y de lo Judicial.
7. POLÍTICA LEGISLATIVA
8. POTICA JUDICIAL
Después del momento legislativo, una ley bien hecha, una ley bien elaborada, una
ley que sepamos que es justa, positiva y vigente (tres características básicas para
que una ley sirva, pues si le falta una de las tres no es eficaz) ; debemos de buscar
su correcta aplicación y aquí es donde la Política Criminológica queda en manos de
los jueces, lo que representa una terrible responsabilidad.
Los jueces se ven obligados a actuar dentro de una política criminológica general,
y son una pieza importante del sistema, por esto la necesidad de su cuidadosa
selección y especial preparación.
9. POLÍTICA PENITENCIARIA
la ley debe ir acompañada de los medios para cumplirse, es decir, debe estar
instrumentada; esto lo veremos muy claro en la cuestión penitenciaria, en que bellas
leyes sin instituciones, edificios, presupuesto y personal capacitado. La Política
Penitenciaria representa uno de los problemas claves, y es donde se han
encontrado mayor número de fracasos y frustraciones, aunque también en algunos
casos excepcionales éxitos. En mucho la Política Penitenciaria no puede funcionar
adecuadamente por la lentitud del Poder Judicial, que llega a alargar los procesos
por más de un año, con la consiguiente aglomeración y superpoblación en la prisión
preventiva
Creemos que la Penología debe ser la base de la Política penitenciaria, ya que es
la ciencia que más datos aporta al conocimiento de la eficacia (o ineficacia) de las
penas.
IO. CONCEPTO DE PREVENCIÓN
En materia criminológica, prevenir es el conocer con anticipación la probabilidad de
una conducta criminal, disponiendo los medios necesarios para evitarla Peter Lejins
habla de tres modos de prevención:
4. Ejecución del plan con objetivos a tres plazos: largo, mediano y corto. Esta es la
fase de los centros piloto de demostración y experimentación.
14. PLANIFICACIÓN
Planificar es hacer el plan o proyecto de una acción. Para nuestro estudio debe
entenderse como una operación política y técnica que tiene por finalidad la
transformación dirigida de un lado a las condiciones generales de vida, de las que
forma parte la justicia, y por otro a las instituciones, servicios y medios directamente
relacionados con esas condiciones de vida.
"Es la sistematizar socio-política y técnica de prioridades, actividades y medios
dirigidos a la implantación de una política criminal de índole social que la
planificación de la política de prevención debe tener los siguientes requerimientos:
A) Programas unitarios
En los programas unitarios, son condiciones necesarias para controlar los
resultados: la adecuada elección del factor criminógeno, el cual debe ser indudable
y de tal naturaleza que pueda ser tratado con acciones simples (vigilancia policíaca,
iluminación, apertura de campos deportivos, escuelas.
B) Programen combinados
Se aplican generalmente a medios altamente criminógenos, donde se combinan
múltiples factores (superpoblación, miserias, ignorancia), y en lo que, comúnmente,
se da el fenómeno de subculturas criminales. Para evaluar, se utilizan los mismos
criterios antes citados, teniendo un gran cuidado, pues la cantidad de variables es
mucho mayor.
El manejo de grupos de control es también más difícil en estos programas, pero muy
necesario para la evaluación.
El crecimiento del plan en los medios elegidos debe ser sincronizado, Para lo
anterior convendría utilizar la prensa, radio y televisión para sensibilizar a la opinión
pública, logrando así su colaboración con los programas establecidos.
Primera etapa:
Segunda etapa:
Tercera etapa:
Mujeres desaparecidas:
entre la omisión y la
criminalización
FEBRERO 18, 2019
Además del género, con los datos del RNPED también es posible
conocer información estadística de las personas desaparecidas
con distintos niveles de desagregación, como la nacionalidad,
edad, estatura, complexión, origen étnico, condición de
discapacidad y algunas señas particulares. Este tipo de
información es fundamental para articular acciones focalizadas
para la investigación y sobre todo la prevención de este crimen.
Esto no debería ser así. Se requiere más apoyo por parte de las
autoridades de los distintos órdenes de gobierno. Si bien las hay
comprometidas con las búsquedas, el acceso a la justicia para
las mujeres desaparecidas en México es un laberinto largo y
complicado, lleno de errores, omisiones y hasta de criminalización
de la víctimas.