Lanza su primer número al campo cultural cual si fuera un objeto
panfletario, casi diario fanzine que se instala en un lugar incomodo. Acto punk entre la economía y literatura. Combinación explosiva, derrumbando con nombres potentes cualquier impostura económica y literaria. Su precio es una provocación irónica: sale 1 dólar $, o sea volatiliza cual sentido de valor y le da un valor que vacía al sentido corriente, ya que sabemos en estas latitudes de una manera históricamente singular la propuesta universal del dinero como ese significante aniquilador de toda significación. A su vez, simple sentido común del mercado, esta revista no se desvaloriza nunca, al menos hasta que caiga el imperio yanqui. Su contratapa es un colofón que nos hace recordar su operación política. El comentario de Juan Mendoza sobre el libro recientemente editado y distribuido en castellano de Jordi Carrión Contra Amazon desnuda el principal problema económico que el ilegible Karl Marx pudo escribir de una manera provocativa. Subvirtiendo los sentidos establecidos de las victorias de la revolución francesa, postulando que con respecto a la circulación y distribución de las mercancías lo único que impera es la libertad, la igualdad, la propiedad y Bentham. Postulado más que interesante para introducirse a la lectura de ese comentario y de la misma Banco Central. Jordi Carrión al comenzar la conversación, en exordio 10, nos cuenta la operación del mercado del turismo que actúa como señalización de lo importante, en ese paseo por las calles de Barcelona muestra lo que se armó sobre la figura de Roberto Bolaño y sus hábitos de lectura y escritura, un City Tour literario sobre los recorridos del escritor y su vida. Esas maneras permiten que sobreviva un autor que para muchos pasó a ser un inolvidable; otra cosa es Amazon, que hace que todo sea olvidable, para hacer de la lectura un habito de consumo masivo, por ello su contra amazon más que una propuesta anti, pasa a ser el contra como esa manera de apoyarse para hacer-decir otra cosa. No es un panfleto contra amazon. Es un manifiesto que se apoya en amazon para ser una apología de esos lugares anacrónicos por antonomasia: las librerías. Carrión afirma que las librerías conservan ese lugar de punto de ilegibilidad en una cultura, o sea en el sentido más material del termino: inasimilable. Las librerías conservan ese lugar de resistencia a cualquier adoctrinamiento del mercado, cosa imposible en ese mundo totalitario de la web, donde hasta las frases más subrayadas pueden ser objeto de esa gran máquina benthaminiana que no tiene otro fin que hacernos cuasi robots lectores, punto imposible que la técnica actual aspira a llegar. Por ello teniendo en cuenta lo que dice Juan José Mendoza de “los anacrónicos enamorados del olor a la lignina y el papel” en ellos estará hacer del futuro una cultura más humana, no queda otra que comprar y leer Banco Central, exordio y Contra amazon, ahí esta la posta.