Nochebuena - Navidad

Misa de Medianoche

Cede el paso al Se-

ñor…

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 …¡es Navi-
dad!!!
Los ministros, revestidos y a la entrada de la Iglesia, recibirán a la comunidad que va a participar en la celebración.
La iglesia permanecerá a oscuras al principio de la celebración.
Dos personas (con un cirio encendido) se sitúan cerca del coro desde donde hacen el pregón. Cuando finaliza el pregón,
se encenderán todas las luces y comenzará la celebración con el canto de entrada y la procesión de los celebrantes.

Pregón
Pregonero 1: ¡Que mala prensa tiene la noche, Señor!
La noche es como el reino de lo siniestro, del vicio, de la soledad y
de la angustia. Parece que en la noche cabe todo lo negativo. Las
cosas pierden sus contornos y las personas sus miedos y vergüen-
zas.
Sin embargo, Señor, ya ves: Bastó con que tú eligieses el corazón
de una noche para posarte entre nosotros, para que el mundo entero
saltase alborozado ante una Noche Buena.
Pues bien, en el corazón de esta Noche queremos pedirte que que-
den trasnochadas, pasadas, todas nuestras noches; todas nuestras
noches malas.
Pregonero 2: Hoy se cumplen nuestros deseos. El Señor ha escuchado nuestras
súplicas y viene a nosotros, colmado hasta desbordar nuestras es-
peranzas.
Dios nace esta noche -hoy-, pero no en Belén, nace en el mundo,
nace en la Iglesia, nace en nuestra comunidad de Santa Clara, nace
en las familias, nace entre y en los pobres, nace en cada corazón.
Dios nace en mí.
Y es que lo bueno de esta Noche Buena, Señor, es que Tú puedes
volver a nacer.
Vuelve la Navidad, llena de encanto y de ternura, y nos recuerda de
nuevo que hay ALGUIEN que nos quiere, que hace camino a nues-
tro lado, que ha llenado la historia de luz y sentido, que abre hori-
zontes a nuestros pequeños proyectos, que ha encendido ilusiones
en el espíritu de los pobres.
Vuelve la Navidad, llena de encanto y de serenidad, y nos recuerda
de nuevo que hay ALGUIEN que nos quiere, que nos invita a ser
hermanos de todo el mundo, que quiere que amemos las vidas y las
hagamos crecer, que hace brillar su luz en nuestra noche, que nos
confía la misión de repartir bondad y optimismo a todos los hom-
bres, que nos envía a ser portadores de esperanza y solidaridad.

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 Vuelve la Navidad, llega la Navidad.
¡Feliz Navidad!!
Se encienden todas las luces de la Iglesia y el coro entona el canto de entrada (Toda la asamblea de pie)

Canto de entrada:

Saludo del Presidente: Buenas noches a todos. ¡Feliz Navidad!

En el nombre del Padre....
Hermanos: Hoy se nos ha revelado la bondad de Dios Padre y su amor
al hombre. Un niño, el Hijo de María, nos muestra el rostro lleno de ternura
de nuestro Dios. Aquel que es la luz y la vida ha venido para caminar junto
a nosotros, para compartir nuestra existencia. Y nosotros, como los pasto-
res, estamos aquí para celebrar esta gran alegría y para abrirnos al gran
amor que Dios siembra en cada hombre y en cada mujer. Hermanos y her-
manas, que este Amor, esta Luz, esta Vida, estén hoy y siempre con todos
vosotros.

Monición al Gloria (Presidente): Alegrémonos hermanos y hermanas, con

gozo grande, esta noche, que es la de 1997 de las Noches Buenas. Cantemos
gozosamente la gloria al Señor. Aquella noche en Belén los ángeles anun-
ciaron el nacimiento de la Vida. Hoy, nosotros, que como los pastores hemos
venido aquí para contemplar al Dios hecho hombre, nos unimos a su cántico
con todo nuestro corazón.

Gloria

Oración Colecta: Oh, Padre Bueno, que has iluminado esta noche santa ha-
ciéndote pequeño: haz que por el ejemplo de tu Hijo Jesucristo sepamos vivir
y celebrarte, también nosotros, como niños. Por nuestro Señor Jesucristo.

Liturgia de la Palabra
Monición a las lecturas
Abramos bien los oídos y el corazón. Estemos atentos, porque vamos a es-
cuchar ahora la Palabra salvadora de Dios. Escuchemos con fe, con gozo, con agra-
decimiento, el mensaje de Navidad. Un mensaje que nos dice que hoy se nos ha
revelado el amor de Dios. El Señor en persona ha venido a visitar a su pueblo.
Aquel que es la Luz y la Vida se ha hecho carne de nuestra carne.

Primera Lectura: Is. 9, 1-3.5-6 (Un hijo se nos ha dado)

Salmo
Segunda Lectura: Tito 2, 11-14 (Ha aparecido la gracia de Dios para todos los hombres)

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Monición: Pongámonos en pie, y aclamemos al Hijo de Dios con el canto del
Aleluya.

Evangelio: Lc 2, 1-14 (Hoy os ha nacido un Salvador)

Homilía

Credo: ( Monición breve del Presidente, indicando que haremos un silencio

y nos arrodillaremos al decir: “...SE ENCARNÓ DE MARÍA, LA VIRGEN,
Y SE HIZO HOMBRE...”).

Adoración de Miembros representativos de la Comunidad

Monición: La alegría que sentimos, la hacemos extensiva a toda la tierra, y a una
sola voz, agradecemos a Dios el milagro de su encarnación, de querer compartir
con nosotros nuestra vida. Por ello, debemos hacer que la tierra sea un gran belén
y que cada día pueda ser Navidad.
A continuación, diez miembros representativos de nuestra comunidad, pa-
sarán a adorar al niño Dios en nombre de todos. posteriormente, al finalizar la
Eucaristía, podremos hacerlo cada uno personalmente.
(El Presidente recibirá de manos de uno de los concelebrantes la imagen del niño Jesús, y lo sostendrá para
que después de cada invocación, le besen).

1.- Te alabamos, Señor, porque en Navidad estamos más abiertos al amor y

a la comprensión y nos es más difícil mantener cerrado nuestro corazón a los de-
más.
* Te pedimos, por todos nosotros, para que tengamos presente a los hombres
que tienen mayores dificultades: los enfermos, los presos, los refugiados, los que
no encuentran sentido a su vida; para que como los pastores sepamos descubrir a
Dios en esos rostros marginados. Señor, te alabamos cantando: Que bueno es
alabarte, oh Señor, y cantar a tu nombre.
2.- Te alabamos, Señor, porque en esta Navidad sabemos que caminamos
hacia una nueva vida y que nuestros cantos en torno al pesebre son signo de nuestra
gozosa comunión con Dios y con todas la personas.
* Te pedimos que en todos los pueblos de la tierra sea posible la paz. Señor,
te alabamos cantando: : Que bueno es alabarte, oh Señor, y cantar a tu nom-
bre.
3.-Te alabamos, Señor, porque podemos hacer Navidad siempre que tende-
mos una mano con cariño, siempre que escuchamos con comprensión, siempre que
trabajamos por los demás sin interés
* Te pedimos, Señor, que tu Iglesia sepa estar presente en los ambientes
más conflictivos y faltos de paz y amor. Y que los padres de familia comuniquen
el espíritu evangélico en esa pequeña comunidad de fe que es el hogar, la Iglesia

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doméstica. Señor, te alabamos cantando: Que bueno es alabarte, oh Señor, y
cantar a tu nombre.

4.- Te alabamos, Señor, porque te has manifestado a los hombres y mujeres

en rostro de niño para que te conozcamos; porque Belén está siempre dentro de
nosotros cada vez que nos alegramos con los demás, cada vez que somos capaces
de descubrir a Dios en la sonrisa de un niño.
*Te pedimos, Señor, que todos los niños del mundo, esperanza de la tierra,
sean amados y educados en la alegría y el optimismo. Señor, te alabamos, can-
tando: Que bueno es alabarte, oh Señor, y cantar a tu nombre.

5. Te alabamos, Señor, porque naces en nosotros cuando somos capaces de

levantar a alguien que está hundido, cuando somos capaces de compartir el camino,
cuando somos capaces de intentar siempre algo nuevo.
* Te pedimos, Señor, por todos nosotros, por nuestros familiares y
amigos; que seamos siempre instrumentos de Paz y Bien y testigos de tu amor
misericordioso. Señor, te alabamos cantando: Que bueno es alabarte, oh Señor,
y cantar a tu nombre.
Conclusión: Escucha, Padre, a estos hijo tuyos, reunidos para celebrar con
gran gozo el nacimiento de tu Hijo y haz que los que sufren encuentren consuelo
en la presencia de tu Hijo entre nosotros y en el amor fraterno de los hombres.
Por Jesucristo…

Liturgia Eucarística
Presentación de Ofrendas
“Poco podemos ofrecerte, Señor, pero queremos ser solidarios, con los que tene-
mos cerca, en nuestra propia ciudad. Por eso te presentamos estos alimentos que
han sido recogidos para la operación Kilo durante el Adviento. Simbolizan que la
ayuda a los demás no es algo personal, sino comunitaria. Te damos gracias porque
hemos compartido tiempo, alimentos y alegría con los que nos necesitan”.
(Unos jóvenes traen una cesta con alimentos de la campaña de Navidad)

“Te presentamos, Señor, estas llaves. Signo de nuestra apertura y disponibilidad.

Unas llaves, más abrir que para cerrar, para acoger a todo el que pase y se sienta
allí como amigo y hermano, para que nadie se sienta sin techo y sin cariño, para ir
creando confianza y solidaridad. Unas llaves para el amor”.
(Un niño presenta las llaves)

“Finalmente, te presentamos el Pan y el Vino. A través de ellos Tú, Señor, Tú nos

manifiestas tu presencia y un mensaje de Amor a los hermanos. Haz que la alegría
de la Navidad perdure en el compartir, nuestra vida así como Tú lo haces en la
fracción del Pan”.
(Una pareja presenta el Pan y el Vino)

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Canto

Oración Sobre las Ofrendas

Acepta, Padre, en esta fiesta de la Navidad, estas ofrendas que te presenta-
mos; que ellas nos ayuden a darte nuestra vida el culto que a ti te agrada.
Por Jesucristo…

Prefacio II de Navidad

Plegaria Eucarística III

Padre Nuestro
El amor de Dios se hizo hombre para que nosotros nos llamáramos y fuéra-
mos de verdad hijos de Dios. Por eso, siguiendo su enseñanza, nos atreve-
mos a cantar: Padrenuestro...

Paz
Señor Jesús: aquella noche de Navidad, los ángeles anunciaron tu nacimiento a los
pastores proclamando la paz para todos los hombres, amados de Dios. Haz descen-
der hoy sobre nosotros tu paz: que descienda sobre nuestras familias, sobre nuestra
ciudad, sobre nuestro país, sobre el mundo entero, especialmente sobre los que
viven en medio de los horrores de la guerra.
A ti te lo pedimos, Príncipe de la paz, que vives y reinas...

Canto de Paz

Invitación a la Comunión
La Palabra se hizo carne y acampó entre nosotros, y hemos contemplado su gloria.
Este es Jesús, el Mesías, el Señor, el Salvador. Dichosos los que hoy hemos sido
invitados a su mesa.

Cantos de comunión

Acción de Gracias
Esta pequeña parte de la Iglesia, que formamos esta comunidad,
queremos dar gracias, porque nos ha nacido el Salvador.
Gracias, Padre, porque Tú, el Dios del Universo,
le pediste permiso a una mujer, para que engendrara a tu Hijo.
Merece la pena ser hombre, pues Dios quiso ser uno de nosotros.
Gracias, Jesús, porque viniste a salvarnos y a liberarnos.
Gracias, porque podemos ser Navidad para los demás,
porque la Navidad no es sólo un día al año,
sino que cuando amamos, siempre es Navidad.
Gracias, María, porque dijiste SI.
Gracias, José, por tu papel humilde y callado.
Gracias, Señor, porque en la Navidad de todos los días

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todos somos importantes. Gracias, Señor.
Oración después de la Comunión
Padre, a cuantos hoy celebramos el gozo del misterio de nacimiento de tu nuestro
Señor y Salvador Jesucristo, te pedimos que nos hagas alegres y esperanzados
mensajeros de la Buena Noticia que Él nos trae. Por Jesucristo…

Bendición Solemne
- Que el Dios que ha aparecido en la tierra para traernos la paz y la alegría,
se haga cada día más presente en vuestra vida. Amén.

- Que el Dios que nos ha enseñado la gran lección del amor, os de fuerzas
para hacer fraternidad, para que los hombres nos sintamos cada vez más hermanos
y más hijos de Dios. Amén.

- Y que la bendición de Dios, todopoderoso,

manifestado como Padre (+) creador,
como Hijo (+) encarnado,
y como Espíritu Santo (+) dador de todo bien,
descienda sobre vosotros. AMÉN.

Despedida
V./ En nombre de Jesús, Navidad del mundo, podéis ir en paz.
R./ Demos gracias a Dios.

Adoración
Monición: La alegría que sentimos dentro de nosotros, la haremos extensiva a
toda la tierra, y con una sola voz, agradecemos a Dios el milagro de su encarna-
ción, de querer compartir con nosotros nuestra vida. Por ello debemos hacer que
la tierra sea un gran Belén y que cada día puede se Navidad. A continuación pa-
samos a adorar al Niño-Dios. Mientras nos acercamos vamos cantando villanci-
cos.