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HIPERTROFIA MUSCULAR
Desde el punto de vista empírico se han relacionado diversos factores con el aumento de
tamaño muscular, aumentar cargas de una manera progresiva, perseguir un
“determinado daño” a través del famoso “no pain, no gain” o incluso trabajos al fallo
donde se generarán altos “bombeos” o “congestiones”. Sin embargo, estos procesos o
mecanismos, a día de hoy tienen nombre y apellidos, tensión mecánica ™, estrés
metabólico (EM) y daño muscular (DM), como principales mecanismos favorecedores
de hipertrofia muscular (Schoenfeld, 2010).
Parece ser que la activación excéntrica es la que más daño muscular puede
ocasionarnos, (Schoenfeld B, 2010 ; Wilmore y Costill, 2007; Proske U y Morgan DL,
2001; Lieber RL y Friden J, 1999). “El daño muscular inducido por el ejercicio
(EIMD) y su corolario clínico del «daño muscular acumulado» (DOMS) resultan a
menudo por el predomino del ejercicio excéntrico”, (Cordova A, 2010). De hecho
puede provocar daños a tener en cuenta como la rotura del sarcolema, (Newham DJ, et
al, 1983, Friden J y Lieber RL, 1992). Ahora bien, no debemos confundir los términos,
mientras que el EIMD, sería el daño propiamente inducido por el ejercicio y que suele
darse principalmente por estimulos novedosos (ejercicios nuevos, cambios de ángulos),
ejercicios pliométricos o la activación excéntrica, principalmente, el DOMS, sería el
resultado de ese daño, acumulado y puede aparecer en días posteriores al ejercicio.
Los diferentes mecanismos para hipertrofia tienen una relación directa con las variables
de programación. De esta manera, la tensión mecánica, teniendo en cuenta TUT y carga,
se daría de una manera más óptima entre 3-5 RM, por otro lado, activaciones
excéntricas pueden proporcionarnos tensiones mecánicas muy altas, llegando incluso a
trabajarse con 140-160 % RM, ni que decir tiene que en sujetos avanzados, con
precaución, en determinados momentos y con la dosificacón correcta. Rangos de
movimiento (ROM) mas completos nos darían un trabajo mas centrado en la tensión,
además el intercambio de ejercicios de miembro superior y miembro inferior, de empuje
(push) y tracción (pull), también benefician el aumento de cargas y que no descienda el
volumen total de entrenamiento, así como la tensión mecánica.
Podemos observar como desde diferentes ámbitos como el cine, la moda, la televisión,
iconos deportivos… se ha asociado en muchas ocasiones imágenes y cuerpos irreales,
difícilmente adquiridos solo con una alimentación y ejercicio físico adecuados.
Por otra parte, se pueden resaltar aspectos positivos de este “boom” por el físico y la
estética como la aportación en el culturismo de Edward Arthur, creó el sistema PHA
(training) el cual consiste en a combinación de trabajo de tren superior, tren
inferior y zona intermedia.
Ley de Franklin: la imposibilidad de predecir con exactitud qué sucederá cuando una
persona contrae una enfermedad o recibe un tratamiento.
Cuando hablamos de hipertrofia funcional, tenemos que tener claro la adaptación que
queremos conseguir a nivel muscular y no solo fijarnos en el aspecto estético. Por
ejemplo, en patologías metabólicas como la obesidad, el factor hipertrofia funcional y
con ello la mejora de la síntesis proteica, conseguirá un mayor beneficio para la
metabolización de las grasas.
5. Hormonas esteroideas
- Fatiga muscular
8. Glucógeno muscular
Un aumento excesivo, del aporte proteico puede ser utilizado más como un aporte de
sustrato energético que como estimulador de la síntesis de proteína (Chaillou et al.,
2013).
También se conoce que una ingesta excesiva de grasa, puede inhibir determinados
factores de la mTOR que se desarrollan con un menor crecimiento de masa muscular.
9. Contracción muscular
Para que comience el proceso de contracción debemos hablar no de sistema muscular,
sino neuromuscular, porque todo comienza con la ordenación del sistema nervioso
central hacia el músculo. Concretamente desde nuestras astas terminales, situadas en la
médula espinal, donde se enviará información en forma de señales nerviosas
(potenciales de acción) que pasarían de motoneurona en motoneurona hasta llegar a la
última que tendría la conexión directa con el músculo que queremos activar.
Concretamente vemos en el dibujo extraído de (Guyton AC y Hall JE, 2001) como una
fibra nerviosa mielinizada conectaría (se invaginan) con la fibra muscular, aunque en
una parte de ella que estaría fuera de la membrana, denominada placa motora (placa
terminal motora), donde se liberaría acetilcolina que daría paso al siguiente potencial
de acción.
Esta última motoneurona haría contacto con la placa motora, donde se desprendería un
neurotransmisor llamado acetilcolina, como hemos dicho, hasta aquí y dicho
brevemente tendremos la conexión neuro muscular, y desde ahora comenzaría el
proceso propio de contracción. Esa acetilcolina al provocar el nuevo potencial de
acción hará que el retículo sarcoplasmático libere grandes cantidades de iones de
Calcio ++, almacenados en dicho retículo. De seguido ese calcio es nuevamente
bombeado al interior del retículo hasta que se produzca nuevamente otro potencial de
acción que vuelva a generar otra contracción, (Guyton AC y Hall JE, 2001).
Por general entendemos, la que persigue un aumento del tejido magro sin que haya
distinción entre blancas o rápidas (FT), por sus siglas en ingés, “Fast Twitch” y rojas o
lentas (ST), por sus singlas en inglés, “Slow Twitch” como es el caso del entrenamiento
de estética corporal o de fisicoculturismo. Y por otro lado, la hipertrofia selectiva que se
centraría en el desarrollo de las FT, (Tihany J, 1989), o el desarrollo de las ST, debido
al objetivo de cada modalidad deportiva y a consecuencia de las características de cada
una. Las fibras FT, son las que se hipertrofian con más facilidad, pero para ciertos
deportes, como ya mencionamos, se requiere de una conversión de fibras blancas a
rojas, o en su defecto, los cambios fisiológicos pertinentes en dichas fibras, como es el
caso de todos los deportes de resistencia aeróbica. Las fibras FT o II, son las fibras a
desarrollar en los deportes o disciplinas cuyo objetivo final es la
velocidad/explosividad, es decir, las fibras que producen un mecanismo de contracción
rápida. Por supuesto, que hay disciplinas deportivas que requieren del desarrollo de
ambas, aunque con un predominio de una de ellas, debido a que por las características
individuales de cada tipo de fibra, son necesarias ambas en un momento determinado
de la competición. A su vez la hipertrofia selectiva podría ser, compensatoria (cuando
se hipertrofian las fibras que se encuentran en menor medida en un grupo muscular) y
confirmativa (cuando se hipertrofian las fibras que están en mayor número en un grupo
muscular), (Cuadrado G et al, 2006).
Por otro lado, nos podemos encontrar también con hipertrofia sarcomérica (también
denominada funcional) e hipertrofia sarcoplasmática (no-funcional). La distinción
entre estos tipos de hipertrofia es mencionado por varios autores, (Siff y Verkhosansdy,
2000, Tous J, 1999, Thibaudeau C, 2007) aunque no está corroborado científicamente,
es cierto que en un rango de repeticiones u otro se pueden reportar efectos fisiólogicos
diferentes. La hipertrofia sarcomérica es propia de los levantadores de peso,
halterófilos o aquellos que buscan más un desarrollo de fuerza, que volumen muscular,
y se debe a un aumento del número de miofibrillas y por consiguiente de actina y
miosina (proteínas contráctiles). Por otro lado, la hipertrofia sarcoplasmática, se le ha
atribuido a los que buscan un aumento del volumen muscular, propio de la estética
corporal y de los físico culturistas, denominada también “hipertrofia estética”, (Tous J,
1999). Consiste en un aumento del líquido intracelular, sin que sepamos a día de hoy
con exactitud si se debe a proteínas no contráctiles o a cualquier otro componente.
Aunque recientemente (Schoenfeld et al., 2014), propone que ese aumento de líquido se
debe a un aumento de glucógeno, puesto que como es sabido un gramo de glucosa se
almacena con 3 gramos de agua, entrenamiento tipo culturista, donde se prioriza la
glucólisis anaérobica, de esta manera un culturista puede tener más capacidad de
almacenar glucógeno intramuscular y por consiguiente más agua. Thibaudeau (2007),
nos dice: “La hipertrofia no-funcional es como agregar peso a su automóvil sin tocar el
motor”.
Para saber qué tipo de fibras se tiene, se realiza una biopsia muscular. Dicha técnica, se
realiza mediante la punción sobre el tejido muscular de una muestra de músculo para
analizarlo.
Otro proceso para diferenciar el tipo de fibras musculares puede ser la citopometría,
consiste en saber qué tipo de comportamiento metabólico tienen.
Las fibras que mas mionucleos tienen son las fibras lentas porque tienen mayor
actividad transcripcional, pasar de fibras rápidas a lentas es más complicado.
Memoria muscular: Se conoce como el proceso por el cual una persona ha entrenado
un tiempo aumenta su tamaño muscular, pero luego cuando desentrena mantendrás esos
mionucleos, y más actividad transccripcional. En humanos este proceso dura
aproximadamente unos 15 años si se han utilizado ayudas exógenas.
12. Cortisol
Acción del cortisol sobre las fibras musculares: El cortisol puede ser perjudicial,
porque degrada las fibras musculares rápidas.
- Deterioro de la traducción
- Inhiben transporte de aminoácidos y la acción de la leucina sobre la mTORC1
- Inhibición de la vía P13k y sus efectores
- Aumento de la expresión de MuRF1 yAtrogin 1
- Aumento de la expresión de miostatina y REDD1
- Disminución del contenido ribosomal
No suele haber diferencias +/- 15% diferencias miembros superiores, pero si puede
haber pequeñas ganancias de fuerza.
En modelos animales sabemos que si se da, y en humanos también se puede dar pero
metodológicamente es muy difícil de estudiar y no sabemos reconocer los estímulos que
se dan en la hiperplasia muscular.
Se piensa que en sujetos humanos con el uso de exógenos se pueda dar el aumento de
fibras musculares por hiperplasia, pero a día de hoy no se puede afirmar con rotundidad.
mTOR
Cuando hablamos de la mTOR, realmente estamos hablando de un complejo proteico, al
igual que la AMP – quinasa. La mTORc1 está relacionada con la síntesis de proteínas e
interviene en cómo funcionan los ribosamas en el proceso de iniciación. La rapamicina
es el inhibidor de la mTOR. La mTOR en estado basal, se encuentra en el citoplasma.
Existen mecanismos independientes a m TORC1, aún por determinar, que tienen mayor
peso en el mantenimiento basal de la masa muscular Thoreen et al., (2012) &
Bentzinger et al., (2008).
Los AAs estimulan la mTORC1 de forma dominante y los factores de crecimiento ( ej.
Insulina) fallan al intentar activar su actividad kinasa en ausencia de AAs.