Sei sulla pagina 1di 19

Carga y fatiga mental

Autoras

Carolina Espuny Caballero


Pilar Fernández Marin

Carga y fatiga mental 2


Índice

1. Definición conceptual

2. Factores determinantes de la carga mental

2.1 Exigencias de la tarea

2.2 Condiciones físicas del entorno

2.3 Factores sociales y de organización

2.4 Características individuales

2.5 Otros factores

3. Modelo explicativo de carga mental

4. Síntomas de la fatiga mental

5. Evaluación

5.1 Medidas de ejecución o rendimiento

5.2 Medidas subjetivas

5.3 Medidas fisiológicas

6. Medidas preventivas

6.1 Estrategias individuales para prevenir la fatiga mental

6.2 Estrategias de la organización para prevenir la fatiga mental

7. Glosario

8. Bibliografía

Carga y fatiga mental 1


1. Definición conceptual

Entendemos por carga mental (CM), al resultado de la diferencia entre la capacidad o recursos de
un individuo y las demandas que le vienen impuestas por una tarea específica de índole intelectual.
Esta carga conlleva una disminución funcional integral, es decir, el organismo se llega a resentir
tanto física como mentalmente, lo cual se va a traducir en un pobre resultado del trabajo a realizar,
debido a una sensación de agotamiento y apatía por parte del sujeto, denominada fatiga mental
(FM).

Por fatiga mental, según la Norma ISO 100075-1, entendemos aquel estado transitorio de reduc-
ción de la eficacia funcional tanto física como mental, que viene determinada por la duración, inten-
sidad y temporalidad de la tensión mental que le precede. Es por este motivo que la carga mental
se ve directamente relacionada con el procesamiento de la información que una persona se ve obli-
gada a llevar a cabo, cuando desarrolla cierto tipo de actividades.

Otra definición, tal y como la describe O’Donnell y Eggemeier (1986), hace referencia a la carga
mental como “...la proporción de la capacidad limitada del operador que se requiere para ejecutar
una tarea determinada”. Estos mismos autores coinciden al destacar el carácter multidimensio-
nal de la carga mental, es decir, es provocada por distintos factores:

Presión temporal
Cantidad de recursos para procesar la demanda
Factor emocional

La carga mental se presenta con mayor frecuencia en aquellas tareas que centran su actividad en
las funciones cognitivas (atención, percepción, concentración, memoria, capacidad de análisis,
capacidad de síntesis, razonamiento, etc.). Dichos procesos pueden verse afectados en función del
estado físico de la persona.

El proceso que se sigue en este tipo de tareas parte de la percepción de la información, etapa en
la que se reciben una serie de señales a nivel sensorial. A continuación, el sujeto las integra y las
interpreta, y es en este punto donde puede aparecer la carga mental, en función de la cantidad de
esfuerzo necesario, para al fin dar una respuesta determinada que le permita la ejecución de la
acción requerida. Una vez concluido este ciclo, se reproduce sistemáticamente. (véase gráfico 1).

Carga y fatiga mental 2


CARGA
C AR G A
MENTAL
ME NTA L
Percepción

información REACCIÓN

Input señales OUTPUT


sensoriales INTEGRACIÓN TOMA DE DECISÓN
INFORMACIÓN

gráfico 1

2. Factores determinantes de la carga mental

Podemos distinguir dos grandes grupos de agentes que afectan a la carga mental. Por un lado, los
factores internos, aquellos elementos totalmente ajenos a la organización e inherentes a cada
individuo que permiten desempeñar la tarea (capacidades individuales, actitud, aptitudes, motiva-
ción etc.). y paralelamente, los que denominamos factores externos, entre los que podemos dis-
tinguir los intrínsecos a la tarea (aquellos agentes derivados de la propia tarea) y los extrínsecos
a la tarea (aquellos que son ocasionados por causas organizativas –niveles jerárquicos, horarios,
etc.- o físicas –exigencias de la tarea, esfuerzo, concentración, atención sostenida, reflejos, etc.-).

Por lo tanto, tal y como describe M.I. de Arquer, existen unos factores en el entorno que ejercen una
presión sobre la persona a la hora de desempeñar una tarea, lo cual le genera una tensión (enten-
dida como carga mental), que se dará en mayor o menor medida, en función de sus características
individuales.

Según la ISO 10075:1991, existe una diversificación mayor de los factores agrupados por las fuen-
tes de presión que detallamos a continuación:

2.1 Exigencias de la tarea

Atención sostenida sobre una o más fuentes de información de forma simultánea.

Tratamiento de la información, que supone más o menos carga de trabajo mental, en fun-
ción del número y calidad de informaciones a tratar y de la disponibilidad de las fuentes a
consultar.

Responsabilidad. El nivel de responsabilidad asignado influye en la carga mental, bien

Carga y fatiga mental 3


sea sobre la salud, seguridad o producción.

Duración y perfil temporal de la actividad. Horario de trabajo, pausas, trabajo a turnos.

Contenido de la tarea que puede implicar control, planificación, ejecución y evaluación


posterior.

Peligrosidad de la tarea a realizar, por el lugar en que se desarrolla (subterráneo o


aéreo,..), tráfico, material peligroso (explosivos, citostáticos,..), etc...

2.2 Condiciones físicas del entorno

Es fundamental para la realización de tareas que exigen un trabajo mental que existan
unas condiciones físicas ambientales adecuadas. De esta forma se facilita la atención
correcta y la concentración necesaria para el desarrollo del trabajo.

- Iluminación. Se requieren niveles óptimos de iluminación y contraste en el puesto de tra-


bajo, así como ausencia de deslumbramientos.

- Condiciones Climáticas (humedad, temperatura,..). Los entornos excesivamente caluro-


sos o fríos, los cambios bruscos de temperatura, excesiva humedad, corrientes de aire,
afectan al desempeño de tareas mentales o intelectuales.

- Ruido. El ambiente sonoro influye en la carga de trabajo mental afectando a la concen-


tración y al esfuerzo para mantener el grado de atención necesaria para el desarrollo de
la tarea.

- Clima atmosférico (lluvia, tormentas,..)

- Calidad del aire. La presencia de humos, olores, vapores, etc..., que no constituyen infor-
mación necesaria para la realización del trabajo, tiene un efecto de distracción sobre la
atención y dificultan la concentración.

2.3 Factores sociales y de organización

- Tipo de organización laboral

- Clima social laboral (relaciones interpersonales)

Carga y fatiga mental 4


- Factores de grupo (cohesión, estructura de grupo)

- Jerarquía de mando (niveles de mando)

- Conflictos (internos en los grupos de trabajo, entre grupos, entre personas o conflictos
sociales)

- Contactos sociales

2.4 Características Individuales

- Tipo y nivel de aspiraciones personales

- Habilidades y aptitudes (Confianza, capacidades, cualificación, capacitación, conoci-


mientos y experiencia)

- Estado general de salud y necesidades personales (salud, constitución física, edad,


nutrición, nivel de activación)

- Estilo de vida (tipo de alimentación, pautas de descanso, ejercicio físico)

- Aspectos emocionales

2.5 Otros factores

- Exigencias sociales de responsabilidad con relación a la salud y bienestar público

- Normas culturales (valores y normas aceptadas)

- Situación económica (mercado de trabajo)

Carga y fatiga mental 5


3. Modelo explicativo de carga mental (Fdez. Marín, 2002)

Este modelo explicativo, intenta dar una respuesta funcional al fenómeno de la carga de trabajo.
Contempla de forma didáctica y práctica todos los procesos implicados en la misma. Desarrolla la
relación existente entre presión, tensión, y fatiga mental según la norma ISO 10075-1. Además,
contempla los factores desencadenantes y consecuentes de los citados fenómenos, todo ello como
expresión de la circularidad y transaccionalidad del proceso.

De forma pormenorizada, podríamos explicar, que los factores desencadenantes externos al traba-
jador que constituyen la presión mental, darían lugar al fenómeno de tensión mental; si ésta perma-
nece dentro de umbrales facilitadores de rendimiento, las consecuencias resultantes serían positi-
vas: aumento del rendimiento, concentración y atención, como resultado de cierto tipo de ansiedad
beneficiosa llamada “ansiedad facilitadora”.

Si la tensión mental se encuentra por debajo de niveles facilitadores del rendimiento, se originaría
el fenómeno llamado “hipocarga”, el cual puede desencadenar unos efectos indeseables como son:
la saturación mental, la monotonía y la vigilancia reducida. Estos efectos si se repiten con frecuen-
cia, suelen presentar unos problemas similares a la propia CM.

En el caso de que la tensión mental, se encuentre por encima de los umbrales óptimos de activa-
ción psicofisiológica, y si además, las demandas de tarea son muy altas y el trabajador presenta
pocos recursos para abordar la misma de forma conveniente, éste se podría ver afectado con
mucha probabilidad por la CM.

Si el citado fenómeno de CM se prolonga en el tiempo, el sujeto correría el riesgo de presentar sín-


tomas de fatiga mental, la cual podría originar problemas, tanto en la esfera laboral como la perso-
nal, pudiendo llegar a ser bastante incapacitante si la persona no es capaz de superar con éxito
esta situación. Todas estas variables consecuentes de la fatiga mental son susceptibles de consti-
tuir en sí mismas factores desencadenantes de mayor tensión, sobrecarga y fatiga mental, cerran-
do por tanto el problema dentro de una circularidad funcional difícil de superar para la persona que
entra en ella.

Carga y fatiga mental 6


MODELO EXPLICATIVO ASEPEYO DE CARGA DE TRABAJO
MENTAL
(Fdez. Marín, 2002)

Factores relacionados con Factores Factores Factores


ACTIVIDAD SOCIALE S ORGANIZACIONALES AMBIENTALES
LABORAL

PRESIÓN MENTAL

F actores relacionados con el TRABAJADOR

TENSIÓN MENTAL

Dentro de umbrales faci litadores del rendimiento

↑ rendi mient o
ANSIEDAD FA CIL ITADORA → Consecuencias positiva s: ↑ conc entración
↑ atención

Por debaj o de umbrales facilit adores del rendimiento


(HIPOCARGA)

S ATURACIÓN MONO TONÍA VIGILANCIA


MENTAL REDUCIDA

PROBLEMAS SIMILARES A LA CARGA


MENTAL

Por encima de umbrales facilitador es del rendimi ento

Si fue rtes deman das de tarea


Si déficit de capacidad de
af ront amiento detarea

CARGA MENTAL

+ TIEMPO

FATIGA MENTAL

PROBLEMAS PROBLEMAS
ÁREA LABORAL ÁREA PERSONAL

↓ INTERÉS ↓ SATISF ACCI ÓN LABORAL ↑ TRASTORNOS


↑ AB SENTI SMO PS ICOFISIOLÓGICOS
↑ INESTABILIDAD EMOC IONAL
↓CONCENTRACIÓN
↓ ATENCIÓN ↓ MOTIVAC IÓN
↑ APATÍA ↓ CONTROL SOBRE TAREA ↑ IRRITABIL IDAD
↑ ERRORES ↑ RIESGO ACCI DENTES ↑ PRO BLEMAS RELACIÓN SOCIAL
↓ TOLERANCIA A LA FRUSTRACIÓN
OTROS... ↑ ANSIEDAD

OTROS
OTROS. ..

Carga y fatiga mental 7


4. Síntomas de la fatiga mental

Cuando realizamos una tarea que implica un esfuerzo prolongado al límite de nuestras capacida-
des que sobrepasa nuestro nivel de respuesta, se produce fatiga mental. Esta fatiga mental desen-
cadena una serie de disfunciones a nivel físico y psíquico acompañadas de una sensación subjeti-
va de agotamiento y una disminución del rendimiento.

Existen dos tipos de fatiga, en primer lugar la que aparece como una reacción homeostática, pro-
vocando una reducción de la actividad producida por el debilitamiento de otros procesos psicológi-
cos y cognitivos (disminución de la atención, lentitud de pensamiento y disminución de la motiva-
ción).

En segundo lugar existe la fatiga crónica, cuando este desequilibrio es prolongado en el tiempo,
por una sobrecarga continuada, no puntual. Se aprecia a través de los siguientes síntomas: inesta-
bilidad emocional (irritabilidad, ansiedad, estados depresivos, etc.), alteraciones del sueño y altera-
ciones psicosomáticas (mareos, alteraciones cardíacas, problemas digestivos, etc.)

Carga y fatiga mental 8


5. Evaluación

Es complicado llevar a cabo la evaluación de los sistemas de trabajo actuales; éstos requieren una
elevada demanda cognitiva, que se ha intentando compensar mediante recursos tecnológicos que
permiten automatizar los procesos, pero no consiguen el fin buscado, sino que se ha propiciado la
redistribución de las demandas. Las tareas que requerían un esfuerzo manual, o bien mecánico,
actualmente han pasado a ser operaciones mentales o cognitivas, que ocasionalmente, pueden lle-
gar a sobrepasar las capacidades limitadas. Debemos entender que las demandas a las que hace-
mos referencia son inseparables a la tarea.
Todo sistema de evaluación ha de poseer unos requisitos para corroborar su eficacia, según S.
Rubio (1999), O’Donnell y Eggemeier (1986), estos criterios son los que describimos a continua-
ción:

Sensibilidad: capacidad de una técnica para detectar cambios en los niveles de dificultad
de la tarea o en sus demandas.

Poder de diagnóstico: Aquel índice que permite conocer la causa del cambio, es decir, el
tipo de recurso atencional que origina la carga mental en una tarea concreta.

Selectividad/Validez: capacidad para discernir diferencialmente de las demandas de capa-


cidad y no reflejar los cambios en factores como la carga física o el estrés emocional que
pueden no estar relacionados con la carga mental.

Grado de intrusión: capacidad para no distorsionar la ejecución de la tarea mientras se


evalua la carga.

Fiabilidad: capacidad para dar consistencia a los resultados en momentos distintos de


evaluación.

Requisitos de implementación: recursos que intervienen en la recogida y análisis de la


información (tiempo, instrumentos, softwares, etc.).

Aceptación por el operador: Hace referencia a la percepción que tienen los sujetos de la
validez y utilidad del procedimiento.

Existen diferentes tipos de métodos de evaluación de carga mental, nos vamos a centrar en los
tres que distingue S. Rubio (1999). En primer lugar los basados en el rendimiento, los de tarea sim-
ple y por último los de tarea múltiple.

5.1 Medidas de ejecución o rendimiento, aquellas medidas cuyo objeto de estudio es el rendi-
miento, y que evidencian que el aumento de la carga mental, y a su vez de las demandas, es indi-
rectamente proporcional al rendimiento, viéndose éste reducido considerablemente.

Carga y fatiga mental 9


RENDIMIENTO
ALTO

A
B

BAJ O NIVEL CARGA


MENTAL
BAJO ALTO

En el gráfico anterior se describe como sería la relación del rendimiento con el nivel de carga, para
ello se distingue entre tres zonas distintas. La primera zona A, el nivel de carga mental es bajo y
existe por el contrario un alto nivel de rendimiento gracias a la capacidad residual. Por el contrario
en la zona B, aumenta el nivel de carga mental y disminuye proporcionalmente el rendimiento. En
la última zona, la C, la carga ha llegado a un nivel muy elevado y por lo tanto el rendimiento se man-
tiene a un bajo margen.

Medidas de tarea simple miden la variación en el rendimiento pero evaluando una única
tarea.

Medidas de tarea múltiple son más costosas de aplicar, consisten en añadir una nueva
tarea secundaria para la evaluación del rendimiento, las demandas de la cual son inver-
samente proporcionales al rendimiento de la tarea principal.

Las tareas secundarias incorporadas suelen ser:


- Estudios de tiempos de reacción
- Tareas de memoria
- Producción de tiempos
- Estimación de tiempos
- Seguimiento (tracking)

5.2 Medidas subjetivas, son las más económicas dado que necesitan escasos recursos de imple-
mentación, son de uso fácil, y lo más importante es que interfieren en menor grado a la tarea mien-
tras se evalúa la carga mental. Las más utilizadas en esta categoría son, el SWAT y el NASA-TLX.

SWAT (SUBJECTIVE WORKLOAD ASSESSMENT TECHNIQUE) Reid & Nygren. SWAT


(Subjetive Workload Assessment Technique). Parte de la premisa de que la carga mental
de una tarea o actividad está determinada por los factores: carga temporal, carga de
esfuerzo mental y carga de estrés. Cada uno de ellos evaluados mediante una escala de
tres puntos.

Carga y fatiga mental 10


NASA-TLX (Task Load Index). Hart y Staveland (1988). Esta herramienta subjetiva permi-
te medir seis dimensiones de carga mental, tal y como describen S. Rubio y E. Ramiro,
en las siguientes descripciones: demanda mental, demanda física, demanda temporal,
rendimiento, esfuerzo y nivel de frustración.

Ambas pruebas constan de dos fases, una primera de definición y clasificación de dimen-
siones, y una segunda fase de puntuación y evaluación.

Otros métodos empleados:

Método LEST (Laboratorio de Economía y Sociología del Trabajo), evalúa la carga men-
tal a partir de cuatro indicadores: apremio de tiempo, complejidad-rapidez, atención y
minuciosidad o precisión.

El método Perfil del Puesto de RNUR, considera dos dimensiones o factores: las ope-
raciones mentales conscientes, y el nivel de atención.

La ANACT (Agencia Nacional para la mejora de las Condiciones de Trabajo), no dispone


de una herramienta específica para la carga nerviosa, pero sí evalúa dos dimensiones en
su método para evaluar el puesto de trabajo en sí, las dimensiones o factores que reco-
ge son: rapidez de ejecución y nivel de atención.

5.3 Medidas fisiológicas: medición de la actividad cardíaca (ECG), ocular (registro de movimien-
tos oculares), cortical (actividad cerebral) y/o respiratoria.

Carga y fatiga mental 11


6. Medidas preventivas

La fatiga mental es uno de los riesgos psicosociales que más gravemente afecta a la salud de los
trabajadores. Dada la diversidad y volumen de factores que pueden llegar a influir en el rendimien-
to y en la carga mental en el ámbito laboral, existen varias medidas para prevenir la fatiga mental,
entre las cuales destacan todas las que afectan a los grandes ejes de implicación, como son los
factores individuales, las exigencias de la tarea, los factores sociales y de la propia organización.

6.1 Estrategias individuales de prevención de la fatiga mental

- Hábitos saludables

Factores que contribuyen a fortalecer la capacidad de resistencia a la fatiga, como son los hábitos
de alimentación, descanso y ejercicio.

Alimentación. La dieta debe ser equilibrada y regular. Carencias de elementos nutritivos,


horarios irregulares, raciones inadecuadas pueden alterar el proceso de digestión y difi-
cultar el correcto metabolismo y alterar el sueño.

Descanso. Se acepta como estándar que el individuo adulto requiere unas 8 horas de
sueño diarias. La falta de horas de sueño altera la capacidad de atención y coordinación.

Ejercicio Físico. La actividad física moderada y practicada de forma regular mejora el tono
muscular, ayuda a afrontar las tensiones emocionales de cada día y a optimizar el poten-
cial reparador del descanso diario.

- Técnicas de Apoyo

Técnicas cognitivas. Control psicológico-cognitivo de la situación, sin caer en la fatiga, ni el bloqueo.


Ejercicios proactivos, de forma previa a la aparición de los síntomas, como la sustitución de pensa-
mientos negativos que desencadenan situaciones ansiógenas y en consecuencia fatiga, por pensa-
mientos positivos (Estrategia del cambio del pensamiento). Para poder autocontrolar dichas ideas
negativas, el primer paso es hacerlas conscientes, y en segundo término, darles un sentido positi-
vo, pero realista, sin caer en un optimismo idealista. En esta misma línea del cambio de pensamien-
to se pueden utilizar las autoinstrucciones anti-estrés o las visualizaciones, provocando ideas o imá-
genes de acontecimientos positivos de manera consciente y voluntaria que constituyen la meta
objeto.

Otras técnicas a nivel reactivo, ante la aparición de los primeros síntomas, destacan los ejercicios
de respiración, estiramientos o relajación, que pueden ayudar a neutralizar la tensión generada por
la carga mental y evitar así desencadenar la fatiga mental.

Carga y fatiga mental 12


6.2 Estrategias de la organización para prevenir la fatiga mental

Desde el punto de vista de la organización, las medidas para la prevención de la fatiga mental se
centran en

Mejoras de las condiciones de trabajo:

Mejoras en las condiciones ambientales del puesto de trabajo (iluminación, temperatura,


humedad, ruido,..)

Mejoras en el equipamiento del puesto de trabajo (útiles, herramientas, y sobre todo docu-
mentación e información y tipo de soporte de la misma)

Mejoras en el tratamiento de la información (recursos atencionales, memorización, cálcu-


lo numérico, razonamiento lógico, solución de problemas y toma de decisiones) y adapta-
ción de la carga informativa (reducirla o aumentarla) para adaptarla a las capacidades de
la persona.

Revaloración del puesto de trabajo:

Que exista una perfecta adaptación de la persona al puesto de trabajo, con los requeri-
mientos necesarios a un nivel óptimo de exigencia.

Examinar las tareas para la optimización de su desempeño y reformulación del puesto.

Mayor variedad y alternancia de tareas

Definición de metas y objetivos parciales con plazos de ejecución no excesivamente jus-


tos.

Mayor autonomía en la realización de las tareas

Organización del tiempo de trabajo

Pausas. Las pausas, más que los cambios de actividad permiten la recuperación tras un
trabajo de predominio mental. Deberían realizarse espontáneamente a lo largo de la jor-
nada laboral, pero si no es posible por razones técnicas u organizativas debe existir un
sistema de regulación de descansos. El número y la duración de las pausas están en fun-
ción de la intensidad de la tarea y de las condiciones y exigencias del trabajo.

Carga y fatiga mental 13


Reorganización del tiempo de trabajo (duración y flexibilidad de la jornada). Analizar la
gestión del tiempo en la realización de las tareas y el ritmo individual de trabajo.

Las organizaciones han de facilitar canales de comunicación que permitan la cohesión grupal, favo-
rezcan los valores del grupo y eviten conflictos. Para ello se ha de formar en dichas habilidades y
desde la dirección marcar las pautas para que estas afloren.
Facilitar y fomentar las relaciones humanas (evaluando el clima laboral, los sistemas de comunica-
ción organizacional, etc..)

Una adecuada y completa información y formación del individuo respecto a su trabajo, favorecerá
su capacitación y adaptación al puesto, minimizando el riesgo de fatiga mental.
Formación del personal a cargo de la empresa (formación interna y formación externa)

Carga y fatiga mental 14


7. Glosario

Carga mental: es el resultado de la diferencia entre la capacidad o recursos de un individuo y las


demandas que le vienen impuestas por una tarea específica.

Fatiga mental: estado transitorio de reducción de la eficacia funcional tanto física como mental, que
viene determinada por la duración, intensidad y temporalidad de la tensión mental que le precede.

Presión mental: conjunto de variables externas, que son potencialmente capaces de influir sobre
la mente del trabajador.

Tensión mental: consecuencias inmediatas que percibe el trabajador como resultado de la presión
mental.

Carga y fatiga mental 15


8. BIBLIOGRAFÍA

1. Conde Carnerero, Eva-Belén. Lda. en Psicología. Carga mental.


http://www.riesgolaboral.net/revista/dossier/carga.htm

2. De Arquer, M. Isabel. Nota Técnica de Prevención 534, C.N.C.T.: Carga mental de trabajo: factores.
Madrid, INSHT. 1999.

3. De Arquer, M. Isabel. Nota Técnica de Prevención 575, C.N.C.T.: Carga mental de trabajo: indicadores.
Madrid, INSHT. 2001.

4. De Arquer, M. Isabel. Nota Técnica de Prevención 445, C.N.C.T.: Carga mental de trabajo: fatiga.
Madrid, INSHT.

5. Nogareda Cuixart, C. Nota Técnica de Prevención 179, C.N.C.T.: La Carga mental del trabajo: defini-
ción y evaluación. Madrid, INSHT. 1986.

6. Norma ISO 10075: 1991 Ergonomic principles related to mental workload. General terms and definition
Geneva, ISO 1991

7. O'Donnell, R. y Eggemeier, F. T. (1986). Workload assessment methodology. En K. R. Boff, L. Kaufman


y J. P. Thomas (eds.), Handbook of perception and human performance. Nueva York: Wiley.

8. Rubio, S. (1992). Evaluación y medida de la carga mental en una tarea de diagnóstico de fallos. Madrid:
Universidad Complutense de Madrid.

9. Rubio, S. y Díaz, E.M. (1999). La medida de la carga mental de trabajo: Índices basados en el rendi-
miento. Boletín Factores Humanos, Art.2, núm.20.

Carga y fatiga mental 16


17

Potrebbero piacerti anche