TRABAJO, CONSUMISMO Y NUEVOS POBRES

“se les enseña a actuar, no a pensar”

El trabajo se ha convertido en los últimos años, en una referencia fundamental para

el entendimiento de la articulación social, teniendo en cuenta que si se quiere
conseguir lo medianamente necesario para tener una vida llevadera, se debe hacer
algo valioso y digno de pago, pero es realmente dañino y mediocre querer
conformarse con lo ya obtenido, es absurdo dejar de esforzarse después de haber
alcanzado la satisfacción. El trabajo va muy ligado con la ética, refiriéndonos a ética
como un grupo de principios morales de los estándares personales, para hacer lo
debido. “Solo el trabajo cuyo valor es reconocido por los demás (trabajo por el que
hay que pagar salarios o jornales, que puede venderse y está en condiciones de
ser comprado) tiene el valor moral consagrado por la ética del trabajo”,(Zygmunt
Bauman, pag 18),entendiéndose lo anterior como la forma que la ética del trabajo
tomo en la sociedad actual, llamada la “ sociedad moderna”

Al pasar de los años, la sociedad se ha ido transformando para llegar a adaptarse

a un mundo cada vez más industrializado. De esta manera los gobiernos de los
países, por querer llegar a tener un crecimiento económico rápidamente, han ido
sometiendo a la sociedad a un régimen industrial, dejando de lado las costumbres
de las personas, implantando a las personas patrones de conductas en las fábricas;
dejándoles como única opción trabajar o morir. La Población se ha venido
modificando, en la actualidad nada es gratis, todo tiene algún costo, nada se da sin
tener algo a cambio, ya el amor por el trabajo, por la labor realizada desapareció.

La industrialización ha ido convirtiendo el trabajo en una estricta rutina, con el único

fin de ir consumiendo a las personas con la carga de trabajo y así apoderarse de
su libertad. “…. los únicos valores que las clases altas permitían a la clase trabajador
eran los mismos que los propietarios de esclavos apreciaban en un esclavo. El
trabajador debía ser diligente y atento, no pensar en forma autónoma, deberle
adhesión y lealtad sólo a su patrón, reconocer que el lugar que le correspondia en
la economía del Estado era el mismo que el de un esclavo en la economía de la
plantación azucarera. Es que las virtudes que admiramos en un hombre son
defectos de un esclavo”. ( J.L y Barbara Hammonds)

La ética del trabajo fuè un instrumento, para así ir consiguiendo la aceptación de la

norma impuesta por la industria, que solo estaba dando una situación precaria; con
salarios bajos, haciendo del trabajo una necesidad para todos.

Al pasar el tiempo las necesidades de las personas van cambiando, pasando de

una necesidad de supervivencia, a la necesidad de satisfacer sus deseos. Fue así
como la sociedad hizo una variación de productora a consumidora, sufriendo
grandes transformaciones; ya los trabajos no eran como antes para la toda la vida,
se convirtieron en trabajos temporales, trabajos flexibles. La producción y el trabajo
no fue lo único que cambio, la industria productora que es hoy la industria
consumidora, vive particularmente para satisfacer sus deseos, dejándose seducir
por las veleidades del consumo, afirma Zygmunt Bauman “todo consumidor el
solitario”.

En esta sociedad actual de consumidores, el principio que comienza a gobernar es

la estética, dejando de lado la ética del trabajo, esta sociedad de consumidores está
preocupándose principalmente, por estar donde proliferen las oportunidades de
elegir entre distintos productos, admirando a la gente que tiene los recursos
suficientes para elegir los bienes que desee y no al contrario lo que está al alcance
de sus posibilidades, ya no se está reconociendo el trabajo; solo se aspira a llegar
a tener una vida como la gente de las altas clases sociales “ sin preocupaciones”.

Tener pocos recursos en una sociedad de consumo, es no tener acceso a una vida
normal, es ser un consumidor frustrado que es incapaz de adaptarse y por tanto
debe llevar una vida aburrida, sin libertad de elección, orillándolos de esta manera
a desafiar el orden y la ley, para no aburrirse.

El trabajo perdió su lugar de privilegio, el trabajo dejo de ser un centro de atención

ética de notable intensidad; al igual que otras actividades de la vida, ahora se
encuentra sometido al escrutinio de la estética. Algunos trabajos fueron
considerados “trascendentes” y se prestaban más fácilmente que otros para ser
tenidos en cuenta como vocaciones, fuentes de orgullo y autoestima. Desde la
perspectiva de la ética era imposible afirmar que un trabajo careciera de valor o
fuera degradante, toda tarea honesta conformaba la dignidad humana y todas
servían por igual la causa de la rectitud moral y la rendición espiritual.

El mensaje de la ética de trabajo era la igualdad, minimizando las obvias diferencias

entre las distintas ocupaciones, la satisfacción potencial que podían ofrecer y la
capacidad que tuvieran para otorgar estatus o prestigio, además de los beneficios
materiales que se brindan.

“ Los pobres no habitaban una cultura aparte de la de los ricos; deben vivir en el
mismo mundo, ideado para beneficio de los que tienen dinero. Y su pobreza se
agrava con el crecimiento económico de la sociedad y se intensifica también con
la recesión y el estancamiento”. (Seabrook)

KATHERINE JOHANNA ESTUPIÑAN SUAREZ