UNA APROXIMACIÓN A LA DEFINICIÓN DE CULTURA

Santos Páez Erick Ricardo

Resumen

El problema de fundamentar la identidad de una cultura es desafiante tanto para cada

miembro de ella como para los académicos porque ante el avance de la globalización,
se corre peligro de perder esa tradición cultural y afectar directamente en el modo de
vivir de las personas. Existe un grave problema al intentar definir a la cultura que
sigue cambiando cada generación pero a la vez permanece en cierto sentido.

1. La cuestión de definir a la cultura

El filósofo Sante Babolin define a la cultura como “un sistema de acciones y
operaciones, que implica un conjunto orgánico de actividades, para construir y
reconstruir el mundo empírico en el que la vida del hombre está insertada”1. Ésta
definición parece rescatar los elementos necesarios para explicar de modo orgánico
a la cultura, pues incluye los elementos dinámico y estático de la misma. El ser
humano es el único ser que desarrolla cultura, pues ni siquiera las especies más
organizadas en sociedad como las abejas y hormigas han construido y reconstruido
su mundo, en otras palabras, no son capaces de crear arte, religión, derecho, etc.,
que son características propiamente del modo de ser del hombre.
En general la cultura incluye a todo lo que el hombre produce para que dotar de
sentido a su existencia, por tanto, se puede enlistar al lenguaje, la moral, la
religiosidad, la metafísica, las artes en general, el derecho, la organización social,
el modo de vestir y ataviar el cuerpo, etc. En otras palabras, todo aquello que
permite al hombre manifestar sus potencialidades naturales y que terminan por
hacerlo converger en la vida social, desde la cual las creaciones individuales pasan
a organizarse y a ser compartidas a modo de identidad “cultural”.
A lo largo de la historia han existido múltiples culturas de las cuales cada grupo
humano en la actualidad es heredero de una parte de ellas. Por ejemplo, en México
se tiene una herencia del pueblo indígena que perdura de forma sincretizada en la
ofrenda a los muertos, pero no es del mismo modo que existía en la época
prehispánica. Como también podemos citar al ambiente oficialmente imperante
hace 100 años en el que para la educación se hacían espacios que separaban de
la convivencia a mujeres y hombres, detalle que hoy en día ya no es común en la
sociedad.

1
BABOLIN Sante, Producción de sentido, editorial San Pablo, Bogotá, 2005, p. 13
 Esto hace evidente que hay parte de la tradición cultural que desaparece en el
paso de una generación a otra, así como también la persistencia de ciertos
elementos a pesar del tiempo. Por tanto, para aclarar lo que es la cultura hay que
tener en cuenta estos dos aspectos siempre presentes: lo estático y lo dinámico.

2. Elementos esenciales o estáticos de la cultura

El concepto de esencia proviene del griego “ousía”, que es un término filosófico
que indica la constitución metafísica que diferencia a cierto fenómeno, o en otras
palabras es “lo que hace que una cosa sea lo que es”. Por ejemplo, se puede decir
que esencia del derecho es “aplicar la justicia” o que la esencia de un lápiz es “que
sirve para escribir”.
En la cultura, sin embargo, no es posible rastrear de manera sencilla a su
esencia. Porque se observa no una sino múltiples culturas, tan distintas entre sí,
como puede verse entre los matrimonios orientales polígamos y los occidentales
monógamos, y a pesar de eso siguen siendo culturas.
La corriente intelectual llamada estructuralismo trata de analizar al hombre y a
la cultura desde esas estructuras que se pueden rastrear como puntos comunes
como son la religión, la moral, la organización social, etc. mismo que se encuentran
en cada cultura, pero se manifiestan de modo diferente gracias a la creatividad
humana.
Ahora bien, la esencia supone un elemento que permanece o que subyace a
pesar de los cambios accidentales, por ejemplo, en la religión cristiana en el siglo I
durante la eucaristía o misa, también se practicaba un banquete llamado ágape,
pero fue dejado de realizar muy pronto, y sin embargo, el significado o centro de la
reunión religiosa sigue siendo el mismo: el congregarse como fraternidad en torno
al misterio de la Última Cena de Jesús.
Esto que se puede entrever como una esencia de la cultura tiene su origen en el
hombre que mantiene ciertas actividades en miras de llenar de sentido su
existencia, por eso acierta Sante Babolin en su definición, pues la búsqueda de
sentido parece ser ese elemento esencial de la producción cultural.

3. Elementos accidentales o dinámicos de la cultura

En griego “kyne” significa movimiento, éste concepto explica el fenómeno del
cambio en la naturaleza y en la cultura es un elemento sumamente importante
porque toda cultura es cambiante a lo largo del tiempo. Cada generación recibe una
herencia del sus mayores, un lenguaje, una moral, una religiosidad, etc. y los
reconstruye desde su vivencia particular enriqueciendo el acervo cultural de la
humanidad.
 No hay civilización que haya sido conservada pura desde su origen, pues las
mismas situaciones a las que está expuesto en su diario acontecer le impulsan a
resolver retos nuevos desde la creatividad propia del ser humano. Esto se puede
ver desde el cambio del lenguaje, por ejemplo, el español con el que fue escrito Don
Quijote se ha trasformado mucho tanto que hoy es difícil entender de manera fluida
el texto original.
O en un caso más reciente, la imagen de la familia-matrimonio tradicional
(monógama, heterosexual) ha sido puesta en duda por el creciente posicionamiento
de tendencias de la llamada comunidad LGTB, tanto que a nivel civil ha sido
reconocida su validez y se practica desde hace un tiempo en diversos países. Esto
y muchos otros ejemplos muestran que la cultura siempre cambia, porque se
desarrolla gracias al ingenio y creatividad propios del hombre.
En el caso de querer definir a una cultura como la nahua, surgen diversos
cuestionamientos para mantener eso llamado “esencia” de lo nahua que pervive
desde tiempos remotos y que en la actualidad se encuentra mezclado con diversos
trazos de otras culturas. Hoy existe la cultura nahua en México, pero, ¿quién es
verdaderamente nahua? ¿qué hace que un individuo sea nahua? Para responder
pues a estas interrogantes se debe proceder con una mente filosófica que integre
todos los conocimientos y herramientas de las ciencias.
Siguiendo la definición de Sante Babolin, lo central de la cultura es la producción
de sentido, es ese construir y reconstruir el mundo empírico, ahora bien, los nahuas-
aztecas lo construyeron y reconstruyeron a partir de una visión del mundo y de los
hombres muy especiales, por ejemplo, terminaron fundamentando su origen a una
migración providencial dirigida por su dios Huitzilopochtli desde Aztlan-
Chicomoztoc, y luego cuando fundaron su vida en el servicio religioso al sol,
terminaron por configurar toda su vida en torno a ese ideal: relaciones sociales,
religión, arquitectura, lengua, etc.
Hoy en día los herederos de ese legado nahua han discriminado o elegido
reconstruir su mundo con algunos elementos nahuas como el lenguaje, ciertos
valores familiares y comunitarios, etc. que ya estaban presentes en la antigüedad
pero actualmente las generaciones nahuas las han re-construido e impreso un sello
particular propio de su momento histórico. Sin embargo, habrá que analizar aquello
que subyace en la conciencia nahua y forma esa esencia ideológica, esto es su
metafísica y teología, porque es desde ellas se puede leer la herencia que han
recibido y son las que afectan directamente en la escala de valores.

4. Conclusión
El hombre hace reglas, conforma un lenguaje específico, vive religiosamente,
etc. para llenar de significado su vida social, esto lo hace cada individuo y
generación que recibe la herencia cultural y se enfrenta a los retos de la vida
cotidiana desde un punto de vista cultura. El ser del hombre es dinámico por lo que
acierta Sante Babolin en señalar a la producción cultural como una construcción y
re-construcción de ese mundo empírico que incluye lenguaje, arte, moral, etc.
Por otra parte, se dificulta atrapar aquello que es lo verdaderamente nahua a lo
largo del tiempo, como un elemento primario se puede señalar al lenguaje, porque
recoge toda una visión metafísica del mundo y del hombre en una estructura
gramatical, también se puede mencionar a las ideas morales y religiosas que son
de gran peso en la educación de una generación a otra y son a la vez estáticas y
dinámicas.

Bibliografía
BABOLIN Sante, Producción de sentido, editorial San Pablo, Bogotá, 2005, 253 pp.
GÁMEZ M. David, Filosofía de la cultural, en davidgamezm.wixsite.com, recuperado
el 9 de febrero 2018, disponible en:
http://davidgamezm.wixsite.com/filosofia/filosofa-de-la-cultura

Cuestionario

1. ¿Cuáles son los problemas al definir la cultura?

2. ¿De dónde surge esa dinámica de la cultura?
3. Da tu opinión, ¿se puede definir a la cultura náhuatl? Argumenta tu
respuesta.