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XIV Simposio de Centros Históricos y

Patrimonio Cultural de Canarias


La Laguna (Tenerife) 3, 4 y 5 de Noviembre de
2012

CONSIDERACIONES PARA LA ELECCIÓN DE LOS


ASENTAMIENTOS URBANOS EN EL PAISAJE RURAL DE
ANAGA.

Carlos Silva (1), Raquel Siverio Rodríguez (2)

Club UNESCO “AHOREN” Canarias.


(1)
Biólogo, (2) Arquitecto Técnico.
(1) (2)
carlossilva48@gmail.com raquelsiverio@hotmail.com

ÁREA TEMÁTICA:

EL PATRIMONIO CULTURAL Y NATURAL DE LA ISLA DE TENERIFE.

RESUMEN

El potencial de Anaga en paisaje, biodiversidad y turismo pasa por que sea habitable y rentable
para su población. Se propone orientar y asesorar, por parte de las administraciones, apoyadas
por los colegios profesionales adecuados, a la población que no tienen registradas sus
propiedades, en evitación de indefensión ante prácticas administrativas de particulares.

Se plantean algunos ejemplos en otros lugares, que cumpliendo normativas de potenciar


elementos tradicionales en la edificación y sus usos, pierden su funcionalidad y validez. Si se
rescataran soluciones funcionales del pasado, actualizándolas y ampliándolas con más
parámetros bioclimáticos, podría evitarse problemas en el futuro, siendo un buen instrumento
desde el PRUG. Con normativa de esta figura de planeamiento, se expone un ejercicio para
una edificación en el paisaje, que puede evidenciar un punto débil de la misma. Se ejemplariza
una zona con un gráfico en diferentes épocas del año y sus desviaciones de las valoraciones
del pasado.

El Foro Europeo, ubicado en La Laguna, sería un escenario idóneo, para fomentar encuentros
de ciudadanía, técnicos y profesionales, sobre el desarrollo de Anaga.

PALABRAS CLAVE: Paisajes; Agricultura; Aportaciones bioclimáticas;


Confort; Obstrucción solar; Registro de la propiedad; Foros; Puntos débiles;
Turismo; Teide; PRUG.

1. CONDICIONANTES GENERALES.
La presencia de las personas en Anaga es fundamental para garantizar uno de los factores del
paisaje; la continuidad de la agricultura. Práctica que antaño permitió la subsistencia de sus
pobladores y que actualmente se encuentra en recesión. Además de los condicionantes de
mercado, es determinante el régimen de propiedad dispersa, que tradicionalmente se ha
estado estableciendo en repartos por heredad fraccionada de generación en generación y que
se recibía bien por palabra o hijuelas y menos frecuentemente por registro de la propiedad.
Esta dispersión demanda un consumo de tiempo y de energías que hay que abordar y
equilibrar. Anaga no es ya un potencial y reservorio genético en especies de cultivo agrícola,
sino que en el ser encuentra el punto de más alta biodiversidad de Canarias y por ende de
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La Laguna (Tenerife) 3, 4 y 5 de Noviembre de
2012

Europa. Estas características, no son puntos aislados sino que se mantienen en la alta calidad
ambiental del Macizo de Anaga, al que hay que garantizar su futuro.

Agrava la situación de este paraje natural, cuna en siglos pasados del desarrollo económico de
la comarca, la frecuente ausencia del registro de la propiedad. En varias propiedades rurales o
casas tradicionales de campo este vacío ha sido aprovechado por alguna compañía, que se ha
organizado a tal efecto y han rellenado ese vacío con documentos y demandas haciéndose con
la propiedad. La aparición de estos “gestores” de la inscripción pública de terrenos, que utilizan
el conocimiento de los mecanismos acordes con el procedimiento administrativo, obliga a una
revisión detallada de algunos casos, que situaron en indefensión a los propietarios de los
terrenos, no para rescatar la titularidad deseable, sino para conocer cómo controlar esta
indefensión. Por tanto, para Anaga como para otras zonas rurales del territorio canario, no solo
es imprescindible una buena planificación recogida a través de sus PRUG, sino que desde las
mismas administraciones se debe prestar el apoyo adecuado, que en colaboración con los
colegios profesionales fedatarios de la inscripción pública, se preste un servicio, que fomente
que las familias propietarias del terreno regulen administrativamente esta situación.

La gestión del PRUG de Anaga, ha tenido que dar respuestas de planeamiento y regularización
de acciones, que tenían una larga tradición, ajena, cuando no contrarias a los objetivos que se
marcaban. Hoy el potencial de demanda de Anaga, en senderismo, turismo rural, visita de
cruceristas, incremento de surfistas internacionales y del uso de sus calidades paisajistas y
ambientales, obliga al rescate y actualización de parámetros bioclimáticos para las
edificaciones y de mejoras para su población, que aseguren aun más su desarrollo sostenible.

Por el modelo en sí y en la languidez económica en que nos tenemos que mover, no podemos
mantener que sean las administraciones públicas los motores del desarrollo, ni todo, ni sin
ellas. El potencial de Anaga debe fortalecer la demanda de Tenerife en el sector turístico. Por
ello el sector privado con las administraciones públicas y los profesionales, las universidades
canarias y los vecinos, los inversores con las entidades financieras, por citar sectores, deben
sumar acciones y esfuerzos. En resumen, todas las entidades incluidas en el desarrollo de
Tenerife, con una visión de conjunto, aborden sectorialmente propuestas y soluciones en los
foros adecuados. Un aglutinador en algunos campos puede ser el Foro de UNESCO ubicado
en la Escuela de Ingeniería de La Edificación, donde se puede abordar el desarrollo sostenible
de Anaga.

2.- CONDICIONANTES EN LA CONSTRUCCIÓN Y LA NECESIDAD DE


FORTALECER EL PRUG.
En líneas generales, el PRUG ha supuesto una innegable aportación como elemento
planificador del Parque, resultando en ciertas ocasiones excesivamente benévolo, dando
origen a una incompatibilidad entre el urbanismo en Anaga y el paisaje.

En las últimas décadas, Anaga ha estado en continua evolución dando origen a nuevos
asentamientos que en la mayoría de las ocasiones respondían a unas necesidades, pero que
resultaron ser un despropósito para el preciado bien que puede darle futuro a Anaga; el
paisaje. El Plan asume esta realidad como parte intrínseca de la historia de la comarca y lo
respeta pero contempla numerosas líneas de actuación con el fin de actualizarlo e integrarlo
dentro de unos parámetros establecidos. Estas líneas de actuación en la práctica, pasarían por
una integración de las viviendas con el propio medio que les rodea mediante la utilización de
elementos presentes en su entorno más cercano, es decir, una vuelta a la arquitectura
tradicional camuflando en cierto modo la realidad actual de Anaga, la autoconstrucción. Una
autoconstrucción poco caritativa con el medio que le rodea y que responde a un ideal
equivocado o inexistente del concepto de construcción integrada en el paisaje, sin percatarse
quizá del extraordinario beneficio que supondría tener ambos conceptos presentes en aras de
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desarrollar un futuro socioeconómico próspero que permitiera la continuidad del Parque y la


subsistencia de su gente.

El Plan Rector de Uso y Gestión da cabida por tanto a todas aquellas viviendas existentes con
anterioridad a su declaración bajo ciertos condicionantes, adaptándose a la evolución del
macizo y declarando algunos asentamientos más que inicialmente no se contemplaron.

Veamos un ejemplo donde


nos planteamos si es
suficiente que cumpla la
normativa edificatoria del
PRUG 2007 y planteamos la
pregunta ¿esta construcción
se puede poner en todas las
parcelas de 400m2 en
Anaga?

Un planeamiento equivocado
en Canarias parece cada día
más, atentar a la lógica del
desarrollo sostenible
permitiendo la creación de
núcleos urbanos o agrícolas
poco contemplativos con la
realidad del entorno
Fig.1 Una posible edificación acorde con la normativa del PRUG.
Si queremos aprender del
pasado, visitemos La Laguna, Tacoronte, El Sauzal. En el Casco de la vecina ciudad de San
Cristóbal de La Laguna, hoy declarada Patrimonio Mundial, hay edificaciones, que cumplieron
los condicionantes de las construcciones tradicionales que estipulaba el Plan de Ordenación de
la época, tanto en el Proyecto técnico como en su construcción. Pasadas décadas siguen
cumpliendo la normativa y por decirlo “benévolamente” chocando en las principales calles, hoy
objeto de las visitas turísticas. No se trata de que estén presentes elementos tradicionales, sino
el conjunto de la eficacia encontrada a lo largo de la historia de las edificaciones locales.

Lo tradicionalmente local no es una concesión romántica, es el resumen de los aciertos


acumulados en esos lugares. Aciertos que hoy podemos adecuar y reencontrarnos con ellos
analizando parámetros bioclimáticos. Pensemos en las urbanizaciones limítrofes a los
Acantilados de Tacoronte y El Sauzal, donde se han realizado construcciones, siendo el
determinante la “parcela de la urbanización” y no los condicionamientos que hoy englobamos
como parámetros bioclimáticos. En los atardeceres, sean hermosos como suelen ser, no
durante minutos sino horas, la incidencia solar y por tanto el calor, hace que las zonas “en
plano” de más “calidad” pierdan su funcionalidad y confort durante esas horas.

Estas referencias a fracasos reales en la ejecución de elementos tradicionales y no a su


ubicación en un conjunto funcional en la zona donde se edifica, las debemos aplicar a la
normativa de Anaga, en la que hay que considerar “a priori” su repercusión en el paisaje. No
sigamos dejando crecer un planeamiento en Canarias, que cada día más, atenta contra la
lógica del futuro sostenible, permitiendo la creación de núcleos urbanos o agrícolas poco
contemplativos con la realidad del entorno.

3.- CONDICIONANTES DE EFICIENCIA


Es básico recuperar el saber consolidado en la tradición constructiva, compartirlo con la
sistematización del conocimiento científico-técnico, como son los parámetros bioclimáticos, y
aplicarlo a Anaga, atendiendo a aspectos fundamentales tales como temperatura, humedad,
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viento, radiación solar…, ya que influyen directamente en la sensación de confort para las
personas. Por tanto, una vivienda ubicada en una zona tal que todos estos parámetros estén
estudiados y se solventen sus carencias a través de los métodos adecuados, contribuirá a una
mejora de las condiciones de vida.

El modelo de despilfarro, es compatible con el descenso de liberación de CO2, si no se


controla el de emisión de calor. En las islas encontramos ejemplos en positivo y en negativo.
Un ejemplo duro, en otro espacio natural, el Parque Nacional del Teide, un edificio el del
Parador de Las Cañadas del Teide. Se le dota de aire acondicionado, para subir de categoría
de dos estrellas a más. Primera cuestión, al salir del Parador a la sequedad predominante del
ecosistema, la sensación no es positiva. Segunda cuestión, el consumo energético, al igual que
para la piscina climatizada, es de un motor de combustión, que vierte a la atmósfera que no se
ve, pero es la misma que sigue una de las pocas estaciones mundiales que analizan el cambio
climático. En síntesis, es solo cuidar la fachada visible.

Si, en Anaga, las condiciones de convivencia con el paisaje son de fachada y en el interior de
la vivienda se debe consumir energía extra para; un deshumidificador por las humedades, aire
acondicionado para…, se avanza poco. No vale que las fuentes energéticas sean alternativas y
perfectamente adaptadas al paisaje. En las urbes hay soluciones que no son aplicables, pero
otra cosa es Anaga.

Comparemos soluciones acertadas en una de las zonas de Taganana desde el pasado y la


aplicación de la obstrucción por la topografía a la insolación, como base para la toma de
decisiones de ocupación del terreno edificable, hay que utilizar más parámetros que el % de la
pendiente de la ladera.

Fig.2.- Esquema de radiación sobre una sección sur norte de ladera en Taganana, donde tradicionalmente se tenía en
cuenta este parámetro. (Elaboración propia)

Atendiendo a la radiación solar, si se analizan las sombras producidas por la obstrucción


debida a la accidentada orografía de los relieves geográficos y que la pendiente es norte,
se podrían determinar aquellas zonas óptimas para el máximo aprovechamiento de la
radiación solar. La arquitectura tradicional contemplaba en muchas ocasiones estas
condiciones que no solo se plasmaban en la ubicación u orientación de la vivienda sino
también en su diseño y aprovechamientos naturales. Actualmente parece que esta
tendencia ha ido disipándose derivando en un urbanismo disperso y poco caritativo con
el medio, más pendiente de los intereses individuales que del conjunto de la comunidad.
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La realización de un mapa de sombras


de Anaga permitiría seleccionar
aquellas zonas del territorio cuyas
condiciones sean las óptimas para el
uso que se le pretenda dar. Este mapa
tiene en cuenta las obstrucciones
solares derivadas del relieve que
conforma el entorno. Para conseguir el
confort es necesario recibir
determinadas horas de soleamiento al
día algunos meses del año. Si
analizamos el asentamiento de
Taganana (Fig.3) se aprecia que la
evolución urbanística ha derivado en
un urbanismo disperso y que atiende a
intereses individuales.

En este mapa de sombras de


Taganana se ha tomado como
referencia diferentes horas de
soleamiento sobre el relieve los días
21 de diciembre, concretamente a las 9
horas de la mañana, las 12 horas del
mediodía y las 15 horas de la tarde,
considerándose que es en las horas
centrales del día en las que más
radiación puede recibirse.
Fig.3.- Sombras producidas por la obstrucción solar de los
relieves geográficos en Taganana (Elaboración propia ).

Conclusiones

El potencial del Macizo de Anaga, debe reencontrarse con la cultura y uso de las
características bioclimáticas en las edificaciones, potenciando el confort, tanto en el turismo de
visita, como el de estancia rural o de deportes marinos. Es necesario potenciar foros de
intereses y de soluciones, Un escenario idóneo, para alguno de ellos, sería el Foro Europeo,
ubicado en La Laguna.

Referencias
De Luxán García de Diego M. y Reymundo Izard A. (Parte II) Sostenibilidad energética de la
edificación en Canarias.Manual de diseño. www.renovae.org/mabican (Posibilidad de descarga
gratuita). Instituto Tecnológico de Canarias (2011).

Martín Hernández, Ulises (Coord.) Historia general de la comarca de Anaga. Ediciones Idea
(2006).

Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Rural de Anaga, (2007).

Siverio Rodriguez, R. Pérez Albaladejo González, E. De León Fernández-Oliva, I. Trabajo


fin de carrera” El uso residencial en el Parque Rural de Anaga (2011).

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