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V CONGRESO NACIONAL
DE ARQUEOLOGÍA
VOLUMEN I
Ministerio de Cultura
Av. Javier Prado Este 2465, San Borja
Lima, Perú
Reproducido por
Pentagraf SAC
Jr. Pomabamba 770, Breña
Lima, Perú
Índice
1 Las 2 hectáreas identificadas en los trabajos anteriores corresponden al espacio entre los Sectores 1 y 2.
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Figura 1. Plano del sitio arqueológico de San Blas. Se especifican el área de cada uno los sectores.
el registro de las capas, lográndose registrar un total de la dureza y la tonalidad. Es de anotar que, a partir de la
seis capas, correspondientes todas a los últimos momen- Capa 3, hay mayores concentraciones de cerámica y
tos de ocupación del sector. La composición de estas solo la Capa 4 es completamente distinta, pues corres-
capas fue bastante homogénea, formadas por tierra y ponde a un nivel de arcilla no cocida que sólo pudo iden-
fragmentos de cerámica, diferenciándose solamente por tificarse en el cateo (Figura 4).
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Figura 2. Ubicación de las Unidades de Excavación. Se señala la ubicación de la Unidad de Excavación de Morales, en azul.
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Dibujo del perfil noroeste del cateo de la cuadrícula A1, en donde de observa la superposición de capas. Los triángulos representan
Figura 4.
los fragmentos de cerámica.
2016; Escacena, 2010; Flad et al., 2005; Kawashima, los 20 centímetros de diámetro en la boca, lo que per-
2012, 2015; Weller et al., 2015). La explotación se inicia mite obtener un producto estandarizado y de fácil trans-
con la extracción de la salmuera, la cual es colocada porte (Figura 5).
en un recipiente y puesta a hervir hasta quedar solo
pasta de sal. Luego, esta es colocada en un molde Estas mismas características las podemos observar en
donde se produce el proceso de secado al exponer la la cerámica más abundante encontrada en San Blas.
vasija a una fuente de calor, obteniéndose un pan de Esta cerámica tiene la forma de un cuenco abierto o
sal que es extraído rompiendo el molde. Estos moldes ligeramente cerrado que presenta una pasta anaranjada
presentan paredes muy delgadas, con un acabado o crema, con escasas inclusiones (aunque muy gran-
externo muy malo, un acabado interior alisado o con des, llegando a tener más de 1 milimetro). Tiene un aca-
pulido muy fino, y tamaños estandarizados. Además, bado exterior bastante tosco o prácticamente nulo (que
presentan tamaños pequeños, casi nunca pasando de permite observar que fue elaborado en la técnica del
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Figura 5. Diferentes tipos de moldes cerámicos utilizados en la explota- Figura 6.Perfiles de los moldes cerámicos identificados en San Blas.
ción salinera: a. China (Flad et al. 2005: Fig. 2), b. Japón (Takamune El dibujo inferior es un ejemplo de una vasija con errores de cocción.
2015: Fig. 1), c. España (Escacena 2010: Fig. 11), d. México (redibu-
jado de Castellón 2016: Fig. 35)
2 Las Ollas1 son las ollas sin cuello, las Ollas2 son las ollas con cuello y las Ollas3 son las ollas con cuello muy corto.
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Figura 9. Frecuencia de las formas cerámicas identificadas por capa.
Las áreas de actividad manera dispersa en casi toda el área excavada, teniendo
siempre menos de cincuenta bordes por cuadrícula
Cada capa presentó características particulares, (Figura 10a). En el espacio de la cuadrícula E1, casi no
por lo que se presentará la descripción de cada una se registraron fragmentos de cerámica, pero sí un área
por separado: de tierra quemada que habría sido utilizada y vinculada
con el uso de las Ollas1, cuyos desechos se esparcieron
Capa 1a: presenta una mayor presencia de las Ollas1 alrededor. Siendo así, esta área se habría usado para el
(Figura 9), cuyos fragmentos de bordes se distribuyen de hervido de la salmuera. Junto con estos espacios, existe
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Figura 10. Distribución de las Ollas1 por cuadrícula: a. Capa 1a, b. Capa 1b, c. Capa 2, d. Capa 3a.
un área (cuadrículas B3, C3 y D3) con una baja frecuen- (Figura. 10c),
al igual que los Moldes (Figura 12b). La con-
cia de fragmentos cerámicos. Este espacio se estaría centración de fragmentos en las cuadrículas A1, B1 y C1,
utilizando como área de tránsito entre diferentes áreas corresponde entonces a varias formas y no está indi-
de producción (hervido de salmuera en la cuadrícula E1 cando un área de producción específica. Por otro lado,
y un área de producción no identificada hacia la Fila 4 la concentración en la cuadrícula F3, se estaría rela-
en adelante) (Figura 11). cionando con actividades fuera del área de excavación.
Consideramos que esto se debe al uso del espacio como
Capa 1b: el número de Ollas1 registradas se mantiene un lugar de desecho, con un área de tránsito entre las
constante y el número de Moldes aumenta (Figura 9). La cuadrículas A3 y F1, la cual comunicaría diferentes áreas
distribución de las primeras se concentra en las cuadrí- de producción, cuyo carácter no podemos precisar.
culas D2, E2 y F2 (Figura 10b), mientras que los Moldes se
concentraron en la cuadrícula A3 (Figura 12a). El espacio Capa 3: esta capa presenta características similares en
de la cuadrícula E1 se usó también como área para el sus tres decapados. Sin embargo, se presentarán los
hervido de salmuera. Finalmente, la baja frecuencia de dos últimos de manera conjunta debido a que solo se
cerámica en la Fila 3 indica que, en este decapado este registraron en el cateo de la cuadrícula A1:
espacio también se utilizó como área de tránsito.
• Capas 3a1 y 3a2: estos dos decapados presentan
Capa 2: presenta las mismas características que la características similares, por lo que el material re-
Capa 1a, en cuanto a la proporción de formas cerámicas gistrado se analizó de manera conjunta. Los Moldes
(Figura 9). Las concentraciones de Ollas1 están separadas son la forma más común, las Ollas1 son escasas y
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Figura 11. Dibujo de planta de la distribución de la cerámica de la Capa 1a. La flecha azul señala el área de tierra quemada, mientras que las
flechas rojas señalan el espacio con escasa cerámica registrada.
Figura 12. Distribución de los Moldes por cuadrícula: a. Capa 1b, b. Capa 2, c. Capa 3a, d. Capa 3b.
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Figura 13. Dibujo de planta de la distribución de la cerámica de la Capa 3a. La flecha azul señala la concentración de Moldes, las flechas rojas
señalan el área con escasa cerámica registrada, y la flecha amarilla señala un área de tierra quemada.
las demás formas casi han desaparecido (Figura 9). en la Columna A, disminuyendo progresivamente
Las Ollas1 se concentran en las cuadrículas D2, E2, hacia la Columna C (Figura 12d). Al igual que en el
F1 y F2 (Figura 10d), cerca del área quemada en la decapado anterior, consideramos que el espacio
cuadrícula D1, mientras que los Moldes se concen- comprendido en las Columnas A y B fue un área de
tran solamente entre las Columnas A y B (Figura 12c). producción de panes de sal.
Se pueden definir dos áreas de producción diferen-
ciadas (Figura 13): hervido de salmuera en Ollas1 y • Capas 3c y 3d: presentan un alto porcentaje de
secado de panes de sal en Moldes. Por último, existe Moldes (99 %), con una presencia mínima de las
un espacio casi libre de material a lo largo de la Fila demás formas (las cuales habrían llegado de manera
3. Por lo que consideramos que se trata de un área fortuita) (Figura 14a). Consideramos que el espacio se
de tránsito, con otra probable área de producción en utilizó para la producción de panes de sal.
la que sería la Fila 4. Esta área hipotética estaría re-
lacionada con la tierra quemada en la cuadrícula E3. Capa 4: En esta capa, compuesta casi totalmente por
arcilla, el 99 % del material registrado corresponde a
• Capa 3b: este decapado fue registrado en la mitad fragmentos de bordes de Moldes (Figura 14b). El único
del área de excavación, entre las columnas A, B y fragmento de Cántaro habría llegado allí de manera for-
C. Presenta una diferencia bastante grande entre tuita, por lo que consideramos que este espacio también
la cantidad de bordes de Moldes y el resto de las se utilizó para la producción de panes de sal. La gran
formas, que prácticamente han desaparecido cantidad de arcilla cruda se debería a su uso como área
(Figura 9). Los Moldes se concentran principalmente de producción de moldes.
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Figura 14. Frecuencia de formas cerámica por capas.
Capa 5: En esta capa, compuesta casi totalmente por para el hervido de la salmuera, definiendo así otra área
cerámica, el 99 % del material registrado corresponde de actividad. Las excavaciones de Morales (1977) se
a fragmentos de bordes de Moldes (Figura 14c). El único encuentra al este de la nuestra, muy cerca de nuestras
fragmento de Olla3 habría llegado allí de manera fortuita, columnas E y F, y registraron un aumento en la canti-
por lo que consideramos que este espacio también se dad de cerámica desde el Formativo Tardío. De todas
utilizó para la producción de panes de sal. las formas definidas, fueron las ollas las más numero-
sas. Planteamos que este espacio fue utilizado, desde
Capa 6: El 95 % de los bordes registrados correspon- el Formativo Tardío hasta las últimas ocupaciones del
den a Moldes (Figura 14d). Esta diferencia porcentual es Sector 1, para la misma función: el hervido de salmuera.
buena evidencia de una especialización en la producción Mientras que el espacio en donde se encuentran nues-
de panes de sal en el área ocupada por la cuadrícula A1 tras columnas A y B se trataría del área utilizada para la
y el espacio adyacente. producción de panes de sal, concentrando una mayor
cantidad de Moldes (Figura 15). Esta sería la razón por la
Gracias a este análisis, pudimos identificar un patrón que Morales encuentra una menor cantidad de moldes
en las áreas de actividad a lo largo de la secuencia de en su excavación. Durante la ocupación de la Capa 2
capas registradas. Desde la Capa 6 hasta la Capa 3 el área pasa a ser un espacio de desecho, con un área
hay un uso constante del espacio comprendido entre de tránsito que recorre diagonalmente nuestra unidad
las columnas A, B y C para la producción de panes de desde la cuadrícula A3 a la F1. Finalmente, durante
sal con los Moldes. Esta fue la única actividad reali- la ocupación de la Capa 1, se volvió a utilizar como
zada en ese espacio, pues la presencia de otro tipo de área de producción. El número de moldes disminuyó
vasijas es fortuita. En contraste, durante la ocupación y aumentó el de ollas, utilizándose el espacio para el
de la Capa 3, el espacio de las columnas E y F con- hervido de salmuera con el fogón en la cuadrícula E1 y
centra fragmentos de Ollas1, las cuales se utilizaron un área de tránsito en la Fila 3.
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Figura 15. Dibujo de planta de la ubicación de la Unidad de Excavación A, junto a la excavación de Daniel Morales. El círculo azul señala el
área en donde se identificaron fragmentos de Ollas1, el círculo amarillo señala el área en donde se concentran los moldes, y la flecha verde
señala el área con escasa presencia de cerámica.
Debemos señalar que el área de producción de cerá- similares, sino idénticos, a la cerámica tardía de la región
mica también se mantuvo constante a lo largo de casi (Morales, 1998; Parsons et al., 2000). Esta cerámica pre-
toda la secuencia identificada. Las columnas A y B con- senta cocción oxidante, a veces incompleta, y con inclu-
centraron esta actividad hasta la ocupación de la Capa siones de tamaño medio. Los motivos están pintados
2, mientras que durante la ocupación de la Capa 1, esta en color rojo diluido con algunos diseños que desapa-
área se desplazó a nuevos espacios hasta el abandono recen posteriormente, pero desde ya se tienen las clá-
final del montículo. sicas bandas horizontales, motivos en U y líneas sinuo-
sas (Figura 16). Estas características son las mismas que
la cerámica San Blas Fino, definida por Parsons et al.
(2000), con la salvedad de que su acabado es tosco y
La cerámica San Blas Tosco Temprano presenta mucha variabilidad en la cocción, lo que eviden-
cia que se encontraba en una etapa de experimentación.
En los contextos registrados, también pudimos identifi- Hemos decidido llamarla San Blas Tosco Temprano, que
car la presencia de una cerámica pintada con motivos es la evidencia más temprana de la que sería luego el
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Figura 16. Cerámica San Blas Tosco Temprano identificada en las excavaciones de la Unidad A.
San Blas Fino. Este material está asociado a la cerámica en moldes y áreas de tránsito que conectan diferentes
Cochachongos, Higueras y Huarpa (Morales, 1977), ori- espacios productivos. Además, se pudieron registrar
ginarias de los valles del Mantaro, Huallaga y Ayacucho moldes cerámicos para la elaboración de panes de sal,
respectivamente, por lo que podemos situar la ocupa- que son un producto estandarizado que se podía usar
ción final del Sector 1 en los inicios de los Desarrollos para el intercambio interregional. Estos moldes empeza-
Regionales Tempranos (Benavides, 1971; Browman, ron a ser utilizados en el Formativo Tardío y continuaron
1970; Izumi y Terada, 1972). hasta inicios de los Desarrollos Regionales Tempranos,
permitiendo que San Blas distribuya sal hacia regio-
nes como Huánuco o el valle del Mantaro, evidenciado
por los diversos estilos asociados a esta ocupación.
Conclusiones Además de estos moldes, pudimos registrar la fase más
temprana de la cerámica pintada de la región para los
Las excavaciones en la Unidad A del PIA San Blas per- Desarrollos Regionales Tardíos, conocida como San Blas
mitieron registrar áreas de actividad asociadas a la explo- Pintado (Morales, 1998) o San Blas Fino (Parsons et
tación salinera en el sitio. Estas consistieron en áreas de al., 2000). El uso de esta cerámica dataría del 200 a.C.,
quema para el hervido de salmuera, áreas de secado aproximadamente.
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