08 de diciembre de 2019

NO TE RINDAS. CONFÍA COMPLETAMENTE EN EL REY

Recuerda orar antes de leer toda la sección y comentar. Es importante que todos estemos unidos en la fe de buscar y
esperar de Su iluminación en nuestras reuniones.
1. Contesta y medita en tu casa
Lee Lucas 18:1-8, Efesios 1:17, Efesios 1:3-5 y contesta:
a) ¿Cuál es el propósito de Jesús para que los discípulos oren en todo tiempo de acuerdo a
esta parábola? ¿Para qué los quiere preparar?
b) ¿Cuáles son las dos cosas que Jesús contrasta en esta parábola?
c) ¿Cómo vives tu vida de oración actualmente? ¿Es rutinaria, mecánica? o ¿afectiva,
profunda y genuina? ¿Cómo estás creciendo en tu conocimiento de Dios y su amor por ti?
Lee Lucas 18:9-14, Lucas 15:29-30, Hebreos 2:17, 2 Corintios 5:21, Romanos 5:17-19
d) ¿Te has sentido alguna vez propenso a sentirte confiado en ti mismo como este fariseo en
algún área de tu vida? ¿Batallas para reconocer alguna evidencia de orgullo en tu vida
cuando otros te lo hacen saber?
e) ¿Son tus oraciones más peticiones de ayuda por necesidades externas en tu vida, o clamas
por ayuda por tu necesidad interior y perdón de pecado?
f) ¿Qué significa que alguien sea justificado por Dios?
Lee Lucas 18:15-17
g) ¿A qué se refiere Jesús cuando dice que los que no reciben el Reino de Dios como estos
niños no entrarán en él?
2. Reflexión, Aplicación Personal
Medita esta semana en estos pasajes (Lucas 18:1-17), y evalúa tu propia relación personal con Dios en
medio del diario vivir, ¿Estás perseverando en conocerle y amarle a Él? ¿Te sientes seguro como amado
y escogido de Él? Piensa si estás respondiendo en fe sin distraerte en las cosas buenas de la vida diaria,
confiando en El completamente o si hay algo que te está estorbando. Persevera en buscarle para que te
siga revelando áreas de necesidad de tu vida o de pecado que necesites reconocer y busca maneras de
como mostrar amor a los demás, empatía y compasión.
3. Oración Personal
Ora pidiéndole al Señor que te ayude a perseverar en fe y esperanza en El, y que te revele qué cosas de
la vida diaria, que son buenas, te están distrayendo de tu comunión y amor por Él, de confiar
completamente en su amor. Y por último ora al Señor, para que te conceda un amor creciente por las
personas de tu alrededor, dándote un corazón de gracia y compasión por ellas, para que puedan recibir el
Reino de Dios en sus vidas por medio de Jesús.