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Metamorfosis, escuela y BECREA.

1. ​Buenos días, antes que nada deseo mostrar mi profundo ​agradecimiento a la organización que
ha tenido a bien invitarme a esta I Jornada de Bibliotecas Escolares. Es para mí una tremenda
emoción encontrarme entre ustedes. Al tiempo que ​felicito por la iniciativa. Como veremos más
adelante es crucial la implicación de las diferentes instancias públicas y sociales para el impulso
de las bibliotecas escolares.

1.1. ​Y por otro lado, es de justicia ​nombrar en este auditorio a quien estaba invitado a venir y no
ha podido por razones de diferente índole, que es mi maestro José García Guerrero, el artífice de
las redes profesionales de bibliotecas escolares de Andalucía e inspirador de prácticas de éxito
en diversos lugares de España.

1.2. Bien, el ​título Metamorfosis, escuela y BECREA​, muestra la necesidad de adentrarnos en la


relación entre estas tres realidades y cómo según la concomitancia que entre ellas se establezca,
podemos aventurarnos a encontrar respuestas sobre cómo impulsar las bibliotecas escolares. En
el ya difícil de articular binomio biblioteca-escuela, introducir un tercer elemento tiene como
objetivo vincular la transformación no solo a la biblioteca, sino a la escuela al completo.

2. Rápidamente les cuento que haré una breve introducción que contextualice los objetivos de
esta comunicación, a continuación, con ánimo de provocar la reflexión conjunta, formularé una
serie de interrogantes sobre la situación de las bibliotecas escolares. Terminaré definiendo el
concepto BECREA y en qué medida se encuentra ligado a las demandas educativas y sociales
sobre la educación y las bibliotecas escolares. Finalmente trataré de concluir con una invitación.
El recorrido se verá ilustrado por la exposición de algunas prácticas de bibliotecas escolares de
Andalucía, concretamente de Granada, la provincia en la que trabajo.

3.​ A modo de introducción aprovecho la siguiente cita de un autor amante de las bibliotecas:
Porque no hace falta quemar libros si el mundo empieza a llenarse de gente
que no lee, que no aprende, que no sabe.
(…)
Si nos aseguramos de que al cumplir los seis años cualquier niño en
cualquier país puede disponer de una biblioteca y aprender casi por
ósmosis; entonces las cifras de drogados, bandas callejeras, violaciones y
asesinatos se reducirán casi a cero.
Ray Bradbury, Fahrenheit 451.

Y es que creo que aún ​no se tiene suficiente conciencia ​de los beneficios que aportan las
bibliotecas escolares no ya a cada chico o chica, sino a la sociedad que los cuida. Para quienes
nacimos en un mundo sin libros, sabemos perfectamente las dificultades y desventajas para
acceder a la cultura y que podrían haber sido compensadas por la existencia de una biblioteca
escolar. Este es el punto de partida de esta conferencia: la constatación de que las bibliotecas
escolares tienen gran importancia en la educación de chicos y jóvenes.

3.1. La presentación irá de la mano de álbumes ilustrados, ese maravilloso recurso que tanto
aporta a nuestras bibliotecas y al fomento del gusto por la lectura.

4​. Comenzamos con uno que imagino la mayor parte del auditorio conoce y es esta oruga glotona
de Eric Carle.

Cuenta esta historia que había una vez una pequeña oruga que comía y comía todo cuanto
encontraba, pues difícilmente hallaba la forma de saciar su necesidad de alimento. Y lo hacía sin
control, de modo que en ocasiones le dolía el estómago.

Esta amada historia nos va a servir de ​metáfora para hablar sobre la situación actual de las
bibliotecas escolares, al menos, en el mundo en el que compartimos idioma. Como refiere Goldin
en la presentación del texto Bibliotecas y escuelas. Retos y posibilidades en la sociedad del
conocimiento, “en nuestro idioma ha sido poco y muy superficialmente discutido -y aún menos
investigado- el papel que juegan en la actualidad las bibliotecas en la formación de una
ciudadanía plena y democrática.”

Las bibliotecas escolares ​tienen esa perentoria necesidad de alimentarse​, como le ocurría a
nuestra pequeña oruga. Y en esta situación llevamos mucho tiempo ya. Se formulan teorías, se
realizan estudios de la situación... Pareciera que existe la intención de nutrirlas, aunque
lamentablemente, lo que se comprueba a poco que se mire, es que, salvo honrosas excepciones,
padecen una gran debilidad y desatención. El organismo vivo, como las define Cristina Novoa
(2017), se ve sometido a grandes oscilaciones normativas y lo que es aún peor, a la manifiesta
escasez de recursos humanos y materiales.
5. Continúan en muchos centros educativos relegadas a ser un almacén de libros o mero espacio
expendedor de los mismos. Siempre hay un motivo que justifica la demora en atenderlas como se
necesita. Primero fue la necesidad de la alfabetización universal, después la crisis… La realidad,
es que han sido desbancadas de la centralidad que les corresponde y que ya les reconocían
Giner de los Ríos, Sarmiento, Vasconcelos o José Gaos, tal como se cita en el texto
anteriormente mencionado.

Arrinconadas​, han sido excluidas de la escuela y es por ello que si las buscamos en la escuela, la
imagen que percibimos es la de algo desdibujado, lejano, débil, infrautilizado y carente de sentido
en muchas ocasiones, por ajeno a la vida del centro. Sucede así, que muchos docentes no saben
en realidad a qué nos referimos cuando hablamos de biblioteca escolar, pues para mayor
dificultad, en contadas ocasiones las han tenido como referente en su propia formación
académica.

6. Volvamos de nuevo a nuestra pequeña oruga glotona. ​La ​metáfora de la crisálida nos puede
ayudar a explicar las siguientes ideas. Por más que sea una palabra hermosa, al interior
percibimos un ser que intenta protegerse para seguir viviendo, para transformarse en lo que está
llamado a ser. Y dentro de ese entorno creado nos encontramos a aquellos docentes,
responsables de bibliotecas escolares, equipos directivos, que pese a todo, intentan seguir
construyendo desde la precariedad y con dosis ingentes de voluntarismo e ilusión por el trabajo
que realizan. Pero ¿qué sucede en el interior de esa crisálida?

7. ​A esta realidad de la que venimos hablando se suman los cambios sustanciales en nuestra
sociedad debido fundamentalmente a la irrupción y posterior omnipresencia de internet y la
tecnología de la comunicación en nuestra vida. Y es aquí donde nos tenemos que detener un
poco a reflexionar sobre las relaciones entre dicho cambio, la escuela y la biblioteca escolar.

¿Qué escuela tenemos y cuál necesitamos? ¿Qué lugar tiene la biblioteca en ella? ¿Son
realidades separadas? ¿Puede la biblioteca promover innovación, dar respuesta a los cambios
que la sociedad demanda a la educación? ¿Para adaptarse a los nuevos tiempos es la escuela la
que tiene que cambiar o es la biblioteca?

8. ​Evidentemente ​las respuestas que se formulen a estas preguntas conllevan una teoría
educativa que la respalde y sobre todo, un concepto de escuela y biblioteca. Y en realidad, no
están exentas de complejidad, pues las preguntas también lo son. Particularmente apuesto por la
adhesión a las voces que apuestan por ver la biblioteca escolar como escuela misma. Ya lo
recogen las directrices IFLA de 1999, también en 2002 Guillermo Castán decía que era preciso
revisar la relación entre biblioteca y escuela de modo que esta no se convierta ni en un satélite, ni
en mero instrumento. En 2014 José García Guerrero afirmaba: “Las bibliotecas escolares son
escuela. Su acción está vinculada a ella. Su futuro está ligado al futuro de la escuela.” De nuevo
la IFLA, en las orientaciones de 2015 dice: “Una biblioteca escolar opera dentro de una escuela
como un recurso de enseñanza y aprendizaje que ofrece programas de instrucción activa
integrada en el contenido curricular”. Y en mayo de este mismo año, Glòria Durban escribe:
“Considerar la biblioteca escolar como espacio educativo a la medida del proyecto de centro es
clave”.

Por mi puesto de trabajo he tenido la fortuna de visitar muchos centros y en este tiempo he
comprobado que ​si la biblioteca no está apoyada en el proyecto educativo del centro, si no forma
parte de la realidad educativa del día a día del mismo, podrá realizar actuaciones importantes y
necesarias, qué duda cabe, pero será también plenamente prescindible​, como lo son las joyas
para la vida de un cuerpo humano. He constatado que sólo en aquellos centros donde se ha
realizado una apuesta definitiva por un modelo pedagógico en el que se incluye el uso de la
biblioteca como parte del proceso educador del centro, esta adquiere la condición de centralidad
que estábamos reclamando al principio de la intervención.

9. ​Es en este punto del discurso cuando cabe definir el modelo de biblioteca escolar centro de
recursos para la enseñanza y el aprendizaje, BECREA. Este modelo fue definido por José García
Guerrero allá por el año 2000. En este modelo, sin renunciar a su esencia, se perfilan como ​un
recurso estable del centro -son escuela misma- ​al servicio de toda la comunidad educativa. Pues
junto al alumnado, extienden sus servicios al profesorado, a las familias y también a la comunidad
extensa próxima al centro. Para cada sector la biblioteca tiene algo que ofrecer y a su vez, cada
sector tiene su campo de actuación y participación en la misma. Por ello las BECREA programan
en su plan de trabajo acciones para toda la escuela en sentido amplio.

10. Decir que las bibliotecas, todas, están ​ligadas al aprendizaje, a la investigación y al
conocimiento, es hablar de su ser bibliotecario mismo. Mas en esta propuesta es interesante
cómo se incide, poniéndolo al mismo nivel, en las posibilidades que la biblioteca ofrece para el
proceso de enseñanza. Justamente la inclusión en su propio nombre del término enseñanza, es lo
que la relaciona directamente con el proyecto educativo del centro, que como vimos
anteriormente, es crucial para que pasen de ser prescindibles a necesarias. Aquí encontramos la
dimensión curricular​ de las BECREA.

11. Proyecto de aprendizaje servicio. La Paz Cuenta. Preparan actividades para después del
cuento que llevan a un centro de Primaria.

12.​ Maratón de cuentos. Carpa lectora.

13. Conocemos excelentes BECREA que apoyan tanto los procesos de enseñanza como de
aprendizaje ofreciendo recursos para ser usados por el alumnado o el profesorado, o por ambos,
en todas las áreas del centro -también las no lingüísticas-, que apoyan y ayudan a perfilar la
idiosincrasia del centro, así como los planes, programas y proyectos sobre los que éste apuesta,
con una clara ​dimensión pedagógica en el centro y donde se configura como ​agente mediador y
formador​.

14. Apoyo de la biblioteca a un proyecto sobre la Alhambra en el que el alumnado realiza vídeos
en los que, a modo de guías turísticos, explican diferentes zonas del monumento. Se movilizan
las competencias lectoras, de expresión oral, de uso de la información para crear contenido y
digital, amén de las capacidades de relación personal. PAZEO ALHAMBRA.

15. ​Si antes se ofrecían libros, en nuestros días, como consecuencia de los cambios a los que
antes nos referimos en la sociedad del conocimiento, los recursos de la biblioteca pueden verse
ampliados, enriquecidos o sustituidos por contenido digital, redefiniendo de ese modo, el término
recurso. Lo cual ha modificado también el tratamiento que puede hacer la BECREA sobre ellos.
Se habla entonces, de una tarea nueva, content curation, o curación de contenidos, para quienes
prefieran usar los términos más próximos al español y que en términos generales alude ​al
tratamiento que se da a los contenidos digitales ​-habitualmente en ingentes cantidades donde
naufragar- de modo que se seleccionan y filtran para ser usados por algún sector del centro. Si a
ello se le da algún tipo de formato que los recopila a través de una aplicación digital -Symbaloo,
Netvibes, Pearltrees o Padlet, que son las más usadas- hablamos de los entornos informacionales
específicos.

16. Las BECREA tienen también una ​dimensión socia​l por cuanto se constituyen en entornos para
la comunidad. No solo por el espacio que ofrecen para ello -ya de por sí interesante como lugar
de libertad, creatividad e imaginación-, sino porque sus acciones pueden favorecer la creación de
comunidades fuertes que se mueven para alcanzar objetivos y metas comunes:

Destaco la labor de Biblioverdesil, la BECREA de Huétor Tájar, que ha logrado que toda la
comunidad educativa: profesorado, alumnado, familias y agentes de la localidad, se concentren
en alcanzar un objetivo común: la concientización sobre el cuidado del medio ambiente. Lo que se
inició como un proyecto anual liderado por la biblioteca para todas las clases de la escuela acabó
en el rodaje de una película en la que aparecen todos los miembros de la comunidad educativa.

17. Por supuesto, la BECREA tiene otra función importante, ​compensadora de desigualdades​, de
la que justamente hablamos en la introducción y que en la actualidad está también ligada al hecho
de ofrecer acceso y formación digital, fuente de una nueva brecha de desigualdad. Proyecto
robótica Ana.

17.1. El mismo García Guerrero las define: “Cuando hablamos de BECREA estamos hablando de
un entorno de enseñanza y aprendizaje con capacidad de articular programas y dinámicas de
trabajo vinculadas al fomento de la lectura y a las competencias digitales, informacionales y
mediáticas.”

18. ​Tal vez sea momento de responder a alguna de las preguntas que se lanzaron para la
reflexión.

Si la escuela no cambia se hace imposible acoger este modelo de biblioteca. Aún la docencia está
muy apegada a los libros de texto, en el uso de una metodología transmisiva, donde el alumnado
desempeña un papel eminentemente pasivo. Ello está en contradicción con los requerimientos
sociales que necesitan una ciudadanía formada en habilidades basadas en recursos (búsqueda,
acceso y evaluación de los mismos), habilidades de pensamiento (capacidad crítica y capacidad
de elaborar productos), capacidades basadas en conocimientos (creación y construcción y uso
compartido de los productos del conocimiento, habilidades lectoras (leer por placer y lectura para
aprender a través de plataformas) y capacidades personales e interpersonales (relacionadas con
la participación social y cultural y con la capacidad de aprender a aprender).

Junto a los cambios metodológicos, urge rediseñar otros aspectos que están muy ligados al
ámbito metodológico, tales como la cultura organizativa de los centros en cuanto al personal y los
recursos, así como las relaciones y las prioridades.
19. ​Para profundizar e​n la necesaria transformación entre otros, aconsejo leer estos dos textos. El
primero analiza cada uno de los cambios que deben acometer las bibliotecas toda vez que el
centro en

A la par, la BECREA, acompañando los procesos de cambio en la escuela, tendrá que acometer
cambios que respondan a las nuevas realidades comunicativas, lectoras y escritoras e
informacionales.

20. Este esfuerzo de la escuela y de la biblioteca tiene necesariamente que ir acompañado de


acciones concretas de la administración educativa​.

21.​ Básicamente, para que la metamorfosis pudiera tener lugar habría que atender a:
- Dotarlas de desarrollo normativo que las regule y las proteja.
- Crear redes de profesorado.
- Procurar la formación del profesorado. Tanto del que las atiende, como del resto que las
va a usar, así como de los equipos directivos.
- Visibilidad. Que la comunidad educativa en particular y la sociedad en general, conozcan
la importancia y trascendencia de las bibliotecas.
- Evaluación y supervisión, como se hace con el resto de elementos del proceso de
enseñanza-aprendizaje.
- Dotación de recursos materiales y económicos.
- Reconocimiento para el profesorado que las atiende.

22. El taller de las mariposas, de Gioconda Belli nos servirá para ​finalizar y realizar una invitación
concreta. La de seguir soñando y luchando para que finalmente podamos contemplar la
metamorfosis.
23. Odaer pudo sentir cómo los pensamientos de todos empezaban a imaginarse el mundo lleno
de mariposas, y se llenaban de felicidad.
Pensó que sus momentos de tristeza, de angustia y soledad, sus noches de desvelo, no habían
sido en vano. También de sus lágrimas había nacido la Mariposa.
Pensó que como recuerdo de sus esfuerzos, y para que nadie se engañara creyendo que la
belleza no costaba trabajo, haría que las ​mariposas fueran primero ​orugas que luego se
transformarían en el insecto más bello de la Creación. Por último, pensó que era cierto lo que le
había dicho su amigo Perro: los sueños se hacían realidad. El secreto estaba en no cansarse
nunca de soñar y no darse por vencido.

24.​ Bibliografía:
Castán, G. (2002). ​Bibliotecas escolares, soñar, pensar, hacer.​ Sevilla: Díada Editora.
Bonilla, E. (coord.), Goldin, D. (coord.) y Salaberria, R. (coord.) (2008). ​Bibliotecas y escuelas.
Retos y posibilidades en la sociedad del conocimiento​. Barcelona: Océano.
Novoa, C. (2017). Biblioteca escolar, un organismo vivo. Forum Aragón, [online] (21), pp. 8-15.
Recuperado de: ​https://issuu.com/feaearagon/docs/forumaragon21
Durban, G. (2019). ​Las bibliotecas escolares han pasado a ser una opción pedagógica que cada
centro puede asumir o bien descartar. [Mensaje en un blog]. Bibliotecaescolarinfo. Recuperado
de:​ ​http://bibliotecaescolarinfo.blogspot.com/2019/05/las-bibliotecas-escolares-han-pasado.html
Durban Roca, G., García Guerrero, J., Pulido Villar, A., Lara Escoz, J. I. y Olmos Olmos, D.
(2013). ​Nuevas Dinámicas para la biblioteca escolar en la sociedad red. Resituar sus acciones y
acompañar la transformación de la escuela.​ Sevilla: Junta de Andalucía.
García-Guerrero, J. (2014). Bibliotecas escolares con futuro.​ [ebook]. Fundación Germán Sánchez
Ruipérez. Recuperado de: ​ ​https://cutt.ly/xLbeUO
International Federation of Library Associations. (1999). ​Manifiesto biblioteca escolar.​ Recuperado
de: ​https://www.ifla.org/ES/publications/ifla-unesco-school-library-manifiesto-1999
International Federation of Library Associations (2002). ​Directrices de la IFLA/UNESCO para la
​ ecuperado de​ ​https://archive.ifla.org/VII/s11/pubs/sguide02-s.pdf
biblioteca escolar. R

25.​ Muchísimas gracias por su atención.

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