Sei sulla pagina 1di 20

Derecho

matrimonial

Derecho Privado
VI (Derecho de
Familia)
Derecho matrimonial
Matrimonio
A continuación, estudiaremos el matrimonio como institución jurídica
trascendental que se mantiene a través del tiempo y que origina cambios
personales y patrimoniales en la vida de las personas que se someten a
ella.

Definición y naturaleza jurídica

El derecho se ha preocupado desde antaño por regular jurídicamente la


institución del matrimonio. Esta institución ha ido variando con el paso del
tiempo, siendo primero una institución regulada por la Iglesia, que se
celebraba obligatoriamente con formas religiosas, para luego secularizarse.

Asimismo, la esencia de la institución del matrimonio en nuestro país ha


ido variando a lo largo de los siglos, conforme a los cambios culturales y
sociales propios de la evolución de cada sociedad. Comenzó como una
unión permanente e indisoluble entre un hombre y una mujer, regulada
por los cánones de la iglesia católica, que solo podía culminar con el
fallecimiento de alguno de los esposos, pasando por grandes
transformaciones hasta llegar al ordenamiento jurídico actual. Hoy
concebimos el matrimonio como una unión entre personas de distinto o
igual sexo, en la cual la disolución es posible, entre otras causas, por la
voluntad de uno o ambos cónyuges a través del divorcio, sin invocación de
causa y sin un plazo establecido para solicitarlo.

Es una institución jurídica que, basada en el consentimiento mutuo, se


constituye por la unión formal, aconfesional o civil, exclusiva, exogámica,
igualitaria, estable y plena entre dos personas de distinto o igual sexo, que
emplaza a los contrayentes en el estado de familia de cónyuges o esposos
del que se derivan importantes derechos y deberes regidos por un estatuto
legal que el Estado impone.

Se distinguen en el concepto dos aspectos:

 el matrimonio in fieri, referido a la celebración del matrimonio


como acto jurídico familiar;
 el matrimonio in facto esse, que es el estado de familia que surge
del acto jurídico inicial.
Acto jurídico y relación jurídica

La institucionalización del matrimonio se logra a través de un acto jurídico,


es decir, de un “acto voluntario lícito que tiene por fin inmediato
establecer las relaciones jurídicas conyugales”1.

Una vez celebrado el matrimonio a través del acto jurídico, se inicia la


relación jurídica matrimonial.

La relación jurídica concierne, entonces, al desenvolvimiento


de los vínculos creados por el acto jurídico matrimonial, y se
traduce en deberes y derechos interdependientes y
recíprocos entre los cónyuges. El derecho se ocupa de
regular las condiciones de existencia y validez del acto
jurídico matrimonial, cuanto las relaciones conyugales y
familiares que determina dicho acto. (Bossert y Zannoni,
2007, p. 74-75).

Como acto jurídico, el matrimonio es voluntario, ya que el consentimiento


es uno de los elementos de existencia del matrimonio, pero una vez
celebrado, los cónyuges se someten a las normas imperativas de dicha
institución (Bossert y Zannoni, 2007).

Caracteres. Fines. Principios generales que informa el


derecho argentino

Caracteres

 Formal, ya que el matrimonio se perfecciona por medio de la


celebración del acto jurídico revestido de las solemnidades que la
ley impone a los contrayentes.
 Aconfesional o civil.
 Exclusivo: el régimen monogámico excluye el comercio sexual de los
esposos con otras personas distintas de las de su cónyuge.
 Exogámico: se establecen impedimentos para contraer matrimonio
cuando haya parentesco entre los pretensos contrayentes en línea y
grado prohibido.
 Heterosexual u homosexual.

1Art. 259, Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación Argentina. Honorable
Congreso de la Nación Argentina. Recuperado de https://goo.gl/u5zYn1
 Estable, en el sentido de que se contrae con la intención de que
perdure y de que su estabilidad quede garantizada por la ley. Esto
no debe ser confundido con la indisolubilidad.
 Pleno: “No puede someterse a modalidad alguna. Cualquier plazo,
condición o cargo se tiene por no expresado, sin que ello afecte la
validez del matrimonio”2.

Principios generales que informa el derecho argentino

 Igualdad: se veda toda discriminación en razón de la orientación


sexual de sus integrantes y del género (como lo dispone la
Convención para la Eliminación de todas las Formas de
Discriminación contra la Mujer, con jerarquía constitucional
conforme al artículo 75, inc. 22, de la Constitución Nacional [en
adelante, CN]3).
 Avance de la autonomía de la voluntad y libertad de los cónyuges: a
partir de la Ley 26994, que sancionó un nuevo Código Civil y
Comercial, se avizora un avance en la autonomía de la voluntad en
materia matrimonial, el cual se vislumbra en un principio de mayor
libertad de los cónyuges en la construcción, vida y ruptura
matrimonial, por ejemplo, en la posibilidad de elección de los
cónyuges del régimen patrimonial matrimonial, el divorcio con
expresión de causa y sin plazo de espera para solicitarlo, etcétera.
 Solidaridad familiar: el límite a la autonomía de la voluntad está
impuesto por el deber de solidaridad familiar que rige en materia
matrimonial. Conforme a ello, el Código Civil y Comercial de la
Nación (CCCN) establece que los esposos se deben asistencia mutua
(art. 431, CCCN) y también se deben alimentos entre sí durante la
vida en común y la separación de hecho (art. 432, CCCN).

Fines

Nuestro ordenamiento jurídico no ha establecido cuáles son los fines del


matrimonio civil. Antes de la sanción del Código Civil y Comercial de 2014,
si bien tampoco estaban descriptos, se infería que estos fines estaban
implícitos en los derechos y deberes que tenían los cónyuges entre sí, es
decir, fidelidad, asistencia y cohabitación.

En el nuevo Código, se enumeran los siguientes derechos-deberes de los


cónyuges: el deber de establecer y desarrollar un proyecto de vida en

2 Art. 408, Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la
Nación Argentina. Recuperado de https://goo.gl/u5zYn1
3 Ley N. 24430. (1994). Constitución de la Nación Argentina. Honorable Congreso de la Nación

Argentina. Recuperado de https://goo.gl/ea75oW


común basado en la cooperación, el deber de convivencia, el deber moral
de fidelidad (art. 431, CCCN), de asistencia mutua (art. 431, CCCN), de
alimentos (arts. 432 a 434, CCCN), de contribución (art. 455, CCCN). Sin
embargo, cabe advertir que la mayoría de ellos son incoercibles, atento a
que no conllevan sanción jurídica alguna, salvo el de contribución y el de
alimentos, que tienen un contenido patrimonial.

Por lo tanto, y según la Dra. Olga Orlandi (2014):

La esencia del matrimonio se constituye en el compromiso a


desarrollar un proyecto de vida en común basado en la
mutua asistencia y cooperación. Los cónyuges se proponen
ejecutar, aunar fuerzas internas sustanciales para el logro de
su proyecto de vida autorreferencial. (P. 10).

Es decir que, con los límites impuestos por la solidaridad familiar, son los
cónyuges quienes deben determinar a qué quieren obligarse durante la
relación matrimonial.

Requisitos de existencia y validez

El matrimonio, como acto jurídico, es subjetivamente complejo y está


constituido no solo por el consentimiento de los contrayentes, sino
también por el acto administrativo que implica la intervención de la
autoridad competente para celebrar el matrimonio. Los elementos
estructurales del acto son condiciones de existencia; la ausencia de alguno
de estos provoca su inexistencia, lo cual no equivale a invalidez o nulidad.

 Inexistencia: cuando el aparente matrimonio carezca de alguno de


los elementos estructurales que hacen a la formación, es decir, el
consentimiento y la intervención constitutiva del oficial público
encargado del Registro Civil. Este no producirá efectos civiles,
aunque las partes hubieran obrado de buena fe.
 Nulidad: cuando el acto jurídico matrimonial tiene vicios o defectos
de legalidad originarios, que existen al tiempo de la celebración del
matrimonio (Bossert y Zannoni, 2007).

Para que exista matrimonio válido y lícito, es necesaria la reunión de


requisitos intrínsecos, o de fondo, y extrínsecos, o de forma. Los primeros
son consentimiento y ausencia de impedimentos, y los extrínsecos implican
que dicho consentimiento sea expresado personalmente frente al oficial
público.
Aptitud natural: habilidad física y mental

La ley reconoce que, para un acto de tal importancia personal y jurídica


como el matrimonio, es necesaria cierta madurez. Se pretende, así,
asegurar mayor responsabilidad para el trascendente acto de la vida civil
que significa contraer matrimonio.

Nuestro Código Civil y Comercial, en el artículo 403, inciso f, establece que


es impedimento para contraer matrimonio tener menos de 18 años.

Sin embargo, hay que diferenciar cabalmente la situación de los menores


que no han cumplido los 16 años de la de aquellos adolescentes que tienen
entre 16 y 18 años.

Para el caso de los adolescentes que tienen entre 16 y 18 años, expresa el


artículo 404 que ellos pueden contraer matrimonio con autorización de sus
representantes legales. Esta autorización también está contemplada en el
artículo 645, en el cual se enumeran los actos para los cuales los menores
requieren el consentimiento expreso de sus progenitores, estableciéndose,
entre otros, que lo requerirán los hijos adolescentes de entre 16 y 18 años
para contraer matrimonio. Si los padres o uno de ellos se niegan a prestar
el consentimiento, supletoriamente debe decidir el juez.

Distinto es el caso de los menores de 16 años, para el cual la ley exige,


como requisito ineludible, la dispensa judicial. La dispensa judicial en
materia matrimonial es el mecanismo mediante el cual una autoridad
competente procede al “levantamiento de la prohibición que obstaculiza el
matrimonio” (Méndez Costa, 2001, p. 290).

A los fines de obtener la dispensa judicial, la norma establece que el juez


debe mantener una entrevista personal con los pretensos contrayentes y
sus representantes legales, en donde el juez indagará acerca del
conocimiento y entendimiento de los efectos tanto patrimoniales como
personales del acto jurídico matrimonial que tengan los adolescentes. Así,
la norma establece que la decisión judicial debe tener en cuenta la edad y
grado de madurez alcanzados por la persona, referidos a la comprensión
de las consecuencias jurídicas del acto matrimonial. Respecto a la opinión
de los representantes legales, si bien será tenida en cuenta por el
magistrado, esta no es vinculante a la decisión judicial.

Una vez que el menor de 18 años haya contraído matrimonio, el


casamiento emancipa al menor de edad, teniendo en cuenta que, si se
hubiere celebrado sin la correspondiente dispensa, el matrimonio será
pasible de nulidad relativa.
Mención especial merece el caso configurado por el pretenso matrimonio
entre el tutor o sus descendientes con la persona bajo su tutela. En este
caso, se profundizan los recaudos legales y no bastará con que el juez
arribe a la convicción sobre la conveniencia de las nupcias (Herrera y
Lorenzetti, 2015), sino que, además, requerirá que estén aprobadas las
cuentas de la tutela. Este recaudo obedece a la necesidad de proteger el
patrimonio del pupilo, impidiendo que el tutor o sus descendientes puedan
aprovecharse del matrimonio para no rendir debidamente las cuentas de
este. Si, no obstante, el tutor o sus descendientes contrajeren matrimonio
sin estar aprobadas las cuentas de la tutela, corresponde la sanción
descripta en el artículo 403 infine, que establece que el tutor perderá la
asignación que le corresponda sobre las rentas del pupilo.

Habilidad mental

Si bien el artículo 403, inc. g establece, como impedimento matrimonial, “la


falta permanente o transitoria de la salud mental que le impide tener
discernimiento para el acto matrimonial”4, a este impedimento hay que
complementarlo con lo dispuesto en el artículo 405, el cual, bajo el
paradigma no discriminatorio, y respetando la ley de salud mental y los
principios de Naciones Unidas para la protección de enfermos mentales y
para el mejoramiento de la atención de salud mental, establece que las
personas que padezcan afecciones en su salud mental puedan celebrar el
matrimonio, previa dispensa judicial.

Los requerimientos para otorgar dicha dispensa son:

 Intervención de equipos interdisciplinarios: los cuales emitirán un


dictamen que exprese si el pretenso contrayente comprende las
consecuencias jurídicas del acto matrimonial y si goza de la aptitud
para la vida de relación conyugal.
 Entrevista personal: la norma establece que el juez debe mantener
una entrevista personal con los futuros contrayentes, pudiendo
también hacerlo con sus representantes o cuidadores.

Aptitud legal: impedimentos. Definición.


Clasificación
Los impedimentos matrimoniales son los hechos o situaciones que
importan un obstáculo para la celebración del matrimonio. En palabras de
Herrera y Lorenzetti, son “las prohibiciones, limitaciones y restricciones

4Art. 403, Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la
Nación Argentina. Recuperado de https://goo.gl/u5zYn1
que el ordenamiento jurídico impone al derecho a contraer matrimonio
condicionando la capacidad para casarse de las personas” (2015, p. 572).

Clasificación

 Por la índole de la sanción:


o Dirimentes: aquellos cuya violación habilita el ejercicio de la
acción de nulidad del matrimonio.
o Impedientes: aquellos cuya violación no da lugar a dicha sanción,
sino que se resuelven en sanciones de otro tipo o bien cumplen
solo una función preventiva, de modo que si el oficial público que
los conoce debe negarse a celebrar el matrimonio, una vez
contraído ninguna consecuencia jurídica produce su
inobservancia.
 Por las personas respecto a las cuales se aplica:
o Absolutos: los que obstan a la celebración del matrimonio con
cualquier persona (falta de edad legal).
o Relativos: los que solo representan un obstáculo con respecto a
personas determinadas (parentesco).
 Por el tiempo de vigencia:
o Perpetuos: no desaparecen por el transcurso del tiempo
o (parentesco).
o Temporales: desaparecen o están sujetos a extinción por el
transcurso del tiempo (falta de edad legal).

Efectos de los impedimentos

 Son causa de oposición a la celebración del matrimonio y de


denuncia.
 Son causa de negativa del oficial público a la celebración del
matrimonio.
 Dan lugar a sanciones civiles: la nulidad del matrimonio, en el caso
de impedimentos dirimentes, y sanciones diversas, en el caso de los
impedientes.
 Dan lugar a sanciones penales: artículo 134 a 137 del Código Penal,
delitos de matrimonios ilegales (cap. I del título “Delitos contra el
Estado Civil”).

Momentos de actuación de los impedimentos

La existencia de los impedimentos matrimoniales opera fundamentalmente


en dos momentos distintos:
a) antes de la celebración del matrimonio: como causa de oposición a su
celebración por parte de los legitimados a oponerse (410 y 411, CCCN)
y, respecto a cualquier persona, como fundamento de la denuncia de
su existencia ante la autoridad competente para celebrar el matrimonio
(412, CCCN);
b) después de la celebración del matrimonio: operarán como causa de
nulidad de las nupcias si se trata de impedimentos dirimentes o de la
aplicación de sanciones civiles o penales en su caso de conformidad a lo
establecido por los artículos 134 a 137 del Código Penal.

Figura 1: Impedimentos dirimentes, artículo 403 del CCCN

Fuente: elaboración propia.

Figura 2

Fuente: elaboración propia.

Figura 3
Fuente: elaboración propia.

Figura 4

Fuente: elaboración propia.

Figura 5

Fuente: elaboración propia.


Impedimentos impedientes

Los impedimentos impedientes son meramente prohibitivos en el sentido


de que, si el matrimonio se celebra, es válido, aunque, por haber sido
irregularmente celebrado, conlleva sanciones para los contrayentes.

Falta de aprobación de las cuentas de la tutela (artículo 404 in fine):

La dispensa para el matrimonio entre el tutor o sus


descendientes con la persona bajo su tutela sólo puede ser
otorgada si, además de los recaudos previstos en el párrafo
anterior, se han aprobado las cuentas de la administración.
Si de igual modo se celebra el matrimonio, el tutor pierde la
asignación que le corresponda sobre las rentas del pupilo…5

Como vemos, en este caso no se sanciona con la nulidad, sino con la


pérdida de la asignación que le hubiere correspondido sobre las rentas del
pupilo.

El consentimiento

La noción de consentimiento propia del acto jurídico bi o


multilateral, supone la convergencia de dos o más
manifestaciones de voluntad en un objeto-fin determinado.
El consentimiento matrimonial es la convergencia de dos
voluntades internas y manifestadas, en la entrega y
aceptación mutua de los contrayentes para generar el
consorcio vial que es el matrimonio. (Méndez Costa, 1990,
p. 137).

“Se ha repetido que el acto jurídico matrimonial descansa en el


consentimiento de los contrayentes que es, estructuralmente, una
condición de existencia”6.

5 Art. 404, Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la
Nación Argentina. Recuperado de https://goo.gl/u5zYn1
6 Art. 406, Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la

Nación Argentina. Recuperado de https://goo.gl/u5zYn1


Los requisitos esenciales del consentimiento matrimonial son su contenido
interno y su manifestación en persona por los contrayentes ante la
autoridad competente para concurrir a la celebración del matrimonio.

El artículo 408 del CCCN exige que el consentimiento de los contrayentes


debe ser puro y simple, es decir que “no puede someterse a modalidad
alguna”, y que “cualquier plazo, condición o cargo se tiene por no
expresado, sin que ello afecte a la validez del matrimonio”7.

Vicios: artículo 409 del CCCN

Son los que inciden sobre alguno de los elementos del acto voluntario;
tradicionalmente, error, dolo o violencia.

El artículo 271 del CCCN define el dolo del siguiente modo:

Acción dolosa es toda aserción de lo que es falso o


disimulación de lo verdadero, cualquier artificio, astucia o
maquinación que se emplee para la celebración del acto. La
omisión dolosa causa los mismos efectos que la acción
dolosa, cuando el acto no se habría realizado sin la
reticencia u ocultación.8

El dolo viene a calificar la conducta de quien, mediante la maniobra,


artificio o maquinación, ha inducido al otro contrayente a contraer
matrimonio.

La violencia se traduce en una fuerza irresistible o amenazas “que generan


el temor de sufrir un mal grave e inminente que no se puedan
contrarrestar o evitar en la persona o bienes de la parte o de un tercero”9.

El error es el vicio del consentimiento consistente en el falso conocimiento


que se tiene de algo, la discordancia o disconformidad entre la realidad y la
imagen mental que de ella se forma en quien lo sufre.

El artículo 409 del CCCN establece, efectivamente, que vician el


consentimiento “el error acerca de la persona del otro contrayente” y:

7Art. 408, Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la
Nación Argentina. Recuperado de https://goo.gl/u5zYn1
8 Art. 271, Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la
Nación Argentina. Recuperado de https://goo.gl/u5zYn1
9 Art. 276, Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la
Nación Argentina. Recuperado de https://goo.gl/u5zYn1
el error acerca de las cualidades personales del otro
contrayente si se prueba que, quien lo sufrió, no habría
consentido el matrimonio si hubiese conocido el estado de
cosas y apreciado razonablemente la unión que contraía. El
juez valorará la esencialidad del error considerando las
condiciones personales y circunstancias de quien lo alega.10

Diligencias previas a la celebración

A continuación, estudiaremos las diligencias previas a la celebración del


matrimonio, particularmente lo atinente a la oposición a la celebración de
este y la denuncia de impedimentos.

Oposición a la celebración del matrimonio

Figura 6

10Art. 409, Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la
Nación Argentina. Recuperado de https://goo.gl/u5zYn1
Fuente: elaboración propia.
La oposición reputada válida impide la celebración del matrimonio (art.
184, CCCN).

Denuncia de impedimentos

Cualquier persona puede denunciar la existencia de algunos de los


impedimentos desde el inicio de las diligencias previas y hasta la
celebración del matrimonio ante el ministerio público, para que este
deduzca, si corresponde, la correspondiente oposición (art. 412, CCCN).

Celebración del matrimonio


En este apartado estudiaremos cómo se lleva a cabo la celebración del acto
jurídico matrimonial, tanto en su forma ordinaria como extraordinaria.

Formas ordinarias

El artículo 418 establece que el matrimonio debe celebrarse públicamente,


con la comparecencia de los futuros cónyuges, ante el oficial público del
Registro Civil, con la presencia requerida de dos testigos de conocimiento
de los que quieren casarse, que declaren sobre su identidad y su aptitud
nupcial. El número de testigos requeridos se elevará a cuatro cuando el
matrimonio se celebra fuera de la oficina del Registro Civil.

A partir del momento en que los que pretenden casarse se han presentado
ante el oficial público encargado del Registro Civil, mediante la solicitud
que prevé el artículo 416, puede suscitarse la oposición al matrimonio o en
su caso la denuncia de impedimentos.

El oficial público persuadido de que no existen impedimentos


matrimoniales y de que son hábiles quienes pretenden casarse, celebrará
el matrimonio.
La celebración del matrimonio se consigna en un acta que debe contener
(art. 420):

a) fecha del acto;


b) nombre y apellido, edad, número de documento
de identidad si lo tienen, estado civil, nacionalidad,
profesión, domicilio y lugar de nacimiento de los
comparecientes;
c) nombre y apellido, número de documento de
identidad, nacionalidad, profesión, y domicilio de sus
respectivos padres, si son conocidos;
d) lugar de celebración;
e) dispensa del juez cuando corresponda;
f) mención de si hubo oposición y de su rechazo;
g) declaración de los contrayentes de que se toman
por esposos, y del oficial público de que quedan unidos en
matrimonio en nombre de la ley;
h) nombre y apellido, edad, número de documento
de identidad si lo tienen, estado de familia, profesión y
domicilio de los testigos del acto;
i) declaración de los contrayentes de si se ha
celebrado o no convención matrimonial y, en caso
afirmativo, su fecha y el registro notarial en el que se
otorgó;
j) declaración de los contrayentes, si se ha optado
por el régimen de separación de bienes;
k) documentación en la cual consta el
consentimiento del contrayente ausente, si el matrimonio es
celebrado a distancia.

El acta debe ser redactada y firmada inmediatamente por


todos los que intervienen en el acto o por los que lo hagan a
ruego de los que no supieren o no pudieren firmar.

El oficial público debe entregar a los cónyuges, de modo


gratuito, copia del acta de matrimonio y de la libreta de
familia expedida por el Registro de Estado Civil y Capacidad
de las Personas.11

“Si uno o ambos contrayentes ignoran el idioma nacional, deben ser


asistidos por un traductor público matriculado y, si no lo hay, por un
intérprete de reconocida idoneidad, dejándose debida constancia en la
inscripción”12.

Formas extraordinarias

11 Art. 420, Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la
Nación Argentina. Recuperado de https://goo.gl/u5zYn1
12 Art. 419, Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la

Nación Argentina. Recuperado de https://goo.gl/u5zYn1


Las modalidades extraordinarias de celebración del matrimonio son: el
matrimonio en artículo de muerte (matrimonio in extremis) y el
matrimonio a distancia.

El matrimonio in extremis (art. 421, CCCN) contempla el caso de que


alguno de los contrayentes se hallase en peligro de muerte y desease
celebrar el matrimonio ante la eventualidad, inminente, de fallecer.

Para esta hipótesis excepcional, se autoriza al oficial público a celebrar el


matrimonio con prescindencia de todas o algunas de las formalidades que
deben precederle, si se justifica con el certificado de un médico, o con la
declaración de dos vecinos donde no hubiere médicos, que alguno de los
futuros esposos se encuentra en peligro de muerte.

Para estas mismas hipótesis, si no se hallare el oficial público, encargado


del Registro Civil, se dispone que el matrimonio podrá celebrarse ante
cualquier magistrado o funcionario judicial –por ejemplo, un juez de paz
del lugar o el secretario del tribunal–, el cual deberá levantar el acta con las
enunciaciones que exige el artículo 420, que después deberá remitir al
oficial público para que la protocolice.

Respecto al matrimonio a distancia o entre ausentes (art. 422, CCCN), el


artículo 406 del CCCN exige, además del consentimiento, que este sea
prestado por ellos personalmente ante la autoridad competente para la
celebración del matrimonio.

En matrimonio entre ausentes, se admite que el consentimiento sea


prestado por uno de los contrayentes aunque el otro esté ausente si este,
luego y ante el oficial del Registro Civil de su domicilio o del lugar en que se
encuentre, expresa también su consentimiento; el matrimonio queda
entonces válidamente celebrado. La permisión del matrimonio entre
ausentes es excepcional.

El artículo 422 del CCCN regula el matrimonio a distancia, considerándose


tal aquel en el cual el contrayente ausente ha expresado su consentimiento
personalmente ante la autoridad competente para celebrar matrimonios
del lugar en el que se encuentra. Las normas reglamentan el matrimonio a
distancia disponiendo:

a) el deber del oficial público de verificar que los contrayentes no se


hallan afectados por impedimentos para contraer matrimonio y de
efectuar el control de mérito acerca de las causas que justifican la
ausencia de uno de los contrayentes;
b) el deber del contrayente ausente de haber expresado
personalmente su consentimiento ante la autoridad competente
para autorizar matrimonios del lugar en el que se encuentra;
c) la documentación que acredita el consentimiento del ausente tiene
una vigencia limitada en el tiempo; debe ser ofrecida –es decir,
presentada ante el oficial público que celebrará el matrimonio
recibiendo el consentimiento del contrayente presente– dentro de
los 90 días de la fecha de su otorgamiento;
d) el matrimonio se reputa celebrado en el lugar en que se presenta el
consentimiento que perfecciona el acto.

Autoridad competente. Formalidades

Tal como explicáramos ut supra, la autoridad competente para celebrar el


matrimonio es el oficial público encargado del Registro del Estado Civil y
Capacidad de las Personas correspondiente al domicilio de cualquiera de
los pretensos contrayentes. Sin embargo, el artículo 407 del CCCN, en una
clara postura favor matrimonii, establece que:

la existencia del matrimonio no resulta afectada por la


incompetencia o falta de nombramiento legítimo de la
autoridad para celebrarlo, siempre y cuando al menos unos
de los contrayentes hubiera procedido de buena fe, y
aquellos ejercieran sus funciones públicamente.13

Esta norma implica que “se privilegia la existencia del matrimonio cuando
el encargado de celebrarlo aparentara contar con la competencia o con la
designación correspondiente y por lo menos uno de los cónyuges no
conociera la realidad de la situación” (Bueres, 2015, p. 334).

Las formalidades para la celebración están expresadas en los artículos 417


a 420 para las formas ordinarias y con las excepciones que expresamos
acerca de las formas extraordinarias de celebración del matrimonio
(matrimonio in extremis y matrimonio a distancia).

Prueba del matrimonio

Cuando se alude a la prueba del matrimonio se atiende a su necesaria


oponibilidad. El acto matrimonial que emplaza en un determinado acto de
familia exige esa oponibilidad. El artículo 423 del CCCN establece que “el
matrimonio se prueba con el acta de su celebración, su testimonio, copia o

13Art. 407, Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la
Nación Argentina. Recuperado de https://goo.gl/u5zYn1
certificado, o con la libreta de familia expedidos por el Registro del Estado
civil y Capacidad de las Personas”14.

La prueba supletoria

Procede exclusivamente cuando existe la imposibilidad de presentar


testimonio, copia o certificado del acta de matrimonio o, en su caso, la
libreta de familia.

Quien invoca la celebración del matrimonio y pretende probarlo por otros


medios debe acreditar la imposibilidad de obtener aquellos. Probada la
imposibilidad, el hecho constitutivo de la prueba supletoria será la
celebración del matrimonio (por ejemplo, la declaración de testigos que
asistieron al acto o que concurrieron a la fiesta de bodas, participaciones
de casamientos, etcétera).

En el mismo trámite de la información sumaria, se prueba la imposibilidad


y la celebración del matrimonio.

14Art. 423, Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la
Nación Argentina. Recuperado de https://goo.gl/u5zYn1
Referencias
Bossert, G. y Zannoni, E. (2007). Manual de derecho de familia. Buenos
Aires, AR: Astrea

Bueres, A. J. (2015). Código Civil y Comercial de la Nación analizado,


comparado y concordado. Buenos Aires, AR: Hammurabi.

Herrera, M. y Lorenzetti, R. L. (Dirs.). (2015). Código civil y Comercial de la


Nación comentado (Vol. 3). Buenos Aires, AR: Rubinzal Culzoni.

Ley N. 24430. (1994). Constitución de la Nación Argentina. Honorable


Congreso de la Nación Argentina. Recuperado de
http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/0-
4999/804/norma.htm

Ley N.° 26994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable


Congreso de la Nación Argentina. Recuperado de
http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/verNorma.do?id=235975

Méndez Costa, M. J. (1990). Derecho de familia. Santa Fe, AR: Rubinzal


Culzoni.

Orlandi, O. E. (2014). Matrimonio: los principales cambios en el derecho


sancionado. En A. Kemelmajer de Carlucci y M. Herrera (Dir.as), Suplemento
especial Código Civil y Comercial de la Nación. Familia (pp. 1-16). Buenos
Aires, AR: La Ley. Recuperado de
http://www.colectivoderechofamilia.com/wp-
content/uploads/2015/05/Nuevo-Suplemento-C%C3%B3d.-Civil-primera-
parte.pdf

Potrebbero piacerti anche