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Resumen

En este informe mostraremos todo lo relacionado a la gentrificación que pudimos


encontrar en el recorrido “Reencuentro con la memoria histórica de Cartagena”
y como está afectando este proceso a la ciudad y las problemáticas que día a
día enfrentan los principales afectados de ello.

Introducción
En Cartagena tenemos problemas sociales que nos golpean a diario como la
gentrificación, es uno de los procesos que más está afectando a nuestra ciudad,
más que todo por los intereses económicos que hay detrás de ello. Se ha estado
dando fuertemente en barrios como Getsemaní, San Diego, Chambacù y
corregimientos de nuestra ciudad como La Boquilla. Sin embargo nos basaremos
solamente en Getsemaní ya que fue el único barrio de estos que conocimos en
el recorrido.

Contenido
Cartagena es una ciudad llena de cultura y hermosura pero más allá de eso hay
un pueblo luchando diariamente con los problemas sociales y económicos que
diariamente toman más fuerza en la ciudad. Uno de los tantos problemas que
enfrentan los cartageneros específicamente los habitantes del barrio Getsemaní
en este caso; ya que con el método de observación durante el recorrido
“Reencuentro con la memoria en Cartagena” nos pudimos dar cuenta de esta
problemática que día a día va tomando más fuerza; es la gentrificación, un
proceso urbanístico basado en que desde el capitalismo intenta recuperar ciertos
sectores urbanísticos de la ciudad, despojando a los habitantes de dicho sector
de una forma violenta de sus territorios, aumentando el impuesto predial y los
altos costos de los servicios públicos, haciendo que dichos afectados no puedan
cancelar estos impuestos viéndose en la difícil situación de vender sus
propiedades; este fenómeno es más que todo por los intereses económicos
detrás de ello.
Getsemaní, un barrio muy tradicional y popular de la ciudad, muy cerca del centro
turístico; mientras realizábamos nuestro recorrido y charlando con los habitantes
del sector pudimos darnos cuenta lo difícil situación que viven tratando de
sobrevivir a la gentrificación, notamos como hoy en día hay muchos hostales,
restaurantes, cafés y pocos hogares en el barrio.
Cerca de la Plaza de la Trinidad había un pequeño puesto de fritos, en el cual
charlamos con su propietario, y nos contaba que se sentían esclavos en su
mismo barrio ya que el estar allí era como “vivir como rico pero comer como
pobres” y que por el aumento de negocios en el barrio y su posición geografía
hacían que aumentara la valorización de sus viviendas y que los impuestos
prediales y los servicios públicos domiciliarios aumentaran más y más,
valorizando el sector como estrato 5, 6 y 7, viéndose obligados en vender sus
propiedades por el no tener ese ingreso monetario para pagar dichos impuestos.
También nos comentaban que a raíz de eso muchas otras cosas han venido al
barrio que para ellos era extraño y poco común, como el hecho de que en las
tardes muchos de los vecinos se reunían y conversaban con café y pan pero que
ahora eso simplemente queda en recuerdos, porque muchos se han ido y en el
barrio hay más extraños que nativos por los negocios que se han abierto; que se
ve mucho el como vienen personas ajenas al lugar a ver los murales, tomar
fotografías a compartir entre ellos sin saber de la lucha que hay de supervivencia
en el lugar.
Este barrio es un ejemplo claro de la gentrificación que se da en la ciudad, la
población nativa ha sido remplazada por negocios, bares y hoteles. También
sabemos que muchos turistas y hasta nativos de la ciudad se sienten atraídos a
este tipo de barrios por la esencia que emana de ellos como la gente, la
estructura de sus viviendas, sus tradiciones y cultura, pero muchos comerciantes
y hasta el mismo gobierno no se da cuenta de esto y no paran lo que la
gentrificación está tomando del sector; veces simplemente a los turistas les gusta
la esencia real de la ciudad y no lo que les intentan vender.

Conclusión
Debemos mantener un equilibrio en la ciudad, no debemos saturarla y afectar a
los habitantes simplemente por el hecho de la “economía” porque en realidad es
un pretexto que utilizan para tener control de la ciudad y beneficiarse de ello, sin
importar por quien tengan que pasar encima. Getsemaní se está convirtiendo en
un barrio fantasma, en cultura sin esencia, porque se la están arrebatando poco
a poco, los están obligando a irse y llegara un punto en que no reconoceremos
lo que un día fue de nosotros. Para mí lo mejor sería detenernos a pensar un
poco en lo mejor para la ciudad, sería mejor dejar la esencia del barrio y no
contribuir a que familias queden sin hogar porque esas pequeñas cosas cautivan
más que los negocios y tal vez siguieran aumentando las visitas al barrio de
turistas que se han cautivado por la verdadera belleza del sector. También esta
situación nos enseña a abrir los ojos y no tragar entero a darnos cuenta de lo
que está pasando en la ciudad y que esto nos afecta a todos.

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