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3 de diciembre de 2019
Monición de entrada
San Francisco Javier empezó a ser misionero a los 35 años y murió con tan sólo
46. En ocho años recorrió la India, Japón y varios países más, siendo su labor
misionera una de las más fructíferas que han existido. Por eso, el Papa San Pío X
le nombró Patrono de las misiones.
En esta vigilia de oración, vamos a pedirle a nuestro Patrono que nos siga ayudando
a ser una Diócesis misionera, con entusiasmo por vivir el Evangelio y trasmitirlo
a los demás, como Bautizados y Enviados.
Tengamos muy presentes en este momento de oración a todos los misioneros, en
especial, a los de Albacete, repartidos por distintos rincones del mundo. Demos
gracias a Dios y pidamos por cada uno de ellos, por sus misiones y sus gentes, para
que sientan el aliento del Señor, y el de todos y cada uno de nosotros a través de
nuestra ayuda, para afrontar cada día con esperanza e ilusión, y con el corazón
puesto en el Señor.
Y ahora, es momento de recibir al Señor entre nosotros, y comenzar así, esta
Vigilia de oración en el día de San Francisco Javier.
(CANTO)
Monición y gesto
Encendemos el Cirio Pascual (donde lo hubiese). De ahí cogemos la llama para encender las
5 velas (5 continentes), que pondremos sobre el Altar o el mejor sitio adecuado (mesa
auxiliar...). Se informa a la Asamblea de cada Continente a medida que se encienden las velas.