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Presses Universitaires du Midi

Sobre los “espacios públicos” o “espacios de comunicación” en la Comedia aristofánica


Author(s): Antonio LÓPEZ EIRE
Source: Pallas, No. 54, OÙ COURIR ? ORGANISATION ET SYMBOLIQUE DE L'ESPACE DANS
LA COMÉDIE ANTIQUE (2000), pp. 141-189
Published by: Presses Universitaires du Midi
Stable URL: https://www.jstor.org/stable/43605493
Accessed: 29-06-2019 18:48 UTC

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PALLAS, 54, 2000, pp. 141-189.

Sobre los "espacios públicos" o


"espacios de comunicación"
en la Comedia aristofánica

Antonio LÓPEZ EIRE


(Université de Salamanque)

El propósito de las páginas que siguen es el de reflexionar sobre el hecho de que en


el especial "espacio público" o "espacio de comunicación" que configura el teatro
durante las fechas del festival en que se representa la Comedia antigua griega
(concretamente, la Comedia aristofánica), todos los demás "espacios públicos" o
"espacios de comunicación" de la ciudad, de la pòlis , que son sus centros neurálgicos,
aparecen ridiculizados, expuestos como objetos risibles y criticables, y sirviendo como
de telón de fondo a la acción del héroe cómico que, contemplándolos desde su
marginalidad, intenta cambiar el mundo1 .
Para entender bien el tipo de comedia que ridiculiza los "espacios públicos" o
"espacios de comunicación" de la pòlis es menester tener bien presente que la mentalidad
de los espectadores que la contemplaban era distinta de la nuestra especialmente en dos
aspectos fundamentales que pasamos seguidamente a examinar.
En primer lugar, ellos eran hombres esencialmente "políticos", es decir, seres
humanos que no se concebían a sí mismos sin la referencia de la ciudad-estado, de la
pòlis. Nada tiene que ver esa mentalidad "política" suya con la nuestra, que es, en el
fondo, tan individualista.
En segundo término, para ellos el teatro era un "ritual", el teatro exhalaba un
fuerte aroma a rito que hoy nosotros no percibimos. Y, naturalmente, para ellos, en
consecuencia, el teatro era un ritual "político", es decir, un ritual de la ciudad.
Estas dos ideas, que, en principio, pudieran parecer extrañas, son, sin embargo, muy
fáciles de entender y percibir.
El sentido individualista que tiene nuestra palabra "vida" como acumulación de
vivencias personales, como biografía que determina el carácter de cada cual en cuanto

1 Hacemos constar nuestro agradecimiento a la DGICYT (PB 96/ 1268).

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individuo o persona, no aparece en la voz gri


helenística. Hasta esas fechas la palabra en cuestió
de vida", "duración de la existencia", pero no
vivencial de un ser humano individual que le e
muestra bien a las claras cuando decimos, por eje
o "tú haz tu vida".

Los griegos prehelenísticos llevaban todos una vida "política",


imprescindiblemente enmarcada en la pòlis. Antes del Helenismo, la vida de cada
griego era inconcebible, impensable sin el telón de fondo de la pòlis a la que, en cuanto
ciudadano pertenecía y en cuyo tejido social se integraba necesariamente.
Así se explica que en un poeta como Cratino leamos el verso siguiente:
Cratin. 256, 1-2 K-A juccicápioç qv ó 7tpò tou píoç ßporoioi / 7rpòç rà vuv,
"¡bienaventurada era la vida de los mortales antes en comparación con lo de ahora!"
La buena vida de antaño a la que se refiere el poeta era la buena vida de los
ciudadanos, de los integrantes de la ciudad. El sentido de píoç, "modo de vida humano",
es, pues, político, sencillamente porque el hombre sin la pòlis no cuenta, no vive, no
existe.

Así se explica también el sentido de la palabra Píoç en muchos proverbios o


refranes, en los que significa "el modo de vida social", como, por ejemplo: Ó 67Tl
Kpóvoi) Píoç2, "la vida en tiempo de Crono", o sea, "la Edad de Oro", es decir,
"aquellos tiempos en los que la ciudadanía vivía con el bienestar y la abundancia
propios de Jauja".
Pues bien, la Comedia aristofánica es una comedia más ritual y política que
nuestras comedias, es una comedia en la que los espectadores se ríen ritualmente de la
pòlis, de las instituciones por las que se rige (incluida la religión, que también es
"politica", es decir, ciudadana) y de los ciudadanos que la integran, pero que al mismo
tiempo no carece de momentos serios.
El poeta cómico que hacía reír a los espectadores atenienses del siglo V a. J. C. con
sus comedias, pretendía también -a juzgar por Aristófanes-, en determinadas partes de
sus obras, mejorar a sus conciudadanos aleccionándolos y dándoles buenos consejos, y así
se preguntaba frecuentemente si lo exhibido en escena era bueno o malo para la ciudad
de Atenas3. Pero, no obstante estas esporádicas admoniciones, ciertamente, el
procedimiento del que fundamentalmente se valía para cumplir la función primordial
de sus comedias (a saber, beneficiar a la ciudad y la ciudadanía) era el provocar en los
espectadores la risa, esa descarga violenta de energía reprimida que proporciona una
experiencia placentera de valor purgativo4.
En las fiestas Leneas y Dionisias Ciudadanas en honor de Dioniso el "Liberador"
(Eleutereo) se representaban, en la Atenas del siglo V a. J. C., comedias aristofánicas con

2 Arist. Ath. 16, 7.


3 D. F. Sutton, Self and Society in Aristophanes , University Press of America, Washing
1980, 1-2.
4 D. F. Sutton, o. c. 7 1.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 143

las que se producía una especie particular de risa, la risa ritual5, a base de ridiculizar a
la propia pòlis Atenas, a sus "espacios públicos" o "espacios de comunicación", mediante
el escarnio, la burla y la inversión de la conducta ordinaria.
De igual modo, en las fiestas de las Tesmoforias, que se celebraban entre los días
11 y 13 del mes de Pianopsión, las mujeres atenienses se reunían en el Tesmoforion, en
la Pnix, el centro político de la ciudad, en el que se celebraban las reuniones de la
Asamblea (la Ekklesía ), y allí ocupaban espacios, áreas normalmente reservadas a los
varones6 y practicaban conductas nada propias de las mujeres, principalmente, en
política, sacrificio, sexualidad abierta y hasta algunos aspectos de la muerte.
En el primer día de la fiesta, cuando las mujeres ya estaban reunidas, comenzaban a
manipular serpientes y genitales masculinos hechos de pasta o masa de harina mojada,
así como ramas de pino -una planta considerada buena portadora de fertilidad- y de este
modo, entre bromas, chanzas obscenas y lenguaje escrológico ( aiskhrologíd ), remedaban a
Yambe haciendo reír a la diosa Deméter7.
Esta festividad de las mujeres tiene todos los ingredientes fundamentales de la
antigua Comedia griega y además su conocimiento nos ayuda a comprender mejor la
Comedia aristofánica titulada Las Tesmoforiantes.
En principio, la festividad de las Tesmoforias significaba una ruptura en la
existencia cotidiana e invertía el orden de la normal vida ciudadana, ya que las mujeres
celebraban una asamblea y hacían propuestas de ley como si fuesen varones, y, en segundo
término, invadiendo áreas o "espacios de comunicación" ciudadanos normalmente
vedados a ellas, los ridiculizaban y los convertían en objeto de irrisión, haciéndolos
rebosar de obscenidades verbales y conductas sexuales normalmente reprobables pero
lícitas durante la celebración de esos rituales.
Pues bien, en la Comedia aristofánica quedan asimismo huellas de rituales y de
mitos, como en la festividad de las Tesmoforias, y hay también inversión del orden de
la normal vida ciudadana y un permisivo paréntesis que permite conductas contrarias a
las habituales durante la celebración de la festividad en la que las comedias se
representan, y hay, además, ridiculización de la ciudad entera, de todos sus "espacios de
comunicación", acompañada de todo tipo de obscenidades de palabra y de gesto, todo
ello con el fin de provocar la risa ritual que, sin duda, producía efectos mágicos en los
primitivos ritos destinados a la consecución de la fertilidad8.
En la Comedia arcaica griega, en general, y en la Comedia aristofánica, en
particular, están entrañablemente unidos un elemento político y un elemento ritual
como partes esenciales de su constitución. Para poner en claro este aserto, me voy a
intentar hacer ver el referido inextricable enmarañamiento de lo ritual y lo político en

5 K. J. Reckford, Aristophanes' Old-and-New Comedy 1: Six Essays in Perspective , Chapel


Hill 1987, 52 "Laughter is sacramental, and it is sacred".
6 M. Detienne, Violentes eugénies . En pleines Thesmophoriesides femmes couvertes
de sang", en M. Detienne-J.-P. Vemant, La Cuisine du sacrifice^ Paris 1979, 183-215.
' H. Dem. 203-5.

8 S. Halliwell, "The Uses of Laughter in Greek Culture", CQ

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esa especie de la Comedia antigua griega, echa


titulada Los Caballeros.
En esta pieza aparece personificado el Pueblo de Atenas en forma de un viejo de
modales rústicos, gruñón y portador de la bilis a flor de piel9. No tardamos en
enterarnos de que, además, es un taimado que se deja querer "sorbiendo su sopa boba de
cada día"10 y que se goza en que sus sucesivos ministros o mandatarios se vayan
enriqueciendo a base de robos11, para luego, cuando ya estén llenos, tomarlos por la
cintura -como se hacía en la lucha libre- levantarlos en alto y luego inmediatamente
dejarlos caer con estrépito y aparatosamente en tierra, o bien, estamparlos contra el duro
suelo12.
Vayamos ahora al verso 729 de esta comedia, que es el segundo verso con el que el
personaje Pueblo se autopresenta sobre la escena. Con él se dirige al Paflagonio y el
Morcillero, que han estado peleándose verbalmente con vehemencia en el agón. El verso
en cuestión dice así: rf|V eipeaiíúvrjv juou K0CTea7rap ochare, "me habéis hecho
trizas mi eiresione".

La eiresione era una rama de olivo o laurel con la que se entrelazaban cintas y frutos
de las cosechas que llevaban los niños en procesión de casa en casa y que se colgaba sobre
la puerta de las casas bien con ocasión de las fiestas Pianopsias o de la cosecha que se
celebraban en el mes llamado -naturalmente- Pianopsión (nuestro octubre-noviembre),
en otoño, o bien con motivo de la celebración de las fiestas Targelias, que tenían lugar
en verano, en el mes Targelión (nuestro mayo-junio)13. La voz eiresione tiene que ver
etimológicamente con la palabra eiros, que quiere decir "lana"14 y la lana, como es bien
sabido, tenía carácter mágico apotropaico.
La víspera de las Targelias (estas fiestas se celebraban el día séptimo del mes de
Targelión), un ser humano que hacía las veces de chivo expiatorio, el pharmakós , era
primeramente alimentado y muy bien tratado a expensas públicas, en el Pritaneo, para
ser más tarde perseguido alrededor de la ciudad por una muchedumbre de ciudadanos
que lo golpeaban los genitales con ramos verdes, escilas y varas de higuera y, luego, una
vez ya hubiera absorbido todo el mal de esa comunidad, era expulsado de ella -opción
más civilizada (la ateniense, entre otras)13- o bien lapidado o, sencillamente, matado.
En la versión mitológica el rito del pharmakós aparece encubierto en los mitos de los
reyes, príncipes y princesas que se sacrificaban por su pueblo.
En la comedia Los Caballeros se simula que se produce la elección de pharmakós , de
"víctima propiciatoria" para una próxima ceremonia ritual, papel que le corresponde
desempeñar a Cleón, al Paflagonio, una vez ha sido derrotado por el Morcillero,

9 Ar. Eq. 40-1.


10 Ar. Eq. 1126 ßpuXXwv ró Kctö' iļpepotv.
11 Ar. Eq. 1127-8.
12 Ar. Eq. 1129-30.
13 W. Burkert, Greek Religion: archaic ana classical trad, ingl., Oxford 1985, 101.
14 P. Chantraine, DELG , s. v. eiresione.
13 En Atenas había dos pharmakoí o "chivos expiatorios", llamados sybakkhoi> uno para los
hombres y otro para las mujeres ( FGrH 334 F 50).

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mientras que éste pasa milagrosamente, en virtud del ritual efebico y una serie d
recursos propios de los mitos de sucesión dramatizados (hasta se le hace vestir una túnic
de color verde rana), a ser Agorácrito, la esperanza de salvación de la ciudad de Atenas:
Ar. Eq. 1254-5 "íi X<*íp£ KaXÁíviKe* Kat juéjuvria' oti / avrļp veyévriaai 5
èjLié, "¡Salve, coronado por la hermosa victoria, y recuerda que te has convertido en un
hombre gracias a mí!".
Ar. Eq. 140 4-6 Kaí a' ávri toutcov eiç rò 7rpuTaveîov KaXoo / eiç rř'v
ëôpav 0' ïv' èKeivoç qaO' ó 4>apjaaKÓç. / f'E7rou Ôè Taurrļvi Xaßcov rrļv
ßarpaxtÖa, "y a ti, en pago de eso, te invito a ir al Pritaneo, al asiento que aquel
individuo ocupaba, ese "carne de horca" destinado al sacrificio para la purificación de
la ciudad ( pharmakós ). Toma esta túnica de color verde rana y sigúeme".
Ahora ya entendemos cómo es el Pueblo de Atenas que aparece personificado en la
Comedia aristofánica titulada Los Caballeros .
El Pueblo, en el espejo distorsionador de la referida comedia aristofánica, se
aprovecha de sus ministros mandatarios y cuando considera que éstos se han hartado ya
con sus continuos robos, los levanta en vilo y los estrella contra el suelo, pero además lo
convierte en chivos expiatorios, en pharmakoí , en víctimas humanas de un ritua
concreto, el ritual de las fiestas Targelias, el ritual de los primeros frutos, del primer
pan conseguido con la masa cocida procedente del primer grano, un ritual que pretendía
proteger la inminente cosecha que era nada menos que la garantía de supervivencia de la
pòlis. El Pueblo, egoísta e inconstante, tiene los mandatarios que se merece, pero ahora
el hecho de haber reemplazado al Paflagonio por el Morcillero como su tutor y d
haber sido sometido por este último a un cocimiento rejuvenecedor16 (como Medea a
Esón en el mito de los Argonautas) que le permite hacer excesos sexuales con la joven
"Tregua de los Treinta Años"17, hace presagiar el advenimiento de mejores tiempos. El
malvado Cleón, el Paflagonio, se irá a las puertas de la ciudad a beber el agua sucia de
los Baños Públicos18 (situados a las afueras de Atenas, a las afueras de la Puerta de
Dipilón) de la misma manera que el pharmakós ateniense era expulsado en una
procesión ritual (< apopompé ) de los muros de la ciudad de Atenas19.
Creo que queda suficientemente clara la idea de que la Comedia aristofánica no se
entiende -aunque a nosotros nos parezca que sí- sin considerarla en su constitutiv
encuadramiento político y ritual. La Comedia aristofánica es una dramatización
político-ritual de la ciudad-estado de Atenas, de sus usos y costumbres, de sus dioses, de
sus ciudadanos prominentes.y de sus "espacios de comunicación".

16 Ar. Eq. 1336 "Ooa pe ÕéÔpaxaç dyáS' cx<J)ei|/îiaaç, "¡cuánto bien me has hecho
con el cocimiento al que me has sometido 1".
17 Ar. Eq. 1391 zĶso Tiv aurcôv KararpiaKovrouriaai;, "¿puede uno ensartarla
treinta veces con su jabalina?".
18 Ar. tq. 1401 KaK Tcov paAaveitov lierai to AouTpiov, y bebera el agua sucia
de los Baños Públicos".
19 En el discurso VI de Lisias se solicita que se expulse de la ciudad a Andócides en la
ceremonia ritual de expulsión del pharmakós'. Lys. VI, 53 <|)(XpjU0iKÒv a7T07r£ļU7reiv,
"enviarle fuera de la ciudad en condición de chivo expiatorio".

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146 Antonio LÓPEZ EIRE

El "espacio público" o "espacio de comunicaci


apropiado a nuestra sociedad de comunicación de m
sociedad en la que se concede tanto privilegio a
darnos cuenta a una etapa de oralidad.
También la sociedad de la Atenas del siglo V
comediógrafo Aristófanes, era una sociedad en
tanto existían "espacios de comunicación". Y esta c
oral.
La pòlis de Atenas era ya ella misma un "espacio público" o "espacio de
comunicación" que además podía desplegarse (y de hecho se desplegaba) en sus
específicos "espacios públicos" o "espacios de comunicación" componentes a través de
las dramatizaciones que se llevaban a cabo en varias de sus festividades. Estos "espacios
públicos" o "espacios de comunicación" de Atenas eran, como hemos de ver en este
trabajo, vulnerables a las críticas de toda suerte, y justamente la comedia va a
aprovecharse de esta su vulnerabilidad, cargando las tintas, cómicamente, sobre sus
defectos.

Existían en la Atenas del siglo V a. J. C., en concreto, dos festividades, la de las


Leneas y la de las Dionisias Ciudadanas, en las que se representaban dramas, mediante los
cuales la ciudad se abría mostrándose como "espacio público" o "espacio de
comunicación" o bien exclusivamente a sus propios ciudadanos (Leneas)20 o a sus
ciudadanos y además a los aliados de la Liga ático-délica (Dionisias Ciudadanas o
Grandes Dionisias).
La ciudad aparecía representándose a sí misma, en forma positiva y negativa, como
"espacio de comunicación", reflejando, como en un espejo más o menos distorsionador,
su propia imagen de "espacio público" o "espacio de comunicación" descompuesta en sus
diferentes y específicas áreas que la integraban, es decir, en sus particulares "espacios
públicos" o "espacios de comunicación" que la conformaban.
De la misma manera, en la ceremonia del symposion , las imágenes de los vasos del
culto dionisiaco, que representaban Dionisos y sátiros animalescos rompiendo los
esquemas del hombre como ser social, actuaban como el espejo en el que el conviva
contemplaba su imagen menos divina, su animalidad dormida que yacía inerte, como en
un nido, dentro de su corazón de hombre civilizado21.
Asimismo la tragedia griega que se representaba en las mencionadas festividades,
mediante sus héroes sobrehumanos ofrecía la contemplación de la liberación de las
trabas que sujetan la humanidad y cuya violación heroica conduce al desastre. De modo
que la tragedia griega era también un espejo en el que se reflejaban las transgresiones
sociales de los límites la naturaleza humana llevadas a cabo por el héroe.

20 Probablemente, las tragedias empezaron a representarse en las fiestas Leneas de Atenas a


partir del 430 a. J. C.
21 F. Frontisi-Ducroux, "In the Mirror of the Mask", en C. Bérard-C. Bron-J.-L. Durand-F.
Frontisi-Ducroux-F. Lissarrague-A. Scapp-J. P. Vernant, A City of Images: Iconography and
Society in ancient Greece , trad, ingl., Lausanne 1989, 150-63. Cf. 156.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 147

Pues bien, la comedia griega antigua, que se representaba en Atenas bajo el


patrocinio y la atenta mirada de Dioniso, era también un espejo ("teatro", théatron , e
griego significa "lugar de contemplación"), pero no del alma del conviva, como el vino
en el symposion (recordemos que para Alceo, Teognis y Esquilo el vino era el espejo de
alma)22, ni de los excesos heroicos de determinados hombres de la ciudad, sino de la
ciudad misma por entero, de la pòlis con sus "espacios públicos" o "espacios de
comunicación", pues la comedia griega antigua, comedia política, no es, en buena parte
sino la presentación, distorsionada mediante los recursos del "humor ritual"23, de los
"espacios públicos" o "espacios de comunicación" de la ciudad-estado y de todo l
ciudadano, incluidos los dioses y prohombres de la ciudad, pues en la Comedia
aristofánica quedan mal parados unos y otros (recordemos especialmente, entre lo
dioses, al glotón y estúpido Heracles y al presuntuoso y cobarde Dioniso). Por otro lado
no todo es risa en la Comedia aristofánica, sino que hay en ella también elemento
serios, por ejemplo en las parábasis , donde Aristófanes intenta cumplir su misió
comunicativa de poeta de la pòlis 24 .
Por eso son importantes tales espacios (los llamados "espacios públicos" o "de
comunicación"), que aparecen distorsionados como objeto de mofa en las
representaciones cómicas de la comedia griega antigua de la misma manera en que los
sátiros animalescos e inhumanos aparecen pintados en los vasos de los convivas qu
comparten el rito del symposion.
La Comedia griega antigua no es la dramatización o representación dramática y
mimètica del rito de la muerte del espíritu del Año Viejo y la ascensión o triunfo del
Año Nuevo ("the decay and suspension of life in the frosts of winter and its release and
renouveau in spring"), como expuso Cornford25, a base de la procesión de los devotos de
Dioniso (la párodo en la comedia), y el agón, , que era la dramatización del comienzo de
sacrificio a través de una disputa entre el principio del bien y el principio del mal26,
la parábasis , que reflejaba el himno del kômos en la procesión fálica con el que s
invocaba al espíritu bueno y se rechazaba el espíritu malo, y el trecho de acció
dramática comprendido entre la parábasis y el éxodo, que cubriría dramáticamente el
degüello o sacrificio de la víctima hasta llegar a su resurrección o renacimiento, e
decir, a la aparición del nuevo espíritu, seguida de banquete y boda.
Hoy día, para explicar el origen de la comedia política griega, no se acepta ese
esquema, cuyas partes, sobre todo el degüello de la víctima, no se perciben en la

22 Ale. 333; Theognis 499 ss.; A. Fr. 393.


23 M. L. Apte, Humou and Laughter: An anthropological Approach , Itaca y Londres 1983
151-76.
24 Aristófanes en las parábasis de sus comedias alecciona seriamente a sus conciudadanos
Otra opinión bien distinta es la de M. Heath, Political Comedy in Aristophanes ,
Göttingen 1987, 16-21. Sobre modernos puntos de vista en torno a la cuestión de la
seriedad de las alocuciones en las parábasis , cf. P. Cartledge, Aristophanes and his Theater
of the Absurd, Londres 1990.
23 F. M. Cornford, The Origin of Attic Comedy , Cambridge 1914.
26 F. M. Cornford, 1914, 103.

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148 Antonio LÓPEZ EIRE

comedias aristofánicas conservadas, ni tampoco el


el origen de la tragedia, muy similar al de Cornfo
ambos se edificaban sobre la base de un ritual de l
en el que la fertilidad o espíritu del bien o el v
espíritu del mal o el invierno. Por otro lad
aristofánica que contiene todas las partes exigidas
ritual de Cornford es Las Avispas, pues La Paz no t
ni boda final, Las Ranas no tiene parábasis , sino u
recientes de las conservadas, Las Asambleístas y el P
mencionado esquema.
No se pueden reducir todas las comedias ari
riguroso esquema, como pretendía Cornford30,
griega antigua emplea mitos y rituales en una gran
numerosos los mitos y rituales representados, me
de Aristófanes y estas referencias proporcionan cla
de las obras en las que aparecen (estoy pensando n
Las Ranas , sino también en las fiestas de las T
Comedia aristofánica y en la mención de las f
Antesterias en Los Acarnienses y en el cómico rem
Las Asambleístas ).
Y, lo que es más importante, lo que realmente i
el ritual, es el hecho cada vez más claro de que la c
una función ritual en la ciudad-estado, que consist
en mejorar la actividad general de ésta, reintrodu
de exponerlo a las risotadas de los espectadores32.

27 G. Murray, Esquilo creador de la tragedia , trad


"ambas formas del drama son parte del ritual p
Espíritu de la Vegetación, representando la comedi
tragedia su derrota y muerte, con una sugestión, qui
28 J. G. Frazer, La rama dorada, trad, esp., 8a reimpr
2* Sobre las segundas parábasis de las comedias ari
parabasi di Aristofane, Verlag J. B. Metzler, Stuttgar
30 F. M. Cornford, 1914, VII "The plays, under all t
only a unity of structure, but a framework of tr
believe, be otherwise explained than as the surviving
31 A. M. Bowie, Aristophanes. Myth , Ritual and C
Cambridge 1993, reimpr. 1995, 292 "not trying to
for the reading of these plays... Although there may
initiation of men/women, which can be detecte
inspection each play is different from the others"
interpretación que hace este autor de las comedia
mitos.

32 P. E. Easterling, "Tragedy and ritual: cry "Woe, Woe", but may the good prevail", Métis 3
(1988) 87-109.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 149

Y esta función se realiza empleando la risa, el "humor ritual", para la liberación y


divertimiento de la comunidad, a base de, entre otros recursos y procedimientos,
escarnecer a la ciudad misma como conjunto de "espacios públicos" o "espacios de
comunicación" que fuera de los límites de la festividad eran baluartes de la vid
ciudadana.
En la comedia griega no subyace ningún rito concreto inventado por los filólogos,
sino que en ellas salen a relucir diferentes ritos y mitos oficiales de la polis Atenas que se
entrelazan con sus argumentos, con la acción de los héroes cómicos, de tal manera que
contrastan cómicamente con ella.Veámoslo:
En Las Asambleístas Praxágora y sus secuaces han planeado su golpe de estado para la
festividad de las Esciras33 y celebran su triunfo en la festividad de las Panateneas.
Resulta así que Aristófanes se las arregla maravillosamente para que la acción de sus
comedias se corresponda con esos determinados y concretos rituales oficiales. Por
ejemplo: el intercambio de ropas entre Praxágora y Blépiro, en el que tanto se insiste en
la comedia, se corresponde con la costumbre de intercambiar vestidos durante el festival
de las Esciras. Y, asimismo, entre los versos 730 y 743 de la comedia Cremes parodia la
festividad de las Panateneas, que inauguraba el año nuevo en Atenas, enumerando sus
enseres caseros como si formasen parte de la procesión de las Panateneas encargada
también de inaugurar la nueva era de gobierno comunista y de ginecocracia:
XcápEi ov ÕEÚpo, Kivax^poc, KaXf| KaXcoç /tcûv xPOMCtrcûv 0upaÇe
7TptoTTļ tcûv èjjiov, / 07TCÙÇ âv èvrerpijLipévri Kaviļc^opiļ Ç, / 7TOXXO v ç
Karoo Ôf) SuXockouç arpeiļ/ao' èjaouç. / 7TOÚ 'a0' rj Ôic|)po<)>ópoç; r'
XUTpa, Ôeúp' ë£i0r I vr' Aia juéXaivá y'* ouÔ' âv ei rò ({xxpjLiaKOv /
ëipouo' ëruxÊÇ (5 AuaiKparqç peXaíverai- /laico 7rap' auTîjv õeúp'
ï0' r' KOļLijLicūTpia. / (1)épe õeúpo rauTriv Trļv úôpíav, i3õpia(1)ópe, /
èvraú0a. ov Ôè Ôeûp', r' KiOapcoÕòç, eÇi0i, / ttoXXcxkiç dvaarqaaaá
ju' eiç èKKXqoíav / àœpi vuKioop Õià ròv opOpiov vopov. / ó rf|v
OKdt({)rļv Xaßc6v, 7rpoÍTar rà Kqpía / KÒpiCe, toùç 0aXXoúç Ka0iarrļ
7rXqoíov, / Kai tco TpÍ7roÔ' èÇéveyKE Kai rfļv Xiíku0ov. / rà xüTpí?h'
fföri Kai ròv òxXov dcļnere.
"¡Ven aquí tú, cedazo, primero de entre mis bienes, sal a la calle bonito y
bonitamente para que sirvas de portador de cesta, experimentado como estás tras
haber volteado muchos sacos míos! ¿Dónde está la portadora de silla? ¡Marmita, sal
aquí! ¡Por Zeus, sí que está negra! ¡Ni que hubieras estado cociendo el preparado con
el que Lisícrates se ennegrece el pelo!..., ¡ponte al lado del cedazo! ¡Ven aquí,
doncella de tocador! ¡Trae aquí ese cántaro, portadora de cántaro, ponlo ahí! ¡Y tú
sal aquí, solista de cítara, que muchas veces me levantaste de la cama para ir a la

33 Ar. Ec. 17-8 dv0' c5v ouveíaei xai rà vúv PouXeúpara / ooa Ixípoiç
ëÔoÇe Taîç èpaîç <J)íXaiç, "en premio por lo cual, cómplice has de ser de nuestros
planes de ahora, de cuantos en las Esciras aprobaron mis amigas". Las Esciras o
Esciroforias se celebraban en honor de Deméter y Core el día 12 del mes de
Esciroforión, nuestros Junio-Julio. Se depositaban en las bodegas pasteles en forma de
cochinillos, serpientes y falos, que eran recogidos en las fiestas de las Tesmoforias.

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150 Antonio LÓPEZ EIRE

Asamblea, de noche y a deshora, empleando el m


cuenco, que avance; ¡trae los panales de miel y po
también los dos trípodes y la aceitera! ¡Los puche
ya a paseo!".
La portadora de cesta o kanéphorosy la portadora de
cántaro o hydriáphorosy la portadora de cuenco
sobresalientes de la procesión de las Panateneas.
La habilidad de Aristófanes, justamente, consi
rituales todas esas alusiones a los ritos. Así resulta
desfilan en procesión hasta la Acrópolis para in
normalidad ciudadana. En la procesión figuran
cazuela haciendo las veces de la difróforo y hasta
bendito Año Nuevo que se esperaba en la come
mujeril impuesto por Praxágoras y sus correligiona
La comedia griega antigua, pues, no se refiere a
cómicamente muchos y variados ritos y mitos y se e
En efecto, en toda Comedia aristofánica tropezam
político, lo mítico y lo ritual.
En Los Acarniensesy junto al fuerte elemento po
comedia y que saboreamos desde el primer ver
referencias míticas y rituales: a Télefo, a las Di
festividades estas dos que incluso aparecían represen
En Las Avispas contemplamos con la risa en lo
política del simpático viejo Filocleón que, e
(ingrediente fundamental de toda comedia),
espectadores, en un efebo bien juvenil y hasta en e
efecto, con el desenfreno y desatino de los jóve
político-social, de recio sabor, no hace falta hablar; p
parlantes "Filocleón" y "Bdelicleón", así com
dikastomanía que padece el primero de los dos pers
de su indisimulable presencia.
En Las Nubes , el protagonista, Estrepsíades, se s
contraviniendo las leyes y normas religiosas y mor
salvaguarda y bienestar de la ciudad.
En La Pazy hay -como muy bien ha detec
propagandísticos que presentan a Atenas como m
rituales, pues, además de otros ritos y festividades,
se evoca la festividad de las Antesterias, que marca

34 A. M. Bowie, en su ya citado libro, es de la misma


parecen con frecuencia exageradas, subjetivas y rebus
33 Ar. V 1307; 1362.
36 A.-C. Cassio, Commedia e partecipazioney Nápoles 1985, 105-18.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 151

vida político-social e insistía sobre los delicados límites que separan la vida de la
muerte.

En Las Aves cohabitan mitos y ritos de fundación de ciudades37, pue


al margen de la voluntad de los dioses, con intensas críticas diri
naturaleza de la democracia ateniense, en general, y la situación por la q
el momento de la representación de la obra, en particular.
En la Lisístrata, se conjuga la incapacidad real de las mujeres
política y social38 con la mayor capacidad de gestión político-social que
llamado sexo débil mitos y rituales. Muchos son, ciertamente, los mito
se refieren a la lucha de sexos, por ejemplo, el de las Amazonas, que se
Pnix, y el de las Lemnias, que establecieron en Lemnos un gobie
ginecocracia39.
En Las Ranas , el emparejamiento de motivos políticos y rituales es
largo de toda la obra no menos que en la parábasis , donde, ya en la prór
los mistas que conforman el Coro enumeran delitos políticos en un cont
mistérico-eleusinio.
En Las Asambleístas , palpamos lo político mezclado con lo ritual, cuando
contemplamos a las bravas mujeres, dirigidas por Praxágora, en la Acrópólis,
empleando el limpio procedimiento constitucional -aunque sólo permitido a los
varones- de votar nuevas y novedosas leyes, una acción que las mujeres atenienses sólo
podían llevar a cabo formando parte de un ritual durante la festividad de las
Tesmoforias. En esta obra asoman, como ya hemos visto, rituales de dos festividades, las
Esciras y las Panateneas.
En el Pluto , se entrevera una visión negativa de la pòlis Atenas con el ritual del dios
(Pluto y Asclepio) que regresa a asumir sus plenos poderes después de un período de
apartamiento. El dios de la riqueza, a quien cegó el padre de los dioses y los hombres
por no respetar las fronteras que median entre los primeros y los segundos (esta envidia o
fqovno" de Zeus hacia los benefactores de la humanidad y sus celos de la prosperidad
humana son constantes en el mito y el ritual griegos), recupera la vista y es recibido
triunfalmente en las casas40.

37 W. Leschhorn, 'Gründer der Stadt'. Studien zu einem politisch-religiösen Phänomen der


griechischen Geschichte , Stuttgart 1984.
38 J. P. A. Gould, "Law, custom and myth: aspects of the social position of women in
classical Athens", JHS 100 (1980) 38-59.
39 La mujer es, en efecto, más importante en mitos y rituales que en la vida política oficial.
Por ejemplo, aparte de los innumerables ritos y mitos en los que la mujer es protagonista,
en Atenas había dos pharmakoí o "chivos expiatorios", llamados sybakkhoi , uno para los
hombres y otro para las mujeres ( FGrH 334 F 50).
40 W. Mannhardt, Antike Welt- und Feldkulte aus Nord-Europäischer Überlieferung, 2a ed.,
W. Heuschel, Berlin 1904-5, 251 ss. Se nos habla, en estas páginas, de rituales
tradicionales para la expulsión de la Pobreza fuera de las casas y de la invitación dirigida a
la Riqueza para que entre en ellas. Cf., en la Literatura griega, Hes. Op. 377 (0Ç YaP
TtXoÕTOÇ déferai èv ji£Y<xpoicnv, "pues así la riqueza se incrementa en las
mansiones"; H. Dem. 488- 9 aiiya õé oi 7réjLi7rooaiv ecķeariov èç jnéYa ôcSpa

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152 Antonio LÓPEZ EIRE

Vemos, pues, cómo la comedia política griega, la


es innegable, es, al mismo tiempo, ritual, si bien
único y estricto fijado por Cornford.
Y, lo que es más importante, lo que realmente in
festividad y el ritual es el hecho de que la comed
ciudad-estado, que consistía en mejorar la actividad
vengativa de los dioses, que sienten celos del ex
asegurando las buenas cosechas que garantice
reintroduciendo el orden en el desorden a ba
espectadores41.
Y esta función políticamente fundamental se rea
ritual", para la liberación y divertimiento de la c
ciudad misma como conjunto de "espacios públicos"
fuera de los límites de la festividad, eran baluartes d
La presentación o las referencias a los "esp
comunicación" de la pòlis Atenas en la comedia
especial interés por la razón evidente de que
aristofánica lo es) deconstruye el discurso que la pr
misma42.

Una comedia griega es una celebración pública y


pública en la que se exponían a los ciudadanos los tr
con coronas a los benefactores de la ciudad y se con
de guerra, que eran alimentados a expensas del
completa43.
El sujeto y objeto de la comedia es la propia ciudad, la pòlis , que, en cuanto
genérico "espacio de comunicación", se representa a sí misma y a sus específicos
"espacios públicos" de forma más o menos positiva (normalmente, en forma negativa y
risible)44. La ciudad, desplegando sus "espacios públicos" o "espacios de comunicación",
se autodefine a través de la tragedia y la comedia45.
Es decir, el principal objeto de la comedia política griega es el de burlarse y hacer
mofa de la propia ciudad en cuanto tal, la cual recibe este mensaje cómico, humorístico

nxoúrov, /oç dv0pGÓ7TOiç d()>evoç 0vr|TOÏ(Ji ôíõwoiv, "y al punto le envían, para
que se instale en su hogar, a Pluto, que da a los hombres mortales la riqueza". Sappho
148, 1; Hippon. 36, etc.
41 P. E. Easterling, "Tragedy and ritual: cry "Woe, Woe", but may the good prevail", Métis 3
(1988) 87-109.
42 A. M. Bowie, Aristophanes. Myth , Ritual and Comedy , Cambridge University Press,
Cambridge 1993; reimpr. 1995, 10.
43 A. Pickard-Cambridge, The Dramatic Festivals at Athens, 2a ed. revisada por J. Gould y D.
M. Lewis, Oxford 1988, 57-125.
44 S. D. Goldhill, Reading Greek Tragedy , Cambridge 1986. "The Great Dionysia and civic
ideology", JHS 107 (1987) 58-76. The Poet's Voice: Essays on Poetics and Greek Literature ,
Cambridge 1991, 167-221.
45 E. Hall, Inventing the Barbarian: Greek Self-definition through Tragedy , Oxford 1989.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 153

y burlesco, en el espacio cronológico de unos días señalados que están oficialmente


consagrados por el ritual y en los que, precisamente por eso, se permiten en ellos
determinadas actuaciones, conductas y palabras obscenas, risibles, satíricas, zahirientes,
humorísticas y burlescas. En ese espacio festivo de disfrute y relajación (Freud entendía
la risa como una súbita descarga de energía psíquica reprimida por sentimientos de
hostilidad y sexualidad)46 se entreveran lo político y lo ritual, como en los Carnavales
de la Europa medieval47.
El despliegue cómico que, en la comedia griega antigua, la ciudad hace de sus
propios "espacios públicos" o "espacios de comunicación" distorsionados contiene todos
los elementos o rasgos de "humor ritual" propios de muchos rituales y probablemente el
mismo propósito o designio que éstos48, a saber: el de restaurar o incrementar el orden
social habitual a partir del desorden mostrado mediante las conductas y palabras
anormales representadas, llenas de comicidad precisamente por su contraste con las
conductas y palabras socialmente permitidas en la vida ordinaria.
Estas especiales conductas y palabras se desarrollaban en el acotado "espacio
público" o "espacio de comunicación" indicado para la celebración de las festividades,
o sea, el teatro, y derivan en último término del "humor ritual" característico de la
dramatización de rituales religiosos que es propia de las sociedades přeli terarias49.
Según Apte, esta dramatización propia del ritual es al mismo tiempo entretenedora
y educativa ("entertaining and educational") y ello es así porque "el humor desempeña
un papel significativo en la dramatización y es con frecuencia el modo principal de
entretenimento, especialmente en sociedades preliterarias" ( "humor plays a significant
role in dramatization and is often the primary mode of entertainment, especially in
preliterate societies")50.
Los rasgos principales del "humor ritual" que Apte señala y que se reencuentran en
la antigua Comedia griega son los siguientes: muestras de la carencia de control social,
exhibición de una conducta contraria a las normas culturales vigentes, presencia de
elementos sexuales y escatológicos, burla y escarnio de los rituales, manifestación de
conductas contrarias ("contrary behaviour") -especialmente travestismo e inversión
sexual-, caricatura y escarnio de los poderosos llevada a cabo por individuos de baja
extracción social51, apariencia de desorden y caos, interacción de los ejecutantes con los
espectadores que contemplan y participan de los ritos.
En esa dinámica típica del ritual, sin que haga falta en absoluto especificar qué
ritual en concreto, pues éstos son múltiples y variados, se desenvuelve la Comedia

46 S. Freud, Wit and its Relation to the Unconscious , trad, ingl., N. York 1917.
47 J. C. Carrière, Le Carnaval et la politique , París 1979, 29-32. K. J. Reckford, Aristophanes'
Old-and'New Comedy 1: Six Essays in Perspective , Chapel Hill 1987, 3-52. S. Goldhill, The
Poet's Voice: Essays on Poetics and Greek Literature , Cambridge 1991, 176-88. D. F.
Sutton, The Catharsis of Comedy, Lanham 1944, 105-18.
48 A. M. Bowie, o. c. 10.
49 M. L. Apte, 1985, 151-76. S. Halliwell, CQ41 (1991) 294.
50 M. L. Apte 1985, 151-76.
M. L. Apte 1985, 157.

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154 Antonio LÓPEZ EIRE

Política griega, cuya función básica es burlarse de


tal, sin perdonar ninguno de sus específicos "espa
De los "espacios públicos" o "espacios de com
amplio y abarcador "espacio público" o "espacio
habla, efectivamente, en las comedias aristofánica
de la pòlis, dentro de ese otro "espacio público" o
que era el teatro.
La palabra griega Oéocrpov significa "lugar de c
los cinco grandes "espacios públicos" o "espacios de
cuatro eran el Ágora (áyopá) -con sus exten
Asamblea o Ekklesía ('EKKXīļaioc) y el del Con
tribunales de justicia o dikastéria (ÔiKaarr) pio
los gimnasios (yupváaiov). De menor importan
esas escuelas-monasterios de corte pitagóric
iniciaciones mistéricas, representadas tal
((1>povTiarqpiOv), "pensatorio", de la comedia Las
En el teatro en el que se representaban las c
frecuencia a los otros cuatro grandes espacios de co
se escenifican (como, por ejemplo, la Pnix o el Ág
Pero no es la escenificación, la mise en
particularmente nos interesa, pues sabemos que en
ni la unidad de acción ni la unidad de tiempo55
como norma.

En efecto, en una misma escena de Los Acarnienses se s


alejados entre sí en la realidad: La Pnix, sede de las reunio
Eurípides (quien, por cierto, vivía en Salamina) y la casa
Tampoco se tiene en cuenta la unidad de tiempo, pues Anf
sólo 45 versos en trasladarse de Atenas a Esparta y en hacer
varios tipos de treguas de alcance familiar:
Ach. 129-32
AI. 'AXX' 'Aju<f)íOeóç juoi 7toí3 'anv; AM. Ovto
AI. 'Ejlioi aù rauraai Xaßwv oktgû Õpaxjuàç
cmovõàç 7tór)oai 7rpòç AaiceôaijLiovíouç póvco
kcci Toiat 7raiÕíoiai kcci rfj 7rXáriõi.
"Diceópólis.- Pero dónde está Anfíteo, digo yo.

52 A. Melero Bellido, Atenas y el Pitagorismo, Universidad d


55 M. Landfester, Handlungsverlauf und Komik in den früh
Berlín-N. York 1977. P. Händel Formen und Darstellungsw
Komödie, Heidelberg 1963, 216 ss.
54 Otra explicación en P. Thiercy, Aristophane: Diction et d
Paris 1986, 125.
55 Pero Anfíteo es un inmortal que hace gala de ello co
traslación entre lugares muy alejados entre sí, como Atenas y
133.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 155

Anfíteo.- Ahí lo tienes, a tu lado.


Diceópólis.- Cógeme estas ocho dracmas y concluye una tregua con los
lacedemonios para mí solo, mis niñitos y mi compañera"56.
Ach. 174-76
Al.Oïjuot ráXocç, jliuttcotòv öaov àrcúXeoa.
'AXX' 6K Aaiceõaípovoç yàp 'Ajucpideoç óõí.
Xaíp' 'AjlkJ)Í0££.
"Diceópólis.-¡Ay de mí, infeliz, vaya una ensaiada que me he perdido! Pero he aquí
a Anfíteo que acaba de llegar de Lacedemonia"57.
Nos interesa mucho más, en cambio, estudiar la función del teatro como "espacio
público" o "espacio de comunicación" específico empleado por nuestro comediógrafo y
seguidamente contemplar desde él cómo se enjuician y valoran los demás espacios de la
pòlis , a saber, los santuarios, los tribunales, los gimnasios y el Agora.
Dentro del permisivo "espacio de comunicación" que es el teatro en la festividad
dionisiaca, ¿a dónde correr?, ¿en qué "espacio público" de los representados por la
Comedia aristofánica refugiarse, cuando en ella aparecen todos tan denigrados y
desacreditados por el propio héroe cómico que, como Diceópólis en Los Acarnienses o
Pisetero y Evélpides en Las Aves , quieren cambiar el mundo?
En el acotado y especial "espacio público" o "espacio de comunicación" que es el
teatro se emplea la risa festiva y la denigración y la burla rituales, que conectan la
comedia con el komoSy la procesión dionisiaca con máscaras y la práctica del gephyrismös,
con el claro propósito de hacer mofa de la propia ciudad y de sus "espacios públicos" o
"espacios de comunicación", para, de este modo, entretener -como suele suceder con toda
dramatización de un ritual-, para evitar mediante este procedimiento ritual la envidia
de los dioses ante una presentación autocomplaciente del esplendor de la pòlis y para
reestablecer mejor la normalidad de la conducta ciudadana tras la contemplación
festiva y graciosa de los "espacios públicos" distorsionados.
De ello se encarga el héroe aristofánico, un personaje de mediano o bajo nivel
social, un hombre común y corriente que, haciendo gala de un lenguaje y una conducta
alejados de la norma vigente en la pòlis Atenas y aun enfrentados a ella, mediante su
actuación y sus palabras burlescas y de subido color sexual y escatológico, exagera,
deforma y distorsiona los comportamientos sociales tenidos por normales en la ciudad.
Y esto lo hace valiéndose del "humor ritual" de la comedia, representación dramática
cuyo propósito es el de ridiculizar la ciudad ("it was comedy's job make fun of the
city")58, invertir o trastocar la vida normal de la ciudad-estado para restablecer luego,
una vez superado el festivo paréntesis cronológico de las representaciones teatrales, con
mayor firmeza la estricta normalidad ciudadana.
Ése es el sentido del "humor ritual" que se reencuentra, además de en el fondo de la
comedia griega antigua, que es una dramatización ritual, en la dramatización de los
ritos de muchas y muy variadas culturas.

56 Ar. Ach. 129-32.


57 Ar. Ach. 174-76.
58 A. M. Bowie, 1995, 10.

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156 Antonio LÓPEZ EIRE

En la festividad del Corpus Christi 59 de la


cómicamente delante de la custodia que contien
clown con sus tintineantes campanillas. En el
romería de la "Virxen da Franqueira", los ángeles
bailan cómicamente, con ridiculas contorsiones
gestos y aspavientos, delante de la imagen de Santa
resultan derrotados por los ángeles buenos, natur
grupo de payasos o clowns hace ademán de ir recog
sus conciudadanos mientras rezan60. Los llamad
cuando oyen el nombre de la Virgen María o d
estremecerse y simulan limpiarse imaginarias im
los indios "zuñis", los personajes que en las fiestas
llamados koyemshis , bien dotados de poderes
guardianes del orden, los burladores de las sagrad
más venerables reglas, ya que, desempeñando e
míticos incestuosos61.

Aristóteles en la Poética se refiere a los orígenes de la comedia diciéndonos que


procede de los "exarcontes" de cantos fálicos que todavía en sus tiempos continuaban
celebrándose en muchas ciudades62. Al igual que la tragedia deriva -según el Estagirita-
de los "exarcontes" del ditirambo, en estricto paralelismo, la comedia procede de
"exarcontes" de cantos fálicos. Esos cantos fálicos a los que se refería el Estagirita eran,
probablemente, elementos integrantes de muchos y variados rituales relacionados con la
fertilidad, que buscaban la risa, el "humor ritual", a base de mostrar y hacer explícito lo
que normalmente no lo era. Lo cierto es que el atuendo de los actores de la Comedia
aristofánica, con su falo, los numerosos chistes sexuales que en ella encontramos, las
referencias constantes a los órganos sexuales y al aparato excretor y sus funciones que por
doquier se hallan en ella, parecen apoyar el testimonio aristotélico y nos conducen
directamente a la idea del "humor ritual". Y lo mismo podríamos decir de otras
maneras de hacer reír de la Comedia aristofánica, como, por ejemplo, el insulto y la
ridiculización de personajes socialmente prominentes, que son procedimientos que
encontramos en muchos rituales religiosos de diferentes pueblos y culturas y están, como

59 K. J. Reckford, o. c. 484 "Processions on Corpus Christi in honor of the


Eucharist... included (from that exuberant sense of joy) much carnivalesque material".
60 M. L. Apte, 1985, 159.
61 J. Cazeneuve, Sociologie du ritey PUF, París 1971, 311.
b¿ Arist. Po. 1449 a 11-13.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 157

forma de "humor ritual", posiblemente en la base y origen de la propia poesía yámbic


griega63, que a su vez está relacionada con la comedia64.
Son muy frecuentes -mucho más frecuentes de lo que en principio pudiera
suponerse- estos elementos rituales de humor, burlescos y cómicos, en numerosa
festividades de las sociedades cristianas europeas, tal como parece comprobarse en el
libro de U. P. Burke titulado Popular Culture in Early Modem Europe.
Por supuesto, numerosas manifestaciones tanto de risa festiva ("playfu
laughter")66, como de la más acerba ridiculización y del más agrio escarnio, se daban en
numerosas festividades atenienses: Las Eleusinias, las Estenias, las Tesmoforias, las
Haloas y las múltiples Dionisias, y también en fiestas que se celebraban en otras
localidades de Grecia, como Egina, Epidauro, Pelene, Anafe, Lindos, Sicilia, de manera
que uno se ve obligado a admitir que la risa, en todas sus facetas y variantes, motivada por
la obscenidad, la escrología , lo escatológico, la bufonada, la mofa, la burla o el escarnio,
formaba parte esencial de un primitivo ritual mágico de la fertilidad. En festividades
bien organizadas, la risa en todos sus aspectos y variedades aparece estrechamente
asociada al juego y al baile y se manifiesta tanto en el symposion como en el kômos que
está en la base misma de la comedia. En la cultura griega, el symposion , el kômos y las
festividades ciudadanas en general, que se caracterizaban todas ellas por distanciarse del
modo de vida habitual y suspender durante sus celebraciones los convencionales modelos
de conducta cívica y hasta el normal funcionamiento de los espacios de comunicación
social salvo el del teatro67, poseían, además de otros elementos en común, como el canto,
el baile y la danza68, el "humor ritual", es decir, espacio para la risa festiva y
denigratoria (recordemos que el verbo griego OKCOTTieiv significa tanto la actividad
de hacer "chistes" y "chanzas", como la de hacer "burlas" y "mofas"), actividades todas
ellas juveniles (recordemos que en un verso de Las Avispas el simpático viejo Filocleón

63 R. M. Rosen, Old Comedy and the lambographic Tradition , Atlanta 1988. Degani,
"Insulto ed escrologia in Aristofane", Dioniso 57 (1987) 31-47. Cf. 31 "Insulto ed
escrologia, per lo più associati, sono componenti essenziali di quella commedia greca che
a in Aristofane il suo principale rappresentante". Cf. asimismo "Aristofane e la tradizione
dell' invettiva personale in Grecia," Aristophane , Vandoeuvres-Genève, Fondation Hardt,
1991, 1-36. .
64 Sobre las relaciones entre yambo y comedia, cf. E. Degani, Poesia parodica greca ,2a ed.,
Bolonia 1983; Stadi su Ipponattey Bari 1984. Cf. Aristóteles, La Poética 1449 b 7 TcSv 06
'ABn'vriaiv Kpáinç 7rpiõToç rfpÇev à<t>épevoç rf'ç iapPiKrïç tõéaç KaSóXou
7T01SIV Xòyouç KOÙ JLIÚ0OUÇ. Obsérvese qué descuidado es el estilo de Aristóteles en
las obras esotéricas: decir que "Crates fue el primero que empezó , tras haber abandonado
la forma yámbica de comedia, a componer asuntos generales y argumentos" es a todas
luces redundante o pleonàstico.
63 U. P. Burke, Popular Culture in Early Modern Europe , Londres 1978, 178-204.
66 Cf. S. Hall i well, CQ 41 (1991) 282.
67 Durante las fiestas se cerraban los tribunales. Cf Ar. Eq. 1316-18 y Ps.-X. Ath. III, 8.
68 Cf. S. Halliwell, CQ 41 (1991) 290-1.

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158 Antonio LÓPEZ EIRE

se dispone a "guasearse juvenilmente de su hijo


veaviKCÔç, "para guasearme de él juvenilmente ')69.
Hay que contar, pues, con un "humor ritual"
humor", que es de naturaleza religiosa, y que, como
huellas claras de prácticas rituales, es lógico pens
remotos de este género literario. Y así resulta q
religiosa del kômos dionisiaco y la procesión con m
aspectos festivos, pero también con sus aspectos de
propios del gephyrismós y del tothasmós rituale
desarrollo y evolución del género literario de la com
primitivo sentido ritual y religioso.
El propósito de este tan expandido "humor ritua
contraria a la de la normalidad ciudadana ("contr
especie de liberación dionisiaca, comparable a la del
abolición de las normas vigentes consuetudinaria
desenfadada de la trasposición, por degradación
humana, para posteriormente restablecer el orden qu
También la tragedia, con sus héroes sobrehum
través de la visión de la trasposición, en este caso po
Ahora bien, precisamente en virtud del hecho de
especial en el que se desarrolla la festividad, el "
escarnio, la befa y la irrisión, procedentes de culto
los "espacios públicos" de la pólis> salvo el del teatro.
En efecto, aunque en el teatro se representen ob
lenguaje y su puesta en escena y en él exhiban sus pr
hay que criticar con aspereza, el teatro en sí es par
merece el mayor de los respetos.
Por el contrario, los demás espacios públicos
Consejo, los tribunales, los santuarios, los "pensator
la tradición ancestral de viejos rituales que están
objeto de ridiculización, crítica y censura.
Ello encaja muy bien con el hecho de que el h
dramática del ejecutante de antiguos rituale
individualista y se afirma como "taimado", "imp
alazón , "fanfarrón", eiron , "cazurro" y bomoló
moralmente inferior a la media del ciudadano virtuoso al aristotélico modo,
presentándose en su condición de aislado de la sociedad, a veces hasta de marginado
-como el Morcillero de Los Caballeros- y utilizando los espacios públicos de la pòlis
en su particular provecho.

69 Ar. V 1362.
70 Cf. Ar. Nu. 445 ss.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 159

Eso es, por ejemplo, lo que hacían las mujeres atenienses cuando, rompiendo todas
las reglas cívicas vigentes, asumían el rol de los varones en las fiestas Tesmoforia
celebradas en el mes de Pianopsión.
El teatro, realmente, ese "espacio público" en el que Aristófanes se crece, era un
importantísimo espacio de comunicación de la pòlis, de comunicación política.
Cuenta Heródoto, por ejemplo, que el año 493 a. J. C., arcontado de Temístocles, se
representó en Atenas la Toma de Mileto de Frínico, y que esta pieza ocasionó tan gran
conmoción de dolor entre los espectadores, que el teatro cayó inmerso en un mar de
lágrimas, su autor fue multado con mil dracmas por haber recordado a los ciudadanos
sus propios infortunios y la representación del drama fue prohibida de cara al futuro:
èç ÔocKpud re ëneoe rò 0ér|Tpov Kai èÇriiJÍGúaáv piv co ç
ávapvrjaavTa oÍKijia KaKà xi^Dai SpaxM^cn, Kai 67rera£av
priKCTi pqóéva xpâaOai toutco too Ôpapan.
"y el teatro cayó inmerso en un mar de lágrimas y a él le castigaron con mil dracmas
por haber recordado desgracias familiares y ordenaron que en adelante nadie
hiciera uso de ese drama"71.
El mismo Temístocles fue corego de Los Persas de Esquilo cuando pasaba por uno de los
peores momentos de su carrera política.
Y, en general, debajo del mito tratado por cada tragediògrafo en cada una de sus
tragedias se escondían, junto a los rasgos arcaicos de origen ritual, modos de pensar
modernos que influían en la vida ciudadana, en el comportamiento de los ciudadanos,
en la política de la ciudad.
Así, por ejemplo, bajo el mito que sirve de trama a la acción dramática de la
Orestia (trilogía representada el 458 a. J. C.) se encuentra formulada implícitamente la
política, ya aceptada por la ciudadanía ateniense tras la reforma de Efialtes (del 472 a. J.
C.), de reducir el poder del Areópago a determinados delitos de sangre, y el propio
Esquilo pide a sus conciudadanos que no despojen al prestigioso tribunal de esa
exigua parcela de poder judicial que aún le resta:
èv õè reo aeß aç
àarcov (j)0ßog re Tò prç àõiKeív
axficjei tò i' Tļ jLiOtp Kai Kať eu(|)p0vrļv ojugoç,
aOTCÔV 7T0XlT(jûV JLl Tļ '7TlKaiVOl5 VTCÛV V0JL10UÇ.
"y en esa colina (sc. el Areópago) el Respeto y el Terror su hermano mantendrá
alejados de los habitantes de esta villa, tanto por el día como por la noche,
cometer crímenes, siempre que los ciudadanos no introduzcan innovaciones en s
leyes"72.
Era enorme la influencia que ejercían sobre los espectadores las ideas transmitidas en el
teatro, tanto con la tragedia como con la comedia.
El Sócrates de la Apología de Platón se lamenta de la caricatura que de su persona se
ha propagado entre las gentes de Atenas a causa de la comedia aristofánica Las Nubes:

71 Hdt. VI, 21,2.


72 A. Eu. 690-3.

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160 Antonio LÓPEZ EIRE

Taura yàp ¿copare Kat auroì. év riļ 'A


ZcoKparri rivà £K£î 7repi(1)epópevov
aXXqv 7ToXXr|v 4>Xuapíav (j>Xuapouvr
oůre jLiiKpòv 7répi e7raico.
"Pues esas cosas las veíais también vosotros mism
Sócrates que allí era llevado de un lado para otr
aires y decía insensateces sin sentido sobre a
experiencia, ni mucha ni poca"73.
Por consiguiente, en el espacio de comunicación q
Y esto sucede con la tragedia y con la comedia
parece obvio, en la comedia esta comunicación po
Mq poi <J)0ovrļaTļT' avõpeç oi Secopevo
£Í 7TTGÚXÒÇ cov íxsiť év 'AOqvaíoiç X
jLiéXXGû 7repi rrjç 7TÓX£goç, rpuyGOÕíav 7t
"¡No me mireis mal, varones espectadores,
si, aunque soy un mendigo, me atrevo a hablar,
de la ciudad ante atenienses, representando una
En estos versos la comunicación del poeta con la c
concretamente en la parodia de la tragedia euripi
En otros casos la comunicación desde la esce
brillantes e hilarantes expresiones cómicas, co
parábasis de Los Acarnienser.
npórepov õ' újLiâç darò tgov 7tóX£gov o
7TPGÛTOV JLlèv ÍoaT6(1)dcVOUÇ £KCtX0UV K(X
6U0ÙÇ õià toùç are<1)ávouç £7r' ocKpwv
"Antes, a vosotros los embajadores de las ciudade
os llamaban en primer lugar "pueblo coron
alguno esa frase, ya estabais vosotros, por causa
las puntas de vuestras nalguitas"75.
El poeta cómico Aristófanes tiene clara concienci
pòlis, de comunicador político en el teatro, un
primera magnitud en la ciudad-estado Atenas:
Xprjv JLlèv TU7TT£tV TOUÇ paßÖOUXOUg, £Ï
auròv £7Tî]V£i 7Tpòç ró 0£aTpov 7rapa
"Seria preciso que los portavaras sacudier
avanzando ante el público del teatro, se elogiara
A veces, siempre en clave cómica, convoca a toda
mientras permanecen cerrados otros espacios p
durante la celebración de una festividad pública:

73 Pl. Ap. 19 cl.


74 Ar. Ach. 496-8.
'3 Ar. Ach. 636-8.
7<> Ar. Pax! 34-3.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 161

Eu(ļ>r| jLieiv XPH cjTÓpa KXqeiv koù paprupicov áitéxtodai,


koù rà ÔiKaarripia auyKXqeiv, oiç f) ttóXiç rjôe Y£Yn0£v»
67TI Kaivaiaiv Õ' eÙTuxiociaiv 7raicovíÇeiv rò Béarpov.
"Es preciso guardar religioso silencio y cerrar la boca y abstenerse de la audición
de testigos y cerrar los tribunales en los que tiene puesto su gozo esta ciudad y que
teatro entone un peán con ocasión de estos nuevos lances de buena fortuna"77.
El Viejo Oligarca nos informa de que durante la celebración de las fiestas
públicas permanecían cerrados los tribunales en Atenas:
èopràç áyeiv èv aîç oux oìòv re ÔiKdtÇeiv.
"Celebrar fiestas en el curso de las cuales no son posibles las audiencia
judiciales"78.
En el cumplimiento de su misión comunicativa de poeta de la pólis7<), en la
parábasis Aristófanes trata de ganar la benevolencia o buena voluntad de su público
( captatio benevolentiae ), siempre en clave cómica, ensalzando su inteligencia,
identificándose con los puntos de vista del coro y los espectadores y presentándose como
ciudadano de buen y atractivo carácter (ethos, q0oç) capaz de llegar incluso al heroísmo
del Heracles mítico:
rò Y<xp 0éocrpov õeÇióv.
"Pues el público del teatro es inteligente"80.
El jLiév Tiç dvrļp rc5v ápxotícov KCúpwõoõiÔaoKaXoç f|páç
rÍvdcYKaÇev XéÇovTaç znr' 7tpòç rò Oéarpov 7rapaßfivai,
oòk áv (JxxuXooç eruxEV toutou* vûv Õ' áÇióç èa0' ó 7roriTnç,
ö ti toùç auTOÒç rjpîv pioeí toXjucx tz Xéyzxv Tà ÔÍKaia,
Kai yevvaíwÇ 7tpòç tòv Tuc|)c5 x^peí Kai Tqv èpicáXriv.
"Si alguno de nuestros antiguos maestros de coros cómicos hubiera intentado
forzarnos a avanzar hacia la audiencia para recitar versos, no lo hubiera obtenido
fácilmente; pero en esta ocasión nuestro poeta se lo merece porque odia a la misma
gente que nosotros y se atreve a decir lo que es justo y avanza contra Tifón y el
"huracán" con nobleza"81.
En las alocuciones de la parábasis el poeta cómico Aristófanes ejercita muy
ostensiblemente la captatio benevolentiae llamando "hábiles expertos", sophoí (C0(1)0i) o
"diestros", "duchos", "inteligentes" o "sagaces", dexioí (ÕeÇlOl) a los espectadores de sus
comedias, por ejemplo:
CO OOCJXjÓTOCTOI 0£OCT(XÍ, Ô6UpO TÒV VOÛV 7rpoaéxET6.
"¡Oh expertísimos espectadores, parad mientes en este punto!"

77 Ar. Eq. 1316-18.


78 Ps.-X. Ath. III, 8.
79 Aristófanes en las parábasis de sus comedias alecciona seriamente a sus conciudadano
Otra opinión bien distinta es la de M. Heath, Political Comedy in Aristophanes
Göttingen 1987, 16-21. Sobre modernos puntos de vista en torno a la cuestión de l
seriedad de las alocuciones en las parábasis , cf. P. Cartledge, Aristophanes and his Theater
of the Absurd, Londres 1990.
80 Ar. Ach. 233.
81 Ar. Eq. 306-1 1.

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162 Antonio LÓPEZ EIRE

ró yàp OéaTpov ÔeÇióv.


"Pues el público del teatro es inteligente"82.
Muy distinta es, en cambio, la alocución llen
dirige Estrepsíades en Las Nubes:.
eu Y • KaKoÔaíjLiovEç, tí Ka0r|a0' aßeXT
ripérepa Kepóq tg5v aocjxov, ovreç Xí0o
ápi0póç, 7rp0ßar' cxXXcoç, dtļucļ)opfļĢ vev
"¡Desgraciados!, ¿por qué estáis sentados ah
lucrativos de nosotros los hábiles, piedras, qu
ánforas apiladas?"83.
En la misma parábasis , para asegurar la be
Aristófanes recuerda que ha obtenido de los espec
fiables garantías de juicio favorable en el futuro:
6K toutou poi 7Tiarà 7rap' ujligSv yvcop
"A partir de aquel momento tengo en mi p
opinión"84.
En estas partes astróficas, fundamentales de
"anapestos", se da -lo ha demostrado fehaciente
sutil mezcla de realidad y poesía.
Esa insistencia en la propia capacidad y
iôéaç eio(J)ép(ov ao<1)íÇopai / ouõèv dX
ôeÇiáç, "sino que practico mi sutil arte llevando a
en nada semejantes unas a otras y todas intelig
modernos en exceso petulante, esa exposición d
artística y de su actividad poética que nos ofre
metáforas, en Los Caballeros y La Paz (epETTļV
7TT1ÕaXíoiç è7Tixeipeîv, "que era preciso ser prim
timón")87, tienen precedentes literarios en la líric
Y asimismo el empeño aristofánico en presentar
héroe Heracles88 que no duda en enfrentarse a
Cerbero (ispòv Kuva KapXCtpÓÕOVTa, "el sacro ca
y en autonombrarse "consejero" (rouiov £upßo
por consejero")90 y educador de Atenas (Olļoi

82 Ar. Ach. 233.


83 Ar. Nu. 1201-3.
84 Ar. Nu. 333.
85 G. Mastromarco, "La parabasi aristofanea tra realtà e poesia", Dioniso LVII, 1987, 75
86 Ar. Nu. 547-8.
87 Ar. Eq. 542.
88 G. Mastromarco, "L'eroe e il mostro (Aristofane, Vespe 1029-10 44)", RFIC 117 (1989),
410-23.
89 Ar. Eq. 1017. Cf. A. H. Sommerstein, Aristophanes Wasps , Warminster 1983, 217 "there
may be an allusion to Cerberus".
90 Ar. Ach. 65 1 .

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 163

"y afirma que os va a enseñar muchas cosas buenas")91, remonta a una antigua y bien
consolidada tradición poética, que arranca de Hesíodo92 y se afianza en los poetas del
siglo V a. J. C., especialmente en Pindaro, con quien nuestro poeta coincide en muchos
otros rasgos93, pero especialmente en considerarse superior a sus adversarios y no tener
empacho alguno en proclamarlo (el TTOcpeXaiívcův roùç (XVTi7ráXouç Tfjv
£7TÍvoiav £uveTpii|í£V, "aunque mientras dejaba atrás en la carrera a sus adversarios
rompió en pedazos el carro de sus esperanzas" )94.
El teatro, consiguientemente, es un excepcional y privilegiado espacio de
comunicación política.
Como ya hemos dicho, antes de que se iniciasen las representaciones dramáticas, se
presentaba al público a los huérfanos de guerra que habían llegado a la "efebía" y
habían sido alimentados y educados a costa del estado. Se mostraban revestidos de la
armadura completa ("panoplia") y tomaban asiento en la presidencia o proedría. S
exponían además los tributos que anualmente llegaban a Atenas procedentes de los
aliados.
Con ambas exhibiciones se realizaba un acto de fe en la patria que no se olvidaba de
sus hijos muertos por ella, en la solidaridad y los patrióticos sentimientos de los
ciudadanos que asumían las funciones de sus conciudadanos caídos en el campo del
honor, y en el glorioso y brillante poder económico y político de la patria Atenas, que
era todo un estado hegemónico, rico en soldados, dineros, armas y pertrechos.
A continuación comenzaban las representaciones teatrales que tenían siempre a la
ciudad como telón de fondo.
En la tragedia se representaban temáticas de mitos compartidos por los ciudadanos,
que además aparecían sazonados de tal manera que su enjundia se podía extrapolar
fácilmente a cuestiones debatidas en las fechas de la representación, o sea, asuntos de
candente actualidad.
En la comedia, sin embargo, más directamente ligada a la realidad del momento, es
frecuntísima la alusión a hechos reales acontecidos dos meses antes de ser representadas95.
En efecto, de una manera general, los acontecimientos referidos o aludidos en las
parábasis de las comedias aristofánicas no sobrepasan el límite de los cinco meses
inmediatamente precedentes al de la representación.
En un breve pero precioso artículo de Albio Cesare Cassio96, se nos muestra, a
partir del testimonio de Galeno a propósito de la paráfrasis de las Segundas
Tesmoforiantes de Aristófanes, cómo nuestro poeta se excusaba de sus errores por el hecho
de haber estado enfermo durante los cuatro meses anteriores, preso de la fiebre y de los

91 Ar. Ach. 656.


92 M. R. Lefkowitz, "The Poet as Hero: Fifth-Century Autobiography and Subs
Biographical Fiction", CQ 28 (1978), 459-69.
93 R. M. Harriott, Aristophanes. Poet and Dramatist , Baltimore 1986.
M Ar. V 1050.
95 A. Ruppel, Konzeption und Ausarbeitung der aristophanischen Komödie ,
1913.
96 A. C. Cassio, "I tempi di composizione delle commedie attiche e una parafrasi di
Aristofane in Galeno (AR. FR. 346 K-A)", RFIC 115 (1987), 5-11.

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164 Antonio LÓPEZ EIRE

escalofríos que lo obligaban a beber agua. Agudam


que la excusa contiene datos de la realidad (probab
afección referida), si bien mezclados con literatur
fechas sabía que bebiendo agua poca poesía aceptab
con Cratino97: i5Ô(jûp õè 7TÍV(júv ouÔèv av T
inteligente podrías concebir").
Parece, pues, claro que en las partes astróficas
constituían un elemento esencial del texto que se
de comunicación que era el teatro, se mezclaba
literatura, lo personal y lo político, y todo ello sa
lo cómico.

Así, por ejemplo, en la parábasis de Los Acarnienses , donde el poeta protesta por el
indigno y desconsiderado trato que los jóvenes y ambiciosos oradores dan a los ancianos
que se han desvivido por la patria en sus años de juventud, estos últimos son denominados
"Titonos", nombre de un héroe del ciclo troyano que personificaba la vejez
matusalémica y sumamente achacosa, mientras que aquellos aparecen representados por
Alcibíades el hijo de Clinias:
dvôpa Ti0o)vòv a7rapcxTTcov Kai rapdcTTCûv Kai kukcov
"haciendo pedazos, trastornando y confundiendo a un señor Titono"98.
Toîç véoiai Õ' eupÚ7rpcoKTOç Kai XccXoç KXeivíou
"y para los jóvenes (sc. que sea abogado) un culo ancho, un parlanchín, el hijo de
Clinias"99.

Lo cómico, lo político y lo literario íntimamente unidos afloran en el espacio de


comunicación política que era el teatro en el que se representaban las comedias del
género de la llamada "Comedia Antigua" o Arkhaía.
En los anapestos de la parábasis el poeta o su representante el corifeo adoptan en su
alocución a los espectadores, al pueblo reunido en el teatro, el estilo propio del
discurso político tanto por su forma como por su contenido. Examinemos
primeramente el fondo:
El poeta o su portavoz el corifeo se presenta como el adalid de la justicia que
valientemente arriesga su vida por el bien de sus conciudadanos:
oariç 7rapeKiv5i)veua' èv 'ABqvaíoiç ei7reîv rà ÔÍKaia.
"(sc. un poeta) que corrió el riesgo de decir lo que es justo ante los atenienses"100.
El que se dirige a los espectadores atenienses en la parábasis es un poeta incorruptible,
inaccesible al miedo y valiente que entabla batalla, sin temor a los enemigos, en defensa
de los conciudadanos:
TOiouTov iôcov répaç ou cķiļaiv Ôeíaaç KaraõcopoÔoKfjaai,
áXX' Ú7tèp ú jliiõv eri Kai vuvi 7roXejueî.

97 Cratin. Fr. 203 K-A.


98 Ar. Ach. 688.
99 Ar. Ach. 716.
100 Ar. Ach. 643.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 165

"Habiendo visto a semejante monstruo, nuestro poeta afirma que no se dejó


sobornar por miedo, sino que por vosotros incluso todavía hoy sigue luchando"101 .
Asimismo habla el poeta y orador político de los servicios prestados a sus conciudadano
al combatir a esos "démones de los escalofríos y las fiebres" -entramos de nuevo en un
texto compuesto en clave literaria y cómica- que son los sicofantas:
(ļ>rļ aív re juer' auroó
toîç T17riáXoiç è7TixeipTÌcjai 7répuaiv Kai toîç 7ruperoîaiv,
oí toùç 7rarépaç r' iÎyxov vuktcûp Kai toùç 7rá7T7rouç a7re7rviyov,
KaraKXivójLievoí ť £7t' ratç Koíraiç £7ri toíqiv á7rpáYPoaiv
ú jucjov ávTcojLioaíaç Kai 7rpooKXr1a£iç Kai paprupíaç auveKÓXXcúv,
coar' àva7rr|ô(xv Õeipaívovraç 7roXXoòç goç tòv 7roXépapxov.
"Y afirma que, asimismo, el año pasado metió mano a los escalofríos y las fiebres
que por las noches estrangulaban a vuestros padres y asfixiaban a vuestros abuelos y
que acostados en las camas y encima de los que de entre vosotros no os metéis en nada
iban pegando, una sobre otra, declaraciones juradas, citaciones y deposicones
judiciales, de manera que muchos por miedo se levantaban de un salto e iban a
presencia del polemarco"102.
Y además hace mención de su decidida voluntad de defender valientemente a la
comunidad política por entero (es decir, a Atenas y a la Liga ático-délica) de las
amenazas del monstruoso Cleón:
Toioutov iõiòv répaç où KaréÔeia', áXX' Ù7rèp ujucov 7roXejLiiCcov
àvreîx°v áei Kai ro5v aXXcov vqawv.
"Habiendo visto a semejante monstruo, no tuve miedo, sino que resistía luchando
en todo momento en defensa vuestra y de las islas"103.
Este precedente par de versos es muy semejante al anteriormente citado de Las Avispas™* ,
del que se diferencia, sin embargo, bien claramente porque lo pronuncia el corifeo en
primera persona como si fuese el propio poeta y, además, porque, siendo la comedia La
Paz, en la que se encuentra, una de las comedias que se representaron en la festividad de
las Grandes Dionisias o Dionisias Ciudadanas, es decir, una fiesta a la que solían acudir
los aliados de Atenas (o, mejor dicho, del imperio ateniense denominado
eufemisticamente Liga ático-délica), Aristófanes los incluye como casi conciudadanos.
Por el contrario, en Las Avispas , comedia representada en las fiesta Leneas, a las que sólo
asistían ciudadanos atenienses, Aristófanes se refiere en la parábasis a sus estrictos
conciudadanos. En efecto, La Paz fue representada en las Grandes Dionisias, o sea, en el
mes de Elafebolión, nuestro Marzo, del año 421 a. J. C., mientras que Las Avispas
pasaron por la escena en las fiestas Leneas, por tanto en el mes de Gamelión, nuestro
Enero, del año 422 a. J. C.
Pues bien, tanto el tema de la valentía como el de la justicia y el sacrificio total en
aras del bien de la comunidad, con los que el poeta adereza su discurso a los ciudadanos,

101 Ar. V 1036-7.


102 Ar. V 1037-42.
103 Ar. Pax 759-60.
104 Ar. V 1036-7.

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166 Antonio LÓPEZ EIRE

son tópicos de los discursos deliberativos o polític


interesante la exhibición de un carácter valiente
la irrenunciable defensa de la justicia y de la c
justa por el bien de la comunidad.
La justicia es, efectivamente, el primer val
Retórica 105 dentro de la lista de bienes que puede
deliberativa y justifica esa prelación porque la jus
Kai ró ÔÍKouov aujLKļ)epov yctp ti koi
"También la justicia (se. es necesariamente un b
comunidad"106.
Y según el autor de la Retórica a Alejandro , una buena exhortación a la acción, propósito
de todo buen discurso deliberativo o político, debe probar que el objetivo al que
exhorta es justo, legal, conveniente, honroso, agradable y fácil de realizar o cumplir:
rov páv 7rporp£7rovra xpfi Õeikvueiv rotura £<}>' a 7rapaKaXEi
ÕiKaia dvra Kai vojuipa Kai auju(1)épovra Kai. KaXd Kai qõéa
Kai páõia 7rpax0rìvai.
"Es preciso que el exhortador muestre que aquello a lo que induce es justo, legal,
conveniente, decoroso, agradable y de fácil realización"107.
Por eso nuestro poeta promete siempre, en la parábasis o en el agón, por boca del corifeo
o de alguno de sus personajes, decir "cosas justas" ('Eycó Ôè XeÇgû ÖEivd JLiév,
ÕÍKaia Õ£, "pues yo voy a decir cosas justas, aunque terribles"108. TOXjud TE XéyEiv
rà ÕÍKaia, "y se atreve a decir lo que es justo"109).
Pero además se nos presenta haciendo gala de la virtud de la valentia (ávÕpía),
virtud que figura inmediatamente después de la justicia en esa lista de lugares comunes
que, acerca del bien y de lo conveniente, nos ofrece en su Retórica el Estagirita110.
Aristóteles define la valentía (avÕpEÍa) como "la virtud por la que los hombres se
hacen realizadores de las honrosas acciones en medio de los peligros", avÕpEÍa ÕÈ Õi
iļv 7rpaKTiKoí eíoi ro5v KaXoov Epycov èv TCÛÇ KIVÕUVOIÇ111.
Y nuestro poeta se nos presenta como héroe valeroso que no ceja ante el enorme
poder del enemigo y que se sacrifica por el bien de la ciudad: OU KaTEÔEia', aXX'
U7TÈp UļLlCOV 7T0XejuiCcûV / avreîxov> "no tuve miedo, sino que resistía luchando en
todo momento en defensa vuestra"112. ToXjid TE XéyEiv rd ÕÍKaia, / Kai
y£vvai(jùç 7Tpòç ròv Tu(ļ>(5 xcup£i Kai rf|v èpicûXriv, "y se atreve a decir lo
que es justo y avanza contra Tifón y el "huracán" con nobleza"113.

103 Arist. Rh. 1362 b 12.


106 Airt. Rh. 1362 b 27.
107 Rh. Al. 1421b 23.
108 Ar, Ach. 301.
109 Ar. Eq. 310.
110 Arist. Rh. 1362 a 15.
1 1 1 Arist. Rh. 1 366 b 1 1 .
112 Ar. Pa* 759-60.
113 Ar. Eq. 510-11.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 167

De valentía y devoción por la ciudad de Atenas hace gala también el orador


Andócides en el discurso titulado Sobre su propio regreso :
'Ek Ôè TOUTOU OU 7TG07rOT£ 0UT6 TOU aoójLiCCTOÇ OUT6 T(ÔV OVTGOV 6JJ01
è<1)eiaájLiriv, Ö7Tou eÔei 7rapaKivÕuveueiv.
"a partir de entonces nunca hice economías ni de mi persona ni de mis bienes allí
donde fuera necesario correr un riesgo"114.
OÙK eoTiv [ Ö ti ETepov e'pyov] 7repi TrXeíovoç £7roioujurļv rļ Trjv
7TÒXiv TCXUTT1 v dyaOóv ti èpydaaaOai .
"No hay cosa en la que yo pusiera mayor empeño que en hacer algún buen oficio a
nuestra ciudad" 1 1 5 .

En todo discurso político la exaltación de la valentía y la justicia es esencial, ya


que ambas virtudes se encuentran en el concepto de lo noble. Así lo expone el Estagirita:
áváyKTi öaa Te ávôpeíaç êpyoc ri aqjueia ávôpeíaç q ávôpeícoç
7re7rpaKTai KaXà eivai, Kai Ta ÔÍKaia Kai Ta ÔiKaíooç ëpya.
"Es necesario que todas las empresas de valentía o signos de valentía o acciones llevadas a
cabo con valentía sean nobles, así como las cosas justas y las acciones realizadas con
justicia"1 16.
Un ejemplo señero de alocución política en la parábasis es el epírrema que aparece
en Las Ranas a partir del verso 686. No sólo es un texto de puro y duro contenido
político, pues en él se pide que se restaure el derecho de ciudadanía a aquellos
ciudadanos que lo habían perdido por su participación en la revolución oligárquica
del 411 a. J. C., sino que además posee la estructura formal de un discurso deliberativo.
Helo aquí:
IIpCûTOV OUV T1JLIÎV ÔOKSÎ
èÇiacoaai toùç 7roXÍTaç Ká(t)eXeív Tà ÔeíjuaTa.
Keï Tiç qjuapTe oc J>aXeíç ti <í>puvíxou 7raXaíajuaaiv,
èyyevéaBai (f>rmi xpfiv«1 toîç òXiaOoúoiv tote
alTÍav 6K0eîai Xûaai Tàç 7rpÓTepov ápapTÍaç.
Eit' cctijuóv cJ>Tļ jut xpfjvai pqBév' eív' èv rr] 7róXei.
Kai yàp aiaxpóv èan toùç jnèv vaupaxqaavTaç píav
Kai nXaTaiáç eù0ùç eivai Kavn õouXiov ôea7TÓTaç.
Kouõè TaÚT' eycoy' ëxoijLi' âv prj où KaXiõç <1)áoKeiv ëx£iv,
áXX' e7raiv(5* ^óva yàp aùîà voûv ëxovT' èõpáoaTe.
npòç Ôè toutoiç síkòç ùjLiâç, oí peO' ùpcôv 7roXXà õrj
Xoi 7raTépeç èvaujuáxqoav Kai 7rpoaqKOuaiv yévei
Tqv píav TauTqv 7rapelvai Çup4>opàv aÍTOupévoiç.
AXXà Tqç opyfjç avévTeç, co ao^coTaTOi <|>ùaei.
7rávTaç áv0pco7rouç eKÓvTeç Çuyyeveíç KTqacopeOa
Ká7rmjuouç Kai 7roXÍTaç, ôotiç av Çuvvaupaxq.

114 And. II, 11.


H5 And. II, 16.
H6 Arist. Rb. 1366 b 29.

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168 Antonio LÓPEZ EIRE

"En primer lugar, nos parece bien estable


ciudadanos y suprimir los temores. Y si alguien
por causa de las maniobras de Frínico, sostengo q
sufrieron un desliz se les permita despojarse
errores pasados. Luego sostengo que es precis
privado de su derecho de ciudadanía. Pues es,
combatieron en una sola batalla naval de inm
esclavos señores. Y no podría yo decir que eso
alabo, pues es la única cosa sensata que habéis he
aquellos que a vuestro lado, tantas veces ya, han
sus padres, y que son vuestros allegados por el l
desventura, tal como os lo están pidiendo. Pe
vosotros que sois tan sumamente sabios por natu
todos en calidad de familiares y ciudadanos d
nuestros, si es que a nuestro lado luchan en las ba
Este precioso pasaje del epírrema de la parábasis de
podría haber pronunciado en prosa un político a
sus conciudadanos reunidos en la Asamblea , en la
una petición de amnistía, de reconciliación civi
derechos de ciudadanía para de este modo, olvidan
habían tenido la desgracia (aujli(1>opá) de partic
411 a. J. C., reinstaurar la igualdad política entre
Estamos ante una tirada de versos en los que se
retórico propio de los discursos deliberativos, q
expuestos mediante "lugares" o tópoi , y en los té
alocuciones ejemplares de la oratoria deliberativa.
En efecto, en primer lugar, nuestro comediógr
expone las razones por las que le parece justo lo
basados en la conveniencia, el decoro y lo razonabl
procedimientos lingüísticos típicos de la oratoria d
En el verso 687 leemos: IIpcSTOV OUV Tļpīv Ô0K6Î.
" En primer lugar , nos parece bien".
Esta frase tiene dos elementos que hay que comentar. El primero es el verbo Ö0K61 y el
segundo es el adverbio 7rptõT0V correlativo con ei'ta del verso 692: eír' (XTijLiÓv <J)TļjLii
XP rj voti prjÕév' ¿iv' èv rņ 7TÓXei, "Luego, sostengo que es preciso que no haya nadie
en la ciudad privado de su derecho de ciudadanía"118.
El verbo ÔOKeï es voz frecuente en el discurso del asambleísta que se dirige a la
Asamblea. Por ejemplo, el propio Aristófanes lo pone en boca de las oradoras que
aparecen en aquella divertida comedia titulada precisamente Las Asambleístas . Por
ejemplo: Una infeliz juntera emplea la frase con el verbo Õ0K61 correctamente, al

117 Ar. Nu. 686-702.


118 Ar. V 692.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 169

modo de los asambleístas varones, pero se le escapa el juramento habitual de las mujere
(jLlà TU) 060), "¡por las dos diosas!"), por lo cual se delata como tal:
èjLiot juèv ou ÕOKei , jnà rù Osco.
"A mi no me parece bien , ¡por las dos diosas!"119.
Más adelante, esta brava fémina vuelve a emplear el verbo en cuestión en su discurso:
reo 7revrļti pèv ôoksî ,
toîç 7rXouaíoiç Õè Kai Y^^pyoîç ov ôoksî .
"al pobre le parece bien , a los ricos y a los labradores no les parece bien™.
En el discurso andocideo titulado Sobre su propio regreso nos topamos asimismo con esa
fraseología, pues leemos:
ei tg5 juèv Ôoksî raûra tgo Ôè jlití.
"Si a uno le parece bien eso y a otro no"121 .
Resulta, pues, claro, que al emplear este verbo en Las Ranas , Aristófanes está haciendo
uso de la fraseología propia del discurseador político que se dirige al pueblo en la
Asamblea.

Pasemos al engarce de los adverbios correlativos prwxxton....e[peita, que aparece en


la siguiente secuencia:
npWTOV OUV Tļ JJIV ÔOK6Ï

Eit * árijLióv cj>rļ jut xpqvai jur|Õév' eiv' èv Tq


" En primer lugar> nos parece bien"122

" LuegOy sostengo que es preciso que no haya nadie en


de ciudadanía"123.
Este rasgo sintáctico es, en general, típico del discurso argumentativo y, como el
discurso político normalmente lo es, es característico por ello del discurso político.
El propio Aristófanes, que ha hecho de su personaje Praxágora, la heroína de Las
Asambleístas , una oradora de talento por haber vivido con su marido, durante el
destierro, en las casas que lindaban con la Pnix, pone en su boca esa misma correlación
al exponer las razones que la han llevado a imponer su nuevo estado ginecocrático o de
gobierno mujeril.
Veamos, primeramente, cómo la heroína Praxágora, al asegurarnos haber
aprendido oratoria política por la vecindad de su casa respecto de la Pnix, colina en la
que se celebraban normalmente las reuniones de la Asamblea, de la Ekklesía , nos da a
entender que la mayoría de los discursos políticos que allí se pronunciaban eran de
corte muy similar:
èv raîç <J>uycxîç peía TavÕpòç cūKrļa' èv 7tukví.
£7reiT' aKououa' èÇépaOov rcov prļTopcov.

119 Ar. Ec. 195.


12<> Ar. Ec. 197-8.
"i And. 11, 1.
122 Ar. Ra. 686.
123 Ar. Ra. 692.

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170 Antonio LÓPEZ EIRE

"Durante el destierro habitaba con mi marido e


oyendo a los oradores, me aprendí de memoria es
Comprobemos a continuación cómo la heroína a
hacerse las mujeres con el poder político de Atena
sus razones bajo dos rúbricas diferentes marc
correlativos 7rpcùTOV y epeira. La primera razón
soldados y la segunda que son asimismo las cociner
hace insuperables e insustituibles a la hora de pro
skeyavmenoi tau ti; movna,
Goç roùç arparitoraç npœrov ouaai prir
oooíeiv e7Ti0uļLiriaouaiv eira ama
tíç rfjç t£koi)(jtiç 0GCTTOV £7ri7T£pi|í£i£v
XpTÍporra 7ropíÇeiv £Ù7ropcÓTarov yvvī'.
"Considerando esto tan sólo, que, en primer
ardientemente preservar a los soldados, y luego
les enviaría raciones suplementarias más rápi
procurar dinero la mujer es la cosa más hábil del
La secuencia 7rp(jûTOV...£iTOC es frecuente, en los
sucesos en la narración como de pruebas en la arg
Andócides en su discurso titulado Sobre la paz:
npcS TOV JLi£V TÒV Il£lp(Xlá £T£IXÍ aCCJLI£
TÒ JLlOtKpÒV T£ÎX0Ç TO ß0p£lOV.
" En primer lugar , durante ese período, amural
parte norte de los Muros Largos"126.
Volvamos al verso 692: £It' dcTipov <ļ>r|
7róX£i, "luego, sostengo que es preciso que no
derecho de ciudadanía"127. El empleo de <1>rj
infinitivo, que ya ha aparecido dos versos ant
"sostengo que es preciso") es chocante, pero tambié
orador ante la Asamblea, pues esta misma cons
Praxágora en Las Asambleístas:.
tccîç yàp YUvaiÇi (pņpi xprçvai Trļv 7r
rilLiGcç 7rapaÔoûvai.
" Sostengo que a las mujeres es preciso que nosot
la ciudad"128.

El orador Andócides, en Sobre la paz, emplea la misma construcción, si bien no


exactamente con el infinitivo XPHv0tl, sino con el de otro verbo de obligatoriedad,
Õ£Ív:

124 Ar. Ec. 243-4.


^ Ar. te. Zôl-ôï.

126 And. III, 3.


127 Ar. Ra. 692.
128 Ar. Ec. 210-11.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 171

<Pr¡jui yàp, co 'AOqvaîoi, 7roXéjLiou pèv ôvtoç ávõpa OTpaTrjyòv T13


7TÓXei re eu vou v eiôòra te o ti 7rpctrn], XavOávovra õeív toùç
7toXXoùç tc5v áv0p(Ó7rcov Kai é^a7raTc5vTa ayeiv £7ri toùç
KIVÕUVOUÇ.
"Pues sostengo , atenienses, que en tiempo de guerra es necesario que un general adicto
a nuestra ciudad y conocedor de lo que ha de hacer conduzca, sin ser advertido y a
base de engaños, a la mayoría de los hombres a los peligros"129.
Por ultimo, hay en el texto que comentamos dos términos cargados de resonancias
retóricas, uno es aioxpóv (693) y el otro -obviamente- £ÍkÓç (697). El primero da pie
a un sinfín de posibilidades de argumentación retórica en oratoria deliberativa, a las
que se refiere el mismísimo Aristóteles en su tratado de retórica:
7T£pi jLièv ouv aioxùvriç TaÛTa- 7t£pi ôè àvaiaxuvTÍaç ÕrjXov cóç
£K to5v èvavTicov £U7roprļaojLi£v.
"Pues bien, acerca de la vergüenza eso es lo que hay; y sobre la desvergüenza es
evidente que tendremos material en abundancia a partir de las premisas
contrarias"130.

También el autor de la Retórica a Alejandro , con ese su estilo práctico que recuerda
al de ciertos pasajes del libro III de la Retórica del Estagirita, nos recomienda que
digamos que no hacer tal o cual cosa es "vergonzoso", justamente lo que hace nuestro
poeta en el texto que comentamos (Kai yàp Ctíoxpóv eCJTi TOÙç JLièv
vaujuaxTÍaavTaç jaíav/ Kai IIXaTaiaç £Ù0ùç £ivai kcxvti ÔoùXcov
Ô£G7TÓTaç, "pues es, en efecto, vergonzoso que los que combatieron en una sola batalla
naval de inmediato sean píateos y en lugar de esclavos señores"):
p£Ta £V0UļLirļjL10CTū)V Kai YVGÛJLIGÛV {f| QXTlJLlCCTGûv} Õ£ÍKVU£, (¿Ç
áôiKov Kai áaup(j)opov Kai aíaxpòv Kai àqõèç pq 7roi£Îv TaÛTa.
"Con argumentos y sentencias {o figuras}, muestra que es injusto e inconveniente y
vergonzoso y desagradable no hacer eso"131 .
En cuanto al segundo término, el £ÍKOÇ (697), no hace falta decir que es un término
tan connatural con la retórica, que empezó significando "lo probable", "lo parecido a
la verdad", "lo verosímil" y pasó a significar, cuando el pensamiento retórico se afianzó
y se extendió a todas las áreas de la vida y la cultura, "lo natural", "lo lógico".
En efecto, cuando el argumento de probabilidad ( eikós ) se hizo más probatorio que
la mismísima verdad, lo eikós terminó siendo "lo natural", "lo esperable" en cada
situación y en cada momento. Y en este sentido lo emplean Aristófanes y los oradores
políticos:
Aristófanes: npòç Õ£ TOUTOiç EÍkÒç Ùm«ç, "pero además es natural que
vosotros"132. Andócides: Xdpiv où v sÍkoç p£, où jLiîooç, TCO ÕU0TUXqp«Ti

129 And. III, 34.


130 Arist. Rh. 1385 a 14.
131 Rh. Al. 1439 a 34.
132 Ar. Ra. 697.

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172 Antonio LÓPEZ EIRE

TOUTCC (1>épea0ai 7rap' ¿pcov, "es> pues, natural q


vuestra parte por ese mi infortunio"133.
Por último, corona la breve alocución estu
recapitulación {Ra. 700-02) que, según los tratadis
benevolencia de los oyentes-jueces y ponerles en dis
incrementar o aminorar el tema de la alocución y p
del discurso que acaba de ser pronunciado:
'A XXà rfjç opyfjç ávévreç, co ao^coraroi
7rctvT0tç àv0pGÓ7rouç eKÓvreç ÇuYY^veîç K
KobriTÍjLiouç Kai 7ToXíiaç, oanç áv Çuvv
"Pero, ¡venga!, relajad vuestro enojo, vosotros qu
naturaleza, y de buen grado rescatemos a t
ciudadanos de plenos derechos y conciudadanos n
luchan en las batallas navales" 134 .

Que las funciones del epílogo son, efectivamente, captar la benevolencia de los jueces y
ofrecerles un sumario de los objetivos que con el discurso se pretenden alcanzar, lo dice
expresamente Aristóteles en la Retórica :
'O 5' è7riXoYoç auYKeirai zk rerrápcův, zk tz roí 7rpòç èauTÒv
KaraaKeuáaai eu ròv aKpoairjv Kai ròv èvavríov cfjauXoûç, Kai
6K roi5 auÇrjoai Kai Ta7reivc5aai, Kai zk toû eiç rà 7ra0iļ tòv
aKpoaTrļv KaTaoTfjoai, Kai zĶ avapvrioecoç.
"La recapitulación se compone de cuatro elementos: disponer al oyente bien para
uno mismo, incrementar y aminorar, excitar en el oyente las pasiones y hacerle
recordar"133.
Queda, pues, claro que Aristófanes utiliza el espacio público de comunicación
ciudadana que es el teatro para dirigirse mediante el procedimiento usual de su época
-el discurso retórico- a sus conciudadanos y que, por consiguiente, este "espacio de
comunicación" de la pòlis que es el teatro no sale mal parado en la Comedia
aristofánica.

Es lástima que la tesis doctoral de A. Burckhardt titulada Spuren der athenischen


Volksrede in der alten Komödie , que estudia los contactos de forma y contenido de la
Comedia antigua con la oratoria política, no sea del todo satisfactoria, sino más bien
bastante insuficiente136.
Y, por otro lado, también es de lamentar que el magnífico artículo de Murphy137
del año 1938 no toque la retórica de las alocuciones de la parábasis y concluya diciendo

133 And. II, 9.


134 Ar. Nu. 700-02.
133 Arist. Rh. 1419 b, 10.
136 A. Burckhardt, Spuren der athenischen Volksrede in der alten Komödie , Basilea 1924.
137 C. Murphy, "Aristophanes and the Art of Rhetoric", HSCP 49 (1938), 69-1 13.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 173

que la principal finalidad del empleo de la retórica por Aristófanes en sus comedias es
la de burlarse de ella, lo que, siendo en parte cierto, no es del todo exacto138.
Hemos visto que en el "espacio público" del teatro griego el poeta por boca del
corifeo establece una comunicación con su público en la que se entremezclan la
realidad y la literatura, lo cómico y lo serio, y que toda esa alocución es política y
retórica.

Pues bien, en consonancia con ese carácter político y retórico de las alocuciones del
poeta en la parábasis está el hecho de que el comediógrafo tiene plena conciencia del
esencial carácter de "espacio de comunicación" de la escena teatral.
En efecto, en Las Ranas nos presenta a Eurípides afirmando haber enseñado a los
atenienses a maquinar y charlar bien, y a Esquilo insistiendo en haber infundido ardor
bélico en los espectadores de su drama "lleno de Ares" titulado Los Siete contra Tebas .
Escuchemos, primeramente, a Eurípides:
vE7T6iTa TOUTOuai XaXťiv èÕíÔocÇa-

X£7tt(j5v re kocvóvcúv eioßoXac; £7ro5v re ycoviaapouç,


voeîv, ópâv, (imévai, arp£(ļ>£iv èpâv, texvccÇeiv,
KGcx' u7roTO7r£Îa0ai, 7T£pivo£iv coravra-.
"Luego a ésos los enseñé a charlar

y las aplicacciones de sutiles reglas y las mediciones a escuadra de los versos,a


reflexionar, a ver, a comprender, a enamorarse de la práctica del retorcimiento, a
maquinar, a sospechar lo malo para sus adentros, a darle vueltas a todo con el
entendimiento" 139 .
Oigamos, ahora, a Esquilo:
Apccjua 7roqaaç vAp£Cùç jllecjtóv.

Toòç "Enť £7Ti ©rißocg


o 0£aadcjLi£voç 7râç áv nç avrļp qpaaOq ôotioç eivai.
"Componiendo un drama lleno de Ares.

"Los Siete contra Tebas", que todo el que lo vio deseó con enamoramiento ser
ardoroso guerrero" 1 40 .
En esta misma pieza, aunando otra vez realidad y literatura, política y retórica, nuestro
poeta se presenta, por boca de Esquilo, como maestro e instructor o educador de sus
conciudadanos:
aXX' à7TOKpÚ7TT£lV XPfl ™ TTOVqpOV lov Y£ 7TOÍ1TTÍV,
Kai jLirļ 7rapaY6iv pqôè ÔiÔgcokeiv. Toîç juèv yàp TtaiÔapioiaiv

138 C. Murphy, HSCP 49 (1938), 113 "He does not accept rhetoric or exhibit it for its own
sake.... his object in flavoring his speeches with rhetoric was to mock the rhetoricians (and
especially Euripides) with sprightly and malicious parodies".
139 Ar. Ra. 934-8.
140 Ar. Ra. 1021-22.

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174 Antonio LÓPEZ EIRE

èari ÔiôáoKaXoç oariç <J>páÇei, roíaiv Õ


návu òr' Òzi xQ^ìorà Xéyeiv rijuaç.
"al contrario, es preciso que el poeta oculte lo m
a escena ni lo represente en ella. Pues a los niñi
moralidad, mientras que a los jóvenes se la expli
todo punto que nosotros digamos propósitos hone
El poeta del teatro es, a la manera de un nuevo He
conciudadanos, tal como el mismo Aristófanes nos
la parábasis de Los Acarniensesr.
Kai T(S 7ToXé)uco 7T0XÙ viKíjoeiv toûtov ^up
"Y que con mucho vencerán en la guerra teniendo e
En el epílogo o recapitulación de los anapestos
esta misma obrita, se nos presenta nuestro poe
costumbres de sus conciudadanos a través de sus c
última de sus enseñanzas la felicidad:
'AXX' ùjueîç roi jiiTļ 7T0T' d<ļ>rja0'* coç kgújlkoÕtíosi rd ÕÍKaia.
Orļoiv Õ' úpãç 7ToXXà ôiÔaÇeiv ayd0' coor' eúõaíjuovaç eivai,
ou 0(0 7reuoûv oúô' UTTOTeívíov JUIO0OÙÇ oúô' èÇa7raTi)XX(ov,
ouõè 7ravoupYcov oúôè KarápÕcov, áXXà rd ßeXnara ÕiÔáaKcov.
"Pero vosotros, hacedme caso, que no se os ocurra dejarle escapar, que va a
ridiculizar con burlas justas. Pues va a enseñaros muchas cosas buenas, de manera
que podáis ser felices, sin halagaros ni ofreceros salarios bajo cuerda ni engañaros
con filfas ni haceros bribonadas ni regándoos con elogios ni promesas, sino
enseñándoos lo mejor"143.
Estamos de nuevo ante el epílogo de esa alocución retórica que es la parábasis , en la que el
poeta, consciente de que está hablando en un "espacio de comunicación" de la pòlis ,
expone a sus oyentes en qué consistirá su labor de poeta cómico que transita por el
"espacio público" del teatro.
Su labor, nos dice, va a consistir en enseñar a los atenienses cómo ser felices (ooar'
eÙÔaijLiOvaç eîvai) a base de ridiculizar con justicia (KC0ļLi(00Tļaei rd ÔÍKaia),
en sus comedias, instituciones, usos y costumbres de la ciudadanía.
Les va a enseñar lo mejor (îd ßeXllQTa ÔiÔaCJKGûv) sin halagarlos (ou
0CO7T6U (jûv), como hacían los políticos, sin ofrecerles salarios bajo cuerda
(Ú7roT£Ívcov JL11CJ0OÙÇ), como hacían los demagogos para asegurar la asistencia de los
ciudadanos a los tribunales de justicia y las asambleas, sin engañarles con filfas ni con
bribonadas (oÚÔ* èÇaTraruXXcov, 0UÔè 7ravoupY(3v) ni regarles con falsos elogios
y promesas (ouÔè K ara p 0(0 v), como debía ser corriente en la democrática Atenas de la
segunda mitad del siglo V a. J. C., espacio cronológico en que vivió y compuso la
mayoría de sus comedias nuestro crítico poeta.

141 Ar. Ra. 1053-56.


142 Ar. Ach. 651.
143 Ar. Ach. 655-58.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 175

Pues bien, esta declaración de principios es todo un programa de ataque cómico, es


decir: de ridiculización, contra los otros "espacios de comunicación" o "espacios
públicos" de la pòlis, que eran los tribunales de justicia, los santuarios, el gimnasio y,
finalmente, el Agora, que era el corazón, de la pòlis.
Como ya hemos adelantado, aunque en el teatro se representen obras dramáticas
parodiables y en él exhiban sus producciones los malos poetas -ambas realidades son
buena materia prima para un comediógrafo-, el teatro es para Aristófanes un espacio
público que merece el mayor de los respetos. Entre otras razones, porque en él se presenta
el poeta como consejero e instructor de la pòlis , exhortando a sus conciudadanos a elegir
la conducta más justa y conveniente.
El teatro es para Aristófanes el "espacio público" del poeta moralista desde el que
alecciona a sus conciudadanos.
Recordemos que el dios Dioniso de Las Ranas había descendido al Hades para
recuperar al poeta que mayor bien pudiera hacer a la ciudad de Atenas, de manera que,
una vez allí, se vio en la difícil situación de tener que elegir entre Esquilo y Eurípides:
f07rórepoç ouv av rq 7róXet 7rapaivéaeiv
juéXXi] ti xPfitfTÓv, TOÚTOv à'Çeiv poi ÔOKGû.
"Pues bien, a quienquiera de los dos que llegue a dar un consejo salutífero a la
ciudad, a ése tengo decidido llevármelo de aquí conmigo"144.
Por el contrario, los demás "espacios públicos" (el Agora, la Pnix, la sede del Consejo,
los tribunales, los santuarios y los gimnasios) son objeto de ridiculización, crítica y
censura.

La razón de ello es la crítica netamente social y polít


Comedia aristofánica, heredera de prácticas propias de ritual
"humor ritual", a base de sus héroes cómicos individualis
automarginan de la sociedad y de sus más importantes "espaci
Los héroes cómicos "taimados", "impostores" o "fanf
"picaros", se mueven a su aire por la escena aristofánica
reputación de los "espacios públicos" en los que se sustenta la v
El héroe cómico Estrepsíades está recibiendo en el centro
que es el "Pensatorio" -probablemente, otro "esp
caricaturizado- una formación que le permitirá convertirse e
jucca0Xr|ç, eïpcov, yXoióç , áXaCcov.
"flexible, taimado, pegajoso, fanfarrón"146
La inferior calidad moral del héroe cómico -según la
Aristóteles- tiñe de bajeza los "espacios públicos", de los que
representantes:

144 Ar. Ra. 1420-21.


145 C. H. Whitman, Aristophanes and the Comic Hero , Harvard University Press, Cam
(Mass.) 1964, 24.
146 Ar. Nu. 449.

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176 Antonio LÓPEZ EIRE

èv ocuTiļ Ôè Tīļ 5ioc(ļ>op(x Kai r' rpay


õiéarriKev r' pèv yàp x^ípouç r' Ôè ße
tc5v vi3v.
"Y en esa diferencia también la tragedia se distancia de la comedia; pues ésta
pretende imitar a hombres inferiores a los de ahora, aquélla a hombres
superiores"147.
Así pues, el poeta moralizante Aristófanes ataca con fines cómicos, desde el "espacio de
comunicación" del teatro, esos otros "espacios públicos" que se prestaban a l
explotación cómica del filón político, que era el que el propio comediógrafo, desde e
año 427 a. J. C. al 403 a. J. C., se empeñaba en explotar148 .
En efecto, los tribunales de justicia no salen bien parados, como es bien conocido,
en la Comedia aristo fánica, pues, particularmente en Las Avispas , aparecen justament
ridiculizados:

4>ép' ïÔgû, ri yàp ouK èariv aKouaai 0cÓ7reuju' èviauSa õiKaarrj;


oi jLiév y' a7TOKXáovTai 7revíav aurcSv, Kai 7rpoari0éaaiv
KaKà 7rpòç roiç ouaiv, ècoç áv icòv áviocóai] roîaiv èpoîaiv
oi Ôè Xéyouaiv pu0ouç r|pîv, oi Ô' Aiaoo7roo ri yéXoiov
oi Ôè OKcÓ7TTouo' ïv' èycò yeXdaco Kai ròv 0upòv KaraOoojuai.
Kav jurj TouToiç dva7r6i0co|Liea0a, rd 7raiÖdpi' sù0ùç avéXKei
ràç 0r1Xeiaç Kai roùç uieîç rrîç èycò Ô' aKpocopai,
rà Ôè ODYKuii/avO' apa ßXqxäTai, KaTCiO' ó 7rarr)p Ó7rèp aorcov
(2a7rep 0eòv avrißoXei pe Tpépcov rrjç eu0uvriç áiroXvoav
"el pèv xaípeiç apvòç (J)covij, 7raiôòç (Jxovqv eXeqaaig*"
ei Ô' au roîç xoiQiòíoxç x«í poo, Ouyarpòç <ļ)oovi] pe 7ri0éo0ai.
Xfipeîç aureo rote rfjç ôpyrjç òXíyov ròv kóXXo7t' aveîpev.
ap' ou peydXq tout' íoť àpxò Kai toû tiXovtov KaTaxovri;
"A ver: ¿qué halago no le es dado al juez oírlo allí? Unos deploran su pobreza y
añaden males a los que en realidad soportan, hasta, discurriendo en su exposición,
igualar a los míos. Otros nos cuentan fábulas, otros algún chascarrillo de Esopo y
otros chancean para que yo me ría y deponga mi cólera. Y si con eso no nos dejamos
convencer, al punto hacen subir a la tribuna, arrastrados por su mano, a sus niñitos,
sus muchachas y sus hijos, y yo les presto oído y ellos, con las cabezas gachas, balan a
coro sus lamentos, y luego su padre, en favor de ellos, me suplica temblando a mí, -
como si fuera un dios, que le absuelva del cargo resultante de su auditoría de
rendición de cuentas: "si te complaces en la voz del cordero, compadécete de la voz
de un niño", y si, por el contrario, me complazco en las cochinillas, que ceda yo a la
voz de su hija. Y entonces nosotros, en su beneficio, relajamos un poco la clave de la
cuerda de nuestra cólera. ¿Acaso no es eso un gran poder y la burla de la riqueza?"149.
Por muchos testimonios sabemos de las prácticas de los tribunales atenienses de por
aquellas fechas, algunas de las cuales coinciden con las que en el precedente pasaje

147 Arist. Po. 1448 a 16.


148 G. Mastromarco, Introduzione ad Aristofane , Editori Laterza, Bari 1994, 160.
149 Ar. V 563-75.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 177

Aristófanes denuncia cómicamente, por boca del complacido juez Filocleón, con la
necesaria e imprescindible y explicable exageración o caricaturización propias de la
comedia. Por ejemplo, sabemos que era estrategia habitual el que los acusados hicieran
subir a la tribuna a sus familiares y, particularmente, a sus hijos, para alcanzar la
compasión de los jueces, o que aquéllos contaran a éstos un par de chistes con los que
pretendían ganarse su benevolencia y simpatía y por ende su absolución, lo que a veces
realmente lograban.
Así, en el discurso Sobre los misterios , de Andócides, nos topamos, envuelto en una
hipófora -figura por la que el orador se escinde, dentro de un diálogo fingido, en dos
personas, de las que una pregunta y la otra respóndelo- con este testimonio del frecuente
recurso, empleado por los acusados para ablandar el corazón de los jueces, consistente en
hacer subir a los familiares a la tribuna a implorar clemencia:
Tíva yàp Kai avaßißaacojjai SerļaoļUEvov Ú7rèp èjuauroó; ròv
7raT£pa; áXXà te0vt1 kev . 'AXXà roùç áÕ£X<j)ouç; áXX' ouk
EÍaí.'AXXá roùç 7raîÔaç; áXX' ou7Tcû Y^Y^vrivTai.
"Pues ¿a quién haré subir a la tribuna para que suplique por mí? ¿ A mi padre? ¡Pero
si ha muerto! ¿A mis hermanos? ¡Pero si no los tengo! ¿A mis hijos? ¡Pero si aún no
me han nacido!"151 .

Y Demóstenes, en su discurso titulado Contra Aristócrates , se expresa de esta guisa a


propósito de la facilidad con que los dicastas o jueces-jurados de los democráticos
tribunales atenienses se dejaban arrastrar a emitir una sentencia favorable por causa del
gracejo del acusado que les hacía reír con un par de chistecillos:
újuEiç Õ', co ávÔpEç 'A0r|vaîoi, roùç Ta jnEYiar' áÕiKoúvTaç Kai
4>avEpcoç eÇeXeyxomcvouç, ¿tv ev fļ Su' àoTzi ei7tcüöiv Kai 7rapà
TCOV (1>uXeT(3v TIVEÇ 1] pTļ JJEVOl aUVÕlKOl 0£Tļ0Q)OlV, à<J)ÍET£.
"Vosotros, en cambio, varones atenienses, a los que os causan los mayores agravios y
ostensiblemente resultan convictos de ello, si os dicen un par de palabras graciosas y
algunos individuos escogidos de entre los miembros de su misma tribu en calidad
de defensores os lo suplican, los absolvéis"152.
Otro "espacio público de comunicación" es el santuario o el templo, el espacio
sagrado dedicado a los dioses.
Es el lugar de comunicación entre los hombres y los dioses a través de los
sacrificios, las libaciones, las plegarias, las ofrendas, las fiestas y las consultas de los
oráculos.
Es además un "espacio de comunicación" entre los hombres, pues en los santuarios se
encontraban visibles importantes inscripciones públicas, como las de las cuentas del
templo mismo, leyes sagradas y otros textos legislativos de público interés.
En algunos santuarios se practicaba la incubación o incubatio , en cuya práctica al
consultante de un oráculo se le ponía en contacto directo con la divinidad, que

150 Tiber. Schern. III, 77, 5 Spengel.


151 And. I, 148.
152 D. XXIII, 206.

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178 Antonio LÓPEZ EIRE

respondía a sus preguntas apareciéndosele en su


santuario.
Contamos con una hilarante conversación del esclavo de Cremilo, Carión, con una
mujer a propósito de su experiencia durante una incubación, en la que aquél se refiere
al dios Asclepio con bromas e insultos escatológicos de la peor especie de irreverencia.
En general Aristófanes ridiculiza la religión tradicional y las creencias de
ultratumba153, siguiendo, al hacerlo, prácticas rituales del "ritual humor", que se
practica en festividades religiosas atacando irreverentemente a aquellas fuerzas o
conceptos que se consideran indispensables e inatacables en la vida ordinaria de fuera de
los límites temporales de la festividad.
Veamos la aludida conversación de Carión con la Mujer en el Pluto :
KA. Mera touto Ô' iqÔr| Kai yéXoiov ÔrjTOt ti
knoņoa. npoaióvTOç yàp aÚTOu péya Trávu
a7ré7rapÔov r' yaoTrip yàp è7rex1)úoqTÓ pou.
rY."H 7TOU as Ôià tout' eu0ùç sßÖeXurreTO.
KA. OuK, àXX' 'Iaacû pév tiç aKoXou0oua' ápa
U7TT1 puöpi aos xfi riavaKEi' á7reoTpá(J)q
Tř|v pîv' e7riXaßo ûo'* ou XißavooTOv yàp ßöeco.
TT. Autòç Ô' sksîvoç;
KA. Ou pà Aí' ouÔ' e<ļ)p6vTiasv.
TT. Asyeiç áypoiKov ápa au y' eivai tòv 0eòv.
KA. Mà Aí' oÙK eycoy', àXXà OKaTO^áyov.
"Carión.- Después de eso ya hice también una cosa ciertamente graciosa. Pues, al
acercarse él, solté un pedo sumamente grande, pues mi vientre estaba hinchado.
La Mujer.- Sin duda, entonces, por eso el dios de inmediato te abominaba de puro
asco.

Carión.-No, pero una tal Jaso que seguía tras él se puso un poco
dio la vuelta y se apretó la nariz con los dedos, porque mis pedos
La Mujer.- ¿Y el dios mismo?
Carión.-Nada. Ni se dio cuenta, ¡por Zeus!
La Mujer.-Entonces tú quieres decir que el dios es un rústico.
Carión.-No. Yo no digo eso, sino que es un comemierda"154.
En Las Aves , con la fundación de Nefelocoquigia la comunicaci
y los hombres quedará cortada, lo que en realidad representa algo
cómico o un mero símbolo, pues refleja sin duda una situación
pérdida de la fe en los tradicionales dioses olímpicos155:
'Ev péoco Ôr]7rou0ev áríp san yrjç.
Ei0' (oo7rep ripeîç, íjv ievai ßouXo6pe0a
nu0coôe, Boigotoùç ÕíoÔov aÍTOupe0a,

153 Cf. L. Gil Fernández, Aristófanes , Gredos, Madrid 1996, 91-8.


154 Ar. Pl. 697-706.
155 Cf. L. Gil Fernández, o. c. 95 "Esta incoherencia indica que Aristófanes, como sus
contemporáneos, había perdido ya la fe en el panteón tradicional".

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 179

où'tgûç, örav 0úcoaiv av0pcû7roi 06oîç,


fjv pq (ļ>opov (1)épcoaiv ujliîv oi 0eoi,
Ôià rrjç 7róXeioç rrjç áXXoTpíaç Kai tou x<*ouç
tcõv ļn Tļ pí cov rrjv Kvîoav ou Sia^prļaere.
"En medio del cielo y la tierra está, sin duda, el aire. Entonces, al igual que
nosotros, si queremos ir a Pito, pedimos a los beocios permiso de paso por su
territorio, así, si los dioses no os pagan tributo, cuando los hombres hagan
sacrificios a los dioses, no dejaréis pasar a través de la ciudad esa que les es
extranjera y del vacío el humo de la grasa de los muslos"156.
Pasamos ahora a otro "espacio público de comunicación", al gimnasio, centro
intelectual de primer orden. Había varios en la Atenas del siglo V a. J. C.
En ellos, además de la gimnasia, que era todo un entero y verdadero sistema de
educación, con frecuencia emparejado con la pederastia, abundantemente documentada
en documentos literarios y arqueológicos, se ejercía otra forma distinta de educación
que los sofistas difundieron por los gimnasios, a saber, la formación intelectual.
Sócrates en el Lisis platónico nos refiere cómo un día, caminando de la Academia al
Liceo, dos famosos gimnasios convertidos más tarde en escuelas filosóficas, se encontr
con Hipótales y Ctesipo acompañados de otros jóvenes que se dirigían a un nuevo
gimnasio cuyo maestro era el distinguido sofista Mico. Así se lo hizo saber Hipótales
al maestro. Veámoslo:
"Egtiv Õè òr ' tí touto, Kai tíç q ÖiaTpißq'; IlaXaíoTpa, è'<J>q,
vecooTi (OKOÔojLirijLiévrr q Õè ÖiaTpißrj Ta 7roXXà èv Xóyoiç, cov
qõéooç áv aoi peTaÕiõoípev. KaXooç ye, qv Õ' èyoó, 7toioúvt£ç-
ÔiÕáoKei õè tíç auTÓ0i; lòç èTaípóç ye, q õ' oç, Kai £7raiv£Tqç,
Míkkoç. Mà Aia, qv õ' èyco, ou <J)aúXóç ye ávq'p, áXX' iKavòç
aocjHOTq'ç.
"-¿Y eso qué es y cuál es el pasatiempo que allí se ejercita?-Una palestra, dijo,
recién construida, y el pasatiempo que allí se practica la mayor parte del tiempo es
el de los discursos, en los que con mucho gusto te dejaríamos participar.-Bien
hecho, dije yo. ¿Y quién es el que enseña allí?-Tu compañero y ensalzador Mico,
dijo él.-No es un hombre sin mérito, no, por Zeus, dije yo, sino un sofista
competente"157.
Ahora bien, tampoco este "espacio público de comunicación" sale bien parado en la
Comedia aristofánica, sino que, como todos los demás salvo el teatro, es atacado y
sometido a la crítica burlesca que caracteriza el "humor ritual".
Se registraba en los gimnasios -tal como los ve Aristófanes- un ambiente
demasiado propicio a la homosexualidad contrario al de los viejos tiempos, cuando, a
juzgar por los ejemplos que expone el Razonamiento Justo, se evitaban las conductas
procaces y los comportamientos deshonestos. Esto parece desprenderse de los siguientes
versos de Las Nubes:
èv 7raiöOTpißou õè KaOíÇovTaç tòv pqpòv êõei 7rpoßaXea0ai

156 Ar. Av. 187-193.


157 PI. Ly. 203 b.

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180 Antonio LÓPEZ EIRE

toùç 7raîÔaç, 07Tcoç toîç ëÇoùSev juriôèv


ziť au 7rdXiv aù0iç avioTajuevov aujL
eïÔcûXov roîaiv èpaaraîaiv Trjç ff Pqç j
rļXeiiļ/aTo ô' av TOÙju<|>aXoù oùôèiç 7r
d)OT6 toîç aiôoíoiai Ôpóooç Kai xvoùç co
oùÔ' av paXaKrjv (1)upaodcjLievoç riļv (J
auròç èauròv 7rpoaY00Y£Ucov toîv 0(ļ)0a
"En lo del maestro de gimnasia era menester qu
muslo por delante, para que a los de fuera no les
a su vez, al levantarse, tenía uno que alisar la a
dejar impresas en ella huellas de su virilidad. Y
frotaba con aceite por encima del ombligo, d
florecía rocío y pelusilla como sobre los memb
voz con enjuagues, caminaba hacia su amante pr
ojos "158.
Recordemos que en muy antiguos ritos en los que se verifica la presencia del
"humor ritual" la homosexualidad es un campo de cultivo favorito para la cosecha de la
risa y la carcajada de poder mágico. Justamente la homosexualidad y el travestismo son
dos de los rasgos esenciales que definen el concepto de "ritual humor" de Apte159.
Tampoco quedan sin censura otros "espacios de comunicación", como los Baños
Públicos, tan poco recomendables como el Ágora (recordemos que los primeros Baños
Públicos se encontraban a las afueras de la Puerta del Dipilón160 y que en los
alrededores de los cementerios -el barrio en el que se encontraba el pasaje del
Dipilóm- se concetraban los elementos sociales marginados de la ciudad de Atenas):
Ka7riaTTļaei juioeiv dyopàv Kai ßaXaveicov a7réx£CJ0ai,
"y aprenderás a odiar el Ágora y a abstenerte de los Baños Públicos"161 .
Pero el centro de comunicación más importante de la ciudad, el corazón de la pòlis ,
es el Ágora. El Ágora es el punto al que concurren y en el que coinciden los ciudadanos
atenienses, que viven inmersos en una cultura en la que precisamente predomina la
oralidad. Así se reconoce, al menos, en un discurso de Lisias:
6Kaaroç yàp ùjucSv eïOiarai 7rpoa<ļ>oiTCtv ó pèv 7rpòç ļLiupo7rioXiov, ó
õè 7TpÒÇ KOUpeÍOV, Ó õè 7tpÒÇ (JKUTOTOjLieioV, Ó Ô' Ö7TOI av TUX1] » Kai
7rXeîcjToi jLièv (¿ç toùç syyutcctio rrjç ayopaç KareaKeuaajuévouç,
èXáxiCFTOi Õè coç toùç 7rXeîoTov a7réxovTaç aÙTqç.

158 Ar. Nu. 973-80.


159 M. L. Apte 1983, 131-76.
160 R. Ginouvès, Balaneutikè: Recherches sur le bain dans l'antiquité grecque , Paris 196
212 ss. El Dipilón o "pasaje de las dobles puertas" se encontraba en el "barrio
alfareros" o Cerámico, una zona de Atenas que desde el siglo XI a. J. C. en ad
estuvo destinada a los enterramientos. Un patio rectangular que daba al campo
doble puerta de entrada a la ciudad eran los componentes principales de este pasa
estaba flanqueado por dos torres.
161 Ar. Nu. 991.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 181

"Pues cada uno de vosotros está acostumbrado a frecuentar, uno la perfumería, el


otro la barbería, el otro la zapatería y el otro el local que le cuadre, y la mayoría
acude a los vendedores que están instalados lo más cerca del Ágora, mientras que los
menos lo hacen a los que más distan de ella"162.
El Agora era un centro importantísimo de comunicación y de interacción ciudadana,
hasta el punto de que se consideraba que quien no charlaba en el Ágora, como el
sicofanta y "perro del pueblo" Aristogitón, era un ser asocial:
ou (1)iXav0p(jû7riaç, oûx ópiXíaç oùÔejlikxç ouôevî. koivcoveî* àXXà
7Topeu erat Ôià Tfiç áyopctç, coa7rsp e'xiç fi GKOp7rioç fipKoûç rò
KEVTpOV, CL TTGûV ÔEÛpO KCXKEÎ GE, G K07TCÛV TlVl GUp<f)Opàv fi
ßXaac1)r|ju{av fi kgckòv ti 7rpoarpit|/ájuevoç Kai Karaarfiaag eíç
c|)0ßovapyupiov EÍG7rpcxÇETai.
"No participa con nadie en ninguna labor humanitaria ni en ninguna reunión
social; antes bien, va caminando por el Ágora como una víbora o un escorpión,
aguijón en ristre, saltando de aquí para allá, mirando a quién infligir una
desgracia, una calumnia o algún daño o a quien intimidar para hacerse pagar
dinero"163.

Después de las reuniones políticas se se formaban corrillos que hablaban y discutían en


el Ágora, tal como lo confirma este pasaje de un discurso del Corpus Demosthenicum :
ETI yàp T(j5 V 7TpaYJLlÓtTlOV dvTCUV JLIETECO pCOV Kai TOÓ péXXoVTOÇ
àÔfiXou, GuXXoyoi Kai Xdyoi 7ravToôa7roi KaTa Tfiv áyopàv
eyíyvovTO tòte,
"pues estando la situación todavía en el aire y siendo el futuro incierto, se
producían entonces por la plaza reuniones y discursos de todas clases"164.
Sin embargo, Aristófanes arremete en sus comedias contra tan importante "espacio de
comunicación", tanto contra el Ágora en su función de mercado, como contra el Ágora
en cuanto centro de convivencia ciudadana.
No hay peor insulto que el de ser llamado hijo del Ágora, de la plaza del mercado. Así
se lo hace saber el Primer Criado (Demóstenes) al Morcillero:
AA. EÍ7TE juoi, Kai 7TC0Ç èycò
àXXavT07T(j6Xqç cSv ávfip yEvfiaojaai;
01. A' Ai* auTÒ yap toi touto Kai yíyvEi juéyaç,
ó Tifi 7rovripòç Ka€ àyopáç ei Kai 0paauç.
"El Morcillero.-Dime, ¿y cómo yo, que soy un morcillero, puedo llegar a
convertirme en un prohombre?
El Primer Criado.- Pues por eso mismo precisamente te vas haciendo grande,
porque eres un bribón y un hijo del Ágora y un atrevido"165.
Por otro lado, en el Ágora es donde dicen insensateces y parlotean los maricas
empleando en su refinado discurso, que es más bien jerigonza, palabras estrafalarias y

162 Lys. XXIV, 20.


163 D. XXV, 52.
164 D. XIX, 122.
165 Ar. Eq. 178-81.

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182 Antonio LÓPEZ EIRE

estrambóticas que sirven, en su jerga pseudocie


asuntos sin sustancia:
AH. Tà jLieipaKia tauri Xéyio ràv tg5 pupo),
a ariojiuXsirai roiaõi KafirjjLisva*
Z o<1>òç y' ó <í>aía£ õeÇtóSç ť oùk cx7ré0avev.
ZuvepriKÒç yap èari Kai 7TEpavTiKÓç,
Kai yva)juoTU7riKÒç Kai aacj>rjç Kai KpouaTiKÓç,
KaraXr|7rTiKÓç ť ápiara tou OopußqTiKoü.
"Me refiero a esos muchachitos del mercado de los perfumes que allí sentados
sueltan parloteos de esta especie: "Habilidoso, Féace, y con destreza se libró de la
condena a muerte. Pues es coercético y conclusivético y sentenciático y claro y
chocan tético y excelentemente reprimidorético de lo alborotético""166.
A esos dos espacios subsidiarios del Ágora en los que se celebraban las reuniones de
la Asamblea ( Ekklesía ) y el Consejo {Boulé) también los ataca Aristófanes rigurosa y
despiadadamente: están pervertidos y viciados de raíz, por lo cual ya no cumplen con sus
originarias funciones, pues, efectivamente, los asambleístas acuden tarde y desencantados
a las asambleas y los buleutas se desentienden del cumplimiento de sus obligaciones y ni
tan siquiera respetan el juramento de no divulgar los secretos de sus sesiones. Así nos lo
hace saber nuestro comediógrafo:
He aquí, en primer lugar, su censura al mal funcionamiento de la Asamblea:
AI. 'AXX' ovbzmÁnoť è£ orou yw puTtropai
OUTCOÇ 6ÔT1X0T1V U7TÒ KOVÍaÇ T(XÇ 0<ļ>p Í5 Ç
toç vúv, Ó7tót' ouariç Kupíaç EKKXqaíaç
ècù0ivrjç ëpqjuoç f| 7rvùÇ aurrļi,
oi ô' èv àyopcx XaXoûoi Kavco Kai koctcû
tò axoiviov <J)euyouai rò juepiXrcůpévov.
"Diceópólis.-Pero nunca, desde que me lavo dándome friegas, me han picado tanto
las cejas por obra de la sosa como ahora, cuando, celebrándose una asamblea regular
con la alborada, ahí está la Pnix vacía, mientras la gente parlotea en el Ágora yendo
de arriba para abajo y escapan de la cuerda empapada en bermellón"167.
Veamos ahora su ataque al mal funcionamiento del Consejo:
KOUTE TánÓppT)ť e<ļ>Tļ
EK 0EojLiO(J)ópoiv EKaaroť auràç ek(|>epeiv,
GÈ õè KajUÈ ßOUXEUOVTE T0ÛT0 õptXV OLEÍ.
"Y decía que tampoco ellas divulgan los misterios cada vez que se reúnen en las
fiestas Tesmoforias, mientras que tú y yo, cuando somos miembros del Consejo, lo
hacemos siempre"168.
Con estas críticas que despertaban la hilaridad de los asistentes a las comedias, la
pòlis deconstruía su propio discurso en beneficio de la audiencia, que tomaba conciencia
de sus problemas a través de la risa, la burla, el humor desenfadado y contemplando

166 Ea. 1375-83.


167 Ar. Ach. 17-22.
168 Ar. Ec. 442-4.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 183

conductas que normalmente no estaban permitidas, aunque en ciertos casos y en pequeña


cuantía sí tenían existencia real. Pues de hecho los atenienses que contemplaban la
comedias aristofánicas remoloneaban a la hora de asistir a las sesiones de la Asamblea y
no guardaban celosamente los secretos debatidos en el Consejo.
Estamos bien informados por el propio Aristófanes y por otras fuentes de que, con
el fin de incrementar el número de asistentes a las asambleas, se pagaban tres óbolos a los
ciudadanos asistentes, para lo cual se les entregaba al entrar una especie de ficha
(, symbolon ) canjeable por la mencionada suma al final de la sesión169; y asimism
sabemos que los miembros del Consejo o buleutas recibían con frecuencia
informaciones secretas y sobre ellas deliberaban obligándose bajo juramento a l
exigible discreción propia de tales casos. Veámoslo:
07rcjûç Õè ró oujußoXov Xaßovieg epeira 7rXr|- / aíoi Ka0eÕoupe0'
"En cuanto hayamos cogido el vale, ved porque juntos nos sentemos"170.
Kayù '(ļ)paoa
auroîç a7T0ppTļT0V 7TOTia<XJLi6VOÇ taxu,
iva tàç à(1)uaç (uvoîvto 7roXXàç TOußoXou,
tgûv ôrijLuoupYWv £uXXaßeiv rà tpußXia.
"Y yo les hice saber rápidamente, preséntandolo como secreto, que fueran donde los
artesanos a acaparar los pucheros, para que compraran las anchoas al precio de un
óbolo por muchas"171 .
Las deliberaciones secretas del Consejo eran una realidad, pues en un discurso del
Corpus Lysiacum se nos presenta al Consejo como sede de tales deliberaciones:
eioeXOcov õè eiç tauTTļv rfļv ßouXqv ev a7ropprļT(jo ©eoKpitoç
jurļvuei on auXXeyovtai tiveç évavticoadpevoi roîç rote
KaOiarajLiévoiç 7rpocyļLiaai.
"Entrando Teocrito en ese Consejo, denuncia en secreto que se están reuniendo
ciertos individuos para hacer frente a la situación política que se iba
estableciendo"172.
Lo mismo parece deducirse de un pasaje del discurso II de Andócides, el titulado Sobre
su propio regreso :
oïnveç eiaaYYÊÍ^orvTOç pou a7rdppTļta eiç rqv ßouXrjv 7repi [tgûv]
7rpaYJLi(XT(ov, cSv ct7roT£Xea0évToov ouk eiai rr¡ 7rdXei tauri]
peiÇoveç c¿c1)éXeiai, Kai tourtov ot7roôeiKvu vroç jliou toîç
ßouXeuraig aa<1)eîç te Kai ßeßaioug ràç a7roôeíÇeiç, eKeî pèv oure
toutgûv rc5v avôpcûv oi 7rapaY£vdpevoi èXéyxovxsç oioi r qaav
a7roÔeííai eï n prj óp0c5ç eXeysro, our' cxXXoç oúõeíç, èv0áÔe Õè
vûv 7reipcSvTai ÖiaßaXXeiv.
"Esos individuos que ahora aquí intentan acusarme, mientras que, cuando yo
comuniqué al Consejo secretos acerca de asuntos que, de haber sido llevados a efecto,

169 Ar. Ec. 296 ss.


170 Ar. Ec. 296.
171 Ar. Eq. 647-50.
172 Lys. XIII, 21.

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184 Antonio LÓPEZ EIRE

no habría recibido esta ciudad mayores servici


sólidas indicaciones a los consejeros, ninguno
estuvieron presentes juzgándome ni ningún otro
que allí se decía era incorrecto"173.
Aristófanes ataca certeramente los centros neu
aumentando, cargando y caricaturizando todos los
Así pues, en las comedias aristofánicas se ofrece
seno de unas festividades religiosas (las fiestas
permiten el "humor ritual", para hacer burla d
normales de la vida ciudadana (incluidos los dioses y
a propósito del funcionamiento de los "e
comunicación" consuetudinarios, y ello con e
mediante esta dramatización que emplea abund
rituales. En la trama de la comedia griega antigua l
encuentran inextricablemente enredados.

Ahora bien, es bien sabido que la base de lo cómico es el contraste, el llamado


"contraste cómico"174.

En virtud de ese "contraste cómico", el poeta con frecuencia apunta de forma más o
menos directa a lo positivo a través de lo negativo, a veces se quita la máscara y habla
claro (esto es lo que hace Aristófanes en las parábasis de sus comedias173) o bien otras
veces, en el curso de la propia acción dramática, contrapone lo negativo a lo positivo176.
En el tema concreto de los "espacios públicos" o "espacios de comunicación" de la
pòlis, Aristófanes por ambas vías contrapone la deseable placidez de la vida en el campo a
la inquietud de la vida ciudadana y enfrenta el individuo que vive en la paz del campo
al ciudadano agobiado en la ciudad asediada por la guerra.
Así, el gran comediógrafo nos transporta, en varias de sus comedias, del denostado
"espacio público" real al espacio rústico añorado aunque asimismo real, elogiando y
ponderando las virtudes del espacio de la aldea frente al "espacio público" de la ciudad.

173 And. II, 3.


174 W. Kraus, "Aristophanes-Spiegel einer Zeitwende", en H. -J. Newiger, Aristophanes
die alte Komödie, Wissenschaftliche Buchgesellschaft, Darmstadt 1973, 435-38. Cf. 4
"dass es auf einem Kontrast beruht (sc. das Komische )".
173 D. M. MacDowell, Aristophanes and Athens. An Introduction to the Plays , Oxfo
University Press, Oxford 1995, reimpr. 1996, 5-6 "Aristophanes is not just trying to ma
the Athenians laugh but is making some serious point which is intended to influenc
them".

176 W. Kraus, "Aristophanes-Spiegel einer Zeitwende", en H. -J. Newiger, o. c. 441 "der


künstlerische Gestalter des Komischen, indem er das Negative darstellt, auf das Positive
hinweist. Um den komischen Dichter zu verstehen, muss man diesem Hinweis folgen
und das Positive erfassen, das sich in seiner Darstellung des Negativen offenbart.
Aristophanes hat uns diese Aufgabe dadurch erleichtert, dass er das Positive an manchen
Stellen seiner Komödie auch direkt ausspricht... indem er spontan für einen Augenblick
die komische Maske lüftet".

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 185

Nos encontramos, de este modo, con el tópico del menosprecio de la ciudad y alabanza
de la aldea, de la aldea pacífica que se añora desde la ciudad llena de asechanzas:
a7ToßXe7TGüv eiç ròv áypóv, eipqvriç èpc5v,
aruyoSv pèv áaru, ròv õ' èpòv Ôfjjuov 7to0cj5v,
ôç oòÔ57r(jú7roT' £urev«"Av0paKaç 7rpíoú»,
ouK óÇoç, ouK eXaiov, ouÕ' rfõei 7rpíco,
áXX' auiòç ë(|)epe 7rávTa 7rpítov a7rrjv.
"Mirando a lo lejos anhelantemente al campo, enamorado de la paz, odiando a la
ciudad, echando de menos mi pueblo, que nunca dijo "¡compra carbón!" ni
"vinagre" ni "aceite" ni sabía esa cantilena de "serrar" que era el "¡compra!", sino
que él mismo me proveía de todo y la "sierra" esa del "¡compra!" estaba ausente"177.
Que la tranquilidad y el placer sexual asociados a la paz están en el campo es algo que
Aristófanes hace decir a los personajes de sus comedias en reiteradas ocasiones.
En Los Caballeros , el Morcillero hace entrega a Pueblo, viejo gruñón un poco
sordo, de la Tregua de Treinta Años, una jovencita de muy buen ver, para que se la lleve
con él al campo:
Nóv ouv èyœ aoi 7rapaÕíÕiú|LT eiç roùç aypoùç
aùràç levai Xaßovra.
"Pues bien, ahora yo te la (se. la Tregua de treinta años) entrego, para que la cojas y
te vayas al campo con ella"178.
Nada hay tan placentero para Estrepsíades como la sencillez, la despreocupación, la
incuria, la desidia y la ausencia de artificialidad propias de la vida del campo
satisfecha con los productos naturales.
Por eso maldice la hora en que la casamentera le propuso tomar por esposa a una
ciudadana fina y afectada que se daba aires de grandeza:
ei0' dxJjeX' f| 7rpopvrļaTpi' a7roXéa0ai kcckoûç
fiTiç pe yrjp' £7rfjpe rfļv oqv prirépa*
èpoi yàp nv dypoiKOç fíôiaroç ßiog,
eupomcôv, aKÓpTiToç, e'iKi] Keípevoç,
ßpucüv jLieXÍTTOuç Kai 7rpoßcxTOig Kai arep<|)uXoiç.
ë;reiT' eyripa MeyaKXéouç toó MeyaKXéouç
àÔeXcjHÕrjv aypoiKoç <3v èÇ aarecoç,
aepvTļv, rpu(|)c5aav, eyKeKoiaupcopevriv.
"¡Así debiera morirse de mala muerte la casamentera que me levantó de cascos con la
boda de tu madre; que a mí la vida de campesino me era la más grata, una vida
mohosa, sin barridas, tirada a la bartola, rebosante de abejas, ovejas y orujo! Y luego
voy y me caso con la sobrina de Megacles el hijo de Megacles, yo, un campesino, con
una de ciudad, arrogante, delicada, presumida como una Césira cualquiera"179.
Es en el campo donde se consigue el verdadero sosiego y la quietud necesaria para llevar
una vida relajada y tranquila. Así nos lo hace saber Trigeo en La Paz:

177 Ar. Ach. 32- 6.


178 Ar. Eq. 1394-5 .
179 Ar. Nu. 41-8.

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186 Antonio LÓPEZ EIRE

Ou yòcp 6(70' qôiov rļ luxeîv juèv rfôr| 'a


tòv 060V õ' è7rii1íaK(xÇeiv, Kai riv' 6Ì7T
>>EÍ7ré poi, tí TīļviKaura ÔpcSjuev, io Kc
->>'E|Li7rieîv 6poiy'(xp60K6i toû 0eoû Ôpc
"Pues no hay cosa más agradable que encontrar
llovizne y que un vecino te diga: "Dime, Comárq
mí me apetece empaparme en bebida mientras Di
Ahora bien, lo más interesante para nuestro
"espacios" en la Comedia aristofánica es contem
aparece presentado como espacio privado, alejado d
asociado íntimamente a la paz, y además como esp
Ar. Ach. 32 (X7roßXe7rü)v eiç tòv àypòv, el
" Mirando anhelantemente al campo, enamorado
El verbo (X7roßXe7rcü significa "mirar desde lejo
tal y como el amante contempla al amado. Este
claramente en el Fedro platónico:
toc T6 áXXa jurixavaaOai 07rcûç âv q
d7roßX67ro)v eiç tòv epaaTTļv.
"Ingeniárselas para que lo desconozca todo y en
hacia su amante"181 .

Con los productos del campo se entra en conver


privado. Veamos cómo el Morcillero, en su dis
diálogo que entablará el Pueblo con el orujo de acei
delicias del campo:
El 06 7tot' eiç áypòv outoç à7T6X0(òv eip
Kai x^Ôpa (ļ)ayo0v àvaOappqai] Kai OTs
yvGÓaeTai oïcov aya0c5v aÙTÒv pia0oc1)
eì0' fļ^ei croi ôpijuùç áypoiKoç KaTcc aou
"Pero si algún día ese individuo regresa al cam
recupera comiendo granos de cebada tostada y en
dará cuenta de qué clase de bienes le venías tú si
otorgas, y luego regresará con la aspereza del rús
condene"182.
En el espacio privado del campo los hombres justos que son los labradores saludan
y abrazan, con la emoción del reencuentro añorado, sus plantaciones, tras haber
permanecido trece años183 sin verlas:
TP. 'AXXà 7râç X^p6i 7rpòç ëpyov eiç àypòv 7raiiovíaaç.
XO."ß 7To0eivri toîç ôiKaíoiç Kai yecopyoîç qjuepa,
àajLievóç <a'> iõiòv xpoosineiv ßouXojuai Tàç àp7réXouç,

18ū Ar. Pax 1 140-3.


181 Pl. Phdr. 239 b.

182 Ar. Eq. 805-8 .


183 Cf. Ar. Pax 990.

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 187

i dç te oukgcç ócç éyco tyureuov gov vecorepoç


áo7ráoaodai 0ujliòç r| juîv èari 7roXXoaTG0 xpóV(í-
"Trigeo.-jPero, venga, que todo el mundo entone un peán y se ponga en marcha, cara
al trabajo, hacia el campo!
Corifeo.-¡Oh anhelado día de justos y labradores! Contento de haberte visto, quiero
saludar a mis viñas; y a las higueras que yo iba plantando cuando era joven, ardemos
en deseos de abrazarlas después de tanto tiempo"184.
La relación personal que se entabla entre el espacio privado y familiar del campo y
el campesino que regresa a él se expresa en afectivos diminutivos que se refieren a las
plantas contempladas -a través de la figura retórica denominada prosopopeya- como
seres animados realizadores de actos humanos tan afectuosos y humanamente sentidos,
como el sonreír:
"ilare oe ra ť ápiréXia
Kai rà vea avKiõia
ráXXa 0' otto o' èari cķura
TTpooysXáozTai Xaßovr' áajueva.
"De manera que a ti las viñitasy las higueritas jóvenes y todas las demás
recibirte, te sonreirán contentas" ^ .
Por último, el mismo amor al espacio privado del campo, que se tra
empleo de afectuosos diminutivos para referirse a sus enseres y produ
personificación del mosto, al que se presta voz, se percibe también en un fra
una de las últimas comedias de Aristófanes, Las Islas , en la que se han encont
la recién citada Paz 186 y de la que se ha afirmado que es ya propiamen
perteneciente por su espíritu a la Comedia Nueva187:
co jLi(5pe, ļLicope, rauta 7tgcvt' èv rr¡5' ëvr
oiKsîv jLièv èv aypco toûtov èm tgo yrjôiœ
ánoLWayévTOL nov Kať áyopàv npaypaTcov,
K6KTT1 JLlévOV ÇsvyápiOV OIKSIOV ßooiv,
£7reiT' aKoueiv npoßaricjov ßXrixwpevcov
rpuyóç te <1)(jûvrjv siç XeKavqv cofioujuévriç,
oiļ/co Ôè xpfloûtti omviõíoiç te Kai KixXaiç,
Kai pr' 7repi1Liéveiv eĶ àyopáç ix0uöia
rpiraîa, 7roXuTÍjLiriTa, ßeßaaaviajueva
i>7r'ix0uo7T(jûXou 7rapavojLiG0T(XTi].
"¡Oh tonto, tonto!, todo esto se da en ella: que ese individuo habite en el c
finquita> apartado de los problemas del Agora , en posesión de su propia y
bueyes, y luego que oiga balar a las ovejitas y la voz del mosto al precip

184 Ar. Pax 555-59.


185 Ar. Pax 595-99 .
186 P. Geissler, Chronologie der altattischen Komödie , Berlin 1925; reedic, con adic
Dublin/Zürich 1969; cf. 80.
187 G. Kaibel, "Zur attischen Komödie", Hermes 24 (1889) 47-8. G. Norwood, Greek
Comedy , Londres 1931, 293.

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188 Antonio LÓPEZ EIRE

cuba, y se sirva como compango de pinzonitos y


del mercado pescadillos188 de tres días, carísim
de la muy criminal mano del pescadero"189.
El campo, pues, contemplado con ojos de amant
privado, constituye el polo opuesto de los "
comunicación" de la pòlis , de los que tan mal se h
que era el teatro.
El héroe cómico, asocial por naturaleza, escap
comunicación" de la pòlis, sus puntos neurálgicos,
del campo, donde puede conversar con las plantas
se opone a la pòlis , o bien en lugares utópicos, co
Atenas ginecocrática y comunista gobernada p
administrada económicamente por el dios Pluto tr
Es un rasgo tradicional del "humor ritual
relevancia social, campesinos carentes de toda
parodien y se burlen de ciudadanos social y polític
centros neurálgicos de una ciudad que son sus
comunicación". Así se explica que el héroe cóm
contemple el centro de la pòlis desde los extremos
En Los Acarnienses , Diceópólis desacredita la A
gana el premio de la "Fiesta de los Jarros", que
Antesterias.

En Los Caballeros , el Morcillero desacredita


personalmente, vence a su antagonista Cleón el Pa
En Las Nubes , Estrepsíades derrota a Sócrates y
"Pensatorios" o centros de enseñanza, pues prende
beneplácito de Hermes el dios de los bribones.
En Las Avispas , el héroe-avispa y viejo dicasta
el simposio, donde saca a relucir su juvenil ca
judicial ateniense queda muy mal parada.
En La Paz, mientras el héroe Trigeo alcanza
celebra su triunfo casándose con Opora, el coro
ciudad y volver al campo.
Y ya en Las Aves , el triunfo de Pisetero y E
ambos héroes una nueva pòlis entre las nubes, Nef
como dios supremo y soberano rey del universo.
A partir de ese momento, los héroes cómicos se
"espacios públicos" o "espacios de comunicación" se
Comedia aristofánica.
La Comedia aristofánica deconstruye el discurso que la propia pòlis emplea con
referencia a sí misma, razón por la cual -en virtud de su honda raíz política y ritual-

188 Este diminutivo parece, en cambio, despectivo.


189 Ar. Fr. 402 K-A ( Ins).

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"ESPACIOS PÚBLICOS" EN LA COMEDIA ARISTOFÁNICA 189

deconstruye su propio discurso sobre sus propios "espacios de comunicación", sus


propios prohombres o conciudadanos prominentes e incluso sus propios dioses. No se
debe tachar de irreligioso a Aristófanes por el hecho de que nos presente en el Heracle
de Las Aves y Las Ranas a un dios estúpido y glotón, y a Dioniso en Las Ranas como un
dios fantoche, presuntuoso y cobarde, pues todo lo ciudadano es "político", de la pòlis , y
la religión es ciudadana, por lo que se somete a la función de la comedia, una función
religiosa y ritual, que consiste en burlarse o hacer mofa de la propia ciudad.
La Comedia aristofánica es, pues, una comedia política y ritual que censura y se
burla, con fines religiosos y rituales, de la pòlis Atenas en su conjunto y muy
preferentemente de sus propios "espacios públicos" o "espacios de comunicación".

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