Jurais por Dios nuestro Señor y estos Santos Evangelios arreglar
vuestra conducta a los dictados del bien; respetar y hacer respetar los Estatutos y las leyes dictadas por los órganos constitucionales; dedicar con empeño patriótico vuestros esfuerzos al engrandecimiento de la institución y la comunidad sureña; ponerse íntegra y lealmente al servicio de la Sociedad y de vuestros semejantes.
Si así lo hicieres que dios, la institución os premien de lo contrario