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La implantación en España, imitando el modelo fran- güístico, único modo de superar los polos opuestos de
cés, de las Academias en el siglo XVIII, impondrá un la generalización universal, abstracta y el caso indivi-
nuevo orden profesional que sustituirá a la práctica dual, concreto, ambos extremos inoperantes.
gremial. Las academias tendrán facultad para impartir
títulos en diversos grados, y al mismo tiempo, ejercer
el control y regular el proceso de construcción de la LOS LEVANTAMIENTOS
arquitectura pública.
El estudio de una fuente tan valiosa como los pro- En ocasiones hemos consultado levantamientos que
yectos de los arquitectos académicos, posibilita enten- incorporan metadatos que definen las deformaciones
der los principios compositivos y constructivos, ema- del intradós de la cúpula con gran precisión, incluso
nados de las academias, de tanta repercusión en la de sus aspectos ornamentales, pero que no aluden a
praxis constructiva. parámetros constructivos, ni tan siquiera se conoce el
La Academia de San Carlos de Bellas Artes conser- espesor de la cáscara resistente. A pesar de la abun-
va entre sus fondos, una amplia colección de proyec- dante información suministrada, a nuestros efectos
tos y láminas de arquitectura, realizados por los arqui- resulta inoperante.
tectos académicos durante su dilatado período de Hay que reconocer que sólo en contadas ocasiones
existencia. Debido al objetivo del estudio hemos se- se dan las circunstancias, de disponer de los medios
leccionado los relativos a los diseños de cúpulas. necesarios, para definir la cúpula realmente construi-
Complementariamente también hemos analizado, por da. Diversas intervenciones, de conservación de cú-
su interés, diversos proyectos y diseños de cúpulas pulas históricas, ha hecho posible definir a la par los
procedentes de otras fuentes, realizados por arquitec- parámetros geométricos y la composición constructi-
tos académicos. La precisa y detallada información va de las mismas. Con la información obtenida en la
que proporcionan los fondos gráficos, sobre aspectos dirección de trabajos de conservación, de cúpulas
geométricos, forma, dimensiones y en menor medida afectadas por diversas patologías (Soler-Estrela y So-
sobre los componentes constructivos, espesores y sus ler-Verdú 2016), hemos recogido un amplio reperto-
conexiones, permite clasificar las cúpulas en diversos rio de artefactos arquitectónicos. A partir de una vi-
tipos, en función de las características arquitectónicas sión constructiva funcional, ordenando una serie de
y constructivas. parámetros en campos normalizados, hemos pro-
Convendría resaltar la importancia de los estudios puesto una clasificación de cúpulas tabicadas (Soler
de tipología. Permite abordar el estudio de la construc- Verdú y Soler Estrela 2011; Soler-Estrela y Soler-
ción entendida como ciencia, como un sistema lin- Verdú 2015).
Para el estudio tipológico de las cúpulas se ha tomado La cúpula tiene una cáscara1 autoportante que limita el
como referencia básica, inicialmente el Catálogo de ámbito interior. El espesor de la misma varía en el
Diseños de Arquitectura de la Real Academia de caso de tabicada, en función del número de capas, o en
BB.AA. de San Carlos de Valencia (Bérchez y Corell las de rosca del canto de su aparejo. La cáscara está
1981). Se trata de una extraordinaria recopilación que protegida por un desván superior, delimitado exterior-
contiene más de 600 láminas y proyectos de arquitec- mente por una envolvente, formada por un tejado des-
tura, del período comprendido entre 1768 a 1846. Sus compuesto en faldones, generalmente de estructura de
autores son arquitectos académicos, por lo tanto los di- madera.
seños reflejan las enseñanzas recibidas y el contexto
constructivo y arquitectónico del período estudiado.
Durante la investigación se ha considerado perti- A.2 Cúpula trasdosada por cubierta de albañilería
nente incorporar al estudio el Álbum de proyectos ori-
ginales de arquitectura, de Manuel Fornés, Director de La cúpula tiene una hoja autoportante similar al A.1
Arquitectura de la Academia de San Carlos de Valen- pero el tejado en lugar de tener una estructura de ma-
cia (Fornés 1846) durante un largo período. Además dera, es sustituida por una solución vernácula de ma-
es un arquitecto de gran experiencia profesional, como yor durabilidad. Los faldones están formados por ta-
acreditan sus Observaciones sobre el arte de edificar bleros de ladrillo, apoyados en un encallejonado de
(Fornés 1841) en las que describe la práctica construc- tabiquillos, que arrancan desde el trasdós de la hoja in-
tiva, dedicando mucha atención a los sistemas above- terior, o cáscara autoportante o de bóvedas interme-
dados de albañilería. Los diseños del Álbum coinciden dias.
fielmente, con la solución ejecutada, como hemos po-
dido verificar en diversas obras de restauración. A di-
ferencia de la mayoría de los tratados, es de una ex- B.1 Cúpulas de cáscara de una hoja simple,
traordinaria fiabilidad, alejada de cualquier revestimiento de tejas
idealización abstracta, o ajena a la praxis local. Ade-
más de las citadas publicaciones, hemos consultado En esta clase de cúpula la calota resistente está forma-
otros diseños de arquitectos académicos, para comple- da por una hoja simple, del espesor adecuado, que
tar aspectos puntuales de la investigación. debe de resolver no solo los requisitos estructurales,
sino además las derivadas de su condición de cubierta,
de mayor exigencia funcional.
TIPOS CONSTRUCTIVOS FUNCIONALES
Los casos seleccionados para el estudio hacen referen- B.2 Cúpulas de cáscara de una hoja compuesta,
cia a cúpulas volteadas mediante el empleo de las téc- revestimiento de tejas
nicas de la albañilería. Esto no supone una limitación,
ya que las soluciones basadas en las técnicas de cante- En esta clase de cúpula la calota resistente está someti-
ría o de carpintería de armar son prácticamente inexis- da a las mismas exigencias que el caso anterior, pero
la hoja simple ha evolucionado a una hoja compuesta Obsv 06. Cuatro machones de pilastras pareadas de
formada por la conexión de dos hojas simples. Podrían 6.87 pv profundidad 15.62 pv anchura, vaciados con
incluirse los dos casos en uno, ya que ambos son fun- hornacinas. Obsv 07 La medida a escala del espesor
cionalmente de una hoja. de la cáscara es ligeramente mayor al que correspon-
de con la hoja tabicada doble, desviación asumible.
Metodología
Figura 2 Figura 4
Cúpula 02 (Fornés 1846). Cúpula 04 (Bérchez y Corell 1981).
Figura 3
Cúpula 03 (Bérchez y Corell 1981).
Figura 6 Figura 7
Cúpula 06 (Bérchez y Corell 1981). Cúpula 07 (Fornés 1846).
Juan Bautista Mínguez, E. Catálogo p 280, F. Obser- Obsv 10. El espesor de las hojas de la calota parece
vaciones: Obsv 01 Juan Bautista Mínguez. Valencia que deja abierta la posibilidad de su ejecución tabica-
1715 Valencia 1787. Título de Arquitecto. 13 mayo da o a rosca.
1768. Obsv.02. La hoja interior está encajada en su Cúpula 10 (figura 10). A. Capilla N Sra Carmen.
banda inferior de 11pv de altura por una elevación Valencia, B. Cúpula ovalada en planta ochavada, C.
del tambor de espesor decreciente desde 14pv hasta 1841, D. Manuel Ferrando, E. Catálogo, p120, F. Ob-
6pv. Obsv 03. El intradós semiesférico está comparti- servaciones: Obsv 01. Composición en escalas de
mentado en plementos mediante diez nervios planos palmos y módulos. Obsv 02. Linterna ovalada ocho
pareados, que confluyen en un medallón central. machones de columnillas agrupadas. Obsv 03. La
Obsv 04. La cáscara exterior está coronada por un zona maciza de la cúpula alcanza una altura de 10.30
gran pedestal que sirve para la fijación de una gran pv Obsv 04. Tambor de planta rectangular de 54 × 68
cruz que remata el conjunto a una altura de 200 pal- pv, achaflanada
mos. No se detalla su apeo ni el contrarresto interior
Obsv 05. La hoja exterior se eleva a partir de la zona
maciza, su centro se sitúa elevado respecto al arran-
que de la hoja interior. Obsv 06. Entre las hojas se
genera un desván de espesor variable de 10 pv en la
parte superior. No se detalla ninguna conexión entre
las hojas. Obsv 08 El tambor se eleva hasta la cornisa
de la cubierta trasdosando la cúpula, en su banda in-
ferior de 11 pv. Obsv 09. El tambor se descompone
en diez nichos para capillas y diez machones de for-
ma trapezoidal de 15 palmos de profundidad y ancho
interior de 18 palmos y exterior de 26 palmos. Están
enlazado por un muro de de espesor entre pie y me-
dio y dos pies de traza curva por el interior y que si-
gue la traza de un icoságono por el perímetro exterior
Figura 10
Cúpula 10 (Bérchez y Corell 1981).
tructura cajón compartimentada en tres alvéolos. codificados los parámetros dimensionales de cada
Obsv 05. La hoja exterior es a rosca en el tercio infe- componente. Linterna: Diámetro interior (dix, diy); al-
rior, pasando a tabicada en la parte superior. Obsv tura interior y exterior (hi, he); diámetro exterior (dex,
06. Hay otro diseño del académico de la Real Acade- dey); espesor (esp). Anillo: Diámetro interior (dix,
mia de San Carlos, J Vicente Ferrer, que en 1869 diy); altura anillo (ha), ancho anillo (a); diámetro exte-
proyecta un tambor de 22 pv de altura, en lugar del rior (dex, dey). Hojas: radio interior x (rix, riy); flecha
inicial de 6.75 pv. La cúpula fue ejecutada y tuvo que z (fz); cota arranque hoja interior (cHi); cota arranque
ser demolida al entrar en un proceso de ruina, por el hoja exterior (cHe); espesor inferior (ei); espesor me-
excesivo peso del tambor. dio (em); espesor superior (es). Tambor: cota cornisa
exterior (cCe); cota imposta inferior (cIi); altura tam-
bor (ht); espesor tambor (et); diámetro exterior (dex,
dey). La unidad empleada en las tablas es el palmo va-
lenciano. 2
Figura 11
Cúpula 11 (Bérchez y Corell 1981).
CONCLUSIONES
anchura variable, da generalmente como resultado la diadas, con otras de diferentes ámbitos geográficos,
inestabilidad de cúpulas que en cambio se mantienen culturales o cronológicos. Un capítulo particular debe-
erguidas, contradiciendo la hipótesis de tracciones ría analizar las cúpulas más representativas internacio-
nulas (Soler Verdú 2006). nalmente y deducir establecer influencias o filiaciones.
La planta circular es la más frecuente, las ovaladas se 1. Se define como cáscara u hoja, el elemento estructural de
resuelven con el mismo repertorio técnico y formal. superficie curva de grandes dimensiones en comparación
Son excepcionales las de planta poligonal. Las eleva- con el espesor. Está formado en el caso de las hojas tabi-
ciones tienden a priorizar la sección semicircular en cadas por las distintas capas superpuestas de ladrillo y
búsqueda de la semiesfera. Sin descartar luces mayo- yeso. Cuando el ladrillo se dispone de canto o a rosca, el
res, los diámetros interiores más habituales están aco- espesor depende del aparejo de la fábrica de ladrillo. En
tados entre 8 y 14 metros. la literatura técnica es frecuente referirse a hoja a lo que
llamamos capa en este artículo.
2. El pitipié de las láminas está en palmos valencianos y
generalmente además en pies castellanos. Un palmo va-
Respecto a los componentes arquitectónicos lenciano (pv) equivale a 22.65 cm. El pie castellano de
Burgos a 27.86 cm.
El modelo canónico es el de cúpula con linterna, sobre
esbelto tambor elevado sobre arcos torales y pechinas
del crucero. El tambor además de su gran incidencia
LISTA DE REFERENCIAS
formal, es un componente de gran importancia en el
comportamiento estructural, como base de la cúpula.
Bérchez Gómez, J. y Corell Farinós, V. 1981. Catálogo de
Hemos distinguido tres categorías. El tambor muro Diseños de Arquitectura de la Real Academia de BB.AA.
(TMC) desde cimentación hasta arranque cúpula, en de San Carlos de Valencia 1768–1846. Colegio Oficial
espacios centralizados tipo rotonda. El tambor elevado Arquitectos Valencia y Murcia.
(TEL) sobre arcos torales y pechinas. Esta clase es la Fornés y Gurrea, Manuel. 1841. Observaciones sobre la
que ha originado los mayores fracasos debido a que el práctica del arte de edificar. Valencia.
peso del tambor, no ha podido ser soportado por la fal- Fornés y Gurrea, Manuel. 1846. Álbum de proyectos origina-
ta de resistencia de los arcos torales o las pilastras o les de arquitectura, acompañados de lecciones explicati-
por fallo del terreno. Soluciones pragmáticas han re- vas para facilitar el paso a la invención a los que se dedi-
ducido el alzado del tambor al mínimo indispensable. can a este noble Arte. Madrid.
Soler Verdú, R. 2006. Los modelos virtuales. De la geometría
En la clase tambor trasdosando (TTC) la parte inferior
a las ecuaciones. En Cúpulas azules de la comunidad va-
de la cúpula, el tambor se eleva respecto al arranque lenciana, 321–334. Valencia
de la cúpula generando un anillo que refuerza la banda Soler Verdú, R. y Soler Estrela, A. 2011. Navegando por el
inferior traccionada o que contiene los empujes, modi- trasdós de las cúpulas tabicadas: tipos constructivos y
ficando el comportamiento estructural de la cúpula noticia de artefactos construidos en Construyendo bóve-
aislada. das tabicadas. Actas del Simposio Internacional sobre
Bóvedas Tabicadas, p 177–203. Valencia. Universitat Po-
litécnica València.
Respecto al entorno cultural Soler-Verdú, R. y Soler-Estrela, A. 2015. Tipología de cú-
pulas tabicadas. Geometría y construcción en la Valencia
del siglo XVIII. Informes de la Construcción, 67(538):
El trabajo ha sido acotado en el periodo de vigencia de
e078. http://dx.doi.org/10.3989/ic.13.180
las academias desde mediados del siglo XVIII al XIX, Soler-Estrela, A. y Soler-Verdú, R. 2016. Restoration Tech-
y en un ámbito territorial que toma como epicentro a niques Applied to Tile Dome Conservation in the West-
la Real Academia de BB.AA. de San Carlos de Valen- ern Mediterranean. Valencia, Spain. International Jour-
cia. Futuras líneas de investigación permitirán estable- nal of architectural Heritage Vol 10, n5.
cer comparaciones tipológicas entre las cúpulas estu- http://dx.doi.org/10.1080/15583058.2015.1010127