Desde lo más profundo clame a ti, oh señor! Oye, señor,
benignamente mi voz, estén atentos tus oídos a la voz de mis plegarias. Si te pones a examinar, Señor nuestras maldades, ¿Quién podrá subsistir, oh señor en tu presencia? Mas en ti se halla como de asiento la clemencia; y en vista de tu ley he confiado en ti ¡Oh señor! En la promesa del señor se ha apoyado mi alma.
En el Señor ha puesto su esperanza, desde el amanecer
hasta la noche espere Israel en el Señor.
Porque en el Señor esta la misericordia, y en su Mano tiene
una redención abundantísima. Y es el que redimirá a Israel de Codas sus iniquidades.
V. Dadles señor el eterno descanso.
R. Y haced lucir sobre ellos vuestra eterna luz. V. Descansen en paz. R. Así sea, (se repite la antífona) si mis iniquidades Señor te pones a examinar. ¿Quién podrá subsistir oh Señor en tu presencia? Kirie eleison, Crime eleison Kirie eleison; Padre nuestro (en secreto hasta). Y no nos dejes caer en tentación. R. Más libranos del mal V. Dadles, señor el descanso eterno. R. Y haced lucir sobre ellos vuestra eterna luz. V. De las puertas del infierno. R. Libra señor a su alma. V. Descanse en paz. R. Así sea. V. Oye señor mi oración. R. Y llegue a ti mis clamores.
Oremos: Te encomendamos señor, el alma de tu siervo (o
sierva N.) para que muerto ya para el mundo, viva para ti; y por tu misericordiosisima piedad perdónale sus pecados que haya cometido por la fragilidad de la naturaleza humana y del trato que ha tenido con los hombres. Por cristo nuestro señor, así sea.
DEPRECACION Por las almas del Purgatorio
Vuelve ¡oh dulce Jesús! desde tu excelso trono tus ojos de
clemencia hacia el seno profundo de la cárcel del purgatorio; esposas tuyas son las que allí están purificándose; están marcadas con el sello de la Trinidad; son precio de tu sangre; son tierno objeto de tu amor. Un fuego terrible las acrisola; una privación temporal de la vista de tu hermosura las aflige sobre manera; suspiran con ansia por el feliz momento en que han de ir a unirse contigo. Que se apresura pues instante tan dichoso; que salgas breve a gozar de su esposo amado que tu sangre preciosa las Ileve al refrigerio; que tu grande misericordia las conduzca al descanso que en la perpetua paz brille sobre ellas la eterna luz. Así Señor te lo pedimos por aquella amarga hora en que entregaste tu Santo Espíritu en manos de tu eterno padre. Amen.