Sei sulla pagina 1di 8

~I"

I
MI,IIuü 1(l988) p. 3-16

LA ACTUALIDAD DE LA FILOSOFIA ANTIGUA.

WOLFGANG WIELAND

_ La pregunta acerca de si I~IJ10sofíét~!i8!1~~ en nuestros días


reclamar legítimamente para ~t,stualjd~ad parece superflua. En efecto.
los estudios que se ocupan de suiny~~!igª(;i6J!._~~n~ª~g~Jri<10e_~las últi-
mas decadas, tanto en lo que respecta a su amplitud como a su inten-
- " sidad, u.n. imp\!lso eX!faQrciinario.. Esto ~ vale ya tan sólo para el mun-
(_l' do ocCídental, cuyas tradiciones culturales no pueden en 'absoluto en-
"tendérse -¿oñ~prescindencja de las influencias procedentes de la filosofía
antigua: en la investigación de la filosofía de los griegos y los romanos
toman parte, entre tanto, en medida cada vez mayor, inYestigadºIT~~ f'
provienen de otros medios culturales, en especial del Lejano Oriente.
Pero a esto hay que af'ladir todavía algo más: la investigación erudita de
la maso fía antigua pone de manifiesto sólo uno de los múltiples aspec-
tos béijo los cuales puede ser considerada esta filosofía con referencia
a su actualidad. En efecto, no se debe pasar por alto el hecho de que,
. por lo menos desde Hegel, tambié£1Ja filosof~a _~!~t~~it}~_~. en algunos /.-1
.•.. ,? de sus más significativos representantes, ~.~legadq_~, __ ~u~...r~~ultadQs ~
.P~!:.vi!.., ~~J~..~~~.p'~.i_~~.J._!iLs.rJ
!~a. _9....1.a.
_.CO,rl(ro !1J;i~ión. ~on t:I pe nsa.,!
.m,~nt9 de I~.fi!Qsof!!..-~_n.!!~ Esto vale en nuestro siglo, por ejemplo, I
para Heidegger tanto como para Whilehead, para Popper tanto como 1
para 10nas, para Gadamer tanto como para Ryle.
El hecho de_Jaactualidad dUa ftlosofía antigu~~nifiesto.
-irlDW
De rn"6ao ~án 'fácU"resPb-ndéi" a-la preg~tapor 1ás razones
en que este hecho se funda. ¿Qué intereses guían a aquellos que se
ocupan de. la filosofía del rñüridó ....iüitigüo?--Cíer1á'íiierite~. con "esto
llene que ver;por-deproñio:-üii. 'i¡'¡.t~Iés-li1si6rico.P.Qrel p-asado en cuan-
to ta1.~~~_~m~~.2.. la actualidad-ae= la 'filClsóffa añtigüa "Üeñe'~úna
raíz aún más vigorosa. Al ocuparse de ella, uno puede, por cierto, adop-
tar frente a esta filosofía dllerentes actitudes: si se la investiga,' se

/~i ~~~(~ª;f~~i~~~{~~f~~~á~
. .
',' ::~. .: ..;'~.. :;: • Tnducd(ln !fl'~alemán por Laura S. Caru¡aU y Alejandro G. VilO.

., "" .'
,~
sorUan.s.ólo objetos de investigación y asuntos de nuestroint~rés: siriÓ ':.' El aseguramit:nto,Jilológico.c..hist6ru:o.de,la tradición es un pre)': \,
4'ue pued~ñ~ más allá de esto, constituirse también en interlocuton:s. , :¡ supuestonet;.~~.rio ...Qª-.I'!..!l.rra.
!l4.t;~u,ada.actualiz.acián.,de la. moso fía an-:
de un -é1iáiogoy, lo que es más, ¿r'-maesÚos, Estas (fos actitudes de nin-; ~ : ';Jjgua, pero ..00 pl! ••de por sí ~Q.lQ. proveli~tna actualizac.ignJa}, Sin duda,'
gún mo~o se,.excluyen, Por el c"ontr:ii"io:(nadic' puede-'albergar ftindáda ' ' la historia de la mosofía es también, en primera insta~cia._una discipjj.':Ia
esperanza de aprender algo de los pensadores antiguos, si no se ha es- 'históriCa: pero al mismo tiempo es un dominio qúe forn;a¡;a~ie-de la
forzado previamente por adquirir un saber fundado sobre.e,lIos~~~ otro Iilo~¿-U~....I~is.ma:,Es' en tanto disCipiina' filosófica {-y no Sóló e-ó--talÍlo
modo, se corre el riesgo de proyectar sobre el pasado tan sóló los pro- hi~torica ~ Iccúno se hace historia de la filosofía. especialmente cuando
pios prejuicios y preconceptos, 'los propioS"deseos y expectativas. En uno dirige"sl.i"aúnción no'sÓlo' a h"Sdoctrinas representadas por los pen-
tal caso, las interpretaciones erróneas y las eq.uivocaciones apenas pue- ,sadores d.e-'-J?~~ado~ sino a la vez a la"'cOsa~rñismaacerca de la cual fales
den ya evitarse. De ahí que todo aquel que esté seriamente interesado aútores pretenlkn haber logrado conocimientos. Por cierto que, en
por .la,..r~I.?sofia~~~j~!,J~jebe,"3ñieto<IOJ.I?ro,cüiarsc~:~QÍÍJ9~ j!12t!-ü~en: J,:: , primera instancia. debe siempre hacerse de esas doctrinas mismas el
tos de la filología y de las demás ciencias históricas una' bas'ede tal (~) objeto de un interés históricamente orientado. Sin embargo, uno no,
índole' para' su 'tarea;' taj-j'fó-n1:ís"sTesi:r-coñv~ñCidoae su actualida([ : . habrá de limitarse a investigarlas en vista de las condiciones históricas,
Eñae"cio; si 'sé"'d~se¡ cüliivi¡¡:"en'ltÚéSé"ñ. sus-¡¡sp,~ctosactuales, iñ:(~) . sociales. económicas' y psicológicas'd'e's"u surgunitmto e inflüencia. sino
tonces sólo
.
'se'puede ,es'perar'éxito'eje"ioi'p¡'op¡"osesfu~rZo~--;:Sf¡1
. .. .. . ,. mismo' .-::" que lu.ego, sobre'la base de un interés filosóficamente 9~ienta!io. s~ p¡'c~
tiempo uno es capaz de '.!'antener distancia frente a 'su obji:tb. Por ello. ,', 'I!untará u'no si ~Sas-d(;Clrin-as'alcanzáñ1Os-obJetos-a'los que dirigen su
precisamente, aque.1qUt;,desee no' sólo aprender algo sobnnospfñ~ ~tc'nción, y 'si"la~' a¡'gllnl~nt:iéiones 'pres~ñtadás'po¡' 'd autor' son-con-'
dores antiguos,~~sino'también aprender algo de ellos, habrá' de--insistii vinccntc's. Aq(Jí; por primera vez, se"encuentr,! el p,~.ntop.t: p~rtida pa~a
en una puntual obServanc.iade' t~d:is.lasno~as cuya vigenda es' reco~:. , , una posible a'ctualiz~dó'1 de la filosOf¡¡{d~rpa~dó. o' " , ..
nocida en'el ámbito'de fasciendas histÓri¿3s:-As¡'loeXige también' En' este pu~to 'iesu'ltá' oportuno üiferénciar los .pun,t~s .dt;~vista
ei resp~to a'ñ¡eio"s'auto~ésén'tre Io's cualcis'túlo quisiera encontrar sus desde los cuaJes e~ posible llevar a cabo una actualizaciÓn. "asabér:-;(
maestros. " " . y!si¡ :;¡i~'ªsikó,~
pu'llto"'dF :e(hí~~~rlcó~~r~J¡~¡~~u-'¥'eJempJ!~. las
Hé' aquí un punto d~ partida, dt:süe el cual puedt:n rt:alizarst: 1''/-'' posi~i1idades de' úha' aétiJalizaé'ró'n~QesOe 'Jp.,ug t9...Q e ,v¡stadiúá~tico
considt:raciones metodológicas que córrespondt:n al dominio tIe -la i I~' son manifiestas: que se puede hacer comprensibles problemas objeti-
tt:oria"de las ciencias del espíritu y, en especial. al de la hermenéutica. ...,' vos si se elucida su onge'ñ'hiSti)"ri¿o"constifüye ún lugar comLiii. YflU~_
Por lo demás, los estudios clásicos, los estudios cit:ntilicos de la anti- '¡a'ñlcjor de'¡'éíüidon' eri'eipensamiento y la argumentación t1Iosólicos
güedad pueden, con buenas razont:s, reclamar para sí una posición de 'Se 'pj-o'~ura'a 'Úavés de una frecuentación'de los diálogos de Platón es
privilegio: allí donde se trate de reflexiones de' principios critico-llIeto- 'algo que no podría ser púesto en duda' por prácticamente ningún en-
dológicas en las ciencias del espíritu. En efecto, d objeto de estos ¿stu-, ' t~ndido"
dios se halla lo suficientemente alejado de nuestro tiempo, pero taln-', : .Si en el intento de una actualización de la filosofí!! antigua se
bién lo suficientemente cercano a nuestro interés -el cual tit:ne -siem- .. escoge la perspectiva histórico:tradicional, t:ntonces habrá que plan-
pre sil raíz en el presente-, como para que la tensión entre lo prt:sent~ ,."' tearse, en pnmef téñTiino,la'pregiínta:-de-qué elementos de dicha filo-
y lo pasado, constitutiva de la conciencia histórica y nunca susceptibk sofía han sido o continúan siendo estimulantes. También en este caso
de ser neutralizada, pueda ser aquí puesta ante los ojos t:n forma di- podemos partir de nuestro presente y pregu.~!a! cuál~)as repre-
recta~ente ejemplar. Esta tensión determina la, lJ.~~~!,,~~~~R,c!,?.IJJ~..t9-~~!l.~' .,', Sc'ntaéiorúis:"coiú:eptos; fomüis"dé'¡u-gümentación y tópicos ~:..!os que
. dor "y..de tOÉ21~;Q.m~g.u.t;J!?!?ad~lg~~~e'}~~~~_~C?nH~,e!9~!¿~~~!.c:~!J-'l; . hqy, nQs,.val~1Jl9~,p,er:t,elle.cen a:~I.ª-~e.,~e_n~j~
<1u~,no~..n.~-'t:~,a.~~--'~
TiIQ~:~--
tas y ,sus métqgos .9:!~~º,tIac~ .~~~P~~,o. el-.-o.~J"e!~. ~e sU.,W'!~1tJg~_c.!.qn~. "ría antigua: con sólo hacer investigaciones de oetaUe ~e_pondráde re- .
De tode;>,investigador"esperamos en la actualidad no solo}1~~5!~,~"ine,.~,~ ' ¡leve' 'una Y otra vez hasta qué punto todavía hoy incluso f~~yect9s
, e'sp'eCiaijdi¡{(lesde--erpüi-iio-de"vista del £~,~~~E.i~.~, ~,~_<?-..!-3!!Jbié.~o9~e 'fiiosóficos.aparentemente novedosos se nut~en de es""herenCia. Con el
esté 'en claro so"b.r~el alcance y los límites de sus recursos y sus método .•, tÜúlo'''La p~senéia 'de los griegos en'el pensamiento modérno" se pu-
y que' pueda dar cuenta de ellos. Precisame~telior' eno~'e"Sdéi "lilsiori:i~" blicó en 1960 un volumen colectivo en honor de H.-G. Gadamer, en el
dor de la mosofía de quien se puede pedir una opinión en la discusión cual Jos autores intentaron realizar, por una vez, un balance en este
sobre los fundamentos de las dencias históricas. sentido.

4 s
'.
En la tradición de la filosofía occidental. una y otra vez se ha reto- .si~o ..en ..no~a~. ~ ..~i~.Ae. pá.$ina ..a. P1at~f1. Este aserto impresiona, en un
mado, de JiúxiO"eriteI'ániénte 'cciiisdeÍlte,"elementos del pénsamierito .. ~
,. . c. pruner momento, como una agudeza' cuya gracia se basa en una exagera-
~/ ción. Sin embargo. basta con que se intent«:.E~."!prend.er,hl nIosofía eu~
~(~~_ªf1tlgt,1.Qs;"En este sentido:ltaoe p¡eñSárse'eil'lo-sconieñii:fos-de fa'
..-'rropea 3:te!ld~endo alacoñti~uJda~'4~'süs prob¡~rn.ªlf~nd~entales, para
{¡Josofía platónica, aristotélica y estoicajque han influido sobre la teo-
descubrir prontamente la veracidad de dicho aserto. Naturalmente. no
logía cristiana. No se debéría, 'empero, pasar por alto el hecho de que,
-hay' ninl:,oÜnadoctrina de Piat6n que pueda recla~~r una validez. por
independientemente de ..t9~oS los aSpectos del contenido, ya la idea
misma de una teología ha ..surgido 'delsuelo ..4e la filosofía griega: no es así de.~ir,. canónica. Pero)a }I~bJ.C~~.!6~ ce.n~ra.1 ~e, ~I.atón. dentro de laj
algo comprensible de suYQ' que ~na religi!5n. íntente exponerse a sí mis- ".;~ ~~p~~ 110_.d~~~!1~ •.....
S1IL~j~._ep,determinaq!ls posiciones .
ma en la fonoa de una doctrina ,sistemáticamente edificada tal como c. '.'. d(Jctrinélriéls~ sino. más bien, en el hecho d~_que.~Roe~_rn.~mento, por
vez' prirnci'íL fiieron planteadas de...m~w:..m ex{?lícita las cuestiones que
ésta ~ue posible por vez prime~.a a: 'través de la mosofía griega. Pero :'~'.
--desde -é'nt9~Ces, '"lj'an..ñ1!nténTdo eñ:-'~~JJi!j~.nt:(-ªtp~l'!siün¡ento" filo:
tam~l~n ha de repararse en la. i~.cepci6n de ;Platón y Arist6teles en el'"
"sófico:-Por variadas que puedan ser las respuestas -que se 'han dado, eñ'
dommlo del Islam, en la' i~flu'eiiCia'-que la flJosofia anstotélica estuvo ~~
1a"'1ritiole de las preguntas que se plantean y en el modo en que ellas
llamada a ejercer en la época 4~
ia alta. escolástica. enelnúevo retomo .'/
sano, planteadas nuestra filosofía ha seguido siendo platónica, incluso
a una antigOedad conc;ebida de 'm~do"renovado en el dominiQ del hu- '"o
allí donde la totalidad de su contenido permanece extrai\a a Platón o
manismo y en el ámbito. de los fundadores de la cienciá 'de'la natura-
, Quien se aplique a indagar la filosofía antigua atl i .donde esté to-
leza de la edad moderna. Finalmente. se ha de penSar en la frecuenta-
davía viva y sea. con ello, actual deberá, por cierto. andar con cuidado
ción de. Plat6n: Arist6teles y Proclo que ha deja~p sus huella~ ~nel pro-
de 'no dejarse ex traviar por una falsa y sólo aparente actualidad o Un
yecto sistemático de Hegel. a~í como en la a menudo apasionada ~on-
f~ont.ación con los antiguos de Nietzsche y Heidegger. y ~nó último en b~en ~~ este '!!'p~~~jY_~_~.?-...
a.~!~t~l~d.~<t.loofrece !!l-!eoJ~ at~-
Il]..I~ta}!.Q.tl~-ª...Como es sabido, 'SUorigen está conectado con er nombre'
termmo-. también eri los intentos. de un número no menor de represen-
'del. históriéal11ente casi inasible Leucipo, Y. sobre todo. con el nombre
tant.e~ de la ~atemática y la física de nuestros días por lograr,.con el
de' D~móCriio. Tras haber sido sometida a crítica en la filosofía clásica
au~dlo de Un recurs9 a la filosofíá de los griegos, claridad so.tire los
presupuestos de las modernas ciencias exaCtas . .: del siglo cuarto~ fue retomada por Epicuro y su escuela. y trasmitida
a tiempos posteriores, principalmente, por el poema filosófico de lu-
'. .R~~p.~e!~~i~~.>nesconsci~ntes y planificadas di: la filosofí~ ~~tigu~
crecio. La' muy compleja historia de la concepción atomista en la cien-
..~.!!E~y.7nª¥'':7 ~'l nues{r.~Jª~~@~:!i;eitabuñdan te 'cañ'iídád: eñ'Sü.coñ:' /' cia de la naturaleza de la edad moderna es conocida, como también
,;::;d~~~~~~~~;:.~~~J~ri~~ri~f~g~i~-~~~~~:'.~3~:~~~:C~~.~~:
ª~
e!.1~ac(a.JJ.I1~.
su papel en las teorías científicas de la naturaleza de nuestros d jaso
Por ello, puede parecer, a primera vista, algo plausible el que se crea
' 1 -..- - '_.las...
- r._.--
esonancias de los s..riegos
..... - - ..-,----.-. que .se'-~_._-
", ...."._'_.~.o'" hañ intro'duCido"¡¡
',.' ---"" pod~r encontrar en Dem6crito y los demás atomistas antiguos los ge-
t a ~un ~o~~_~~.t!:~~~~~P~-;P~!'.E!.!.~!~~~Q!!~~ que! I~~_~~!~e}~s nuinos antepasados incluso de la mod':'.:";'1aciencia. de la naturaleza.
v~.~e~ot_~~:~~~o~c_~t:~m5?_s CC:~_~~~~!~~~ A este .as~ecto respo'nde- Así surge una imagen de la historia de' l'a ciencia según la cual ya en
Una ~1Ultltu~ de aquellos .~_do~~~n.~c:~~a.I!:s _~_~.!o.~.q~~~~~.v..a!~7. épocas tempranas había sido hallado un conocimiento fundamental,
'!1.£~~c1l:cl.s.~U:I!.:
el lenguaje de nuestro trato cotidiano con el mundo
que, sin' embargo. fue prontamente desplazado por teorías que se
cuando distinguunos'entre"formay -cont'enido:"~¡;tre"coSas y propieda~
fundaban en prejuicios teleológicos: sólo la ciencia de la naturaleza
~~~_de cosas, entre característicases<mcialese inesenCliiiesdé'''uña-cosa
carente dé prejuicios propia de la edad moderna procuró a la con-
entre actos deliberados Yño-deiiberadOS:--eñt~é"posibilidad y reiiI~
cepción ato~ista el reconocimiento y la vigencia que desde un prin-
dad, entre .cantidad y C4.~id.ad. Habitualmente se tiene por triviales.
cipio había merecido. Así considerado, aparece el atomismo como el
y comprensible~ de .suyo estos entrama.do's conceptuales, porque' no
punto culminante de la~ciencili griegade Íi n'aturaléza. '-.- ....
se repara en los extrao~inarios esfuerzos que en'su momento requirió
su acuñación entre 19S clásicos de la mosona griega. Aquí puede hallar.
¡f¡fk"- -39
-'-".SJ~,'es~ u~'áñ!~~c~ai¥aC1~!l)~'~:-Fero o .E.2Jesu Ita i1e-
, ~I ).Ygítimá p6rque fa1¡¿-'una efeCliv:r conexion 'tiist'6ñca, ya que se puecfe'
un fructífero campo de trabajo todo aquel que desee hacer conscientes
:'./ -rastr~a-r las fiHacionesque viñcüfáñlos-tfíferentescoñ-¿éPfós-hastá líegar'
las tradicioru:s que operan de modo latente. . ,-
! --á-iás"~ó'¡:r~sp'olldíiñtes representaciones de la física moderna que han
. A Alfred N. ~fif~ se remonta la .sentencia frecuentem~nte
Citada de que, en el fondo, la filosofía del mundo occidental no consiste
~-- "" .•. .-_.~-_ ..• -
..~-.,.
~~.'~" ,~ - __
.....•.- ..•.. _,.
1.' ..
-_
•... ..•. "-
. hecho liso de la conct:pción atomista. Tampoco es i!~.!.!_iJ.!1a!empero,

7
6 . ' ' •• , ~I: -:..•.
~

.:.~~ ",: '\

:(. <' .

\.
__
.- .•.~' :~. .

, . ..:,"~ '. ~t~~\~~i,"


'.
representaciones.que; desde el ,punto de vista del'cOntéñ1d&. . A1E!:~:¡~
. es'ta áctualizaci9~ por el hecho de que ~l atomismo en sU ~3mino á tra- en oposición al orden perceptible del mundo que circund"an\<iin~~ "-'~\.'
vé~ de la h!storia~-h¡¡ya'dehido'expenmc:rÍtar v3.ri~s m~iainorfosis:' si ~;. ,'En consecuencia; se puede conceder aJ')royecto del mundo prop\o~de"k. .
el átomo de' Dem'6Ciito~'ooñio'ya "stinombre lo"dice" er.úina ccinflgü- los atomistas una alta proporción de originalidad, e incluSo, qu\z.iTt~""
.:raci6n 'mdivisible, el átomo moderno .es; en canlbi~, ~na estrucúni
'" ,.de aquella belleza que a menudo exhiben precisamente las teorlas sim-
.compuesta y: articulada de alta complejidad; si el átomo de los:ai\ti- ples, desarroUadas consecuentemente. En cambio, respecto de supre-
:guas pas:aba por un óbjeto -que, sin duda, no podía ser haUadd' ~n 'la
..., 6~ }~!1..s.i~~e"~p.Ucar _~J~~d~.J~~~Y.!9y.e.~to.p':~~'~~
: '. confmnado mcluso por sun1Stona en la anhguedad, ya que la concep-
e~t~rü.' Esto es
. intuiti~n .sensible efectiva, pero podía, a!,' menos eri:'pr¡iWipio,;ser
concebido. a la manera de una cosa sensible-, las carífigu"faciones .' '.ci6n de Jos atomistas no se cuenta entre los presupuestos bajo los cuales
eleme~tal«:=sde 1;\física moderna, en cambio.permanec~'n nb's6io'fácti- ,los antiguos lograron sus resultados productivos.
camerite .sino' también por principio iniperceptibles tanto' más cuanto No es casual que Ja imagen atomista del mundo haya podido des-
que 's.?lo 'resUltan accesibles por medio de formalis~os abstra~tos;- Con plegar sus más genuinas influenci.cisdentro del ámbito de la vida prác-
.tOdo". incluso' tales diferencias seguirían siendo todavía 'corrtP~Üibles tica.S610 desde este punto .de vista puede entenderse por :qué Epicuro
con una ac,tualiza~ión legítima. .' . . ',i '.' .,- optó, precisamente, por la. teoría' atomista como marco cosmológico
!=.~!_~s ilegítima una actualización PO,n1ue~~ pr~s-
.5!t~~.1.p'~~I.!!~
ta ~tención a lasdiferent~s funciones que s.e.exigen a la concep(;iónat9-
6:' I .de su filosofía. La creencia en la rectitud de dicha teoría es apta para
procurar:al homoié,- en isÜ'-viifa-práéfica:- sOsiego-"y-üil.éiáci6n de 105
mista 'en los intentos d.e'umú:xplica~i6n délmiúldo. En los' ti~rtlpoS'rño- :femores.-:consbi'o-'hacéñélil-comprender "de:'uo"ñiodoaoecuado -a-iar
demos, .la concepción atomista tuvo' y tiéne"lá' fü'óci6ñde'~ iSpcin~r'erl 1'iñ7Ena-puédepropoiéionar:-al--tiOñlb-re fa .'en- ia:"
-iluíónom d irei:d6n
un oroen, Sobre la base d~ .un~ '!eoiía, una mu1tipliddadÚ'dato~'di <tesu .vida y, al mismo tiempo, le senala' tos lÍmites de esa autonomía.
experiencia; para"así expli~~l<?~y•.al.mismo 't1empo:abrlf la:posibilid~(r- Si 'se evalúa el. modelo de.los.'atomistas en vista no de sus funciones
d~~l},':.1~vasexp-~ri.eri~i~s:Ni
siquiera fueron todavía los 'résu\t'ados"dé'fil" te6rico-explicativas sino ',de: sus funciones en el ámbito de la :,realiza-
"física en sentido estricto los que contribuyeron en los ti~mpos moder- ci6n vital concreta, entonces resultará comprensible el hecho de que
no~ ¡Ureconocimiento general de la concepción atomista, sino los de la :~
.•.
lafeoría atomista haya ~pódido' volverse -frUCtífera precisamente en el
qli'ímica experimental; en la medida en que posibilitaron el establecí. ' filosofar de Epicuro, que, como ningún otro, concentra su interés en
miento de la ley de las proporciones constantes. La hipótesis atomista los problemas de la vida práctica.
se mostró en este respecto inusualmente fructífera, por cuanto permi. . Bajo las condiciones del ámbito de experiencia.acc~sible al-mundo
tía desarrollar una mult~tud ,d~. nuevos cuestionamientos Y extendía :en
antii\ió-'pu-do'iestÍltar, .10 'que a beneficios te6rico-explicativos atafle,
su poder explicativo sobre un dominio cada vez más vasto. Se trata en' mucho más fructífera la' interpretación teleol6gica deJa naturaleza
este caso de u~ ejemplo modelo de una hip6tesis que' se acredita estu- -propii:-'de' A'ri~t6~1~-'qúe-eiatomismo".' ES cierto qüe este teleologismo
pendamente' en la experiencia, precisamente porque permanece siemp'ré acabó"poráiiq-uílosarSe~.~e'n..tiempos'posteriores, en un sistema dogmá-
abierta a modificaciones Y düerenciaciones. ' .. tico;' Es cierto' también que la física de la edad moderna se distanció de
. La düerencia respecto de la atomística antigua es manifiesta. ne- .,;. esa 'representación, del mundo. -Con todo, la (;oncepción del. teleologis-
m6crito'Y sus SégUidore's' nó-"l>rOyeCtarorluñ'if hipótesis sino"ra"~agen' mo fue apropiada de modo sin par para dar cuenta del mundo tal como
de una verdadera ~ali~ad~"-~~~_-ta_~_~610 ~n'j!~!!!º~_Y_~. mo.!i-' se ofrece,aLhombre en la experiencia inmediata, aún-no expresamente
m~~nto en .e~_e~pacJ()_v.~~lo~"Esta se ()p()~!a al. ~11l!~?_c:n9ue.v,~v~~~ ilustrada' por teorías. A dicha experiencia, pertenecen los movimientos
y que perclbmlOs por los sentidos, considerado como una realidad' sólo de la naturaleza que Circunda:,ah.hombre:'tanto;el movimiento del cielo
aparente. El hiato entre estemurido. verdadero de los átomos"y"erm~ri~, como .Ios de los elementos Y los de ,los seres,vivientes, con su crecimien-
do sólo aparente de la experiencia sensible no puede, por lo demás, to'y su disminución, tantoel-camb:io de las estaciones como el proceso
ser franqueado. A esta rep,resentación del átomo se exigen beneficios de la generación: Se trata, en todos los casos, de acontecilnientosen Jos
exp~cativos, pero ella no está en condiciones de producir efectivamente que el hombre tiene sólo mínimas posibilidades de intervenir. Ahora
esós beneficio~. Los atomistas antiguos apenas si podían hacer uso,de bien, 'si evaluamos el alcance de una'teona sólo' de acuerdo con el hecho
SUS ,principio's. Tampocó apunta su teoéía;'en' ah~lúto,'a' ~ostr3~ 'éí de si- püede "eréi:"tivamente"provéer: fos'benefidos."e~plicatiV.os. qü~.pre~'-'-,¡
. camino hacia nuevas experiencias que se hicieran posibles sólo a partir tellde, de si exp/anans Y exp/anandum resultan congruentes, entonces el
de ella. Por lo demás, la concepción atomista COllstituyeuna síntesis de
9

8
" .
'.
•••
l '.
• f

'. I
-.

-~~o:~
<'
~;u'~._~e~p~denUo de Jas condicwnes de la base empíri-
CaaelOi8ñtiiiÚJS- mucho más fecundo que el atomismo. El que Aris-
t6teles. y no Demóérito;'haya p'odido-imponerseo'poro¡a¡go tiempo no
significativa no por su alcance, sino por el inédito rigor con que. por
vez primera. una sección de la l6gica fue expuesta y fundada ,de manera
puramente formal. Por largo tiempo se vio en la lógica aristot~lica no
es. en oposición a una difundida opini6n. un accidente histórico, sino sólo el comienzo sino a la vez la culminación de la 16gica en general.
una consecuencia naturaJ'que'-resulta de las diferencias de fecundidad Luego. tras el nuevo impulso que tomaron los estudios lógicos desde
entre las correspondientes teorías. '. ':-' 'o. lines del siglo pasado. creyó más de uno que Aristóteles qii'éd'aría de aUi
en más definitivamente superado como 16gico, una vez 'Que se había
.', ..~ ..~~r~: 1l~:Il,tar::~rtl:!jieptos derechti:ajúigir'teo'rías.antiguas
aprendido a establecer en la 16gic;r'exigencias sustanci!iliberite más rigu-
:,10: de~e~ijtP$ d~ v~ía modernos;: Piecisarnenfé esÚ) eS'Ío'q'Ue hiiéeriios
rosas que hasta entonces e'nlo concehíiente a su constnJ(;:ci6'n y su fun-
'- }~;~~~tr~~~~~~d~~~1ft~-mi.~:~~~'~~:~~~~~iaé~~-
cep.tuales y coñCitegorías que no siempre-pú'eden-se'r ñatl¡¡das~'yi(feñ-
damentación. Pero cuando se comenz6 a aplicar seriamente a Aristóte-
les'ias nuevas e~jgencias de exactitud. se produjo un sorprendente des-
cubriniiento: '1~_~~E~!!tif~!~.!~!!fª~~~~n~_ i.nte!E..r:et¡¡da
•. satis-,
.~ ,'~~~_ del' liO~?ñte }Je~:J~~o.~u~~_a'"1~'[:~~~~'~~::.ap!!~~.'É~~~0~ facetodavía ñoy las más ngurosas exigencias que se puede establecer
.,.;. - ~,e!t0....
~~~~~bJe. Toda CIeneta trata hechos baja presupuestos.; EStos "pa~_la ~tnl~~i~~~~de~.~'ñ::.si~~a: .l~&i{ó~' be'esíe-omo'¿~;fue 'preciSa-
:-: P!ésupueStos' no lOsob.!íé~e-noññiliñente"'áen)DJeló: siifó" üe" ¡{los'
¡llente-"la lógica moderna la que pudo abrir los ojos a la investigación '1
r.~ ~\ !J:a.~:~.n~igq~'~-.~vestigaci6n científica de ia-niowfía anti~a' n*ii~ce'
[.\ aristoiélica para un aspecto de su objeto respecto del cual, por largo
\l;;;; nmgq~a excepclOn' en este punto; TambiéneUa debe partir de presu-
~~ puestos y h~cer uso de.ellos si 'quiere obtener puntosd~ vista fundados /Ll) tiempo.'. ~a~ie h:lbía vuelto a !"ostrar comprensión. Justamente hace
.j a la condlclon de un texto clásICOel hecho de que ofrece a uno la posi-
~. ~ sobre su objeto. No se comprende porqué habd~ de estar prohibido
~ !!..~~ar.~.!!.a.utory!!~i~o ..y_~~l1s.~:tq.~!~!!iiiS'o.~af!?:P.~~P.!1jst~qúe' S6ió' fú~
bilidadde obtener -nuevas respuestas si se le formulan nuevas pregun-
.tas.' -
J'?I1.precisad()s.en.una ép'~c~.p~~~ri()r.: De .Ió conirario~o se pOdiía~'por
ejemplo, 'siquiera hacer investigaciones 'gramaticales sobre textos de . .: A.si:la investigación d~J.ª.J-ºg!,~.ª.ª.lj~tq!~l~!LSlAmioj~~~_u~,modelo
del 'meMoéñCi'ue ü-ñafiistoria crítica de la filosofía permite conectar y
autoreslque han 'estrito en una época enll! que no habíaaúri teona'ya- -r------ --------.------... --..-.---. ErhiStoriador de
. re adonat en-ire si planteas hist6ricosysistemáticos.
o •••• •• • -'"'' ••

maticar'alguna..Difícilmente se podría hacer de Homero objeto de inv(,5-


'la filosOfía:'sé enc\le'ntra aiiü(en 'lit'misma siiüáCíón que el historiador
tigáci6n'científica algu'ria;si fueraHcito trabajar, en ese caso, exclusiva-
de las ciencias. En primer lugar, pregunta por la opini6n del autor de
mente' con .presupuestos que pudieran encontrarse en el mundo de las'
las fuentes dI.' las que tiene que ocuparse. Luego, habrá de desplazarse
epopeyas. Si tomamos, pues, teorías-fdosóficas como el objeto de nlies"
de'dicha' opinión a la cosa a la que ella está dirigida, y la confronta con

¡
tra ',inv.es.tigación•.entonces.. d~tñóS;1íídíiaableme'.nte, '~a6Yecerarite' clril. A' tal fin: puede incluso buscar carriinos hacia esa cosa que no fue-
todo ~l:c.~!l:~~Jiid~ ~elateoríá.~ero luego podemos preguntar qué ~por-
rOñolos'.'carriinos dd autor y que tal vez nunca hubieran podido serlo.
..t~J~
.ta. pr()pi3J11,en;t~)~.- ant~ toóo;5japortalo(j'üede6elijiO'rtar;
uiego. 'retomará una vez más al autor, no sólo para poder ahora com-
No es .Iae~cepcI6n,'smo más blen'.la'reg1a el que el creador de una
teoría se engane respecto de su fecundidad. ..0 :,' •• " . , •..:.,' .
prenderJoméjor. sino también para dejarse instruir por él acerca de la
_o_~.:.-cosa .mentádaen comúnlÉsta.¡u:rmanente oscilación entre Ja cons.ide.:..
'. Contra -toda primera apariencia. la pretensión de actualidad- qtíe
'~. a menudo' se' concede al atomismo antiguo no puede justificarse. Por
(~1- el.~ontrario. un ejem'plo positivo de pensamiento antiguo que p-uede i ::1í
raciÓn"sistemática y la histórica caracteriza el trabajo de un historiadOr.

:<ida:e I~ ~~t~~ ~ue se preocupa no sólo por investigar el pensarÍliento


también por hacerlo '"'!'títero para el pensamie!l.~
ser.'actualizado déSde~uña'peispeCtíva hist6ncO::tradicional io 'ofiece li
fÓgiCi3jistOferic.a;En-eféct()~espreciS3méiite'la~16gica: d~-nuestros d ras' a~tu~sde .,'~npunto de vista de esaí~dole. I~ fdo~fía anti~a p'uede
li qtif'n~ósfj)il1tado una comprensi6n más profunda de esta teoría an- ,:":
vólverse fructífera Y actualizarse de múltiples maneras. En el caso de
tigua ..Aristóteles pasa. con ,todo derecho. por ser el fundador de la 16gi-
Aristóteles debe pensarse. en este respecto. nó sólo en su furidamen-
ca tradicional, puesto qúe no ..s6Ioha estúnúlá(Jo sunac1in-.eñlosmo
'ración'de la lógicafonnal en los Primeros Analíticos, sino también en
qu'eademasna desarrollado, cuando menos, una de sus ramas en fonna
su proyecto tle una teoría de la ciencia. en los Segundos Analíticos,
~asi acabada,'a saber, la sí1O&.(~!~ca .. En relaci6ñCQOel dom1¡:¡¡0extraor-
~n sus análisiS -tle hecho aún no' superados- del continuo, del tiempo
"diiiíinanfeh'te-amplió odif'lá"16gica-'áctual, la.silogística aristotélica apa-
y de las demás 'estructuras fu.ndamentales del mundo sensible dela vida
rece como. un dominio parcial muy limitado. Sin embargo. ella resulta ..

'C' 1l
ID •~~. ", i". .' ; ~.: ',';

t.~• ' ...


'., • ' n" ,;' tA. ',-¿~-
't'~ ". ~J~i:;"'~\~!'V, ••.

" ' .. , Si.~1~'


;' e., la Pi'ka, en' algunas inm'igacion". de psicología. Y de re'6rica, J. culaciO.". Pu•• , en el fondÓ{fno se actualizaD \0. cu.;;"" de '¡i ~~;,.;",:.;,;
;'~en la,concepci6n de la t6pica, tal como ella experimenta hoy un renací. gü~ad tan sólo POrq~:se, busCa.,e incluso ~\cneuentra en eUo~m~dio~~"i,s:~ ,1
.'i. 'ntientoen varias ciencias del espíritu, y' fma1mente en su concc:pci6n apropiados para la propia a~tocO~fJimaci6n7rSe puede mostrar que hay ~"":--
« .....:renovada..siempre en:las.fonnas más diversas hasta eLdía de hoy- aspectos doctrinarlos de la mosofía antigua cUya actualidad p~ede ,
:""de"lit'metafíSica como disciplina fundamental de la,fllosofía te6rica. fundamenta,rsede otro modo. Esto vale, sobre todo, para la mosofia ~
""Se 'ha de: pensar en'lasreflexiones,de,Platón que se orientan a la c~m- .yp',', práci"icá ~e .piat6n. y Áiist9t~I~S~)' ~';)llello e~~ram~a .en~terce! ..:.l-'- ~
;:éepción dé' las ideas, así, por 5610 nombrar un ejemplo,:en su cOQcep- -:'",;;'~"-ªspcctode una posible actuahzaCJOD el ~specto eJempluJ .
..! cióridé ~.~~e~!~~ .. ~.~g.~ri~~~ ..con .1~5~~, Platón~ J.1\.u~v~ ..en , ({: ' La mosofía' práctica constituye, posiblemente, la más asombro- ~
, :este terreno es' tanto mas sorprendente, cuanto que:su,cpncepclón p\le- " ~ sa contribi:iCfón-quenOSflanlegado los pensadores'i:hi'sicos. Estos no la
~~~~--¿¿:diversos aspect<?s,':resuitli!.~~~fact~ria !?~lu~J~~~ ..!~,,~~te~ con.Cibieron, p'er lo demás, como una disciplina teórica que tuviera por
"máticas de nuestros días. Por ello. se haila bien en -ec~ar una oj~ada (:110. hr¡\'~ objeto el mun4p, del. obrar, ,sino que la entendieron como resultado.
. .sobre 'los límítés-'de' la' {¡losofía e incluir en su consideraci6n t~bién , / - d~1 cultivo de una facultad que está inmediatamente dirigida a regir la
~la Ciencia antigua. Esto concierne tanto a la matemática como a lame- ~C,3 ~ ¿<3 vida práctica tanto en el ámbito individual d>mo en el de la cOnluni~
'dicin.a ~e'ga, su~erada hace mucho respecto del CQ~teni~op,ero no (eSF"e~~;'"dad: Se trata de la f!~.!!!l~ q~e, designada en la.antigüedad con ~ist~<
'enve)ecld~en vano~.puntos fundam~ntales. No debena,p~vldarse, tam- I I[ Wft J¿,tos:,~o~~~es,las mas de l~ veceS ,:on el de phronésis,~ ••q~.n_C?~1.D~'~n
poco el IDlportantJslffio aporte realizado en estascllestlOnes por el P(¡?t:l)f 7\."'1aactuahdad con el de r~on.práctlca. Cuando se habla de razon'prae-
'"'mundo romano, a saber, el desarrollo de u~ de~ec.ho.a~Ui\ado, en ~u ~'\(J1 tica,~'se-des¡g'ñi~uña-fa~üita« qiieeStá destinad~,_tan!~~ .~~'l~..i!.i~,~.o_n.~
contenido Y método, por medio de una CienCiajundlca. El trab~o cimientos acerca' de, hedjos, cuanto a responder, en prunerainstancia •.
que' los historiadores del derecho han dedicado a su investigaci6n Y a d(=-üñá--manel'a"íá~~.tiafñi,entefiiÍt'd~º~:)a "'cuestión de 'qué' d~beníos
sU actualizaci6n puede el historiador de la mosoría tomarlo para sí 1íac~é6m-o debemos vivir. En cuanto es práctica, la razón no sólo
. como ejemplo, ante todo enlo relativo al método. ' runda~enta' proposiciones, sino que motiva también comportamientos
sr uno' intenta actualiiar la mosofia antigua desde tales"puntos hum4J1qs.. ,La filosofía práctica ,constit.uye .una. d~te_rl1linadá::configu.:
de ;vista, entonces puede hacérsele manifiesta también en este casg, la raciQn"de la'rcii6n práctica así entendid.a. En ella se funda incluso cuan-
posición domina!lte, que de~~ "antiglJo .ocup,an._Pl~t6n X,~~is~9_~~I~s.
I '(Jo l,a toma 'por objeto' e 'iñt¿nú-producir proposiciones verdaderas
Por cie'rto que tainbién su 'pensamiento se desarrolló' bajo' las 'contin- sobre eUa., . . ' ." ", '
gentes' circunstancias de sU época. Sin embargo,_~ peculiar )er~:_ Que la raz(mpráctic'a eS posible"fue'uno de los más importar1tes~
.. ,: r quía se muestra en ~I hecho de que su pel!:~nto Pl!.~~~_!?~e!S~__ desc~briJniento 'de . anti ua. No s6lo la explicación d'el: ,
fnictíferoíndüS6 -para problémas~que-se~~itlÍ,a~, fU~J'i.-deLc;tmpo,de , mun o en su totalidad .sino tambien la sanción de las normas de:Ia co'n-' ,
'visióriqüe~es' trazába".~ tierrip~:.$Cl?ü~de~Jer.~~~s,i~:!-~d_~~_':'CI~~icof vivencia Y e! obrar' ~umanos'~n. ~iempre, e~' ~riniera instáÍ1~i,~"j~sti,~~":'.
."!>" es: P?~ ~. pensanllento provee reS¡;\lest:s !9s:l~so,-:::!~},:~),r~g~n~,as cad~ a .tray~~d~}~~lto,J!'-,.t,raqlclono la ~':lt~~d~d. No ne~eslt~n;'~mo" .
:.:' ; ue elIOS mlsmbS- nO-se .,han ,plan~ea .' Ciertamente, D1.Qgunclaslc9... tales, hacerse consge,n~es, para poder dete~mar'la conCtencla: .Por el
(,:~':.-,:;':'.eU,lQ:.a_-8u YqUIen osO a sería el último que estuvi~ra dispuesto contrario, su inf1~lo resulta ya relativo una, vez que 'slfsabe de 'éL'Pre.'
lJ:; ,,'~; "a aceptar doctrinas sin prueba y sólo por autoridad. Sin em~a,rgo, cisamente, en,esto ,p)!'l~ste la obra d~ ,una :niZónqt:re ri'o 'se deje: i'édudr.
,:,\' cuando esa prueba se lleva a cabo ,la jeraIlluía de un clásico semuestra ,al desempcilo de funcione. mcramerií. instrumental~:' ESta fue deSd!-
"p~cis3mente en el hecho de que ?o poc~ veces puede soportarla a eg
biert. J'<!,ÍO! griegos; un p',\Di:~E,;no~eri'Ó;'b~j~~\'Ió.~' ~e,lb ~¡.
pie nrme, mcluso cuando ella esta orgaOlzada a través de pr:eguntas zón .1eófIca. y., en.una etapa pos~~~~r, ,bajO la fO~,a de. la r~()rt prac""
que no fueron las suyas propias. ¡;': ','¡ .' tica. Pero con esto estuvo,viricúla8o' efOeSaITollo de una f1Ibsofía pdc:.'
. :, La filosofía antigua. d~.J11uestrasu actualidad, en todo C3S0\ ,si no tica, que podía .ser aplicada r4~~'rrOÜ~r un' apara.to conceptual con
~~;lplanece t~n sólo c()mo. obje-tó: ~éinv~~(~~~,ió~ :histórica,~in.?_ ~~ aY1,Jda del cual p1,J~e la ~az~n,p~áctic;a'e,éhar luz ~bie' sí ~isma: ,' .
. pJ,J_ec~IUldeE.l~_~;~ctu~!: _~'l,~p.()~.e,.~.~a..:I~~I~_a~n_d.~_
~~~,sY~~'PT9_~~~: ' Como es ~bldo.l.r68e~.r:o..u.3 /de l~ mOSOfl~, Eé~k~,g~~.
\~ mas, cuando es mterrogada de modo pertmente. "Resta aun la cuestlon rado,:,.po{,la sofística, "'un fenonieno d~ pelif"am~nto gnegcr'frecuente-'
de si en tales casos se aprende algo de los pensadores antiguos o se busca
tan sólo confirmación para los propios trabajos, para las propias espe-
•..mchit~.omaHnt~di(ri{ y mal iJiterpretado. Sin ~~-º,
desde antigu().J..P~~_.~~c!l!~~~:~:. !a, Q!~:'~~f!,a
Ji~~__ ~.~_~~!I.!.~~!:,
..p_r~~~ic~,~l~~i.~~!
y sin él

13
12
,.'
.
.- r

..
~'

~ ~ , ~
- -- - -

/
, . ésta no puede ser entendida correctamente, tal como aparece docu- minio de estos hechos pertenecen también la conciencia de las noonas
mentada en las obras respectivas ~e,Platón y Aris.t.~t~les:E~ est~o~ras y de su validez, su g~nesis y la historia de su influencia, pero no las nor-
se buscañ'camiños 'i'iravés de los cuales resultará posible proporcionar mas mismas y su validez. La pregunta por la legitimación de las normas
un iunCíaíñento racional tanto para e~.obr"ll!Ac:Lh.~J!!b!.e. ~n.t.o.P.~r.a.J~_ mismas está excluida del ámbito de problemas accesibles a la conside-
páü1is -d~~ii~~~a.:cJo~~deiitro'.~e )as. cual~~.p.~.~~ .cQ~Yiy~con sus se- ración científica. Cómo se alcanzan objetivos dados de la mejor manera
iñeJantes' de acuerdo con su propia determinación. Si tal empresa no es cosa que puede hoy establecerse con m~todos cada vez más exactos.
hubiese alcanzado su objetivo, entonces tampoco habría sido posible Pero en las cuestiones acerca de a qué objetivos se debe aspirar y de
darse cuenta de todos los desvíos y perversiones de la razón.Rues~JQ cómo. puede un deber de esta índole ser racionalmente fundamentado,
en estas cuestiones no hemos ido, en el fondo, más allá que los autores
~JlEt...!!:..~.lJ.!!..~~~~!
p.~~,e~.c~~~:b..~ ).~.s.-r~IJ!l.~
~.~gE!~~<l.~~~~)~, ~.?E:
que determinan, las más de las veces, la vida concre~a de los hombres. clásicos. Aquí r-:~~~~.c;Lm~oJJº_.!l~ .!ª..ªf.t1;,t!l.fut~.!l
__Q!Je_I.~.f~osofía anti-
Los puntos de referencia que determinan la ópti~a de las o.b!~ ~!~~, _b',U~..p~e~~~!~!!!~L~~L~.~~aj!J~!jl:i~ Qé!@_~.!:. Esta actua¡jéÍad puede
sicas de la filosofía práctica son completamente,@".!@!~~.t~~ ..~~!~~.~I,:..i ponerse de relieve cuando se intenta reconstruir los aspectos normati.
mientras que la Política aristotélica desarrolla su aparato conceptual vos que allí se encuentran y traducirlos, al mismo tiempo, al lenguaje
en vista de una pólis que también para Aristóteles pertenecía ya al pa- del mundo moderno. .
sado. la República de Platón, en cambio, construye una utopía del . La pregunta acerca de J'_~r.q!l.é .!a.)!!9~f~~ práct~ca de la anli-
Estado que. es cierto, deja ver en su superficie ciertos rasgos de proce- ..'--. ~~d~_pu~ .... e, en mayor medita, Je.~~!.~o~t.av(a.4~_~.ign~ficadopara-
dencia espartana, pero que, en su concepción, remite más allá de los í' \ '.0') dhP!tá!ico--es SlIsceptible de una respuesta simple: puede. tener esa
limites Y del ámbito de experiencia del mundo antiguo. Por su parte, '-.~" '5"¡gjf!.fícación p~rgue 1~.~i~~!p.@.~~ ..Q!!g;6~.~o_~_"-_~ªp~ce.~.<J~'p~ºgre-
la Etiea Nieomaquea de Aristóteles realiza el programa de una feno- l~
so da-mismó"modo -que las teóricas. Por cierto, se concibe el mundo
menología del obrar normativamente regulado, mientras que las Leyes ~~ "'d'é1~iCia-propio(fél-hOmb-re-cóñio sujeto a un constante cambio.
de Platón presentan, echando mano de la ficción de la fundación de , Pero estos cambios no son en menor medida consecuencias del progre-
~""J

~ -4... .
'c; un Estado, el modelo de un compendio de legislación discriminado hasta 'i:> ~ ~ so dd que fueron capaces las ciencias teóricas de la modernidad. Pro-
en sus más mínimos detalles. Pero ent0<l.0s h:~_s.<:!!so~_!.e._~n~.t!..d.~ •.~.t;.~::, ~", ~ gresos ha habido. en considerable medida, ante todo allí donde la eues-
rrollar criterios que han de po~~~ºI!.a¿~_º..s?JJ)_t:.t~.~~i.~~.~_~!_~_~'!.~el --..Q.. ~~. --(ióñera'-desarroifú" ilüevos'medios 'p'ara-la satisfacción de las necesida-
-óbrarensüTac'tlci3ad:5íñO también resultados c()nsl~~~bl~~Y...~~.8@.n :~ '-~ ~ des humanas, y al mismo tiempo provocar con ello necesidades siempre
aesarrollo ulterior en las p'ólémicas~sob~j~ai9~s.1'~~.Q..JE.1~
'habia rec¿)noddoArlstÓieIes, 'éi'hombre está definido también por d
..Pues, como

hecho de que, a diferencia de todos los otros seres vivos. puede p.o~erse ~ ~~
~~~.~
;~~¡q~i~~~st~~~lei.~~~~~~~¡1l~~ll
cuestión, no hay pro~~ aJg~.no~n sentido estncto, puesto que aqul
de acuerdo con sus semejantes tanto acerca de lo justo Y lo IrijUstO ~\¡: ~~ . . ••
:. élidaunodéÍle siempre volver -a-hacerlii'expeiieñCia de situarse en el
como acerca de lo útil y lo perjudicial. Pero el atisbo de dicha posibi- -t v. ...::punto de partida. En efecto, todo progreso tanto en el saber como en la
lidad resulta ser como un estímulo para su realización. En todo caso. ~~ habilidad técnica resta ambivalente. No puede verse en él qué se debe
c::~m:an/~~~~ brim!ento d~)a ..~~g.~tí.~J)_~£~il;~...~!4~~~J\l.~~<l!1~ ~~~~c.~.d..C::., ~ hacer propiamente a partir de sus resultados y cómo puede uno valerse
__
ra cuestióñ' de-romo--sena de VlVlfpuede.~ecldtrs.e so1:?~)ab~e d~..,!na de ellos de modo racional. J.Q.rJ!1,~Sh9 _q!-!~_~~.b.~~"-. ~~.,si~LJ~~!()!l~~ y lª~.
reflexión racióiiaf:---" - .~ ..- '---- - '..-- '-- .condiciones de la vida, las preguntas por los verdaderos bienes y por los
-_ '.'." '•.... -...-.,...T
-..- ..'''' "..'.'''''- ..' .h ..•..... _.._.f....... '. ''''d'' f'
....--~ñefá~lto 4etconocimien.to t~ór,icC?,los autores clásicos de la verd:l~eros r!Iles. ~el_.9.b.n\I:_~~ .~I1__S~~rnP(C•..v9vt;La_p~nt.~ªrse ...e. ~.
. '. antigüedad han '-Seguido'siéñd'o'-un'~moddo,incluso allí donde la..!i!~- ....~m¡siña'iñiiiéra . fa filosofía 'de la anti - edad ueda de todos modo~
¿'v(\? sotía y la cíéncia-h-áñáIT!~ado,!.~.~:m~~~~o~._m~todo.~,-~_~!:,;y'º-$.~ ..~ife:: eCm.frito"dé'~ a er elaborado por ve?: I2rimera un marco conceptual
I :, ,. '-re.nJ~s~~!!~~~~~. S10 emg~~~U;illID!ill.Qd~!~~~~,
.~cuadQ para la disc~siéw ~ t~roblema~'y'
posibilidades d solUCión ue, en virtud de su slSntfiCacl6n para.~!&:.
2~_h.~.~e!..ofr~d~
:.;.:....-i> f!tlí donde se trate~legrtiIñáC~~~~,_~pe.n~~~
I ~',j' I2roducidQalgún adelanto quena ha~a tentdo luga~ deptro d~ fas hml: m tica, todavía ha era as.' inalmente, esto resulta
,. tes trazad s o los clásicos de la antlgüeda s cIencIas SOCialespue- de unportancla también para el saber teóri ,pues los pensadores an-
-aeñ:Por cierto, llegar a resu ta os susceptibles de fu~~amentación tiguos han reconocido el hecho de que toda' actividad teórica consti-
cuando toman por objeto el mundo del obrar en su facticidad. Al do- tuye una determinada forma de vida y debe ser juzgada como tal. Si

15
14
..; .
se considera el saber teórico desde ~ste punto de v~ta. se' arriba a con.
secuencias que ataften a los métodos de que uno se s~e cuando intenta ' .... '

descubrir o fundamentar un saber de esa índole. Con "todo~se plantea


aquí otra cuestión apre.miante. a saber, la cuestión ácerca de qué sea
: verdadel'¡lme
nte digno ~e saberse denttO del inabarcable dominio de
.lo: cognoscible. en gener3l. Es precisamente de los pensadores clásicos
. .de la antigüedad 'de quienes se puede aprender de' modo ejemplar c6mo
,formular la pregunta por 10 verdaderamente digno de ser sabido.
Univtrs~tát Heidelberg ,/

...

. . ~.'

.... '.

.,' ..

..~
.. :1 .

• 1
"'.
',1
~ -!

¡: 16
l

Potrebbero piacerti anche