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FACULTAD DE INGENIERÍA

ESCUELA PROFESIONAL DE INGENIERÍA AGROINDUSTRIAL


EPIA

TEMA: Caracterización físico químico del aceite vegetal extraído a partir de la


planta de shapaja (attalea phalerata), en el departamento de Loreto en el año 2019
PRESENTADO POR:
 BAZAN SALAZAR ROSALINDA

DOCENTE TEORIA: Ing.

DOCENTE PRÁCTICA: Ing.

SEMESTRE: 2019 - II

ANDAHUAYLAS – PERÚ

2019
1. TEMA

Caracterización físico químico del aceite vegetal extraído a partir de la planta de


shapaja (attalea phalerata), en el departamento de Loreto en el año 2019

2. PROBLEMA GENERAL

Cual es la característica físico química del aceite vegetal extraído a partir de la


planta de shapaja (attalea phalerata), el departamento de Loreto en el año 2019

3. PROBLEMA ESPECIFICO (1 Y 2)

Cuál es la característica física del aceite vegetal extraído a partir de la planta de


shapaja (attalea phalerata), en el departamento de Loreto en el año 2019

Cuál es la característica química del aceite vegetal extraído a partir de la planta de


shapaja (attalea phalerata), en el departamento de Loreto en el año 2019

4. 0BJETIVO GENERAL

Evaluar la característica físico química del aceite vegetal extraído a partir de la


planta de shapaja (attalea phalerata), en el departamento de Loreto en el año 2019

5. OBJETIVO ESPECIFICO (1)

Evaluar la característica físico química del aceite vegetal extraído a partir de la


planta de shapaja (attalea phalerata), en el departamento de Loreto en el año 2019
Marco teórico y conceptual

6. Antecedentes de estudio:

Sotero V. et al. (2010) determinó las características química y genéticas de tres palmeras

amazónicas del complejo Attalea: Attalea phalerata (shapaja), Attalea butyracea (shebón),

Attalea bassleriana (shapaja). De los análisis químicos nos reportan que las almendras

presentan excelentes cualidades nutricionales; las harinas secas presentan carbohidratos

(52.8 – 54.8%), proteínas (17.5 – 20.6%), aceites (18.0 26.47%) y concentran una buena

cantidad de elementos básicos para la nutrición humana como calcio (24.3 – 78.4mg/100g),

magnesio: 102.4– 176.9mg/100g; sodio: 153.2– 156.2mg/100g y potasio: 297.7 – 495.4

mg/100g. El aceite de las almendras, presentan alta concentración de ácidos grasos

saturados como láurico: 44.4-46.4%; mirístico: 17.8-18.7% y palmitico: 8.5-9.3%.

Julio Cordero, et al. (2009) Con el objeto de conocer el potencial de los frutos de la palma

yagua (Attalea burtyracea) para producción de aceites venezolano se analizaron distintas

partes de frutos colectados de plantas silvestres. El epicarpio y mesocarpio posee 47,7 ±

1,37 % de materia seca (MS), 34,2 ± 0,75 % de extracto etéreo (EE). El ácido graso

predominante en el aceite del endospermo lo fue el láurico (42,9 %). Hubo un 25,8 ± 0,57

% de ácidos grasos saturados y 74,2 ± 0,91 % insaturados. El índice de yodo fue de 74,75

± 0,21 y el de saponificación 186,65 ± 1,27. La cantidad de grasas sólidas del aceite de

mesocarpio varió desde 0,31 % a 10 ºC hasta 0,01 a 35 ºC, sin presentar goteo. Estas

características de los frutos de palma yagua indican un potencial como fuente de aceites

para animales o humanos, dado que el mesocarpio presentó cualidades que lo hacen

superior al aceite de palma africana.


Dávila E. et al. (2011) en su investigación, caracterizó químicamente la almendra de los

frutos de tres palmeras del género Attalea: Attalea moorei, Attalea sp. y Attalea salazarii

colectadas en la región amazónica peruana. La composición porcentual presenta en peso

seco: cenizas: 1,54%, 1,30% y 1,44%; proteínas: 20,63%, 17,48% y 10,16%; grasas:

23,02%, 18,03% y 19,47; y carbohidratos: 54,81%, 63,19% y 68,93% respectivamente.

Los elementos encontrados por espectrofotometría de absorción atómica, en los

endospermos de estas especies medida en mg/100g indican: (Cu): 0,955, 0,827 y 1,390;

(K): 490,13, 405,43 y 578,68; (Mn): 1,43, 1,98 y 1,65; (Mg): 134,83, 102,37 y 111,68;

(Na): 153,18, 126,28 y 120,55; (Zn): 1,73, 1,21 y 1,86; (Fe): 2,95, 1,68 y 0,51; y (Ca):

24,30, 78,40 y 44,55 para A. moorei, A. sp. y A. salazarii, respectivamente. La composición

de ácidos grasos se realizó por cromatografía gaseosa; se observó que las Attaleas

presentaron mayor concentración de ácidos grasos saturados, encontrándose en mayor

concentración el ácido láurico, siendo de 44,40%, 47,97% y 51,84% para A. moorei, A. sp

y A. salazarii, respectivamente. Asimismo, se determinó la estabilidad del aceite y

caracterización de la fracción insaponificable del aceite de tres palmeras del género

Attalea: Attalea moorei (A. m), Attalea salazariii (A. s) y una aun no identificada

denominada Attalea sp. (A. sp), colectadas en la Amazonía peruana entre los años 2009 –

2010. La caracterización de la fracción insaponificable se realizó por cromatografía

gaseosa.
Marco teórico:

El género Attalea

Taxonomía y descripción del género

El género Attalea esta conformados por palmeras propias del neotrópico, que se

encuentran distribuidas desde México hasta Bolivia y también en los ecosistemas de

tierras bajas y en los Andes hasta las alturas de 1200 - 1600 metros sobre el nivel del mar.

Numerosas especies son palmeras masivas de alta densidad y son elementos notables del

paisaje, aunque también hay especies pequeñas, tanto en los bosques como en las

sabanas. En la región amazónica se las encuentra sobre todo en rodales naturales, aunque

también están presentes en parcelas de productores como resultado de una tala selectiva.

Este género posee racimos que pueden llegar a pesar entre 30 y 100 Kg. La forma del

fruto varía de acuerdo a la especie, pero por lo general son ovoides y presentan de tres a

cuatro semillas, ubicadas en forma longitudinal a este (Rodríguez, 2006).

Fuente: Paul Xavier 2016


De las especies estudiadas.

Attalea maripa (Aubl.) Mart.

Descripción botánica

Reino: Plantae

División: Magnoliophyta

Clase: Liliopsida

Orden: Arecales

Familia: Arecaceae

Subfamilia: Arecoideae

Tribu: Cocoseae

Subtribu: Attaleinae

Género: Attalea Kunth

Especie: Attalea maripa (Aubl.) Mart.

Nombres comunes: cucurito (Venezuela), cucurita, güichire, marija, palma real

(Colombia), cusi, huancava (Bolivia), inayuga, incham, shapajilla (Perú).

Esta especie es común en la Amazonia y crece abundantemente en tierra firme con suelos

arenosos pobres. Es muy resistente al fuego y a menudo se encuentra en pastizales,

bosques secundarios y terrenos comunales, a veces junto con otras palmeras tales como

babasú (Attalea speciosa), uricurí (Attalea phalerata) o jaci/palma (Attalea butyracea). La

palmera de inayuga se distingue fácilmente de otras palmeras parecidas por sus frutos

ovoides, por el pecíolo largo y delgado de las hojas y de la bráctea, que es de forma

longitudinal (Rodríguez, 2006)


En la Amazonia oriental, esta especie florece de octubre a marzo. Las frutas maduran de

enero a marzo del año siguiente. En la Amazonia occidental, florece en julio y empieza a

producir sus frutas en noviembre (Rodríguez, 2006)

Figura N°01. a) Fotografía del racimo en la palmera (fuente del autor Paul Xavier 2016); b)

fotografía del árbol en zona de crecimiento (fuente del autor Paul Xavier 2016); c) imagen

con la característica de la palmera.

Características morfológicas

Esta especie se distingue por la altura que alcanza sus individuos entre 3.5 a 20 m de

altura con tallo columnar de color marrón a grisáceo por 25-30 cm de diámetro

Tiene hojas compuestas que pueden alcanzar los 10-12 m longitud y una gran

inflorescencia interfoliar. La corona está formada por 10 a 22 hojas erectas con largos

pecíolos de hasta 2 m y raquis de más de 6 m con aproximadamente 200 pinnas de cada


lado y orientadas en planos diversos, las pinnas están dispuestas en varios planos,

generando un aspecto plumoso. Inflorescencia masiva con pedúnculo de más de 1 m. y

bráctea de casi 1 m. con raquis de 80 cm. Las flores son de color blancuzco amarillento.

Los frutos son ovoides, prolongados en el ápice y de color marrón o amarillos de 5 a 6,5

cm de largo y 2 a 5 cm de diámetro (figura 2-b), con 2 o 3 semillas que son 4 a 6 cm de

largo y 2,5 a 3 cm de diámetro. Una palmera produce normalmente 5 o 6 racimos de

frutas/año (figura 2-a), con 800–1 000 frutas/racimo. Figura N°02. a) Fotografía del

racimo en la palmera (Fuente del autor); b) fruto maduro (Fuente del autor); c) imagen

con las características de las hojas e inflorescencias (Rodríguez, 2006).

Usos.

Frutas: La fruta es un alimento para la gente, y animales de la fauna silvestre.

Anteriormente, la fruta se usaba también como combustible para el ahumado del látex de

caucho natural. La pulpa de las frutas maduras se usaba también para preparar jabón

rústico, pero esta práctica ha desaparecido con la venta de jabones comerciales. El

palmito es utilizado para la preparación de un extracto utilizado contra la hepatitis; la raíz

tiene un amplio uso medicinal; los frutos sirven contra la diarrea. Hojas: Las frondas de

esta palmera se usan para construir techos para refugios temporales. Dependiendo del

tamaño de la estructura pueden ser necesarias 120–150 hojas. Las hojas tiernas son

utilizadas para la fabricación de abanicos o canastos de rápida fabricación en el bosque;

también son utilizadas para rellenar las cerbatanas Los pecíolos de las hojas se utilizan

para hacer trampas para peces. Bráctea: La bráctea que rodea los racimos de frutas de

inayuga se usa como contenedor y puede durar hasta tres meses. Se usa para recoger agua

y para poner desechos para cerdos, aves de corral o caballos. A los niños también les
gusta jugar con ellas. Inflorescencia interfoliar: El pedúnculo de la inflorescencia es el

que conecta los racimos de flores o de frutas con el árbol. Se puede utilizar como

plumero una vez que se corta del árbol y se han cortado las frutas. (Rodríguez, 2006).

culinas (Muñoz, 1997). La polinización está dada principalmente por escarabajos, abejas,

moscas y avispas (Henderson et al., 1995; Moraes at al.; 1996). Se pueden encontrar

individuos en floración durante todo el año, pero su pico máximo se registra entre Julio y

Diciembre (Moraes et al., 1996).

Descripción botánica.

La infrutescencia de Attalea phalerata son recurvadas y cuelgan hacia abajo a lo largo del

tronco; cada planta puede producir hasta 7 infrutescencias a la vez, con 100-900 frutos

anaranjados con un epicarpio duro, un mesocarpio aceitoso y fibroso de sabor dulce

lechoso y un endocarpio leñoso, contienen cada uno de 2-5 de semillas (Balselev &

Moraes, 1989; Moraes et al., 1996).

Características dentro métricas.

Es una palma robusta y maciza, inerme y monocaule de hasta 20 m. de altura y 40-100

cm. de diámetro (Moraes et al., 1996). El tronco se encuentra densamente de bases

foliares remanentes (lisos en individuos viejos) y termina en una corona de 9-25 hojas

pinnadas arqueadas, de foliolos irregulares dispuestos en varios planos (Moraes et al.,

1996).

Ecología de la planta.

Especie parcialmente tolerante a la sombra, común en casi todos los bosques, húmedos y

sub-húmedos de las tierras bajas; También en bosques de transición. Especie indicadora

de áreas temporalmente inundadas, asociadas a valles y áreas hidrófilas, con suelos


profundos, generalmente de pH Neutro. Florece asincrónicamente en cualquier época del

año. La pulpa de las semillas es comestible y consumida por los animales. Especie

arbórea en sub-dosel heliofita (adaptada a claros de bosque y a alta incidencia de luz),

común en bosques siempre verdes amazónicos de tierra firme, pre-montanos y montanos,

estacionalmente inundados, semi-deciduos y en islas de bosque en zonas de sabanas

húmedas (250-900 m). En La Paz, Cochabamba, Santa Cruz. (Moraes, 1996). Esta

diversidad no queda simplemente manifiesta a nivel cuantitativo, sino también a nivel

cualitativo y ecológico. Muchas de estas especies aportan sustancialmente en la

caracterización ecológica de varias formaciones y pueden servir para describir y

caracterizar las comunidades vegetales en varios pisos ecológicos y ecosistemas (Moraes,

1996).

A pesar del conocimiento científico sobre la familia Palmae en Bolivia ha registrado una

dinámica importante y en los últimos años se ha ido incrementando por contribuciones

referidas a su diversidad, distribución, ecología, biología reproductiva, demografía y

usos, aun no se cuenta con toda la información básica y relevante para referenciar a su

manejo sostenible a largo plazo (Moraes ,1996).

Distribución.

En Bolivia está ampliamente distribuida desde las tierras bajas a 150 m hasta por encima

de los1000 m. en los Andes. Habita en los bosques amazónicos de tierra firma, pre

montanos y montanos, estacionalmente inundados, semideciduos y en islas de bosque en

zonas de sabana húmedas (250-900m. snm.); además de ser común en praderas con

pastos cultivados (160- 100m. snm.) en los departamentos Pando hasta la zona central de
Santa Cruz, también en Cochabamba, Beni y La Paz. (Bolfor, 1998; Moraes, 1996;

Ayangma, 1997).

El Motacú es una de las palmeras que se presente más frecuentemente en casi todos los

ecosistemas del TIPNIS desde los bosques pluviales subandinos hasta las sabanas. En

partes del "bosque bajo denso de inundaciones" de la llanura que, según la clasificación

de RIBERA (CIDDEBENI, 1992) es el ecosistema más ampliamente distribuido en el

TIPNIS, esta palmera forma bosquecillos, los denominados "motacusales" (CIDDEBENI,

1992). Otro inventario del TIPNIS (ALTAMIRANO, 1992) describe los motacusales

como un tipo común en las “isla de bosque” donde el Motacú domina y constituye un 80

- 90 % de los árboles existentes.

Usos.

Además de gran distribución de la palma se caracteriza por su gran utilidad de los

recursos que brinda Attalea phalerata es una especie que tiene un importante potencial

económico como fuente de materia prima para la producción de aceite vegetal (Moraes et

al., 1996; Ayangma, 1997). Según Moraes et al (1996) cerca al 60% del aceite que puede

ser producido corresponde al extraído del mesocarpio de los frutos y podría alcanzar una

producción potencial de 1.2 a 1.4 toneladas por hectárea año, producción que comparada

con especies que han sido sometidas a mejoramiento genético (p.e. Elaeis guineensis y

Cocos nucifera) es alta. Esta palma ofrece también otros recursos que son utilizados para

diferentes fines, encontrándose entre las especies de palmeras nativas que generan más de

un producto (Moraes et al., 19996). En algunas regiones de los departamentos de La Paz,

Santa Cruz, Pando y Beni la población local utiliza los troncos para la construcción de

cercos y horcones; las hojas es utilizado para techos, protección de cultivos y fabricación
de canastos; el nervio central de las hojas es utilizado para hacer escobas, abanicos y

cestos; las cenizas de las brácteas pedunculares son masticadas junto con las hojas de

coca; el mesocarpio carnoso y dulce de los frutos es consumido y comercializado en

varias localidades; el exocarpio quemado es utilizado para ahuyentar a los mosquitos; el

brote foliar ( palmito) actualmente raras veces es también consumido para ensalada a

partir de los brotes tiernos. (Moraes et al., 1996).

Se utilizan los huesos y también la pulpa de los frutos de Motacú para extraer un aceite

cosmético que se utilizan como aceite puro ó como ingrediente para champús sobre todo

contra la caída del pelo, cuidado de la piel y contra el congestionamiento pulmonar y

dolor de articulaciones. Además, la decocción de las hojas es utilizada contra la diarrea, y

el jugo hervido de las raíces como remedio contra las amebas, tuberculosis e infecciones

uterinas. (Bolfor, 1998; Balslev & Moraes, 1996).

Este aceite se vende tanto en los mercados locales (Trinidad) como en farmacias y

peluquerías en La Paz y otras ciudades de Bolivia. Localmente se utiliza también el aceite

como aceite alimenticio. (Bolfor, 1998).

Capacidad reproductiva.

Fenología.

El periodo de floración de Attalea phalerata comienza aproximadamente a mediados de

abril y se extiende hasta fines de agosto e incluso a mediados de septiembre, coincidiendo

con la época seca en la región. El pico de floración se registra entre junio y Julio,

precisamente durante los meses más secos. La época de fructificación comienza a fines

de octubre y se extiende hasta fines de abril. La época de maduración de los frutos dura

entre seis y siete meses y alcanza su pico de producción entre enero y marzo,
coincidiendo con los más húmedos. Sin embargo, y pese a esta estacionalidad, pueden

encontrarse plantas florales y/o, pueden encontrarse plantas florales y/o fructificación

durante todos los meses del año. Estudios realizados través del patrón fonológico de la

especie en la región de Riberalta y su relación con la variación en la precipitación pluvial.

(Paniagua Y., 1998).

El motacú florece durante todo el año, aunque la intensidad de floración no es la misma

durante todos los meses. EL pico de floración, en la población estudiada se da entre los

meses de Junio y Julio (los maeses más secos), existiendo una marcada disminución en

los meses de noviembre a enero, el periodo de floración comienza aproximadamente en

Abril. La emisión de las infrutescencias por individuo no es continua. Así dentro de la

población se observa individuos portando infrutescencias junto a otros que carecen de

estructura reproductiva. Por tanto, la intensidad de floración se caracteriza por el número

de individuos que están emitiendo infrutescencias y no por el número de infrutescencias

emitidas por individuo. La presencia de individuos reproductivos en el motacú se

incrementa con el tamaño de la palma, comienzan a reproducirse cuando el tronco

alcanza aproximadamente los 3 m de altura. Las primeras infrutescencias observados en

individuos que nunca florecieron generalmente son masculinos, pudiendo encontrarse

hasta dos infrutescencias antes que se desarrolle la primera inflorescencia pistilada.

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