Pueblo dominicano:

El Pleno de la Junta Central Electoral ha informado que para el jueves de

esta semana tomaraá una decisioá n con respecto a la utilizacioá n del voto

automatizado en las elecciones municipales programadasa efectuarse el 16 de

febrero del anñ o proá ximo.

Para el díáa de ayer, lunes, habíáan sido convocados los representantes de

las diversas organizaciones políáticas para expresar por escrito sus puntos de

vista con respecto a ese particular.

Con anterioridad, en fecha 29 de octubre de 2019, el Presidente de la

Junta Central Electoral, Dr. Julio Ceá sar Castanñ os Guzmaá n, tras la celebracioá n de

una reunioá n del pleno de esa institucioá n, declaroá que el sistema de voto

automatizado podríáa ser utilizado en las elecciones municipales del 16 de febrero

del 2020, siempre que existiese “el consenso unaá nime de todos los partidos

políáticos reconocidos”.

El 1º de noviembre, varios partidos políáticos, entre los que se encuentran,

la Fuerza del Pueblo, el Bloque Institucional Demoá crata (BIS), el Partido

Quisqueyano Demoá crata Cristiano (PQDC), la Fuerza Nacional Progresista (FNP)

y el Partido Unidad Nacional (PUN), le expresaron al oá rgano electoral, en forma

escrita, su oposicioá n a la utilizacioá n de esa modalidad de votacioá n.

Asíá pues, de esa manera, quedaba puesto en evidencia que no habíáa

unanimidad por parte de las fuerzas políáticas del paíás en la utilizacioá n del voto

automatizado para las elecciones municipales, como habíáa requerido en sus

declaraciones el presidente de la Junta Central Electoral.

 A pesar de eso, la Junta Central Electoral convocoá para el 14 de este mes

de noviembre a todos los partidos y agrupaciones políáticas reconocidas para

conocer con mayores detalles su posicioá n sobre la posible aplicacioá n del referido

meá todo de voto electroá nico en los comicios ya mencionados; y para ayer, lunes,

como hemos dicho, otra convocatoria a los mismos fines.

¡Cuaá nto ha cambiado la actitud de los partidos, agrupaciones y

movimientos políáticos del paíás con respecto al voto automatizado!

En enero de este anñ o, todas las organizaciones políáticas del paíás fueron

convocadas por la Junta Central Electoral, con el objetivo de expresar sus puntos

de vista sobre su utilizacioá n en las elecciones primarias para escoger sus

candidatos a cargos de eleccioá n popular

En esa ocasioá n, esas organizaciones políáticas, a unanimidad, aceptaron la

propuesta de la autoridad electoral de poner en praá ctica un sistema de votacioá n

automatizado, como proyecto piloto.

Se entendíáa que una transicioá n de voto manual, con boletas de papel, a un

sistema de voto electroá nico o automatizado, significaba un avance, un progreso y

un paso adicional hacia la modernizacioá n.

Se teníáa la conviccioá n, ademaá s, de que de esa manera habíáa una

disminucioá n de los riesgos hacia las irregularidades y fraudes electorales; y por

consiguiente, se contaba con un mecanismo dotado de mayor seguridad.

¿Queá fenoá meno tan impactante o trascendental hubo de haber ocurrido,

entonces, para que en la actualidad se haya producido un cambio tan draá stico de

postura?

La razoá n es muy simple: el fraude electoral en las primarias del PLD.

 Ese fraude electoral pudo realizarse debido, esencialmente, a la

vulnerabilidad del sistema aplicado por la Junta Central Electoral, el cual no fue,

en ninguá n momento, certificado respecto a estaá ndares internacionales de

seguridad y calidad, ni tampoco auditado en sus componentes tecnoloá gicos.

Todo esto, a pesar de que fue la propia Junta Central Electoral la que se

comprometioá en una audiencia celebrada el 22 de febrero de este anñ o a realizar

las referidas evaluaciones al sistema de voto automatizado.

La situacioá n era particularmente de intereá s debido a que el programa de

software que fue desarrollado, no fue adquirido de ninguna empresa

internacional reconocida, sino que fue disenñ ado e implementado por el personal

teá cnico interno de la propia Junta Central Electoral, el cual no teníáa experiencia

previa demostrada sobre la materia.

Advirtiendo sobre esa gran debilidad, en diversas ocasiones nuestros

delegados y representantes presentaron solicitudes de verificacioá n y auditoríáas

de los equipos y sistemas que seríáan utilizados por la Junta Central Electoral.

Ante esos reclamos, sin embargo, las autoridades electorales guardaron

silencio y nunca ofrecieron respuesta.

Luego de consumado el desaguisado electoral en las primarias del PLD,

solicitamos a la Junta Central Electoral la realizacioá n de una auditoríáa forense

integral, con la participacioá n de expertos teá cnicos de la OEA, la Unioá n Europea y

los Estados Unidos.

Esa solicitud tampoco fue satisfecha. En su lugar, se incurrioá en un fiasco,

al contratarse una firma con conflictos de intereá s, la cual, frente a la reaccioá n

indignada de la opinioá n puá blica, tuvo que abandonar su trabajo de evaluacioá n

teá cnica antes, incluso, de haberlo iniciado.

 En adicioá n a cuanto hemos referido, se pudo constatar en los comicios del

pasado 6 de octubre, la comisioá n de diversos delitos electorales, los cuales no

fueron debidamente controlados por parte de las autoridades responsables de

evitar que sucediesen.

Para recuperar la confianza de los electores y de la totalidad de los

partidos políáticos en el uso del voto automatizado para las elecciones

municipales de febrero del anñ o proá ximo, la Junta Central Electoral tendríáa que

adoptar medidas como las siguientes:

Primero, realizar una auditoríáa al coá digo fuente del software, con el cual

se procura verificar que el software que se ejecuta en la maá quina de votacioá n,

funciona correctamente;

Segundo, una auditoríáa de produccioá n a las maá quinas de votacioá n;

Tercero, una auditoríáa del software de totalizacioá n, en la cual se evaluá a el

proceso de recepcioá n de los datos transmitidos.

Cuarto, una auditoríáa de la infraestructura y transmisioá n de resultados,

para lo cual se examinan todos los centros de datos usados en la transmisioá n de

los votos.

Quinto, una auditoríáa pre-despacho, que consiste en una prueba integral

del proceso electoral, que incluya los procesos de votacioá n, transmisioá n de datos,

escrutinio y auditoríáa final de los comprobantes de votacioá n depositados en las

urnas.

Pero ademaá s de todo esto, para dotar de credibilidad, confianza y

transparencia al proceso electoral mediante el uso de voto automatizado, se

requeriríáan la realizacioá n de una auditoríáa de seguridad; otra de

telecomunicaciones; otra de cumplimiento; otra de verificacioá n final; y todavíáa

otra maá s, post-electoral.

Si la Junta Central Electoral no pudo cumplir, porque presuntamente no

habíáa tiempo, con las pocas solicitudes que le formulamos para las primarias del

6 de octubre, estamos convencidos que en los menos de tres meses que faltan

para los comicios municipales venideros, no podraá cumplir con estas medidas

adicionales que seríáan imprescindibles para que el voto ciudadano sea respetado.

Ante todo eso, al igual que el conjunto de partidos aliados a la Fuerza del

Pueblo, manifestamos ante el pueblo dominicano nuestra total, absoluta y

completa oposicioá n al uso del sistema de voto automatizado en las proá ximas

elecciones municipales.

Lo que esperamos de la Junta Central Electoral, para las elecciones

municipales de febrero, asíá como para las presidenciales y congresuales de mayo,

es que pueda ejercer su papel de aá rbitro independiente y organice un sistema de

integridad electoral, respetuoso de la participacioá n de los electores y garante de

la voluntad popular.

Muchas gracias y buenas noches.