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CORRIENTE DEL MUNDO.

1Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, 2en
los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al
príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia,
3entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra

carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza


hijos de ira, lo mismo que los demás. Efesios 2:1-7

1 Antes ustedes estaban muertos a causa de las maldades y pecados


2 en que vivían, pues seguían los criterios de este mundo y hacían la voluntad de aquel
espíritu que domina en el aire y que anima a los que desobedecen a Dios.
3 De esa manera vivíamos también todos nosotros en otro tiempo, siguiendo nuestros
malos deseos y cumpliendo los caprichos de nuestra naturaleza pecadora y de
nuestros pensamientos. A causa de eso, merecíamos con toda razón el terrible castigo
de Dios, igual que los demás.

Peligros de la corriente del mundo. Los muertos en Cristo se manifiestan por hacer o
seguir las corrientes del mundo o estar bajo ellas, dando un resultado de
sometimientos a los deseos de la carne e hijos de ira, cuidado con seguir las
corrientes del mundo porque nosotros ya fuimos liberados de ellas. Miremos el
camino de los que están bajo las corrientes del mundo.

PRIMERA PARTE
a. El estado: muertos en delitos y pecados: Y él os dio vida a vosotros, cuando
estabais muertos en vuestros delitos y pecados

Según la Biblia muerto está quien teniendo un cuerpo vivo posee un alma muerta. El
tal está insensible, sin percepción alguna, inmóvil en cuanto a la fe.

 El muerto tiene su mente en tinieblas (Ef. 4:19 os cuales, después que


perdieron toda sensibilidad, se entregaron a la lascivia para cometer con
avidez toda clase de impureza)
El horror de la condición es de una magnitud tal que no hay quien entienda, ni quien
busque a Dios (Ro. 3:11). Esta muerte es “en delitos y pecados”, como si fueran un
ataúd inmenso, una fosa insaciable que atrapa y retiene para siempre.

Fue el mejor modo que encontró Pablo para describir la manera en que nos
encontrábamos sujetos al reino de las tinieblas. Las palabras “delitos y pecados”,
describe el clímax del estado de muerte.

“Delito” en castellano es sinónimo de culpa o ilegalidad, y en el griego se traduce con


cinco palabras fundamentales: pecados, transgresiones, faltas, ofensas o delitos. El
significado principal es “un desvío de las normas establecidas”

“Pecado del término griego hamartía, que significa originalmente “errar al blanco”. El
hombre no da en el blanco de la voluntad de Dios.

El pecado actúa en nuestro ser interior ideando, promoviendo y defendiendo el mal.


Así se producen los “pecados” que nos sepultan en la muerte espiritual .

b. La conducta: anduvisteis en otro tiempo: en los cuales anduvisteis en otro


tiempo, siguiendo la corriente de este mundo…

Parecería que ahora Pablo quería explicar con más detalles la condición o el
significado de “muertos en delitos y pecados”. La primera característica del muerto
espiritual es su estilo de vida. El verbo “andar” se refiere a la manera de ser, de
resolver los temas de la vida y las intenciones.

“Andar de acuerdo a la corriente” es vivir aprobando el mal y sujetando el modo de


pensar a prácticas y objetivos contrarios a la voluntad de Dios a fin de obtener algo
pasajero y temporal (Ro. 12:2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por
medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la
buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.),Este texto realmente quiere decir:
“andar en obediencia al ciclo de este mundo”, significando la calidad de lo que ocurre
en ese período.

Decir, entonces, que los muertos andan de acuerdo con la “corriente” de este mundo,
es mostrar que el reino de las tinieblas transmite órdenes en todas las direcciones,
esclavizando a las almas sin que éstas tengan la más remota posibilidad de liberación.

Podríamos comparar al mundo con un gran campo de concentración donde es


imposible traspasar los límites físicos ni modificar los espirituales. O también podría
compararse a un gran desfile donde una persona guía y la masa de soldados lo sigue
sin poder modificar ni sus actos ni su rumbo.

Corrientes de hoy jóvenes o personas que hacen cosas sin saber qué es lo que hacen u
obligadas por la corriente los amigos y lo que el mundo y comercio les brinda de
moda: peinados, ropas, palabras, películas, rebeldía, sexo, delitos judiciales solo por
seguir la corriente de esta mundo.

c. El gobierno: conforme al príncipe de la potestad del aire…


… conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de
desobediencia,

O vivimos de acuerdo con la voluntad de Dios, o de acuerdo con la voluntad del diablo.
Los que viven “siguiendo la corriente de este mundo”, lo hacen “de acuerdo al
príncipe de la potestad del aire”.

Príncipe significa gobernante o magistrado, y es utilizado muy ampliamente en el


Nuevo Testamento.

El diablo preside sus ejércitos de demonios y trabaja en los hijos de desobediencia


tratando de ensanchar su imperio, sometiendo y tiranizando a sus súbditos hasta que
todos perezcan en la destrucción eterna.

Este “espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia” en los evangelios
aparece como “espíritu inmundo”, y posteriormente como “espíritus malos” o
“espíritus engañadores”. Son todos administradores de maldad que, a las órdenes del
diablo, fomentan el pecado e intensifican la rebelión contra Dios. Mostradas en las
corrientes del mundo.

El verbo “operar” significa “obrar en el interior,” En consecuencia, la obra interior se


incentiva por la experiencia espiritual que nos transforma de gloria en gloria para
honra del Señor (Fil. 2:13).

En represalia a la auténtica operación del Espíritu Santo, el enemigo monta su


imitación tratando de interferir en los cristianos (2 Co. 11:3,) y manejando a sus
súbditos para satisfacer sus planes aberrantes.

Es humanamente imposible salir de este imperio sin la redención de Cristo. En su


testimonio a las autoridades (Hch. 26:15–18), Pablo usa el verbo librar cuando se
refiere a salir de la potestad de Satanás.

d. Las acciones: los deseos de la carne: entre los cuales también todos nosotros
vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y
de los pensamientos…

Por la construcción de los vv. 1 y 2 parecería que Pablo se refería sólo a los gentiles,
pero el “todos nosotros” del v. 3 incluyó también a los que no lo eran. De modo que por
una causa por que lo hubiéramos hecho (Ro. 1:21–32) u otra por lo que nos enseñaron
(Ro. 2:17–28), en abierta oposición a la voluntad de Dios, todos vivieron la
desobediencia propuesta por el reino de las tinieblas.

Cabe resaltar que los deseos de por sí no siempre son malos, porque el mismo vocablo
que aquí se emplea para mostrar inclinaciones malas, en otras partes se utiliza para
enseñar lo contrario. Lo malo son los deseos de la carne, que están en abierta
contraposición a Dios (Ro. 6:12) (comp. Gá. 5:16, 17, 24).

Pero tal como leemos en el texto, antes que los deseos está la voluntad, que en este
pasaje como en muchos otros significa querer con determinación firme. Es por
voluntad que pecamos, porque nuestras determinaciones naturales no son hacia el
bien sino hacia el mal.

Aun la voluntad tiene su fuerza rectora en los pensamientos. Estos constituyen más
que una simple imaginación porque de la idea se pasa al plan, y de allí a la
determinación.

e. La condición: hijos de ira lo mismo que los demás: …y éramos por naturaleza
hijos de ira, lo mismo que los demás

Pablo, que era judío, se incluyó en la situación trágica de los pecadores al agregar:
“éramos por naturaleza hijos de ira”.

POSEER LA VIDA ES CAMBIAR DE SEÑOR 2:1–3

a. El estado: muertos en delitos y pecados

b. La conducta: anduvisteis en otro tiempo


c. El gobierno: conforme al diablo
d. Las acciones: los deseos de la carne
e. La condición: hijos de ira

SEGUNDA PARTE:
4Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, 5aun estando
nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos),
6y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales

con Cristo Jesús.


a. La intervención de Dios: Pero Dios, que es rico en misericordia

Dios no sólo es misericordioso sino que es rico en misericordia. Este modo de abundar
en compasión para los perdidos (Tit. 3:5) está de acuerdo con las “riquezas de su
gracia” (1:7; 2:7), o de “su gloria” (1:18; 3:16), las que se concretan en Cristo Jesús
(3:8).

El amor de Dios se mostró como un brazo extendido para rescatarnos. Ese brazo es
misericordia, que nos alcanza dondequiera que estamos.

LA MISERICORDIA DE DIOS (2 Co. 1:3)

1. Es grande – Nm. 14:18, 19; Sal. 86:15; 1 P. 1:3

2. Es permanente – Sal. 100:5

3. Es buena – Sal. 109:21

4. Es agradable – Mi. 7:18

5. Es salvadora – Tit. 3:5

6. Es acogedora – 1 Ti. 1:13

La intervención de Dios produjo un giro radical en nuestras circunstancias, cambiando


las tinieblas en luz. De él partió el anhelo de salvar a los pecadores. Nuestra
restauración y la liberación del estado de muerte fue por iniciativa suya.

b. El modo de cambiar las cosas: por su gran amor con que nos amó

Leemos en Ro. 5:8 que Dios “muestra” su amor. cosa que nosotros haríamos con
amigos o personas de confianza pero nunca con enemigos.

Fue por su “gran amor con que nos amó”. No existen dos amos, tampoco dos amores o
dos compromisos. Nacimos por el amor de Dios (Ef. 3:17) que está derramado en
nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado (Ro. 5:5).

c. El soplo de Dios: nos dio vida juntamente con Cristo

Dios mostró su inmensa compasión penetrando en nuestro desastre, no para animar a


los hombres a mejorar ni para estimular a los “muertos”, sino para producir cambios
sustanciales, para dar vida (Tit. 3:5). En 1 P. 1:3 leemos que nos hizo nacer a una
nueva manera de vivir.

El Señor Jesús había dicho: “porque yo vivo, vosotros también viviréis” (Jn. 14:19). De
modo que la expresión “juntamente con Cristo” significa, ante todo, que estamos libres
de la pena del pecado, así como él también lo está (He. 9:28).

Hay aquí dos modos de ver la vida:


Por otra parte, estar “sentados en los lugares celestiales” significa que para Dios el
plan está concluido (posicionalmente), y que podemos compartir las bendiciones
como garantía de que se operará también la resurrección física y la transformación
que esperamos.

Es evidente que Efesios es un libro de adelantos y garantías, algo de lo cual ya


mencionamos. Además, el amor con el cual comenzó la descripción del propósito de
Dios sigue presidiendo las distintas partes en que se desarrolla el plan.

EXPERIMENTAR LA VIDA ES CONOCER SU CARACTER 2:4–6

a. La intervención de Dios: Pero Dios … rico en misericordia


b. El modo de cambiar las cosas: por su gran amor
c. El soplo de Dios: nos dio vida con Cristo

“JUNTAMENTE” con Cristo


(en Efesios)
1. Vida juntamente con Cristo – 2:5

2. Resucitados juntamente con – 2:6


Cristo

3. Sentados juntamente con Cristo – 2:6

4. Coordinados juntamente con – 2:21


Cristo

5: Edificados juntamente con – 2:22


Cristo

6. Unidos juntamente con Cristo – 4:15, 16

Conclusión:
No podemos caer en las corrientes del mundo por ignorancia o voluntad ya que Dios
ha hecho un trabajo tan especial con nosotros de darnos vida y en abundancia,
debemos cuidar que estas corrientes silenciosos y aparentemente inofensivas no
ganen terreno en nuestras vidas.

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