Facultad de Bellas Artes-U.N.L.P.

Departamento de Artes Audiovisuales

CÁTEDRA DE DIRECCIÓN DE ARTE

Y DISEÑO DE PRODUCCIÓN 2014

Titular: Prof. Edgar De Santo

Adjunto: Prof. D.C.V. Paula C. Romero
J.T.P.: Prof. María Victoria Lockhart
Adscripta: Prof. Nathalia Benavides
 Desde el Medieval al Art Déco

ESTILOS DECORATIVOS

JUDITH Y MARTIN MILLER

COMPRENDER EL PASADO, PARA VIVIRLO EN EL PRESENTE.
Una mirada hacia los interiores domésticos.
 LA PALABRA ESTILO PRESUPONE UNA PLANIFICACIÓN.

• Antes de mediados del Siglo XVI no era una actitud generalizada entre la mayoría
de las personas.

• Los ricos y poderosos podían transformar el aspecto de sus hogares cada vez que
les alcanzaba el impacto de un nuevo estilo. En los hogares modestos los cambios
tendían a producirse más lentamente.
Los estilos declinaban y fluían en forma indefinida.

• Los estilos refinados de la aristocracia, destinados a impresionar, son difíciles de

copiar sin adquirir piezas de calidad y artesanías comparables.

• El estilo puede crearse simplemente con dos sillas y una mesa dispuestas con
elegancia o con un pequeño rincón dedicado a una colección de objetos de época.
• Es interesante comprobar cómo podemos captar el espíritu de un
determinado estilo, tan pronto como entramos en una habitación.

• Elementos que se combinan para crear una atmósfera:

detalles de arquitectura, colores, mobiliario, flores, telas, sonidos y olores.
La yuxtaposición de estilos requiere de un estudio muy cuidadoso.
 TRUCOS DE OFICIO

Radiadores, equipamiento eléctrico, interruptores de luz de plástico blanco.

En un interior de estilo de época,
esos detalles pueden convertirse en una bête noire !!
Píntelos, adórnelos, encajónelos, pero no deje una caja blanca e insulsa
en su pared, a menos que la pared sea blanca.

LA MÍMESIS ES UN RECURSO INFALIBLE. PARA HUIR DE LA PESADILLA

 MEDIEVAL
Lugares oscuros y tenebrosos, sólo en nuestra imaginación
 NOTAS DE ÉPOCA

- Para un noble que debía mudarse regularmente, los muebles debían ser
transportables. Las posesiones eran llevadas en baúles y grandes cestos.

- La casa medieval era un ambiente de trabajo donde se mezclaban padres,

hijos, sirvientes y visitantes, con poco espacio para colocar elementos
ornamentales.

- Habitaciones escasamente amobladas.

- Las telas y la decoración pintada, desempeñaban un papel fundamental

LA MAYORÍA DE LAS CASAS ERAN CABAÑAS DE MADERA,

PEQUEÑAS, SIMPLES Y SIN NINGÚN ADORNO.
 Enfatizando la simplicidad
rústica, puede crearse una
ilusión medieval.
Candelabro de pie de hierro
forjado
en el siglo XVI.
Las velas crean la
atmósfera de la época.

ERROR FRECUENTE :
el acabado de la pared
no debe ser demasiado
perfecto.
 Dominan los
elementos
arquitectónicos.
Muros de piedra,
suelos de madera
pulidos y ventanas
claramente
definidas.
Una simple mesa
sobre caballetes
cubierta con una
tela ricamente
estampada.
Un mortero de
bronce y dos jarras
de cerámica lisa.
 Crear una sensación de
época en una habitación
es como crear
un escenario teatral.
Un ambiente medieval con muebles de otras épocas.
Candelabros Arts & Crafts
Tapiz del Siglo XVII
 Habitación
abovedada
Las
colgaduras
de la cama
reproducen
los
profundos
rojos, rosas
y púrpuras
típicos de los
interiores
medievales
El estilo medieval es ordenado, escaso, con paredes enyesadas, rugosas
y levemente coloreadas y blanquecinas.
El embaldosado rojo y verde de este vestíbulo de entrada es Victoriano,
pero la apariencia es absolutamente típica de la época medieval.
 ELIZABETHAN Y JACOBINO
Los reinados de Isabel I y Jaime I. Lujo y comodidad
 INGLATERRA. SIGLO XVI
Las ideas del Renacimiento combinadas con la nostalgia por los tiempos
medievales; mezcla de decoración clásica y gótica en el mobiliario.

- Colores vivos y brillantes (rojos, azules, verdes, amarillos intensos) realzan los
muebles de roble.

- Ricas telas. Bordados complicados. Tapices con motivos de bosques

frondosos e imitaciones de alfombras orientales (obras turcas).

- Pinturas con marcos elaborados. Brillo tenue del peltre y cuero lustrado.

- Paneles de madera tallada. Motivos que incluían columnas cariátides,

dóricas, jónicas y corintias; hojas de acanto, molduras de óvolos.

- Aparadores cortesanos para exhibir la vajilla.

EL REFLEJO DE UNA RELATIVA ESTABILIDAD SOCIAL

Y DE LA NUEVA PROSPERIDAD DE LAS CLASES MERCANTILES
 Los paneles
de madera
Elizabethan
de color miel,
diferente
a la madera
oscura y
opresiva de la
época
victoriana.
 Mesa tallada del Siglo XVII. Banco y sillas.
Apoyados sobre suelo de roble contra fondo de paneles oscuros.
 Habitación
pintada en
1585.
Ilusión óptica
primitiva,
ejecutada por
un pintor-
tintorero
flamenco
itinerante.
Cofre auténtico
(siglo XVI);
silla (copia del
siglo XIX de un
modelo del
siglo XVI).
Dos jarras de
peltre (una
antigua y la
otra, nueva)
Tapiz o pieza de tela con
colores vivos sobre una
pared sin adornos. Sillas
bajas Regencia a ambos
lados del hogar parecen
coherentes en este
ambiente.
Pared enlucida, áspera y blanquecina. Tapiz. El cabecero es una copia posterior
y los muebles presentan una mezcla de fechas y orígenes pero el ambiente
general sigue siendo de principios del siglo XVII.
 Paneles de roble blanqueados, platos peltre,
cubos de cuero del Siglo XVII y retratos de máxima calidad.
LA CASA DE CAMPO DEL SIGLO XVII
Influencias extranjeras desde las ciudades a los hogares rurales.
- Desde Francia llegó la moda de decorar la habitación en suite, con colgaduras, cobertores
de mesa, tapizados, etc. haciendo juego.

- Las visitas a Italia se expresaron en un nuevo interés por la proporción general.

- El comercio entre Inglaterra y los Países Bajos protestantes dio como resultado una mutua
fertilización de ideas relativas al mobiliario y a la construcción de muebles, contribuyendo a
un estilo mucho más sencillo.

- A principios de siglo, la decoración estilo chinesco y los llamados estilos “indios” se

volvieron muy populares entre los círculos aristocráticos, merced a la importación de toda
una variedad de artículos de Extremo Oriente: muebles, cajas y biombos lacados que
inspiraron piezas “ajaponesadas” hechas por artesanos ingleses y holandeses.

LA INFLUENCIA DE ESTE ESTILO EN LA NUEVA INGLATERRA

SE HACE VISIBLE EN LOS HOGARES DE LOS PRIMEROS COLONOS .
LA AÑORANZA POR LAS CASAS QUE HABÍAN DEJADO ATRÁS
FUE REFLEJÁNDOSE LENTAMENTE EN LOS INTERIORES AMERICANOS
DE MEDIADOS DE SIGLO XVII
 Colores, texturas, sonidos y aromas.
Cálido brillo en las sillas de madera noble y la rica pátina de la mesa de roble,
realzadas por el peltre, la luz de las velas, las flores y las frutas.
 Siglo XVII.
Diferentes épocas,
diferentes países
pueden mezclarse
sin desentonar.
Elementos clave:
una mesa de roble
alemana del Siglo
XVII, un retrato y
una silla de nogal
Guillermo y María.
 Hierro forjado, maderas simples y una
pintura naif sobre una pared blanca: la
encarnación del estilo rústico del siglo XVII.
Todas las piezas en este caso
son originales.
 Colección de
muebles de
cedro
franceses
(med. S.XVII)
sobre suelo
blanco de
loseta vinílica.
Colección de
porcelanas
Kangxi
dispuesta
según la
manera
clásica
holandesa.
Una interpretación del estilo imperante en el S. XVII que incluye un sofá
moderno y una mesa central de vidrio.
Princ. S.XVIII.

Habitaci{on
revestida
con tablas
de madera
biselada y
pintadas. Un
acabado
moderno
perfecto no
sería el
adecuado
en un
ambiente de
esta época.
Pag 54

La vajilla del
aparador es
del S.XIX pero
se adapta
muy bien al
ambiente.
 La esencia del
estilo evocada
en todos los
elementos de
colores, el
aparador con
su pintura
original,
colorida vajilla
del S.XIX,
objetos de
alfarería,
soportes de
vela de junco y
el candelabro
colgante (copia
de original)
 Cama
adoselada
Elizabethan
obtiene su
aire rústico
de la mezcla
de telas.
El patchwork
es ideal para
los estilos
rústicos de
cualquier
época.
 Impresión
general del
estilo del siglo
XVII al tiempo
que conserva
elementos del
confort
moderno.
Gran tapiz,
porcelana china,
alfombra persa.
La mesa : un
vidrio apoyado
sobre 4 leones
moldeados.
BARROCO INGLÉS
Un estilo de esplendor teatral
- La aparición de este recargado estilo coincidió con la restauración en el trono
inglés en 1660 del igualmente recargado Carlos II, después de 11 años de sobria
y austera república.

- Proviene en parte de Francia, pero más decisivamente de Holanda.

- Estilo de curvas generosas y formas contundentes. Básicamente sombrío pero

compensado por los colores brillantes de los techos pintados, los tapices y las
tapicerías y por el brillo de los candelabros de plata, los muebles decorados con
plata y los espejos-

- La exhibición de vajillas de porcelana Delft - azul y blanca - se convirtió en un

rasgo típico de una habitación inglesa y más tarde de los salones americanos,
como lo era de las habitaciones holandesas.
Una auténtica
recreación del período
de la Restauración.
Paredes y suelo en
tonos oscuros,
iluminación a baja
altura y las pinturas
iluminadas desde
abajo con velas
protegidas por
pantallas.
Salón con revestimiento de madera en color borgoña. Sillas lacadas estilo chino
del S.XVII. La simetría es la esencia de la elegancia en el Barroco inglés.
 Un comedor con
elementos de
distintas épocas pero
conservando su
atmósfera básica. Las
pequeñas repisas
Rococó de madera
dorada, son
originales.
LA ÉPOCA DE LA ELEGANCIA
Confort y simpleza en el estilo de la “Reina Ana”
Reina Ana / Georgiano primit ivo
- Sólo doce años de reinado a comienzos del siglo XVIII fueron suficientes para marcar la
transición entre el ostentoso estilo Barroco inglés y el palladianismo de la época georgiana.
Andrea Palladio fue un reconocido arquitecto italiano cuya obra fue revaluada a mediados
del 1700.

- Esta etapa se ha convertido en sinónimo de elegancia y buen gusto.

- El énfasis fue colocado en materiales de primera clase y en la mano de obra.

La belleza de un mueble estaba dada por su forma y por la decoración de la madera y el
chapado liso, más que por la marquetería, las tallas y los adornos.

- El mismo principio era aplicado a la plata y al cobre. Grabados sencillos y aplicaciones

ornamentales en forma de planchas recortadas eran característicos.

- La pata cabriolé apareció en todo: sillas, sofás, mesas, cómodas altas y bajas. Su uso fue
ilimitado.
 Un rincón con profusión de ricas
telas y un espejo con el marco
cubierto con estambre: esta tela
aplicada a un marco sencillo puede
transmitir un efecto muy
convincente.
Una cómoda de comienzos del S.XVIII,
enmarcada con una inusual exhibición
de porcelana azul pálido. La colección se
mantiene fija al haber pegado juntas
varias piezas (no es un recurso
aconsejable para la porcelana fina
antigua)
Los paneles lisos
de esta
habitación han
sido pintados de
color castaño.
Las pantallas son
un toque
imaginativo. Las
magníficas
guirnaldas están
hechas con
nueces
enhebradas con
hilo metálico y
barnizadas.
 Sillas Reina Ana en una cocina de
La simetría era una característica de la
campo Regencia donde las sillas o
época. Las acuarelas de flores también
los bancos largos hubieran sido
son coherentes con la época.
más ortodoxos.
 Guirnaldas con
nueces, el techo
ornamentado, las
pilastras y las velas
contribuyen en este
ambiente. Las
damas utilizaban
abanicos para
aliviar el calor de
las velas y pantallas
de chimenea para
ocultar el hogar,
para proteger los
ojos del resplandor;
pero también para
impedir que su
espeso maquillaje
hecho a base de
cera, se derritiese.
 Este detalle
revela un
acabado en las
paredes veteado
y coloreado de
nicotina.
Los objetos
sobre la
chimenea fijan
el escenario.
Primera é p o c a / Mediados del G e o r g i a n o
- Mientras en Europa las casas opulentas estaban inundadas de remolinos estilo Rococó,
Inglaterra seguía su propio estilo.

- Una típica pared palladiana georgiana es la que está dividida en tres: zócalo, el centro, el
friso y la cornisa. El mismo principio se aplicaba al hogar a leña.

- Las molduras desempeñaban un importante papel. Se empleaban para crear los frisos y
las cornisas, para decorar el encofrado de los techos y para adornar puertas, ventanas,
hogares de leña y grandes muebles.

- La simetría y el equilibrio eran los elementos principales de esa clase de habitación.

- Los interiores contenían menos madera que antes. Las habitaciones principales eran
decoradas con enlucido en lugar de paneles. Los suelos, cubiertos con grandes alfombras
eran cada vez más usuales y por primera vez, las cortinas desempeñaban un papel
fundamental en la decoración.

- Eran comunes los colores . Recién es a mediados de siglo cuando los colores apagados
se pusieron de moda.

- Los objetos de decoración de estilo chinesco, otro estilo de moda en el continente, hacían
furor en Inglaterra.
• El entusiasmo por todo lo que fuese chino
guardaba poca relación con China.
Sólo se trataba de la visión occidental de un
país exótico y poco conocido. Las pagodas,
los pabellones, los dragones y los
mandarines chinescos armonizaban
perfectamente con la asimetría y las líneas
retorcidas del Rococó.
• El Gótico fue otro estilo que se puso de
moda. Se trataba de un fenómeno
exclusivamente inglés y tenía tanto del
mundo medieval real como el estilo chinesco
lo tenía de la China real.
Este estilo se manifestó en ruinas simuladas
y en casas con jardines enmarañados y
también en interiores y ocasionalmente, en
casas completas.
 Ejemplo de paneles pintados
imitando un efecto de madera veteada.
Los objetos de porcelana Delft son
copias y las piezas están
ligeramente deterioradas.
De todas formas,
el objetivo está cumplido.
 Ambiente
característico de un
hogar de clase media
de la época.
 La pintura en tres tonos añade mayor protagonismo a los paneles.
La disposición de los cuadros es típica de la época. Obsérvense los platos
“colgados” en una cinta de tela que puede atisbarse en el espejo Chippendale.
Este salón con paredes pintadas y rugosas de telas decorativas colgadas en las
ventanas exuda una atmósfera georgiana. Los postigos y los marcos de las
ventanas han sido pintados en dos tonos. El candelabro colgante es del S.XVIII.
D e mediados a finales del G e o r g i a n o
- Hacia finales de la década de 1750 se produjo en toda Europa un renacimiento del interés
por el mundo clásico. Las excavaciones en lugares como Pompeya y Herculano
contribuyeron a dibujar un cuadro más auténtico de la vida en una casa romana común y
revelaron que los interiores estaban decorados en un estilo mucho menos rígido y más
suelto de lo que se había pensado.

- El interior y el mobiliario comenzaron a entenderse como una totalidad coordinada.

- Las hojas de acanto y laurel, festones, medallones, hornacinas, cabezas de carnero,

arabescos ondulados, esfinges y liras fueron incluidos en el enlucido y el mobiliario de este
período.

- Los colores preferidos eran el verde pálido, el azul y rosa, aunque algunos esquemas de
color intenso no eran descartados.

- El delicado y sencillo mobiliario, ya sea pintado o en satén decorado con marquetería e

incrustaciones, es típico de la época.

- Las formas de cerámica y la porcelana eran simples y elegantes, basadas en modelos

antiguos.
 La pilastra, la
cornisa y los
marcos de
las puertas
son molduras
aplicadas.
Asientos
modernos
que
combinan
con el efecto
de época que
reina en la
habitación.
 Comedor en la
tradición clásica
con fondo color
beige; pilastras
aplicadas
resaltadas en beige
y crema y un
detalle de ilusión
óptica sobre la
puerta. Mesa, sillas
cristalería y los
platos de porcelana
son de esta época.
No hay conflicto
con la cómoda
Regencia, ya que
esta época vio el
nacimiento de ese
estilo.
 El estilo
georgiano se
adapta a los
tonos apagados
del verde pálido.
Simplicidad y
simetría son las
notas
dominantes.
Las telas
desempeñan un
papel esencial en
la creación de un
estilo. Las
colgaduras y las
estanterías estilo
georgiano
transmiten una
sensación
inmediata de
época.
Las columnas clásicas para crear una división imaginaria en una habitación es
propia del estilo Adam. La simetría está dada en la chimenea, el espejo, la
alfombra y las vitrinas laterales.
 Columnas y
paneles
en tonos
apagados,
compendia
el estilo
Georgiano clásico.
Magnífico hogar
de mármol
y delicados
muebles del
estilo,
no necesitan
otros adornos.
 Una lección de
simetría georgiana:
una combinación
bien equilibrada de
muebles de calidad
contra un
empapelado
pálido a rayas.
El acabado veteado antiguo recuerda el mobiliario pintado primitivo
y transmite una verdadera atmósfera del S.XVIII.
Alfombrado de arpillera, una buena alternativa.
Las paredes rayadas y las líneas simples del sofá, las sillas y la mesa son
inconfundiblemente georgianas. La cama victoriana demuestra que es
perfectamente aceptable mezclar estilos de épocas diferentes.
Magnífico mueble georgiano de la última época y platería que resalta
contra un fondo pintado en tonos de rosa.
 Un color de pared intenso
hace que la mesa de pared Jorge III
resplandezca.
Pino veteado, paredes color
verde azulado opaco; una
colección de patos y demás
objetos, crean la atmósfera
rústica georgiana.
 Interior clásico
refleja la transición
de la última época
georgiana al estilo
Regencia. El suelo
pintado reproduce
los diseños clásicos
y las paredes están
pintadas imitando la
piedra. Las urnas y
el tema de la pintura
son coherentes con
este retorno al
clasicismo.
Federal americano
- La Guerra de la Independencia interrumpió el flujo de nuevas ideas de Europa a
Norteamérica en materia de diseño de interiores y mobiliario. En consecuencia,
no fue hasta la década de 1790 que las influencias neoclásicas comenzaron a
verse en ese territorio.

- Ahora las casas eran más espaciosas, con techos latos y grandes ventanas que,
en ocasiones, se prolongaban hasta el suelo a la manera francesa.

- Hacia finales de 1810 podían verse influencias del incipiente estilo

Renacimiento griego.
 Comedor pintado
en colores mate
representa la
esencia del estilo
federal. Suelo
estarcido y vitrina
pintada.
El candelabro
colgante de cobre
colonial es una
reproducción.
La porcelana es
una mezcla de
Newball inglés y
piezas de
exportación chinas,
todas de
aproximadamente
la misma época.
Fuerte influencia de
Adam en las
proporciones y las
molduras en torno
a la chimenea.
El papel de la pared,
con motivo de
espigas de maíz, es
francés
especialmente
fabricado para el
mercado
norteamericano,
que ya en esa
época tenía una
gran importancia
comercial.
 Los bastidores
adoselados eran
muy populares
en el siglo XIX.
Las colgaduras de
encaje confieren
a la cama un aire
ligero y etéreo,
como lo hacen las
flores silvestres
y las paredes
blancas sin adornos.
 RÚSTICO DEL SIGLO XVIII
Simpleza y equilibrio en los interiores domésticos.
- En los distritos rurales y provinciales, los estilos en el mobiliario y la decoración
eran más informales que los que imperaban en las ciudades.

- El revestimiento en madera, por ejemplo, siguió gozando de gran popularidad en

los ambientes rurales hasta mucho después de que hubiese perdido el interés en
la ciudad.

- El mobiliario era más robusto y sólido y la decoración era menos refinada,

acorde con un ambiente más agreste.

- Las formas originalmente destinadas a ser reproducidas en nogal o caoba,

podían ser trasladadas al roble.

- La sensación general era más suave y definitivamente más doméstica.

Cocina rústica primitiva. Los muebles tipo aparador han sido hábilmente
avejentados con un acabado veteado que complementa las paredes.
La inclusión de antigüedades rústicas refuerza la atmósfera de campo.
 Aparadores
fijos, bancos y
sillas de
madera.
El aspecto
general es
sencillo:
maderas
sobrias y sin
adornos, pino
desnudo y un
buen uso del
color. Las flores
silvestres y
las semillas en
recipientes
simples
completan el
cuadro.
 Armario
provenzal
francés de pino
(princ. S.XIX).
Colección de
cerámica
moderna
basada en
diseños antiguos.
Empapelado a
cuadros y el
suelo de pizarra,
evoca la solidez
práctica del estilo
rústico de la
época.
Colonial
- A principios del siglo XVIII Norteamérica había comenzado a asentarse como
nación. Ese sentido de una identidad nacional que ya no dependía del Viejo
Mundo, encontró su expresión más genuina en los hogares estilo Colonial propios
de este período.

- Los interiores ahora eran ligeros, etéreos, espaciosos y llenos de color.

- La artesanía local era un verdadero orgullo y aunque muchos estilos de

mobiliario estaban basados en diseños ingleses, la interpretación americana era
inconfundible.

- La flora y fauna de la región encontraron su camino en diseños textiles y

estarcidos y había un creciente mercado para artefactos y ornamentos fabricados
en casa, para la sencilla alfarería de loza vidriada, los recipientes de madera
tallada, los finos dibujos y pinturas de artistas locales.

- Mirando apenas hacia la vieja Europa, Norteamérica estaba sentando las bases
de un estilo absolutamente propio.
 Los intensos
colores terrosos
son realzados por
una pared
toscamente
enlucida y
encalada. El
trabajo de la
pared es
deliberado.
Cada puerta está
pintada de un
color diferente,
pero
complementario.
Escalera pintada en tres tonos
de azul y enmarca la silla de
roble colocada contra ella.
La alfombra oriental añade
calidez e interés visual.
Comedor del siglo XVIII. Tablas anchas en el suelo, paredes sin adornos, piezas
de alfarería, mobiliario rústico del S.XVIII, flores silvestres, manojos de hierbas
puestas a secar, utensilios de cocina y el candelabro colgante en hierro forjado.
En las paredes: pintura blanco leche descascarada.
 Este es un estilo donde
impera el orden. Las
líneas firmes y simples de
la silla con respaldo curvo
y con aldabas en la
escalera son realzadas
por las cortinas estivales
de muselina color crema
adornadas con borlas.
Suelo de madera natural;
los colores blanquecinos y
el artesonado color
terracota refuerza el estilo
rústico. El techo es
sencillamente la parte
inferior del suelo de
madera y las vigas de la
habitación de la planta
superior.
La pintura blanca
sin adorno en las
paredes pone de
relieve el
enmaderado de
color y destaca las
líneas simples del
mobiliario, los
utensilios y la
pintura del S.XVIII.
Piso de madera
suavizado por una
alfombra persa.
Shaker
- Encabezados por una mujer inglesa, Ann Lee, los Shaker fueron una de las numerosas
sectas que emigraron al Nuevo Mundo. Llegados en 1774, una década más tarde, contaba
con 6000 miembros que vivían comunidades que se extendían hasta Ohio.

- Sus ideales comunitarios condujeron a un deseo de uniformidad de estilo; aunque esa

uniformidad se hacía extensiva no sólo a los cambios en los arreglos de la casa, sino incluso
a una decisión tan trivial como usar tirantes en lugar de cinturones para sostener los
pantalones. Todo debía ser aprobado por la comunidad central en New Lebanon.

- Todo lo que hacían y usaban era de excelente calidad. El trabajo era una forma de
adoración divina y el aspecto de los Shaker debía ser puro y simple como sus oraciones.

- Los interiores de las casas era ligeros, sencillos y limpios. Los muebles para almacenar
solían estar empotrados. Las mesas y los bancos no llevan ningún tipo de adorno y eran muy
proporcionados.

- Paredes y muebles solían estar pintados e delicados tonos de rojo, azul, verde y amarillo.

- El diseño shaker puede transmitir una sensación de refugio frente al ruido y el exceso de
estímulos de la vida cotidiana.

PUREZA APACIBLE EN TODAS SUS FORMAS.

 Los shaker
hacían un uso
limitado de los
colores sutiles.
Baúl de color
verde botella
sostiene el trío
de cajas de
uso diverso.
 Un magníficamente
trabajado.a silla de
respaldo escalonado de la
década de 1840 pintada
de amarillo cuelga
pulcramente de un soporte
de la pared.
La cómoda de tres cajones,
de mediados del S.XIX es
una típica pieza shaker y el
original objeto que
descansa sobre la cómoda
es un bloque de
sombrerete
Las camas de arce atigrado típicas de los Shaker armonizan a la perfección en
este ambiente rústico de paredes blancas y suelos de madera pulida.
Orden y calma monástica es el clima general de esta habitación.
 Muebles y objetos que carecen todo ornamento.
Atmósfera serena y espiritual característica de un interior Shaker
 BARROCO Y ROCOCÓ
El encanto del recargado gusto francés
- El dinámico estilo Barroco se desarrolló en Italia, pero su máxima expresión se
alcanzó en Francia durante el reinado de Luis XIV.

- Eran comunes las conchas, hojas de acanto, volutas, guirnaldas y marquetería,

pero atenuadas con una restricción propia de la época clásica.

- Durante el reinado de Luis XV, el Barroco dio paso al Rococó, caracterizado por
formas asimétricas y recargadas.

- Ambos estilos, como también el más severo Luis XVI, fueron adoptados con
fervor en el siglo XIX.
Influencia clásica combinada con el recargado gusto francés de la época.
Las cortinas de
los ventanales,
la cristalería
veneciana, la
pintura
decorativa con
flores y la gran
urna clásica
ejemplifica el
gusto imperante
en el continente
en el S. XVII
• LUIS XIV, 1643-1715

Además del Rey, su Ministro Colbert y el diseñador y pintor Charles Le Brun fueron
figuras que desempeñaron un papel muy importante en el desarrollo de este
estilo.

VERSALLES SE CONVIRTIÓ EN EL CENTRO DE LA VIDA CORTESANA Y ALLÍ LE BRUN

CREO UN ESCENARIO MAGNÍFICO Y OPULENTO
PARA REFLEJAR EL PODER Y EL PRESTIGIO DE LUIS.

Se caracteriza por colores ricos y algo sombríos y formas pesadas.

La madera tallada y dorada es típica en este período.
Con el tiempo, se volvió menos recargado producto de la crisis económica. El
mobiliario que había sido tallado en plata, ahora era fundido y reemplazado por
los muebles lacados y finamente veteados, con intrincadas incrustaciones de
cobre y carey. Fue el auge de los ebanistas.
• REGENCIA Y LUIS XV, 1715-1774

Atrás quedaban la formalidad y la opulencia del Barroco, para acercarse a un

estilo de decoración más ligero que influenció toda Europa.

Bajo la Regencia del Duque de Orleans, esta tendencia se aceleró. La Régence

o Período Rococó Primitivo (1710-1730) es una época de transición entre el
solemne estilo Luis XIV y el maduro Rococó del estilo Luis XV.

El Rococó era un estilo basado en el placer y los temas y motivos decorativos

así lo reflejan: galanteos, música, paisaje rural. El humor era otro de los
elementos claves. Los motivos incluían elementos de influencia china, turca y
singerie (monos con vestimenta humana).

Las mujeres, especialmente la talentosa y ocurrente Madame de Pompadour,

desempeñaban un papel influyente en la vida social del momento.
Las habitaciones se volvieron más pequeñas y el mobiliario estuvo acorde a las
nuevas dimensiones.
Los espejos fueron fundamentales.
Los relojes de pared decorados con bronce dorado eran muy utilizados.
• ADAPTACIONES DEL SIGLO XIX

Los interiores domésticos se vieron afectados por un espíritu de renacimiento

nostálgico con una fuerte tendencia hacia algún tipo de clasicismo, ya fuese
griego, renacentista, Luis XIV, barroco o neoclásico.

1830. El estilo más popular fue el Rococó o Luis XV. El estilo Luis XIV siguió
estando de moda y ambo estilos, aunque muy diferentes, a menudo se
confundían ¡incluso en Francia! Hacia 1860 se le unió a la confusión el estilo
Luis XVI, pero en todos ellos implicaba usar una gran cantidad de dorado. Las
molduras doradas hechas con cartón piedra o yeso mate se las consideraba
muy elegantes; sólo accesible a los más adinerados.

Fue furor el papel de empapelar y ya a mediados de siglo ya era de uso habitual

en sus distintas variantes (de satén, con pelillos de lana o algodón o escénicos)

Todos los estilos Luis tienen un acabado inmaculado pero un aspecto de

encanto decadente es igualmente apropiado, especialmente en los dorados.

Un efecto de lujo es importante para estos estilos, pero ello puede crearse a
menudo a través de un uso juicioso de forma y color más que de materiales
caros.
 Mobiliario francés
del S. XVIII . Silla de
Georges Jacob
(1739-1814):
el mejor ebanista
que empleaba el
estilo neoclásico
en los años
precedentes a la
Revolución francesa.
 Mezcla
de diferentes
nacionalidades
se unifica
contra un fondo
sobrio y
ordenado.
Cómoda sueca,
sillas francesas,
porcelana china
conforman el
ambiente.
Cama veneciana fechada en 1810. Las Sillas fiorentinas datan de 1780.

Dormitorio de tratamiento teatral

con pesados cortinajes e interesados acabados en su pintura.
Columnas clásicas enmarcan la puerta.
 Cortinas
generosamente
fruncidas que
transmiten un
fuerte acento
clásico al que
contribuyen los
muebles pintados y
dorados.
 Una profusión de
flores puede crear un
ambiente y fijar un
esquema de color.
Lavanda en urnas
de piedra, una
maravillosa tela que
tapiza las sillas, velas,
cestas, bustos y el
suelo de madera
natural, completan
el estilo.
 Pequeño comedor
como apéndice de
la cocina, de
elegantes
proporciones que
derivan en la
inclusión de espejos
y trabajo de
enrejado.
Inconfundibles sillas
Regencia
armonizan
con el ambiente
general Continental
del S.XIX. Las
baldosas de vinilo
colocadas según el
estilo clásico blanco
y negro del siglo
XVIII.
 Vestíbulo en el
pomposo estilo de
finales del siglo XVIII.
Las figuras de negros
venecianos son casi
de tamaño natural,
los candelabros y la
cómoda con cubierta
de mármol
proporcionan una
exuberante pieza
central. Se utilizó
empapelado Zoffany
en dos tonos de
amarillo/dorado.
 El canapé rococó
ornamentado,
el magnífico
cortinado y los
grandes jarrones
Kang Hsi
flanqueados por
jardines
ornamentales se
salvan del exceso
por las simples
tablas pulidas del
suelo y las paredes
de un solo color.
Los jarrones sobre
repisas de pared
refuerzan el
ambiente.
Reloj de pared
estilo Boulle
francés del S
XVIII; el trabajo
del jefe ebanista
de Luis XIV es
característico por
el uso del cobre y
el carey
incrustados en
ébano en densas
volutas.
El acabado de la
pared es un
papel
marmolado.
Ambiente
francés clásico.
Mesa tallada del
S.XVIII con un
tablero de
mármol
flanqueada por
dos sillas de la
misma época.
Grabados de
Versalles. Sobre
la mesa, urna de
arenisca.
Paredes color
crema pálido.
Colección de
muebles franceses
del S.SXIX – XX y
cómoda alta china
lacada hace juego
con colecciones de
bronce, oropel y
madera para crear
un ambiente
continental del
S.XVIII perfecto. Un
sofá moderno con
tapizado neutro y
una mesita de café
con columnas con
molduras doradas y
una hoja de vidrio. El
radiador ha sido
encajonado.
 Persianas
enrollables
modernas en la
ventana, mesa de
nogal Carlos X;
mobiliario francés
en madera dorada
hecho en la
década de 1920
en estilo Luis XV.
Escenificación y
exuberancia son
las notas
dominantes de
este estilo. Las
paredes realzan el
ambiente con su
acabado veteado.
El mantel cae
generosamente en
forma de cascada.
No hay gestos
tímidos en este
ambiente.
Obsérvese el
tamaño y el
emplazamiento de
las urnas.
REGENCIA, IMPERIO Y BIEDERMEIER
Nuevas formas de neoclasicismo. La forma por sobre el ornamento.
REGENCIA

- La vida en la época de la Regencia en Inglaterra –finales de 1790 hasta la década de

1830- era más íntima e informal que en épocas anteriores.

- Habitaciones más pequeñas, techos más bajos y la disposición del mobiliario más
improvisada.

- Interiores mejor iluminados: las nuevas y eficaces lámparas de aceite permitían que varias
personas compartieran una mesa para leer o escribir.

- Paredes de colores claros y apagados. Las telas se utilizaban profusamente, fruncidas y

cayendo sobre las cenefas.

UNA NUEVA FÓRMULA DE NEOCLASICISMO ESTABA DE MODA.

- Un clasicismo de la forma más que del simple ornamento.

 La sobriedad de las
paredes sirve para
acentuar las
definidas líneas del
estilo Imperio sueco.
Todos los estilos
Imperio tienen mucho
en común y por lo
tanto, se combinan
armónicamente.
 La alfombra es
una auténtica
Aubusson de
precio incalculable
– una pieza sobre
la que mucha
gente no desearía
caminar. Un tenue
resplandor
conseguido al
electrificar una
urna de alabastro.
La iluminación
de este modo,
deja de ser un
problema en un
interior de época.
 Los interiores
Regencia e
Imperio se
caracterizan por
la simetría y la
inspiración
clásicas.
Magnífico
escritorio del S.
XVIII y una silla de
inspiración
egipcia. Ambas
piezas
ligeramente
deterioradas,
presentan un
color avejentado,
pero no obstante
demuestran el
soberbio diseño y
la excelente
artesanía del
mobiliario
Regencia y el
enorme interés
por lo clásico.
 El Regencia encuentra su ambiente en los espacios grandes y espléndidos.
Las líneas recias propias del mobiliario de esta época, son aptas para
habitaciones con techos altos y decorados e imponentes columnas y molduras.
 Un inusual
acabado de
mármol pintado
en la pared
proporciona un
excelente fondo
a esta
imponente
mesa Guillermo
IV, sobre la que
descansan una
colección de
mármol y un
busto de
bronce.
Imperio
IMPERIO

- Un estilo surgido en Francia hacia 1790; descrito como el vehículo de

propaganda de Napoleón.

- El mobiliario basado en modelos antiguos era un tanto pesado y de aspecto

sólido. La tendencia dominante eran los motivos egipcios, inspirados en las
campañas napoleónicas; evidente en los soportes de las mesas en forma de
leones alados, esfinges y en máscaras y zarpas de leones, escarabeos (amuletos),
obeliscos e incluso cocodrilos.

- Interiores lujosamente cubiertos con sedas de brillantes colores, como si fuesen

grandes tiendas militares. Mobiliario de formas sencillas y aspecto sólido
decorado con oro y ormolú.

- Fue un período clásico; no obstante, hubo otras fuertes influencias.

 Atmósfera Imperio francés
y sueco, estilos ambos
estrechamente ligados al
Regencia inglés pero con
sus propias peculiaridades.
Sofá sueco (1810).
Sillones con incrustaciones
de decoración dorada,
tapizados con seda
francesa. La tela de la
cortina es un diseño
llamado abeja
napoleónica. Cómoda y
araña de cristales
francesa.
La sensación de
perfecta proporción
clásica está en todas
partes, acentuada por
urnas y bustos. El
estudio octogonal tiene
paredes que han sido
pintadas en símil piedra
y un alfombrado
vistosamente decorado,
especialmente diseñado
para volver a captar las
líneas opulentas de la
época.
 Todas las piezas del mobiliario son americanas (1810-20).
El camino de alfombra de la escalera y la alfombra persa sobre las tablas
pulidas en el rellano, aseguran la precisión histórica en cada detalle.
 Principios del S. XIX.
La generosa curva de la
escalera está realzada por la
alfombra verde oscuro y del
decorativo pasamano.
El suelo de madera con
incrustaciones está copiado
del palacio del Zar de
Leningrado.
 Los arquitrabes blancos
y los zócalos de mármol
son inconfundiblemente
clásicos. La alfombra del
salón vivamente decorada.
Las mesas consola
con bases espejadas
se denominan
“mesas enaguas”
ya que las mujeres
comprobaban los ruedos de
sus faldas y vestidos antes
de salir para asegurarse de
que no se veía ninguna
porción de sus tobillos.
Los lirios son las flores
perfectas para este
estilo de interior.
 La habitación tiene una simetría clásica acentuada
por los paneles pintados y la disposición del mobiliario.
Muebles tapizados con un diseño de tela llamado “abeja napoleónica”,
un motivo del estilo Imperio francés que aún sigue fabricándose.
Malva intenso y amarillo
son los colores
predominantes de esta
habitación de huéspedes.
Esta inusual combinación
realza la imponente cama
Federalista, la cómoda
Imperio y el espejo dorado
coronado con un águila.
 Estilo
americano
de principios
del S.XIX.
Tiene un
revestimiento
de efecto
madera
bellamente
pintado.
Delante de la
chimenea estilo
clásico se
enfrentan dos
sofás Imperio.
 Una única imagen
fuerte, en este caso un
retrato de Napoléon,
puede transmitir una
sensación de época.
Ayudado por las
miniaturas que lo
rodean y las cajas que
se amontonan encima
de la pequeña mesilla
de noche, domina
totalmente el luminoso
y moderno sofá.
 Maravilloso tono rojo
en la sala de música de la
casa. En aquella época
nadie temía los colores
intensos. Época de
seguridad y opulencia.
Las banquetas de las
ventanas son
reproducciones de las
originales que se
encuentran en el
Brooklyn Museum.
La alfombra fue diseñada
para complementar el color
de la pared y el dorado.
Biedermeier
BIEDERMEIER

- Entre 1820 – 1860 floreció la variante alemana y austríaca doméstica y

burguesa del estilo Imperio de la última época.

- Aunque sus raíces se hunden profundamente en el estilo Imperio francés, recibió

claras influencias del mobiliario inglés de clase media estilo Regencia.

- Un interior Biedermeier carece de la pomposiidad característica del Imperio.

El énfasis se centra en la funcionalidad, la simplicidad y la comodidad.

- El punto de interés en las habitaciones se encuentra a bajo nivel: los muebles no

suelen extenderse más allá del nivel de la vista.
Una mesa y unas sillas Biedermeier hacen juego con las líneas largas y finas de
los asientos modernos y confieren a este salón una inmediata sensación de
época. Las obras de arte modernas proporcionan un efectivo contraste.
 La silla
Biedermeier
nuevamente
fuera de
contexto,
ahora en
armonía con
la mesa de
finales de la
déc. del ‘30,
el florero
Lalique
y una obra
abstracta de
Deryck
Healey.
 El estilo
Imperio no
estaba en
armonía con el
gusto alemán.
En Alemania el
mobiliario
Biedermeier
de inspiración
clásica pero de
líneas más
simples y
funcionales,
era la única
moda.
 VICTORIANO
El hogar como refugio de bienestar y vida familiar.
- La Reina Victoria ocupó el trono británico en 1837 y reinó hasta 1901. Para la clase media
británica, ésta fue una época de gran seguridad en los propios recursos: se sentían
orgullosos de sus logros y usaban su casa como vehículo para exhibir la riqueza obtenida por
su industria, ocupando la familia el primer lugar destacado en la escala de valores victoriana.

- El eclecticismo es la nota dominante en los interiores victorianos. El Elizabethan y el Gótico;

incluso estilos que no eran verdaderamente autóctonos como el Rococó (Luis XV), gozaban
de una gran popularidad, siendo interpretados libremente y mezclados en forma
indiscriminada.

- Una sala típica de la época estaba atestada de muebles, muchos de ellos con tapizados
lujosos, gruesos y profusamente abotonados. No se consideraba necesario que los muebles
formaran grupos haciendo juego. Cualquier espacio libre era ocupado por mesas pequeñas
y una o dos rinconeras. Toda superficie disponible presentaba una abigarrada colección de
trofeos, recuerdos, lámparas, jarrones, figuras de porcelana, cajas con tapas de concha,
objetos con bordados, recipientes de cristal abombados con flores enceradas.

- Ninguna casa hubiese estado completa sin una selección de helechos, plantas trepadoras
y aspidistras.

- Por la noche, se encendían las lámparas de gas, bañando la habitación con un cálido
resplandor que reflejaba los ornamentos y el cristal tallado.
Rica variedad de colores, telas, plantas y cuadros. La mezcla de telas antiguas
y nuevas es muy acertada. Los exuberantes cortinados son típicos de la época.
Este salón transmite el
ambiente íntimo tan
apreciado por los
victorianos. La primera
impresión es el color,
desde la tela asta el
acabado de mármol
terracota en la cornisa.
Los victorianos eran
muy viajeros y
coleccionistas de
curiosidades.
Una mirada fresca del estilo victoriano que crea una agradable simetría en este rincón. Las mesas
redondas necesitan estar cubiertas con telas pesadas y elegantes, entreteladas y a menudo
recargadas.

Los victorianos nunca escucharon la máxima “menos es más”. Ninguna

superficie quedaba sin cubrir. Óleos, acuarelas, miniaturas, todos ellos
con buenos marcos, demuestran que el todo es mayor que las partes.
 Habitación inspirada por
una colección excepcional
de pinturas victorianas.
Los intensos colores
de las paredes, la suave
iluminación, las palmeras
de interior y la interesante
combinación de estilos en
el mobiliario son típicas de
esta última época
victoriana.
 Las flores
secas dentro
del recipiente
transparente
es un rasgo
evocador..
 Una
interpretació
n moderna
del ambiente
victoriano,
evitando el
exceso de
decoración
pero
incluyendo
algunos
ejemplos de
la época.
 Ejemplo de interior
Victoriano que no es
oscuro ni está
sobrecargado.
La magnífica araña
de luces es de
cristal de Venecia.
 El busto de
mármol del Siglo
XVIII descansa
armónicamente
junto a una silla
francesa de la
misma época.
Mesa auxiliar
y un aparador
destinado a
enfriar botellas
de vino.
Las sillas de roble inglés estilo gótico del siglo XIX y el magnífico retrato al óleo
que parece estar enmarcado por el panel pintado es de Lely.
Apliques modernos fijados a elementos pintados, armarios de pino natural
imprimen el toque exacto para recrear el estilo de la época.
 Todas estas
estancias
muestran una
obvia predilección
por la comida y su
preparación y por
los platos,
recipientes, ollas y
fuentes utilizados
en su
presentación.
 Alfombras, muselina bordada
con ramitas en la ventana, una
pesada tela en cascada y un
cesto pintado lleno de flores
secas refuerzan este ambiente
claramente romántico.
Gótico americano.
Las habitaciones
son oscuras pero
no opresivas.
Cada detalle
es perfecto.
 Londres.
Evocación del
siglo XVII.
Verdes oscuros,
luz de vela, tela
de felpa roja y
alfombras sobre
la mesa.
Cacharros de
alfarería, jarras
de peltre,
botellas y frutas.
Todas las
pinturas eran
iluminadas
desde abajo
hasta bien
entrado el
Siglo XX.
 Otro interior Gótico
americano. La mesa
de la derecha refleja la
transición del Clásico
al Gótico. Empapelado
sombrerera (1820-
30); gran espejo y
colección de sillas
también Góticos.
Colección de figuras
de porcelana blanca y
fina que imita al
mármol de la isla
griega de Paros;
escultura y pequeñas
piezas de porcelana
de influencia gótica
armonizan a la
perfección.
Acogedor salón con su
sencillo papel
espigado, es típico de
una casa de campo de
la primera época
victoriana. El ambiente
se ha logrado con una
silla tapizada, un kilim
sobre la mesa, suelo
de madera con
alfombra decorativa y
una colección de
estatuillas Staffordshire
victorianas.
Los victorianos eran
grandes viajeros y
coleccionistas y daban
cuenta de ello
en las colecciones
que disponían alrededor
de una chimenea,
un rincón apropiado o
contra una pared.
Aquí, una colección de
pequeñas figuras de
madera y objetos
Maucbline llenan una
rinconera junto a una silla
gótica.
Las colecciones pueden cambiar sin duda el ambiente de una habitación:
la mayólica amarilla y verde del siglo XIX
ilumina y da vida a un interior del siglo XVII.
Rústico victoriano
 Cocina/
Comedor
en un sótano
de Londres.
Composición
victoriana.
Papel beige
crudo con
adornos rojizos.
Vasijas de
plomo con
“árboles”, arcón
de hojalata.
Colección
de platos
Staffordshire
en azul y
blanco.
Retrato.
 El éxito de este rincón
se debe a la elección
de los colores mate,
la forma en que están
colocados los cuadros,
las flores secas
y la ecléctica selección
de objetos diversos,
incluyendo un caballo de
balancín, un gato de
paño, un cántaro del siglo
XIX y una cesta con
jabones.
 Este dormitorio
incluye diversos
tejidos y ropa
blanca.
El armazón de la
cama ha sido
pintado del
mismo azul que
la silla Lloyd de
mimbre. La
cortina: un
mantel de
encaje. La mesa
redonda,
cubierta con un
mantel de lino
blanco
Victoriano.
 ARTS & CRAFTS
Calidad artesanal, simplicidad y diseño
- William Morris, que detestaba la producción en serie e insistía en la veracidad de los
materiales y la honestidad en el diseño, estableció las bases del movimiento Arts & Crafts
inglés de las décadas de 1880 y 1890.

- Artistas, diseñadores y artesanos volvieron la vista hacia la Edad Media como la edad de
oro de la artesanía y se constituyeron en gremios según el modelo medieval, lo cual no
implicaba que imitaran el estilo, ya que el mobiliario y los objetos decorativos que producían
eran fieles a una larga tradición inglesa, creando un estilo absolutamente original. El diseño
estaba incluido hasta en los utensilios de cocina.

- Una habitación Arts & Crafts tenía un aspecto ligero y espacioso, pintada totalmente de
blanco o con un color apagado; suelos de madera natural cubiertos con alfombras.
Mobiliario vertical de líneas sencillas. Había objetos de peltre, plata, cobre y latón.

- Los motivos decorativos estaban inspirados en la naturaleza: pájaros, animales y flores.

M{as tarde este estilo inspiraría al Art Noveau, cuyas formas sinuosas ya comenzaban a
verse en los diseños de este etapa.
 Muebles de
excelente calidad,
simplicidad en la
construcción.
En algunos
aspectos remite
al estilo Shaker,.
Típica chimenea de cobre
cincelado firmada por
George Walton (1904).
El título del cuadro de
Sheridan Knowles (1901)
sobresale en relieve en el
marco de cobre.
Moderna jarra de
cerámica armoniza
perfectamente sobre la
repisa de la chimenea
con un bol y unas cajas
Arts & Crafts y dos
candelabros de Dresser.
Fumador de pie en cobre
y acero, a la derecha.
La pantalla de la lámpara
es de Quentin Bell.
El elemento crucial
de este comedor
es la elección del color
y la forma en que los
paneles color crema
enmarcan el espejo
y las pinturas.
La elección de la
decoración floral
– cardos azules –
es muy apropiada
para este estilo.
EDUARDIANO Y ART NOVEAU
Una batalla contra el exceso
- Hacia 1890 el exceso estaba en su máximo esplendor. Todo estaba drapeado y había un
montón de muebles absolutamente innecesarios. Incluso los tradicionalistas comenzaron a
reaccionar ante tanto exceso. Gradualmente, las colgaduras se simplificaron y tanto los
muebles como los accesorios fueron reducidos hasta alcanzar proporciones más
manejables.

- Se comprendió que los colores más claros contribuían a generar un ambiente más
espacioso y menos pesado. Se puso de moda el enmaderado blanco o de color cremoso.

- El estilo de vida de los eduardianos era diferente del que habían tenido sus padres. Incluso
en los círculos de gente adinerada, se optaba por vivir en casas más pequeñas y
apartamentos.

- Los muebles continuaban la tradición de los estilos Reina Ana, con una ligereza y
delicadeza que contrastaba con los sólidos volúmenes de la mayoría de los muebles
victorianos.

UN RENACIMIENTO DEL INTERÉS POR LOS ESTILOS CLÁSICO Y REGENCIA

SE REFLEJABA EN LA DECORACIÓN DE MUCHAS HABITACIONES,
COMO ASÍ TAMBIÉN EN LAS LÍNEAS Y LOS ORNAMENTOS DE L MOBILIARIO.
El estilo Art Noveau
está tipificado por líneas
onduladas dentro de un
marco lineal.
La vitrina de estilo con
cajas de plata y peltre está
coronada por un grabado
de W.S.Coleman.
Difícilmente se ha
adoptado el Art Noveau
como un estilo de época
absoluto. Una o dos
piezas importantes como
ideas básicas para el resto
de la decoración, puede
resultar suficiente.
Las ollas de cobre
colgando de los
ganchos para la
carne, la cocina
económica
altamente eficaz,
el tajo de
carnicero con
cajones en
madera de pino,
los delicados
grabados de
ambiente rural y
las palmetas para
las alfombras
confieren a esta
cocina una
atmósfera rústica
de finales
de siglo.
 Las líneas
sueltas y las
formas
naturales
pueden verse
en la chimenea
de hierro
forjado (1900).
El mobiliario de
Voysey ha sido
imitado e
incluso
producido en
serie.
El empapelado
de la habitación
también es de
diseño Voysey.
 ART DÉCO
Lujo y opulencia en las primeras décadas del Siglo XX
- El Art Déco es el estilo que se extendió entre los círculos más elegantes entre 1920-1930.
Su nombre se deriva del título de la exposición de París de 1925: “Exposition des Arts
Décoratifs”.

- La apariencia era lujosa y opulenta, con maderas naturales, cromo, cristal, cuero, laca, zapa
y marfil. En lugar de los colores apagados y las líneas lánguidas del Art Noveau,
encontramos los anaranjados, verdes limón y malvas de los ballets rusos de Diaghilev que
causaban furor en París y Londres y los motivos egipcios inspirados por la apertura de la
tumba de Tutankamón en 1922.

- Otras influencias son el cubismo y el arte maya y azteca de Centroamérica. La forma

escalonada “zigurat” de los templos aztecas es un motivo recurrente.

- La velocidad era otra obsesión: coches, trenes rápidos y las hazañas de los primeros
aviadores, despertaban la imaginación y la creación de formas suaves y aerodinámicas. Los
ángulos redondeados eran característicos de los edificios y el mobiliario estaba basado en
formas geométricas, que también eran utilizadas en suelos, tejidos, tapices y en los
accesorios para la luz y la vajilla.

- Otros motivos típicos: salidas de sol, abanicos, árboles estilizados, flores, fuentes y formas
de animales, particularmente ciervos y cabras.
 Del uso de los
espejos depende
su impacto. Estilo
de características
escénicas.
Alfombra de piel
de cebra, mesa de
los años ’40,
chimenea de vidrio
espejado y silla de
una década
anterior reflejados
en la pared
espejada,
contribuyen a
crear el efecto
típico de este
estilo.
 Estilo
Art Déco
combina
perfecta-
mente
con
diseños
más
modernos
Este sillón
americano tapizado
en piel de animal de
la década del ‘40,
junto a una librería
de diseño lineal;
tiene como fondo
un proyecto
enmarcado para
una oficina de
correos francesa
dibujada por
J. Roger (1933).
 Área de diseño puro.
El estilo que ha sido
descrito como cubismo
domesticado, fue una
reacción contra décadas
de limitación clásica.
Arte y producción no
eran incompatibles para
sus practicantes.
 Es interesante
comprobar cómo
armoniza esta mesa
Biedermeier (1815-
1848) con el estilo Art
Déco. Los jarrones de
metal pintado franceses
y las pinturas y las
escultura de Deryck
Healey dan a este
ambiente una intensa
atmósfera del siglo XX.
 Estas dos mesas
francesas de metal
pintado de la
década de 1920,
cubiertas con
cristal ahumado y
colocadas contra
un fondo neutro,
son un lugar ideal
para una colección
de jarrones
modernos de Fiona
Salazar. El rasgo
más interesante del
Art Déco es el
aspecto moderno
que conserva en la
actualidad.
 Esta sala de estar
de mediados de la
déc. del ‘30
muestra algunos de
los nuevos estilos y
materiales
disponibles.
Los objetos incluyen
una radio de bakelita,
un servicio de té
Vogue de Shelley y
porcelana Crocus
de Clarice Cliff.