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Colombia Internacional 69,ene - jun 2009, Pp 228, ISSN 0121-5612, Bogotá, Pp.

70 - 85

OING y derechos
humanos en Colombia
Un golpe ineludible y vigoroso
de la sociedad civil

International NGOs and


human rights in Colombia
A vigorous and unavoidable
blow of civil society
Erli Margarita Marín Aranguren*

recibido 25/11/08, aprobado 15/04/09

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OING y derechos humanos en Colombia • Erli Margarita Marín Aranguren

Resumen
Al reconocer que en el país hay una escasa literatura respecto a la sociedad civil en general, y
a las organizaciones no gubernamentales (ONG) en particular, en este artículo se plantean
interrogantes como: ¿qué papel juegan las organizaciones internacionales no gubernamentales de
derechos humanos en Colombia? y ¿de qué herramientas se valen? Luego de un par de reflexiones
referidas a los derechos humanos en términos de: 1) el ámbito legal internacional, 2) el mandato de
aplicación y 3) el activismo que despliegan estas organizaciones, en este artículo se concluye que
las OING en Colombia adelantan un intensa acción pública, en redes, que las distingue más que
como activistas como agentes con carácter. Un doble movimiento en sus repertorios les permite
ser asertivas tanto en el ámbito nacional como en el internacional. Censuran, cuando se vulneran
los derechos; cuando no hay legislación nacional, recurren a la normatividad internacional para
que se castiguen las infracciones y siempre presionan para salvar vidas.

Palabras clave: Derechos humanos, OING, sociedad civil global.

Abstract:
Upon recognizing that there is a scarcity regarding the literature in the country on the civil
society in general and the Non-governmental organizations (NGOs) in particular, we ask the
following questions in this article:What role does international NGOs play regarding human
rights in Colombia? What tools do they have at their disposal? After a few contemplations
on the human rights subject in terms of: 1) the international legal context, 2) the application
mandate, and 3) the activism deployed by these organizations, this article concludes that
international NGOs in Colombia further intense public action, in networks, that distinguishes
them, more than as activities, but as resolute agents. A double momentum in their repertoire
allows them to be assertive in the national as well as the international state. They censure
when rights are vulnerated; when there is no national legislation, they appeal to international
regulations so that violations are punished, and they are always striving to save lives.

Keywords: human rights, international NGOs, global civil society.

Introducción en el tema de derechos humanos, pues el

P or los adjetivados titulares


en la prensa colombiana y
la llamativa mención que
hacen la radio y la televisión de las orga-
nizaciones no gubernamentales (ONG),
volumen imaginado se puede triplicar. Sin
embargo, en los casos más sonados unas
pocas líneas alcanzan las primeras páginas
de los diarios, los demás apenas logran
espacio en las páginas interiores. Este
da la impresión de que existe gran canti- material informativo tiene poco segui-
dad de literatura al respecto.Y si se piensa miento, en Colombia. Y si se amplía el

* Docente e investigadora de la Línea de sistemas complejos, política y gobernabilidad del grupo OPERA del Centro de
Investigaciones y Proyectos Especiales de la Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales de la Univer-
sidad Externado de Colombia, Bogotá, Colombia.

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horizonte, la literatura sobre las organiza- como internacional, 2) comprometer a
ciones internacionales no gubernamenta- los diferentes agentes con la normativa
les (OING) se encuentra que también hay existente y, 3) denunciar a quien o a quie-
escasa información disponible en el país. nes vulneran los derechos humanos en
Hay registros académicos en otras latitu- el territorio colombiano. Las OING de
des e incluso grandes centros de estudio derechos humanos despliegan repertorios
en universidades como el London School paralelos, pero focalizados para el ámbito
of Economics and Political Science, la local y para el internacional. Es un doble
Universidad de California en Los Ángeles movimiento, que les permite ser aserti-
(UCLA), la Universidad Delhi, la Uni- vas cuando emprenden acciones públicas,
versidad de El Cairo, para sólo nombrar pues al insistir en la tripleta revolucionaria
las de mayor producción académica, pero consiguen aliados como los organismos
incluso allá hay muy poco sobre Colombia. intergubernamentales, en diferentes esce-
Entonces, resulta interesante la invitación narios, para salvar vidas y promover la jus-
de Colombia Internacional a preguntarse ticia. En realidad, las OING de derechos
si ¿se constituyen las OING de derechos humanos asumen una labor constructiva y
humanos en agentes que restringen o propositiva en Colombia.
limitan el comportamiento gubernamen-
tal? Y si es así, ¿qué mecanismos utilizan 1. Un agente con carácter
para presionar al Estado y lograr que cam- Que no se alarmen quienes consi-
bie su comportamiento? deran que se está intentando reemplazar
Con la información mediatizada al Estado. Esa simplemente es una premisa
que hay en el país, la pregunta conduce errada. Como diría Peter Willets (2000),
a una sola respuesta automática y afirma- el peso que hoy en día tienen no es pre-
tiva. Sin embargo, vale la pena detenerse cisamente para reemplazar al Estado. En
un poco más y hacer un par de reflexiones realidad, el mundo ha cambiado y hay
sobre las OING de derechos humanos que más actores en la arena política. Por ejem-
no sólo adelantan actividades en Colom- plo, las ONG lograron un espacio desde
bia sino que actúan en escenarios inter- 1945, cuando en la Carta de las Nacio-
nacionales. Luego, se precisa replantear la nes Unidas no sólo se les reconoció sino
pregunta en términos del rol. ¿Qué papel que se les otorgó un estatus consultivo1.
juegan las OING de derechos humanos Hoy en día algunas son “observadoras”
en Colombia? ¿De qué herramientas se en la Organización de Naciones Unidas
valen? En este documento, se plantea que (ONU) y en determinados escenarios ya
las OING, como actores del sistema inter- tienen la categoría de “socios”. De hecho,
nacional, actúan en la tripleta revoluciona- no sólo son el componente más visible
ria de los derechos humanos, precisamente de lo que se ha dado en llamar la socie-
para: 1) velar porque exista legislación dad civil global2 o sociedad transnacional,
que los garantice tanto en el ámbito local sino que las ONG son reconocidas como

1 Artículo 71 de la Carta de las Naciones Unidas.


2 Mary Kaldor desarrolla su definición de sociedad civil global como “el medio a través del cual se negocian, comentan
y meditan los contratos o pactos sociales entre los individuos y los centros de poder político y económico”, y defiende
que “los significados cambiantes de sociedad civil deben entenderse a partir del carácter temporal de la autoridad polí-
tica y el contenido mutable del contrato” (Kaldor 2005, 26).

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un actor del sistema por varios teóricos La distancia de las organizaciones de base
de las relaciones internacionales3.Algunos tiene su lógica por la forma en que han
van más allá, como Justin Rosenberg y surgido y evolucionado muchas de estas
Mervyn Frost quienes hablan del imperio organizaciones: la aparición de ONG
de la sociedad civil y Richard Falk quien como refugio de profesionales sin empleo,
considera que el proyecto de la sociedad militantes de izquierda sin partido, o la
civil es realizar una globalización desde evolución hacia el crecimiento y la pro-
abajo (Sandoval 2003, 40). De hecho, es fesionalización” (Serrano 2002, 89). Por
erróneo pensar que en las democracias su parte, Eduardo Pizarro (2005) con-
liberales la sociedad civil está en oposi- sidera que “las ONG —especialmente
ción a la economía o al Estado (Cohen las vinculadas al campo de los derechos
y Arato 2000, 10). En realidad, como lo humanos— están perdiendo credibilidad
anota el inglés Paul Kennedy (2007, 343), de manera acelerada tanto en el ámbito
la sociedad civil global es crucial tanto en interno como en el internacional. Obser-
el presente como en el futuro, y lo son vadores imparciales que han estudiado las
más precisamente las OING de derechos fuentes y las bases de datos que utilizan
humanos que se comportan como un para sus informes se muestran alarmados
agente con carácter en el sistema interna- de su precariedad y pobreza”.
cional. Ellas han asumido una labor cons- Dada la tendencia a cuantificar, se
tructora y propositiva para salvaguardar precisa anotar que en el mundo ha habido
los derechos de todos los seres humanos. un boom o explosión de ONG que varios
No por ello debe desconocerse autores sitúan en la guerra fría, pero otros
que “las sociedades civiles modernas van más atrás y se refieren a la primera pos-
están caracterizadas por una plurali- guerra. En realidad, la curva continúa en
dad de formas de vida; son diferentes crecimiento y “nadie sabe cuántas organi-
estructuralmente y socialmente hetero- zaciones no gubernamentales hay ni con
géneas” (Cohen y Arato 2000, 30). Por cuanta rapidez crece su número. Las cifras
su puesto, las ONG también son com- publicadas son muy engañosas” (Mathews
plejas y reproducen contradicciones de 1997), sin embargo autores como Pearson
las sociedades civiles domésticas de las y Rochester reconocen que una cuarta
cuales emerge y reflejan la dinámica del parte de las ONG que existían en el año
poder en el ámbito internacional. 2000 eran de carácter global (Pearson y
De esta manera se entiende la serie Rochester 2000, 334). Lo cierto es que
de problemas que presentan las ONG. aún en el siglo XXI, es muy difícil esta-
Maite Serrano, por ejemplo, señala que blecer una cifra única. De hecho, los dife-
“las ONG (tanto del norte como del sur), rentes centros de investigación trabajan en
no siempre están cerca de las poblaciones recolección de data al respecto.
beneficiarias, los movimientos populares Para otros autores es más impor-
o los grupos de base como se pretende. tante referirse a las redes4 que con-

3 John Baylis y Steve Smith, Marlies Glasius, Peter Willets, Marisa Revilla, Maite Serrano, Jessica Mathews, Jenny Pearce,
Frederic Pearson y Martin Rochester, entre una lista que se puede tornar demasiado extensa.
4 El vínculo se establece para actuar juntas sin constituir una presencia institucional física u oficial. Las redes no tienen
centro ni cúpula, pero sí varios nódulos y lo más importante es la información que por ellas circula.

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forman las OING dado que ese es el nes de entidades de carácter privado.
bastión desde el cual ellas interactúan Entre ellas también se cuentan las
en el sistema internacional, y es a tra- que funcionan como vigilantes de las
vés de esas redes donde circula la infor- violaciones de DDHH, las cuales apa-
mación que sirve de base para sentar rentemente sólo reciben subvencio-
posiciones autónomas o para la toma nes privadas”. Algunas de las que más
de decisiones de otros actores (Esta- interactúan son: Washington Office
dos, organismos intergubernamentales on Latin America (Wola), Human
y multinacionales o transnacionales). Rights Watch, World Visión, Cuerpos
Margaret Keck y Kathryn Sikkink son de Paz, Amnistía Internacional y Jus-
fuertes defensoras de esta nueva visión tice for Colombia.
(redes) y mucho más cuando se trabaja No se debe olvidar, que varias
en un tema como derechos humanos. agencias de cooperación internacio-
Ellas aclaran que la teoría tradicional nal que están asentadas en Colombia,
realista no puede explicar el trabajo le apuestan a la ayuda humanitaria y
voluntario que se suele desplegar en bajo esa modalidad se preocupan por
el activismo por los derechos humanos la preservación de los derechos huma-
(Orozco 2005, 221). nos6, a través de OING de derechos
Otro asunto que parece pre- humanos y también trabajan con otras
ocupar a muchos es la financiación. organizaciones de la sociedad civil
En 1993 no era secreto que las OING como los sindicatos y las fundacio-
de derechos humanos manejaban un nes. También está la agencia para el
volumen considerable de recursos. desarrollo internacional de los Esta-
Algunas, como Amnistía Internacio- dos Unidos (USAID, por su sigla
nal, ya tenían más fondos que el brazo en inglés) que invierte en las ONG
de la Organización de Naciones Uni- locales porque considera que éstas
das (ONU) para los derechos huma- son fundamentales para mantener la
nos5. Para el caso colombiano, quiero vigilancia en los derechos humanos
retomar a Sandoval (2003, 42) quien (Mesa y Maldonado 2004, 7). Hay
anota que las “ONG internaciona- otras organizaciones de la sociedad
les que funcionan actualmente en civil que se comportan como las gran-
Colombia como entidades de ayuda des corporaciones multinacionales y
humanitaria para la población despla- apoyan económicamente a organiza-
zada y de defensa de los DDHH y del ciones no gubernamentales locales, el
DIH, principalmente, son financiadas mejor ejemplo es la Fundación Ford,
por los gobiernos de la Unión Euro- que “en la actualidad apoya a la Comi-
pea, por los EEUU y Canadá; es decir, sión de Juristas Colombianos y a un
por los países del Norte, aunque, por gabinete estratégico jesuita de Bogotá
supuesto, también reciben donacio- llamado CINEP, en ambos casos para

5 En varios documentos de Oxfam se retoman declaraciones del entonces director del Centro de Derechos Humanos de
la ONU, Ibrahima Fall.
6 Muchos recursos llegan al país bajo esta modalidad, que si bien no es considerada Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD)
sí representa un rubro bien importante de recursos que entran al país para ayudar a la población desplazada, a la que
justamente se le están vulnerando los derechos básicos.

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que combatan las violaciones de dere- Ignatieff manifiesta que no actúan solas,
chos humanos e informen sobre ellas” los repertorios los desarrollan con todas
(Kennedy 2007, 297). La pregunta las organizaciones de la sociedad civil,
obligada es si habrá otros intereses pues logran un mayor impacto en red.
más allá de la no vulneración de los Básicamente, al ser el componente más
derechos humanos, pero la respuesta visible, el grado de recordación recae
a este interrogante será objeto de otro en las ONG, pero también desarrollan
ensayo. Aquí simplemente se plantea- actividades de bajo perfil en las que
rán, más adelante y de manera sucinta, son eficaces y efectivas. Por ejemplo,
algunos pesos y contrapesos. Human Rights Watch al concentrar la
Por ahora recordemos que las atención mundial en los lugares donde
ONG han sido integradas al aparato se violan los derechos humanos, no
de injerencia estadounidense. Primero sólo exige el respeto de los derechos
desde los centros de pensamiento y humanos sino que coadyuva para que
luego USAID7, que sigue las direc- otros actores del sistema internacional
tivas del Departamento de Estado también presionen por unas bases jurí-
del gobierno de Estados Unidos y es dicas y morales que posibiliten segu-
financiada por fondos públicos. “Su ridad para todas las personas y justicia
acción en el terreno consiste princi- para los opresores.
palmente en redistribuir esos fondos A veces se olvida que “los dere-
en los países que Washington desea chos humanos son un apasionante
«ayudar», sobre todo a través de orga- y apasionado campo de lucha entre
nizaciones no gubernamentales” (Vol- poderes económicos internacionales
tairenet 2005). como las multinacionales y los organis-
Ahora bien, se ha anotado que mos tipo Fondo Monetario Interna-
son agentes con carácter. Pues bien, ellas cional, Banco Mundial, Organización
han tenido mayor o menor incidencia Mundial del Comercio, los distintos
en la triple revolución8 de los derechos estados, los pueblos y las organizacio-
humanos. No obstante, muchos creen nes de defensores de derechos huma-
que las OING sólo hacen activismo, nos” (Sánchez 2007, 40), pero fueron
pero en realidad varios de sus reper- estas últimas las que llevaron el tema
torios9 están diseñados para llamar la a la agenda internacional. Una vez allí,
atención de los medios de comuni- se expidió la Carta Internacional de
cación masiva. Sin embargo, Michael Derechos10 y con ella su inminente

7 Esta agencia gubernamental estadounidense, dependiente del Departamento de Estado, es el equivalente del ministerio
francés de Cooperación. Fundada por John F. Kennedy en 1961, la USAID «apoya el crecimiento económico equitativo
y a largo plazo y promueve la política exterior estadounidense apoyando: el crecimiento económico, la agricultura y el
comercio, la salud, la democracia, la prevención de conflictos y la ayuda humanitaria». Ampliar información en http://
www.voltairenet.org/article123804.html.
8 Orozco (2005, 215) se refiere a la revolución legal, de aplicación y de activismo.
9 Charles Tilly acuñó el término, a mediados de los años setenta, para referirse al conjunto de rutinas aprendidas y
compartidas que se ponen deliberadamente en práctica en una época y que proviene más de la lucha misma y no de
filosofías políticas o de la propaganda. Ampliar en http://www.intec.edu.do/~cdp/docs/cambiosenelrepertorio.html.
10 En la Conferencia de San Francisco, donde se estableció la ONU, 40 organizaciones no gubernamentales y varias delega-
ciones, especialmente de países pequeños, aunaron esfuerzos para exigir una redacción de derechos humanos más específica
que la de otros Estados que se encontraban en esa conferencia para lograr que se empleara un lenguaje más enérgico en
relación con los derechos humanos. Ampliar información en http://www.cinu.org.mx/onu/documentos/_ciddh.htm.

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marco en la política. En este orden días de duración, denominado Derechos
de ideas, lo posible es que exista un Humanos para todos” (Kennedy, 2007,
espacio en el que todos puedan par- 250). En realidad puede decirse que las
ticipar y todos tengan voz. Las OING OING de derechos humanos han estado
de derechos humanos han ganado ese tras bambalinas en varias oportunidades.
espacio. Hoy son propositivas y desde Ellas fueron, por ejemplo, las que “le
sus diferentes aristas ideológicas tienen recomendaron a la ONU la creación
propuestas alternativas que se debaten de la Oficina del Alto Comisionado de
en los diferentes escenarios. las Naciones Unidas para los Derechos
En concreto las OING de dere- Humanos (ACNUDH), una propuesta
chos humanos, son muchas, tienen que la Asamblea General adoptó unos
carácter, cuentan con recursos, actúan cuantos meses más tarde” (Kennedy
en la búsqueda de un bien público, y ya 2007, 251). También han sido la voz en
han salido de la trastienda. Hoy, teorías off cuando el Consejo de Seguridad de la
de las más diversas ideologías y acadé- ONU ha emitido resoluciones como las
micos de diferentes lugares del mundo relacionadas con la intervención en Haití
las reconocen como actores del sistema y, más recientemente, la de no interven-
internacional, que manejan información ción en Iraq. Sin embargo, Estados Uni-
confiable y presentan propuestas vis a dos ignoró la resolución y conformó su
vis. Hoy, los agentes sociales, políticos y grupo de aliados para atacar a Hussein
económicos entran a negociar pactos o “por razones de seguridad nacional”.
contratos en condiciones de equidad y Las OING han estado en la tras
en ambientes más democráticos. escena, pero cada día se acercan más a
la arena política internacional y técnica-
2. Las OING no firman mente como observadoras-socias, en la
tratados pero los exhortan práctica, como agentes con carácter en
Mathews ha reconocido que la escena; así ponen temas en la agenda,
antes las ONG sólo tenían como opción hacen recomendaciones para la toma de
trabajar a través de los gobiernos. Hoy, decisiones, colaboran con los otros acto-
como actores del sistema, son socios. Si res para la implementación de planes y
bien no firman tratados internacionales, programas, y están al frente de los casos
algunas veces han estado tras bambalinas para hacer las evaluaciones pertinentes
como en la Conferencia de Seguridad cuando los derechos humanos han sido
y Cooperación. Ellas conformaron el vulnerados. Sí, hacen activismo, pero
grupo Helsinki Watch y en las reunio- su labor no es para restringir al Estado
nes que se dieron en Madrid y Viena, sino para defender los derechos de quie-
durante la década del ochenta, ejercieron nes están en el territorio colombiano.
influencia en el Acta de Helsinki, docu- Entonces, denuncian a todos y cada uno
mento final. “La Conferencia Mundial de los que se atreven a vulnerar los dere-
de la ONU de Derechos Humanos fue chos, llámese Estado, ejército, guerrilla,
precedida de un foro de ONG, de tres paramilitares, delincuencia común…

11 La Fundación Esperanza, que nace en Holanda, fue la que puso el tema de las migraciones en la agenda colombiana
tanto para los asuntos internos como para las relaciones internacionales.

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OING y derechos humanos en Colombia • Erli Margarita Marín Aranguren

Algunas OING abanderan pro- exista legislación para proteger los


puestas nacionales que convierten al derechos humanos, es el relativo a la
país en líder temático. Por ejemplo, en Convención sobre la prohibición del
el marco de la Convención contra el empleo, almacenamiento, producción
Crimen Organizado Transnacional de y transferencia de minas antipersona y
la ONU, una organización no guberna- sobre su destrucción o Convención de
mental11 asesoró al gobierno colombiano Ottawa. Más conocido en Colombia
en lo relativo al protocolo complementa- como Tratado de prohibición de minas
rio para prevenir, reprimir y sancionar la antipersona. Aquí, otra vez, una red de
trata de personas, que entró en vigor en ONG trabajó para hacer realidad el
diciembre de 2003 (Marín 2008, 142). que hoy 156 estados se encuentren
Por otra parte, cabe señalar que trabajando en torno a los compro-
fueron las OING de derechos humanos misos asumidos en este tratado inter-
las que en red12 alentaron a los gobier- nacional que busca poner fin a estas
nos a firmar el Estatuto de Roma que “armas de la vergüenza”. Las OING
dio origen a la Corte Penal Interna- promovieron la idea, adelantaron los
cional para juzgar crímenes de guerra, debates, difundieron la información a
genocidio y violaciones de Lesa Huma- través de conferencias, foros y entre-
nidad. No sólo exhortaron a los Estados vistas que concedieron expertos a pro-
para la creación de éste máximo tribu- gramas de televisión y radio y fueron
nal sino que circularon información en los estados, como sujetos de derecho
informes ejecutivos, artículos en perió- internacional público, los firmantes
dicos y revistas y así pusieron el tema del documento. Muchos actores lega-
en la agenda internacional, la opinión les del sistema internacional ya se han
pública lo conoció y lo convirtieron comprometido en erradicar las minas
en una realidad. Si bien, el gobierno antipersona y Colombia como parte
colombiano estuvo bastante neutral en de la Convención, viene trabajando
los primeros debates, se sabe que al final activamente para limpiar los valles y
escuchó a las organizaciones no guber- campos de estas armas que azotan a la
namentales porque no sólo firmó sino población civil. Una vez más, es una
que ratificó el Estatuto. Marlies Glasius propuesta desde la sociedad civil para
considera que una de las ganancias del velar por los derechos humanos.
proceso que se sacó adelante en Roma En 1996, el gobierno colom-
fue ese fortalecimiento que las organi- biano para evitar la imposición de
zaciones no gubernamentales le brin- un relator geográfico por parte de la
daron a los estados (Marín, 2008, 162), Oficina del Alto Comisionado de las
y por el comportamiento del gobierno Naciones Unidas para los Derechos
colombiano, no cabe duda que así fue. Humanos, la invitó a que abriera una
Otro caso similar que demues- oficina en Colombia. Esta sanción que
tra que las organizaciones no guber- traería altos costos políticos y econó-
namentales están interesadas en que micos al país, sería el resultado del lobby

12 Una coalición internacional de ONG trabajó en la Conferencia de Roma y, en cinco años, lograron la firma y ratifica-
ción del Estatuto de Roma.

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que adelantaba una red de más de 80 de la cooperación internacional mul-
ONG nacionales apoyadas por sus tilateral y bilateral” (2003, 84). Sin
pares internacionales luego de una embargo, cuando se trata de proteger
veeduría de la Comisión de Dere- los derechos humanos puede decirse
chos Humanos de Naciones Unidas. que la presión resulta positiva, más en
Hoy en día no sólo hay una oficina el caso de Colombia que desde hace
en Bogotá, sino que existen tres ofi- varios años está en el ojo del hura-
cinas auxiliares en Bucaramanga, Cali cán por la crisis humanitaria13 que se
y Medellín. Dado que el acuerdo lle- vive, a pesar del desconocimiento del
gaba a su fin, en el año 2007 las par- conflicto por parte del gobierno del
tes convinieron prorrogar el acuerdo presidente Álvaro Uribe.
hasta el 30 de octubre de 2010. En estos términos, a pesar de
A pesar de que las organizacio- que subordinar la cooperación al
nes no gubernamentales parecen ser cumplimiento del derecho inter-
más conocidas por su labor activista, nacional tiene efectos económicos
las OING de derechos humanos han y políticos, las OING le apuestan a
sido propositivas y creativas en las que el tema de los derechos huma-
propuestas legislativas, y han sabido nos esté en la agenda de la coopera-
sorprender en la exigencia de la apli- ción internacional y le solicitan a las
cación de la normativa internacional organizaciones intergubernamentales
existente, como lo retoma Gallón que también se conviertan en vee-
cuando transcribe las palabras de una doras del cumplimiento normativo
diplomática colombiana al decir que de Colombia en la materia. Ellas se
“nos cansamos de tener que llevarles encargan de colectar data confia-
el paso a las ONG; de tener que bai- ble para llevar diferentes casos ante
lar a su ritmo” (Gallón 2002, 276), los tribunales internacionales, y para
pues ante las exigencias para que se que sirvan como referentes de qué
garanticen los derechos humanos, la visos toma y cómo se transforma la
“astuta” salida del gobierno colom- situación de derechos humanos en
biano ha sido un manejo diplomático el territorio colombiano. De hecho,
del tema que incluye la firma y ratifi- cuando las OING logran elevar casos
cación de cuanto tratado se propone. en las cortes, posibilitan el desarro-
llo de jurisprudencia. El Equipo
3. Pesos y contrapesos Nizkor, Amnistía Internacional y
Ahora bien, no puede olvidarse Human Rights Watch (HRW) mane-
que los gobiernos también trabajan jan información sobre violaciones de
a través de las ONG, por lo que no derechos humanos en Colombia, que
puede desconocerse un interés velado. ninguna otra organización interna-
Sandoval, por ejemplo, reconoce que cional o Estado tiene. Ni siquiera las
“hoy las ONG son la punta de lanza instituciones colombianas defenso-

13 Una muestra de ello es que el problema de desplazados internos en Colombia es el tercero más grave en el mundo,
según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, quien asegura que sólo es superado por Congo
y Sudán.Ver más información en: http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/latin_america/newsid_3437000/3437073.stm.

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OING y derechos humanos en Colombia • Erli Margarita Marín Aranguren

ras de los derechos humanos logran lado, las OING intentan disuadir a
manejar este tipo de estadísticas e los violadores de derechos humanos,
información. y del otro lado aseguran herramientas
Uno de los pesos o contrape- jurídicas para proveer justicia en caso
sos que deben considerarse en el caso de presentarse alguna infracción.
de las organizaciones de la sociedad En algunas ocasiones, cuando se
civil global es el relacionado con las van a pronunciar organismos multila-
divisiones ideológicas. La interna- terales como el Consejo de Derechos
cionalista Alexandra Guáqueta, lo Humanos de las Naciones Unidas,
recuerda al comentar que “los gru- las OING hacen pronunciamientos.
pos de la sociedad civil han adquirido El pasado, 20 de marzo de 2009, por
importancia en la política transnacio- ejemplo, Amnistía Internacional hizo
nal y algunos tienen posiciones polí- una declaración verbal (AI 2009) justo
ticas distintas a la de sus gobiernos. antes de que ese organismo adop-
Por ejemplo, en Estados Unidos hay tara el examen periódico universal
ONG como Washington Office on de Colombia. En esa oportunidad,
Latin America (WOLA), o el Center Amnistía instó al gobierno a “que
for International Policy (CIP), que se aceptase todas las recomendaciones de
han opuesto a la política estadouni- la ONU para proteger los derechos
dense en Colombia” (Guáqueta 2005, humanos en Colombia. Muchas de las
35). Aun con diferencias ideológicas, intervenciones realizadas durante el
puede decirse que los repertorios que examen de Colombia ante el Grupo
se ejercen en las calles colombianas de Trabajo del Consejo reflejaron los
resultan eficaces, en términos de una motivos de preocupación reiterada-
presión positiva. Eso lo registran los mente expresados por las organiza-
medios de comunicación masiva, que ciones colombianas e internacionales
algunas veces también publican noti- de derechos humanos, así como por
cias sobre la circulación de informes la Alta Comisionada de las Naciones
técnicos de las OING, en las oficinas Unidas para los derechos humanos y
en Nueva York, Washington, Ginebra, la Comisión Interamericana de Dere-
Viena y Bruselas, centros de poder chos Humanos”.
donde se toman decisiones interna- De esta manera, se evidencia
cionales. Poco a poco se va creando que las OING siempre están en red
jurisprudencia sobre protección a con las organizaciones no guberna-
los derechos humanos, y las mismas mentales nacionales y con otras orga-
organizaciones de la sociedad civil, nizaciones de la sociedad civil que
paralelamente, se encargan de socia- velan por la protección de los dere-
lizarlas con la población en general. chos humanos. Así no sólo intercam-
Si bien todos los actores del sistema bian información sobre violaciones
tienen la responsabilidad de acatar la de derechos humanos sino que elabo-
normatividad que en la práctica tiene ran estrategias de movilización social
efecto para las partes, muchas OING con referentes de otros lugares y en
se dan a la tarea de acompañar a los ocasiones las hacen paralelas; con ello
estados para que firmen y ratifiquen logran un mayor impacto. Además,
los convenios internacionales. De un en la medida en que ganan espacios

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de interacción, demuestran que for- humanos y está determinado a con-
talecen la democracia local y global tinuar comprometiendo al gobierno
porque participan de manera directa de Colombia (en el respeto a esos
en el proceso de toma de decisiones, derechos) y apoyando programas para
y luego interactúan en el resto de las lograr más progresos”, anota el por-
fases de la política pública. Esto es, no tavoz del Departamento de Estado
sólo ponen los temas en la agenda sino estadounidense. (El País 2007).
que cuando se discute la decisión están Podría decirse, por ejemplo,
circulando información que solo ellas que la serie de visitas que realizaron
manejan de primera mano. Luego de a Colombia organizaciones interna-
tomada la decisión, colaboran con los cionales no gubernamentales como
gobiernos para implementar las polí- Amnistía Internacional, la Comisión
ticas y muchas de ellas son expertas en Andina de Juristas, American Watch,
la evaluación. la Comisión Internacional de Obser-
vación Judicial, la Fundación France
4. Exigen sanción si hay violación Libertés, Pax Christi y Justicia y Paz,
La labor de denuncia y el tra- en la década del ochenta, junto con
bajo de lobby que adelantan las ONG la cantidad de informes que se hicie-
nacionales conduce un circuito que ron públicos, abrió una sucesión de
sigue a sus pares internacionales y debates sobre la situación en el país,
estos presionan a los Estados pode- que hicieron que organismos inter-
rosos y a los organismos internacio- gubernamentales y la comunidad
nales a que los escuchen, luego ellos internacional en general, volviera la
presionan a los Estados y a gobier- mirada y “el caso colombiano fuera
nos violadores para que modifiquen analizado, por primera vez, en la
su comportamiento y observen las Comisión de Derechos Humanos de
normas internacionales que, al decir la ONU” (Vargas y Velásquez 2003,
de Sikkink (Orozco 2005, 221), en 66). Más tarde, y después de las visitas
muchos casos, ellos mismos se han in loco de la Comisión Especial de la
comprometido a preservar, Es sin Comisión Interamericana de Dere-
duda un efecto boomerang pues los chos Humanos (CIDH) se adoptaron
Estados poderosos pueden tomar ven- “once resoluciones declaratorias de
taja de la situación y aplicarla directa- responsabilidad del estado” (Gallón
mente o a través de sus estrategias de 2002, 242) y, casi simultáneamente,
cooperación. En el caso colombiano, siete en el Comité del Pacto Inte-
la Secretaría de Estado de los Estados ramericano de Derechos Civiles y
Unidos “certifica” o “no certifica” al Políticos, lo cual implicó un pago de
Congreso estadounidense si Colom- indemnizaciones para los afectados.
bia cumple con los criterios esperados Dos buenos ejemplos son: Trujillo,
de respeto a los derechos humanos. por esa época, y, más recientemente,
Este es un instrumento muy pode- Mapiripán. Uno y otro caso ocuparon
roso que permite entregar o no las cientos de artículos en los periódicos
partidas de asistencia asignadas al país. y revistas, y programas enteros en los
“Estados Unidos toma en serio todos canales de televisión y las cadenas de
los reportes de abusos a los derechos radio. Básicamente, una presión real

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OING y derechos humanos en Colombia • Erli Margarita Marín Aranguren

para los tomadores de decisión, pues de sus investigaciones, en su capacidad


el despliegue de información hace para el desarrollo de programas, en su
parte de las estrategias para la movi- experiencia en el manejo de infor-
lización social que implementan las mación. En realidad, es preciso contar
ONG locales e internacionales. con buenos análisis para armar estra-
Las OING denuncian las vio- tegias políticas viables. La segunda,
laciones de derechos humanos y eso está basada en “valores morales que
se convierte en noticia en los medios pueden tener suficiente aceptación y
de comunicación rápidamente. Los fuerza para legitimar la acción”.
periodistas saben que la noticia
“caliente” vende. Además, como se ha 5. Los mecanismos y herramientas
visto, las OING de derechos humanos La actividad de las organizacio-
buscan que Estados, multinacionales y, nes no gubernamentales no se frena al
en general, todos los actores y suje- nombrar tres revoluciones de los dere-
tos de derecho se comprometan con chos humanos (legal, de aplicación
la normatividad; entonces cuando se y activismo). En realidad, las OING
incumple son los primeros en denun- de derechos humanos son expertas
ciar. Eso está en los viejos repertorios en hacer advocacy, en abogar por los
y sigue dando resultados positivos. derechos humanos. Esto incluye, de
Ahora se buscan nuevos medios y los manera conjunta y paralela, estrate-
electrónicos están en el centro. Todas gias de información y divulgación,
las OING tienen página web, la infor- campañas educativas, foros, conver-
mación está en más de un idioma, los satorios, encuentros, uso de medios
buscadores son rápidos, hay enlaces a masivos y directos, entre otras acti-
otras organizaciones (muchas de ellas vidades para promover la informa-
internacionales), suelen tener blogs ción, la educación, y para empoderar
y foros de discusión. Hay informes, a la población civil para que sepa qué
videos, fotos, noticias… hacer cuando se le estén vulnerando
Básicamente ellas son las que sus derechos.
vigilan que se respeten los derechos Existen protocolos para la
humanos, sacan a la luz pública las denuncia, de manera que siempre se
violaciones que se comenten en dife- preserve la vida tanto de los afectados
rentes lugares y les recuerdan a los como de los denunciantes. Precisa-
Estados que han firmado tratados mente, el tener información permite
internacionales y que con la ratifica- conocer las instancias a las que se
ción se han comprometido a no vul- puede recurrir y las herramientas
nerarlos (Orozco 2005, 218). Para ello jurídicas que se pueden usar. La
acuden a lo que Rodrigo Villar llama denuncia de las OING no se queda
la legitimidad técnica y moral (Villa en las noticias de los medios, sino que
2003,23). La primera se deriva “del llega a los estrados judiciales y se hace
conocimiento, experiencia, compe- seguimiento continuo del proceso,
tencia o información que tienen las así tome muchos años. El rastreo de
organizaciones involucradas… es los casos posibilita cubrir todas las
utilizada por aquellas organizaciones instancias nacionales e internacio-
cuya autoridad se basa en la calidad nales posibles para lograr la justicia.

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Son las OING las que han presionado de la operación Jaque, HRW salió
el desarrollo de la jurisprudencia en a dar declaraciones sobre los usos y
derechos humanos. abusos de la situación, y el tema que
Lo paradójico es que a pesar estaba en bajo perfil cobró relevancia
de la constante invocación de los y entró de nuevo en la agenda.
derechos humanos, por parte de los Brigadas Internacionales de Paz
actores armados y de las presiones (o Peace Brigades International, PBI)
que se ejercen el triunfo parece sólo sigue la práctica de la no violencia
discursivo pues no se han registrado y acompaña a nacionales colombia-
una disminución de sus violaciones nos que están en situación de peligro
(Schlenker e Iturralde 2006, 33). Aún ya sea porque trabajan en derechos
así, las OING disponen de una gama humanos o viven una situación par-
de herramientas para abogar por la ticular. Prácticamente, se convierten
garantía de los derechos, y para que en escudos humanos para proteger a
sea con trabajo local o por presión quienes trabajan por garantizar otras
externa que se evite la vulneración vidas. En Colombia básicamente efec-
de los derechos humanos. túan interlocuciones con el propósito
En las décadas del ochenta y de llevar a cabo programas de sensi-
noventa las cartas abiertas, publicadas en bilización de la comunidad interna-
los periódicos de circulación nacional, cional frente a la situación del país.
fueron una de las herramientas más usa- “Realizan labores de interlocución
das por las organizaciones no guberna- y cabildeo con las autoridades civi-
mentales, para denunciar los atropellos les y militares, así como con organis-
a indígenas, campesinos, afrocolom- mos estatales, ONG, iglesias, cuerpo
bianos y trabajadores sindicalizados. diplomático y organizaciones inter-
Siguiendo la tradición anglosajona, el nacionales” (Sandoval 2003, 400).
envío de cartas a senadores, represen- Como los casos mencionados, se
tantes, defensor del pueblo y procura- pueden mencionar otros muchos, pero
dor han sido otro recurso al que acuden quiero cerrar este apartado recordando
los miembros de las redes que también las redes de organizaciones internacio-
integran las OING. nales que han apoyado a los pueblos
De la misma manera, se orga- indígenas que habitan en el territorio
nizan reuniones de los representantes colombiano. Tal es el caso de los U´wa
de OING, como HRW, con funcio- (al oriente), y los Kuankuamos (al
narios del gobierno o con sus pares norte), que han denunciado la manera
nacionales, como las veces que ha vehemente como les vulneran sus dere-
venido a Colombia el director para chos fundamentales.
las Américas, José Miguel Vivanco. Antes de entrar en las conside-
En ocasiones, vienen a presentar los raciones finales, es preciso señalar que
informes y ofrecen ruedas de prensa. las OING en Colombia, para lograr
Así, también logran que un hecho las tres revoluciones en los derechos
se vuelva noticia. Estas organiza- humanos, utilizan toda una gama de
ciones son hábiles en el manejo de herramientas que las hacen efectivas
situaciones estratégicas. Por ejemplo, en su papel. En algunas ocasiones estas
luego de conocerse amplios detalles cambian, pero hay unos repertorios

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OING y derechos humanos en Colombia • Erli Margarita Marín Aranguren

que se mantienen. Muchos atienden Las OING son artífices de esa


a los desarrollos tecnológicos y otros tripleta revolucionaria, que se logra
al conocimiento normativo que van con advocacy para informar, educar y
adquiriendo las organizaciones sobre empoderar a sociedad civil y demás
la legislación. actores en derechos humanos. Más
que eso, presionan el desarrollo de
Conclusión jurisprudencia en torno a los derechos
En síntesis, las organizaciones humanos al llevar casos a las cortes.
internacionales no gubernamentales Una labor que se hace con un doble
han venido jugando un papel signi- movimiento: uno en el ámbito interno
ficativo, un papel importante en la y el otro en el exterior.
política internacional. En un prin- Las ONG nacionales son gran-
cipio fueron la voz en off de Estados des aliadas de las OING de derechos
pequeños o de tratados de derecho humanos, de manera que con la infor-
internacional público, pero su accio- mación de primera mano que manejan
nar público en defensa de los dere- las locales, las internacionales alzan la
chos fundamentales les ha permitido voz en los escenarios globales y consi-
protagonismo en la tripleta integrada guen que los otros actores internacio-
por la normatividad, la aplicación de nales también presionen al gobierno
la ley y el activismo para promover el colombiano para que proteja a todos
conocimiento de los derechos huma- los que habitan en el territorio. Los
nos y, por supuesto, para denunciar a Estados, por ejemplo, terminan certi-
quienes los vulneran. ficando o descertificando a Colombia
Dentro de la sociedad colom- por derechos humanos, como es el caso
biana, las OING de derechos huma- de Estados Unidos. La Unión Europea
nos son agentes con carácter, y ello ha le exige velar por la no vulneración,
permitido mitigar las consecuencias so pena de restricción de coopera-
del conflicto interno que lleva más de ción. La Organización Internacional
50 años en el país. Los recursos que del Trabajo realiza visitas periódicas
ellas invierten y el trabajo que ade- para asegurarse de que los trabajadores
lantan en el territorio colombiano, si cuenten con las condiciones mínimas
bien ha ayudado a la población civil, para ejercer sus labores.
también ha sensibilizado a la sociedad Lo dicho hasta aquí no es todo.
internacional sobre la crisis huma- Con las reflexiones puede decirse
nitaria que en el caso de Colombia que, antes de responder preguntas
alcanza un desastroso tercer lugar en completamente, se abren otra serie de
cuanto a su gravedad. interrogantes porque en esta materia
Los informes de las OING en y con este actor casi todo está por
los diferentes escenarios internaciona- ser considerado en términos acadé-
les han prendido las alertas de los demás micos. Más aún si se trata de esta-
actores (Estados, organismos interna- blecer el impacto de la influencia en
cionales gubernamentales, multinacio- cada una de las fases de la política de
nales) para tomar acción y para exigirle derechos humanos que al ser “inter-
al gobierno nacional que cumpla con méstica” tiene sus acepciones para lo
los convenios que prometió respetar. interno y lo externo. El país es un

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gran laboratorio, rico en experiencias Marín, Margarita. 2008. El soft advocacy
que se deben recoger para estudiar y de las ONG de medio ambiente y de derechos
así tratar de entender la complejidad humanos en la política exterior colombiana.
colombiana. De hecho, el desarrollo En La toma de decisiones de la política exterior
de investigación y su difusión tam- colombiana, ed. Martha Ardila, 137–177. Bogotá:
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