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da, lo que Ie da consistencia al ctw es el hecho de contar con indus-

trias de alto dinamismo e impacto a nivel nacional (altos valores Los agujeros de la red;
del cur), cosa que sucede entre l9BB y i993.
Finalmente, una afirmación concluyente del análisis precedente
cono cimiento, totalidad,
es que, en el momento en que se registran valores positivos en el interpretación
CNT, a partir del instrumento metodológico utilizadoo reconocemos
que Aguascalientes sigue un camino relativamente distinto al na-
cional, por lo que sus conductas económicas son divergentes, pues
GENARo zAtPA RAMIREz
el pals presenta problemas críticos en su dinámica industrial, en
Depattamento de Sociologlu/UAA
tanto que la entidad evoluciona con buen desempeño en dicho sector.

IT
CourntlRto nnet 1Lrl objetivo de este trabajo es discutir críticamente el artículo
que, con el tftulo de "La metodología de la investigación y los lími-
A manera de slntesis de este artículo podemos subrayar dos hechos tes del conocimiento humano" publicó Felipe Martfnez Rizo en el
fundamentales para Ia economía estatal. Uno de ellos consiste en primer número de esta misma revista.I En una breve introducción
que el desarrollo industrial del estado, a partir de los años ochen- comentaré algunos aspectos de la discusión entre cuantitativistas
ta, presentó un funcionamiento relativamente destacado compara- y cualitativistas, para pasar después a exponer una concepción del
do con el nacional, pudiendo ser catalogado como un buen repre- conocimiento queo al diferenciar ontologla de epistemologla, preci-
sentante de la espacialidad de la reestructuración del capitalismo sa los alcances y los hmites del conocimiento humano. Lo anterior
mexicano. El otro hecho confirma una de las tendencias de la eco- me dará las bases para hablar de un concepto de totalidad construida
nomfa local, la de asumir un comportamiento divergente, aunque que va más allá de lo que Martfnez Rizo acepta en su artículo, para
cada dla más tenue, respecto al ritmo de crecimiento de la econo- terminar con la exposición de una concepción de la metodología
mla del país. E cualitativa como interpretación, de su necesidad, de sus limitacio-
nes y de sus diferencias con la metodología cuantitativa.

I¡ttRooucclóN: LAs DIscustoNES,,cUANTI-cuALI"

En su libro EI ofi,cio d,e imestigador ed,ucatiao,2 en el capítulo ter-


cero, Martfnez Rizo expone un interesante recuento del desanollo

l. Felipe Matlnez Rizo, "La metodologfa de la investigación y los llmites del co-
nocimiento humano", Coleid.oscopio, núm. l, enero-junio de 199?, pp. 95-Ill.
2. Felipe MartfnezRtzo,Elof,ciod.eúwuügadore&rcarfuo, Aguascalientes: UAA, 199?.

88 lc A L El D o s c o Pr o c A L E I D o s c o p I ol89
de las polémicas entre cuantitativistas y cualitativistas en las cien-
dologla cualitativa y la cuantitativa corriendo, seguramente, otro
cias del hombre, remontándose al siglo xvu y terminando con Ia
riesgo: el de que la complejidad rebase las cualificaciones del que
proyección del desanollo de la polémica en el siglo xxl. En la ex-
esto escribe para continuar el debate más allá de los planteamien-
posición se pueden constatar las estrategias de uno y de otro bando
tos iniciales que aqul se exponen.
para descalificar Ia postura del adversario, desde planteamientos
teóricos muy elaborados hasta Ia diatriba pura y simple. Lo que este
UNt coltc¡pcrón onl coNocrMIENTo couo MApA DE LA REALIDAD
recuento no explicita, aunque lo deja ver, es que una de las estrate-
gias usadas con frecuencia consiste en resaltar los puntos más dé-
Aunque se trata de dos metáforas, la concepción del conocimiento
biles (que muchas veces son los más exagerados) de la posición como red o como mapa, la primera utilizada por Martlnez Rizon y la
contraria, para atacarlos con mayor facilidad. Tal es el caso, por pti-
segunda por mf, implican una diferencia que no es banal. Lu
ejemplo, cuando los cuantitativistas atacan el concepto de totali-
mera supone que el conocimiento es un instrumento, más o menos
dad, interpretándolo como totalidad emplrica, cuando es evidente,
fino, que se arroja para capturar elementos que se encuentran co-
por una parte, que los investigadores más serios de ambas partes
mo "tales'i elementos, independientemente de la red, en el mar de
comparten la idea de que es imposible saber todo sobre algo ¡ por
la realidad (peces más grandes o más chicos, de una o de otra espe-
otra, que de los dos lados encontramos autores que critican ciertas cie). La segunda supone una concepción del conocimiento como
investigaciones porque les faltó explicar algun aspecto del fenóme- representación de una realidad que se acepta como existente inde-
no bajo estudio, lo que implica que comparten un concepto de to- pendientemente de su representación, pero gue para ser conocida
talidad entendida como totalidad empfrica, asf como el criterio de requiere de esta última como de un mapa que, por muy detallado
que para que una investigación sea válida debe explicar todo, o no
que sea, necesariainente simplifica la realidad y que sólo asf, sim-
debe faltarle explicar algún aspecto (modalidad del holismo empi- plificándola, puede ser considerado como instrumento de conoci-
rista más extendida), del fenómeno en cuestión. miento. Como lo dice lévi-Strauss en ¿o crudo y b cocida, en el
Tiene razón el artfculo que comento cuando dice que en la polé- apartado que titula "lnterludio de lo discreto", sólo empobreoien-
mica entre cuantitativistas y cualitativistag en las ciencias del do la realidad emplrica (como lo hacen el conocimiento mltico y el
hombre, "las cosas son.más complejas de lo que parecen", aunque conocimiento científico) se puede enriquecer el conocimiento.s
después acepta el riesgo de continuar simplificando, no solamente Esta concepción del conocimiento se basa en una distinción fun-
al distinguir "dog maneras de concebir el conocimiento: una anall- damental entre la realidad de la teorla y otras realidades, y en la
tica y otra sintética" sino también al asimilarlas de alguna manera relación epistemológica entre la teorfa y su objeto, buscando man-
a Ia oposición cuanti-cuali.3 tener los campos de la ontologla y de la epistemología como cam-
Este artículo se orienta en Ia dirección de dar un paso para en- pos que son distintos aunque, por estar estrechamente relaciona-
carar la complejidad del problema de las relaciones entre la meto- dos, frecuentemente se les confunda. Esto lleva a la concepción del

3. Felipe Martlnez Rizo, "[¿ metodologfa de la investigación y los llmites del co- 4. Ibid.en.
nocimiento humano", Op. cit., pp.95 y 96 5. Claude Lévi-Strauss, Lo crudo y lo coci.do,México: FcE, 1968, 55-61.

eo lc A L E r D o s c o P r o c A L E r D o s c o P I ol q
conocimiento como representación construida, y al rechazo de la objeto que se piensa que $on relevantes para su conocimiento, no
reificación de los conceptos (os peces pequeños o grandes que cap- tiene sentido criticar una investigación concreta porque no consi-
turaía la red) que aparece repetidamente en las ciencias sociales. El dera todos lbs elementos, o le falta considerar algrin elemento, del
objeto del conocimiento y el método se conciben como dependien- fenómeno bajo estudio.
tes de la teoría, y el debate entre las comunidades científicas, más (2) El conocimiento se construye. Baso esta afirmación en 1o que
que la verificación o la falsificación, como el medio para la legiti- Tudor llama "epistemología de sentido común"ro para referirme a
mación intersubjetiva de las teorías cientfficas. que muchos de los supuestos epistemológicos con los que trabajan
Mi punto de partida es el supuesto ontológico de que existen los cientfficos sociales tienen un sustento confiable, aunque al mis-
realidades que son independientes del conocimiento, No se me es- mo tiempo discutible, en el terreno de la teoría del conocimiento.
capa que este supuesto es problemático, especialmente si se toman en Sigo a Suppett en su presentación de la crítica a la posición epis-
cuenta las realidades abstractas, no materiales.6 Sin embargo, este temoldgica que llama "la posicidn heredada", pasando con esto de la
punto no se presenta aquí como un axioma que no necesite demos- teola del conocimiento en general a la teorfa del conocimiento cien-
tración, sino, precisamente, como un punto de partida, admitiendo tífico. El autor ve esta posición como el desarrollo del positivismo
que en otros contextos teóricos es una problemática central. Como lógico alemán. Segrin el, en el perfodo que va de lB50 a lBB0, la con-
punto de partida me sirve para hacer las siguientes afirmaeiones: cepción alemana de la ciencia era una mezclade positivismo com-
teano, materialismo y mecanicismo, que sostenfa que: i) no hay duda
(l) El conocimiento no es idéntico a la realidad, por lo que nin- de que existe un mundo real y objetivo que es independiente de los
guna teoría puede pretender agotar el conocimiento de la realidad. observadores individuales; ii) en ese mundo la materia es lo funda-
En la investigación concreta, ni los individuos ni los equipos de mental; iii) hay leyes mecánicas que son inherentes a las cosas
investigadores pueden estudiar la entera realidad de un objeto em- mismas, y iv) la ciencia es el descubrimiento de los mecanismos de
pfrico. No sólo porque no tienen los recursos técnicos adecuadosot este mundo objetivo.
o por la cuestión práctica de que nunca hay tiempo suficiente,s sino Desde sus primeras formulaciones se le han hecho diversas crf-
por la razón de que sería teóricamente imposible.e Por lo tanto, ticas a diferentes aspectos de la "posición heredada". Hacia 1B?0
mientras que es pertinénte criticar una investigación porque la teo- el materialismo mecanicista fue cuestionado y la comunidad cientf-
ía general en la que se basa no considera algunos elementos del fica se movió hacia una concepción neokantiana de la ciencia. Pos-
teriormente las escuelas de Viena y Berlfn, en particular Whitehead
y Rusell, influyeron en el desanollo de la "posición heredada", lle-
6. Ver: Rudolf Camap, "Empiricism, Semantics and Ontology", in Boyd, Casper vándola a grados mayores de complejidad, particularrnente desa-
and Trout (eds.) Iñe Plülosophy of Science, Cambridge, Mass.: Massachueetts Insti-
tute ofTechnology., 1991, pp. B5-97.
7. Claude Lévi-Suaux,Arwopolafu Estrwmral,Buenm Aires: Eudeba, 1970, p. 3%.
B. Raymond Boudon, L'id.éologie: ou l'oigin des ídées regues, Paris: Fayard, 1986, 10. Ibid¿m.
p. l7l. ll. Frederick Suppe, '"[he Search for Philosophic Undentanding of Scientific
9. Andrew Tudor, Beyond Empiricüm. Philosophy of Scierce in Sociology, London: Theories", in Id. (ed), The Structure of Scientífu Theorics, Urbana: University of llli-
Routledge and Kegan Paul, 1982, p. 20. nois Press, 1974, pp. l-242.

e2 lc A L E t D o s c o P r o c A L E r D o s c o p I ol eJ
rrollando e incorporando en la teorfa la lógica fornral y las matemá- que hizo que él mismo se lamentara de que la nociones de paradig-
o'esüaban
ticas. Con respecto a esto rftimo, la exigencia de que "la teoúa debe ma y de revolueión cientffica demasiado cerca de ser lo que
ser axiomatizada en términos de la lógica matemática (fi,rst ordcr pre- cada quien quisiera".13
d.icate calculus with eqwlity)"r2 fue también criticada sosteniendo Sigo a Kuhn en su propuesta de substituir el término de paradig-
que hay términos teóricos disposicionales que no pueden definirse ma por el de ejemplares y matrices disciplinares.ra Estos términos
si la teoría debe ser axiomatizada en términos de la lógica formal están estrechamente relacionados con el concepto de comunidad cien-
por Io que, o se acepta que las disposiciones no sean definidas, o tffica, como lo estaba el de paradigma, pero el mismo Kuhn haóe
se debe aceptar que Ia teola pueda ser axiomatizada en términos una autocltica acerca de su concepción, que califica como circu-
de una lógica modal que sea capaz de expresar los subjuntivos con- lar, puesto que habfa definido una por la otra al paradigma y a Ia
dicionales. comunidad cientffica. Ahora propone, porüanto, reconocerque las co-
Sin embargo, las clticas a la "posición heredada" y su desarrollo munidades cientfficas tienen una existencia independiente de las
no modificaron lo que Suppe considera su postulado fundamental: nociones de ejemplar o de matrices disciplinares, por lo que las de-
la distinción entre teofa y datos, y la noción de verificación como fine, sociológicamente, no sólo como constituidas por los practi-
criterio de cientificidad. cantes de una especialidad cientffica, sino como un gn¡po que está
El verdadero reto a la "posición heredada", segrln Suppe, se pre- unido porque tiene elementos comunes en su educación, porque se
sentó bajo dos modalidades: i) los ataques a la noción de interpre- ven a sf mismos y son vistos por los demás como una comunidad,
tación imparcial, y la distinción entre teoúa y datos, y ii) filosoflas porque hay una relaüva plenitud de comunicación dentro del gnr-
de la ciencia alternativas, que frecuentemente inclufan el punto an- po, etc. En este contexto es en el cual debe ubicarse la definición
terior. Aunque estas teorías alternativas son diferentes una de la otra de matriz disciplinar. Es disciplinar porque es la posesión común de
en muchos detalles más o menos importantes, se pueden agrupar los que practican una disciplina profesional; es matriz porque está
como sigue para los propósitos aqul enunciados: compuesta de elementos ordenados de varios tipos. A los ejempla-
(A) Filosofías que expresan escep¡icismo acerca de que puedan res, que con las generalizaciones simbólicas y los modelos consti-
establecerse caracteústicas comunes que compartan las teoías cien- tuyen una matriz disciplinar, los define como soluciones concretas
tíficas, como es el caso, por ejemplo, de Achinstein. de los problemas. Uegamos asf a lo que me interesa enfatizar. Es,
(B) Filosofías basadas en el anrálisis de las cosmovisiones (Wel- dice Kuhn, con el uso de ejemplares como los científicos desano-
taruchauungen), como las de Toulmin, Kuhn, Hanson, el primer llan una relación de símili,nd, o de sem,ejaraa. lo que es usado para
Feyerabend y Bohm. Es preciso decir, sin embargo, que estas teorfas modelar la aplicación de generalizaciones simbólicas a nuevas
fueron, al mismo tiempo que muy divulgadas e influyentes, mal en- situaciones experimentales; y es a través de la adquisición de estas
tendidas y muy simplificadas. En particular, la teorfa de Kuhn relacioneg de similitud como las generalizaciones teóricas pueden
acerca de las revoluciones científicas se divulgó tanto y tan mal,

13. Thomas S. Kuhn, "Second Thoughts on Paradigms", in Suppe, F. (ed) I[e Srur-
12. Frederick Suppe, I/re Semantic Conception ofTheorias and Sematúic Realüm, ture of Scienfu Tluoies, 0p. ci.t., pp.459-517.
Urbana and Chicago: University of lllinois Press, 1989, p.12. 14. Ibi.d¿n.

e.¡ lc A L .E I Do sc o Pt o c A L E I D o s c o p I ol rs
llegar a tener contenido empfrico, y no a través de las reglas de co- diferente porque introdujeron reglas de correspondencia, por Sneed,
nespondencia entre teoría y datos como sostenía la "posición he- Stegmuller y Moulines.td
redada" (metáfora de la red). Para Tarski, el problema de una definición satisfactoria de la
Hay que recordar, sin embargo, que el hecho de que la metáfo- verdad debe alejarse de la visión aristotélica de que la verdad de
ra del mapa tenga una base confiable en Ia filosofla de la ciencia una afirmación consiste en su adecuación (o conespondencia) con
no quiere decir que sea unánimemente aceptada. Las teorlas basa- la realidad, para acercarse a la propuesta de una definición semán-
das en las cosmovisiones (Weltanschauungen) han sido criticadas tica que establece que una afirmación es verdadera si es satisfecha
porque emplean diferentes versiones de las siguientes tesis: i) la por todos Ios objetos, y falsa si no, entendiendo la satisfacción como
observación está influenciada por la teola; ii) los significados son la relación entre objetos arbitrarios y ciertas expresiones.
dependientes de la teoía, y iii) los datos dependen de la teorfa, Ci-
taré literalmente a Suppe con respecto a este último punto porque De acuerdo a Suppe:
pienso que es muy importante, ya que parece implicar una concep-
La concepción semántica toma su nombre del hecho de que construye teo-
ción subjetivista de la ciencia:
rfas acerca de a qué se refieren sus formulaciones cuando se les da una in-
terpretación sernóntica (lógica) [,..] En la concepcién semántica. el corazóri
La tesis (3) sostiene que (i) lo que es considerado como dato es determinado de una teola es vna estntatura t¿drico extralingüfstica.'i
por la Wltonschorrun6: asociada a una teofa; (ii) que no hay conjuntos de
datos neutrales que sirvan para juzgar la validez relativa de dos teo¡fas rivales,
y que (iii) la validez de una teola debe ser juzgada de acuerdo a estándares Varias versiones de esta concepción coinciden en afirmar que
ñjados por srt Wltanschau.ung asociada, ¿No quiere decir, entonces, que la "los fenómenos del mundo real (o un fenómeno particular del mundo
tesis (3) sostiene que hay diferentes hechos para las diferentes teorfas? Si la
real) establecen una relación de mapeo (subrayado mlo) con la es-
respuesta es añrmativa, ¿no quiere esto decir que la compmbación de las teo-
rlas es circular, puesto que cada teorfa es sostenida por sus propios datos?rs tructura teórica".18
Nuevamente hay que decir, sin embargo, que ios autores difieren
Creo que no puede responderse a estas interrogantes mientras acerca de la naturaleza de esta relación. De acuerdo a Suppe, el
sigamos atrapados (¿por la red?) en una concepción de la cientifici- empiricismo constructivista de van Fraasen sostiene un antirealismo
dad basada únicamente en la relación entre la teola y los datos. porque rechaza la idea de que las teolas son historias verdaderas
Más adelante introduzco la noción de cientificidad entendida como sobre cómo es el mundo, aunque la aceptación de una teorla impli-
la discutibilidad de las teorlas entre las comunidades científicas. ca la creencia de que es verdadera.re Putnam sostiene 1o que llama
(C) Las teorías semánticaso como la del mismo Suppe. Este en- un "realismo intemo",2o y Suppe propone un cuasi-realismo que él
foque fue introducido hacia 1930 por A. Tarski, y fue después de-
sanollado por Beth, Suppes, van Fraasen y Suppe ¡ de una manera 16. Frederick Suppe, I/re Sematúic Conception ofTheories and Semantic Realism,
Op, cit,
17. Ibid.,p.4.
lB. Ibid¿n.
19. Ibid¿m.
15. Frederick Suppe, '"The Sea¡ch for Philosophic Understanding of Scientific 20. Hilary Putnam, Realism and Reason. Philosophical Papers. Volume 3, Cambridge:
Theories", Op. cit., p.208. Cambridge University P¡ess, 1983.

ro lc A LEt Do sc o PI o c A L E I D o s c o F r ol.rz
mismo asimila a la afirmación antirealista de van Fraasen. enfati- para mf, de las ciencias sociales, ¡efrendo mi concepción de que
zando que esta versión de Ia concepción semántica no emplea la los objetos del conocimiento cientffico se construyen teóricamen-
distinción teoría/datos de ia "posición heredada". Por mi parte, sin te.2a Conocer no es ver (ni pescar). El conocimiento objetivo de la
meterme en la controversia, sólo puedo decir con Tudor que: ciencia presupone siempre una teoúa.2s Como lo dice Lévi-Strauss,
"la explicación eomienza cuando hemos logrado construir el obje-
...ya sea que se basen (esas relaciones) en la analogfa o en la homologla de
las estructuras, o en cualquier otra de las muchas posibilidades exploradas
construcción ha sido interpretado como una acto
to".26 Este acto de

en la literatura, las teolas son invenciones (subrayado mfo) que usamos para de rupturao porque el conocimiento cientffico se concibe como la
dar sentido a algo que creemos que conocemos.2r interpretación de otras interpretaciones.2T Lo que llamamos datos
son interpretaciones.28 Como intenta demostrarlo Feyerabend, el
A pesar de que Suppe no deja de señalar las controversias, uno término masa, por ejemplo, tiene dos significados diferentes e in-
puede derivar de sus escritos la impresión de que la teoría del co- compatibles en la mecánica clásica y en la teola de la relatividad.2e
nocimiento científico de alguna manera converge hacia las teorías Sin embargo, si la teorla del conocimiento cientfico no se conci-
basadas en las cosmovisiones (Weltanschauungen) y hacia las teo- be como un modelo forzoso al que la práctica de los cientÍficos deba
ría.q semánticas.
ajustarse para ser considerada ciencia, sino como el an¡ílisis de esa
lPero basta leer los artículos sobre epistemología y sobre filosofía
práctica tal como de hecho se lleva a cabo,3o hay que reconocer que
de la ciencia contenidos en los volúmenes editados, respectivamente,
muchas teorías cientfficas, o al menos muchas teorías de las cien-
por Goodman y Snydef' y por Boyd, Gasper y Trout23 (1991) para cias sociales, consideran los datos como medios para probar las
darse cuenta de que la situación es muy diferente. Goodman y Sny- teoúas. Pero esto no siempre implica una concepción empirista del
der, por ejemplo, incluyen la teofa de Quine acerca de una episte- conocimiento cientÍfico. En palabras de Bourdieu, "la única manera
mología naturalizada (naturalized) en su último capítulo acerca de de pensar correctamente es a través de datos empfricos teóricamen-
los enfoques altemativos. Boyd, Gasper y Trouto en el ensayo intro- te construidos",3r
ductorio al libro que editan afirman que los principales conten-
dientes entre los enfoques generales sobre la filosofía de la ciencia
son el realismo científico, el constructivisno neokantiano y versio-
24. Pierre Bourdieu, Jean-Claude Chamboredon y Jean-Claude Passeron, El oficia
nes post-positivistas muy sofisticadas del empirismo. de soci.ólogo. Presupuzstos epi.stcmológícw, México: Siglo xxr ,1975, pp. 27-82.
Regresando a nuestra epistemologla de sentido común (funda- 25. li¡lcott Panons, La esmrctu¡a d¿ ln orci.ón social,Maüd: Guadarrama, l%8, p, 14.

mentadao aunque discutible y discutida), y al terreno, más familiar


26. Claude llvi-Srauss, Saoage Mind, london: Weidenfeld and Nicolson, l9(íó, p. 362.
27. Piene Bourdieu, Jean-Claude Chamboredon y Jean-Claude Passeron, 0p.cü.,
pp. 27-50.
28. Jean Piaget, Trando dc lígica y conocimiento cí.ent{fuo. Tomo I, Buenos Aires:
21. AndrewTudor,BeyondEmpiricism.PhilosophyofscienceinSociology,0p.cit.,
Paidos, 1977,.p. 20.
p. ll2. 29. Frederick Suppe, '"lhe Search for Philosophic Undersranding of Scientific
22. Michel Coodnran and Roher A. Snyder (eds), Conternporary Readürys h Epi.ste-
Theoriee", 0p. cil.
m o Lo gy, Englew ood C liffs : Prentice Hall, i 993.
30. Ibid¿m.
23. Richard Boyd, Philip Gasper y J.D. Trout (eds), I/re Philosophy of Science,
31. Piene Bourdieu,RCponses. Pourww anthropologizréflexiue,Paris: Seuil, 1992,
Cambridge, Mass.: Massachusetts Institute of Technology, 1991.
p.I35.

eri lc ALEr Do sc o pr o c A L E r D o s c o p I ol ee
Sostengo también que los métodos son dependientes de la teorla, mo sustituto de la correspondencia entre teorfa y datos. Concibo la
concebidos como or$ inaeni,end,i, no como ars proband'i.t2 Por método claridad teórica y el uso de la lógica formal como medios para ha-
entiendo las estrategias o reglas de la investigación, que son dife- cer que las teorías sean discutibles, y la discutibilidad como ele-
rentes de la epistemologlao de la teorfa del conocimiento cientfico mento fundamental de la cientificidad. Como lo dicen Bourdieu.
y de las técnicas. Coincido con Merton cuando critica a los empi- Chamboredon y Passeron en un pasaje previo del mismo pánafo
ristas por confundir la recolección de información con la recolec- donde citan al.borracho de Kaplan:
ción de observaciones cientfficamente pertinentes,s3 No acepto,
No se trata agul de negar que la formalización lógica encarada como medio
pues, la idea de la investigación determinada por el método. En pa-
para poner a prueba la lógica en acto de la investigación y la coherencia de
labras de Bourdieu, Chamboredon y Passeron: sus resultados constituye uno de los instrumentos más eficaces de control
epistemológico.38
Frente a algunas investigaciones concebidas en funcién de la causa lógica o
metodológica, no puede sino evocarse. con Abraham Kaplan, la conducta de Vale la pena citar la epistemologfa evolucionista de Popper,s que
un borracho que, habiendo perdido (en otro lado -parénteeie mlo-) la llave
rechaza el observacionismo (¿la pesca?), al que llama el banil teó-
de su easa, la busca sin embargo con obstinación bajo la luz de un farol, ya
gue alega que allf se ve mejor.n rico de la mente, proponiendo, en cambio, la reflexividad del len-
guaje como un medio de vigilancia epistemológica:
Concibiendo lo's objetos de la ciencia como construidos te6rica-
Para hacer posible que una teorla pueda ser criticada, el organismo debe po-
mente; y la metodologla como dependiente de la teola, ¿debo con-
der ver la teorla como objeto [...] De esta manera nuestras teorfas. nuestras
cluir que cualquier procedimiento es válido, o concebir la empresa conjeturgs, nuestros ensayos o nuestros ensayos y enores pueden convertirse
cientffica como especulaciones ingeniosas y conclusiones impresio- en objefos; objetos como las estructuras ffsicas, vivas o muertas. Pueden con-
nistas, comó reprocha Merton a los teóricos globales?3s De acuerdo vertirse en objetos de investigación crftica.{

a Chalmers,3ó algunos (mal)intérpretes de la obra de Feyerabend ti-


tulada Against Methoü1 respondelan afirmativamente. Por mi par- Es decir, Ia teorfa puede conveftirse en objeto de debate entre
te, yo sostengo que las teolas son un mapa de la realidad. Y tomo las comunidades cientficas.
de las teolas de las cosmovisiones (Wnnschauungen)la concep- De acuerdo a Giménez Montiel,a' la objetivación metodológica
ción del cone€n$o y el debate entre las comunidades cientfficas co- permite Ia esencial discutibilidad de las teorfas cientficas. Es algo

32. Pierre Bou¡dieu, Jean-Claude Charnborcdon y Jean4laude Passeron, Op. cit., p,17.
33. Robert K Merton, Teorla y estructura sociales, México: rcr, 1964, p. 438.
34. Piene Bourdieu, Jean-Claude Chamboredon y Jean-Claude Passeron,0p, clt., 38. PieneBourdieu,Jean-ClaudeChamborcdonyJean-ClaudePasseron,0p. cit.,p.2l.
p.21. 39. IGrl R. Popper,"Evolutionary Epistemology", in Goodman and Snyder (eds)
35. Robert K Merton, Op. cit., p.437. Conumporary Readürgs üt. Epünmology,0p. cit., pp. 338-350.
36. A. F. Chalmen, Wlnt ü this Thing Called Scierne?, Milton Keynes: Open Uni- 44. Ibid.,p.346.
venity Press, 1982, p. 134. 41." Gilberto'Ginrénez Montiel, "La problemática de la cultura en las ciencias so-
37. PaulFeyerabend,AgaürstMethod:OwlircofonAmrch.isticTlworyofKntulcdge, ciales", en Id. (ed) /a teorla y el auilüü de la culn¡a, México: sep-u de c-couccso,
london: New Left Books,l9?S. l9B?, pp. 15-72.

looIc A L E r D o s c o p r o c A L E r D o s c o p I ollot
similar a la vigilancia epistemológica en la comunidad cientffica cia, aquella que consiste en poner en las cabezas de las gentes que
de la gue hablan Bourdieu, Chamboredon y Passeron: están estudiando lo que ellos, los teóricos, deben tener en su cabeza
para entender lo que hace la gente".6
cientffica de la cltica depende de la forma y estnrctura de los
.,.1a eficacia
intercambios en los cuales se cumple: todo induce a considerar que el inter-
cambio generalizado de erfticas donde, como en el sistema de intercambios L¡ rottuoeo coMo coNcEpro coNSTRUIDo
matrimoniales del mismo nombre, A critica a B que criticala a C que crit!
cala a A, eonstituye un modelo mÁs favorable püa una integración orgánica Coincido con Martínez Rizo6 cuando afirma que una totalidad que
del medio cientffico que. por ejemplo, el club de admiradores mutuos como
signifique emplricamente todo no puede ser cognoscible, ni analfti-
intercambio restringido de buenos procedimientos.r2
ca ni sintéticamente, ni cientffica ni intuitivamente. Viene al caso
un cuento titulado "El punto", de un autor mexicano cuyo nombre no
(3) Una consecuencia de los dos puntos anteriores es que se debe recuerdo. Se trata de un estudioso que, desesperado porque ningrÍn
estar alerta para evitar el muy frecuente error de reificar los con- tema que trataba podla quedar agotado, se puso a buscar un tema
ceptos teóricos. Parsons, por ejemplo, señala la confusión que hace que fuera tan pequeño y tan simple que pudiera decirse todo de é1,
que se identifique un sistema teórico general lógicamente cerrado, y ser el primer estudioso que lograra decir todo de algo. Creyó en-
con un sistema empíricamente cerrado.s Y Bourdieu, hablando de
contrar este tema en el punto, algo tan pequeño y tan simple que
las reglas de un juego que son diferentes de los modelos construi-
deberfa ser posible conocer y decir todo de é1. Se puso a trabajar y
dos por los científicos para explicarlo, dice: a estudiar: el punto decimal... el punto y seguido en la literatura
alemana del siglo XIx,.,. el arte del punto de cru2... la distancia más
Yo pienso gue si se olvida esa distinción, se corre el riesgo de cometer uno
corta entre dos puntos... los puntos de la acupuntura china... hasta
de los más desastrosos errores que pueden producine en las ciencias hu-
manas. aguel que consiste en confundir. en la bien conocida frase de Man(. que murió sin haber agotado el tema,
"las cosas de la lógica con la lógica de las cosas".* Cuando hablan de totalidad, algunos investigadores más serios,
cuantitativistas y cualitativistas, no se refieren a un todo empfrico
El mismo autor, refiriéndose a los modelos de simulación y a los sino a una totalidad teóricamente construida. Esto lo señala ya Mar-
modelos de las prácticas sociales, a los que reconoce su función
tínez Rizo en su artfculo. Yo quiero ir, sin embargo, un poco más
heurlstica, previene a los cientlficos sobre el peligro de caer en la allá exponiendo un concepto de totalidad construida que se conci-
tentación de convertir los modelos de la realidad en la realidad del be como algo más, algo diferente de la suma de sus partes. Para ha-
modelo. En otras palabras, los teóricos deben evitar,,la mayor fala- cerlo voy a recurrir a exponer algunas concepciones de totalidad
que, aunque son diferentes entres sf, comparten esa idea de totali-
dad como algo más que la suma de sus partes.
42. Bourdieu, Pierre, Jean-Claude Chan¡boredon y Jean-Claude passeron, Op. cjr.,
pp.l0B-109,
43. Taltcott Parsons, lo estructura ü la acciónsociol, Madrid: Guadarrama. 196g. 45. Iüü., p.80
¿14. Piene Bourdieu, The Logi.c of Practice,
Stanford; stanford university press. 46. Felipe Martlnez "[a
Rizo, metodologfa de la investigación y los lfmites del
1990. p. ó1.
conocimiento humano", 0p. cir.

to2lc A L E I D o s c o p.t o c A L E I D o s c o p r ollo3


El lingriista danés Hjemslev, fundador de la teoría glosemática, Esto Ie sirve de base para proponer, en el capltulo xv de la mis-
parte de la afirmación de Saussure de que la lengua es ante todo ma obras el "Concepto de Estructura en Etnologfa", cuyos elemen-
forma, para sacar y sostener unas consecuencias extremas de esta tos fundamentales son los siguientes: i) el concepto de estructura
afirmación, a las que Saussure no llegó. Si la lengua es forma, no social no se refiere a la realidad empfrica, sino a los modelos cons-
hayn entonces, nada de positivo en el lenguaje en el sentido de no truidos con base en ella; la estructura social, por lo tanto, no es las
poder recurrir a la sigrificación o a la reaiidad, a la substancia, para relaciones sociales, sino que éstas son la materia prima empleada
definir los elementos del lenguaje. No se puede recurrir ni siquie- para la construcción de modelos que hacen manifiesta la estructura
ra a la oposición, pues esta supone la definición positiva de los tér- social. ii) los modelos constituyen el objeto propio del anrálisis estn¡c-
minos. Segrín Ducrot, Hjemslev sostiene que: "la unidad (del len- tural. Saber en qué consisten es un problema que rlo es etnológico,
guaje), puramente racional y negativa, no puede definirse en sf sino epistemoiógico. iii) Para merecer el nombre de estructura, los
misma -lo único importante es el simple hccho dn su d.iferencia con modelos deben satisfacer, entre otras, las siguientes condiciones: a)
respecto a las demós-, sino únicamente por las relaciones que la una estructura presenta el carácter de sistema. Esto implica que la
unen a las demás unidades de la lengua," Y Malmberg añade: modificación de cualquiera de sus elementos comporta una modifi-
cación de todos los otros; b) cada modelo pertenece a un grupo de
Una de las principales metas del análisis es, segln Hjemslev, describir las
transformaciones, cada una de las cuales pertenece a un modelo de Ia
diferentes dependencias (relaciones) mutuas que existen entre las partes del
misma familia, de manera que el conjunto de tales transformacio-
texto. Considera que el objeto analizado sdlo puede definirse como un todo
en rirtud de estos vfnculos, Lo importante en el objeto analizado -el lenguaje, nes constituyen un conjunto, otro sistema, de modelos.
aquf- no es más gue las rrlaciones enhe las partes. Una totalidad no consiste En El totemismo en la actunli.dad,,st Lévi-strauss establece que
en cosas. sino en relacioneg', No es la sustancia como tal la que es objeto de el objeto del conocimiento desde la perspectiva estructural no está
la ciencia, sólo sus nexos interiores.{;
formado por sus elementos, sino por sus rela€iones.
En su obra acerca del estructuralismo, Jean Piagets2 dice que,
C. Lévi-Strauss en su obra Antropologla Estructural,€ cita a Tru- aunque difieren en muchos aspectos, se pueden encontrar caracte-
betskoj diciendo que el programa que éste propone para la fonolo- rísticas comunes a los estructuralismos, que permiten definir el
gía puede apiicarse en el terreno de la antropologla. Dos de los concepto de estmctura, de una forma inductiva, en dos aproximacio-
puntos de este programa dicen que la fonología "rehusa tratar los nes: La primera es que una estructura es un sistema de transforma-
términos como entidades independientes y toma como base de su ciones que comporta leyes en cuanto sistema, en oposición a las pro-
análisis, por el contrario, las'relaciones'entre los términos; intro- piedades de sus elementos, y que se conserva y enriguece gracias
duce la noción de sistema..."ne al juego mismo de sus transformaciones, sin qüe éstas conduzcan
fuera de sus fronteras o apelen a elementos externos. En breve, una

47. Bertil Malmberg,Ios ntnaos camitns d¿ Ia lúryütstica, México: Siglo xxt, 1981,
p. 157. )u. Ibid., pp.249-289
48. Claude Lévi-Strauss,,4nlropología Estructural, Buenos Airee: Eudeba, l9?0. 51. Claude Lévi-Strauss, El toternismn en la actwlüa.d. Méúco: rcr, l9ó5.
49. lbin.,p.3L. 52. Jean Piaget, Ia slrutttnali.sma, Milano: Il Saggiatore, 1973, pp. 37-49.

ro,¡lc ,A. LEr Do sc o Pr o c ¡' L E I D o s c o p I olros


estructura comporta tres caractefsticas: totalidad, transformacio- comparto la idea de que la necesidad de la hermenéutica se base
nes y autoregulación. La totalidad consiste en que una €structura en una distinción ontológica entre los objetos de las ciencias natu-
no puede ser un agregado. Está formada por elementos, pero éstos rales y los objetos de las ciencias humanas. Como lo dije aniba,
se subordinan a leyes que caracterizan al sistema como tal. Tales
concibo la metodologfa como dependiente de la teofa, lo que me
leyes de composición no se reducen a asociaciones acumulativas, lleva a responder la pregunta acerca de si son mejores los métodos
sino que son propias del conjunto, distintas de las de las partes:
cualitativos o los cuantitativos con un ,,depende": depende de la
son las leyes del sistema, La caracterfstica de transformación se pregunta que queramos responder. Si la teorfa me lleva a plantear-
deduce cie la anterior: si lo que es propio de la totalidad son sus le- me una pregunta acerca de cuántos votos es probable que obtenga
yes de composición, estas leyes son estructurantes por naturaleza. un partido político en unas elecciones, es mejor cuantificar. Si, en
La autoregulación determina un cierto cierre de la estructura, Io que cambio, me pregunto cuál sería la concepción del mundo de los ha-
no quiere decir que una estructura no pueda entrar como subes- bitantes de Mesoamérica antes de la conguista, es mejor interpretar.
tructura de una estructura más amplia, con lo cual pasará a ser un Debo decir, sin embargo, que estoy de acuerdo con Martínez Rizo
elemento que sólo tiene sentido por las relaciones que se estable- en su crítica de la intuición como método cientlfico. y debo admi_
cen con los elementos de la nueva totalidad, La segunda aproxima- tir que, asf como en la metodología cuantitativa más pobre pero,
ción es que la estructura debe poder dar lugar a una formalización desafortunadamente, muy divulgada, un esquema de investigación
De acuerdo a Bourdieu, lo gue constituyó la novedad esencial se enunciarfa en los siguientes, o semejantes términos: ,,Hipótesis,
del estructuralismo fue: variable independiente, variable dependiente, aplicación de cues-
tionarios, análisis cuantitativo de los resultados',, también en la
...Ia introducción en las ciencias sociales del método est¡uctural o, más sim-
metodología cualitativa se practica, con lamentable frecuencia,
plemente, de un modo de pensamiento relacional el cual, rompiendo con el
modo esencialista de pensamiento. lo lleva a uno a caracterizar cada ele- una interpretación que es sólo el equivalente de un o,a mí se me ha-
mento por las relaciones que lo unen con todos los otros en un sistema del ce que...", ignorando los desarrollos más serios, pero difíciles y
la-
que deriva su significado y su función.s boriosos, de la metodologf". T"l es el caso, por ejemplo, de ,u.ho,
de los colaboradores del Journal of popular Cuhwe,lo que llevó
a
¿CUANTITATM 0 CUALnATIV0? Lohof, en un análisis autocrftico, a responder a la pregunta:
¿qué
métodos hemos elegido?, de la siguiente manera:
Para ensayar una respuesta a la pregunta, parto de la concepción
que liga a la metodologla cualititativa con la hermenéutica, para Puesto brevemente, no hemog sido muy duchos cuando pedimos prestado.
ni
muy ingeniosos en nuestras invenciones. En cambio. hemos robado
definirla como interpretación. Pero, apoyado en la distinción entre desfa-
chatadamente los métodos máe nfsticos que circulan en la academia. y
hemoe
epistemologfa y ontología que me sirve como punto de partida, no pretendido que eso es suficiente..q

53. Piene Bourdieu, The Ingic of Praaice. Stanford: Stanford University Press,
y, BIuc:-A, Lohof, "Popular Culture: The Joumal and the Srate of the Study,',
1990, p.4.
Jownal of Populor CuJture, ó.3, l9ZB, 292-300, p. 457.

roolc A L E r D o s c o P r o c A L E I D O S C O P r olloT
Como resultado, dice Jensen:
Notas sobre el antiguo Hospital
Tales anáiisis no pueden, normalmente, convertirse plenamente en objetos
de (des)acuendos intersubjetivos en una comunidad cientlfica o en un foro d,e San Juan de Dios
prlbüco. Más bien, la validez de una interpretación depende en una confiar¿a
univenal en la sensibilidad y la experiencia del académico que las hace, en
su legitimidad y autoridad, o quizá en lo original y estimulante de la inter-
en Aguascalientes
pretación.5s

No toda la metodologla cualitativa, sin embargo, es intuitiva, ni JosÉ ANToNro GUTIÉRREZ G.


todos los cualitativistas proceden de la manera que critica Lohof.
D eDailamen to de H is to r ia/ U AA
En la metodologla cualitativa se hacen esfuerzos serios' que aquí
no es el lugar para detallar, para convertir a las teorfas en objetos
de discusión, de (des)acuerdos intersubjetivos. En esta tarea, pien- l. hvrnooucców
so yo, Ia formalización juega un papel importante.
La misma metodologla de la ciencia debe ser objeto de discusión
r
l-ra conquista y colonización de México representan acontecimien-
entre las comunidades académicas, pues sólo esta discusión peÍnit€ tos extraordinarios en la historia del mundo occidental cristiano. En
avanzar en el terreno del conocimiento cientffico. Una de las formas el fondo de estos actos que marcan el principio del drama de la eu-
de esta discusión es el debate entre cuantitativistas y cualitativis- ropeización de los naturales hay un humanismo que estimuló las
tas, que será más fructífero mientras más se tomen en cuenta para hazañas de muchos esplritus nobles y creadores, ejemplos de ab-
la discusión los desanollos más serios y prometedores de ambas negación, de servicio social, de lucha y sacrificio, de ponderación
perspectivas. @ y hermandad. Es el caso de la fundación y sostenimiento de hospi-
tales.
En ese terreno se escribió una de las más hermosas páginas de
la historia de América ¡ en particular, de la historia de la lglesia.
Los hospitales desempeñaron un extraordinario papel social, sobre
todo en momentos calaili¡osos"como fueron las epidemias, que vic-
timaron a millones de naturales. Sin estas instituciones probable-
mente las epidemias hubieran acabado con la población indlgena.
Los "hospitales de indios", que los misioneros fundaron y protegie-
ron con tanto esmero, a fin de atender al indfgena en sus males y
ayudarlo espiritualmente al buen morir, desempeñaron un papel
55. Klaus Bruhn Jensen, "Humanistic Scholanhip as Qualitative Science: Contri- fundamental en esas épocas. Además contaban con frecuencia con
butions to Mass Communication Research", in K. B Jensen, and N'W' Jankowski
(eds) A Handbook of Quolintiae Metlntlologies for Mass commwtí¡ation Research,
su propio camposanto y hospedaban a los peregrinos y viandantes
London and New York: Routledge, 17-43' 1993' pp. 31-32' necesitados.

roolc A L E t D o s c o P I o c A L E I D o s c o P r olroe

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