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EL NADAISMO: UNA REVOLUCION LLENA DE VACÍO

"Las revoluciones intelectuales, artísticas y científicas las hacían los Einstein, los Picasso, los
Bernard. Para pensar nosotros en hacer ese tipo de revoluciones tendríamos que empezar por
terminar el bachillerato"
(ESCOBAR & Arango., 1980)

Cuando el ser humano decide vivir en sociedad, obligado por la necesidad de


sobrevivir ante las amenazas de los otros animales y de la misma naturaleza, emprende un
camino de continua lucha contra todo lo que lo rodea y esencialmente contra su misma
especie. En su evolución organizativa, surgen los seres superiores que controlan su
proceder, inicialmente el poder de la misma naturaleza, como el sol, la luna, el trueno, el
agua, el fuego, entre muchos elementos a los que se les atribuyó poderes extraordinarios.
Luego, súper hombres que la historia nos hace conocer como dueños de poderes
sobrenaturales como Hércules y otros que hacen parte de la mitología humana, unos buenos
y otros malos, y en medio de esas fuerzas, el ser humano con la ilusión de poder llegar a ser
alguno de ellos, si no en esta vida, después de ella, si el comportamiento de cada uno de
nosotros en la presente vida, cumple con los requisitos para avanzar en la “superación”
hacia la perfección humana para lo que fue creado: para “trascender”, objetivo impulsado
por la religión mediante la aplicación de la fe y la sumisión.
Así, por otro lado el avance intelectual hace que la humanidad se vaya organizando
administrativa y socialmente y en ese proceso formativo surge el querer saber su origen y
su fin en la tierra, el conocimiento y desarrollo filosófico crece, y a muchas preguntas
consigue algunas respuestas que por mucho tiempo se consideraron una verdad, por
ejemplo: el pensar que la tierra era plana y no redonda, siendo una herejía decir que era lo
último; jugando ya un papel decisorio la iglesia católica en el enfoque comportamental del
ser humano y su orientación científica en busca de nuevas respuestas del universo y del
hombre.
La religión para la ciencia es un problema y en muchas ocasiones retrasa el avance
investigativo de los científicos, y para ello, se apega al querer de las clases dominantes y
apoya su avance hacia el fortalecimiento de lo religioso y conlleva a la monotonía de la
sociedad y a la negación de los cambios sociales; por otro lado, las diferentes luchas por el
poder el ser humano se ha visto sometido a grandes conflictos bélicos, cuyo costo en vidas
es incalculable y también ayuda a aumentar de la desigualdad social, pero a la vez, impulsa
a la tecnología y a los grandes descubrimientos hasta hoy conocidos y que en gran parte han
servido para deshumanizar a la sociedad . Esto permite que haya períodos en los cuales la
sociedad avance, tanto en lo científico, filosófico y económico, pero en otros, la sociedad se
ve estancada y es cuando surgen los movimientos como alternativas de cambio,
movimientos que pueden ser desde lo cultural, artístico, filosófico, económico, político y
literarios.
La mayoría de los movimientos han buscado mostrarse como una protesta al sistema
del momento, en cualquiera de sus formas y tenemos por ejemplo los movimientos
llamados “Vanguardistas” entre ellos: El Futurismo, El Cubismo, El Dadaismo y el
Surrealismo en Europa, en Latinoamérica el Creacionismo de Vicente Huidobro, el
Surrealismo de Pablo Neruda, el Ultraísmo de Jorge Luis Borges y el grupo
Contemporáneo liderado por Octavio Paz y el Nadaismo en Colombia como de la línea
negativa del sistema político y social del momento. Movimientos de corta duración pero
que impactaron y provocaron reacciones en la sociedad.
Cada movimiento con su mirada e interpretación, así; el Futurismo creado por F.T.
Marinetti en 1909 y considerado como uno de los primeros movimientos de vanguardia;
encumbra a la civilización mecánica y técnica, no le da importancia a la sintaxis y a las
normas de redacción y más bien les da el valor poético a los objetos creados por el hombre
y que de alguna manera son útiles para su bienestar, como el bombillo, el automóvil, etc. y
a ellos les dedica su creatividad literaria. El Cubismo Literario del francés Guillaume
Apollinaire, creador de los Caligramas, las imágenes creadas por las palabras del texto
expresan visualmente el poema, (ver imagen) fragmenta el todo en partes de lo que se
compone la realidad, para con ello demostrar que dentro de una figura está una verdad que
hay que encontrarla y que esa verdad es ubicada por el autor pero nace de otra verdad a la
que se pone a prueba su interpretación y conformación libre a partir de caligramas.

Fuente: https://www.ejemplos.co/10-ejemplos-de-dadaismo/#ixzz6506exZ8x
El Dadaismo creado en el año 1916 por T. Tzara en Suiza, se encamina a liberar la
fantasía a través del lenguaje incoherente. Es una respuesta a la burguesía, a la barbarie de
la guerra, y, sobre todo, al arte que esto generaba, su propuesta: destrucción de todos los
códigos y sistemas artísticos reinantes. Su origen está en el futurismo y va contra la belleza,
los principios permanentes, contra la lógica y la inmovilidad del pensamiento y todo lo que
exprese universalidad. El poema puede nacer del recorte de palabras de un periódico, sólo
la imaginación vale para darle sentido, las partes solas no sirven, el sentido no tiene lógica
antes de hacer los recortes, porque aún no hay sentido (ver imagen poema dadaísta)

Fuente. https://www.ejemplos.co/10-ejemplos-de-dadaismo/#ixzz6506exZ8x

El Surrealismo, nace en 1924, sobre sale como expositor de los principios por los
cuales se regía André Bretón y como creador Louis Aragón, la libertad ilimitada, el
eretismo, el erotismo y el humor sarcástico fueron sus banderas iniciales; la poesía
surrealista va contra la norma gramatical, no cuenta la rima, ni la puntuación, ni mayúscula
ni las regularidades métricas. Con el juego de palabras se busca dar sentido a la
arbitrariedad.
La Literatura Vanguardista en Colombia.
Se inicia con movimientos poéticos que se sienten tocados por la forma y contenido
de lo tradicional que irradia un romanticismo, una ética y una moral de la oligarquía que
son falsas.

Plantea innovar la escritura, mediante el desarrollo de temáticas cotidianas,


sencillas, expresar sentimientos de rechazo a lo tradicional, al discurso religioso de
sumisión, del bien y el mal, del respeto y la etiqueta e impulsa una actitud de rebeldía y de
rompimiento de normas tanto de gramática como de comportamiento social de cada ser.
Tenemos los denominados “Lo Nuevos”, con representantes como León de Greiff, Luis
Vidales, Rafael Maya, Jorge Zalamea, entre otros; “El Piedracielismo” con Jorge Rojas y
Eduardo Carranza y El Nadaísmo con Gonzalo Arango y J. Mario Escobar.
El Nadaísmo.

En la década de los 50s Colombia padecía de una gobernabilidad basada en la


represión, una guerra entre liberales y conservadores y el dominio atemorizante de la
religión Católica, todo esto acrecentaba la desigualdad social y el descontento de la
población que se ubicaba en las clases media hacia abajo, semillero para desarrollar las
políticas de una democracia mentirosa y negociada por la clase pudiente que siempre se
rotaba el poder bajo un acuerdo que llamaron Frente Nacional, con el cual cerraban la
llegada a la dirigencia del país a los líderes de clases populares y que tenían el apoyo del
pueblo, como fueron Rafael Uribe Uribe y Jorge Eliecer Gaitán, quienes al no poder
derrotarlos en las urnas, fueron asesinados, generando olas de violencia y origen a las que
después se llamarían guerrilla con el nombre Fuerzas Armadas Revolucionarias de
Colombia (FARC).

Por otro lado, una parte la juventud percibía que la democracia, la ética y la moral
que se predicaba no eran coherentes con la realidad del país y mucho menos eran
practicadas por la dirigencia gobernante y que los intelectuales de la literatura nada
aportaban para despertar al pueblo y más bien con su “romanticismo” desviaban la realidad
vivida, de la misma manera el clero, con su discurso de humildad y sumisión para poder
acceder al “cielo”, trata de apagar el ímpetu de levantamiento del pueblo hacia un cambio
social con más equidad.

Pero lo anterior, no logra que jóvenes rebeldes a través de la literatura y de la acción


revelen su inconformismo, como fue el caso de los nadaístas.

El nadaísmo nace como consecuencia de las malas acciones de la clase política que
llevó a que por ideales impuestos muchos ciudadanos humildes dieran sus vidas
convencidos de que había un compromiso real de los lideres liberales, conservadores y
religiosos, esa falacia fue descubierta y sobre todo, hubo jóvenes que se atrevieron a buscar
una forma para vivir la plena libertad. Atacar lo tradicional en todo sentido, porque de nada
había servido, buscar llegar a los extremos de la contradicción sin tener en cuenta que la
misma vida se arriesgaba en pro de la libertad, porque a la larga, la vida es el momento en
el que se vive, luego no es nada y mucho menos la ya vivida.

Gonzalo Arango, luego de ser acusado de herejía por la iglesia Católica en


Medellín, emprende un destino de ambulante por el territorio colombiano y para el regreso
a la capital antioqueña redacta y edita el manifiesto nadaístas, un folleto de 42 páginas en el
cual plasma los principios del movimiento. Un movimiento que nace haciéndole reverencia
a la nada, no tiene una visión, ni un fin claro como resultado para ser parte del movimiento,
más que el de la libertad plena, la de vivir el momento sin el cumplimiento de normas
impuestas por el sistema o la religión. La forma de manifestarse con acciones llevadas a
cabo al límite en contra de la falsa moral y ética, se hace en reuniones callejeras donde se
consume drogas ilícitas, alcohol y el placer sexual. Porque la vida es corta y no hay tiempo
para complicársela con “las causas humanistas y los redentores…por eso reivindicamos
nuestras prodigiosas desilusiones y hemos emborrachado nuestros cuerpos hasta la
locura…hemos crucificado nuestros sexos en las caderas de lolitas y proxenetas…”
(Universidad de Antioquia, 2005)

Dice Arango:

Y todavía ustedes los moralistas, los racionalistas y los estetas se estarán preguntando: “Y
más allá del horizonte de la locura ¿cuál es realmente el fin del nadaísmo?” y nosotros
diremos: “el nadaísmo no tiene fin, porque si tuviera fin ya se habría terminado. Nosotros
nos contentamos con progresar devotamente hacia la locura y el suicidio. Hacemos el mal,
porque el bien no sienta en nuestro heroísmo. (Universidad de Antioquia, 2005).

Como movimiento nacido con el fin de desacreditar todo proceso y acontecimiento


de la vida tradicional, porque interpretan esos procesos como improductivos,
intrascendentes e inútiles, afirmando que “hemos viajado en alguna dirección huyendo de
nosotros mismos, sin rumbo, sin destino, porque el hombre no tiene sino sus dos pies…y un
camino que no conduce a ninguna parte” (pag.5).

En el campo de la literatura se escribe contrario a la poesía positiva que se guía por


el romanticismo y el existencialismo del momento, no son la prolongación de ningún
movimiento precedente, son solos, son nada, y así crecerían, con la cruda verdad y con la
palabra simple y llana del joven que ha sufrido la inclemencia del frio y el hambre a causa
de una guerra a la cual solo alimentan con la necesidad y por el hecho de pertenecer a esa
generación, pero que jamás fueron o son sus autores. Al respecto se refieren afirmando:
“hemos padecido la miseria con un odio a muerte por el Capital, pero no trabajamos porque
el trabajo es atentatorio contra la poesía y contra la dignidad humana”, mostrando una
rebeldía contra lo más esencial en la evolución y formación de la sociedad: el Trabajo.

Para el nadaísmo, la razón no tiene lógica como elemento distintivo del


conocimiento del ser humano, pues sus actos para mostrar su superioridad evolutiva del
conocimiento, se basan en hechos de autodestrucción con inventos utilizados para dañar a
la naturaleza y al mismo ser, cuando se pueden utilizar en beneficio integral de todos los
seres vivientes, esto es algo que no muestra a un ser “medianamente razonable”, siendo más
coherente a ello la locura y por eso dice en su manifiesto Gonzalo Arango: “Todo lo que
tenemos para ofrecerle a la juventud es la locura, pues es necesario enloquecernos antes de
que llegue la guerra atómica, porque el hombre será aniquilado por el hombre”.

Los poemas del nadaísmo no se aferran al orden gramatical ni a la rítmica romántica


del momento, sino que explota la sencillez y el sentido directo del significado y sacude los
pilares del existencialismo y la verbología sacrosanta de la decencia de los poetas del
momento, esto lo podemos evidenciar en el siguiente poema alusivo al aporte que hace
nuestros gobernantes a la paz del mundo, enviando a nuestra gente a apoyar guerras que
nada tienen que ver con la realidad nacional y sobre todo a los que envían son a los hijos de
campesinos y no a los hijos de los gobernantes, ir a la guerra para apoyar la paz, la sinrazón
de los actos de la razón humana que no tiene cómo justificarse.

TOMAS EL CONTENTO.

Tomás se fue al Vietnam,


¡Pobre Tomás, pobre Tomás!
Un general hablo por la televisión
que la paz está en peligro, que el enemigo iba a atacar,
en nombre de la patria ordenó tomar las armas,
marchar al extranjero, reclutamiento general,
a Tomás que era un yeyé, le cambiaron su guitarra por un fusil,
y lo enviaron a defender el capital,
¡Pobre Tomás, pobre Tomás!
Tomás tenía melena pero mala puntería,
nunca pudo acompañar a una canción con un fusil,
ni apretar el gatillo mejor que a una guitarra.
En las trincheras enemigas, sin saber quién lo iba a matar,
soñaba con camisas rojas, Mandraque, vestirse solo y su novia del mar;
Tomás no volverá más, por irse de su casa,
a defender a un hijueputa en el Vietnam,
la guerra mató su melodía,
cuando cantaba canciones por la tarde,
¡Pobre Tomás, pobre Tomás!
Tomás no volverá más de la guerra a la paz,
en tumba extraña yace su esqueleto,
lejos de su camisa roja, de su novia Delmar,
los generales le cambiaron su vida por una medalla de hojalata,
y a su mamá la consolaron con un diploma de inmortalidad,
¡Pobre! mamá con Tomasito muerto en el Vietnam, ¡pobre mamá!
Los generales nunca mueren en batalla,
mueren como los héroes en una cama,
jubilados con gota y en honor y dignidad,
en batalla mueren los soldados como Tomás el contento,
que sacrifica su vida y su guitarra
por el honor del general.
Eso le pasó a Tomás el Contento,
por irse de su casa a defender a un hijueputa en el Vietnam.
Gonzalo Arango.

Poesía crítica a una verdad triste, por una decisión adversa a la razón lógica para un
propósito noble, como lo designa Eduardo Escobar como “balada para darle a la guerra el premio
nobel de la paz” (Escobar, 2000)

Finalmente el nadaísmo fue una revolución callejera antiacadémica que invadió los espacios y se
convirtió en el problema del sistema oligárquico que trató de minimizar su devastador impacto
social e ideológico en la sociedad colombiana, pero no pudieron porque realmente entendieron a
la locura y su necesidad para a través de ella decir la verdad, sin la solemnidad de la oligarquía
que sirve para disfrazar la realidad en su escritura pulcra pero llena de falsedad.
BIBLIOGRAFÍA
Escobar, E. (2000). Medillín a solas con Gonzalo Arango. (L. F. Alarcón., Entrevistador)

ESCOBAR, E. A. (s.f.).

ESCOBAR, E., & Arango., G. (1980). Correspondencia Violada. Boogotá: Colcultura.

Universidad de Antioquia. (2005). Nadaísmo o revolución desde el arte. Agenda Cultural, 5-8.

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