La Ingeniería Industrial surgió después de la Revolución Industrial en el siglo
XX y poco tiempo después se fue creando y desarrollando la mercadotecnia. Para los ingenieros, la dimensión de marketing se revela indispensable para el desarrollo de sus actividades frente a la competencia (identificación de las necesidades, comprensión de las finalidades de mercado, la eficiencia comercial).La mercadotecnia es muy importante para que un ingeniero industrial desarrolle más su creatividad, su innovación y conozca las necesidades de los consumidores y pueda satisfacerlos con calidad de los productos para que después pueda ser autónomo. Ambas disciplinas se complementan y generan beneficios, ya que la mercadotecnia ayuda a promocionar el producto ya generado por el ingeniero industrial y así lograr una efectiva venta.
La caracterización de esta asignatura en la formación académica de los
estudiantes en Ingeniería Industrial, aporta la capacidad para interactuar con el mercado, los clientes y los consumidores a partir de la identificación de sus necesidades y la aplicación de procesos industriales y logísticos que contribuyan a su satisfacción, mediante el estudio del mercado, su relación con el producto, el precio, la promoción y los canales de distribución, para que a partir de explicar el proceso de Marketing desarrolle propuestas relacionadas con su profesión que generen valor y satisfacción para el cliente, sin menoscabo de la rentabilidad de la empresa u organización.
Considerando que muchas técnicas de Marketing tienen una fuerte
componente analítica y de utilización de sofisticados métodos cuantitativos (análisis clúster, componentes principales, regresión múltiple.), que los ingenieros industriales ya dominan o de los que poseen, al menos, toda la base matemático-estadística. Se debe de lograr que los ingenieros industriales, por las capacidades inherentes a su preparación y por su papel preponderante en muchas empresas industriales, pueden y deben asumir un claro liderazgo en el despertar del Marketing Industrial, y no sólo favoreciendo su desarrollo en lo que de ellos dependa, sino poniéndose al frente, ejerciéndolo profesionalmente, ya sea como especialista o como directivo. Para el caso del Ingeniero Industrial, se recomienda hacer énfasis en la estrategia de producto ya que es en ésta estrategia en la que puede incidir más significativamente. 2. Formulación del problema de investigación.
Tema No. 4: Estrategias de Mercadotecnia: Estrategia del producto
En ocasiones algunos productos que parecen tenerlo todo para triunfar,
terminan fracasando. La determinación de las causas es en algunos casos una labor compleja pero en la mayoría de las ocasiones se deben a defectos básicos en los mismos o incluso a estrategias equivocadas en su comercialización. La mala utilización de los instrumentos de marketing puede acabar con lo que podría ser un lanzamiento exitoso, tal como dirigirnos al cliente potencial por la vía menos adecuada, desaprovechar las herramientas comunicativas o productivas, un inadecuado sistema de distribución, mala política de calidad, entre otros factores. Utilizar los recursos disponibles de forma errónea nos puede llevar a un aumento de los costes. Si un plan, la gestión de la empresa se dirige por impulsos y si no se preparado para los problemas, se puede ajustar a una realidad poco objetiva del mercado, lo que sin duda conduce al fracaso. En México, según la Secretaria de Economía (SE), a través de la Dirección de Programas de Financiamiento Público, el 12 de Octubre de 2012 difundió la estadística de quiebra de negocios. (Véase grafica 1).
El alto porcentaje de fracaso de las empresas se debe a una mala
planificación y una posterior gestión empresarial. Los emprendedores deciden poner en marcha proyectos o negocios si un plan, un estudio, una investigación, una previsión, en resumen, sin un Plan de Negocio o Plan de Marketing. Prescindir de un plan es sinónimo de fracaso. En las empresas se debe estar al día de las estrategias, tácticas y técnicas más avanzadas ante un mercado cada vez más exigente y cambiante. Debido a que, si en la empresa no se están realizando experimentos de mercadotecnia constantemente, se está desperdiciando dinero y perdiendo ganancias. Además, si el mercado no conoce las bondades del producto será como si no existiese. De hecho podría decirse que no contar con estrategia puede ser menos negativo que contar con una mala.
Se dice que una estrategia de producto es buena cuando surge de una
exhaustiva investigación de las características del producto con el que ingresará al mercado. Así, los especialistas destacan la importancia de realizar un intensivo trabajo previo de ideas y estudios del mercado y del público objetivo al que se dirigirá la oferta, para lo cual se deberá efectuar una correcta segmentación de clientes. Pero aplicar el método científico al marketing, nos permite reducir el riesgo de equivocaciones y/o eliminar elementos más subjetivos de nuestras conclusiones. 1. Planteamiento de hipótesis.
La implementación y creación de un plan estratégico de marketing
dependerá de la exigencia y análisis de la información para hacer que la empresa penetre en el mercado, posicionando la marca con publicidad y buen manejo de clientes debido a una política de producción de calidad. A través del desarrollo de experimentos que permiten probar distintas opciones simultáneamente y comprobar cuál es la que mejor funciona en el mercado.
Aplicando una metodología correcta de pruebas, se consigue superar a la
competencia en muchos ámbitos, de manera sencilla, segura y sin tener que invertir mucho dinero ni esperar meses para ver resultados.
2. Propuesta de análisis de la información.
Método científico en: Estrategias de Mercadotecnia: Estrategia del producto.
Actualmente, se ha popularizado el término de “Marketing Científico”, que se
entiende como el brazo analítico del Marketing. Cuya finalidad es buscar la causalidad cuantitativa, ya que esta se encargará de brindar información relevante a la empresa. Dicha información será vital para la sobrevivencia de la firma. Así como para su madurez y evolución.
Realizar experimentos controlados (como hacen los científicos) es la única
manera de mejorar sistemáticamente resultados, reducir al mínimo el dinero malgastado y multiplicar la rentabilidad de las iniciativas de marketing. La gestión de planes estratégicos es la base sobre la que operan los procesos industriales de producción, la Ingeniería industrial se encarga de desarrollar sistemas encaminados al control de la planeación financiera y el análisis de costos aplicados a los procesos de fabricación de las distintas industrias, su intervención es fundamental para la optimización de estos procesos. Para que los experimentos realmente resulten útiles, lo primero es analizar la situación actual de la empresa y su estrategia de marketing.
Los pasos a seguir son los siguientes:
Observación: Al igual que en el método científico se recopila toda la información
posible a cerca de nuestro problema. Sólo que en este caso será a cerca del mercado de la empresa, mercado, público, competencia, etc. A través de esta observación se conoce en profundidad el contexto de la marca y su estado en el mercado; por lo tanto se extrae cual es el “problema” para su venta y establecer nuestros objetivos. Hipótesis: Conociendo bien el “problema” y los factores que lo propician, se elabora entonces una hipótesis de lo que sucede en el mercado estudiado ante la introducción del nuevo producto. Es importante que dicho objetivo sea cuantificable (por ejemplo: obtendría x cuota de mercado). A partir de ahí se elabora una propuesta que indique cuáles son los obstáculos a los que se enfrenta y cómo resolverlos.
El desafío será realizar una hipótesis sobre en qué escenario de producto,
precio, distribución y promoción los clientes potenciales se decantarían por el producto.
Experimentación: Mediante la experimentación, en el caso del marketing, al igual
que en el método científico, se trata de confirmar la veracidad de la hipótesis sobre la introducción del producto en el mercado.
Demostración o refutación de la hipótesis: Una vez recopilados y analizados los
datos extraídos de la introducción en el mercado puesto en práctica se determina la veracidad de la hipótesis ¿Se obtienen los resultados previstos en la hipótesis? ¿Se consigue la cuota de mercado esperada?
Conclusiones: Una vez se tienen estos resultados, entonces se entiende
exactamente como ha actuado el producto frente a la hipótesis mencionada y, al igual que el método científico, un fallo en la hipótesis no significará fracaso, sino que dará datos fiables para replantear las estrategias de producto, precio, distribución y promoción para alcanzar nuestra hipótesis.
Empresas de todos los tamaños y características pueden aplicar estos
conceptos para mejorar. Por ejemplo, un restaurante puede aplicar conceptos de experimentación offline para preparar diferentes versiones de su carta y verificar cuál trae más beneficios. En el siglo XXI la información manda. Las empresas que crecerán y destacarán por encima de su competencia serán aquellas que sepan recabar información relevante del mercado (mediante sistemas de analítica web, encuestas, etc.) y aplicarla para mejorar sus procesos (realizando experimentos previos a la implantación de los posibles cambios para no cometer costosos errores). 1. Bibliografía.
1. Berasategui L. Andreu R., et. al., Mejorar la gestión de empresas. Algunos
de los mejores casos del IESE, España, Editorial McGraw Hill.(2006).
No se encuentra en el acervo de libros del centro de información.
2. Bilancio Guillermo, Marketing las ideas el conocimiento y la acción, México,
Editorial Prentice Hall.(2008)
No se encuentra en el acervo de libros del centro de información.
3. Cateora Phillip, Marketing internacional, Mc Graw hill, (2010).
4. Czinkota Michel R., Marketing internacional, Cencage. (2008).
5. De la Garza Mario, Promoción de Ventas. Estrategias mercadológicas de
corto plazo, México, Editorial CECSA.(2004)
No se encuentra en el acervo de libros del centro de información.
6. Fischer de la Vega Laura y Espejo Callado Jorge , Casos de