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Civilizar.

Ciencias Sociales y Humanas


ISSN: 1657-8953
yadira.caballero@usa.edu.co
Universidad Sergio Arboleda
Colombia

Bustamante Arango, Diana Marcela; Vásquez Henao, Paola Andrea


La convención Belém Do Pará un balance de su aplicación en la jurisprudencia de la corte
interamericana, a 16 años de su entrada en vigor
Civilizar. Ciencias Sociales y Humanas, vol. 11, núm. 20, enero-junio, 2011, pp. 15-35
Universidad Sergio Arboleda
Bogotá, Colombia

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=100222636003

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Civilizar 11 (20): 15-36, enero-junio de 2011

La convención Belém Do Pará


un balance de su aplicación en la jurisprudencia de la
corte interamericana, a 16 años de su entrada en vigor*

The Convention of Belém do Pará a report of its application


in the jurisprudence of the Inter-American Court, 16 years
after its entry into force
Recibido: 05 de febrero de 2011 - Revisado: 20 de febrero de 2011 - Aceptado: 15 de marzo de 2011

Diana Marcela Bustamante Arango**


Paola Andrea Vásquez Henao***

Resumen
Este artículo se presenta como un resultado de investigación1 que tuvo por objeto
conocer los casos en que la Corte Interamericana de Derechos Humanos aplicó
la Convención Interamericana para prevenir, sancionar y erradicar la violencia
contra la mujer2 en su función contenciosa, cuando dentro de los hechos de
conocimiento se encontró como patrón fáctico la violencia contra la mujer. *
Proyecto de investigación Análisis
Palabras Clave jurisprudencial sobre los pronuncia-
mientos de la Corte IDH respecto a
Derechos humanos de las mujeres; violencia contra la mujer; jurisprudencia los derechos humanos de las mujeres
interamericana; Corte Interamericana; Convención Belém do Pará. en el marco del SIDH, inscrito en la
línea de investigación Proyecciones
Jurídico políticas del derecho interna-
Abstract cional y los derechos humanos en el
contexto norte-sur adscrito al Grupo
This article is presented as a result of an investigation that had the object to de Investigación Problemas Contem-
know the cases which the Inter-American Court of human Rights applied “The poráneos del Derecho (GIPCODE)
Inter-American Convention on the prevention, punishment and eradication of Universidad de San Buenaventura
Seccional Cali (entidad financiadora).
violence against women “Convention of Belém” in its contentious function, **
Diana Marcela Bustamante Arango;
when in the cases found factual situations violence against women. magíster en Defensa de los Derechos
Humanos y Litigio ante Tribunales
Keywords Internacionales (USTA); especialista
women´s Human rights; violence against women; Inter-American jurisprudence, en Derecho Privado (UPB). Abogada
(USC); licenciada en Literatura (Uni-
Inter-American Court, Belem do Para Convention. valle). Directora del Grupo de Inves-
tigación Problemas Contemporáneos
del Derecho (Gipcode), Universidad
de San Buenaventura, seccional Cali.
Correo electrónico:
diana.bustamante00@gmail.com
***
Paola Andrea Vásquez Henao (co-
investigadora); abogada (USB); auxi-
liar de investigación Gipcode.
Correo electrónico:
paola888a@hotmail.com
Agradecimientos a José Alejandro
Marmolejo, integrante del Semillero
de Investigación de Derecho Interna-
cional Público (Sedip), por su valioso
aporte en la construcción de la base
de datos.
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Introducción le imprimen ese carácter de vanguardia ante el


sistema universal.
Ha sido parte de nuestra preocupación,
como académicas, la manera como el Derecho Así el interés se centra en conocer cómo
Internacional se ocupa (en ocasiones) de brindar el máximo tribunal interamericano de derechos
posibilidades para la construcción de un orden humanos ha interpretado este instrumento inter-
jurídico social internacional más justo, a través nacional, para tal fin se ha realizado una revi-
de la recepción de las exigencias de ciudadanos sión minuciosa de su jurisprudencia, con la fi-
y ciudadanas que batallan por la consolidación nalidad de identificar aquellos casos en los que
de un régimen de respeto a los derechos huma- se ha dado su aplicación. En ese orden de ideas,
nos, y, en ese sentido, la OEA ha posibilitado esta investigación presenta una selección de los
desde su agenda la discusión, negociación y pronunciamientos de la Corte Interamericana
adopción de instrumentos internacionales que de Derechos Humanos (en adelante la Corte
limitan el uso arbitrario del poder de los Es- IDH), en los cuales han sido violadas obliga-
tados, a la vez que habilitan con personalidad ciones internacionales que consagran derechos
jurídica al individuo interamericano en la posi- humanos de las mujeres, en algunos Estados
bilidad para hacer sus derechos exigibles. Parte del Sistema Interamericano y por tanto, se
ha dado aplicación a la Convención de Belém
No obstante, la realidad del continente so- do Pará (en adelante la CBDP).
brepasa los cálculos del pesimismo y la vulne-
ración de los derechos humanos constituye un El hilo argumental se esboza en tres par-
hecho evidente en estas sociedades, de manera tes, en la primera se identifican aquellos casos
concreta los derechos humanos de las mujeres en los que la Corte IDH declaró la responsabi-
son cada vez más desconocidos y su transgre- lidad internacional de dos Estados por la vio-
sión en muchos casos se realiza por la sola ra- lación a las obligaciones internacionales conte-
zón de ser mujeres3, como por ejemplo, actos nidas en la CBDP, a pesar de que al momento
relacionados con el abuso sexual, el embarazo de ocurridos los hechos aún no estaba en vigor
forzado, la prostitución forzada, la esteriliza- para dichos Estados. En la segunda parte se pre-
ción forzada, en el marco de conflictos arma- sentan cinco casos en los que si bien aparece
dos. El acoso sexual en las relaciones laborales, el patrón fáctico de violencia contra la mujer
o el feminicidio4, por mencionar algunas desde dentro del contexto histórico de aplicación de
el ámbito de lo público, y en el espacio priva- la Convención, la Corte no la refiere como con-
do, situaciones de violencia física como actos figuración del hecho internacionalmente ilícito.
sexuales abusivos, violencia psicológica, o la En el último acápite se revisan tres casos cono-
violencia económica, entre otras, en las cuales cidos por la Corte después de la entada en vigor
se evidencia en ocasiones la acción u omisión de la Convención: en los dos primeros, la Corte
de los mismos Estados. considera que el Estado no viola las obligacio-
nes internacionales en ella contenidas, mientras
Del Corpus Iuris interamericano, esta que en el último caso declara la responsabilidad
indagación ha escogido la Convención Intera- internacional del Estado.
mericana para prevenir, sancionar y erradicar la
violencia contra la mujer, que, en palabras del Del análisis de los fallos y las consideracio-
exmagistrado García Ramírez, constituye un nes de la Corte IDH se pudo concluir que existen
“escudo protector”, como uno de los bastiones varios casos en los cuales se ha aplicado la CBDP
del derecho interamericano que reflejan las lu- en países como Guatemala, México, Perú, y en
chas de los movimientos sociales, de activistas otros, en los que a pesar de presentar patrones fác-
de derechos humanos, feministas y juristas, que ticos que constituyen violencia contra la mujer, a

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la luz de dicha Convención, esta no se aplicó, en de casos, se empleó un criterio temporal a partir
ocasiones porque el instrumento no estaba vigente del nacimiento de la obligación internacional,
y en otras porque no se probaron los hechos alega- que de conformidad con el Artículo 21 de la
dos como violatorios del tratado. Convención entró en vigor con el depósito del
segundo instrumento de ratificación5; posterior-
El problema de investigación mente, se revisó la entrada en vigor para cada
Estado en particular, por acto de ratificación
El tema objeto de investigación son los posterior o de adhesión. A partir de esta primera
Derechos Humanos de la mujeres en la Juris- selección se comenzó con un rastreo jurispru-
prudencia de la Corte IDH y el problema de dencial por cada uno de los países que han rati-
investigación que se construyó es la aplicación ficado la Convención; en la segunda etapa de la
de la Convención Interamericana para preve- investigación se identificaron los casos que se
nir, sancionar y erradicar la violencia contra la caracterizaron porque las víctimas eran muje-
mujer (CBDP) por la Corte IDH en sus fallos, res y permanecía el patrón fáctico de violencia
un balance de este instrumento a 16 años de su contra la mujer, se realizó entonces un análisis
entrada en vigor. de los hechos y las obligaciones internacionales
trasgredidas por el Estado Parte, de conformi-
Ahora bien, abordar el tema de la violen- dad con la Convención, así como las conside-
cia contra las mujeres implica toda una revisión raciones más relevantes de la Corte IDH. Fi-
de varios tipos de violencia: visibles e invisibles nalmente, comenzó la etapa de sistematización,
(Galtung, 1998, p. 15), que durante años se han que arrojó como resultado la elaboración de una
encargado de relegar y discriminar el ejercicio base de datos.
pleno de una serie de derechos para las mujeres
y que de hecho, a la fecha, se plantean dentro de Presentación de resultados
una discusión sobre la eficacia de la norma jurí- de investigación
dica, puesto que el mero reconocimiento desde
la legalidad no involucra dicha efectividad en Casos donde el patrón fáctico es la vio-
el plano material, dado que la violencia contra lación a los derechos humanos de las mujeres
la mujer es una práctica que aún subyace en el garantizados por la Convención de Belém do
entramado cultural. Pará

Para comprender este asunto, la presente in- Si bien el primer instrumento adoptado
vestigación se inscribe en el macromolde herme- sobre la violencia contra la mujer se dio en el
néutico o ideográfico y a su vez en el micromolde marco de las Naciones Unidas6 (para los efec-
del realismo jurídico; como paradigma metodoló- tos de ese artículo se excluirán del análisis los
gico se ha escogido el cualitativo para la investiga- desarrollos jurídicos en el sistema universal),
ción en ciencias sociales, y de manera específica, esta reflexión toma como punto de referencia el
el método del estudio de casos; el nivel de pro- derecho interamericano, que de hecho, “ha sido
fundidad de esta investigación es explicativo y a pionero en el compromiso de sus Estados con
partir de este se presenta un primer estado del arte la protección de los universales humanos, des-
sobre situaciones fácticas que reportan violencia de luego en atención a las dinámicas sociales
contra la mujer y que son incluidas en la CBDP, propias y a las exigencias de los movimientos
a la vez que se explora la aplicación que hace la sociales que han puesto sobre la mesa la nece-
Corte IDH del instrumento interamericano. sidad de reconocer y garantizar el ejercicio de
sus derechos. Fue así como en 1928 se celebró
La técnica de investigación fue la revisión la Sexta Conferencia Internacional de los Es-
documental y como estrategia para la selección tados Americanos y se creó la Comisión Inte-

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ramericana de Mujeres (CIM)7, como respuesta erradicar la violencia contra la mujer12. La im-
a la presión realizada por activistas feministas portancia del artículo radica en que esta Con-
de toda América, el objetivo de esta Comisión vención, en el acápite de Mecanismos de pro-
era la promoción y protección de los derechos tección, habilita a las víctimas para acceder ante
de las mujeres” (Bustamante y Ambuila, 2010, la Comisión Interamericana a través del sistema
p. 69), y a partir de este momento la produc- de peticiones individuales para exigir del Esta-
ción normativa que se ocupa de la promoción y do Parte el cumplimiento de las obligaciones
protección de los derechos humanos de las mu- internacionales adquiridas, solo y exclusiva-
jeres ha sido bastante prolífica8, hasta llegar a mente en relación con este artículo13.
la adopción de una Convención Interamericana
que se ocupa de manera directa del problema de En consecuencia, el análisis propuesto re-
la violencia contra las mujeres. visará el tratamiento dado por la Corte IDH en
aquellos casos en los cuáles se presentan ale-
Esta Convención es un instrumento de gaciones relacionadas con la vulneración a de-
tipo regional que rige solamente en el conti- rechos humanos de mujeres consagradas en el
nente americano, a la fecha son parte treinta y instrumento de referencia, por exigencia de los
dos Estados del continente9. En él se definió por representantes de las víctimas, la CIDH o en el
primera vez la violencia contra la mujer como desarrollo de cuestiones litigiosas a cargo de la
“cualquier acción o conducta, basada en su gé- Corte en atención al principio iura novit curia.
nero10, que cause muerte, daño o sufrimiento
físico, sexual o psicológico a la mujer, tanto en Ahora bien, es necesario aclarar que la
el ámbito público como en el privado” (artículo responsabilidad internacional de los Estados
1), entiende que las situaciones de violencia in- Parte solamente se puede declarar en dos situa-
cluyen “la violencia física, sexual y psicológica ciones, en primer lugar cuando se logre probar
que tenga lugar i) dentro de la familia o en cual- el incumplimiento de la obligaciones conteni-
quier relación interpersonal, con independencia das en la CBDP y que éstas sean imputables al
de que el agresor comparta el domicilio con la Estado y en segundo lugar, solo una vez que el
mujer, o ii) en la comunidad y sea perpetrada instrumento haya entrado en vigor internacional
por cualquier persona, así como aquella que y en vigor para cada Estado objeto de contro-
ocurra en instituciones de educación, de salud versia (principio de irretroactividad).
o en cualquier otro lugar” (artículo 2, literales
a y b), superando ostensiblemente la Cedaw11 En ese orden de ideas a continuación se
dentro del Sistema Universal, que se limitó a la presenta la selección de los casos en los cuales
problemática de la discriminación. se identificó un patrón fáctico, es decir que los
hechos relevantes en cada sentencia se relacio-
Adicionalmente, reconoce una serie de nan con el objeto de estudio, y que se adecuan a
derechos entre los que se encuentran los civiles las obligaciones incumplidas por los Estados en
(artículo 4) y políticos (artículo 5); el derecho a virtud del instrumento.
una vida sin violencia, en el escenario público y
privado (artículo 3), entre otros. Es importante precisar que existen dos
etapas respecto de la protección de los dere-
El artículo 7 señala, entre los deberes chos humanos de la mujer en Latinoamérica: la
de los Estados, condenar todas las formas de primera es antes de 199414, es decir cuando no
violencia contra la mujer y, en consecuencia, se encontraba vigente la CBDP, pero ya exis-
se comprometen a adoptar toda clase de polí- tía como proyecto de Convención y, la segunda
ticas que les permitan cumplir con el objeto de después de 1995 cuando entró en vigor. Es ne-
la Convención, es decir: prevenir, sancionar y cesario hacer la anterior claridad, porque sino

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se encuentra vigente la CBDP al tiempo en que población civil que habitaba allí, pues desde las
sucedieron los hechos, la Corte IDH no tiene horas de la mañana irrumpieron en los hogares
competencia para conocer sobre la cuestión que los Kaibiles17, separando hombres, mujeres y
se ponga a su consideración y por ello no se niños. Los hombres fueron fusilados y tirados
pronunciaría, a lo sumo el examen se limitaría a a un pozo, las mujeres y niños conducidos al
la aplicación general a la Convención America- mismo lugar y, muchas niñas fueron violadas.
na de Derechos Humanos. Sin embargo durante En estos hechos “perdieron la vida por lo menos
la investigación se encontraron algunas excep- 216 personas” (Corte IDH párrafo 77-78-79).
ciones que serán examinadas. Se tuvo conocimiento de dos niñas que llega-
ron al parcelamiento, ellas fueron “violadas por
Después de una revisión exhaustiva fue dos instructores militares” y al día siguiente, las
posible identificar varios casos en los que se re- asesinaron. Las mujeres embarazadas fueron
portan violaciones a los derechos humanos de tratadas de una forma cruel e inhumana “ya que
las mujeres, de conformidad con lo estipulado la crueldad desplegada por los soldados alcan-
en la CBDP en Latinoamérica: Caso de la Cruz zó tal punto que a las mujeres embarazadas les
Flórez vs. Perú; Caso del Penal Miguel Castro causaron abortos producto de los golpes que les
Castro vs. Perú; Caso Loaiza Tamayo vs. Perú; propinaban, incluso saltando sobre el vientre de
Caso Maritza Urrutia vs. Guatemala; Caso Tiu dichas mujeres hasta que salía el feto malogra-
Tojin vs. Guatemala; Caso de la Masacre de las do” (Corte IDH párrafo 81).
dos erres vs. Guatemala; Caso González y otras
(Campo Algodonero) vs. México; Caso Caba- La CIDH en su oportunidad procesal,
llero Delgado y Santana vs. Colombia; Caso solicitó a la Corte IDH la declaratoria de la
Perozo y otros vs. Venezuela y Caso Ríos y responsabilidad internacional del Estado gua-
otros vs. Venezuela. temalteco por la configuración del hecho inter-
nacionalmente ilícito al trasgredir obligaciones
Aplicación de la Convención Belém contenidas en la CBDP, la cual “obliga a actuar
do Pará con la debida diligencia al momento de inves-
tigar y sancionar los hechos de violencia con-
Antes de la entrada en vigor tra las mujeres”18. A su vez, los representantes
pidieron declarar al Estado responsable por “el
En este acápite se presentan dos casos liti- incumplimiento de los derechos contenidos en
giosos en los que la Corta aplica el instrumento, los artículos 1, 6 y 8 de la Convención Intera-
a pesar de que al momento de la ocurrencia de mericana para sancionar la Tortura y 7.b) de la
los hechos objeto de la petición internacional, Convención de Belém do Pará.” El Estado ar-
aún no estaba en vigor para ellos por adolecer gumentó en su defensa que al momento de la
del proceso de ratificación como manifestación ocurrencia de los hechos no estaban vigentes
del consentimiento del Estado. estos instrumentos19 (Corte IDH párrafo 136).

• Caso15 de la masacre de las Dos Consideraciones sobre la Convención


Erres vs. Guatemala16 de Belém do Pará en el presente caso

Hechos La Corte manifiesta que el Estado estaba


obligado a investigar de forma diligente todos
Según los hechos probados por la Corte los hechos. Este compromiso estaba pendiente
IDH, los días 6 y 8 de de diciembre de 1982 en al momento de reconocer la “competencia con-
el parcelamiento de Las Dos Erres, se desarro- tenciosa de la Corte el 9 de marzo de 1987.”
lló una actividad militar devastadora contra la (Corte IDH párrafo 137). Además dicha obliga-

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ción de investigar fue reafirmada por el Estado cárcel de máxima seguridad de mujeres en Cho-
en el acto de ratificación de la CBDP el 4 de rrillos “(Corte IDH, 2006, párrafo 210), sin em-
abril 1995, y la Convención para sancionar la bargo lo que sucedió fue un ataque premeditado a
Tortura el 29 de enero de 1987, fechas a partir l@s reclus@s pertenecientes al grupo subversivo
de las cuales el Estado de Guatemala debía ve- de “Sendero Luminoso”. Durante éste operativo,
lar por el cumplimiento de dichas Convenciones día de la madre en el Perú, y de visita femenina
“aún cuando éstas no habían sido adoptadas por en el penal, se iniciaron los ataques explosivos
el Estado al momento de la masacre (Corte IDH selectivos en el pabellón de mujeres23, luego reinó
párrafo 137).” Asimismo éste tribunal señala el caos, la muerte y la desesperación, las personas
que “[el Estado] tiene el deber de garantizar el reclusas eran heridas, golpeadas, arrastradas y ha-
derecho de acceso a la justicia […] conforme a cinadas, les negaron cualquier tipo de alimentos,
las obligaciones específicas que le imponen las agua, asistencia médica, y vestimenta, todo bajo
Convenciones especializadas […] en materia de un régimen de tortura física y psicológica, sin te-
la violencia contra la mujer” (Corte IDH párra- ner ningún tipo de consideración especialmente
fo 137). Lo anterior, debido a que dichos ins- con las mujeres embarazadas.
trumentos complementan las obligaciones que
tiene el Estado sobre el cumplimiento de los Posteriormente, el 9 de mayo del mismo
derechos humanos de la Convención America- año, internos/as sobrevivientes fueron tenidos
na, así como el “corpus iuris internacional20 en en unas condiciones infrahumanas en el penal,
incluyendo las mujeres embarazadas, quienes
materia de protección de la integridad personal”
junto con los hombres fueron trasladados a
(Corte IDH párrafo 137).
otros centros de reclusión y hospitales. Luego
las internas fueron trasladadas a otras cárceles
En consecuencia, la Corte estima que “el
y fueron objeto de maltratos físicos y psicológi-
Estado debió iniciar ex officio y sin dilación una
cos (Corte IDH, 2006, párrafo 197.51).
investigación seria, imparcial y efectiva de to-
dos los hechos de la masacre relacionados con Consideraciones sobre la Convención
la vulneración de la vida, así como respecto a de Belém do Pará en el presente caso
otras afectaciones específicas contra la integri-
dad personal, tales como las supuestas torturas Es importante mencionar que para la
y actos de violencia contra la mujer con una época de los hechos en 1992 la CBDP no ha-
perspectiva de género, de conformidad con el bía entrado en vigor para el Estado peruano, sin
articulo 7.b) de la Convención Belém do Pará” embargo la Corte asume la competencia para
(Corte IDH, Caso del penal Castro Castro vs. conocer del Caso; dentro de los argumentos
Perú, 2006 citado por la Corte párrafo 141). presentados por los representantes de las vícti-
mas se expone que se toman cómo obligacio-
• Caso21 del penal Miguel Castro nes violadas las contendías en dicho instrumen-
Castro vs. Perú22 to puesto que desde “el período del 12 de Julio
de 1995 en adelante, dichas violaciones consti-
Hechos tuyeron una violación del objeto y propósito24
de la Convención Interamericana para Prevenir,
Dentro de los hechos probados por la Corte Sancionar y Erradicar la Violencia contra la
IDH, entre el 6 y 9 de abril de 1992 el Estado del Mujer (…) firmada por Perú el 12 de Julio de
Perú realizó el “Operativo Mudanza 1” en el Penal 1995[,] por el período que cubre 1996 hacia
Miguel Castro Castro. En este operativo, según adelante, desde que Perú ratificará dicho tratado
las versiones oficiales, se iba a realizar “el trasla- el 4 de junio de 1996” las violaciones de [los]
do de las mujeres que se hallaban recluidas en el Artículo[s] 4 y 7 de la misma Convención (Cor-
pabellón 1A del Penal Miguel Castro Castro, a la te IDH, 2006, párrafo 260 lit.t).

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Adicionalmente la CIDH, en sus alegatos En cuanto al tema de la violencia contra


señala que los deberes de “prevención, investi- la mujer, la Corte IDH aplica el artículo 5 de
gación y sanción a cargo del Estado han sido re- la Convención Americana sobre la integridad
cogidos por la Convención de Belém do Pará” personal, y toma como referencia de interpreta-
que aunque no estaba vigente en el Perú para ción la Convención Interamericana para Preve-
la época de los hechos, “puede ser utilizada a nir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la
efectos de analizar la responsabilidad estatal25 Mujer, los cuales son para la Corte instrumentos
por las violaciones a los artículos 4, 5, 8 y 25 de que complementan el “corpus juris internacio-
la Convención Americana, en virtud de lo dis- nal en materia de protección de la integridad
puesto por el artículo 29 de la misma.” personal de las mujeres” (Corte IDH, 2006, pá-
rrafo 276).
Más aún cuando dentro de los hechos pro-
bados por la Corte se indica el conocimiento del Concretamente y por primera vez en la ju-
ex presidente Alberto Fujimori en la comisión risprudencia de este Tribunal, la Corte IDH en-
de los hechos, (…) se encuentra probado que el foca su atención en cinco temas de género, bá-
10 de mayo de 1992 el ex Presidente del Perú, sicamente debido a que “las mujeres se vieron
Alberto Fujimori Fujimori, estuvo en el Penal afectadas por los actos de violencia de manera
Miguel Castro Castro y caminó entre los inter- diferente a los hombres; (…) algunos actos de
nos tendidos boca abajo en el suelo de los patios violencia se encontraban dirigidos específica-
de dicho establecimiento (supra párr. 197.43), mente a ellas y otros les afectaron en mayor
constatando directamente las condiciones en proporción que a los hombres” (párr. 223).
que se encontraban (párrafo 294). Lo anterior
según la Corte constituye un crimen de Estado. En consecuencia es primer aspecto que
tiene en cuenta el Tribunal, hace referencia a la
Finalmente la Corte IDH declara respon- difícil situación de la mujer durante los hechos,
sable internacionalmente al Estado Peruano por “las mujeres embarazadas que vivieron el ata-
la violación a las obligaciones de garantías judi- que experimentaron un sufrimiento psicológico
ciales y protección judicial (artículos 8.1 y 25 de adicional” (Corte IDH, 2006, párrafo 292 y
la Convención Americana), en conexión con los 332)”. El segundo tema hace mención al trato
artículos 7.b26) de la Convención Interamericana recibido por las mujeres reclusas, la Corte men-
para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia ciona que el Alto Comisionado de las Naciones
contra la Mujer. En lo concerniente a la integri- Unidas para los Derechos Humanos, ha señala-
dad personal la Corte aplica solamente el artículo do que las detenidas deben ser supervisadas y
5.1 y 5.2 de la Convención Americana de manera revisadas por oficiales femeninas y las mujeres
general tanto como para hombres y mujeres. embarazadas y en lactancia deben ser provistas
con las condiciones especiales durante su de-
Es interesante observar que la CBDP aún tención (Corte IDH, 2006, párrafo 303). El ter-
no había sido ratificada por el Perú y en con- cer aspecto estuvo relacionado con la desnudez
secuencia, técnicamente, no era aplicable en el forzada a la que fueron sometidas algunas mu-
presente caso, sin embargo la Corte asumió la jeres en los hospitales. Esta situación constituye
competencia para conocer del asunto. violencia sexual y atenta contra la dignidad de
esas mujeres. El cuarto tema implica las con-
Al respecto dice la Corte que “en el caso diciones severas de la detención, por la inco-
del Penal Miguel Castro Castro el Tribunal de- municación sobre todo de las internas que eran
claró violada la Convención Belém do Pará, lo madres (Corte IDH, 2006, párrafo 330)”, esto
que es equivalente a declarar su competencia generó un sufrimiento adicional para ellas, por
sobre ella” (Corte IDH, 2009, párrafo 74). no poder comunicarse con sus hijos. Por últi-

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mo, la cuestión de la desatención en las mujeres detenidos y desaparecidos el señor Isidro Caba-
en cuanto a sus necesidades fisiológicas (Corte llero Delgado, y la señorita María del Carmen
IDH, 2006, párrafo 331) causó un sufrimiento Santana por “por personas que pertenecían al
especial y adicional. El Comité Internacional de Ejército colombiano y por varios civiles” (Cor-
la Cruz Roja ha determinado que el Estado debe te IDH, 1995, párrafo 53 literal b). La circuns-
asegurar que “las condiciones sanitarias [en los tancia de que hayan transcurrido más de seis
centros de detención] sean adecuadas para man- años desde que ocurrieron los hechos y no se
tener la higiene y la salud [de las prisioneras], haya tenido noticias de ellos, “permite razona-
permitiéndoles acceso regular a retretes y per- blemente inducir que Isidro Caballero Delgado
mitiéndoles que se bañen y que limpien su ropa y María del Carmen Santana fallecieron.” (Cor-
regularmente” (Corte IDH, 2006, párrafo 331). te IDH, 1995, párrafo 53 literal b).

En el presente caso, la Corte considera Algunos de los testimonios30 presenta-


que por los hechos declarados como violatorios dos como prueba señalan una serie de situa-
del derecho a la integridad personal surgió para ciones que permiten reconstruir el contexto en
el Estado la obligación de investigar las afecta- el que ocurrieron los hechos, sin embargo no
ciones del mismo, la cual deriva del artículo 1.1 reportaron valor probatorio para la Corte; por
de la Convención Americana en conjunto con ejemplo, a pesar de que el testimonio de la se-
el referido derecho sustantivo protegido en el ñora Elida González Vergel, fue un testimonio
artículo 5 de la misma, aplicando las referidas directo sobre los hechos por ella presenciados,
disposiciones de la Convención Interamericana al manifestar que el señor Caballero Delgado
para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violen- estaba vestido con el mismo uniforme del Ejér-
cia contra la Mujer y de la Convención Intera- cito pero su compañera estaba totalmente des-
mericana para Prevenir y Sancionar la Tortura. nuda y con las manos amarradas hacia atrás”31
(Corte IDH, 2006, párrafo 346). (Corte IDH, 1995, párrafo 36), y también que
“la mujer” (María del Carmen Santana) “estaba
Casos que reportan patrón fáctico de amarrada pero Caballero Delgado no, éste es-
violencia contra la mujer pero la corte taba de pie recostado en un árbol de mango”. O
se abstiene de aplicar el instrumento lo narrado por otro testigo pero en ésta ocasión,
“de oídas”, el señor Javier Páez, quien infor-
Si bien el problema de investigación era mó lo relatado por unos campesinos “que los
identificar aquellos casos en los que la Corte habían llevado por la región y que a Caballero
IDH diera aplicación a la CBDP, resultó de in- Delgado le habían puesto un uniforme del Ejér-
terés encontrar casos en los cuales se observa cito y ella iba en ropa interior y descalza32. Del
el patrón fáctico de violencia contra la mujer mismo modo otro testigo, en la misma calidad
prescrito en la Convención pero la Corte IDH que el anterior, narra lo que dice la señora Rosa
no la emplea, en ocasiones, argumenta el Con- Delia, que “el Ejército había detenido al señor
tencioso Interamericano, por falta de pruebas. Isidro; que el día siguiente varias personas le
informaron que a una muchacha que llevaba
• Caso27 Caballero Delgado y Santa- el Ejército la habían visto en ropa interior33”
na vs. Colombia28 (Corte IDH, 1995, párrafos 38, 39).

Hechos En el acápite de las pruebas, se presen-


tan los testimonios que hacen referencia a la
Según los hechos que la Corte considera forma en que fue tratada la señorita María del
probados29, en el año 1989 en el municipio de Carmen Santana, ella fue desnudada y obligada
San Alberto del departamento del Cesar, fueron así a caminar, además fue amarrada con las ma-

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La convención Belém Do Pará un balance de su aplicación en la jurisprudencia 23
de la Corte Interamericana, a 16 años de su entrada en vigor

nos hacia atrás circunstancia que no se observó Urrutia quien “militaba en el grupo insurgente
en el tratamiento dado al señor Caballero. No Ejército Guerrillero de los Pobres (EGP)” (Cor-
obstante la Corte no asumió estos hechos como te IDH párrafo 58.23) fue “secuestrada por tres
comprobados, la Corte expuso en la parte VI hombres armados, quienes la introdujeron por
párrafo 53 de la sentencia, que al entrar a de- la fuerza en un carro (...)” (Corte IDH párra-
terminar los hechos relevantes34 que consideran fo 58.4). Esta mujer fue traslada a las “instala-
probados, las torturas o los tratos malos duran- ciones del centro de detención clandestino del
te la detención del señor Delgado y la señora Ejército de Guatemala denominado “La Isla”,
Santana son hechos de los cuales no se tienen en este lugar permaneció por lo menos ocho días
elementos claros para ser demostrados pues se (Corte IDH párrafo 58.5). Durante su detención
apoyan “sólo en los testimonios imprecisos en estuvo en un cuarto oscuro, se le amenazaba
este aspecto de Elida González Vergel y de Gon- con torturarla y con matarla o matar a alguien
zalo Arias Alturo, que no se confirman con las de su familia, en repetidas ocasiones “se le ad-
declaraciones de los restantes testigos” (Corte virtió que nunca volvería a ver a su hijo” (Corte
IDH, 1995, párrafo 53 literal f). Ahora bien, si IDH párrafo 58.6). La señora Urrutia “fue for-
los testimonios hubieran sido valorados, esta si- zada a prestar una declaración filmada donde se
tuación constituye violencia contra la mujer de refirió a su participación, la de su ex esposo y
tipo psicológico, pues en este caso el trato dado la de su hermano en el Ejército Guerrillero de
a la señorita Santana es diferente al del señor los Pobres (EGP)” (Corte IDH párrafo 58.7).
Caballero, al desnudarla y ponerla a caminar en Luego ella fue liberada, pero bajo las amenazas
esa condición, esto constituye una ofensa a su de muerte de sus captores; una vez en libertad,
integridad personal como mujer, perpetrada por solicitó una amnistía y, dio una conferencia de
los agentes del Estado. Paradójicamente en el prensa en la cual confirmó el contenido de la
Caso Blake contra Guatemala, la Corte otorgó declaración que hizo obligada. (Corte IDH pá-
valor probatorio a testimonios indirectos como rrafo 58.8). La CIDH en sus alegatos, expone
mecanismo para probar la desaparición forzada que la señora Urrutía fue sometida deliberada-
(Corte IDH, párrs. 47 al 50, 1998). Sobre el va- mente a torturas psicológicas derivadas de la
lor del testimonio indirecto señaló que “la Corte amenaza de perder a su pequeño hijo.
atribuye un alto valor probatorio a las declara-
ciones de los testigos (…), dentro del contexto Sin embargo la Corte IDH se refiere en
y de las circunstancias de un caso de desapa- sus consideraciones a la violación de la integri-
rición forzada, con todas las dificultades que dad personal en razón a la tortura psicológica37
de ésta se derivan, donde los medios de prueba que sufrió durante su detención, por el hecho de
son esencialmente testimonios indirectos y cir- que los “agentes del Estado la amenazaron con
cunstanciales en razón de la propia naturaleza torturarla físicamente o con matarla o privar de
de este delito (párr. 51, 1998). Así los testimo- la vida a miembros de su familia si no colabora-
nios directos e indirectos constituían un indicio ba (Corte IDH párrafo 85, 86 y 94). Finalmente
claro de sufrimientos adicionales en María del se condena al Estado internacionalmente por
Carmen Santana por la sola razón a ser mujer. violar la integridad física de la Señora Maritza
en conexión con la Convención Interamericana
• Caso35 Maritza Urrutia Vs, Guate- contra la Tortura.
mala36
En este caso la Corte asume una posición
Hechos diferente a la tomada en el Caso de las Dos
Erres, ya analizado, puesto que si bien, de con-
Según los hechos probados por la Corte formidad con el respeto al principio de irretro-
IDH, el 23 de julio de 1992 la señora Maritza actividad la Corte carece de competencia para

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24 Diana Marcela Bustamante Arango - Paola Andrea Vásquez Henao

conocer de violaciones a la CBDP, antes de su Corte concede valor probatorio (Corte IDH pá-
entrada en vigor, para el Estado se encontraba rrafo 34) se indica que entre las víctimas de la
vigente la obligación de investigar los hechos captura “se encontraba una joven mamá, con su
(artículo 7), perpetrados por sus mismos agen- hija de quince días de nacida (…) Se sospecha
tes; de conformidad con el caso similar de las que esta mujer fue violada durante el tiempo
Dos Erres, sin embargo, el Contencioso, se que permanecieron en Amachel” (párrafo 34).
abstiene de aplicar el instrumento, por hechos
bastante similares y de hecho, ante el mismo La Corte IDH solo se pronuncia respecto
Estado. de la violación del Derecho a la vida y al Dere-
cho a la integridad física y aplica la Convención
• Caso38 Tiu Tojín vs. Guatemala39 Americana de una manera muy general.

Hechos En este litigio es evidente la vulneración


no solo del derecho a la vida de la señora Tojin,
Según los hechos aceptados como ciertos sino de su condición especial en estado aún de
por la Corte IDH (párrafo 40) el 29 de agosto maternidad, pues ella sólo llevaba un mes del
de 1990 efectivos del Ejército guatemalteco lle- parto y, el pos-parto requiere de una convale-
garon al Municipio de Chajul y, capturaron a 86 cencia tranquila junto con la criatura, ella no
de sus residentes pertenecientes a la Comuni- estaba en condiciones físicas ni siquiera de ser
dad de Población en Resistencia conocida como detenida. Aquí se comete violencia física por-
“La Sierra”. Entre las personas detenidas se en- que se vulnera el derecho a que se le respete su
contraban la señora María Tiu Tojín y su hija vida, y el derecho a que se respete su integri-
Josefa quienes pertenecían al pueblo Maya”. dad física (artículo 2, 4 CBDP). Por otro lado la
Los detenidos fueron traslados a la base militar sospecha de que la mujer haya sido violada du-
en Santa María Nebaj. Y en este lugar María rante la detención configura el tipo de violencia
Tiu Tojín y su hija Josefa fueron vistas por últi- sexual contemplado en la CBDP (Art. 2).
ma vez (Corte IDH párrafo 41). El Resto de los
detenidos fueron trasladados a un campamento Sin embargo en este caso es muy compli-
donde debían llevar a todos pero ellas no llega- cado entrar a determinar dicha violencia debido
ron, y se desconoce su paradero. Se cree que la a que contra la señora Tiu Tojin se cometió el
señora Tojin estuvo en el cuartel militar como crimen de desaparición forzada, de hecho aún
“prisionera de guerra” acusada de guerrillera, y se encuentra desaparecida, y no se sabe mucho
que su hija fue entregada a terceros o que fué sobre los hechos posteriores a la detención, por
ejecutada. (Corte IDH párrafo 41). ello ni la Comisión Interamericana ni la Corte
IDH se refieren a este tipo de violencia.
La señora María Tiu Tojín tenía 27 años
de edad al momento de su desaparición y, su • Caso40 de Loaiza Tamayo vs Perú41
hija Josefa tenía alrededor de un mes de nacida.
La investigación por los hechos ocurridos duró Hechos
16 años en fase sumaria, al momento del cono-
cimiento del caso por la Corte IDH, no se tenían La señora María Elena Loaiza Tamayo
avances considerables ni se habían aclarado los profesora Universitaria, fue detenida sin orden
hechos (Corte IDH párrafo 43-46). previa el 6 de febrero de 1993, bajo las conjetu-
ras de que ella pertenecía al partido comunista
Dentro de los informes que presenta la del Perú “Sendero Luminoso”; estuvo 10 días
Comisión de Esclarecimiento Histórico –CEH- incomunicada, sin que se resolviera su situación
(Guatemala, Memoria del Silencio), a quien la jurídica (Corte IDH, 1997, capítulo x Lit. a, e).

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La convención Belém Do Pará un balance de su aplicación en la jurisprudencia 25
de la Corte Interamericana, a 16 años de su entrada en vigor

En efecto fue procesada y condenada por después de analizar los hechos y el expediente
el delito de traición a la patria el 2 de abril 1993, sostiene la imposibilidad material para probar
pero luego fue absuelta en agosto del mismo año. dicha violencia sexual (Corte IDH, 1997, capi-
Sin embargo no fue liberada sino que continuó tulo XIII párrafo 58).
privada de su libertad, y posteriormente su situa-
ción empeoró al ser vinculada a otro proceso por No obstante, en efecto son hechos que
los mismos hechos pero por con una calificación aunque no fueron probados, constituyen vio-
jurídica diferente, en esta ocasión por el delito lencia contra ésta mujer, de tipo físico por las
de terrorismo, condenada 20 años de pena pri- torturas y tratos crueles e inhumanos y de tipo
sión el 10 de octubre de 1994 (Corte IDH, 1997, sexual, de conformidad con la “Convención de
capitulo x Lit. f, g, h). Pena que cumplía en la Belém do Pará”. Sin embargo al momento de
cárcel el Pabellón “C” del Centro Penitenciario los hechos en 1993 la Convención no había sido
de Máxima Seguridad de Mujeres de Chorillos, aún ratificada. Por su parte la Corte en cuanto
hasta la fecha de la sentencia (1997) (Corte IDH, a la integridad física solo se refiere a los otros
1997, capítulo x Lit. k). hechos alegados como la “incomunicación du-
rante la detención […], el aislamiento en celda
Durante la detención, la integridad físi- reducida, sin ventilación ni luz natural, los gol-
ca de la señora Loaiza fue transgredida puesto pes y otros maltratos…” conductas que cons-
que le infringieron tratos crueles e inhumanos, tituyen formas de tratos crueles, inhumanos o
ella fue aislada en su celda reducida sin luz ni degradantes en el sentido del artículo 5.2 de la
ventilación, fue golpeada, maltratada con aho- Convención Americana. (Corte IDH, 1997, ca-
gamiento, intimidada con actos violentos, res- pitulo XIII párrafo 58).
tringida en las visitas con su familia etc. (Corte
IDH, 1997, capítulo XIII párrafo 58). • Caso42 De la Cruz Floréz vs. Perú43

Es considerable anotar que dentro de los Hechos


hechos presentados en la demanda (aunque no
fueron hechos que la Corte diera por probados) Los hechos probados por la Corte IDH
se precisa que durante la detención de la señora son que en el año 1990 la médica María Tere-
Loaiza “fue objeto de torturas, tratos crueles y sa de la Cruz Flores fue “detenida y procesada
degradantes” así mismo fue objeto de violencia por el delito de terrorismo en la modalidad de
sexual “por efectivos de la DINCOTE” (Corte asociación ilícita” (Corte IDH, 2004, párrafo
IDH, 1997, capítulo III lit. B). En su declara- 73.8) Debido a que ésta mujer fue encontrada
ción la víctima reitera su terrible experiencia dialogando y tratando de encubrir a un sujeto
en el primer lugar donde fue detenida. (Corte que instigaba a un paro armado (…) convocado
IDH, 1997, capítulo IX lit. e). Del mismo modo por la agrupación subversiva Sendero Lumino-
algunos de los testigos, dentro de ellos el señor so” (Corte IDH, 2004, párrafo 73.8). En efecto
Luis Guzmán Casas, dice que cuando estuvo la señora de la Cruz Flores “estuvo en el Penal
también detenido, ese mismo día estaban tortu- Castro Castro por cuatro meses, al cabo de los
rando a una mujer que no conoció pero que su cuales se le concedió la “libertad incondicio-
nombre era María; que escuchó decir a los poli- nal” el 26 de julio de 1990” (Corte IDH, 2004,
cías que fue violada pero que no pudo ver nada” párrafo 73.9).
(Corte IDH, 1997, capítulo IX lit. B). Otro tes-
timonio es el del señor abogado Víctor Álvarez Seguidamente y por hechos que no tuvie-
Pérez, quien informo que “María Elena Loayza ron nada que ver con la primera detención la mé-
Tamayo fue torturada y violada”. (Corte IDH, dica fue nuevamente privada de la libertad el 27
1997, capitulo IX lit. f). Sin embargo la Corte de marzo de 1996, sin la debida orden judicial.

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26 Diana Marcela Bustamante Arango - Paola Andrea Vásquez Henao

Finalmente en el año 2004 fue puesta en libertad es del parecer, que la Convención se podía apli-
el 09 de Julio. (Corte IDH, 2004, párrafo 73.47). car a partir del 4 junio 1996, día en que se rati-
ficó el Instrumento. No obstante la Corte señala
La señora María Teresa de la Cruz Flores que respecto de las limitaciones de las visitas
estuvo detenida en la cárcel de mujeres desde con sus hijos y las enfermedades que padeció,
1996 hasta el 2004 y, durante su detención, su- éstas implican una violación por parte del Esta-
frió varios padecimientos físicos, por los cuales do, del derecho a la integridad personal (artícu-
recibió tratamiento médico inadecuado, entre lo 5 de la Convención Americana) en perjuicio
ellos: síndrome menopáusico; infección del de la señora María Teresa de la Cruz Flores.
tracto urinario; hemorragia uterina disfuncio-
nal; pólipo endometrial; hiperplasia endome- Una interpretación extensiva que armoni-
trial; mastoidinea bilatera”, entre otras, (Corte ce el instrumento general Convención America-
IDH, 2004, párrafo 73.54). Adicionales a sus na sobre Derechos Humanos, con el instrumento
padecimientos físicos, soportó, otros de tipo especial, Convención Belém do Pará, se tendría
sicológico, puesto que durante su primer año que según el artículo 2, el Estado por medio de
de detención no pudo ver a sus hijos quienes sus agentes cometió violencia física y psicológi-
quedaron a cargo de su abuela de 80 años, sus ca contra la señora Cruz Flórez. Violencia físi-
familiares fueron objeto de humillaciones y di- ca puesto que se transgredió la integridad física
ficultades cuando la visitaban, y la situación como mujer, porque algunas de las enfermedades
económica de la familia se volvió muy precaria. padecidas fueron por su condición de mujer, debi-
do a su estructura biológica (derechos sexuales y
Dentro de los hechos señalados por la reproductivos). En cuanto a la violencia psicoló-
Corte IDH a la señora de la Cruz Flores durante gica de los hechos se desprende la imposición de
el primer año de retención no le fue permitido un sufrimiento adicional a la detención, al estar
ver a sus hijos desde el 27 marzo 1996 a 1997, separada de sus hijos durante el primer año, sien-
ni tampoco atendidas adecuadamente las enfer- do esta necesidad tan apreciada para una madre.
medades que sufrió durante toda su detención,
que por sus características solo las padecen las Aplicación de la convención belém do
mujeres. Estas situaciones la afectaron directa- pará después de su entrada en vigor
mente como mujer tanto por la atención indebi-
da de las enfermedades que se ocasionaron en Finalmente la posición de la Corte IDH
su calidad de mujer como por la limitación de en la interpretación de los hechos objeto de vio-
las visitas para compartir con sus hijos. lación, que ponderaron en tres casos el incum-
plimiento de las obligaciones internacionales a
Sin embargo en esta oportunidad la Corte cargo de los Estados Parte, de conformidad con
no aplica la CBDP, a pesar de que al momento lo consagrado en la CBDP; la Corte IDH acla-
de los hechos la Convención había sido ratifica- ra en qué casos no hay argumentos suficientes
da (4 de junio de 1996) por el Estado Peruano. para su aplicación y en cuáles se justifica la de-
Si bien la primera detención de la señora de la claratoria de responsabilidad internacional del
Cruz Flores sucedió en 1991, la segunda co- Estado por su trasgresión.
menzó el 27 marzo 1996 y se prolongó hasta el
año 2004 (Corte IDH, 2004, párrafo 73.54). En • Caso44 Perozo y otros vs. Venezuela45
consecuencia, el Estado había ratificado el ins-
trumento dos meses y unos días después de ini- Hechos
ciados los hechos, además de conformidad con
lo estudiado en otros casos, y en atención a que Dentro de los hechos que la Corte asume
las vulneraciones continuaban en el tiempo, se como probados para proferir la sentencia, se

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La convención Belém Do Pará un balance de su aplicación en la jurisprudencia 27
de la Corte Interamericana, a 16 años de su entrada en vigor

menciona que en Venezuela entre la época de instó abiertamente a que la ultrajen y a que la
octubre de 2001 y agosto de 2005, se vivió “una violen”. (Corte IDH Párrafo 293). Sin embar-
situación política y un contexto de “amenazas go la Corte no encuentra en los hechos de la
[y agresiones] a comunicadores sociales” (Cor- demanda los eventos referidos contra la señora
te IDH Párrafo 57), en este escenario se presen- Angola, tampoco fue aportada prueba de ello,
taron hechos de “agresión y amenaza continua- es decir, de tales publicaciones por los represen-
da contra periodistas, camarógrafos, fotógrafos tantes (Corte IDH Párrafo 294).
y demás trabajadores de los medios de comuni-
cación social.” (Corte IDH Párrafo 58). En con- Consideraciones sobre la Convención
creto se presentaron ataques contra el canal de de Belém do Pará en el presente caso
televisión Globovisión, sus trabajadores, insta-
laciones y bienes. (Corte IDH Párrafo 142). La Corte señala que los representantes se
basan principalmente en un criterio cuantita-
Los representantes indican que de “los tivo para alegar que los hechos de agresión se
hechos objeto del presente caso, […] el 80% produjeron “en razón del sexo” de las presuntas
fueron perpetrados contra mujeres periodis- víctimas.” En lo referente a la conducta dirigi-
tas de Globovisión”, (Corte IDH Párrafo 288). da contra las mujeres no detallaron “las razones
Añadieron que “de las 12 mujeres, algunas fue- y el modo” en que el Estado incurrió en dicha
ron agredidas de manera repetida en dos, tres conducta y, tampoco explicaron en qué medida
y hasta cuatro oportunidades”, y que por ello los hechos probados “resultaron agravados por
el Estado es “responsable de violar el derecho su condición de mujer”, o cuáles hechos y en qué
a la integridad personal de estas personas, “en forma fueron desproporcionados para las muje-
conexión con el artículo 7 de la Convención In- res. Tampoco fundamentaron sus alegatos bajo
teramericana para Prevenir y Sancionar y Erra- la existencia de actos que configuren “violencia
dicar la Violencia contra la Mujer..” (Corte IDH contra la mujer” según los artículos 1 y 2 de la
Convención de Belém do Pará, ni plantearon
Párrafo 288). Adicionalmente los representan-
cuales serían “las medidas apropiadas” que el
tes comentaron que “13 de las 44 presuntas
Estado debía adoptar y no lo hicieron según el
víctimas periodistas, que representan el 30% de
artículo 7.b) de la misma “para modificar o abolir
las personas agredidas, está constituida por mu-
leyes y reglamentos vigentes, o para modificar
jeres y alegan que las agresiones físicas y mo-
prácticas jurídicas o consuetudinarias que respal-
rales que sufrieron los periodistas “atendieron
den la persistencia o la tolerancia de la violencia
principalmente a la condición del sexo” (Corte
contra la mujer” (Corte IDH, párrafo 296).
IDH Párrafo 289).
En consecuencia, el Tribunal precisó que
Los representantes de las víctimas resal- “no toda violación de un derecho humano come-
taron dos hechos en especial, uno en contra la tida en perjuicio de una mujer conlleva necesa-
señora Yesenia Balza quien tenía tres meses de riamente una violación de las disposiciones de
embarazo, pero que no fue controvertido, y ade- la Convención de Belem do Pará.” Y adicional-
más no se detalló la forma en que la agresión de mente se refirió al hecho de que no obstante “las
la señora Balza tuviera “como motivo o finali- periodistas mujeres hayan sido agredidas en los
dad, o al menos alguna connotación o efecto, hechos de este caso, en todas las situaciones lo
basado en el sexo o género de la víctima o en fueron junto a sus compañeros hombres.” Y que
su condición de embarazo.” (Corte IDH Párra- no se demostró que las agresiones fueron “espe-
fo 293). El otro hecho se refiere a una situa- cialmente dirigidas contra las mujeres”, tampoco
ción en la que Carla Angola, fue “(…) referida expusieron las razones por las cuales “las muje-
en publicaciones en diarios oficialistas que la res se convirtieron en un mayor blanco de ataque
“denigra[ro]n como mujer […] además de que “[por su] sexo”. (Corte IDH Párrafo 295).

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28 Diana Marcela Bustamante Arango - Paola Andrea Vásquez Henao

• Caso46 Ríos y otros Vs. Venezuela47 cuantitativo” y reitera que “no toda violación
de un derecho humano cometida en perjuicio de
Hechos una mujer conlleva necesariamente una viola-
ción de las disposiciones de la Convención de
Según los hechos que la Corte toma en Belem do Pará.” Del mismo modo señala que
cuenta, se detalla que en Venezuela entre los las mujeres agredidas, lo fueron junto con sus
años 2001 y 2004, se presentaron actos cometi- compañeros hombres.
dos en perjuicio de los medios de comunicación
que no eran partidarios del gobierno oficial. • Caso48 González y otras vs. México49
Sobrevino “un clima de agresión y amenaza
continuada contra periodistas, camarógrafos, Hechos
fotógrafos y demás trabajadores de los medios
de comunicación social” (Corte IDH Párrafo Dentro de los hechos probados por la Cor-
46-47). En especial fueron agredidos por par- te, se relata que el día 6 de noviembre de 2001
ticulares los bienes, periodistas y miembros de fueron encontrados en un campo algodonero de
equipos reporteriles del canal Radio Caracas la ciudad de Juárez los cuerpos de tres mujeres
Televisión (RCTV) (Corte IDH Párrafo 108). llamadas Claudia Ivette González, Esmeral-
da Herrera Monreal y Laura Berenice Ramos
Los representantes de las presuntas vícti- Monárrez, de 20, 15 y 17 años respectivamente
mas señalaron que en este caso hay varias “mu- (Corte IDH, párrafos 165, 166, 167, 209). Los
jeres periodistas que fueron y son víctimas de las cuerpos de las mujeres presentaban rasgos de
agresiones y ataques”, se menciona el caso de la haber sido “violadas y abusadas con extrema
herida causada en la cara la señora Isabel Mava- crueldad” (Corte IDH, párrafo 210). A pesar de
rez, así como también el caso de Laura Caste- haber sido reportadas como desaparecidas por
llanos, “quien estando embarazada fue agredida sus madres y familiares, las autoridades juaren-
dentro de la Asamblea Nacional por grupos or- ses no realizaron las debidas diligencias para
ganizados de oficialistas, sufriendo gravísimas encontrarlas y esclarecer los hechos, debido a
consecuencias en la gestación que tenía, con alto que no se le daba la importancia que el caso re-
riesgo de calcificación de útero y perdida de lí- quería (Corte IDH, párrafos 146, 151).
quido amniótico” (Corte IDH, párr. 274).
Consideraciones sobre la Convención
De lo anterior concluyen en los alegatos de Belém do Pará en el presente caso
que los ataques de particulares y agentes del
Estado contra de las “presuntas víctimas mu- La Corte analiza “si la violencia que su-
jeres”, son ataques que se perpetraron también frieron las tres víctimas constituye violencia
“tomando en consideración el sexo” de aquéllas, contra la mujer según la Convención Ameri-
determinándose entonces como un ataque espe- cana y la Convención Belém do Pará” (párra-
cialmente dirigido contra las mujeres, reiterado fo 224). En consecuencia, se recuerda que “no
y tolerado por el Estado” (Corte IDH, párr. 275). toda violación de un derecho humano cometida
en perjuicio de una mujer conlleva necesaria-
Consideraciones sobre la Convención mente una violación de las disposiciones de la
de Belém do Pará en el presente caso Convención de Belém do Pará” (párrafo 227).
Sin embargo, la violencia ejercida en contra de
Este caso es similar al anterior (Caso Pe- las tres mujeres del caso transgrede dicha Con-
rozo y otros vs. Venezuela), y la Corte lo resuel- vención, puesto que, como lo indica la Corte,
ve de igual manera. En otras palabas, considera sobre los homicidios de mujeres en Ciudad Juá-
que los representantes se basan en un “criterio rez: “Se encuentran influenciados por una cul-

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La convención Belém Do Pará un balance de su aplicación en la jurisprudencia 29
de la Corte Interamericana, a 16 años de su entrada en vigor

tura de discriminación contra la mujer” (Cor- relación con el deber de garantía de los dere-
te IDH, párrafo 228). Se ha probado que las chos consagrados en los artículos 4.1, 5.1, 5.2
mujeres víctimas “sufrieron graves agresiones y 7.1 de la Convención Americana, en perjuicio
físicas y muy probablemente violencia sexual de las víctimas. Por cuanto el mismo Estado in-
de algún tipo antes de su muerte” (Corte IDH, dicó ante el Cedaw que la “cultura de discri-
párrafo 230). Por las razones anteriores, la Cor- minación” de la mujer “contribuyó a que [los]
te determina que las jóvenes del caso “fueron homicidios [de mujeres en Ciudad Juárez] no
víctimas de violencia contra la mujer según la fueran percibidos en sus inicios como un pro-
Convención Americana y la Convención Belém blema de magnitud importante para el cual se
do Pará” y se “considera que los homicidios de requerían acciones inmediatas y contundentes”
las víctimas fueron por razones de género y es- (Corte IDH, párrafo 398).
tán enmarcados dentro de un reconocido con-
texto de violencia contra la mujer en Ciudad Sobre los derechos de las niñas50 —puesto
Juárez” (Corte IDH, párrafo 231). que dos de las víctimas del caso eran menores
de edad, de 17 y 15 años respectivamente— la
En cuanto al deber de garantía, la Corte dice Corte plantea que “el Estado debe prestar espe-
que “el Estado está en el deber jurídico de preve- cial atención a las necesidades y los derechos de
nir, razonablemente, las violaciones de los dere- las presuntas víctimas en consideración a su con-
chos humanos, de investigar seriamente con los dición de niñas, como mujeres que pertenecen
medios a su alcance las violaciones que se hayan a un grupo en una situación vulnerable” (Corte
cometido” (Corte IDH, párrafo 236). En este caso, IDH, párrafo 408). En el caso concreto, el Estado
el Estado “no demostró haber adoptado normas o debía garantizar el hallazgo de las menores una
implementado las medidas necesarias, conforme vez se hubiera reportado la ausencia, con mayor
al artículo 2 de la Convención Americana y al ar- razón si se tenía conocimiento de un “contexto
tículo 7.c de la Convención Belém do Pará”, es específico en el que niñas estaban siendo desapa-
decir, no se implementaron medidas para “ofrecer recidas” (Corte IDH, párrafo 409).
una respuesta inmediata y eficaz” a las denuncias
de desaparición (Corte IDH, párrafo 285). En efecto, el Estado no demostró haber de-
sarrollado actividades encaminadas a una pronta
Respecto del deber de “investigar efec- búsqueda de las menores y, luego de su hallazgo,
tivamente los hechos”, la Corte considera que omitió realizar las investigaciones pertinentes.
“tiene alcances adicionales cuando se trata de
una mujer que sufre una muerte, maltrato o Conclusiones
afectación a su libertad personal en el marco de
un contexto general de violencia contra las mu- De lo expuesto se puede colegir que a pe-
jeres” (Corte IDH, párrafo 293). Sin embargo, sar de la reciente entrada en vigor de la Conven-
en este caso, plantea este Tribunal que “en mu- ción Interamericana para prevenir, sancionar y
chas investigaciones se observa la falta de con- erradicar la violencia contra la mujer, la Corte
templación de las agresiones a mujeres como Interamericana, en ejercicio de su función con-
parte de un fenómeno generalizado de violencia tenciosa, está construyendo los pilares herme-
de género” (Corte IDH, párrafo 370). néuticos que deberán permear la creación y la
interpretación del Derecho también en las sedes
La Corte considera que en el presente internas.
caso, la violencia contra la mujer constituyó
una forma de discriminación y declara que el Si bien la adopción de la CBDP constitu-
Estado violó el deber de no discriminación con- ye un hito en sí misma, se requiere el examen
tenido en el artículo 1.1 de la Convención, en del tema, puesto que tan solo ha comenzado

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un proceso de comprensión del fenómeno por por los Estados al reposar ya en el corpus Iuris
parte del poder judicial, y solo inscrito en este Interamericano, puesto que la conducta omisi-
marco se logrará garantizar la aplicación del va estatal pareciera consentir tales actuaciones
instrumento, no se puede desconocer que los delictivas.
fenómenos de la discriminación y la violencia
contra la mujer dan cuenta de una serie de prác- Así, la Corte refleja una interpretación del
ticas sociales que han definido las reglas del sa- Derecho acorde con un enfoque finalista, que
ber en cada momento histórico, asignando los hace hablar a la norma internacional en su ob-
roles en la sociedad a través de la legitimación jeto y fin de otorgar esa protección de la cual
incluso aquiescente del derecho: hombre/traba- estuvo marginada la mujer durante siglos pero
jador/propietario/esposo; mujer/ama de casa/ a la que hoy se le reconoce como sujeto jurídi-
esposa; designando y diferenciando claramente co femenino, con capacidad jurídica para exigir
los espacios de actuación para cada rol, en el del Estado o de terceros el respeto en términos
espacio de lo público el ser masculino y en el de igualdad y de diferencia por su razón de ser
espacio de lo privado, el ser femenino (Busta- mujer.
mante y Ambuila, 2010, p. 21), y en consecuen-
cia la comprensión de esta problemática debe El ejercicio de interpretación teleológica
contribuir al cambio cultural, comenzando por se observa en aquellos casos en que la Corte
la inclusión del enfoque de género, labor que IDH identifica el valor que la CBDP protege
de manera distinguida comienza la Corte con el objetivamente que no es otro que el respeto a la
fallo del Penal Castro Castro en el 2006. diferencia por razones de género. El fallo con-
tra Perú en el 2006 da comienzo a la inclusión
Así, el Tribunal Interamericano enfatiza del enfoque de género en las disertaciones del
con su accionar el ejercicio de criterios herme- Tribunal Interamericano, al valorar las situacio-
néuticos garantistas que permiten aplicaciones nes a las que fueron sometidas las reclusas del
normativas extensivas para la protección de los penal, que de manera contundente estuvieron
Derechos Humanos, dejando atrás la interpre- encaminadas a la afectación de estas por la sola
tación exegética, que defendiendo el baluarte razón de ser mujeres, como la desnudez públi-
del principio de legalidad, abrumaba las recla- ca y los golpes propinados a mujeres gestantes,
maciones por la materialidad del derecho con por ejemplo.
argumentos netamente formalistas, ejemplos
observados en los casos en los que se decreta Quizá sorprende la posición del conten-
la responsabilidad internacional de los Estados cioso internacional al otorgar un trato diferen-
guatemalteco y peruano por la violación en co- te a casos como Caballero Delgado y Santana,
nexidad de las obligaciones contenidas en la Loayza Tamayo o De la Cruz Flórez, entre otros
Convención objeto de análisis, incluso antes de analizados y en los cuales es posible realizar un
su entrada en vigor. ejercicio hermenéutico similar al realizado por
la Corte en sus sentencias de fondo en las Dos
En consecuencia, el criterio de la Corte Erres y Penal Castro Castro; sin embargo, es
IDH al declarar la responsabilidad internacio- necesario comprender también, desde la inter-
nal de los Estados de manera previa a la entra- pretación jurídica de la jurisprudencia de inte-
da en vigor del instrumento tiene fundamento reses, que en todo juicio existe en su trasfondo
en el deber que tienen estos de investigar todas por lo menos un conflicto bilateral de intereses
aquellas conductas que lesionan los derechos y, en consecuencia, la protección de un interés
de las personas que están bajo su jurisdicción, se realiza a costa de otros intereses (Heck, ci-
así como de garantizar el acceso a la justicia de tado por López Medina, 2006, p. 57). La Corte
las víctimas; obligaciones que son conocidas realiza en todo caso una ponderación entre los

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La convención Belém Do Pará un balance de su aplicación en la jurisprudencia 31
de la Corte Interamericana, a 16 años de su entrada en vigor

bienes jurídicos internacionales tutelados, re- bia por la Ley 248 de 1995, declarada exequible
conoce algunos derechos violados, pero no en por la Corte Constitucional mediante sentencia
todas las ocasiones orienta su disertación desde C-408/96 del 4 de septiembre de 1996, hecho el
el enfoque de género, esta es una dinámica, po- depósito de ratificación el 11/15/96.
dría decirse, en statu nascendi, que se presenta
a la fecha como prototipo en el Caso González 3
Estas afirmaciones tienen sustento en los
contra el Estado mexicano, ocasión en la que resultados de investigación publicados en Bus-
este tribunal estimó que el hecho internacional- tamante – Ambuila (2010). La deconstrucción
mente ilícito se configuró por el incumplimien- y reconstrucción del sujeto jurídico femenino,
to a la obligación internacional de investigar, de una reflexión práctica para el ejercicio del de-
permitir el acceso a la justicia de las víctimas recho. Universidad de San Buenaventura, sec-
y de prevenir actos que constituyen violencia cional Cali. págs.19-74.
contra la mujer, más aún cuando la negligencia
se observó de los mismos servidores públicos; 4
La antropóloga mexicana Marcela La-
la Corte reclamó al Estado mexicano su actua- garde explica de manera clara cómo el femici-
ción indiferente al no garantizar el acceso a la dio responde a la traducción literal de la palabra
justicia de las víctimas, con lo cual infringió el inglesa femicide (Radford y Russell et al. 1992),
deber de actuar con la debida diligencia. Esta pero ella ha propuesto y difundido el término
sentencia permite concluir que se puede hacer ‘feminicidio’ para nombrar algo más que el ho-
un buen balance y una excelente proyección de micidio de una mujer y entender el fenómeno
la Convención Belém do Pará a 16 años de su como todo un conjunto de violaciones a los de-
entrada en vigor. rechos humanos de las mujeres que contienen
crímenes y desapariciones de mujeres y que,
Notas [deben ser] identificados como crímenes de lesa
humanidad (Lagarde, 2008, p. 216). Esta es la
1
Proyecto de investigación Análisis ju- razón por la cual se escogió el término.
risprudencial sobre los pronunciamientos de la
Corte IDH respecto a los derechos humanos de 5
Para el caso fue el del Estado de Guate-
las mujeres en el marco del SIDH, inscrito en mala, el 1/04/95, siendo el primero el Estado de
la línea de investigación Proyecciones Jurídico- Bolivia, el 10/26/94.
políticas del derecho internacional y los dere-
chos humanos en el contexto norte-sur adscrito 6
Declaración sobre la Eliminación de la
al Grupo de Investigación Problemas Contem- Violencia contra la Mujer, Naciones Unidas, A/
poráneos del Derecho (Gipcode), Universidad RES/48/104 del 20 de diciembre de 1993
de San Buenaventura, seccional Cali (entidad
financiadora). 7
La CIM fue el primer organismo in-
tergubernamental en el mundo constituido ex-
Organización de Estados Americanos,
2
presamente para luchar por los derechos de la
Convención Interamericana para prevenir, san- mujer.
cionar y erradicar la violencia contra la mujer
‘Convención de Belém do Pará’, aprobada por 8
Convención Interamericana sobre la Na-
la Asamblea General mediante resolución A-61 cionalidad de la Mujer, aprobada en Colombia
del 06/09/94, adoptada y abierta a la firma y rati- a través de la Ley 77 de 1935; Convención In-
ficación o adhesión el 6 de septiembre de 1994, teramericana sobre la Concesión de los Dere-
en Belém do Pará (Brasil). Entró en vigor inter- chos Civiles a la Mujer, aprobada en Colombia
nacional el 3 de mayo de 1995 conforme al ar- mediante la Ley 8 de 1959; Convención Intera-
tículo 21 del instrumento. Aprobada en Colom- mericana sobre la Concesión de los Derechos

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Políticos a la Mujer, aprobada en Colombia piadas, incluyendo medidas de tipo legislati-


mediante la Ley 8 de 1959; Convención sobre vo, para modificar o abolir leyes y reglamentos
los Derechos Políticos de la Mujer aprobada en vigentes, o para modificar prácticas jurídicas o
Colombia a través de la Ley 35 de 1986. consuetudinarias que respalden la persistencia
o la tolerancia de la violencia contra la mujer;
9
Excepto Canadá y Estados Unidos. establecer procedimientos legales justos y efi-
caces para la mujer que haya sido sometida a
El género es una categoría conceptual
10
violencia, que incluyan, entre otros, medidas
de las ciencias sociales que permitió identificar de protección, un juicio oportuno y el acceso
a los y las académicas que investigan los pro- efectivo a tales procedimientos; establecer los
blemas de las desigualdades entre el hombre y mecanismos judiciales y administrativos ne-
la mujer, que los roles en una sociedad se han cesarios para asegurar que la mujer objeto de
asignado culturalmente, inicialmente basados violencia tenga acceso efectivo a resarcimiento,
en la afirmación de que tenían una base bioló- reparación del daño u otros medios de compen-
gica. Una aproximación para su definición es sación justos y eficaces; adoptar las disposicio-
ofrecida entre otras por J. Scott (1996), quien nes legislativas o de otra índole que sean nece-
considera que “el género es un elemento cons- sarias para hacer efectiva esta Convención. Y
titutivo de las relaciones sociales basadas en las de no hacer, abstenerse de cualquier acción o
diferencias que distinguen los sexos (…) así práctica de violencia contra la mujer y velar por
como una forma primaria de relaciones signi- que las autoridades, sus funcionarios, personal
ficantes de poder” (citado en Monárrez, 2007). y agentes e instituciones se comporten de con-
Para otras, el género responde a la lógica de un formidad con esta obligación” (artículo 7).
sistema binario que opone la hembra al macho,
lo masculino a lo femenino, rara vez sobre ba- 13
Artículo 12. Cualquier persona o gru-
ses de igualdad, sino, por lo general, en térmi- po de personas, o entidad no gubernamental
nos jerárquicos (Conway (et. al), 1998, p. 177). legalmente reconocida en uno o más Estados
miembros de la Organización, puede presentar
Convención para la Eliminación de to-
11
a la Comisión Interamericana de Derechos Hu-
das las formas de Discriminación Contra la Mu- manos peticiones que contengan denuncias o
jer (Cedaw), aprobada en Colombia a través de quejas de violación del artículo 7 de la presente
la Ley 51 del 2 de junio de 1981. Convención por un Estado Parte, y la Comisión
las considerará de acuerdo con las normas y los
Las obligaciones del Estado son de
12
requisitos de procedimiento para la presenta-
hacer y de no hacer, ejemplos de la primera: ción y consideración de peticiones estipulados
“Actuar con la debida diligencia para preve- en la Convención Americana sobre Derechos
nir, investigar y sancionar la violencia contra la Humanos y en el Estatuto y el Reglamento de
mujer; incluir en su legislación interna normas la Comisión Interamericana de Derechos Hu-
penales, civiles y administrativas, así como las manos.
de otra naturaleza que sean necesarias para pre-
venir, sancionar y erradicar la violencia contra 14
El proceso de formación de la norma in-
la mujer y adoptar las medidas administrativas ternacional comenzó en 1990 con las discusio-
apropiadas que sean del caso; adoptar medidas nes propuestas por la Comisión Interamericana
jurídicas para conminar al agresor a abstenerse de Mujeres, sobre la violencia de género, en
de hostigar, intimidar, amenazar, dañar o poner este espacio de discusión política se promovió y
en peligro la vida de la mujer de cualquier for- se obtuvo en 1994 la adopción por la Asamblea
ma que atente contra su integridad o perjudique General de la OEA de la Convención Belém do
su propiedad; tomar todas las medidas apro- Pará, entrada en vigor en 1995.

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La convención Belém Do Pará un balance de su aplicación en la jurisprudencia 33
de la Corte Interamericana, a 16 años de su entrada en vigor

Corte IDH. Sentencia de fondo del 24


15 26
Obligaciones del Estado: b. Actuar con
de noviembre de 2009. la debida diligencia para prevenir, investigar y
sancionar la violencia contra la mujer.
16
Fecha de ratificación 4 de abril de 1995.
Corte, IDH, sentencia de fondo del 8 de
27

17
Fuerza especial contra insurgente del diciembre de 1995.
ejército de Guatemala, los cuales en sus ope-
rativos ponían en práctica la extrema crueldad Fecha de ratificación 15 de noviembre
28

de sus métodos de entrenamiento (Corte IDH, de 1996.


párr. 2).
29
Hechos que la Corte da por ciertos lue-
18
Subrayas fuera de texto. go de analizar el material probatorio, testimo-
nios, declaraciones, dictámenes, peritajes, etc.
19
La Convención para sancionar la Tortu-
ra ratificada el 29 de enero de 1987 30
Es la narración que una persona hace de
los hechos por ella conocidos, para dar conoci-
20
La Corte IDH ha definido Corpus Iuris miento de los mismos a otros. (Liebman, citado
del derecho Internacional como “un conjunto por Parra Quijano, 228, 2002).
de instrumentos internacionales de contenido y
efectos jurídicos variados (tratados, convenios, 31
Subrayas fuera del texto.
resoluciones y declaraciones)”. Esta figura afir-
ma y desarrolla la aptitud del derecho interna- 32
Subrayas fuera de texto.
cional, “para regular las relaciones entre los Es-
tados y los seres humanos bajo sus respectivas 33
Ídem.
jurisdicciones” (opinión consultiva 16 de 1999)
34
Ídem.
Corte IDH, sentencia de fondo del 25
21

de Noviembre de 2006. 35
Corte IDH, sentencia de fondo del 27
de noviembre de 2003
22
Fecha de ratificación 4 de junio de 1996.
36
Fecha de ratificación 4 de abril de 1995.
23
“Cerca de 1000 efectivos de las fuer-
zas armadas, con la utilización de armas pesa- 37
En éste caso se evidencia el maltrato psi-
das; al mediodía usaron “gas de fósforo blanco cológico a la Señora Urrutia al repetirle constan-
contra las prisioneras mujeres encerradas en el temente que no volvería a ver a su hijo, la vulne-
pabellón 1A”, el cual causó “asfixia violenta” y ra como mujer madre, lo que genera un tipo de
“un sufrimiento excruciante: la sensación que la violencia psicológica por razón de su ser mujer.
tráquea se partía en dos y que el sistema respi-
ratorio se quemaba químicamente; piel y órga- Corte IDH, fallo del 26 de noviembre
38

nos internos quemaban como si hubiera sido un de 2008.


prendido en fuego. (...) Los explosivos causa-
ban ondas expansivas que herían los tímpanos 39
Fecha de ratificación 4 de abril de 1995.
en fuego” (Corte IDH, párr. 20).
40
Corte IDH, Sentencia de fondo del 17
24
Subrayas fuera de texto. de septiembre de 1997.

25
Ídem. 41
Fecha de ratificación 4 de junio de 1996.

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34 Diana Marcela Bustamante Arango - Paola Andrea Vásquez Henao

Corte IDH, Sentencia de Fondo del 18


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