El Peruano
1398 CASACIÓN
dirigidos a la justificación del incremento del monto de la prima. 5.6.
Respecto del argumento del recurrente dirigido a que el hecho
denunciado ya había sido materia de análisis en la Resolución N°
69-2012/SC2-INDECOPI, recaída en el Expediente N° 798-2006/
CPC, por lo que una nueva valoración involucraría una afectación
del principio del non bis in ídem; debe señalarse –como bien ya se
expuso– que la denuncia que presentara el administrado con fecha
diecinueve de abril del dos mil diez, estaba dirigida, entre otros
aspectos, a denunciar la falta de justificación del incremento del
monto de la prima respecto de su póliza correspondiente al período
dos mil diez – dos mil once; sin embargo, en la Resolución N°
0069-2012/SC2-INDECOPI se concluyó que la empresa
aseguradora cumplió con informar a Herbert Burger las razones de
las variaciones del monto de sus primas; con lo cual se observa
que no se emitió pronunciamiento en torno al referido
cuestionamiento del denunciante. 5.7. Cabe agregar que la
finalidad de la Ley de Protección al Consumidor es que los
consumidores accedan a productos y servicios idóneos, así como
gocen de los derechos y los mecanismos efectivos para su
protección, reduciendo la asimetría informativa, corrigiendo,
previniendo o eliminando las conductas y prácticas que afecten sus
legítimos intereses; lo cual evidentemente involucra la información
completa, necesaria y pertinente de los servicios a contratar, más
aún si estos están referidos a la vida y a la salud como derechos
inherentes y fundamentales del ser humano. 5.8. En ese sentido,
se concluye que la sentencia de vista no contiene una infracción
normativa al numeral 10 del artículo 230 de la Ley N° 27444 – Ley
de Procedimiento Administrativo General, por lo que corresponde
declarar infundado el recurso de casación interpuesto por el
Indecopi. VII. DECISIÓN: Por los fundamentos expresados, con lo
expuesto en el dictamen del Fiscal Supremo en lo contencioso
administrativo, y en aplicación de lo establecido en el artículo 397
del Código Procesal Civil, declararon: INFUNDADO el recurso de
casación de fecha veintisiete de junio de dos mil diecisiete,
interpuesto por el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia
y de Protección de la Propiedad Intelectual – Indecopi; en
consecuencia, NO CASARON la sentencia de vista comprendida
en la resolución número treinta y uno, de fecha nueve de junio de
dos mil dieciséis; DISPUSIERON la publicación de la presente
resolución en el diario oficial “El Peruano”; en el proceso seguido
por Herbert Curt Burger Goesch contra el recurrente y Mapfre Perú
Compañía de Seguros y Reaseguros Sociedad Anónima, sobre
nulidad de resolución administrativa; y devolvieron los actuados.
Interviene como Juez Supremo ponente: Cartolin Pastor. S.S.
VINATEA MEDINA, WONG ABAD, TOLEDO TORIBIO, CARTOLIN
PASTOR, BUSTAMANTE ZEGARRA
1
Obrante a fojas 957 del expediente principal.
2
Obrante a fojas 912 del expediente principal.
3
Obrante a fojas 764 del expediente principal.
4
Obrante a fojas 1 del primer tomo del expediente administrativo.
5
Obrante a fojas 147 del primer tomo del expediente administrativo.
6
Obrante a fojas 261 del primer tomo del expediente administrativo.
7
Obrante a fojas 267 del primer tomo del expediente administrativo.
8
Obrante a fojas 283 del primer tomo del expediente administrativo.
9
Obrante a fojas 161 del primer tomo del expediente administrativo.
10
Obrante a fojas 219 del primer tomo del expediente administrativo.
11
Obrante a fojas 150 del segundo tomo del expediente administrativo.
12
Obrante a fojas 160 del segundo tomo del expediente administrativo.
13
Obrante a fojas 353 del expediente principal (tomo 1).
14
Obrante a fojas 59 del expediente principal (tomo 1).
15
Obrante a fojas 426 del expediente principal.
16
Obrante a fojas 462 del expediente principal.
17
Obrante a fojas 764 del expediente principal (tomo 2).
18
Obrante a fojas 787 del expediente principal.
19
Obrante a fojas 912 del expediente principal.
20
Obrante a fojas 253 del cuaderno de casación.
21
Obrante a fojas 262 del cuaderno de casación.
22
Juan Carlos Hitters. (1998). Técnicas de los recursos extraordinarios y de la
casación. La Plata – Argentina; p. 161.
23
De Pina, Rafael. (1940). Principios de Derecho Procesal Civil. México: Ediciones
Jurídicas Hispano Americana; p. 222.
24
Escobar Fornos, Iván. (1990). Introducción al proceso. Bogotá: Editorial Temis; p.
241.
25
Obrante a fojas 26 del segundo tomo del expediente administrativo.
26
Guzmán Napurí, Christian. (2016). Manual del Procedimiento Administrativo
General. Lima, Perú: Instituto Pacifico; p. 676.
27
Morón Urbina, Juan Carlos. (2011). Comentarios a la Ley del Procedimiento
Administrativo General. Lima, Perú: Gaceta Jurídica; pp. 729-730.
C-1820464-50
CASACIÓN N° 13417-2017 LIMA
Conforme se desprende del artículo 49 del Texto Único Ordenado
del Código Tributario, el único supuesto que admite la norma para
establecer la configuración de la renuncia tácita a la prescripción
ganada es cuando el deudor tributario pague voluntariamente
su deuda tributaria; por consiguiente, no resulta aplicable lo
dispuesto en el artículo 1991 del Código Civil –norma que regula
Lunes 4 de noviembre de 2019
las relaciones civiles entre particulares–, ya que ello implicaría
extender un supuesto no previsto por la norma especial.
Lima, veintiuno de noviembre de dos mil dieciocho.
LA TERCERA SALA DE DERECHO CONSTITUCIONAL Y
SOCIAL TRANSITORIA DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA
DE LA REPÚBLICA: I. VISTA: La causa número trece mil
cuatrocientos diecisiete – dos mil diecisiete, en audiencia pública
llevada a cabo en la fecha, integrada por los señores Jueces
Supremos Vinatea Medina, Wong Abad, Toledo Toribio, Cartolin
Pastor y Bustamante Zegarra; de conformidad con el dictamen
del Fiscal Supremo en lo contencioso administrativo, y luego de
verificada la votación con arreglo a ley, emite la siguiente
sentencia: II. MATERIA DEL RECURSO: Es de conocimiento de
esta Sala Suprema el recurso de casación de fecha veintiuno de
abril de dos mil diecisiete1, interpuesto por la Procuraduría
Pública a cargo de los asuntos judiciales del Ministerio de
Economía y Finanzas, en representación del Tribunal Fiscal,
contra la sentencia de vista de fecha catorce de marzo de dos mil
diecisiete2, que revocó la sentencia apelada de fecha veintiséis de
octubre de dos mil quince3, que declaró infundada la demanda; y
reformándola, declaró fundada la demanda; en el proceso
seguido por la Superintendencia Nacional de Aduanas y de
Administración Tributaria (en adelante “Sunat”) contra el
Tribunal Fiscal y Óscar Germán Contreras Morales (en adelante
“Óscar Contreras”). III. ANTECEDENTES DEL PROCESO 3.1.
De lo actuado en la vía administrativa Se aprecia en el
expediente administrativo lo siguiente: 1) A través de la Solicitud
de Fraccionamiento N° 0630320018697, de fecha trece de
octubre de dos mil seis4, Óscar Contreras requirió acogerse al
fraccionamiento de su deuda tributaria ascendiente al monto de
quince mil setecientos cincuenta y dos con 63/100 soles
(S/15,752.63), correspondiente a la deuda autoliquidada por
concepto de los pagos a cuenta del impuesto a la renta en los
periodos de marzo y octubre de dos mil uno (2001), enero, febrero
y abril de dos mil dos (2002), enero, febrero y julio de dos mil tres
(2003), abril, agosto, septiembre y noviembre de dos mil cuatro
(2004), y enero a marzo de dos mil cinco (2005); del impuesto
general a las ventas correspondiente a los periodos tributarios de
noviembre y diciembre de dos mil uno (2001), enero a abril y junio
a diciembre de dos mil dos (2002), enero a diciembre de dos mil
tres (2003), enero, febrero, abril, junio a agosto y octubre a
diciembre de dos mil cuatro (2004), enero a marzo, mayo y julio a
diciembre de dos mil cinco (2005), enero a julio de dos mil seis
(2006); la deuda contenida en la Orden de Pago N° 063-01-
0071750 emitida por la regularización del impuesto a la renta del
ejercicio gravable de dos mil uno (2001), además de las
provenientes por la regularización del impuesto a la renta de los
ejercicios de dos mil tres (2003) a dos mil cinco (2005); y las
deudas que recaen en las Resoluciones de Multa N.os 064-002-
0011661 y 064-02-0003205, emitidas por la comisión de la
infracción tipificada en el numeral 1 del artículo 174 del Texto
Único Ordenado del Código Tributario, así como las Resoluciones
de Multa N.os 063-002-0020661 y 063-002-0025455, por la
infracción contenida en el numeral 1 del artículo 176 del citado
cuerpo normativo. 2) En atención a ello, la Intendencia Regional
de La Libertad de la Sunat resolvió aprobar la solicitud de Óscar
Contreras, para lo cual emitió la Resolución de Intendencia N°
0630170021604, de fecha dieciséis de octubre de dos mil seis5. 3)
Posteriormente, mediante la Resolución de Intendencia N°
0630170025036, de fecha catorce de junio de dos mil siete6, se
declaró la pérdida del fraccionamiento otorgado sin garantías a
dicho deudor tributario, toda vez que no cumplió con los requisitos
indicados en el Anexo N° 1 (incumplir pago de cuotas) a partir del
uno de junio de dos mil siete. 4) Por el escrito de fecha tres de
febrero de dos mil catorce7, Óscar Contreras demandada solicitó
la prescripción de la deuda tributaria contenida en la Resolución
de Intendencia N° 0630170025036, requerimiento que fue
resuelto a través de la Resolución de Intendencia N°
0630200002882/SUNAT, de fecha treinta y uno de marzo de dos
mil catorce8, que lo declaró improcedente y ordenó proseguir con
su cobranza actualizada. 5) Frente a esta última decisión, con
fecha dos de mayo de dos mil catorce9, el administrado interpuso
recurso de apelación, lo que motivó a que el Tribunal Fiscal
emitiera la Resolución N° 13688-10-2014, de fecha trece de
noviembre de dos mil catorce10, en la cual resolvió revocar la
Resolución de Intendencia N° 0630200002882/SUNAT en el
extremo referido a los pagos a cuenta del impuesto a la renta de
marzo a octubre de dos mil uno (2001) e impuesto general a las
ventas de noviembre del mismo año, al considerar que la acción
de la Administración Tributaria para exigir el pago de las deudas
señaladas se encontraba prescrita; y confirmó la impugnada en lo
demás que contiene. 3.2. De lo actuado en sede judicial 1)
Objeto de la pretensión demandada De la revisión de autos se
observa que por el escrito de fecha seis de marzo de dos mil
quince11, la Sunat interpuso demanda contencioso administrativa
contra el Tribunal Fiscal y Óscar Contreras, postulando, como
pretensión principal, que se declare la nulidad parcial de la
El Peruano
Lunes 4 de noviembre de 2019 CASACIÓN
Resolución del Tribunal Fiscal N° 13688-10-2014 en cuanto
dispuso revocar la Resolución de Intendencia N° 0630200002882/
SUNAT en el extremo referido a la prescripción vinculada a la
deuda por pagos a cuenta del impuesto a la renta de marzo a
octubre de dos mil uno (2001) e impuesto general a las ventas de
noviembre del mismo año; y como pretensión accesoria, que al
declararse fundada la pretensión principal, se ordene al Tribunal
Fiscal emitir una nueva resolución confirmando la Resolución de
Intendencia N° 0630200002882/SUNAT, que declaró
improcedente la solicitud de prescripción presentada por el
contribuyente, respecto a la obligación tributaria expresada en la
pretensión principal. La entidad demandante expuso que el pago
a cuenta del impuesto a la renta no es, por su propia naturaleza,
un tributo, y mucho menos un impuesto que se encuentre
subordinado a él, pues esta deuda únicamente existe porque el
sujeto es contribuyente del referido tributo y es exigible legalmente
hasta el momento en que se determine la obligación o venza el
plazo para presentar la declaración jurada correspondiente; por
ello, manifestó que al tener un carácter accesorio e instrumental,
los pagos a cuenta se encuentran sujetos al mismo término de
prescripción que la obligación derivada de la declaración del
impuesto a la renta anual, esto es, el plazo previsto en el numeral
1 y no el 2 del artículo 44 del Código Tributario. De igual manera,
señaló que los pagos a cuenta constituyen anticipos de tributos
que se devengarán al cierre del ejercicio económico gravable y,
en efecto, solo resultan exigibles íntegramente recién con el
abono de regularización a efectuarse en mérito de la declaración
anual del impuesto a la renta; por tal razón, adujo que en el caso
concreto se tendría como fecha de inicio del cómputo del plazo de
prescripción el uno de enero de dos mil tres y como fecha de
vencimiento del mismo, el uno de enero de dos mil siete, y debido
a que dicho plazo fue interrumpido con la solicitud de prescripción
de fecha trece de octubre de dos mil seis, tal deuda no habría
prescrito. Con relación a la deuda tributaria por concepto del
impuesto general a las ventas del periodo de noviembre de dos
mil uno (2001), alegó que no existe una norma del Código
Tributario ni de ningún otro texto legislativo, que señale que la
renuncia tácita a la prescripción extintiva ya ganada no resulta
aplicable en materia tributaria, ni que establezca que las normas
del Código Civil que sí regulan esa renuncia no son
supletoriamente aplicables en el ámbito tributario, puesto que
cuando el Código Tributario ha querido establecer diferencias con
el Código Civil respecto a la prescripción, lo ha hecho de manera
expresa, como en el caso de la regulación de los plazos que
configuran la prescripción, así como los supuestos de interrupción
y suspensión. Por consiguiente, sostuvo que no puede afirmarse
que el aparente silencio del Código Tributario sobre la renuncia
tácita de la prescripción ya ganada implica que las normas del
Código Civil, que sí la contemplan, no resulten aplicables en el
ámbito tributario. Agregó que la Norma IX del Título Preliminar del
Código Tributario permite remitirse a otras normas para regular
supuestos como el analizado, por lo que realmente no se estaría
ante silencio alguno, sino ante una remisión o coordinación
normativa, resultando aplicable, por tanto, el artículo 1991 del
Código Civil. 2) Fundamentos de la sentencia de primera
instancia A través de la sentencia comprendida en la resolución
número seis, de fecha veintiséis de octubre de dos mil quince, el
Décimo Octavo Juzgado Especializado en lo Contencioso
Administrativo con Subespecialidad en Temas Tributarios y
Aduaneros de la Corte Superior de Justicia de Lima declaró
infundada la demanda. Al respecto, la judicatura señaló que si
bien es cierto los pagos a cuenta del impuesto a la renta deben su
existencia a este tributo, no por ello puede otorgárseles el carácter
de accesorio, pues existen notables diferencias entre ambos,
como la base del cálculo, la determinación de la obligación y la
exigibilidad de su cumplimiento, lo que las convierte en
obligaciones independientes. Sobre el particular, refirió que en el
caso del impuesto a la renta la determinación de la obligación
debe realizarse mediante una declaración anual, mientras que los
pagos a cuenta requieren de una declaración mensual, motivo por
el cual no resultaría aplicable lo dispuesto en el numeral 1 del
artículo 44 del Código Tributario, sino lo glosado en su numeral 2,
el cual si bien versa sobre tributos, incluiría a las obligaciones que
derivan del impuesto a la renta. Respecto al impuesto general a
las ventas, estimó que el artículo 49 del Código Tributario no
alude a la renuncia tácita de la prescripción ya ganada, pues solo
establece que operada la prescripción frente al pago parcial de la
deuda, se negará la devolución de lo pagado. Agregó que la
prescripción extingue la acción pero no el derecho sobre la deuda,
razón por la cual la Administración Tributaria no tendría la
obligación de efectuar la devolución; asimismo, refirió que ello no
afectaría de ningún modo a la prescripción, debido a que si el
pago es parcial la Administración seguiría sin poder exigir el pago
de lo restante; y bajo esa premisa, alegó que el fraccionamiento
de la deuda es en sí una facilidad para el cumplimiento de la
obligación tributaria por medio de un reconocimiento voluntario
del total de la deuda o de una parte de ella, sin que ello signifique
la pérdida de la prescripción ya ganada. Por otro lado, consideró
que pese a la posibilidad de aplicar lo dispuesto en el artículo
1399
1991 del Código Civil, la normatividad tributaria también desarrolla
el tema de la prescripción estableciendo sus propios plazos,
causales de suspensión e interrupción, así como el trámite para
solicitarlo; por tal motivo, según expresó, no se justifica la
aplicación supletoria del ordenamiento legal de índole civil pues
desnaturalizaría el tema de la prescripción tributaria; de ahí que
concluyó que no se cumple con lo glosado en la Norma IX del
Título Preliminar del Código Tributario, y que no existe
contravención a lo dispuesto en el Código Civil debido a que no es
aplicable al presente caso. 3) Fundamentos de la sentencia de
vista Ante el recurso de apelación presentado por la Sunat con
fecha seis de noviembre de dos mil quince12, la Séptima Sala
Especializada en lo Contencioso Administrativo con
Subespecialidad en Temas Tributarios y Aduaneros de la Corte
Superior de Justicia de Lima, mediante la sentencia de vista
recaída en la resolución número trece, de fecha catorce de marzo
de dos mil diecisiete, resolvió revocar la sentencia de primera
instancia que declaró infundada la demanda; y reformándola,
declaró fundada la demanda, en consecuencia, nula la Resolución
del Tribunal Fiscal N° 13688-10-2014, que revocó la Resolución
de Intendencia N° 0630200002882/SUNAT en el extremo referido
a los pagos a cuenta del impuesto a la renta de marzo a octubre
de dos mil uno (2001) e impuesto general a las ventas de
noviembre del mismo año, y dispuso que el Tribunal Fiscal emita
una nueva resolución que confirme la acotada resolución de
intendencia. La Sala Superior sostuvo como parte de sus
argumentos, que los pagos a cuenta tienen naturaleza de
obligación tributaria, pues conforme a lo estipulado en el artículo
85 del Texto Único Ordenado de la Ley del Impuesto a la Renta,
aprobado por el Decreto Supremo N° 179-2004-EF, se obliga a
los generadores de renta de tercera categoría a abonar una cierta
suma de dinero mensual con carácter definitivo por cuanto
extingue dicha obligación, procedimiento que en caso de no ser
realizado dentro del plazo de los doce primeros días hábiles del
mes siguiente, según lo dispuesto en el literal b) del artículo 29
del del Código Tributario, aprobado por el Decreto Supremo N°
135-99-EF (aplicable al caso por temporalidad), generará un
interés moratorio; con ello, según expuso, se evidencia la
existencia de un sujeto pasivo, una obligación de dar suma de
dinero y la existencia de vínculo jurídico. Por tal razón, determinó
que las prestaciones pecuniarias de los pagos a cuenta sí califican
como tributos, poseyendo naturaleza autónoma e independiente
respecto del impuesto a la renta, aunque relacionadas a la
obligación tributaria de este último, que se devenga al final del
periodo. Acerca del plazo prescriptorio, expresó que en virtud de
la Norma IX del Texto Único Ordenado del Código Tributario,
resulta aplicable lo previsto en el artículo 1991 del Código Civil,
del cual se deduce la existencia de dos aspectos que deben
concurrir para que opere la renuncia a la prescripción ya ganada,
siendo estos la voluntad manifiesta del deudor de no ser
beneficiado por la prescripción y que exista un reconocimiento de
la obligación tributaria. Así, la Sala de Mérito adujo que en materia
tributaria se configura la renuncia tácita a la prescripción cuando
el deudor tributario solicita el aplazamiento o fraccionamiento de
deudas tributarias ya prescritas, pues ello conlleva, en estricto, un
reconocimiento e identificación de la deuda pendiente de pago y
su compromiso a la cancelación en el plazo determinado por la
Administración Tributaria, de modo tal que la oposición posterior
no es atendible debido a que la renuncia realizada elimina el
tiempo transcurrido. En consecuencia, consideró que a la fecha
en que se efectuó la Solicitud de Fraccionamiento N°
0630320018697 (trece de octubre de dos mil seis) ya había
operado la prescripción de la facultad de la Administración
Tributaria para exigir el cumplimiento del pago de las obligaciones
tributarias; sin embargo, al estimar que dicha solicitud significó
una renuncia tácita a la prescripción ya ganada, de conformidad
con lo establecido en el artículo 1991 del Código Civil, con lo cual
se habría iniciado un nuevo plazo que debía computarse a partir
del día siguiente de acaecido el acto, concluyó que a la fecha de
presentación de la solicitud de prescripción (tres de febrero de
dos mil catorce) la deuda tributaria materia de controversia no se
encontraba prescrita. Por último, indicó que resulta factible aplicar
supletoriamente las normas del Código Civil relativas a la renuncia
tácita de la prescripción a supuestos de hechos distintos, toda vez
que en el artículo 49 del Código Tributario no se dispone que el
pago voluntario de una obligación prescrita sea el único supuesto
de renuncia tácita a la prescripción ganada. IV. RECURSO DE
CASACIÓN: Mediante la resolución de fecha cinco de octubre de
dos mil diecisiete13 se declaró procedente el recurso casatorio
interpuesto por el Tribunal Fiscal, en mérito a las siguientes
infracciones normativas: a) Infracción normativa por aplicación
indebida del artículo 1991 del Código Civil Señala que en el
presente proceso se discute la validez de una resolución
administrativa referida a obligaciones tributarias, de ahí que las
normas aplicables al caso son las contenidas en el Código
Tributario, pues de acuerdo al principio de especialidad, la norma
específica prima sobre la norma general. Asimismo, arguye que la
aplicación de lo establecido en el artículo 1991 del Código Civil no
se condice con lo estipulado en la Norma IX del Título Preliminar

1400 CASACIÓN
del Texto Único Ordenado del Código Tributario, pues
desnaturalizaría las normas tributarias que regulan la prescripción;
motivo por el cual sostiene que el dispositivo legal presuntamente
infringido, al no ser una norma especial para efectos tributarios y
existir normas especiales, no correspondía ser aplicado para la
solución de la controversia. Adicionalmente, indica que la solicitud
de aplazamiento y fraccionamiento está contenida en el artículo
45 de la norma tributaria como causal de interrupción de la
prescripción cuando aún está vigente la acción de la
Administración Tributaria; y consecuentemente, afirma que dicha
solicitud no elimina el tiempo previo de prescripción de la deuda
tributaria, pero sí lo haría en el supuesto de que se presente
dentro del plazo previsto en el artículo 43 del Texto Único
Ordenado del Código Tributario. b) Infracción normativa por
inaplicación de los artículos 48 y 49 del Texto Único Ordenado
del Código Tributario Alega que resulta aplicable lo dispuesto en
el artículo 48 del Texto Único Ordenado del Código Tributario,
toda vez que la solicitud de prescripción del contribuyente se
presentó dentro del procedimiento administrativo una vez operada
la prescripción de su deuda tributaria, por lo que no sería posible
afirmar que existiría renuncia expresa o tácita a la prescripción ya
ganada, pues la única forma de renuncia que considera la
normatividad tributaria es el pago de la obligación tributaria, lo
cual no se ha dado en el caso de autos. De igual forma, estima
que corresponde aplicar lo previsto en el artículo 49 del aludido
código, ya que de esa manera la Sala Superior hubiera concluido
que la única forma de renunciar a la prescripción ya ganada es
cuando el beneficiario de la misma paga voluntariamente su
deuda tributaria. Por consiguiente, asevera que la solicitud de
acogimiento al fraccionamiento de la deuda tributaria presentada
por el contribuyente, al no constituir el pago de su deuda, no
significa la determinación de una renuncia tácita a la prescripción
ganada, por cuanto ello solo se refiere a un pago diferido. V.
DICTAMEN FISCAL SUPREMO El Fiscal Supremo en lo
contencioso administrativo, mediante el Dictamen N°
861-2018-MP-FN-FSCA14, opina que se declare fundado el
recurso de casación interpuesto contra la sentencia de vista. VI.
CONSIDERACIONES DE LA SALA SUPREMA: PRIMERO: Del
recurso de casación 1.1. El recurso de casación tiene como
fines esenciales la correcta aplicación e interpretación del
derecho objetivo y la unificación de la jurisprudencia nacional de
la Corte Suprema de Justicia, conforme se señala en el artículo
384 del Código Procesal Civil. 1.2. Respecto a la causal de
infracción normativa, según Rafael de Pina: “El recurso de
casación ha de fundarse en motivos previamente señalados en la
ley. Puede interponerse por infracción de ley o por quebrantamiento
de forma. Los motivos de casación por infracción de ley se
refieren a la violación en el fallo de leyes que debieran aplicarse
al caso, a la falta de congruencia de la resolución judicial con las
pretensiones deducidas por las partes, a la falta de competencia
etc.; los motivos de la casación por quebrantamiento de forma
afectan (…) a infracciones en el procedimiento”15. Así, se entiende
que la causal de infracción normativa supone una violación a la
ley, que puede presentarse en la forma o en el fondo16. 1.3. De
acuerdo con ello, el recurso de casación es un medio impugnatorio
de carácter excepcional, cuya concesión y presupuestos de
admisión y procedencia están vinculados a los “fines esenciales”
para los cuales se ha previsto, esto es, la correcta aplicación e
interpretación del derecho objetivo y la unificación de la
jurisprudencia nacional por la Corte Suprema de Justicia, como
se señala en el primer punto del presente considerando; siendo
así, sus decisiones en el sistema jurídico del país tienen efectos
multiplicadores y, a su vez, permiten la estabilidad jurídica y el
desarrollo de la nación, de allí la importancia de aquellas. 1.4. Del
mismo modo, corresponde mencionar, de manera preliminar, que
la función nomofiláctica del recurso de casación garantiza que los
Tribunales Supremos sean los encargados de salvaguardar el
respeto del órgano jurisdiccional al derecho objetivo, evitando así
cualquier tipo de afectación a normas jurídicas materiales y
procesales, así como procurando, conforme se determina en el
artículo 384 del Código Procesal Civil, su adecuada aplicación al
caso concreto. SEGUNDO: Cuestión fáctica asentada en sede
judicial En principio, resulta conveniente precisar que en sede
casatoria no se evalúan pruebas ni se introducen hechos que no
hayan sido discutidos y dilucidados a nivel administrativo y
judicial; por lo tanto, se procede a señalar la situación fáctica que
ha quedado sentada durante el proceso: 1) Mediante la Solicitud
de Fraccionamiento N° 0630320018697, de fecha trece de
octubre de dos mil seis, Óscar Contreras requirió acogerse al
fraccionamiento de su deuda tributaria ascendente al monto
de quince mil setecientos cincuenta y dos con 63/100 soles
(S/15,752.63); siendo aprobada por la Resolución de Intendencia
N° 0630170021604, de fecha dieciséis de octubre de dos mil seis.
2) Luego, a través de la Resolución de Intendencia N°
0630170025036, de fecha catorce de junio de dos mil siete, se
declaró la pérdida del fraccionamiento otorgado sin garantías
al referido deudor tributario, puesto que no cumplió con los
requisitos indicados en el Anexo N° 1 (incumplimiento del pago de
cuotas) a partir del uno de junio de dos mil siete. 3) Por el escrito
El Peruano
Lunes 4 de noviembre de 2019
de fecha tres de febrero de dos mil catorce, el contribuyente
peticionó que se declare la prescripción de la deuda contenida
en la Resolución de Intendencia N° 0630170025036; sin embargo,
a través de la Resolución de Intendencia N° 0630200002882/
SUNAT, de fecha treinta y uno de marzo de dos mil catorce, se
declaró improcedente dicha solicitud y, en consecuencia, se
ordenó proseguir con la cobranza actualizada de la deuda. 4)
Contra esta última decisión, el Óscar Contreras interpuso recurso
de apelación, de fecha dos de mayo de dos mil catorce, el cual fue
resuelto por medio de la Resolución del Tribunal Fiscal N° 13688-
10-2014, de fecha trece de noviembre de dos mil catorce, que
revocó en parte la resolución impugnada, en el extremo
referido a los pagos a cuenta del impuesto a la renta de marzo a
octubre de dos mil uno (2001) e impuesto general a las ventas de
noviembre del mismo año; y la confirmó en lo demás que contiene.
TERCERO: Cuestión en debate La cuestión controvertida
consiste en determinar si la solicitud de fraccionamiento de fecha
trece de octubre de dos mil seis constituye un acto incompatible
con la voluntad de favorecerse con la prescripción ya ganada, en
aplicación de lo dispuesto en el artículo 1991 del Código Civil
(norma referida a la renuncia tácita a la prescripción ganada),
respecto a las deudas a que se ha hecho referencia en el punto 4
de la cuestión fáctica asentada en sede judicial. CUARTO:
Análisis de la infracción normativa denunciada En el presente
caso, el recurso de casación materia de análisis ha sido declarado
procedente en mérito a las infracciones normativas de carácter
material, referidas a la aplicación indebida del artículo 1991 del
Código Civil y la inaplicación de los artículos 48 y 49 del Texto
Único Ordenado del Código Tributario, por lo que se procederá a
examinarlas, no sin antes analizar propiamente el principio de
especialidad y la figura de la prescripción extintiva, ambas en
materia tributaria. QUINTO: Aplicación del principio de
especialidad de las normas en materia tributaria 5.1. Por
“conflicto normativo” se entiende a la situación en que dos o más
normas regulan simultáneamente el mismo supuesto de hecho,
de modo incompatible entre sí, siendo una problemática
determinar cuál es aquella aplicable al caso; ante ello, “[l]a Teoría
General del Derecho ha propuesto tres criterios sucesivos para la
determinación de la norma aplicable a un caso en concreto: la
jerarquía (norma de rango superior prima sobre norma de rango
inferior), la especialidad (norma especial prima sobre norma
general) y la temporalidad (norma posterior prima sobre norma
anterior)”17 (énfasis agregado). 5.2. Sobre la primacía de la norma
especial sobre una norma de carácter general, en la Norma IX del
Título Preliminar del Código Tributario, aprobado por el Decreto
Supremo N° 135-99-EF, aplicable en razón de temporalidad, se
establece: “En lo no previsto por este Código o en otras
normas tributarias podrán aplicarse normas distintas a las
tributarias siempre que no se les opongan ni las
desnaturalicen. Supletoriamente se aplicarán los Principios del
Derecho Tributario, o en su defecto, los Principios del Derecho
Administrativo y los Principios Generales del Derecho” (resaltado
añadido). 5.3. Por su parte, el profesor Rosendo Huamaní Cueva,
al comentar la norma antes referida, expresa que en esta se
establece lo siguiente: “(…) en primer lugar, que en lo no previsto
por el Código Tributario o en otras normas tributarias podrán
aplicarse normas distintas a las tributarias siempre que no se les
opongan ni las desnaturalicen, en segundo lugar, que
supletoriamente, es decir en caso aquellas normas no
alcancen solución y se mantenga el ‘vacío’ del Derecho
Tributario, o en su defecto, los Principios del Derecho
Administrativo y los Principios Generales del Derecho”18 (énfasis
agregado). Y en ese sentido, señala: “Dentro del criterio expuesto,
veamos un ejemplo elemental pero gráfico: en la medida en que
nuestro Código Tributario regula la actuación de la Administración
Tributaria (en el cumplimiento de sus funciones y el ejercicio de
sus facultades) mediante diversos procedimientos administrativos
(recaudación, determinación, fiscalización, resolución, sanción,
etc.) destinados a producir actos administrativos, resulta de
aplicación, en lo no previsto por el Código Tributario, obviamente
en lo que resulte pertinente, y siempre que no se le oponga ni lo
desnaturalice, la LPAG aprobada por la Ley N° 27444. En este
entender, queda claro que si en la relación entre la Administración
Tributaria y los administrados se generan actuaciones o
procedimientos administrativos no regulados por normas
tributarias, será de aplicación la LPAG y los Principios del Derecho
Administrativo que la rigen. Empero hay que precisar que estando
regulados algunos procedimientos específicos en nuestro Código
Tributario (Cobranza Coactiva, Contencioso-Tributario, No
contencioso) no cabría la posibilidad de aplicar en lugar de
estos procedimientos especiales los procedimientos
generales establecidos por la LPAG, sino solo determinados
aspectos o principios de esta norma y siempre de manera
supletoria”19 (resaltado añadido). De lo anotado se advierte que
la Norma IX del Título Preliminar del Texto Único Ordenado del
Código Tributario, cuando establece que “[e]n lo no previsto por
este Código o en otras normas tributarias podrán aplicarse
normas distintas a las tributarias siempre que no se les opongan
ni las desnaturalicen (…)”, se refiere al supuesto de vacío
El Peruano
Lunes 4 de noviembre de 2019 CASACIÓN
normativo, el cual se produce cuando existe ausencia de norma
en una materia concreta; esta situación de vacío implica que la ley
ha sufrido la patología jurídica de omitir, en su texto, la regulación
concreta sobre una determinada situación, no encontrándose
respuesta legal específica en la misma. 5.4. Por consiguiente,
ante un supuesto de vacío normativo en materia tributaria, el
operador, en este caso excepcional, se encuentra facultado a
aplicar normas distintas a las tributarias siempre que estas no
sean contrarias a la regulación tributaria, tampoco que vayan en
contra de la propia naturaleza de la relación tributaria o el tributo
propiamente dicho, ni se desnaturalice la figura jurídica aplicable
a las relaciones tributarias, puesto que de ocurrir ello se
trasgrediría lo previsto en la Norma IV del Título Preliminar del
Texto Único Ordenado del Código Tributario, referido a la reserva
tributaria. SEXTO: Sobre la figura de la prescripción extintiva
en materia tributaria 6.1. Sobre la figura de la prescripción
extintiva, el profesor Vidal Ramírez anota que la prescripción “(…)
es un derecho subjetivo que el ordenamiento jurídico reconoce a
la parte pasiva de una relación jurídica para liberarse de las
pretensiones del sujeto con el que la tiene entablada”20;
precisando que encuentra sustento en “(…) la necesidad de dotar
de seguridad a las relaciones jurídicas mediante la consolidación
de situaciones latentes”21. 6.2. La prescripción extintiva es una
figura jurídica creada con el fin de que ante la inacción del
acreedor en una relación jurídica patrimonial, por el transcurso
del tiempo establecido en la ley, se genere el nacimiento de un
derecho potestativo a favor del deudor, de modo tal que pueda
oponer la extinción de la obligación. A través de esta figura se le
otorga al deudor la potestad de no pagar su acreencia, sin que
ello signifique incurrir en incumplimiento, pues se trata de una
especie de castigo al acreedor por no accionar su propio derecho,
siendo su sustento que las relaciones jurídicas no pueden
extenderse eternamente en el tiempo. 6.3. El Capítulo IV del
Título III del Libro Primero del Texto Único Ordenado del Código
Tributario, aprobado por el Decreto Supremo N° 135-99-EF,
aplicable al presente caso en razón de temporalidad, regula todo
lo concerniente a la figura de la prescripción extintiva, habiendo
señalado en su artículo 43 lo siguiente: “La acción de la
Administración Tributaria para determinar la obligación Tributaria,
así como la acción para exigir su pago y aplicar sanciones
prescribe a los cuatro (4) años y a los seis (6) años para quienes
no hayan presentado declaración respectiva. Dichas acciones
prescriben a los diez (10) años cuando el agente de retención o
percepción no ha pagado el tributo retenido o percibido. La acción
para solicitar o efectuar la compensación, así como para solicitar
la devolución prescribe a los cuatro (4) años”. 6.4. Por su parte, el
profesor Rosendo Huamaní Cueva señala respecto de esta figura
lo siguiente: “(…) la prescripción determina la extinción de la
acción justamente por pasividad, inacción o su no ejercicio
por el acreedor o titular (para nuestro caso sería el acreedor
tributario, por la potestad de imposición la Administración
Tributaria, o, en su caso, el deudor tributario) durante un
determinado plazo legal (plazo de prescripción establecido
legalmente), y si bien de lo expuesto, y de la afinidad con el
Derecho Civil, resultan esos dos elementos esenciales de la
prescripción (la inacción o pasividad del titular –acreedor–, y el
transcurso del período de tiempo señalado por la ley para que se
produzca la pérdida de la acción), cabe indicar que también
puede considerarse como otro elemento: la inacción del deudor”22
(resaltado añadido). 6.5. En los artículos 44, 45 y 46 del Texto
Único Ordenado del Código Tributario se regula el cómputo de los
plazos de prescripción, habiéndose considerado como término
inicial especial del mismo, el uno de enero del año siguiente. Así,
en el artículo 44 se regula el inicio del cómputo de los plazos de
prescripción, considerando la naturaleza y exigibilidad de cada
tributo o crédito; en el artículo 45, la interrupción del plazo
prescriptorio, entendido como la aparición de una causa que
produce el efecto de inutilizar para el cómputo del plazo
prescriptorio, el tiempo transcurrido hasta entonces; y en el
artículo 46, la suspensión del plazo prescriptorio, el cual constituye
una pausa en el curso de la prescripción porque el tiempo que
dura se considera como no transcurrido. 6.6. A su vez, en el
artículo 47 del mismo cuerpo legal se dispone que la prescripción
solo puede ser declarada a pedido del deudor tributario, entendida
en el sentido de que solo opera a pedido de parte; en el artículo
48, que la prescripción ganada, declarada o no, puede oponerse
en cualquier estado del procedimiento administrativo o del
proceso judicial; y en el artículo 49, lo referente al pago voluntario
de la obligación prescrita. 6.7. Sobre el pago voluntario de la
obligación prescrita, regulado en el artículo 49 del Texto Único
Ordenado del Código Tributario, se establece que no da derecho
a solicitar la devolución de lo pagado. Este dispositivo determina
una única forma de renuncia tácita a la prescripción ya ganada,
pero solo en tanto se haya efectuado el pago voluntario de la
obligación prescrita, ya sea por inadvertencia del deudor o debido
a un cómputo erróneo en el plazo u otro supuesto. 6.8. Así
también, debe señalarse que de la revisión del Capítulo IV del
Título III del Libro Primero del Código Tributario, referido a la
figura de la prescripción extintiva, no se advierte que este regule
1401
un supuesto distinto de renuncia tácita de la prescripción ganada
al citado anteriormente. De ello se entiende que los legisladores,
al momento de expedir el Código Tributario, no tenían como
propósito regular un supuesto adicional al expuesto, por lo que no
sería posible que por una interpretación de la propia regulación de
la figura de la prescripción en este cuerpo normativo se fije uno
adicional al ya establecido. 6.9. En esa línea, cabe precisar que el
Código Tributario no prevé el supuesto establecido en el artículo
1991 del Código Civil, el cual señala que “(…) hay renuncia tácita
cuando resulta de la ejecución de un acto incompatible con la
voluntad de favorecerse con la prescripción”, pues ello
contemplaría cualquier hecho que pueda interpretarse como
voluntad del deudor de renunciar a la prescripción extintiva, por
ejemplo, el caso en que un deudor solicite el fraccionamiento de
su deuda prescrita, entendiéndose como un acto incompatible
con favorecerse de la prescripción ganada, lo cual, si bien podría
ser aceptado en una relación entre privados regulada debidamente
por el Código Civil, no aplica como un supuesto de renuncia tácita
a la prescripción ganada en materia tributaria. 6.10. Asimismo, en
el caso de la prescripción prevista en el Código Civil, esta regula
las relaciones civiles entre las personas físicas y jurídicas,
privadas o públicas, es decir, relaciones entre particulares; en
cambio, el Código Tributario regula las relaciones jurídicas
originadas por los tributos, esto es, el Estado frente a los
particulares; por lo tanto, el diseño normativo de la prescripción
es totalmente distinto en ambas materias, al extremo de que es el
propio Código Tributario el que regula en todo un capítulo la figura
en cuestión. Siendo así, no es posible extrapolar una norma del
Código Civil a las relaciones jurídicas originadas por los tributos
regulados en su norma especial como es el Código Tributario,
dado que en vía de interpretación no pueden extenderse las
disposiciones tributarias a personas o supuestos distintos de los
señalados en la ley, conforme lo expresa la Norma VIII del Código
Tributario. SÉPTIMO: Análisis de las infracciones denunciadas,
referidas al artículo 1991 del Código Civil, y los artículos 48 y
49 del Texto Único Ordenado del Código Tributario 7.1. El
Tribunal Fiscal interpuso recurso de casación contra lo resuelto
por la Sala de Mérito, toda vez que esta última resolvió revocar la
sentencia de primera instancia que declaró infundada la demanda,
y reformándola, declaró fundada la demanda. La Sala Superior
consideró que el artículo 1991 del Código Civil es aplicable para
resolver la renuncia tácita a la prescripción del ámbito tributario,
concluyendo que la solicitud de fraccionamiento que realizó la
contribuyente fue un acto contrario a la voluntad de favorecerse
con la prescripción ya ganada, pues ello significaría un
reconocimiento, identificación y compromiso con la deuda
pendiente de pago; por lo que la Administración Tributaria se
encontraba habilitada para realizar el cobro de la deuda tributaria
materia del presente proceso. 7.2. Al respecto, cabe resaltar que
si bien en el artículo 1991 del Código Civil se establece lo
siguiente: “Puede renunciarse expresa o tácitamente a la
prescripción ya ganada. Se entiende que hay renuncia tácita
cuando resulta de la ejecución de un acto incompatible con la
voluntad de favorecerse con la prescripción” (énfasis
agregado); dicho dispositivo legal no resulta aplicable a las
relaciones jurídicas originadas por los tributos, en razón de que el
Código Tributario, en su Libro Primero, Título III, Capítulo IV,
regula todo lo concerniente a la figura jurídica de la prescripción,
determinando los supuestos de interrupción y suspensión de los
plazos de prescripción, sin considerar expresamente la renuncia
tácita a la prescripción ya ganada; sin embargo, de la lectura del
artículo 49 del citado texto normativo puede inferirse que el
legislador contempló como único supuesto de renuncia tácita al
pago voluntario de la obligación prescrita, en tanto constituye un
acto incompatible con la voluntad de favorecerse con la
prescripción, no considerando otro supuesto. 7.3. Cabe anotar
que en el caso de la prescripción prevista en el Código Civil, esta
regula las relaciones civiles entre las personas físicas y jurídicas,
privadas o públicas, y en este último caso, siempre que actúen
como particulares desprovistos de imperium (poder estatal); en
cambio, el Código Tributario regula las relaciones jurídicas
originadas por los tributos, es decir, el Estado frente a los
particulares, por lo que el diseño normativo de la prescripción en
ambas materias es totalmente distinta, al extremo de que es este
propio cuerpo normativo el que regula en todo un capítulo la figura
de la prescripción; es por ello que no es posible extrapolar una
norma del Código Civil a las relaciones jurídicas originadas por
los tributos regulados en su norma especial, dado que en vía de
interpretación no pueden extenderse las disposiciones tributarias.
7.4. Por lo tanto, se advierte que la Sala Superior aplicó
indebidamente el artículo 1991 del Código Civil al presente caso,
en tanto concluyó que la Administración se encuentra habilitada
para realizar el cobro de las deudas tributarias materia del
presente proceso, dado que el contribuyente habría renunciado
tácitamente a la prescripción ya ganada al solicitar el
fraccionamiento de la deuda tributaria con fecha trece de octubre
de dos mil seis23. 7.5. De la misma manera, se advierte que se
infringió el artículo 49 del Texto Único Ordenado del Código
Tributario, puesto que –como bien se ha señalado en los párrafos

1402 CASACIÓN
precedentes– el Código Tributario, como norma especial que
regula las relaciones jurídicas originadas en virtud a los tributos,
no establece la renuncia tácita a la prescripción de acuerdo con lo
regulado en el artículo 1991 del Código Civil, sino solo considera
que no hay devolución de lo pagado voluntariamente cuando la
deuda esté prescrita como supuesto que configure la renuncia
tácita a la prescripción ya ganada. Sin embargo, a pesar de que
tal situación no se produjo en este caso, la Sala Superior
determinó que correspondía que se aplique la figura de renuncia
tácita a la prescripción ganada, prevista en el Código Civil,
desconociendo lo dispuesto en la norma del Código Tributario
antes referida. 7.6. Respecto a la presunta infracción al artículo
48 del Texto Único Ordenado del Código Tributario, no se observa
que se hubiera infringido el mismo, dado que el contribuyente
solicitó que se declare la prescripción de su deuda tributaria,
petición que fue resuelta por la Sunat mediante la Resolución de
Intendencia N° 0630200002882/SUNAT, respetándose así el
derecho del contribuyente a presentar la solicitud de prescripción
de su deuda tributaria en cualquier estado del procedimiento
administrativo o judicial. 7.7. Por las consideraciones anotadas,
no corresponde aplicar el artículo 1991 del Código Civil, referido
a la renuncia tácita a la prescripción, a las relaciones jurídicas
originadas por los tributos, reguladas en el Código Tributario; por
ende, la solicitud del administrado resultaba procedente al haber
vencido el plazo prescriptorio y no haberse producido un acto que
interrumpa dicho plazo; en consecuencia, corresponde declarar
fundado el recurso de casación, revocar la sentencia de vista y,
actuando en sede de instancia, conforme a los fundamentos
expuestos, confirmar la sentencia apelada que declaró infundada
la demanda. VII. DECISIÓN: Por los fundamentos expresados, de
conformidad con el dictamen del Fiscal Supremo en lo contencioso
administrativo: Declararon FUNDADO el recurso de casación de
fecha veintiuno de abril de dos mil diecisiete, interpuesto por la
Procuraduría Pública a cargo de los asuntos judiciales del
Ministerio de Economía y Finanzas, en representación del
Tribunal Fiscal; CASARON la sentencia de vista comprendida en
la resolución número trece, de fecha catorce de marzo de dos mil
diecisiete; y, actuando en sede de instancia, CONFIRMARON la
sentencia de primera instancia comprendida en la resolución
número seis, de fecha veintiséis de octubre de dos mil quince,
que declaró infundada la demanda; DISPUSIERON la publicación
de la presente resolución en el diario oficial “El Peruano”; y
devolvieron los actuados; en el proceso seguido por la
Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración
Tributaria contra el Tribunal Fiscal y otro, sobre nulidad de
resolución administrativa. Interviene como Juez Supremo
ponente: Cartolin Pastor. S.S. VINATEA MEDINA, WONG
ABAD, TOLEDO TORIBIO, CARTOLIN PASTOR, BUSTAMANTE
ZEGARRA EL VOTO SINGULAR DEL SEÑOR JUEZ SUPREMO
VINATEA MEDINA, ES COMO SIGUE: El suscrito está de
acuerdo con la decisión de declararse FUNDADO el recurso de
casación de fecha veintiuno de abril de dos mil diecisiete,
interpuesto por el Procurador Público a cargo de los asuntos
judiciales del Ministerio de Economía y Finanzas, en
representación del Tribunal Fiscal; en consecuencia CASARON
la sentencia de vista de fecha catorce de marzo de dos mil
diecisiete; y actuando en sede de instancia CONFIRMARON la
sentencia apelada que declaró Infundada la demanda. No
obstante, respecto a la interpretación normativa que se efectúa
respecto al artículo 49 del Código Tributaria en el numeral 6.7 del
sexto considerando preciso lo siguiente: PRIMERO: El artículo 49
dispone: “El pago voluntario de la obligación prescrita no da
derecho a solicitar la devolución de lo pagado”. Es decir, cuando
el contribuyente haya efectuado el pago parcial o total de la deuda
prescrita, esta no podrá ser materia de devolución. Sabemos que
el transcurso del plazo prescriptorio origina que, vencido éste, el
acreedor -en este caso Sunat- no puede ejercitar su derecho de
pago de la obligación, lo cual es una sanción por su
despreocupación para exigirlo durante el plazo determinado por
ley, ello en virtud del principio de seguridad jurídica que exige el
sistema en relación a esta figura jurídica. Siendo la prescripción
extintiva la que se regula en el Código Tributario, resulta
importante determinar sus alcances, es decir, analizar si la
prescripción extingue la obligación tributaria o la acción de la
Administración Tributaria para exigir su pago o ambas.
SEGUNDO: Según el artículo 43 del Código Tributario la
prescripción tributaria extingue la facultad o potestad de la
Administración Tributaria para determinar la deuda, exigir el pago
o establecer sanciones. En la doctrina la prescripción no extingue
la obligación tributaria del deudor, pues el derecho de crédito lo
sigue teniendo la administración y el deudor sigue teniendo la
obligación de pago, en efecto, dice Zimmermann: “(…) una vez
agotado el plazo de prescripción, el derecho del acreedor no se
extingue; lo que sucede es que el deudor puede negarse a cumplir
con la pretensión. En otras palabras, la prescripción es una
excepción que el deudor puede alegar o no23”; para Ariano Deho:
“(…) el transcurso del plazo prescriptorio no extingue nada, solo
hace surgir en el beneficiario (o en los que tengan interés) el
poder (que a su vez es una carga) de completar el fenómeno
El Peruano
Lunes 4 de noviembre de 2019
extintivo con su alegación 25”. Por su parte, Robles Moreno y de
Castilla Ponce de León, concluyen: “Como sabemos, la
prescripción desarrollada en el Código Tributario no constituye un
medio de extinción de la obligación tributaria, es por ello que,
vencido el plazo prescriptorio, el deudor tributario queda liberado
de la acción de la Administración Tributaria para que este pueda
determinar la deuda tributaria, exigir los pagos y aplicar sanciones.
Pero la deuda sigue teniendo el deudor tributario, por ello, en el
supuesto caso que el contribuyente pague una deuda ya prescrita,
lo puede hacer sabiendo de que la Administración ya no puede
exigirle el pago o simplemente porque lo desconoce; pero en
ambos casos, ya no tiene derecho a la devolución de lo pagado,
justamente porque el pago efectuado no tiene naturaleza de pago
indebido, sino que se le entiende como una renuncia al derecho
ganado; por otro lado, si no paga es claro que la Administración
no puede ejercer su potestad tributaria para el cobro de lo
adeudado, siempre que la deuda esté prescrita 26”; igualmente,
Bravo Cucci indicó: “La denominada prescripción en materia
tributaria, es del tipo extintivo o liberatorio, que consiste en la
extinción por el transcurso del tiempo de la acción del acreedor
tributario, así como la fiscalización del cumplimiento de la
obligación tributaria. Lo que no extingue es el derecho del crédito,
razón por la cual no estamos frente a una forma de extinción de la
obligación tributaria”27 . TERCERO: Este criterio se condice con lo
señalado por el Tribunal Constitucional a través de la Sentencia
N° 04161-2010-PA/TC al establecer que: “Debe entenderse
entonces que, de acuerdo con lo dispuesto por el artículo 43 del
Código Tributario, con la prescripción se extingue la acción de la
administración tributaria para determinar la obligación, la acción
para exigir su pago y aplicar sanciones (…). Es decir, se hace
responsable ante la despreocupación de la administración
tributaria para exigir su derecho durante un lapso determinado de
tiempo, constituyéndose en una institución jurídica que se
fundamenta en los principios de seguridad jurídica y capacidad
contributiva, entendiéndose que no procede ninguna retención o
cobro por parte de la administración ante su operatividad. 28”. En
la Sentencia N° 01431-2006-AA/TC se indicó: “Aunque, en este
caso, la agresión ha cesado a solicitud del actor (artículo 47 del
Código Tributario: ”La prescripción sólo puede ser declarada a
pedido del deudor tributario”), evaluando la intensidad de la
agresión, la naturaleza del proceso de amparo y las
particularidades del caso, se puede observar, por un lado, que
efectivamente al haberse declarado la prescripción sobre parte de
las deudas tributarias imputadas, el actor ha quedado liberado de
la acción de la Administración tributaria para que esta pueda
determinar la deuda, exigir pagos o aplicar sanciones, estos es,
que en la práctica se extingue todo cobro coactivo pendiente,
reduciendo al mínimo al primigenia agresión (…)”29.(subrayado es
nuestro) CUARTO: En mérito de lo expuesto y lo señalado por el
Tribunal Constitucional, es razonable establecer que la
prescripción regulada por el Código Tributario solo extingue la
potestad o facultad de la Administración Tributaria para determinar
la deuda, exigir el cobro, o imponer sanciones, tal como lo ha
sostenido la doctrina en general, ello como resultado del
transcurso de los plazos fijados en el artículo 43 del Código
Tributario. Esto no implica, que la obligación tributaria se extinga,
pues este mantiene la deuda, solo tiene como efecto que el
deudor tributario queda liberado de su cumplimiento, ante las
pretensiones de la Administración Tributaria. Por ello, si el deudor
paga la deuda (aunque se encuentre prescrita), este no realizó un
pago indebido, sino que ha cumplido en forma voluntaria con
pagar una deuda que no ha dejado de existir, por ende, no puede
luego pedir su devolución. QUINTO: Por lo tanto, el pago
voluntario ya sea en forma parcial o total de la obligación tributaria
prescrita (declarada o no), de ninguna manera puede constituir
una causal de interrupción del plazo prescriptorio si este ya
transcurrió u operó, tampoco configura una forma de renuncia
tácita a la prescripción ganada, en primer lugar porque el efecto
jurídico producido por el artículo 49 solo es la convalidación del
pago efectuado y en segundo lugar porque el Código Tributario no
recoge entre sus dispositivos el supuesto de renuncia tácita a la
prescripción. S.S. VINATEA MEDINA
1
Obrante a fojas 175 del expediente principal.
2
Obrante a fojas 149 del expediente principal.
3
Obrante a fojas 88 del expediente principal.
4
Obrante a fojas 33 del expediente administrativo.
5
Obrante a fojas 31 del expediente administrativo.
6
Obrante a fojas 28 del expediente administrativo.
7
Obrante a fojas 16 del expediente administrativo
8
. Obrante a fojas 38 del expediente administrativo.
9
Obrante a fojas 08 del expediente administrativo.
10
Obrante a fojas 161 del expediente administrativo.
11
Obrante a fojas 12 del expediente principal.
12
Obrante a fojas 99 del expediente principal.
13
Obrante a fojas 124 del cuaderno de casación.
14
Obrante a fojas 135 del cuaderno de casación.
15
De Pina, Rafael. 1940. Principios de Derecho Procesal Civil. México. Ediciones
Jurídicas Hispano Americana; p. 222.