CONFLICTOS EN LA HUMANIDAD

INTRODUCCION

Si deseamos tener un mundo mejor, debemos concientizarnos de las problemáticas que tiene

nuestro país, como ciudadanos comprometernos y tener presente que si deseamos un mejor país

no podemos esperar que cambie si no tenemos claro lo que deseamos para él y no visualizamos

una transformación a futuro, exigir el derecho a ser partícipes y protagonista de la evolución de

una mejor cultura ciudadana que se dará a través del tiempo. El conflicto se ha vuelto ineludible

en la vida cotidiana este problema se ha vuelto una plaga dentro de la sociedad es inevitable,

porque muchos encuentran la solución es en la violencia y la venganza, generando u gran

impacto a la sociedad, destruyendo la salud mental y bienestar de personas inocentes.

Conflictos en la humanidad

Debemos reivindicar nuestro protagonismo y

afrontar de manera responsable y tolerante, cada

situación que se puede presentar de manera

habitual en nuestra cotidianidad, conflictos

presentados en nuestro entorno. No podemos

permanecer imperturbables ya que tenemos

mucho que decir frente a situaciones tales como

peleas, violencia y guerra, estas se pueden

reemplazar por métodos más constructivos, negociaciones, mediación, acciones no violentas

entre otras. Si deseamos un país y un mundo mejor, debemos dedicarnos a fomentar una

convivencia humana sana, debemos empezar por recalcar que el medio en que nos

desenvolvemos no ofrece reconocimiento al otro como legítimo, donde no hay garantías para

construir un lugar donde las personas convivan con dignidad, respeto y legitimidad, en una

sociedad deshumanizadora debilitando los vínculos sociales., hacia la descomposición de la

calidad de vida de los seres humanos.

Debemos abandonar nuestra visión dualista del mundo, normalmente los seres humanos tratamos

de ver y explicar todo mediante dos maneras entre lo bueno y lo malo, entre lo verdadero y lo

falso o entre blanco y negro, sin dar la oportunidad de manifestar términos intermedios,

adoptando los juicios simples y superficiales. Uno de los términos más corrosivos que suelen

utilizar las personas es el “yo tengo razón y tu estas equivocado”, la seguridad de tener razón

absoluta conlleva al inicio de avivar el fuego frente a situaciones o procesos de conflicto, por lo

tanto si yo tengo la razón cualquier decisión será legítima incluso en la violencia y la coacción.

Es esencial concebir que todo lo podemos hacer de maneras diferentes, debemos buscar

alternativas y una variedad de soluciones para contrarrestar las dificultades. Es posible realizar

estas cosas pero solo teniendo voluntad no cerrarse a nuevas alternativas en busca de soluciones,

no olvidar que cualquier razón es una verdad parcial, ambigua mezclada de vivir la realidad. Es

importante considerar que cuando se genera un conflicto o una disputa debemos tener presente

que existen más de dos lados, familia, organización, amistades, personas mediadoras, la sociedad

en general, por lo tanto si queremos recuperar nuestra humanidad debemos empezar por no

perder el diálogo la conversación, el escuchar al otro, debemos dar importancia a las palabras y

que esta sea una herramienta para afrontar cualquier conflicto.

Las personas de hoy en día, esa mismas creadoras de la revolución que se consideran hacedoras

de la paz, personas que apuestan a erradicar la violencia, esas que están dispuestas a cambiar la

estructura injustas del mundo, deben abandonar el sueño de la dominación, porque el convivir

pacíficamente es de suma importancia tanto como esencial y se requiere de manera urgente para

la supervivencia de la humanidad. Si queremos entrar al corazón de nuestra sociedad debemos

concientizar y profundizar ante la ética de la mejora humana, debemos cultivar una cultura donde

a pequeñas adversidades o grandes problemáticas no se solucionan a los golpes a coacciones o

fuerzas mal intencionadas, si no con tolerancia, ponerse en los zapatos del otro, analizar la

problemática desde varios puntos de vista y ver más allá de lo que sucede, no enfrascarnos es que

solo yo puedo y solo yo tengo la razón, erramos sin ser conscientes de la magnitud que esto lleva

por la toma de malas decisiones, ser conscientes de que en nuestras manos no está la solución de

todos los problemas pero si saber, que si aportamos lo mejor de nosotros logremos, así sea, una

mínima parte para el mejor desarrollo de una sana convivencia en nuestra sociedad.

CONCLUSION

Es importante identificar y comprender el porqué del conflicto para así saber de qué forma

proceder a su solución, las personas manifiestan de muchas maneras sus problemáticas y sus

presuntas soluciones, por lo tanto es importante estar atento a ello, idealizar estrategias claves

para el manejo de ello, lastimosamente esta problemática es originada desde los hogares, su

forma de vivir, la extrema pobreza, principios no inculcados adecuadamente, problemas de pareja

llevando a las personas a la depresión, ansiedad, frustraciones, una cantidad de elementos que de

no ser tratados a tiempo ocasionan daños colaterales, no solo a quien padece estos trastornos, a

familias, arrastrando de paso a toda la sociedad.