Sei sulla pagina 1di 4

Actividades para fortalecer los lazos afectivos y sociales bajo un esquema de

modelamiento e interpretación de emociones

TEA: Trastorno del espectro Autista

Las siguientes actividades están pensadas para realizarse en niños con posible
diagnóstico de TEA que tengan una edad entre los 3 y los 13 años ya que son
principalmente juegos infantiles, aun así, también pueden ajustarse a adolescentes
si su disposición amerita los juegos de roles.

Estas actividades apuntan hacia el reconocimiento de emociones, la adquisición de


habilidades sociales como la empatía y la adecuación de la conducta de las personas
con diagnóstico TEA hacia su contexto de manera más asertiva.

Su ejecución es grupal y muy sencilla, ya que justamente en conductas que


parecieran sencillas es donde una persona con TEA ve un impedimento debido a su
dificultad para comprender las emociones de terceros y generar lazos afectivos.

Las múltiples respuestas que pueda dar el menor no son buenas o malas, usted debe
ser consciente de los siguiente, la forma en que el niño percibe el contexto e
interpreta las emociones es totalmente diferente a la suya, por lo tanto, no lo juzgue
ni lo castigue ya que el objetivo principal es que el niño reciba un proceso de
modelamiento, es decir, el niño observará en usted y su grupo una figura la cual
seguir, por lo tanto, debe ser una figura que agilice su interacción de manera
positiva.

Las actividades se calificarán una por una y en una escala de 1 a 5 bajo las siguientes
preguntas:

• ¿Cuál fue la actitud del menor frente a la actividad?


1. No le gustó la actividad y no realizó nada.
2. No prestó ninguna atención a la actividad.
3. En algunos momentos prestaba atención y en otros no.
4. Le prestó atención a la actividad.
5. Le gustó la actividad y la realizó completamente.
• ¿el menor logró reconocer y expresar emociones?
1. No logró reconocer o hablar de ninguna emoción.
2. Mayormente no reconoció ni habló de emociones.
3. Casi no reconoció ni habló de emociones y se le presentó alta dificultad
para ellas.
4. Mayormente reconoció o habló de emociones.
5. Logró reconocer o hablar de todas las emociones.

Elija mínimo 3 actividades de las planteadas y repítalas mínimo 3 veces a la semana


sin olvidar su calificación.

Lista de actividades

1. Yo te explico

Este juego favorece en el niño el aprendizaje y observación de las conductas de sus pares
o personas cercanas en el contexto, con ello aprende diferentes habilidades sociales y
formas de reaccionar con secuencias de acciones útiles ante situaciones específicas. De
este modo, puede utilizarse como una vía para el aprendizaje de acciones. Puede hacerse
entre dos personas o en grupo.
Una persona se posiciona frente al niño o al grupo de niños y hace una acción, por
ejemplo, abrir una sombrilla y decir: “está lloviendo, será bueno abrir mi sombrilla”,
así el niño o el grupo de niños debe repetir la acción. Las acciones a imitar pueden ser
muy simples inicialmente, pero las acciones deben aumentar en dificultad procurando
mezclar acciones y emociones como: “estoy sentado en el piso porque estoy aburrido,
pero hoy me levantaré, buscaré amigos como yo y jugaremos”.
Al final de cada acción el niño debe decir “yo te explico por qué lo hiciste” y explica el
motivo por el cual se realizó la acción, por ejemplo: abriste la sombrilla para no mojarte,
o, buscaste a tus amigos para no aburrirme. Si al principio presenta dificultad puede ser
modelado por quien dirige la actividad o por uno de sus compañeros.
Realice un promedio de 10 frases.
Esta actividad también favorece la creación de vínculos afectivos y sociales mediante la
comunicación asertiva que en ocasiones representa alta dificultad para los niños con TEA.

2. Te estoy mirando
Los participantes deben pasar la pelota como ellos lo deseen. Cuando sea pasada la
pelota se debe decir una característica emocional de la persona a quien le pasó la
pelota que tuvo durante los días o minutos anteriores, así: “Laura se alegró esta
mañana porque su lonchera tenía una rica chocolatina”. Si la comunicación de
emociones al principio parece difícil se puede decir simplemente una característica
física como: Laura tiene el cabello negro y largo, sin embargo, el objetivo final debe
ser el reconocimiento emocional de las personas que están cercanas al niño.

3. Recuerda la escena

Recordar escenas de películas o recuerdos de un evento puede dar al niño una forma
sencilla de incorporar expresiones y motivos de socialización, también se pueden
interpretar roles como el de un cocinero, un médico, un profesor o quien el niño quiera.
Esta actividad permite desarrollar habilidades sociales mediante la comprensión y
apropiación del mundo de un tercero, para así comprender sus emociones y acciones,
también, para generar empatía mediante modelos sociales más adaptativos.
La expresión facial en la imitación o actuación debe ser primordial. Para guiarlo se puede
preguntar así: ¿qué crees que sentía Toni Stark cuando luchaba acompañado de sus
amigos? Ahora siente lo mismo, tus amigos te acompañan para salvar al mundo”.
También se pueden actuar estados de ánimo específicos, se debe pedir al niño que
gestualice expresiones, así: cómo haces cuando estás feliz, cuando estás triste, cuando
estás molesto, cuando tu mamá está triste, cuando tu amigo está contento… si al inicio
el niño presenta dificultad se puede hacer un modelado, es decir, el adulto que lleva a
cabo la actividad interpreta primero los roles que solicita y así el niño podrá imitarlos.
Después de la actuación, el niño puede explicar en cuáles momentos puede sentirse de
esa forma: yo me siento triste cuando tengo hambre, o, yo me siento molesto cuando no
puedo jugar. Esta relación que hace el niño entre las emociones y las acciones ayuda a
interiorizar los momentos y las reacciones adecuadas frente a determinadas situaciones.

4. ¿Cómo me siento? ¿Cómo te sientes?

Mediante la actuación o la narrativa de algunas situaciones se puede preguntar al niño


cómo se siente el protagonista del cuento o el actor, de esta manera: Laura tenía una
lonchera llena de rica comida, pero hoy su lonchera se abrió y toda la comida quedó
llena de barro, lo cual no le permitió comer en todo el día. ¿cómo crees que se sintió
Laura? Esta actividad le brinda al niño comprensión de situaciones específicas y la forma
como las personas normalmente reaccionan. Entrenando así la comprensión emocional y
la asertividad al momento de enfrentar diferentes situaciones.

5. Juegos basados en la construcción y elaboración


El uso de actividades en los que los niños con Asperger puedan observar y utilizar
patrones lógicos puede servir tanto para desarrollar sus competencias cognitivas como
para calmarlos en momentos de ansiedad. Un ejemplo es el uso de rompecabezas y juegos
de construcción como los LEGO. También la creación de manualidades y el uso de barro
y plastilina. Sirve para desarrollar su motricidad fina y su creatividad.
Al momento de finalizar su creación se debe pedir al niño que explique lo que hizo, cómo
lo hizo, para quién lo hizo y también que invente una historia que involucre el objeto que
realizó.

6. Aprende de mí, enséñame de ti

Normalmente los niños con TEA tienes gustos o intereses muy restringidos, se debe
identificar estos intereses e interactuar con ellos, preguntar, contar lo que se sabe de ellos,
preguntarle al niño lo que sabe, preguntar lo que quiere saber y también contarle acerca
de algo que nos guste a nosotros para hacer el mismo proceso cambiando de actor
principal. Así el niño comparte mediante la enseñanza y activa su escucha para aprender
acerca de otros temas y acerca de los gustos de los demás.

7. Juegos y actividad física

La realización de deportes es fundamental para desarrollar principalmente la motricidad


gruesa. Se recomienda la realización de deportes sin precisar de un contacto repentino
con un gran grupo de personas. También se recomiendan juegos que puedan requerir del
uso de turnos, de manera que se aprenda a respetar el tiempo de los demás, como las
escondidas, golosa, entre otros.

Potrebbero piacerti anche