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El poder que libera el diezmo

“¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el eneldo


y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe.
Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello.” Mateo 23:23

Hay mucha gente que al escuchar la palabra “diezmo” pareciera que escucharan la
palabra “maldición”. Pero es justamente al revés. Al darle a Dios el diezmo se libera la
bendición. Recordemos un versículo muy conocido: “Traed todos los diezmos al alfolí
y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si
no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta
que sobreabunde.” Dice que cuando llevamos nuestros diezmos al alfolí se abren las
ventanas de los cielos y se derraman las bendiciones hasta la sobreabundancia.

En este día quiero que usted pueda entender que el diezmo es bíblico. Ya lo podemos
ver en el jardín del Edén representado por el árbol que el hombre no debía comer.
Luego lo vemos en Caín y Abel y más adelante en Abraham cuando le entrega los
diezmos de todo a Melquisedec (figura de Cristo).

Le pregunto ¿Qué es más importante, el dinero o la bendición? Recuerde el versículo de


Proverbios 10:22 que dice La bendición de Jehová es la que enriquece,
Y no añade tristeza con ella. Entonces ¿Qué me responde? Yo me quedo con la
bendición porque es la me enriquece, no el dinero. Fíjese que si Abraham se iba con el
dinero se perdía las bendiciones porque quedaban bloqueadas por la desobediencia y la
infidelidad. Pero él no lo hizo de esta manera. Tenía un corazón puro, agradecido. Si
usted aprende a administrar bien todo lo que llega a su mano siendo primero obediente y
fiel a Dios, todo comenzará a multiplicarse en su vida. Usted es un descendiente de
Abraham y heredero según la promesa, entonces, siga sus pisadas. Él dio el diezmo y
obtuvo bendiciones. Haga usted lo mismo y estará bendecido.

El problema que tienen algunos creyentes con esto, es el amor al dinero porque piensan
que diezmar es quitar de su cuenta. Pero están muy equivocados porque primeramente
el diezmo le pertenece a Dios, es de Dios y llega a nuestras manos para que nosotros lo
administremos correctamente. Dele el diezmo a Dios y provocará que las ventanas de
los cielos se abran y que se derramen las bendiciones en sobreabundancia. Diga
conmigo: ¡En mi casa es bendecida!

Oración: Padre, hoy entiendo que el diezmo te pertenece a ti. Yo no me lo voy a quedar
más. Sé que a partir de esto las ventanas de los cielos estarán abiertas a mi favor. Lo
creo, en el nombre de Jesús, amén.
Él bendecirá su pan y sus aguas
“25 Mas a Jehová vuestro Dios serviréis, y él bendecirá tu pan y tus aguas; y yo quitaré
toda enfermedad de en medio de ti.” Éxodo 23: 25

El bendecirá su pan y sus aguas. Dios llena su vida, él es su Pastor, más que suficiente y
el que provee para todas sus necesidades. Nuestro Dios es próspero y nosotros somos
prósperos en él. Usted es próspero en él. En Cristo que es nuestra pascua tenemos la
redención de la maldición financiera. Por eso estas cosas que son del antiguo pacto nos
abren los ojos acerca de cosas que están relacionadas en el nuevo pacto. Siendo rico, se
hizo pobre para que nosotros en su pobreza fuésemos enriquecidos. Él se despojó de
todo lo que posee para empobrecerse en forma de hombre. Pero esto no quiere decir que
Jesús era pobre, no se confunda. Jesús era Dios encarnado pero no caminó en la tierra
como Dios, sino como un hombre que hacía la voluntad de su padre y que caminaba en
su Palabra. Como tal era rico y nada le faltó estando sobre esta tierra.

De la misma manera puede vivir usted hoy. Aunque en el mundo haya maldiciones de
pobreza, enfermedad, cosas malas no le pertenecen. Jesús sabía esto y caminó siempre
en esa dirección.

Si Dios dice que por servirle, él bendecirá su pan y sus aguas, él lo hará. Usted sólo
tiene que apropiarse de esa promesa y hacerla realidad en su vida haciendo lo que él le
pide.

Fíjese el versículo 19 de Éxodo 23. Dice que: “Las primicias de los primeros frutos de
tu tierra traerás a la casa de Jehová tu Dios.” Habla de traerle lo primero y recuerde
también que siempre les decía que no tenían que presentarse ante él con las manos
vacías. Estos son principios que tienen que estar aplicados en su vida hoy.

Dios bendice al dador alegre. Cada vez que usted cree a Dios y desea hacer su voluntad
querrá darle lo que es de él. ¿Y qué le pertenece a Dios? Los diezmos. Sus manos
siempre tienen que estar llenas. Si usted le da a Dios lo que le pertenece nunca tendrá
falta de nada y sus manos siempre estarán llenas. Pero es usted el que tiene que disponer
su corazón para dar. Hay muchas promesas al respecto pero se cumplirán siempre y
cuando usted cumpla poniendo a Dios primero.

Dios mandó al pueblo a que nunca se presentasen delante de él con las manos vacía
¿Qué está haciendo hoy usted? Sus manos siempre tienen algo para dar. Recuerde que
Dios le da semilla al que siembra. Si usted ya ha sembrado, tendrá cosecha.

Jehová es su Pastor y nada le faltará. Él es su proveedor. Él bendecirá su pan y sus


aguas. Ya no diga más que no tiene nada. Usted es próspero en Dios y él le ha dado todo
para que usted esté seguro y que nada le falte. Créale y tómelo. Y no olvide que el que
siembra generosamente, generosamente cosechará. Qué mejor que hacerlo en las manos
de Dios. Él se lo devolverá multiplicado. Diga conmigo: ¡En mi casa es bendecida!

Oración: Padre, hoy me determino a obedecerte y a ser un sembrador generoso. Sé que


recibiré todas las promesas que diste para aquellos que cumplen con tu Voluntad. Mi
pan y mis aguas están bendecidos. En el nombre de Jesús, amén.
Obedientes y fieles
“Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda
bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo” Efesios 1:3

¿Sabía que la bendición es un poder interno que le da la habilidad de tener éxito en


todas las áreas de la vida? Y usted se preguntará ¿Cómo? Fíjese el versículo de Efesios
1:3. Dice que fuimos bendecidos con toda bendición en los lugares celestiales en Cristo.
Ya somos benditos desde nuestro espíritu. La bendición es un poder que fluye desde
nuestro ser interior habilitándonos para el éxito.

Vine a decirte que hay cuatro cosas que debemos tener en cuenta para que fluyan las
bendiciones libremente. La obediencia, la fidelidad, un corazón puro y ser
diezmadores. Hoy es mi anhelo enseñarte cómo la obediencia y la fidelidad nos abren
la puerta a la bendición. Diga conmigo: ¡En mi casa hay bendición!

Primero tengamos en cuenta que nuestro máximo ejemplo, Jesús fue obediente hasta la
muerte y muerte de cruz (Filipenses 2:8 Y hallado en la condición como hombre, se
humilló á sí mismo, hecho obediente hasta la muerte, y muerte de cruz .). Y si él
caminó en obediencia cada uno de nosotros también debemos hacerlo. Debe ser nuestro
mayor deseo ser como Cristo. Comience hoy trabajando con la obediencia. ¿Qué es lo
que usted debe obedecer? La Palabra de Dios. ¿Cómo se hace esto? Primero
escuchándola constantemente hasta que se forme una creencia. La fe viene por el oír la
Palabra de Dios y es lo que agrada a Dios (Romanos 10:17 Luego la fe es por el oir; y
el oir por la palabra de Dios. y Hebreos 11:6 Pero sin fe es imposible agradar a Dios;
porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es
galardonador de los que le buscan. ) y lo hace moverse hacia esa creencia. Usted sólo
tiene que caminar en esa Palabra. Ser obediente a ella. Hacer lo que ella dice. Y si lo
hace estará caminando en la voluntad de Dios y atraerá las bendiciones hacia usted.
Diga conmigo: ¡En mi casa hay bendición!

Segundo, La fidelidad también nos lleva hacia las bendiciones. Fíjese que ella nos
prepara el camino para la abundancia. Dice Proverbios 10:22 que “la bendición es la
que nos enriquece y no añade tristeza con ella”. No somos ricos por el dinero, sino
por la bendición de Dios.

Tercero, tener un corazón puro. En Mateo 5:8 dice: “Bienaventurados los de limpio
corazón, pues ellos verán a Dios”. Usted tiene que aprender a tener un corazón puro y
ser fiel en lo poco porque Dios promete que si lo hace él lo pondrá sobre lo mucho. Su
señor le dijo: “Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te
pondré; entra en el gozo de tu señor. Mateo 25:23. Entonces, si usted es fiel a Dios
haciendo y obedeciendo todo lo que Él dice en su Palabra hará que las bendiciones
fluyan desde su interior y sea enriquecido. Lo dice su Palabra, no lo dude. Obediencia y
fidelidad son clave para la bendición, la abundancia y el éxito. Comience a caminar hoy
en ellas. Diga conmigo: ¡En mi casa hay bendición!

Cuarto, Ser un diezmador.

Hay mucha gente que al escuchar la palabra “diezmo” pareciera que escucharan la
palabra “maldición”. Pero es justamente al revés. Al darle a Dios el diezmo se libera la
bendición. Recordemos un versículo muy conocido: “Traed todos los diezmos al alfolí
y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si
no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta
que sobreabunde.” Dice que cuando llevamos nuestros diezmos al alfolí se abren las
ventanas de los cielos y se derraman las bendiciones hasta la sobreabundancia.

“¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el eneldo


y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe.
Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello.” Mateo 23:23

Le pregunto ¿Qué es más importante, el dinero o la bendición? Recuerde el versículo de


Proverbios 10:22 que dice La bendición de Jehová es la que enriquece,
Y no añade tristeza con ella. Entonces ¿Qué me responde? Yo me quedo con la
bendición porque es la me enriquece, no el dinero.

Fíjese que si Abraham se iba con el dinero se perdía las bendiciones porque quedaban
bloqueadas por la desobediencia y la infidelidad. Pero él no lo hizo de esta manera.
Tenía un corazón puro, agradecido. Si usted aprende a administrar bien todo lo
que llega a su mano siendo primero obediente y fiel a Dios, todo comenzará a
multiplicarse en su vida. Usted es un descendiente de Abraham y heredero según la
promesa, entonces, siga sus pisadas. Él dio el diezmo y obtuvo bendiciones. Haga usted
lo mismo y estará bendecido. Diga conmigo: ¡En mi casa hay bendición!

Oración: Padre, gracias por tu Palabra porque me trae sabiduría para caminar en
bendición. Seré obediente a ella y me guardaré en fidelidad. Lo declaro, en el nombre de
Jesús, amén.

Benditos en Cristo

3 Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda
bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo, Efesios 1:3

Su vida y mi vida ya están bendecidas en Cristo. Hemos sido trasladados del reino de
las tinieblas al de la luz y en este reino no hay maldición. Es importante que crea y
tenga revelación de esta verdad. Usted ya está bendecido con TODA bendición. Nada le
falta, sólo tiene que permitir que lo que ya tiene salga a la luz, de lo contrario, usted
leerá en la Biblia que es bendito pero seguirá caminando en derrota.

Debemos formar la creencia de que somos benditos, no puedo decir ahora soy bendito y
mañana decir todo me va mal. No! Usted es bendito, crea en esto según lo que dice la
Palabra. Su economía es bendita, su familia es bendita. No hay quien lo pueda maldecir.
Debe creer y caminar en esta creencia. La bendición que está en su interior le da la
habilidad de tener éxito en cada área de la vida. Es tiempo de ver resultados positivos!
Pero para verlos, aplicar la Palabra es fundamental. La obediencia en fe es lo que activa
la manifestación de la bendición.

Es muy importante hacer las cosas a la manera de Dios, no podemos hacer las cosas
según nos parezca a nosotros y luego pedir que Él bendiga lo que hemos hecho. Muchas
veces la bendición no se manifiesta porque hay rebelión, amargura, falta de perdón, etc.
Hay muchas causas que frenan la bendición pero si usted le permite al Espíritu Santo, Él
le revelará en qué áreas está fallando, la Palabra misma cuando la lea, se lo indicará.
Mientras haya rebelión y desobediencia, no podrá vivir al nivel que Dios le preparó.

Obedezca a la Palabra de Dios con fe y en amor. No caiga en la trampa de la religión, la


cual lo llevará a cumplir solo normas. Tenga una relación con el Padre celestial y por
amor obedezca. Usted revelará al igual que Jesús, Su gloria en la tierra.

Oración: Padre, gracias, me has colocado en el lugar de la bendición. En Jesús tengo


todo. Ayúdame a caminar en obediencia para reflejar al mundo la grandeza de tu gloria
en mi vida, mi familia, mi economía. Creo que soy bendito y todo lo que toquen mis
manos está bendecido. Gracias. En el nombre de Jesús. Amén.

La fe para que funcione necesita de la revelación de Su Palabra:


Para eso debo tener hambre de la relación con Dios para ser saciada…
Cristiano que no prospera espiritualmente, difícilmente prosperará exteriormente,
materialmente.

La prosperidad espiritual depende de la relación con Dios y ésta es algo personal, algo
íntima.

La fe es por el continuó oír la Palabra de Dios. Romanos 10:17= Así que la fe es por el
oír, y el oír, por la palabra de Dios

Cuanto más oigo, más se me formarán los pensamientos de Dios.


Pensar como Dios piensa sería pensar como una persona bendita…y la fe funciona en lo
bendito!!
Isaías 55:6= Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está
cercano

Estamos en el tiempo de buscar los pensamientos de Dios. El que busca tendrá algo para
encontrar.

Isaías 55:7= Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase
a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en
perdonar

Inícuo e impío son la misma cosa. Un camino es una forma de vivir…las acciones
responderán a nuestros pensamientos. Si no dejo lo que tengo que dejar no es porque no
puedo sino porque no quiero dejarlo.

Isaías 55:8= Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros


caminos mis caminos, dijo Jehová

Todos somos seres pensantes. Los pensamientos son palabras.

Isaías 55:9= Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más
altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos.

Pensar como un bendito es pensar en su nivel, en su altura, con una conciencia elevada.
La manera de subir a los pensamientos de Dios es por primero escuchar
permanentemente, perseverantemente su Palabra.

Un bendito piensa como Dios piensa, en posibilidades: cuando sabe que lo que no pasó
… pasará … ¡¡ya no hay imposibles!!

Lo que cuesta es dejar lo maldito: porque es algo que ya está formado en mi mente, algo
demasiado limitador, complicado: si no lo veo no lo cambiaré.

1º Pedro 5:5/6= Igualmente, jóvenes, estad sujetos a los ancianos; y todos, sumisos
unos a otros, revestíos de humildad; porque: Dios resiste a los soberbios, Y da gracia
a los humildes. Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte
cuando fuere tiempo

Estaban carentes de la vestimenta de humildad.

Humildad: actitud de una persona que no es vanidosa, presumida.

1. Dios resiste a los soberbios.


2. Él da gracia (favorece, bendice) a los humildes.
3. Dios exalta al que tiene actitudes no presuntuosas, no vanas.
4. Toda persona que cree en Dios y piensa como el Señor, como consecuencia busca y
espera ser favorecido por Él.

Llega el tiempo de la exaltación para los que están caminando en fe.

Cuando hay bendición hay enriquecimiento.

Él no cambiará su manera de pensar: resiste, da gracia y exalta.


Yo no debo ir en contra de mí mismo.

Si Dios me dice cómo piensa y yo no pienso como Él, debo dejar ideas, pensamientos
que pude haber heredado y tomado por costumbre ya sea de la cultura, ó por la
enseñanza familiar, etc.

Está en mis manos, en mi decisión cuán bendecido y cuán exaltado quiero ser.
Me debo acostumbrar a una forma de pensar altiva divorciándome de esos pensamientos
presuntuosos.

Si quiero saber lo que estoy pensando…debo escuchar lo que estoy hablando…


El corazón siempre está lleno, el tema es saber de qué está lleno, pues de la abundancia
del corazón habla la boca.

Génesis 12:1= Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y
de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré.

Dios le había dicho “éste es mi pensamiento para contigo Abram.


¿Cómo formó Abram el pensamiento de un bendito?: pensando como él.

Génesis 12:4= Y se fue Abram, como Jehová le dijo; y Lot fue con él. Y era Abram de
edad de setenta y cinco años cuando salió de Harán

La fe funciona cuando hay acuerdo: si Abram no se iba, Dios no podría hacer…

En el vers.1 Dios le dice que piensa darle una nueva tierra.

En el vers.2 le dice que piensa hacer de él una gran nación y será bendecido.
Piensa en engrandecerle y enaltecerle.

En el vers.3 piensa hacerle una bendición para los demás.

En el vers.4 Abram tenía 75 años, tenía hábitos y costumbres…pero las cambió!!


Tomó acción sobre el pensamiento que Dios tenía con él.
Pensar en lo que Dios piensa es lo más alto que puedo pensar…
Génesis 12:5= Tomó, pues, Abram a Sarai su mujer, y a Lot hijo de su hermano, y
todos sus bienes que habían ganado y las personas que habían adquirido en Harán, y
salieron para ir a tierra de Canaán; y a tierra de Canaán llegaron.

Abram comenzó a hacer y a actuar como bendito porque pensaba como Dios.
Cosas que no tomé acción es porque aún no pienso como Él piensa.
¿Cómo sé que Abraham oraba como un bendito?

1- él pensaba y hablaba como bendito: con conciencia de abundancia.


2- Sara aprendió a pensar y hacer lo mismo que su marido.
3- todos los días decían lo mismo, no cambiaban lo que decían.

Génesis 12:7/9= Y apareció Jehová a Abram, y le dijo: A tu descendencia daré esta


tierra. Y edificó allí un altar a Jehová, quien le había aparecido. 8 Luego se pasó de
allí a un monte al oriente de Bet-el, y plantó su tienda, teniendo a Bet-el al occidente
y Hai al oriente; y edificó allí altar a Jehová, e invocó el nombre de Jehová. 9 Y
Abram partió de allí, caminando y yendo hacia el Neguev.

Dios necesitó que Abram piense como Él, entregándole :

novillo= placeres carnales


cabra= inestabilidad
carnero= alabanza
tórtola= tristeza/aflicción
pichón= entrega total

Todo esto requiere de un proceso evolutivo.

Para vivir una vida de fe necesito una entrega total: ¡¡ no vivo yo más Cristo vive en
mí!!
Conozca sus derechos de pacto

¿Se ha hecho estas preguntas alguna vez: ¿Por qué está costando tanto tiempo que mi
manifestación ocurra? ¿Por qué no estoy viendo los resultados a mis oraciones ahora
mismo? Yo sé que Dios me oye pero las cosas no están cambiando. Estoy pagando mis
diezmos, yendo a la iglesia, caminando en amor… estoy haciendo todo lo que conozco
pero las cosas no han cambiado todavía… Yo me he sentido de esta manera antes y
estoy seguro que algunos de ustedes, también.

Quiero compartir algo con usted que Dios me marcó sobre estas mismas
preguntas. Todo nos lleva a esto: hay dos tipos de cristianos, los que conocen sus
derechos de pacto y los que no.

Tenemos que darnos cuenta como hijos de Dios que se nos ha dado todos estos derechos
de pacto sólo por aceptar a Jesús como nuestro Salvador. ¿Pero qué es exactamente un
pacto? Un pacto es un acuerdo entre dos partes. Las partes en este caso son Dios y
usted.

Por ejemplo, si yo tuviera un contrato con un hombre para pintar su casa, mi parte del
contrato sería pintar la casa, y su parte del contrato sería pagarme. De una manera, esto
es lo mismo con Dios. ¡Nuestra parte es ser obediente y la parte de Dios es asegurarnos
que siempre triunfamos a través de Cristo Jesús! (1ª Corintios 15). ¿Qué significa
“siempre”? ¡Significa siempre! Recuerde esto y nunca olvide que Dios es fiel. ¡El
juego no está terminado hasta que usted gane! No está terminado hasta que usted tenga
la victoria.
Pacto de David con Dios

Miremos un hombre que sabía un montón sobre los derechos de pacto. En 1ª Samuel
17:22-36, leemos una historia muy familiar. Acá tenemos a David subiendo en contra
de Goliat, y por el standard del mundo, Goliat era un campeón.

Pero por los standards de David, y los de Dios, ¡Goliat era un filisteo incircunciso quien
no tenía un pacto con Dios! En realidad, David siguió diciendo en 1 Samuel 17:36:
“… y este filisteo incircunciso será como uno de ellos, porque ha provocado al ejército
del Dios viviente.”

David conocía su pacto con Dios. Él comprendía que no tenía que ser el hombre más
grande ni el mejor de ese lugar, él sólo tuvo que tener un acuerdo con Dios. Un acuerdo
que le decía que él siempre triunfaba. Por lo tanto, debido a que él conocía su pacto con
Dios fue capaz de decir: “…porque ha provocado al ejército del Dios
viviente...” David operaba en lo invisible… él sabía antes de la batalla que era el
ganador. ¡Las cosas tienen que suceder en lo invisible antes de que sucedan en lo
visible!

Muchas veces la gente quiere ser capaz de ver las cosas sin operar en la esfera invisible
de la fe. ¡Recuerde que la Biblia nos habla que la fe es “la sustancia de las cosas
esperadas, la evidencia de las cosas que no se ven”! Muchas veces, las cosas tienen
que suceder en lo invisible, en la esfera espiritual antes de que sucedan en lo
natural. Pero algunas veces lo que sucede es que oramos y luego esperamos que la
respuesta suceda en esta sociedad con velocidad de comida rápida.

¡Lo queremos ahora! Y cuando no sucede inmediatamente, abandonamos y perdemos


nuestra confianza en nuestro pacto con Dios. Pedro fue un ejemplo de esto. ¿Caminó
Pedro sobre el agua? ¡Sí, lo hizo! Él caminó sobre el agua cuando operaba en la esfera
invisible, manteniendo sus ojos en Jesús… ¡pero cuando miró en lo natural, comenzó a
caerse!

Tenemos que aprender como hijos de Dios a mantenernos firmes a nuestro pacto con
Dios y debemos responder a nuestras situaciones así como Noé lo hizo, quien, siendo
advertido de las cosas que no se ven, obedeció y edificó el arca. Usted habla sobre
pararse sobre su pacto con Dios. Noé no vio una señal de lluvia por años. La mayoría
de nosotros hubiéramos esperado dos días y hubiéramos dicho: “¡Bueno, no está
funcionando!” ¡Entonces nos hubiéramos agotado!

¡Ya basta, campeones! Tenemos que dejar de dudar de nuestro pacto. Si usted no
conoce su pacto, entonces estudie la Palabra de Dios – está llena de nuestros derechos
de pacto. Una vez que usted conoce su pacto entonces manténgase aferrado a través de
toda situación – sin dudar.

¡Debemos desarrollar esa mentalidad de campeones que no vamos a


abandonar! Nosotros vamos a pararnos en nuestro pacto con Dios y las cosas van a
suceder en la esfera invisible y en lo natural. La victoria verdadera y total es nuestra.

Su incremento está en sus manos

Una de nuestras mayores herramientas para sembrar y cosechar es nuestro dar


finanzas. Piense qué es realmente el dinero. Es la vida de una persona en forma de
semilla. Damos de nuestro tiempo y trabajo o ideas para ganar nuestro dinero. Ahora, a
través de nuestro dinero, podemos sembrar nuestras vidas en muchas áreas del reino.

Cuando sembramos para promocionar la Palabra, estamos poniendo en marcha el


incremento. Dar de esta manera es algo espiritual que Dios recibe y multiplica. Cuando
damos, nuestro dinero deja nuestras manos, pero nunca deja nuestras vidas. Deja
nuestra situación presente, y entra a nuestro futuro. Dios puede añadir a lo que usted
tiene, pero Él puede multiplicar lo que usted da.

Jesús demostró esto un día cuando estaba enseñando y sanando a una multitud de
gente. Ellos habían estado ministrando hasta la noche y la gente estaba
hambrienta. Observe lo que Él hizo:

“Cuando anochecía, se acercaron a él sus discípulos, diciendo: El lugar es desierto, y


la hora ya pasada; despide a la multitud, para que vayan por las aldeas y compren de
comer. Jesús les dijo: No tienen necesidad de irse; dadles vosotros de comer. Y ellos
dijeron: No tenemos aquí sino cinco panes y dos peces. El les dijo: Traédmelos
acá. Entonces mandó a la gente recostarse sobre la hierba; y tomando los cinco panes
y los dos peces, y levantando los ojos al cielo, bendijo, y partió y dio los panes a los
discípulos, y los discípulos a la multitud. Y comieron todos, y se saciaron; y recogieron
lo que sobró de los pedazos, doce cestas llenas. (Mateo 14:15-20)”

Jesús dijo a los discípulos que tomen lo que tenían y se lo den a Él. Lo que ellos tenían
en sus manos era realmente comida que pertenecía a un joven presente. Jesús bendijo lo
que ellos le dieron y se los devolvió. Pero ahora había una diferencia.

Una vez más, los discípulos tenían en sus manos los panes y los peces, sólo esta vez el
alimento fue bendecido y capaz de ser multiplicado. Los discípulos comenzaron a dar
la comida a la gente hasta que se saciaron. Ellos pasaron de no tener lo suficiente a
tener más que suficiente. Y lo hicieron siguiendo una simple instrucción. Jesús
dijo: “Traédmelos acá.” Si lo que usted tiene en sus manos no suple su necesidad –
puede ser su semilla.

Dé a Dios Algo con lo cual Trabajar

Los discípulos no tenían suficiente para suplir la necesidad, entonces Jesús dijo que le
dieran lo que tenían.

Él estableció las leyes de Su reino para llevarlo a usted a un lugar de provisión


abundante, pero usted debe poner algo en Sus manos.

Esta provisión de milagro sucedió justo delante de sus ojos. Esa no es siempre la
manera en que viene el incremento, pero el incremento siempre viene. Gálatas 6:9
dice: “No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no
desmayamos.” Usted no debe abandonar sino continuar sembrando y esperar la
cosecha. ¡La estación esperada siempre viene!

Su incremento está en sus manos en forma de semilla. Plante lo que usted tiene y
obsérvelo crecer.
10 verdades acerca de tu cosecha

Estamos creyendo que este es el año 2013 es el año de la liberación explosiva. Y


creemos que muchos creyentes en todo el mundo están experimentando la
manifestación de la cosecha de todo lo sembrado.

Aquí le mostramos 10 verdades acerca de la cosecha para que usted pueda reconocerla y
darle Gloria a Dios por vivir en este tiempo tan maravilloso…

1. Cosecha es cualquier persona o cualquier cosa que te bendiga o beneficie. Puede que
sea alguien que pueda contribuir con algo que tú necesites: información, favores,
finanzas, una idea explosiva o ánimo cuando tú más lo necesites.
2. Tu cosecha Ya existe. ¡Está caminando a tu alrededor! Así como tus ojos debieron ser
abiertos para reconocer a Jesús, tus ojos también deben ser abiertos para reconocer tus
cosechas al venir.
3. El acceso a alguien que cree en ti es una cosecha. Cada conexión de oro es una
cosecha.
4. Tu cosecha ocurre cuando alguien te recomienda a otros. Cualquier fluir de favores y
aceptación de tu vida es una cosecha.
5. El mundo entero se perdió la cosecha de Jesús. “En el mundo estaba, y el mundo por
él fue hecho; pero el mundo no le conoció. A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.”
Juan 1.10,11. ¡Cuán trágico! Los líderes espirituales, tal como los fariseos, ¡fallaron en
reconocerle! Los políticos de su día fallaron en verlo como su cosecha.
6. Todo lo que posees provino de Él.
7. Todo lo que llegares a tener en tu futuro debe provenir de Él.
8. Tu cosecha milagrosa está pasándote de largo. Puede que falles cada día en verla. Que
falles en apropiártela. Que falles en ser agradecido por ella.
9. Debes detenerte lo suficiente como para celebrar el bien que está sucediendo
alrededor de ti.
10.Tú estás moviéndote continuamente hacia tu gloriosa cosecha. Algo maravilloso
también se mueve hacia ti. ¿Puedes detenerte lo suficiente como para discernirlo?

El reconocer tus cosechas destruirá la raíz de amargura, liberará un entusiasmo sin par y
abrirá miles de puertas favorables en tu vida.

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