Sei sulla pagina 1di 57

PROYECTO NACIONAL Y NUEVA HEGEMONÍA

JUNIO 2010
INTRODUCCIÓN

En el año 1999, Venezuela entra en una fase de turbulencia que trastoca la vida socio-
económica y política del país. La convocatoria a una Asamblea Constituyente como
instrumento político, es la primera manifestación de los profundos cambios que se
avizoraron en el panorama socio político, cuya resultante fue la aprobación, por la vía del
referéndum, de una nueva Constitución.

En correspondencia con el texto constitucional se redefine el Proyecto Nacional. En la


Constitución de la República Bolivariana de Venezuela están plasmadas las orientaciones
filosóficas, la misión y los objetivos del nuevo proyecto. A partir de ese momento el país
entró en un proceso de transformación social y de reformulación institucional. La
instrumentación de ese proyecto comenzó con la intención soberana de refundar la
República, con el propósito de:

Establecer una sociedad democrática, participativa y protagónica,


multiétnica y pluricultural en un Estado de justicia, federal y
descentralizado, que consolide los valores de la libertad, la independencia,
la paz, la solidaridad, el bien común, la integridad territorial, la convivencia
y el imperio de la ley, para ésta y futuras generaciones; asegure el derecho
a la vida, al trabajo, a la cultura, a la educación, a la justicia social y a la
igualdad sin discriminación ni subordinación alguna, promueva la
cooperación pacífica entre las naciones e impulse y consolide la
integración latinoamericana de acuerdo con el principio de no intervención
y autodeterminación. (Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela, preámbulo)

Este marco valorativo desarrollado ampliamente en la Constitución −que apunta a un


modelo de desarrollo integral sostenible y sustentable, cuyo énfasis está en garantizar el
pleno ejercicio de la dignidad humana− responde a la necesidad de consolidar una
sociedad en la cual el parámetro regente del dinamismo socioeconómico tenga como
punto de partida la revisión de la propia noción del desarrollo, la capacidad -
potencialidad de la población y la territorialidad del potencial productivo.
El paradigma propuesto concibe una nueva estructura y una nueva lógica de
funcionamiento, tanto del Estado como de la sociedad; demanda, además, un movimiento
popular formado, comprometido y decidido a enfrentar los retos de un modelo productivo
orientado a combatir la exclusión social, al logro de una vida mejor y al respeto y
conservación del medio ambiente.

Mención especial merece la participación social, en tanto hay un reconocimiento más


amplio de los derechos sociales, y se introduce la noción de corresponsabilidad entre los
ciudadanos y el Estado para asumir los asuntos públicos. De esta manera la participación
obtuvo un reconocimiento con rango constitucional dentro del nuevo modelo político.

En la arena socio política se reconocen y amplían las figuras que expresan la participación
social: comunidad organizada, asambleas de ciudadanos, cabildos abiertos y colectivos
sociales. Los alcances de la participación superan la esfera electoral y llegan hasta la
intervención directa en asuntos de incumbencia pública. En correspondencia con las
nuevas relaciones Estado-sociedad, aparecen también nuevos mecanismos y espacios
participativos, a saber: la transferencia de servicios, la participación en procesos
económicos y de control, de carácter social.

Por su parte, el Estado aparece como el garante de los derechos sociales y los derechos
de tercera generación. Esto exige a la funcionaria y al funcionario público su conversión
como servidores públicos y agentes fundamentales para consolidar una nueva
institucionalidad regida por nuevos procedimientos de gestión, criterios de eficacia,
eficiencia y de vocación de servicio.

Es evidente que la instrumentación y consolidación del Proyecto Nacional requiere el


concurso y el esfuerzo por parte de todos. Para ello, es necesario en principio, su
comprensión, su apropiación consciente y su consolidación, mediante la activación e
implementación de su contenido en la cotidianidad. En el entendido de que, se concibe
la educación como un agente socializador clave para enfrentar el pensamiento
excluyente-hegemónico, a partir de una práctica educativa concordante con las
expectativas y preferencias de los aspirantes, que guarda correspondencia con
las demandas y necesidades identificadas en los contextos locales, pero que
además se articula a las líneas y objetivos del Plan de Desarrollo Económico
Social de la Nación (PLANDES).

En función de los contenidos expuestos, la unidad curricular Proyecto Nacional y Nueva


Hegemonía es una invitación y una posibilidad de conocer el Proyecto Nacional, con el
propósito de insertar a los triunfadores y triunfadoras en una dinámica de aprendizaje
cimentada en la búsqueda y la construcción de saberes, en correspondencia con las
líneas generales del Plan de Desarrollo Económico y Social, mediante una dinámica que
concibe el aprendizaje como una forma expresa de participación democrática y como una
herramienta para la construcción de la soberanía cognitiva, entendida ésta, como medio
para avanzar en la construcción de una nueva sociedad, un sistema económico centrado
en el ascenso social, la inclusión en todas sus expresiones, el fortalecimiento de la
corresponsabilidad social y la construcción y consolidación de una nueva hegemonía.

Se entiende la nueva hegemonía como los procesos de “dominio” y


“dirección” conducidos por el pueblo identificado con un proceso
revolucionario, con un líder y un proyecto de cambio estructural de la
sociedad e intentando siempre de manera consciente preservar,
mantenerse y consolidarse en el poder, sobre los factores que fueron
desplazados y que luchan por volver, es decir. El ENEMIGO: EL
CAPITALISMO NACIONAL E INTERNACIONAL Y SUS ALIADOS.
(Universidad Bolivariana de Venezuela, 2009)
EJES TEMÁTICOS, OBJETIVOS Y DEFINICIÓN ESTRATÉGICA

Objetivo general:

Presentar la dinámica que regirá el desarrollo del módulo Proyecto Nacional y Nueva
Hegemonía, así como sus contenidos.

EJE OBJETIVOS ESPECÍFICOS DEFINICIÓN ESTRATÉGICA


TEMÁTICO
* Generar un proceso de Este eje tiene carácter
Presentación
revisión analítica del módulo. introductorio y refiere a La
del módulo
revisión del programa y al
* Revisar estrategias de orden establecimiento de los
cognitivo, instrumental y lineamientos generales. Se
afectivo conducentes a una desarrolla en cuatro contenidos:
formación comprometida en lo
ético-político. − Concepción del proceso
formativo.
* Establecer los acuerdos de
funcionamiento. − Objetivos, contenidos
temáticos, plan de trabajo, plan
de evaluación.

− El triunfador(a) como
sujeto de transformación.

− Establecimiento de las
pautas y acuerdo de
funcionamiento que regirán las
sesiones de trabajo.

5
Objetivo general:
Reconocer en las nuevas relaciones Estado sociedad el espacio para consolidar la
hegemonía del poder popular, como premisa fundamental del proyecto país.

EJE OBJETIVOS ESPECÍFICOS DEFINICIÓN ESTRATÉGICA


TEMÁTICO
* Identificar las características Los contenidos de este eje
Relaciones
que asumen las relaciones ilustran acerca de las
Estado-
Estado sociedad de acuerdo al posibilidades que ofrecen las
sociedad
modelo de Estado. relaciones Estado-sociedad para
como
el fortalecimiento del poder
espacio para *Precisar los ejes articuladores
popular. Se resume en dos
la de una relación Estado-Poder
contenidos fundamentales:
construcción Popular, potenciadora de la
de una construcción de una nueva
- Relaciones Estado-
nueva hegemonía.
sociedad de acuerdo al modelo
hegemonía
de Estado:
− Estado liberal
-Estado social de derecho y de
justicia.

- Estado-Poder popular y
nueva hegemonía.

6
Objetivo general:
Revisar el proceso de conformación de la sociedad latinoamericana a la luz de modelos
culturales socio diversos.

EJE OBJETIVOS ESPECÍFICOS DEFINICIÓN ESTRATÉGICA


TEMÁTICO
La sociedad * Distinguir el horizonte y la En Este eje se revisan las bases
multiétnica y racionalidad de otras conceptuales-referenciales de los
pluricultural opciones político-culturales procesos
presentes en el avance inherentes a la conformación de
histórico social de los pueblos. la sociedad venezolana. Refiere
dos contenidos:

− Conformación de la
sociedad venezolana.
Contexto socio histórico.
− Venezuela multiétnica y
pluricultural.

7
Objetivo general:
Valorar la importancia de las directrices establecidas en el Plan de Desarrollo Económico
Social (PLANDES) como el instrumento rector para lograr el cambio estructural del país.

EJE OBJETIVOS ESPECÍFICOS DEFINICIÓN ESTRATÉGICA


TEMÁTICO
Lineamientos * Reconocer en la planificación Este eje plantea la posibilidad
del Plan de una función esencial del de concretar a nivel operativo
Desarrollo Estado, aplicada en forma lo expuesto en la Constitución
Económico y corresponsable con la de la República Bolivariana de
Social sociedad. Venezuela (CRBV), mediante
los lineamientos de desarrollo
* Revisar la visión y las y los planes de la nación en
directrices del Proyecto sus distintas escalas. Se
Nacional. desarrolla a través de los
siguientes contenidos:

− Planificación y Política,
ejes del Proyecto Nacional.

− Antecedentes del Plan


de Desarrollo,

− Líneas generales del


Plan de Desarrollo 2007-
2013.

− Las misiones como


estrategia de atención a lo
social.

8
Objetivo general:
Analizar la importancia del petróleo para la consolidación de un modelo de ascenso
social, político y económico soberano.

EJE OBJETIVOS ESPECÍFICOS DEFINICIÓN ESTRATÉGICA


TEMÁTICO
Soberanía, * Estudiar la soberanía Este eje refiere a: la noción de
territorio y nacional, desde un enfoque soberanía en su concepción
petróleo integral, en sus diversas ampliada; lo constituyen dos
dimensiones. contenidos:

- El espacio geográfico y
el ejercicio de la soberanía.

- Uso soberano y
estratégico del potencial
energético petrolero.

9
Objetivo general:
Reconocer en la integración latinoamericana la posibilidad de superar la desigualdad
socio económica, cultural y de seguridad de la región.

EJE OBJETIVOS ESPECÍFICOS DEFINICIÓN ESTRATÉGICA


TEMÁTICO
La integración * Precisar en la integración En este eje se consideran los
latinoamerican latinoamericana la posibilidad siguientes contenidos:
a, estrategia de enfrentar los efectos de la -La integración
frente a la globalización. latinoamericana al contexto
globalización económico mundial.
*Estimular la reflexión- -Propuestas alternativas para
comprensión de la integración la integración en sus distintas
latinoamericana como dimensiones.
mecanismo para el ascenso -Estrategias políticas de
social, político y económico de integración: ALBA, ASA,
la región. MERCOSUR

10
Objetivo general:
Analizar la noción de participación en el marco del proyecto país y sus implicaciones en la
construcción de una nueva hegemonía.

EJE OBJETIVOS ESPECÍFICOS DEFINICIÓN ESTRATÉGICA


TEMÁTICO
La * Distinguir la participación En este eje se abordan las
participación protagónica como la estrategia prácticas que permiten
protagónica y fundamental para alcanzar la repensar el país en y como
la transformación en todos los colectivo socio político. Lo
transformación ordenes de la vida nacional conforman los siguientes
social. contenidos:
- La participación
protagónica en la
Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela.

- La comunicación
estrategia fundamental para
la acción-participación y la
transformación social

- Los efectos de la
participación protagónica y
corresponsable en la
construcción de una nueva
sociedad. ¿Qué supone,
como se hace, qué
requiere?

- La estrategia
metodológica fomenta la
relación teoría-práctica
mediante experiencias en
campo con organizaciones
11
comunales.

12
ENCUADRE METODOLÓGICO

La noción de la didáctica, debe ajustarse a la concepción y las dimensiones que establece


la Ley Orgánica de Educación en su artículo 14, que declara “la didáctica está centrada en
los procesos que tienen como ejes la investigación, la creatividad y la innovación, lo cual
permite adecuar las estrategias, los recursos y la organización del aula, a partir de la
diversidad de intereses y necesidades de los y las estudiantes”.

Se pretende que el colectivo de la Misión Sucre, a nivel nacional, supere la visión


fragmentada y parcelada de los saberes y trascender hacia una visión del proceso
formativo centrado en una práctica educativa vinculada al entorno. Es pertinente revisar la
comunicación como estrategia pivotal para la construcción-divulgación de un
conocimiento forjado a la luz de la realidad cotidiana y la toma de conciencia sobre el rol
protagónico de los pueblos en el actual momento histórico.

En este orden de ideas, la comunicación constituye un eje transversal, asumida desde un


enfoque hermenéutico basado en la dimensión subjetiva que trata de captar la
complejidad de las prácticas discursivas en contextos sociales particulares.

En las circunstancias históricas actuales, los procesos de búsqueda y transformación


están orientados hacia el encuentro y el diálogo, exigen a los sujetos una habilidad
relacional para la puesta en escena de acciones y expectativas entre personas
pertenecientes a diversos grupos contextualizados localmente y con expectativas frente a
las osadas propuestas y posibilidades de transformación.

La idea es conformar una red que incorpore a las y los triunfadores, docentes,
autoridades, organizaciones, instituciones y comunas, para que apoyen y se hagan
partícipes del acontecer educativo. Entre las actividades a ser realizadas por las y los
triunfadores están: lectura crítica de los materiales, discusión para intercambiar ideas
alusivas a los ejes temáticos, organización de actividades especiales, tales como:
eventos, foros, talleres, conversatorios, elaboración de documentos y/o videos.

13
EJE TEMÁTICO I

PRESENTACIÓN DEL MÓDULO

PROGRAMA: OBJETIVOS, CONTENIDOS TEMÁTICOS,


PLAN DE TRABAJO, PLAN DE EVALUACIÓN

14
* CONCEPCIÓN DEL PROCESO FORMATIVO

La propuesta de formación promovida por la Misión Sucre rompe con los enfoques
tradicionales, encapsulados en una concepción tecnocrática y academicista, forjadora de
esquemas interpretativos y valorativos disonantes. El proceso de aprendizaje debe dar
cabida a lo inusitado, lo complejo, la indagación y, de manera especial, al desarrollo de
capacidades, habilidades y destrezas para la comprensión y el manejo de procesos y de
problemas de carácter mundial, nacional, regional y local. Esto a su vez demanda una
práctica educativa en constante interacción con las comunidades y demás sujetos
sociales.

La dimensión sociopolítica, cultural y ambiental de las localidades conforma la plataforma


de adscripción del proceso educativo, en concordancia con la dinámica del desarrollo
local y el Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación. En tal sentido, la formación
se adecua al mundo de vida del triunfador(a), tanto en el plano personal-familiar, como en
el plano colectivo- comunal, cuya realidad justifica la presencia de la Misión.

Los ambientes de aprendizaje facilitan la articulación institucional, la creación intelectual,


la vinculación social, y el intercambio de saberes; de esa manera se busca favorecer la
investigación y la creación-aplicación del conocimiento en contextos concretos complejos,
donde se entrecruzan las experiencias cotidianas de una diversidad de actores con
representaciones, necesidades, demandas, así como, con fortalezas, potencialidades y
un conocimiento producto de sus prácticas. Se establece un modelo académico
comprometido no sólo con la formación, sino también con la inclusión y con la
transformación social.

De acuerdo a lo expuesto, se pretende facilitar a las y los triunfadores un proceso de


formación de elevada calidad, vinculado al desarrollo social y económico, y
contextualizado a nivel local con uso de métodos y estrategias potenciadores de una
nueva relación estudiante-comunidad-universidad, de acuerdo a lo establecido en la
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Se aspira un egresado(a) de alto
nivel, comprometido en lo técnico-profesional, lo tecnológico y lo cognitivo-afectivo.
(Misión Sucre. Dirección de Gestión Académica. 2009)

15
* EL TRIUNFADOR COMO SUJETO DE TRANSFORMACIÓN

En el entendido de que la educación universitaria tiene un sentido de trascendencia,


concomitante con la formación de sujetos sociales más que de profesionales y
especialistas acordes a la lógica del mercado ocupacional, las y los triunfadores en su
proceso formativo responden a una relación teoría práctica, cuya dinámica los vincula a la
realidad del país. Entiéndase: necesidades, exigencias, posibilidades y potencialidades;
por tanto, son corresponsables del progreso nacional y del desarrollo sustentable; con
capacidad de emprender y construir sus propios espacios de incorporación a la vida social
y productiva, formados para la consolidación de la democracia participativa, la soberanía
nacional y [la nueva hegemonía] (Misión Sucre, s/f. Pág. 27).

A la luz de la práctica educativa, las y los triunfadores, además de fortalecer y adquirir


nuevos conocimientos, participan de las expresiones culturales y se involucran en el
devenir de su localidad. Esto implica repensar su formación en términos del desarrollo de
capacidades, habilidades y destrezas conducentes a potenciar la dimensión personal,
comunal y política; a la valoración positiva y propositiva de su hábitat, con la
correspondiente implicación en el entorno, desde una perspectiva crítica transformadora,
que otorga nuevos sentidos y significados, canalizados hacia la organización-
participación, orientada a ejecutar proyectos con sentido de utilidad pública.

* ESTABLECIMIENTO DE LAS PAUTAS Y ACUERDOS DE FUNCIONAMIENTO QUE


REGIRÁN LOS ENCUENTROS FORMATIVOS

El proceso de aprendizaje supone la interacción permanente y dialógica entre el docente


colaborador, las y los triunfadores y los sujetos del entorno, por lo que el colectivo de
aprendizaje fija las reglas, mecanismos de articulación, así como lo concerniente al
componente administrativo, evaluación, encuentros para la discusión, reflexión, análisis y
las actividades de campo.

16
EJE TEMÁTICO II

RELACIONES ESTADO-SOCIEDAD COMO ESPACIO


PARA
LA CONSTRUCCIÓN DE UNA NUEVA HEGEMONÍA

17
RELACIONES ESTADO- SOCIEDAD DE ACUERDO AL MODELO DE ESTADO

Este segundo eje temático introduce los elementos esenciales de la vinculación que se
establece entre el Estado a través de la institucionalidad y la sociedad como un todo, en el
espacio de lo público. En toda sociedad se establecen vínculos entre el colectivo social y
los entes responsables de ejecutar las políticas públicas. De hecho, la institucionalidad
pública y las autoridades nacionales, regionales y locales encarnan el Estado. Si bien,
esta relación caracteriza a los regímenes democráticos, la lógica relacional no es única,
varía de acuerdo al tipo de democracia, que a su vez define un modelo de Estado.

En esta unidad se revisará la relación Estado-sociedad a la luz de los modelos de Estado


que históricamente han regido al país, a fin de facilitar la comprensión de los cambios
experimentados en la sociedad venezolana en la última década, lo que remite
necesariamente a adentrarse en los procesos y mecanismos a través de los cuales el
Estado y la sociedad se articulan en el marco del proyecto país.

* RELACIONES ESTADO-SOCIEDAD EN EL ESTADO LIBERAL

ANTECEDENTES
Como es bien sabido, en las últimas tres décadas se han producido cambios sustanciales
en la sociedad en general. Uno de esos cambios alude a lo que se denominó la quiebra
del Estado benefactor. Si bien en América Latina y, específicamente en Venezuela, este
modelo, surgido en Europa, no llegó a consolidarse, es necesario mencionarlo porque en
el discurso político estuvo presente durante un largo tiempo, lo que generó expectativas
crecientes de progreso y mejoras en la sociedad.

Se entiende por Estado benefactor al sistema social que se consolidó, principalmente en


Europa, luego de la II Guerra Mundial. Estuvo asociado a los años exitosos y prósperos
del capitalismo en los años cincuenta y sesenta, gracias al crecimiento económico y a su
incidencia en los elevados niveles de productividad y en la expansión del consumo y la
demanda de bienes. Adquirió gran significado porque impuso un modelo garante del

18
predominio de las economías del norte,desarrollado principalmente sobre los países que
estuvieron bajo su dominio en calidad de colonias.

En Venezuela, el régimen democrático instaurado a partir del año 1958, bajo la égida de la
sociedad liberal burguesa, se logró con el apoyo de todos los sectores que en el momento
conformaban la escena política y económica del país. El establecimiento del régimen se
basaba en un modelo que concebía la participación social sólo a nivel político,
específicamente en la dimensión electoral, lo que atribuye a la democracia el carácter de
representatividad. El Estado era el agente fundamental, a él se le atribuía la
responsabilidad de impulsar el desarrollo económico y social en el país, lo que a la vez
implicaba transformar la estructura de la sociedad venezolana. A través de las políticas
sociales, el ente rector intentaba aproximarse a un Estado de bienestar.

Como propuesta de la Venezuela petrolera, a la luz de este modelo, el Estado pretendió


controlar la vida en todos los órdenes y asumió su intervención en todos los espacios
públicos y privados con la finalidad de satisfacer las necesidades de la sociedad a través
de la redistribución de los ingresos; al mismo tiempo, promovió el desarrollo económico y
el bienestar social. Sin embargo, este modelo no llegó a concretarse ni mucho menos
logró brindar el bienestar que ofreció como objetivo central.

En la práctica no se implantó plenamente este modelo, debido a que, pese a lo que


profesaba, no logró el carácter universal, solidario e integral. Entre las causas de su
fracaso destacan la irresponsabilidad política y la inconsistencia entre la política
económica y la política social.

Las relaciones Estado-sociedad estuvieron signadas por un modelo de administración


altamente centralizado, incapaz de responder rápida y oportunamente a los problemas
existentes; en consecuencia, la gestión gubernamental se tornó ineficaz. A la vez que se
insistía en la participación ciudadana para la resolución de los problemas, el carácter
representativo del sistema democrático limitó su concreción, toda vez que dejó sin efectos
el liderazgo de los sectores populares.

*ESTADO NEOLIBERAL. EL DISTANCIAMIENTO ENTRE EL ESTADO Y LA


SOCIEDAD

19
Históricamente, el sistema capitalista ha atravesado diversas etapas. La etapa actual
expresa una nueva forma de expansionismo y colonialismo (imposición de reglas
económicas de los países ricos sobre los países pobres). La sociedad se ha insertado en
una nueva era representada por la revolución digital, el avance de las tecnologías de la
información y de la comunicación, mejor conocido como globalización. A diferencia de
otros tiempos históricos lo que importa es conquistar mercados y la posición de la
riqueza. (Ramonet, Ignacio, 2008: 48).

Para que la propuesta globalizadora obtuviera legitimidad a escala mundial, se impuso


como una alternativa o justificación, el modelo de Estado neoliberal. Éste aparece en el
umbral del debilitamiento del Estado de bienestar durante la década de 1980. La
decreciente significación de la renta petrolera minimizó la capacidad financiera y política
del Estado para atender, mediante el mecanismo redistributivo tradicional, el crecimiento
sostenido de las demandas sociales. Junto con ello el aumento de la deuda interna y
externa, así como el aumento de la burocracia a gran escala, dieron al traste con la oferta
dadivosa y benefactora. La oferta neoliberal plantea la reducción y eliminación de las
inequidades sociales a través de la redistribución de los recursos, servicios,
oportunidades y capacidades, en correspondencia con el texto de la Constitución de 1961.

Los regímenes de ese momento comenzaron a adoptar los planes de desarrollo de los
organismos multilaterales, específicamente del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del
Banco Mundial. El Estado neoliberal atribuye al mercado mundial la regularización de la
dinámica social, y actúa como garante de toda la propiedad privada y de la libertad de
contratos.

Contrario a la propuesta del Estado de bienestar, la estrategia no es responder a las


necesidades sociales, sino responsabilizar a los ciudadanos de su propio bienestar. La
intervención del Estado se achica, en tanto se orienta únicamente hacia aquellos sectores
de la población para los cuales esa misma dinámica neoliberal no produce beneficio
alguno.

El Estado neoliberal canalizó los recursos para atender prioritariamente los problemas
económicos. Las partidas o presupuestos para atender lo social disminuyeron
considerablemente. Este proceso estuvo ligado a la descentralización y a la privatización
20
de la gestión de los servicios públicos, los cuales se mercantilizan, supuestamente para
hacer más eficiente y accesible la intervención social del Estado. La función del Estado se
redujo a compensar, mediante subsidios directos canalizados a través de diferentes
programas sociales, el impacto causado por los ajustes macroeconómicos. Para ello era
necesario identificar a los grupos pobres y poblaciones vulnerables que serían los
beneficiarios directos de estos programas compensatorios. En este escenario aparecieron
nuevos ejecutores de la política social: las ONG y los gobiernos regionales y locales
(D´Elia, 2002).

Sin embargo, la naturaleza y el alcance de las medidas se direccionaron hacia la


corrección de las consecuencias de la pobreza, mas no a su superación o eliminación, sin
solucionar sus causas. A finales de la década de 1980, específicamente en 1989, se
imponen unas medidas diseñadas y acordadas con el Fondo Monetario Internacional
(FMI). Estas medidas incluían entre otros ajustes, el proceso de privatización de empresas
estratégicas pertenecientes al Estado venezolano, la desregulación del capital privado, la
liberación de las tasas de interés, el aumento de la gasolina y la eliminación del control de
cambio. Con esto se pretendía no solo la reducción del tamaño del Estado, sino también
su participación en la dirección y control de la sociedad.

La panacea ofrecida mostró crudamente su ineficacia, con el agravante de que el Estado


y el sistema político fueron incapaces de construir espacios para la participación. Los
programas sociales intermediados por las Organizaciones No Gubernamentales,
incorporaron como condición para la transferencia de recursos, elevados niveles de
organización social, requisito difícil de obtener, por la histórica relación clientelar y
paternalista establecida entre el Estado y la sociedad. Esto trajo como consecuencia que,
precisamente, la población con mayores carencias y necesidades, al no calificar en
cuanto al criterio organizativo, quedara excluida de los beneficios sociales. La ejecución
de una gran parte de los programas sociales fue transferida a las comunidades
organizadas.

Amplios sectores de la población se encontraban excluidos de las redes sociales del


Estado. Ante esta crisis de la democracia representativa, la sociedad poco a poco
presionaba por la exigencia de una democracia más participativa; es decir, por el derecho
de comunidades, organizaciones sociales y múltiples sectores de pobladores de incidir
21
directamente en las políticas de interés colectivo. Prueba de ello fue el estallido social
ocurrido ese mismo año, conocido como el Caracazo, el cual fue una manifestación por el
descontento frente a los anuncios y puesta en marcha de las políticas de ajuste.

* RELACIONES ESTADO-SOCIEDAD EN EL ESTADO SOCIAL DE DERECHO Y DE


JUSTICIA

A partir de 1989, la sociedad venezolana entró en un proceso de profundos cambios a


nivel político, económico y social. En este contexto, Hugo Chávez Frías asume el poder
en el año 1999, por votación democrática. Se plantea la ampliación de la democracia, un
nuevo modelo de Estado y de sociedad fundamentado en la participación y la
corresponsabilidad. Se aprueba la actual Carta Magna en 1999, con el propósito de
ajustarse a las nuevas realidades que comenzaron a gestarse a finales de los años
ochenta y principios de los noventa.

En función de las nuevas directrices, se propone un modelo de desarrollo con dos


vertientes fundamentales:
- Crecimiento económico aparejado a una justa y equitativa distribución de la
riqueza nacional.
- Humanización de los procesos sociales.

A propósito del nuevo modelo de desarrollo, se concibe un Estado cuyos elementos


fundamentales reposan en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela:
democrático, social, de derecho, de justicia y descentralizado.

Democrático. Garantiza la separación de los poderes públicos y el respeto a la voluntad


ciudadana, a través de los procesos electorales.

Social. Trasciende la noción de los derechos humanos, a los cuales reconoce no sólo en
su dimensión individual, sino también en la dimensión colectiva, lo que se traduce en el
reconocimiento de los derechos sociales. Tiene como objetivo producir la integración de
todos los sectores que conforman la sociedad actual, sobre la base de la aceptación y el
reconocimiento de la pluralidad.

22
De derecho. A través de este principio se establece la actuación legal y constitucional de
los organismos públicos, así como su relación con la sociedad.

De justicia. Se reconoce la existencia de un sistema de justicia, orientado a respetar los


derechos sociales, económicos y culturales.

Descentralizado. Concibe una estructura cuya administración posee autonomía a nivel


regional y municipal. Las comunidades pasan a ocupar un espacio significativo en cuanto
a la transferencia de competencias, recursos y poder decisorio.

Este modelo de Estado pretende activar acciones gubernamentales concretas, mediante


políticas sociales impulsadas para erradicar la exclusión generada en la sociedad y
restablecer el equilibrio en términos de carencias/beneficios sociales.

El perfil social del concepto de equilibrio se afinca en la


exigencia histórica de balancear adecuadamente el interés
individual y el interés social, especialmente la exclusión y
marginalización… y procurar un mejor vínculo racional y justo
en la distribución social de la riqueza y el ingreso nacional
generado, de tal forma que el modelo será incluyente en la
atención de las necesidades de la población. (Escuela de
Planificación, 2009)

A diferencia de los modelos que le preceden, El Estado aparece como el gran facilitador y
potenciador del proceso de organización y participación. Sienta las bases para el
fortalecimiento del poder popular, a fin de proporcionar un conjunto de cambios en el
ámbito económico, social, político, territorial e internacional, en aras de saldar la deuda
social acumulada en el país durante 40 años aproximadamente. La responsabilidad
asumida por el Estado venezolano como garante de los derechos sociales, implica que
asume de manera ineludible el deber de satisfacer las demandas y necesidades de la
población.

*ESTADO PODER POPULAR Y HEGEMONÍA


La construcción de la nueva sociedad −enmarcada en unas relaciones de producción
justas, como plataforma para la consolidación de la democracia ampliada, en lo
económico, en lo político y en lo social− hace imperativo la erradicación del modelo de
estado liberal burgués, cuyas raíces, aún se anidan en el subsuelo de la sociedad
23
venezolana. Para ello se requiere el fortalecimiento y activación del poder popular
“constituyente originario”, por ser la esencia filosófica del Proyecto Bolivariano.

Se entiende que el poder popular reside en el pueblo. Para ser ejercido a cabalidad se
sustenta en espacios de participación y organización individual y colectiva del Estado y de
la sociedad. La Carta Magna ratifica esta acción gubernamental y proporciona al pueblo
mecanismos legales para precisar, construir y ejercer participación en el contexto
histórico, social y político.

El planteamiento anterior remite a la inherencia activa del movimiento popular


debidamente organizado en los escenarios que configuran la dinámica y la vida del país,
como son los escenarios político, social, económico, tecnológico y cultural.

Es conocido por todos que el proceso de transformación que vive actualmente el país,
tiene su origen en la exigencia histórica del pueblo venezolano, el cual se vio obligado a
manifestarse contundentemente ante las inequidades, la desatención y el maltrato, por
parte de quienes han ejercido la autoridad y han hecho uso del poder en forma
indiscriminada y a favor de sectores minoritarios. Éstos desacataron el espíritu de las
leyes regulatorias de la sociedad venezolana.

Se puede observar que la noción de lo público, alude al espacio de encuentro entre el


Estado y la sociedad, con miras al beneficio colectivo generado por los propios sujetos.

Esencialmente, al protagonismo del pueblo se le concibe como un proceso en el que la


comunicación entre autoridades gubernamentales y pueblo constituye un continuo que
permite el debate, el análisis, la reflexión y la investigación, orientadas a la toma de
decisiones y a la acción transformadora. Éstos son procesos concurrentes que generan
aprendizajes para la formación de una conciencia colectiva que evidencie las capacidades
individuales y las transforme en una suma de voluntades con posibilidades de modificar la
realidad, a partir del significado de la unidad participación- corresponsabilidad; soporte
fundamental del proceso de transformación del país.

Es posible y necesario debatir y teorizar sobre la nueva Hegemonía, pero


partiendo de nuevas formas de entender el Estado, y por tanto, de nuevas
formas de entender el poder. En otras palabras, si la Hegemonía en el

24
sentido gramsciano consiste en la capacidad de unificar y mantener unido
por medio de la ideología, un bloque social que sin embargo no es
homogéneo, que está marcado por profundas contradicciones de clase,
donde precisamente una minoría opresora, excluyente y privilegiada es la
que ejerce la dominación, la nueva Hegemonía será la del pueblo, la de las
mayorías, las de las multitudes, proceso que necesariamente tenía que
darse en un marco de democratización de todos los aspectos de la vida,
del conocimiento como bien fundamental. Ahora bien, cuando este
conocimiento nivela a la sociedad y la libera, el carácter político de la
Hegemonía oligárquica de las minorías pierde sentido, surgiendo algo
inédito, algo nuevo, como diría Sartre, es el pueblo discutiendo con el
pueblo. (González, 2007).

De acuerdo a lo expuesto, la consolidación de una nueva hegemonía remite a la premisa


histórica de que la práctica participativa, como actividad política, es ejercida por una clase
social o sector de clase que al asumir la toma de decisiones se constituye en sujeto
social que actúa en función de sus intereses, aunque su actuación afecte a toda la
sociedad.

Es obvio que el carácter de sujeto social es atinente a la posibilidad real de tomar


decisiones y ejecutarlas, respecto a los asuntos de carácter público y particularmente las
que refieren a: ¿qué se produce?, ¿cómo se produce? y ¿para qué se produce? En tanto,
la práctica de la producción es uno de los procesos de participación más importante que
realiza el ser humano, porque en su seno germinan las relaciones sociales entre los
hombres y mujeres que viven en sociedad.

El Poder Popular como base de la nueva hegemonía implica plantearse las siguientes
interrogantes más importantes para ubicar al sujeto social: ¿quién decide? ¿Respecto a
qué decide? ¿Cómo decide y través de qué mecanismos? La respuesta a cada una de
estas interrogantes permite conocer los intereses en juego y el enfoque de participación
subyacente.

En síntesis, se entiende por sujeto social al sector o clase social que por su carácter
hegemónico, tiene capacidad para tomar decisiones y hacer que éstas se ejecuten; En
otras palabras, tiene poder para influir en la resolución de los asuntos que le conciernen
como colectivo social, es decir, participa en la gestión de los asuntos públicos. A manera
concluyente, la nueva hegemonía es posible, en tanto los sujetos sociales ejercen un
liderazgo político colectivo.

25
EJE TEMÁTICO III

LA SOCIEDAD MULTIÉTNICA Y PLURICULTURAL

26
Presentación

La conformación de la sociedad venezolana históricamente explicada desde la visión


europea, remite al proceso de conformación de los Estados Nacionales; sin embargo,
desde la vivencia latinoamericana, se avizora la conformación de pequeñas parcelas
aisladas gobernadas por un puñado de hombres, con intereses encontrados y difusos que
pretendían extender su dominio sobre un territorio, tomado en los frentes de lucha.

*CONFORMACIÓN DE LA SOCIEDAD VENEZOLANA. CONTEXTO SOCIO HISTÓRICO

Los pueblos más antiguos de la sociedad venezolana (arawakos) contribuyeron a iniciar y


consolidar el proceso civilizatorio venezolano. La formación social respondía a las
características de la aldea sedentaria; sobre esa base, se configura el territorio de la
nación venezolana tal y como lo conocemos.

Las diferencias aparecidas en el desarrollo socio histórico de las poblaciones originarias


latinoamericanas, y en especial la venezolana, se resumen en lo que se conoce como
Indoamérica, expresión que refleja el nivel de complejidad socio cultural reinante en la
región, antes de la invasión europea. Dichas diferencias fueron determinadas no sólo por
la lógica del contacto inicial entre aborígenes y españoles, sino por las tendencias que
experimentó posteriormente el proceso de conquista y colonización de nuestro territorio, el
cual transcurre bajo el manto de la implantación de la cultura europea, con la consecuente
estructuración social y económica. Colonialismo, pillaje y transculturización bordearon los
cimientos de lo que posteriormente conformarían los linderos de la nación.

En el occidente de Venezuela existían para la época sociedades


jerárquicas con un alto grado de sedentarismo y organización
sociopolítica que, en muchos casos, se había expresado como una
considerable inversión de trabajo productivo para crear paisajes
agrarios materializados en viviendas construidas sobre montículos
artificiales y terrazas, sistemas de camellones para el cultivo en zonas
de inundación, montículos y terrazas artificiales para el cultivo,
sistemas de canales de regadío, embalses artificiales para almacenar
el agua, silos subterráneos, sistemas de calzadas que servían tanto
para la comunicación durante las épocas de inundación, como para
preservar y orientar las aguas de lluvia y de los ríos desbordados, etc.
(Sanoja y Vargas, 2004)

27
La época colonial −caracterizada por el inicio de la invasión europea, mediante procesos
diferenciados en tiempo y espacio conducentes a la conquista violenta y religiosa−
impregna un matiz mágico a la penosa realidad de la población. El exterminio, la
invisibilización, así como la destrucción de los referentes culturales, en un contexto de
desplazamiento forzado, condujo a la despoblación y a la concentración de la mano de
obra afro indígena en focos particulares del territorio.

El siglo XIX venezolano se caracterizó por los enfrentamientos entre las distintas
oligarquías regionales por el control del gobierno central. El auge de los caudillos andinos
se hizo notorio, asumieron las ideas liberales que proclamaban la consolidación del
Estado nacional. Éstos irrumpen contra la oligarquía caraqueña, conformada a raíz de las
alianzas entre las fuerzas económicas foráneas y los grupos nacionales con poderío
económico y político.

Le costó poco tiempo al ejército campesino dominar a los defensores de la región central
y la región oriental. Así se inicia la trayectoria histórica del dominio político de los andinos,
que comenzó con Cipriano Castro y continuó con los gobiernos de Juan Vicente Gómez,
Eleazar López Contreras, Isaías Medina y Marcos Pérez Jiménez.

El siglo XX implicó la modernización de la debilitada República. La incorporación de


Venezuela como proveedor de materias primas al mercado internacional, hace que la
sociedad tome otro rumbo, expresado en la ocupación vertiginosa y la consolidación del
territorio, la migración campo-ciudad, el crecimiento y la diversificación de la economía.
Consecuente con la lógica modernizadora se produce la industrialización y la
urbanización.

Es notorio la supremacía del poder económico extranjero y la fragilidad de la burguesía


nacional, lo que deviene en una suerte de pauta afianzada en la cultura socio política del
país, como es, por un lado, su articulación con los intereses transnacionales; por el otro
la dependencia del financiamiento y protección del Estado. Ese proceso definió
claramente la situación de las clases sociales. Este factor tuvo gran incidencia en el peso
que asumieron los partidos políticos en la conformación del sistema, y en lo particular, a la
conformación de la relación Estado rentista y desarrollo capitalista.

28
La década de los cincuenta es emblemática. En Venezuela y en general en América
Latina, la instauración del modelo neoliberal comienza con las redefiniciones entre el
mercado y el Estado, producto de la reconfiguración del mercado mundial. Los 40 años de
democracia representativa, desde la caída de Pérez Jiménez hasta el segundo gobierno
de Caldera, estuvieron signados por la exclusión de la clase media baja, el indio, el
campesino, el negro, el marginado; también se hizo evidente que los empresarios, la CTV
(patronal) y la llamada clase media alta, acondicionaron el terreno para implementar de
manera progresiva los paquetes de medidas propios de las políticas neoliberales.

La conformación del Estado nación, ubicado su devenir histórico, define el marco en el


cual se conforma y clarifica el papel preponderante que asume en la toma de decisiones
para resolver o eliminar los conflictos económicos, ideológicos, sociales y religiosos que
puedan surgir.

A partir de 1999, con el triunfo del Presidente Chávez, se inicia un quiebre en el proceso
de cambio histórico, al crear las bases para romper con la lógica de la exclusión social y
propiciar la inclusión de los menos favorecidos: pobres, negros, mestizos, indígenas y
blancos al disfrute y materialización del Estado de derecho. Se inicia así el acceso al
poder de las grandes mayorías, la reafirmación de otras fuerzas para relevar a las
antiguas clases dominantes.

Queda claro que los eventos históricos tienen crucial relevancia en la conformación
cultural, social, política y económica de la sociedad venezolana.

* VENEZUELA MULTIÉTNICA Y PLURICULTURAL

Para adentrarse en el conocimiento del contexto venezolano, es necesario revisar un


contexto más amplio, como lo es el contexto latinoamericano. Es necesario aclarar que tal
intromisión comprende una auto-reflexión crítica, que implique superar la mirada mutilada,
aplicada tras la lupa del colonial/eurocentrismo, puesto que no tiene sentido, y resulta
inapropiada asumir como modelo la crítica de la modernidad, generada desde la propia
Europa.

Al estar impregnada de la cosmovisión europea, esta interpretación, apegada a la visión


hegemónica, impide la percepción, comprensión y por supuesto el conocimiento. Los

29
procesos de transformación, así como las políticas, se han realizado fundamentalmente
con base a:

- La imagen y semejanza de las sociedades del norte. Este hecho condujo a la


falacia desarrollista, cuya pretensión fue hacernos creer que el progreso y la ansiada
prosperidad conducirían a nuestros pueblos a unas favorables condiciones de
existencia.
- La imagen y semejanza de un modelo civilizatorio, cuyos referentes distan mucho
de los referentes nuestros.

A este imaginario se sumó la desvalorización de modelos culturales socio-diversos, que


reconozcan la vigencia, la vitalidad y el lugar que se merecen las matrices culturales más
amplias, ubicadas en otras latitudes, y con una trayectoria histórico cultural distinta. Se
incuba y sedimenta el “mimetismo colonizante”.

La crisis civilizatoria tiene mucho que ver con la copia al pelo de una autoridad geo
referenciada culturalmente en la definición de los modelos sociales legítimos. No se trata
de desconocer y descalificar los aportes al conocimiento de las culturas; de lo que se trata
es de defender la opción de reconocerlos y valorarlos en su justa medida, a partir de la
soberanía y la autodeterminación, sin caer en los análisis comparativos sustentados en
escalas disímiles y contrapuestas.

Construir el imaginario sobre lo que se puede llegar a ser como pueblos, es una cuestión
de suma importancia política y cultural para la esfera pública, debido a la importancia que
revisten las formas hegemónicas del conocimiento sobre estas sociedades, en tanto
sientan las bases para los procesos de legitimación y naturalización de las formas de
dominación, desigualdad y exclusión social que han prevalecido históricamente.

Profundizar en ello, permite, por una parte, asumir con claridad los distanciamientos y
compromisos por resarcir los efectos de esa distorsión; por la otra, explorar las maneras
como estas teorías particulares se difunden, cómo la globalización reduce el localismo a
medida que se establecen y prevalecen las nuevas modalidades colonizantes, y cómo
interfieren y mediatizan la búsqueda autónoma, propia y emancipadora de los pueblos.

El reto es desmontar cómo la opción modernizadora se convirtió en despótica, dominante


30
y hegemónica. Las evidencias están a la vuelta de la esquina. El tan ansiado progreso y
desarrollo, al calco del eurocentrismo, sólo condujo a la dependencia, a la subordinación,
a la negación y a la aniquilación sostenida. Urge abrir el horizonte y la racionalidad a otras
visiones del mundo, del avance histórico social y de otras opciones político-culturales. Es
necesario abrir espacios de descolonización, de recomposición y reorganización del poder
del saber y los conocimientos. Porque, definitivamente, hay un más allá de la
modernidad/post-modernidad en clave euro-céntrica.

31
EJE TEMÁTICO IV
LÍNEAS GENERALES DEL PLAN ECONÓMICO SOCIAL

32
Presentación

El presente módulo resume el rescate de la planificación en la política estadal; también


plantea el modelo de desarrollo impulsado a partir del año 1999, el cual aspira consolidar
las formas de democratización en lo político, económico y social, por medio de prácticas
asociativas, tales como: la cogestión, autogestión y el cooperativismo. A su vez,
establece una política de inclusión dirigida al logro y el reconocimiento de nuevos actores
políticos, en base a los derechos y libertades de la ciudadanía, que le otorgan a la
sociedad la capacidad para transformar su entorno social. En las nuevas relaciones
Estado-sociedad ambos se fortalecen de forma simultánea. Este planteamiento está
condensado en el Plan de Desarrollo Nacional 2007-2013, documento que define las
Líneas Generales del Proyecto País.

* PLANIFICACIÓN Y POLÍTICA. EJES DEL PROYECTO NACIONAL

Tradicionalmente la planificación era una disciplina reservada a las elites académicas y


tecnocráticas. En el marco del proyecto de sociedad que se aspira alcanzar, la
planificación se concibe como una función primordial y emblemática del Estado, a partir
del rescate de la investidura de éste, como actor social de elevada significación. La
planificación se adecua a las realidades del país en sus distintos ámbitos, a partir de la
interrelación entre el escenario local, nacional, regional e internacional, con la intención de
impactar la realidad para transformarla. Se apela a la planificación estratégica situacional
participativa y dinamiza su aplicación hacia el movimiento popular, encarnado en la
organización social de vanguardia.

Prueba de las ideas expuestas, es el diseño del Plan de Desarrollo, en atención a los
requerimientos de la población, así como del Estado, en aras de lograr una sociedad que
propicie un mejor vivir.

Surgen las líneas generales del plan, las cuales representan la operativización de lo
propuesto en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV), de
acuerdo a los mandatos que ella establece. Igualmente, muestra los parámetros
orientadores de la gestión pública. Se debe significar que esta propuesta involucra de
forma expedita a la institucionalidad con el colectivo social, al incorporar los dispositivos
para que en las relaciones Estado sociedad, esta última disponga de las figuras,
33
mecanismos y estrategias para inmiscuirse y beneficiarse de la nueva lógica planificadora.

* ANTECEDENTES DEL PLAN DE DESARROLLO ECONOMICO SOCIAL( (PLANDES)

La Agenda Alternativa Bolivariana (1996) constituye el punto de partida del PLANDES. En


mayo de 2000, el Presidente Hugo Chávez Frías presentó su propuesta “…impulsar el
desarrollo sostenible del país, tratando de buscar una congruencia entre el crecimiento
económico, la equidad social y la protección ambiental que permita satisfacer las
necesidades de la generación presente sin comprometer la capacidad de las
generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades”.

Fase 1: 2001-2007: Los cinco equilibrios

Equilibrio Social

Objetivo: Alcanzar la justicia social

Equilibrio Económico

Objetivo: Desarrollar la economía productiva

Equilibrio Político

Objetivo: Construir la democracia bolivariana

Equilibrio Territorial

Objetivo: Ocupar y consolidar el territorio

Equilibrio Internacional

Objetivo: Fortalecer la soberanía nacional y promover un mundo multipolar

Fase 2: 2007- 2013: Los siete enfoques

I. Nueva Ética Socialista

La plena realización del socialismo del siglo XXI, que estamos inventando y que sólo será
posible en el mediano tiempo histórico, pasa necesariamente por la refundación ética y
moral de la nación venezolana. Tal refundación supone un proyecto ético y moral que
hunda sus raíces en la fusión de los valores y principios de lo más avanzado de las

34
corrientes humanistas del socialismo y de la herencia histórica del pensamiento de Simón
Bolívar.

II. Suprema Felicidad Social


La suprema felicidad social es la visión de largo plazo que tiene como punto de partida la
construcción de una estructura social incluyente que forme una nueva sociedad de
incluidos en un nuevo modelo social, productivo, socialista, humanista endógeno donde
todos vivamos en similares condiciones, rumbo a lo que decía Simón Bolívar: “La
suprema felicidad social”.

III. Democracia Protagónica y Revolucionaria


Para esta nueva fase de la Revolución Bolivariana, se consolidará la organización social,
de tal manera de transformar su debilidad individual en fuerza colectiva para reforzar la
independencia, la libertad y el poder originario del individuo.

IV. Modelo Productivo Socialista


Con el fin de lograr trabajo con significado, se buscará la eliminación de su división social,
de su estructura jerárquica y de la disyuntiva entre la satisfacción de las necesidades
humanas y la producción de riqueza subordinada a la reproducción del capital.

V. Nueva Geopolítica Nacional


La modificación de la estructura socio-territorial de Venezuela persigue la articulación
interna del modelo productivo a través de un desarrollo territorial desconcentrado, definido
por ejes integradores, regiones programa, un sistema de ciudades interconectadas y un
ambiente sustentable.

VI. Venezuela Potencia Energética Mundial


El acervo energético del país posibilita una estrategia que combina el uso soberano del
recurso con la integración regional y mundial. El petróleo continuará siendo decisivo para
la captación de recursos del exterior, la generación e inversiones productivas internas, la
satisfacción de las propias necesidades de energía y la consolidación del Modelo
Productivo Socialista.

VII. Nueva Geopolítica Internacional


La construcción de un mundo multipolar implica la creación de nuevos polos de poder que
representen el quiebre de la hegemonía unipolar, en la búsqueda de la justicia social, la
solidaridad y las garantías de paz, bajo la profundización del diálogo fraterno entre los
35
pueblos, su autodeterminación y el respeto de las libertades de pensamiento y de
religión.

Los cinco motores. Constituyen cinco líneas de acción que actúan como pilares del
Proyecto de Reconstrucción Nacional “Simón Bolívar”:

-. Primer motor: La Ley Habilitante. Es la solicitud de poderes especiales a la Asamblea


Nacional, en concordancia con lo contemplado en la Constitución Bolivariana, como una
modalidad en el proceso de formación de leyes (artículos 203 y 236). Dicha solicitud
obedeció a la necesidad de acelerar la transformación socialista por medio de la reforma y
la promulgación de algunas leyes.

-. Segundo motor: La reforma Constitucional. Mediante ésta, el Presidente propuso la


reforma de 33 artículos. La Asamblea Nacional, por su parte propuso 36 artículos más.
Mediante referéndum consultivo realizado el 2 de diciembre de 2007 la propuesta fue
rechazada mayoritariamente.

-. Tercer motor: Moral y Luces. “Jornada de Educación Moral, Económica, Política y


Social, que trasciende el ámbito escolar, y abarca los núcleos endógenos y demás figuras
de educación popular. Se refiere a la educación centrada en valores orientados a propiciar
en el país la educación, la cultura y el deporte, la igualdad, la justicia, la solidaridad y la
paz.

-. Cuarto motor: La Nueva Geometría del Poder. Referido a la revisión de la distribución


político-territorial del país, con miras a la construcción de sistemas de ciudades y de
territorios federales, cuyo eje se centra en la dimensión comunal.

-. Quinto motor: La Explosión del Poder Comunal. Reviste de vital importancia al Poder
Comunal interrelacionado con los otros motores, en aras de potenciar la organización-
participación de las comunidades.

Estrategias de desarrollo. Mediante éstas se pretende el logro de los objetivos del Plan
de Desarrollo. Considera tres modalidades: las fachadas de integración, la dinámica
regional y los ejes de concentración.

36
Las fachadas de integración. Refieren a la interacción de una región con el nivel local,
nacional y mundial. Las fachadas previstas son: la caribeña, la andina y la fachada
amazónica.

La Dinámica Regional. Considerada de vital importancia en función del modelo de


desarrollo endógeno. Plantea la desconcentración a partir de un conjunto de sectores
dinamizadores. De acuerdo al potencial y a la vocación de cada región se priorizarán las
actividades productivas.

Ejes de Desconcentración. Entendidos como “el corredor de comunicación que al cruzar


un espacio determinado contribuye al flujo e intercambio eficiente de productos y servicios
que progresivamente conformarán el desarrollo de actividades y mejoramiento de la
calidad de vida de la población que ocupe sus áreas de influencia” (La propuesta de Hugo
Chávez, 2000). Se prevén: el eje de desconcentración occidental, el eje oriental y el eje
Orinoco-Apure.

*LAS MISIONES NUEVA EXPRESIÓN DE LAS POLÍTICAS SOCIALES

A la luz de los cambios, surge también una modalidad novedosa en cuanto a política
social denominada Misiones Sociales. Las misiones son acciones gubernamentales
orientadas al mejoramiento de la condición social, con el objetivo de consolidar la
democracia social participativa. Si bien persisten políticas sociales canalizadas desde el
enfoque tradicional, se abre otra posibilidad para atender las carencias y necesidades no
cubiertas.

Estas políticas revolucionarias significan el mayor esfuerzo que haya


conocido la nación para pagar la inmensa deuda social de décadas de
capitalismo salvaje, como medio necesarios para acabar con la miseria
y consolidar una sociedad de ciudadanos y ciudadanas libres e iguales.
Su propósito fundamental es enfrentar las causas y consecuencias de
la pobreza y la exclusión, con la participación protagónica del pueblo.
(Colección Temas de Hoy 2006)

Las misiones son figuras de carácter social que atienden el déficit que apuntan a la
exclusión y la desigualdad social. Sin duda alguna, son las principales banderas del
gobierno de la República Bolivariana de Venezuela para enfrentar los problemas que

37
afectan a gran cantidad de venezolanos y venezolanas. Ellas combinan diferentes
estrategias de accesibilidad para hacer llegar a los sectores más empobrecidos de la
sociedad y atender Los efectos de las desigualdades sociales que no fueron atendidos de
la forma debida, se conforma de esta manera, la denominada deuda social.

38
EJE TEMÁTICO V
SOBERANÍA, TERRITORIO Y PETRÓLEO

39
Presentación
La historia nos enseña que sin soberanía económica no hay soberanía política; de allí la
vigencia del modelo de desarrollo mixto, considerado en la propuesta de transformación y
emancipación de la sociedad venezolana. Este modelo se centra en potenciar y
aprovechar al máximo los recursos naturales para propiciar el desarrollo sustentable y
sostenible, como mecanismo destinado a afianzar el control y la integridad territorial. Se
trata de combinar la producción desde y para adentro, junto con la redefinición de
relaciones y sujetos económicos externos, con miras a construir otro tipo de relaciones
económicas y políticas, de acuerdo a las nuevas reglas contempladas en la propuesta del
socialismo del siglo XXI, en la cual espacio geográfico y recursos conforman la plataforma
de la soberanía nacional.

Este planteamiento es clave para comprender las políticas adoptadas por el gobierno
venezolano, de acuerdo al proyecto de sociedad planteado desde el arribo al poder del
Presidente Hugo Chávez, cuyas directrices redefinen las estrategias para la defensa de la
soberanía nacional a nivel territorial y energético.

* EL ESPACIO GEOGRÁFICO Y EL EJERCICIO DE LA SOBERANÍA


La crisis multilateral que agobia al sistema capitalista, expresada recientemente en el
quiebre del aparataje financiero responsable de la pérdida de las viviendas de un gran
contingente de norteamericanos, implica la decadencia económica y política, así como la
amenaza a la pérdida de hegemonía de los EE UU. El temor a perder el lugar que se
atribuyó, como gendarme y dueño del mundo, lo evidencia la política arrogante y belicista
impulsada a nivel internacional.

La escalada agresiva después del 11 de septiembre de 2001 que


hoy continúa Barack Obama: la invasión de Irak y Afganistán, el
bombardeo a Pakistán, las amenazas a Irán y Yemen, la
reactivación (luego de la Segunda Guerra Mundial) de la IV Flota
Naval para controlar América del Sur. Su reposicionamiento en
bases militares de Honduras, Colombia y Haití es un paso para
controlar Latinoamérica en el marco de su lucha sin cuartel por la
hegemonía mundial y el mantenimiento del statu quo imperial.
(Barragán, 2010).

A nivel internacional la soberanía es entendida como el derecho a la autodeterminación, la


inviolabilidad del territorio, la integridad territorial y la propiedad de los recursos naturales,

40
para hacer frente a las políticas neoliberales auspiciadas por la globalización,
representada por los intereses del capital trasnacional.

En su artículo 11, la Carta Magna expresa la previsión del Estado venezolano ante tales
amenazas.

La soberanía plena de la República se ejerce en los espacios


continental e insular, lacustre y fluvial, mar territorial, áreas marinas
interiores, históricas y vitales y las comprendidas dentro de las líneas
de base recta que ha adoptado o adopte la República; el suelo y
subsuelo de éstos; el espacio aéreo continental, insular y marítimo y los
recursos que ellos se encuentran, incluidos los genéticos, los de las
especies migratorias, sus productos derivados y los componentes
intangibles que por causas naturales allí se hallen. (Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela,1999).

Este artículo merece especial atención, en tanto supera la Constitución de 1961, al


sustituir el término territorio por el de espacio geográfico, que abarca, no sólo la cuantía y
extensión del terreno, sino toda la biodiversidad allí concentrada.

* USO SOBERANO Y ESTRATÉGICO DEL POTENCIAL ENERGÉTICO PETROLERO

La política petrolera enarbolada por la cuarta República, con la “apertura petrolera” y


“Caldera II”, son muestra de la intencionalidad manifiesta de vender la mayor empresa
estadal al capital privado.

Una de las banderas del Estado venezolano lo constituye la recuperación de PDVSA del
control estadounidense; y la puesta de sus ganancias al servicio de las políticas sociales,
lo que amplió la cobertura del Estado en áreas sensibles por el grado de afectación de
gran cantidad de venezolanos y venezolanas.

Hoy día, la estatal petrolera, ahora bajo el pleno control del Estado, ocupa un sitial
preponderante a nivel internacional y fortalece al bloque de países exportadores de
petróleo agrupados en la OPEP. El enfoque de la política petrolera, no sólo responde a
exigencias de orden económico acordes a la necesidad de exportación, sus estrategias se
proyectan a favor de los procesos socio políticos emergentes en los países
latinoamericanos y del Caribe.

41
El interés del Estado por proteger la soberanía nacional a partir del recurso petrolero, lo
evidencia el texto del artículo 302 de la CRBV.
El Estado se reserva, mediante la ley orgánica respectiva, y por
razones de conveniencia nacional, la actividad petrolera y otras
industrias, explotaciones servicios y bienes de interés público y de
carácter estratégico. El Estado promoverá la manufactura nacional de
materias primas provenientes de la explotación de los recursos
naturales no renovables, con el fin de asimilar, crear e innovar
tecnologías, generar empleo y crecimiento económico, y crear riqueza y
bienestar para el pueblo. (Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela).

El “Plan Siembra Petrolera” representa una estrategia de gran alcance y a largo plazo,
que implica la reorientación de la actividad petrolera en función de los intereses
nacionales. Sin el aporte de PDVSA, no fuese posible la expansión de las misiones
sociales, las cuales están patrocinadas por las inversiones de la revolución en las áreas
de niñez y adolescencia, salud, educación, alimentación, capacitación, créditos, obras,
entre otras.

Este plan 2005-2012 comprende seis ejes fundamentales:


1. Magna Reserva: destinado a la certificación que posee Venezuela en la Faja
Petrolífera del Orinoco, para lo cual se hará un estudio integrado de geología.
2. Proyecto Orinoco: se han seleccionado 27 bloques que se desarrollarán con esfuerzo
propio y empresas mixtas. Se estima la realización de desarrollos de servicios y viviendas
para garantizar una explotación petrolera adecuada.
3. Proyecto Delta-Caribe: este proyecto persigue el desarrollo del Gas Costa Afuera en
las áreas de la Plataforma Deltana, en la fachada atlántica venezolana. En las aguas
ubicadas al norte del estado Sucre, al oriente de Venezuela y en las inmediaciones de la
Península de Paraguaná, al noroccidente del país.
4. Refinación: el Plan Siembra Petrolera contempla la creación de nuevos centros
refinadores: Cabruta (con capacidad de 400.000 barriles diarios de crudos extra pesados),
Batalla de Santa Inés (50.000 barriles diarios) y Caripito (50.000 barriles diarios
destinados a la producción de Asfalto).
5. Infraestructura: se habilitarán más llenaderos y poliductos para garantizar a todo el
territorio nacional el suministro de combustible. Las conversaciones con Colombia para la
construcción del gasoducto transguajiro están adelantadas; actualmente, se está
definiendo el costo del producto.

42
6. Integración: la República Bolivariana de Venezuela suplirá, de forma directa,
volúmenes de crudo y productos al Caribe a través de la firma de Petrocaribe, que
también prevé la ampliación de la capacidad de refinación en esa zona. Además, se
suscribió Petrosur, con lo que avanza la planificación de proyectos. Particularmente con
Brasil, se espera anunciar pronto la localización final de la refinería que se construirá junto
a la empresa Petrobras. (Navarro, 2006)

43
EJE TEMÁTICO VI

INTEGRACIÓN LATINOAMERICANA ESTRATEGIA


FRENTE A LA GLOBALIZACIÓN

44
Presentación

La incorporación forzada de Venezuela al sistema capitalista mundial, como proveedor de


materias primas, se compagina con la estrategia de los EEUU, dirigida a su expansión y
control de mercados, así como también, con el surgimiento de la dualidad país
desarrollado vs país subdesarrollado, en tanto las relaciones de dependencia y
subordinación marcan el inicio y devenir de las relaciones económicas. En la era
globalizadora los grandes beneficiarios de las bondades del sistema se agrupan en
bloque y dictan las reglas que rigen dichas relaciones con marcadas asimetrías. Los
nuevos tiempos marcados por el despertar de los pueblos y las luchas por su
emancipación, reconfiguran las relaciones internacionales y demarcan en el escenario
mundial la conformación de otros bloques de poder y nuevas correlaciones de fuerzas.

* LA INTEGRACIÓN LATINOAMERICANA AL CONTEXTO ECONÓMICO MUNDIAL

La trayectoria histórica de los países latinoamericanos conjuga un conjunto de


características particulares; sin embargo, estos países presentan rasgos similares, puesto
que en su evolución económica, política y social persiste un común denominador;
muchos de ellos han estado sometidos a la dominación del imperialismo del norte. La
depredación de sus recursos naturales, así como la sobre explotación de la mano de
obra, la violación de sus derechos humanos y la conformación de un gran mercado de
consumistas frente a un escaso nivel productivo, es la referencia obligada de territorios
colonizados y/o neo colonizados por los países desarrollados.

Entre las características estructurales comunes que homogeneízan a estos países


latinoamericanos subdesarrollados tenemos:
- Son economías abiertas, cuya principal fuente de ingreso la constituye la
exportación de un grupo reducido de productos, generalmente primarios.
- Las negativas condiciones de vida de la población, acompañado de elevados
niveles de desempleo, analfabetismo, malnutrición y otros males sociales.
- Poseen grandes recursos naturales diversos.

45
Una consecuencia de esa desigual integración económica al
sistema capitalista, es la dificultad de los países
latinoamericanos y subdesarrollados, para competir en
igualdad de condiciones con los productos propios de la
región en el ámbito internacional, debido a que la mayoría
de los productos que se exportan responden al sector
primario, mientras que hay una gran dependencia de una
gran producción manufacturera de alto valor agregado. Esto
sin contar que los países subdesarrollados del
mundo representan aproximadamente el 85% de la
población mundial. (Rodríguez, Asien, 2006)

* PROPUESTAS ALTERNATIVAS PARA LA INTEGRACIÓN EN SUS DISTINTAS


DIMENSIONES

La globalización como parámetro mundial unificador de modos de vida, impone valores,


costumbres y pautas culturales ajenas a nuestra historia e idiosincrasia, al privilegiar el
modelo económico hegemónico; desdeña las culturas locales; arremete contra el arraigo,
la identidad y las lógicas productivas y relacionales de los pueblos. Ante la amenaza
creciente de anular cualquier expresión autóctona y autónoma diversa, renace la
integración latinoamericana, como una posibilidad a la cual se acogen las naciones
históricamente atropelladas en nombre de la modernidad. Así se establecen nuevas
alianzas y surgen modalidades de articulación con fines de complementariedad y no de
aprovechamiento de unos pocos, en desmedro de muchos. A continuación se mencionan
las nuevas figuras integradoras de los pueblos latinoamericanos y del Caribe.

ALTERNATIVA BOLIVARIANA PARA LOS PUEBLOS DE AMERICA (ALBA)


La Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América es impulsada por el
Presidente venezolano Hugo Chávez en la Cumbre de la Asociación de Estados del
Caribe en el año 2001. Su suscripción se remite a La Habana, Cuba en diciembre de
2004, inicialmente fue una declaración conjunta entre Cuba y Venezuela, luego se
incorporan Bolivia, Nicaragua, Ecuador y Haití.

Constituye una propuesta que se suma al despertar de la conciencia de un nuevo


liderazgo político, económico, social y militar en América Latina y el Caribe. Representa
además, un modelo de integración económico de amplio alcance que abarca lo
comercial, pero conduce hacia la integración política, social, cultural, científica,

46
tecnológica, entre otras. Superpone los derechos sociales por sobre los derechos
mercantiles.

Constituye la ALBA una realidad y hoy es un modelo de


integración de los pueblos del Caribe y América Latina.,
con espacios geográficos de cercanía, vínculos históricos
y culturales. (González, 2009. Pág.82)

Esta fórmula integradora no responde a intereses foráneos asociados al capital; al


contrario, tiene como objetivo fundamental la lucha contra la pobreza y la exclusión social,
por lo tanto expresa los intereses de los pueblos latinoamericanos.

UNIÓN DE NACIONES SURAMERICANAS (UNASUR)

La Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) es una comunidad política y económica


que integra a los doce países sudamericanos. Posee una Secretaría permanente con
sede en la ciudad de Quito (Ecuador) y se prevé un Parlamento con sede en la ciudad de
Cochabamba (Bolivia). Surge de la necesidad de promover el desarrollo sustentable en la
región para garantizar el bienestar y disfrute de los derechos fundamentales de los
pueblos, en un espacio ampliamente democrático y soberano.

Tiene como objetivo construir, de manera participativa y consensuada, un espacio de


integración y unión en lo cultural, social, económico y político entre sus pueblos,
otorgando prioridad al diálogo político, las políticas sociales, la educación, la energía, la
infraestructura, el financiamiento y el medio ambiente, entre otros, con miras a eliminar la
desigualdad socioeconómica, lograr la inclusión social y la participación ciudadana,
fortalecer la democracia y reducir las asimetrías en el marco del fortalecimiento de la
soberanía e independencia de los Estados Unidos.

El Bloque fue constituido el 23 de mayo de 2008, en la ciudad de Brasilia, donde se


estructuró y oficializó la organización. Durante esta Cumbre, la presidenta de Chile,
Michelle Bacheele, fue elegida presidenta de la organización por un período de un año.
Tiene como base la cultura e historia de todos los países suramericanos y las
aspiraciones de integración, así como la aspiración de un futuro común en alianza sobre
la base de la solidaridad, igualdad y libertad, en función de potenciar la autonomía
regional respecto de estados foráneos.

47
Antecedentes

La reunión del Cuzco, el 8 de diciembre de 2004, en ocasión de la celebración de las


batallas de Junín y de Ayacucho.

La cumbre de Brasilia, el 30 de septiembre de 2005.

BANCO DEL SUR

Apunta a romper la dependencia respecto a la banca internacional vinculada al


endeudamiento agresivo y a los desequilibrios y ajustes que hicieron aguas las
economías de los países latinoamericanos, por los fuertes nexos de dichos organismos a
los grandes capitales globalizados.

TELESUR

Con sede en Venezuela, impulsa la integración cultural; rescata y reconoce la identidad


cultural, mediante la difusión de sus expresiones culturales; funge como espacio para el
debate de ideas. Tiene como misión establecer un nuevo paradigma comunicacional en
Latinoamérica, para contrarrestar la matriz de opinión y la imagen mediática posicionada
históricamente en la región.

PROPUESTA DEL CONSEJO DE DEFENSA SURAMERICANO

Antecedentes

La reunión de UNASUR realizada en Brasilia

La reunión extraordinaria de jefas y jefes de Estado y de gobierno de UNASUR realizada


en El Salvador, fue donde los países miembros decidieron conformar el Consejo de
Defensa Suramericano.

¿Qué es y hacia dónde apunta el Consejo de Defensa Suramericano?

El Consejo de Defensa Suramericano es una propuesta formulada por el presidente de


Brasil, Lula Da Silva, durante la tensión generada por incursión militar colombiana en
territorio ecuatoriano, en el que resultó masacrada una veintena de integrantes de las

48
Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), entre ellos, el número dos de
esta organización, Raúl Reyes.

Dicha instancia pretende armonizar los planteamientos hechos por Chile, Perú y Ecuador
alusivos al fomento de la confianza, políticas transparentes en el gasto militar y la solución
pacífica de las controversias. El denominador común apunta a la edificación de una nueva
arquitectura de seguridad para los países de la América del Sur, que confluyan en un
protocolo de paz, seguridad y cooperación y sienten las bases de una política común en el
área.

Esta propuesta se enmarca en la tesis emancipadora e integracionista, según la cual no


se puede enfrentar la dependencia y la interferencia foránea de manera unilateral por
cada país. La idea es conformar un bloque común no convencional, una estrategia de
consulta y cooperación en función de la realidad y necesidad en materia de defensa de
los recursos y la soberanía de los países sudamericanos. Dicho consejo se supedita a los
principios y propósitos establecidos en la carta de la ONU y en la carta de la OEA.

49
EJE TEMÁTICO VII

LA PARTICIPACIÓN PROTAGÓNICA Y LA
TRANSFORMACIÓN SOCIAL

50
Presentación

Una de las materias privilegiadas en la CRBV, sin duda alguna, la constituye la


participación, concebida como un deber, pero también como un derecho con rango
constitucional. A través de ésta se crean las vías expeditas para la inherencia decisoria de
la sociedad en la vida pública, históricamente reservada a la élite política. Si bien la
legislación favoreció el resurgir de la participación, la realidad exige perfeccionar el
ejercicio participativo para que trascienda de la mera formalidad asociada al sufragio y se
expanda en todas las esferas, hoy días disponibles para materializar su ejercicio pleno.

* LA PARTICIPACIÓN PROTAGÓNICA EN EL MARCO DE LA CRBV

El concepto de participación protagónica se constituye en una herramienta teórico-


práctica fundamental en tanto, transversaliza todo el texto constitucional. Se toma como
punto de partida el artículo 62 de la CRBV, el cual señala: “La participación del pueblo en
la formación, ejecución y control de la gestión pública es el medio necesario para lograr el
protagonismo (…)” (Pág. 32)

En el precitado artículo se ponen de manifiesto las categorías que denotan el significado


del protagonismo social : 1) El Sujeto Social como un todo integral de la participación:
“Todos los ciudadanos y ciudadanas tienen el derecho de participar libremente en (…)” (p.
32); 2) El objeto de la participación, que es la cosa pública: “(…) los asuntos públicos
directamente o por medio de sus representantes elegidos o elegidas” (p. 32); 3) Las
dimensiones de los asuntos públicos en los que participa el pueblo, referido a todos los
aspectos que comprenden la cosa pública: “(…) en la formación, ejecución y control de la
gestión pública (…)” (p. 32); 4) La finalidad de la participación: “(…) lograr el protagonismo
que garantice el (…) completo desarrollo tanto individual como colectivo”(p. 32); 5) El ente
promotor de la participación: “Es obligación del Estado y deber de la sociedad facilitar la
generación de condiciones más favorables para su práctica” (p. 33); es decir, para que el
pueblo concrete en la práctica social la participación protagónica.

51
La afirmación anterior se complementa con lo expresado en el artículo 70, en cuyo texto
se precisa que la participación y el protagonismo del pueblo aplica en lo político, en lo
social y en lo económico; esto es, en todos los dominios de la vida de la sociedad. Por su
parte, el artículo 5 expresa: “La soberanía reside intransferiblemente en el pueblo, quien
la ejerce directamente en la forma prevista en esta constitución y en la ley e
indirectamente, mediante el sufragio (…)” (pág. 8).

Lo expuesto anteriormente vincula la participación protagónica del pueblo al conjunto de


acciones sociopolíticas que éste como sujeto social asume, mediante su injerencia y
relación con acciones de gobierno, en el escenario de la gestión pública. Se entiende ésta
como la actividad socio política mediante el cual el pueblo a través de las comunidades
organizadas toma decisiones relacionadas con los asuntos públicos para direccionar la
sociedad y administrar bienes y servicios, guiándose para ello, por los principios y
postulados con el fin de garantizar la satisfacción de las necesidades y aspiraciones de
las comunidades. Aparece la corresponsabilidad como premisa fundamental que permite
definir e implementar acciones conjuntas con sentido de complementariedad y de
resolución entre el Estado y la sociedad.

* LA COMUNICACIÓN, ESTRATEGIA FUNDAMENTAL PARA LA ACCIÓN-


PARTICIPACIÓN Y LA TRANSFORMACIÓN SOCIAL

Partimos del supuesto básico de que las habilidades, destrezas y capacidades


comunicativas están estrechamente relacionadas con las condiciones estructurales y
culturales en las que viven los sujetos, y de que los umbrales comunicacionales pueden
objetivarse y materializarse en situaciones de comunicación concretas, a partir de
categorías como hábitos, condiciones socio económicas, clase y/o estrato social, mundo
de vida y representaciones sociales, entre otros.

De acuerdo al modelo democrático social de derecho, se favorece la participación, a


partir de posturas ideo-políticas, económicas y/o sociales, que la definen, la impulsan y
delinean el horizonte a seguir. En la actualidad, los cambios propiciados a nivel mundial,
en cuanto a la redefinición del papel del Estado en todos los niveles, han creado un
campo especial para promover y favorecer la democracia participativa, especialmente
desde los gobiernos locales. Particularmente, la situación en Venezuela se encuentra

52
caracterizada por un proceso de cambio que propone condiciones para poner en práctica
el ejercicio de participación desde los espacios comunitarios.

Se pretende encontrar las soluciones a los problemas sociales, a partir de las realidades
locales y de la organización social, de la singularidad y no en función de un modelo
homogéneo único. Lo que se busca es una redefinición del papel de los gobiernos locales
en los temas de procesos de cambio y activación de dispositivos organizativos para que
se coordinen las acciones que permitan una vida más digna y más justa para las
comunidades, y fortalecer a la vez un sistema político basado en la democracia, la
gobernabilidad y la cultura de paz.

La comunicación juega un papel preponderante, al propiciar la interrelación colectiva y


facilitar el intercambio de ideas. La comunicación humana efectiva es un proceso clave
para el crecimiento y la autorrealización personal y colectiva, porque comunicarse es:
dialogar; compartir información; transmitir ideas, emociones, experiencias; buscar
alternativas colectivas, y aportar ideas para mejorar.

Se asume el modelo humanista, según el cual, la comunicación es un proceso afectivo


que se hace realidad cuando las personas involucradas intercambian campos de
experiencia (reconocimiento, aceptación y comprensión). La expresión lingüística,
acompañada de la expresión corporal, inciden en la efectividad de la comunicación. Ésta
depende de la capacidad de generar ideas, emociones, acción y nuevas realidades en
los demás y en nosotros mismos, componentes claves para despertar el interés y
posturas favorables al dinamismo de las prácticas socio políticas de acción colectiva.

* LOS EFECTOS DE LA PARTICIPACIÓN PROTAGÓNICA Y CORRESPONSABLE EN


LA CONSTRUCCIÓN DE UNA NUEVA SOCIEDAD. ¿QUÉ SUPONE, CÓMO SE HACE,
QUÉ REQUIERE?

En la actualidad, nuestro país atraviesa uno de los procesos más significativos y de


mayor complejidad que puede atravesar nación alguna. Ésta es la reestructuración y
reorganización, e incluso, la refundación de las bases axiológicas, políticas, sociales,
económicas y culturales que configuran la noción de nuestra sociedad, y por tanto, del
Estado. Dicho proceso, al cual nos llevó la propia dinámica que se desarrolló en nuestro
país a lo largo de nuestro devenir histórico, surge por la sentida necesidad de cambio que
se fue asentando cada vez con mayor ahínco en el espíritu del pueblo, especialmente las
53
clases más desfavorecidas, las cuales por desgracia resultaron ser las más oprimidas y
vejadas por un Estado que cada vez se tornó más cruel, inhumano y déspota, al servicio
de los partidos y de los grandes intereses económicos, causando las grandes
calamidades económicas, políticas, sociales y culturales que nos azotaron durante mucho
tiempo.

Uno de los aspectos resaltantes de la nueva realidad jurídica-política del país, y que
resulta emblemático, es el rango constitucional atribuido a la participación por la
incidencia que tiene para el ejercicio de la democracia, al concebir la presencia y acción
de la población en los niveles de decisión, ejecución y control de políticas públicas. Lo
anterior imprime una dimensión relevante y protagónica al concepto convencional de
participación.

La sociedad se incorpora de manera directa a la atención de lo público; con la efectiva


disponibilidad de mecanismos expeditos para controlar el ejercicio de sus funciones. El
sentido que adquiere la participación, al concederle a la población la injerencia en la vida
pública, exige revisar a que alude el término protagonismo.

Las nuevas relaciones Estado-sociedad, amparadas en la noción de protagonismo


esbozadas en el Texto Constitucional de 1999, apelan a la palabra griega agonía, refiere
al mismo tiempo, tanto al sufrimiento extremo, como a la lucha olímpica practicada en la
ciudad de Olimpia, entre los años 776 AC y 339DC, donde “los luchadores eran llamados
protagonistas: literalmente, los que se disponen a luchar”. (Calzada, 2008.Pág.18).

Según el Diccionario de la Real Academia Española (1922), el término „protagonismo‟


aparece por primera vez como el “personaje principal de cualquier fábula dramática”. En
1925 se modifica refiriéndose a cualquier poema en que se represente una acción y por
extensión: “persona que en un suceso cualquiera tiene la parte principal”. Luego, se
actualiza y redefine el verbo protagonizar como: “Representar un papel en calidad de
protagonista. Por su parte, Martínez (2005) lo define como: “desempeñar el papel más
importante en cualquier hecho o acción”.

A partir de este verbo, deriva el sustantivo „protagonismo‟, el cual se define como: “Afán
de mostrarse como la persona más calificada y necesaria en determinada actividad,

54
independientemente de que posea o no méritos que lo justifiquen” (Diccionario de la Real
Academia Española).

En virtud del contexto actual y del dinamismo que impregna al movimiento popular, para
una participación donde el protagonismo despunte, se requiere:

*Mirarnos como Pueblo, recrearnos en la pluralidad y mirarla no como problema, colocarnos


frente a la posibilidad de inventarnos nuevas formas de convivencia, donde quepa la pregunta,
la protesta, la disidencia y, por tanto, el diálogo abierto y franco. Implica además, tomar
decisiones para incluir y no excluir por razones de raza, de género, de condición social, de
preferencia sexual o de distinción política.

*Promover la organización comunal, a fin de generar circuitos productivos, controlar el


presupuesto del municipio, supervisar las obras públicas, proponer y decidir políticas públicas
locales y nacionales, vigilar los cuerpos policiales, decidir las prioridades en la inversión local,
cuidar que no haya malversación de fondos ni corrupción administrativa, velar para que los
funcionarios públicos elegidos cumplan el sagrado deber de servir a la comunidad y poner a
funcionar las nuevas instancias donde se debería pensar de forma colectiva y participativa el
país y la ciudad.

La Constitución de la República lo consagró, ahora nos toca promover una cultura de


participación que sólo puede nacer en las experiencias comunitarias que consoliden una
práctica política, bajo los principios de la participación y la única manera de promover esta
cultura es conjugar el verbo que es acción: yo participo, tú participas, él participa, ella participa,
nosotros participamos, ustedes participan, ellos y ellas participan.

Tales planteamientos hacen imperativo la formación-capacitación y la efectividad de los


dispositivos democráticos creados para ampliar el abanico participativo a nivel socio
comunitario, político-ideológico y técnico. Sólo de esta forma, realmente el poder otorgado
a la sociedad puede aplicarse con sentido de compromiso y eficacia; de lo contrario, tan
sólo se reproducirá el modelo clientelar en decadencia por inoperante.

55
BIBLIOGRAFÍA

Barragán, Procesos Histórico Latinoamericano. Editorial Trillas, México, 2006.

Bobbio, Norberto, Estado gobierno y sociedad. Fondo de Cultura Económica, México


1985.

Calzada, Pedro, ¿De qué Protagonismo estamos hablando? En Revista Question, N° 61,
2008.

Colección Temas de Hoy, Participación y transformación, 2006.

Comisión del Sur, “Desafío para el sur”, Fondo de Cultura Económica, México, 1990.

Coraggio, José Luis, De la emergencia a la estrategia: más allá del alivio a la pobreza.
Primera Edición. Buenos Aires, 2004.

D´Elia, Cabezas, Francisco, Las misiones sociales en Venezuela. (ILDIS). (Ed.)


Caracas. 2008.

Diccionario de la Real Academia Española. DRAE. 1992.

Escuela de Planificación. Reflexiones sobre el Plan de Desarrollo Económico Social,


Venezuela, 2009.

González, Franklin. De la emancipación a la integración: La historia de una patria grande.


Fundación Editorial El Perro y la Rana, Venezuela, 2009.

Harnecker, Marta, Delegando poder en la gente. Monte Ávila Editores. Caracas, 2004.

Martínez, J. El Estado y la Revolución Bolivariana. Inédito. Caracas, 2005.

Ministerio de Planificación y desarrollo (MPD) (2000a), Plan Operativo Nacional (2000).

Ministerio de Planificación y Desarrollo (MPD) (2000b), Programa Económico (2000).

Ministerio de Planificación y Desarrollo (MPD) (2001), Lineamientos Generales del Plan


de Desarrollo Económico y Social de la Nación. Caracas, Documento Oficial.

Ministerio de Economía Popular (2004), Disponible en http://www.minep.gov.ve./ quienes


somos/misionvision.htm. Recuperado el 12/12/2009.

Navarro Ernesto. A qué se llama Planificación y Política, Caracas, 2006.

Patria. Revista digital del ALBA. Praxis y ciencia política, 2010.

56
Presidencia de la República Bolivariana de Venezuela). Programa de gobierno: “Una
revolución democrática”. Propuesta de Hugo Chávez para Transformar a Venezuela.
Caracas, 2000.

Ramonet, Ignacio, La tiranía de la comunicación, Paris, 1999.

Rodríguez Asien, E. Algunas consideraciones de la integración latinoamericana. En


Observatorio de la Economía Latinoamericana, Nº 72, 2006.

Servicio Autónomo Sistema Nacional de Adiestramiento. Formación para el


fortalecimiento de las nuevas relaciones Estado-sociedad en el nuevo marco
constitucional. Caracas, S/F.

Ministerio de Educación Superior, Misión Sucre, et alls. Programa de formación de grado.


Estudios Jurídicos. Caracas, 2007.

Portal Alba-TCP. Recuperado el 27 de diciembre 2009.

Sanoja A. Vargas Orlando, Proceso civilizatorio y cambio histórico en Venezuela, en


Revista Quantum, abril 2004.

Universidad Bolivariana de Venezuela. Plan Nacional de Formación de Formadores UBV


XXI. Fundación Imprenta de la Cultura. Caracas, 2009.

www.universita.unisinos.br/pdf/Un/r2_Rizo.PDF

www.aporrea.org/ideología/a 54231.htm

http://contacto 54.obolog.com/unasur-92323. Recuperado el 11/11/2009

www.voltarenet.ong/article 120838.

57

Potrebbero piacerti anche