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Vol. 3 - 1 Enero - Junio (2015) 35-46 e-ISSN: 0719-4005

El símbolo religioso y su aporte para la generación de identidad en los pueblos y


para el diálogo interreligioso.
The religious symbol and its contribution to the generation of identity in the villa-
ges and for interreligious dialogue.
Macarena Torres Saavedra
Estudiante del programa de
Artículo recibido: 22 de marzo de 2015 Doctorado en Ciencias de la Educación
Artículo aceptado: 30 de abril 2015 Correo electrónico: marenats@gmail.com

Resumen: Abstract: -
presentes páginas ha tenido por objetivo respon- ges has aimed to answer questions about: how the
der a preguntas sobre: cómo el símbolo religioso ha religious symbol has contributed to occur in the en-
contribuido para que se produzca, en el encuentro
entre diversas religiones, el diálogo interreligioso; dialogue; considering that all religious symbols, and
considerando que todo símbolo religioso, así como all religion, promotes the identity of peoples and
toda religión, promueve la identidad de los pueblos the sense of belonging and community. Also, if any
y el sentido de pertenencia y de comunidad. Asi-
openness to dialogue, in which you can share with
símbolos religiosos, permite la apertura al diálogo, other ways of living symbols and beliefs; and how
en el cual se pueda compartir con otras maneras
de vivir símbolos y creencias; y cómo esto afecta a Thus, the analysis includes contributions from au-
la educación. thors such as the concepts of “identity” and “com-
Así, el análisis contempla los aportes de autores munity” of Benedict Anderson, the concepts of
tales como: los conceptos de “identidad” y “comu- “identity” and “recognition” of Charles Taylor; the
nidad” de Benedict Anderson, los conceptos de concept of “symbol” of Raimon Panikkar, and stu-
“identidad” y “reconocimiento” de Charles Taylor; la dies by Cristian Parker on how the process of mul-
concepción de “símbolo” de Raimon Panikkar, y los
estudios realizados por Cristian Parker sobre cómo Chilean Education. From this analysis we conclude
el proceso de multirreligiosidad vivido en América that the religious symbol, which is related to the be-
Latina ha afectado a la eduación chilena. De este lief, promotes interfaith dialogue, provided the ope-
análisis se concluye que el símbolo religioso, que ning to the other’s religion is made with tolerance,
está relacionado con la creencia, favorece el díalogo respect and understanding that the contribution of
interreligioso, siempre y cuando la apertura hacia la other favors Truth.
religión del otro se realice con tolerancia, respeto
y comprendiendo que la contribución de los otros
favorece a la Verdad.

Palabras claves: Símbolo, Interreligión, Diálogo, Keywords: Symbol, Interfaith Dialogue, Identity,
Identidad, Religión Religion

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INTRODUCCIÓN

U
na de las temáticas fundamentales que invi- Ante este estado de cosas cabe preguntarse, ¿de qué
ta al análisis de la problemática en torno a la -
El símbolo religioso y su aporte para la generación de identidad en los pueblos y para el diálogo interreligioso.

identidad de los pueblos o de un colectivo es reciendo u obstruyendo el encuentro interreligioso,


la religión. En efecto, la religión por centrarse en otor- considerando que todo encuentro se realiza en torno
gar sentido y valor a lo trascedente, y también por a la pluri-religiosidad o la multi-religiosidad? ¿Acaso
unir o ligar la dimensión humana con la dimensión de la identidad que se construye a partir del símbolo re-
lo divino y lo sagrado, es central para determinar las ligioso, genera apertura a un diálogo con otra visión
creencias que un colectivo comparte entre sí. Asimis- religiosa, que posee otros símbolos que la hacen “úni-
mo, este colectivo, no sólo comparte, sino también ca” en su identidad? Por último, ¿de qué manera la
está unido a una serie de formas de expresión de esas
creencias, como lo son la ceremonia o el ritual, las no sólo asimilar la religión de los padres, sino también
manifestaciones estéticas, la manera de entender el abrirse hacia la tolerancia y respeto a otra que se reco-
- nozca también como religión?
neras de percibir, sentir y pensar, o de interpretar el
mundo y lo sobrenatural. Aquello que está por base Las presentes páginas procurarán dar respuesta a
de toda esta riqueza de visiones y de comprensión de estas problemáticas, que si bien están enmarcadas
lo real, es el símbolo que el colectivo asimila, compar- dentro de un ámbito netamente teórico, el análisis y
te, interactúa y transmite a otras generaciones.
práctico de cómo en la sociedad, los símbolos religio-
La religión y con ella, el símbolo religioso, de alguna
manera han sobrevivido al paso de los siglos; aún en diálogo interreligioso; en particular, dentro del siste-
nuestros días su peso está presente. Sin embargo, la ma educativo. Para alcanzar este objetivo, se hará uso
religión ya no está sola, debe compartir con otras dis- de los aportes de Benedict Anderson en torno al tema
tintas religiones, cuyas formas de entender lo trascen- de la “religión”, en cuanto constructo de la imagina-
dente, la vida, lo humano y la naturaleza se contrapo-
ne con los preciados dogmas que ella sustenta, y que y adquiere su propia identidad; la visión sobre “iden-
la han tenido siempre por única; y que ha heredado -
desde tiempos pretéritos. Pues, la multiculturalidad ción de Raimon Panikkar sobre “símbolo” y los apor-
de nuestros tiempos ha afectado a la religión, y ya tes de Cristian Parker a los estudios sobre los efectos
es posible hablar no sólo de “pluri-religiosidad”, sino de la multiculturalidad en la educación chilena.
también de “multi-religiosidad”, y de “interreligiosi-
dad”, así como se habla de “pluriculturalidad”, “multi-
culturalidad” e “interculturalidad”.

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Benedict Anderson y la religión en Comuni- sentido de comunidad, y de creer que se pertenece
dades Imaginadas. a un grupo de “iguales”.

En el caso de la Religión, Anderson en otro capítulo


Benedict Anderson en su obra “Comunidades Ima- de su obra, señala que las comunidades religiosas

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han imaginado compartir una misma creencia que
que imagina su comunidad y que es poseedora de es universal y territorialmente amplia. Además de
límites y de soberanía. (1993:.23). En esta concep- estar unidas a través de una lengua sagrada, y unos
ción es fundamental la noción de “imaginación”, ya libros sagrados, cuya procedencia supranatural les
que los miembros de la comunidad “imaginan” es- otorga certeza y signos que dan cuenta de lo real
tar unidos y en comunión con otros, aunque no co- (1993: 31- 33).
nozcan al resto de los demás habitantes. Por tal mo-
tivo es la imagen que la mente se hace de “unidad”
la que construye la nación. Respecto a las nociones comunidad religiosa, ayudarán a esclarecer lo que
- será el sentido de unidad que con el tiempo tendrá
ción posee fronteras con otros paises, aunque po-
sea una gran población. Ningún nacionalismo, in- vendría a sustituir a la religión; y a diferenciarse del
cluso hasta el más fanático, concibe a su nación con “nacionalismo”. En efecto, si por nación se entiende
las dimensiones del planeta entero. Siempre está la una comunidad que imagina poseer elementos co-
-
nía; el nacionalismo, en cambio, es el celo fanático
El término de “soberanía” surge en una época en por imponer lo que es concebido como propio de
que la Ilustración y la Revolución estaban destru- la nación, entre ellos se encuentran los signos que
yendo el gobierno dinástico, y promoviendo una -
nueva forna de gobierno; en el cual la libertad era el ta, busca o pretende ampliar sus propias fronteras
gran sueño que todas las naciones querían cumplir, e imponerse por sobre las demás naciones. En este
aún más en un reino de Dios, en el cual la religión sentido hay un elemento que procede de la religión,
universal fuera instaurada por sobre todo pluralis- la cual al concebirse con una amplia territorialidad,
mo religioso. El estado soberano en este caso, es la siempre va en pos de abarcar mayores dominios. No
garantía y emblema de esa libertad. es así de extrañarse las guerras religiosas de la Edad
Media, en particular la lucha entre musulmanes y
Respecto a la idea de “comunidad”, Anderson acla- cristianos para imponer su credo por sobre el otro.
ra en su texto que de un modo independiente a la
existencia de desigualdad y explotación que pudie- Cabe señalar la importancia que la lengua sagrada,
ra existir en una sociedad, siempre prevalece la idea o el libro sagrado, tienen para la mente religiosa.
que hay un compañerismo profundo y horizontal Este no sólo da identidad a una comunidad que
entre las personas (1993: 25). practica la misma fe, sino también le da ese sentido
de lo sagrado que la une y la hace creer que lo suyo
Así, la nación es un constructo de la capacidad hu- está por sobre toda otra creencia religiosa. La ver-
mana de crear o de constuir con la mente una reali- dad está sólo y exclusivamente en la fe que se prac-
dad soñada, y que da respuesta a las necesidades de tica en tal comunidad, y todas las demás o son fal-
una época, en la cual las sociedades buscan satisfa- sas, o están subordinadas a la primera. No se acepta
cer sus necesidades de certeza e identidad, aunque una mirada más relativista, que tienda a considerar
a los otros credos como expositores de otra verdad.
de explotación o de abuso social. Todo sea por ese Anderson expone esto claramente en un párrafo de

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su obra, en la cual cita el texto de los viajes de Marco descripción sobre las preferencias religiosas que tie-
Polo; quién, a propósito de su visita a la corte del ne un emperador mongol que gobierna las lejanas
emperador Kublai Khan, describe las características tierras de China.
de la corte del emperador chino, y su tendencia a
leer de su Biblioteca Imperial, los libros sagrados de Taylor y los conceptos de “Identidad” y “re-

Mª Enriqueta Cortés de los Ríos


El símbolo religioso y su aporte para la generación de identidad en los pueblos y para el diálogo interreligioso.

diversas religiones. En dicho texto, Marco Polo enfa- conocimiento”.


los demás libros sagrados. Este hecho corrobora las En relación a la importancia del reconocimiento y
palabras de Anderson sobre la visión expansionista de la identidad de los pueblos como una necesidad,
Taylor (1993), en su obra: El Multiculturalismo y “La
Política del Reconocimiento”, señala que la identidad
surge del reconocimiento que un individuo o grupo
estaba escribiendo para sus correligionarios eu- reciben. Este reconocimiento no debe ser falso ni
ropeos, decir que Kublai era un hipócrita o un idó- tampoco ausente, ya que ambos son muy perjudicia-
latra. (Debido en parte, sin duda, al hecho de que les para el individuo o grupo, pues el reconocimiento
“en lo tocante al número de súbditos, la extensión es una necesidad humana vital, y por ende requiere
del territorio y el monto de la recaudación, supera a ser verdadera.
todos los soberanos que han existido o existen en el
mundo”) Y en el uso descuidado del nuestro (que se Lo interesante del autor es que mediante su análisis
convierte en el “su”), y en la descripción de la fe de sobre las transformaciones históricas y culturales que
los cristianos como la “más verdadera” en lugar de la
“verdadera”, podemos detectar las semillas de una llega a establecer su tesis acerca del reconocimien-
territorialización de las creencias que anuncian el to. Por lo extensivo de este análisis sólo se examinará
lenguaje de muchos nacionalistas (“nuestra” nación aquello que está en estrecha relación con el tema so-
es “la mejor”, en un campo comparativo, competiti- bre la Religión que se debaten en estas páginas.
vo). (1993: 36).
Para entender al autor canadiense es fundamental
Tal mirada sobre la religión muestra cuán difícil es considerar algunos conceptos claves como lo son: la
pensar que pueda existir algun tipo de entendi- dignidad, la autenticidad, la originalidad y el carácter
miento y de común acuerdo entre las diversas re- dialógico de la vida. Estos conceptos son los que le
ligiones, ya que una gran mayoría de ellas se con- permitirán elaborar su análisis sobre las transforma-
sidera a sí misma como la más verdadera, o la que ciones históricas y culturales que el ser humano ha
realmente conduce a los seres humanos en su cami- vivido hasta los tiempos actuales. En primer lugar, el
no de búsqueda y de realización espiritual. Lo cual concepto de dignidad (Taylor, 1993: 21) se opone al
demuestra también que la necesidad humana de de honor, que era propio de los tiempos pasados. Tal
identidad es tan fuerte que requiere no sólo de la concepto estaba muy ligado a la de clase social que
consideración de los demás, sino también exige re- un individuo formaba parte desde su nacimiento, en
conocimiento, y para lo cual las fronteras y los lími- una época en la cual las jerarquías y desigualdades
tes se pierden dentro de una inmensidad. No existe sociales marcaban la diferencia entre un grupo social
límite en el fervor religioso, la fe que se practica en y otro. Esto cambia con la venida del Estado Moder-
una determinada comunidad debe ser reconocida no, que procura una sociedad formada por indivi-
en cualquier punto o lugar del planeta, aunque este duos con igualdad de derechos ante la ley, y que re-
punto se encuentre en el otro extremo de la Tierra. conoce la dignidad universal en todos los miembros
Tal es el caso que Marco Polo muestra en su ingenua de la sociedad.

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Junto con este principio que tiende a la universali- como Anderson advierte, la religión se percibe a sí
zación, surge el principio individualizador que con- misma abarcando un vasto territorio, lo que se con-
sidera la diferencia particular entre un individuo y trapone con la visión de autenticidad u originalidad
otro. Esto es, la identidad individual que cada suje- tayloriana, ya que Taylor concibe la territorialidad
to reconoce en sí mismo y le permite distinguirse desde la perspectiva de un espacio propio con el

Macarena Torres Saavedra


de los demás; o más bien, la autenticidad, que en
cuanto ideal, mueve a que los individuos procuren “sin fronteras” que la religión (según Anderson) tie-
discernir entre el bien y el mal moral para que ellos ne de sí misma, conduce a pensar que la identidad
puedan elegir siempre el bien (Taylor, 1993: 25). En religiosa más que ligada a la territorialidad, se en-
esto consiste el ideal de la Ilustración, el cual el autor cuentra ligada a la naturaleza de la lengua sagrada,
relaciona con el Romanticismo Alemán de Herder, de los signos o símbolos sagrados y al texto sagrado
quien concibe la originalidad, o autenticidad, como que una determinada comunidad comparte, y que,
la capacidad humana de saber sobre su propia me- (aplicando la noción tayloriana), le otorga identidad,
dida. La cual no es otra cosa que la capacidad de haciéndola ver su diferencia en relación al resto de
las demás religiones. Así, cada Religión se concibe
más amplio, como es el de los pueblos o culturas. De a sí misma como exclusiva y única portadora de la
Verdad.

Cabe señalar que para Taylor la identidad se constru-


nación es una armonía universal que todo com- ye a partir del diálogo con los demás, ya sea a nivel
prende, debido a que los pueblos tienen su propia del individuo, o a nivel de la comunidad (1993:28).
lengua y su propio territorio que lo distinguen de La contribución que los demás hacen para la cons-
los demás pueblos. trucción de la identidad es determinante, y depen-
de tanto del reconocimiento que el otro hace sobre
Si extendemos estos conceptos de Taylor a la Re- uno, como de la manera de llevar a cabo el diálogo.
ligión, podríamos decir que la religión, en cuanto -
fenómeno de la cultura, también tiene su propia ve el falso reconocimiento o impide reconocer al
manera de concebir lo real, lo divino, lo humano y la otro, puede producir un gran daño al individuo o al
naturaleza, que la distingue del resto de las demás grupo. De aquí que la propia identidad dependerá
religiones. Lo importante y que se debe rescatar de de las relaciones dialógicas con los demás. Este es
esta conceptión tayloriana, es que la religión tam- el punto de vista que Taylor desarrolla cuando trata
bién es una fuente de identidad para los pueblos, sobre el tema del carácter dialógico de la vida.

entrega una lengua sagrada, un conjunto de signos


o símbolos, un libro sagrado que les muestra el ca- de un contexto con diferentes identidades cultura-
mino para alcanzar la Verdad. Como se mencionó les (1993: 30- 34). Por una parte expone la política
con Anderson en páginas anteriores, la lengua sa- que concibe la dignidad de los seres humanos igual
grada es fundamental en la Religión, por ser aquella para todos, y que se basa en la idea que todos los se-
tan única y auténtica, transmitida por un orden so- res humanos deben ser tratados por igual. Para ello
brenatural, que hace que la comunidad que profesa hay que realizar una abstracción de las diferencias,
si es que las hay, y generar un corpus general de
manera de pensar, sentir y percibir, los mismos ri- derechos. Por otra parte, sostiene la existencia de la
tuales o ceremonias y la misma manera de compor- politica de las diferencias, la cual procura reconocer
tarse. Sin embargo, respecto a la territorialidad, tal la identidad particular y autenticidad de cada grupo

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o individuo. Ambas politicas son de tendencia uni- poseedoras de una visión de lo trascendente, y cada
versalista, pero que en el momento de ponerlas en cual desde su prisma ha logrado socavar un ángulo
- de esa realidad Divina; sin embargo, ninguna en sí
talmente divergentes entre sí. Por ejemplo, los par- es poseedora de la totalidad de esa Realidad, y para
tidarios de la tendencia de igual identidad acusan ello es necesario ir complementando las visiones a
El símbolo religioso y su aporte para la generación de identidad en los pueblos y para el diálogo interreligioso.

a los de la tendencia que vela por la diferencia, que partir del diálogo Intrarreligioso, donde todas por
no respetan el principio de no discriminación. En igual puedan ser partícipes de un diálogo abierto,
cambio estos últimos señalan que los primeros no objetivo, franco y tolerante, dispuesto a escuchar lo
aceptan las distintas identidades, y tratan de cons- que el otro tiene que decir, esto es, con la apertura
treñir a todas ellas dentro de un mismo paradigma de un diálogo dialógico (Hall, 2003).

una cultura que es absolutamente hegemónica. Si se considera las dos reacciones políticas que
Taylor expone, a propósito de la importancia que el
De esta teoría Tayloriana se rescata la idea de mul- diálogo tiene para alcanzar el reconocimiento entre
ticulturalidad, que implica la convivencia de dife- los grupos o individuos; se puede tener el siguien-
rentes culturas dentro de un mismo territorio, y te cuadro abordado dentro del marco religioso: por
que puede perfectamente equipararse con la idea una parte, las religiones, asi como las culturas o los
de una multireligiosidad o pluri religiosidad, la cual individuos, si bien son poseedoras de igual dignidad
consiste en la convivencia de muchas religiones que y por ello son partícipes de un “corpus general de
deben compartir un mismo territorio, y que en cier- derechos”; y por otra, se les reconoce las diferencias
to modo, como se ha mencionado antes, Anderson que cada una de ellas tiene, es posible que también
describe en su obra Comunidades Imaginadas, al
señalar que las religiones se conciben a sí mismas postura de igualdad, contra quienes están a favor
insertas dentro de un espacio ilimitado. de las diferencias. El tema de las religiones podría
generar una serie de controversias, si se tiene pre-
Entre Anderson y Taylor es posible llegar a dedu- sente, que todas ellas creen ser portadoras de una
cir: que si bien las religiones tienden a concebirse Verdad más “verdadera” que las “verdades” que pro-
como si fuesen tan verdaderas que su doctrina ne- fesan las demás. Lo interesante es que autores como
cesariamente ha de expandirse por sobre toda la Panikkar abogan por el diálogo, por el encuentro y
por cambiar el paradigma de “mi religión es la mejor
hoy en día deben aceptar la convivencia con otros y la más verdadera”, por uno que sostenga “mi reli-
credos dentro de un mismo espacio, (que es posible gión posee una verdad que requiere ser compartida
de colegir de las ideas taylorianas). Sin embargo, si- por otras”.
guiendo la postura de Taylor, esta convivencia sig-
Panikkar y el Símbolo.
reconocimiento, lo cual contribuye a acrecentar y a
fortalecer más la propia identidad, de tal modo que Raimon Panikkar en su libro Mith, Faith and Her-
- meneutic, dedica unas págnas a tratar el tema del
cias, dado este enfrentamiento con las creencias -
sagradas de las otras religiones. Esto último coin- fo señala que símbolo es aquello que expresa una
cidiría con la propuesta de Raimon Panikkar, quien creencia, y que porta el dinamismo de la creencia;
es partidario del diálogo intrarreligioso dirigido a vale decir, en el paso de la conciencia que va del
esclarecer y acrecentar la comprensión de lo Divino mito al lógos, no es el concepto lo que prima, sino
(Panikkar, 1999). Según él, todas las religiones son el símbolo.

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El símbolo no es un signo epistémico, sino una rea- terpretación deja de ser un símbolo vivo, pasa a ser
lidad onto mítica y que está precisamente en lo un mero signo.
simbolizado. Para ello es preciso distinguir entre el
símbolo con lo simbolizado. Lo simbolizado es una Sobre este análisis acerca del símbolo que Panikkar
realidad que aparece como real. Porque un símbolo

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no es un símbolo de otra cosa, sino de sí mismo, en aquello que une los dos planos de la realidad: esto
el sentido de un genitivo subjetivo. es, el plano del objeto y el plano del sujeto; el sím-
bolo como manifestación de lo que es simbolizado,
Un símbolo es símbolo de lo que está precisamente y también como expresión de una creencia que no
simbolizado en el símbolo, y que entonces no pue- es plenamente racional, ni tampoco pertenece al
de existir sin su símbolo. Un símbolo no es nada, campo del mito. Está como a medio camino entre
sino el símbolo de lo que aparece en y en cuanto ambos (mito y lógos). Cuando se interpretan los
símbolo. Los seres humanos deben estar conscien- símbolos, dejan de vivir, para llegar a ser sólo signos.

- Es interesante que dentro de la explicación sobre


ca confundir el símbolo por lo simbolizado, en esto lo que el símbolo es, se sostenga que la crisis surge
consiste precisamente la ignorancia de confundir la cuando las personas se olvidan de cómo leer, mirar
apariencia con lo real. Sin embargo, la realidad es tal y comprender. Esto abre el camino hacia otro tema
porque “aparece” real. de discusión que Panikkar expone en las páginas si-
guientes de su libro y que tiene directa relación con
Panikkar entiende por “realidad” no sólo la “res”
(cosa) que se opone a la “idea”, sino todo lo que allí dentro del ámbito de la interpretación, sobre todo
está, por una vía u otra, por ejemplo, el reino com- en relación al símbolo, que es el tema que se está
pleto del ser según otra nomenclatura. Según él, debatiendo en las presentes líneas. Por cierto, la
todo lo que hay, está alli precisamente porque apa- hermenéutica como arte y ciencia de la interpreta-
rece “allí” (como aquello que allí está). Así el símbolo -
es esa apariencia de lo real que incluye también al mitir el sentido, restaurar símbolos de vida y even-
sujeto al que le aparece. La apariencia es siempre tualmente permitir que nuevos símbolos emerjan.
para alguien que está consciente. La Hermenéutica es entonces más que una teoría
de la interpretación, es aquello que permite que los
El error no radica en la apariencia como tal, sino en símbolos vivan dentro de una determinada cultura
el olvido que la apariencia es apariencia. Esta regla religiosa.
se aplica a todo ser, incluso al ser mismo: el ser es
también apariencia de ser. Y la apariencia es preci- Si se retoma el tema que aquí se está analizando, es
samente la Verdad del Ser. Verdad y Ser no son los posible advertir que los símbolos son expresiones
lados objetivo y subjetivo de lo real. Lo real como tal de lo real, o bien son realidades que se representan
es verdad y ser todo en uno ( lo “Ideal” tanto como lo y que están dirigidas al sujeto a quien se les aparece.
Tienen vida en la medida que se mantengan dentro
- del ámbito de las creencias, y que tengan sentido
ción, lo real, la cosa, la materia. para el sujeto hacia el cual se les aparece. Sin embar-
go, fenecen en el momento que interviene la inter-
El símbolo es aquello que abarca y constitutivamen- pretación racional, que sólo ve en el simbolo una re-
te une los dos polos de lo real; esto es, el objeto y el presentación de algo que se comunica o transmite,
sujeto. Por tal motivo un símbolo que requiere in- y que calza con una determinada variante del signo.

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Así los símbolos son realidades, o aluden a realida- toma de conciencia que permita comprender que
des, que las personas viven desde sus creencias. Por la verdad que dice ese otro, no afecta para nada la
ejemplo, para un Hindú seguidor del Dios Shiva, verdad que se tiene por propia, ya que ambas se
cualquier símbolo que represente a su dios, no es complementan. Esta visión sobre la religión favore-
un “signo”, es Shiva mismo que está allí, manifestán- ce no sólo el diálogo, sino cualquier intento de en-
El símbolo religioso y su aporte para la generación de identidad en los pueblos y para el diálogo interreligioso.

dose a través de “eso”que esta allí. cuentro interreligioso en un mundo multirreligioso,


en el cual caben las múltiples miradas sobre lo real,
El acto de quemar ese símbolo, es en el fondo aten- y en esto el símbolo contribuye en hacer más llana
tar contra la divinidad de Shiva. la tarea de compartir una experiencia que más que
“entenderla desde la razón”, se la comprende desde
En tales contextos es imposible pensar que se está la vivencia del corazón.
dentro de los limites de lo racional, los símbolos, tal
como Panikkar lo menciona, están como a medio Parker y los efectos de la multiculturalidad en la
camino entre el logos y el mito ( o entre lo racional Educación Chilena.
y la fe). Por eso es posible entender el mundo por
medio de símbolos, que aluden a un ámbito más Parker se ha dedicado a estudiar el fenómeno de
amplio que los signos factibles de ser interpretados
por la razón (Panikkar, 1983). en particular en Chile (Parker, 2008). De acuerdo
a sus estudios, en Chile se ha detectado un incre-
mento en el pluralismo religioso, asunto que lidera
religión, (y dentro de ella, sus símbolos sagrados), es a muchos paises de America Latina. Esto es debido
a la apertura que el país ha tenido hacia el mundo
Para ellos tales creencias que la fe profesa, se vive globalizado, la cultura del consumismo promovida
sin cuestionar, porque no las están mirando desde por el mercado y la nueva economía; los medios de
el plano de lo racional, sino desde el plano del mito. comunicación de masa y la revolución en las comu-
Por tal motivo que la religión tiene una raigambre nicaciones y la electrónica; los profundos cambios
tan profunda en la existencia humana. en el campo educativo; y la renovación de los movi-
mientos sociales y étnicos.
Ahora bien, ¿qué ocurre con las creencias religiosas
en el ser humano cuando se trata de compartirlas Todo lo cual hace que cada día se permita más la
con otros sujetos que poseen otras creencias dife- incorporación de credos religiosos procedentes de
rentes? ¿Qué sucede con estos símbolos vivos e irra- otras Iglesias como son la Protestante, la Judaica,
cionales que se tienen por reales? la Musulmana. A parte de las Iglesias tradicionales
como la Católica, que siempre ha liderado al pais,
En este punto es importante tener presente que por ser la más antigua y la más cercana a compartir
las creencias religiosas son posibles de transmitir y el poder, producto del proceso historico acontecido
compartir con otros que poseen sus propias creen- desde los tiempos de la Conquista y de la Colonia.
cias. Tal como Panikkar señala en su obra, ninguna Junto a estas religiones, se ha detectado el ingreso
religión acota completamente la Verdad, todas ellas de otras de corte Oriental como el Budismo, el Taois-
han captado alguna parte de ese todo y si bien, lo mo, la Fe Bahai y el Hisduismo. Se encuentran, tal
experimentan como lo real, también es posible de vez como un fenómeno de los tiempos actuales las
ser compartido con otros que lo viven desde otra tendencias postmodernas como el New Age, como
perspectiva distinta (Panikkar, 1999). Este compartir también las religiones de los pueblos originarios
requiere no sólo de apertura, sino también de una que son de corte animista y chamánico como lo es

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por ejemplo, la religión de la machi en el pueblo confesiones y congregaciones, y la incorporación
mapuche. Además de estas corrientes religiosas se de alternativas laicas en el campo educativo. Todo
suman las tradicionales visiones ateas o agnósticas,
con las miradas más contemporáneas como lo son mentalidad de las nuevas generaciones, haciéndo-
las no creyentes o que no pertenecen a ninguna las más abiertas al cambio y a la diversidad, lo que a

Macarena Torres Saavedra


tendencia, pero que sin embargo los que forman su vez legitima las diferentes opciones en el campo
parte de ellas creen en otras cosas como el tarot, la religioso y espiritual.
astrología, la reencarnación y toda otra clase de eso-
terismos y neomisticismos. Según los estudios estadísticos como el Latinobaró-
metro u otros estudios sociales por ejemplo, se ha
De acuerdo a Parker este cambio que está ocurrien- detectado que en los estratos superiores de la socie-
do es debido al hecho que los actuales jóvenes ya dad chilena prima la Religión Católica, esto es debi-
no quieren seguir la religión de sus padres, y optan do a que siempre esta religión ha sido la dominante
por sus propios caminos, dando así cabida para ele- y por lo mismo se encuentra asociada con el poder.
gir dentro de un sin número de posibilidades que Se advierte que hay una gran mayoría de católicos
se les ofrecen. En este aspecto la Educación cumple tanto en colegios como en universidades que for-
un rol fundamental para posibilitar los cambios de man parte de la línea de esta confesión religiosa, sin
mentalidad que favorezcan el pluralismo religioso embargo en universidades y colegios laicos prevale-
creciente. En efecto, tal como el sociólogo declara, ce una mayor pluralidad y diversidad de religiones.
la educación moderna permite que el sujeto entre Dentro de los universitarios jóvenes pertenecientes
en contacto con un horizonte cultural más amplio, a la fe católica se destaca aquellos que practican un
con diversos esilos de vida, que le ayudan a incor- catolicismo “a su manera”, esto es producto tal vez
porar una visión crítica de las cosas que le permiten del fenómeno educativo y a la apertura mencionada
cuestonar la tradición moral y los dogmas (Parker, más arriba, la cual fomenta la mirada crítica y cues-
2008),. Asimismo, en niveles superiores de alter- tionadora hacia la visión tradicional de la Religión.

modelos culturales, dándose a lugar una sociedad Cabe recordar que la Iglesia Católica ha tenido ma-
pluricultural. yor participación en el poder, no sólo por haberse
impuesto durante las etapas de descubrimiento y
En este camino hacia la pluriculturalidad, las refor- conquista de este nuevo continente, sino también
mas educativas realizadas en América Latina, la mo- por su profunda participación social en el siglo XX,
dernización neoliberal de la educación como tam- promoviendo el cambio social a través de movi-
bién la intervención liderada por el Banco Mundial, mientos tendientes hacia la defensa de los derechos
han generado una nueva racionalización tanto en la de los más desposeídos de la sociedad latinoame-
- ricana, movimientos que comulgan con ideas libe-
cando la oferta educativa. De este modo se ha ido rales de la izquierda, una de estas corrientes sería
gestando una cultura más liberal que ha facilitado la Teologia de la Liberación. Sin embargo, no hay
la aceptación de mensajes, creencias y rituales he- que olvidar que la Iglesia siempre ha estado más
cercana a los grupos de derecha, o conservadores,
instituciones eclesiales dominantes. produciéndose en ella una división dada gracias a
su participación política. Estos movimientos católi-
Las reformas educativas, por su parte, han permiti- cos de carácter liberal, han allanado el terreno para
do incrementar la privatización de escuelas y uni- que de a poco se vayan incorporando movimientos
versidades, promoviendo el ingreso de diversas religiosos procedentes de otras culturas, como es el

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caso de la religión ancestral practicada por los gru- simbólico religioso es importante, debido a que el
pos étnicos, que ha ido de a poco incorporándose símbolo deja de ser un mero signo, y se convierte
de nuevo en la sociedad de los pueblos originarios. en algo que los sujetos viven como propio y que los

De la información entregada por Parker resalta su


El símbolo religioso y su aporte para la generación de identidad en los pueblos y para el diálogo interreligioso.

análisis acerca del poder que ha tenido la religión Parker en su estudio no se detiene en discurrir so-
en los pueblos, y que él describe respetando el tér- bre el tema del soft power en el símbolo religioso,
mino que Nye ( 1990) aporta. Esta es la noción de debido a que su objetivo radica en demostrar de
soft power, o de poder sagrado, que se caracteriza qué manera la religión, o las religiones, aportan en
por ser un factor de poder dentro de un juego de la construcción de una soberanía democrática, des-
- politizada y mucho más inspirada en valores que en
gitimidad simbólica, sobretodo en el mundo conte- ideologías (Parker, 2008). En dicho estudio demues-
poráneo, donde los factores culturales se destacan
cada vez más. En este contexto el poder simbóli- cambio social, de tal modo que las antiguas religio-
co-religioso posee un gran poder. Como el mismo nes tradicionales han ido perdiendo poder, dando
señala: lugar a que otras religiones se integren a la socie-

De hecho, el poder simbólico, legitimado extra-so- religiones como la Evangélica se haya abierto para
cialmente, es un signo poderoso empleado para re- participar activamente en la sociedad civil, perdien-
forzar a la fuerza material, ya sea para imponer un do su antigua postura temerosa de tener contacto
imperio y/o para resistirlo. (Parker, 2008: 308) con la realidad política que vive el país. Asimismo,
otros grupos más heterodoxos se están manifestan-
Como se había demostrado en páginas anteriores do cada vez más en la participación ciudadana con
cuando se explicitó lo que es símbolo según Pani- su propios valores y mirada en torno, por ejemplo, a
kkar; éste (el símbolo) por estar a medio camino la relación armónica entre el ser humano con el me-
entre el mito y el logos, y por pertenecer al ámbito dio ambiente, tema que las religiones tradicionales
de las creencias, el cual más que una representación -
o un signo, es una realidad que se presenta ante el nio del ser humano por sobre la naturaleza (Parker,
sujeto, y se caracteriza por unir al objeto con el su- 2010).
jeto, está vivo en la medida que se lo experimente y
forme parte de las creencias. Si se analiza con más Él ve con buenos ojos los procesos de incorporación
atención el símbolo en sí reúne las condiciones que de las diversas religiones a la sociedad, pues los cam-
lo pueden hacer muy poderoso, ya que el sujeto bios que se han ido produciendo están generando
lo experimenta como una realidad que se muestra una mayor apertura para integrar nuevas visiones
ante él mismo. Como el sujeto vive el símbolo, su de mundo, lo cual favorece el desarrollo social, y
manera de sentir, pensar, percibir y comportarse esto es un síntoma de avance en las democracias. Lo
será determinada por aquel. Este alcance posibilita importante es que las diversas corrientes religiosas
- promuevan una actitud ecuménica de tolerancia y
da de Nye, ya que en la medida que el símbolo sea respeto para fomentar el encuentro y el diálogo en-
algo vivo, sin estar mediado por la interpretación, tre ellas, y evitar así todo tipo de fundamentalismo o
es poderoso; pero en la medida que se lo interprete adoctrinamiento sectario que paralice el desarrollo
y se lo delegue al nivel de los signos, pierde su po- participativo en el mundo civil.
der. Sin embargo, en el juego de poderes, el poder

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CONCLUSIONES

Conforme al análisis desarrollado en las presentes -


páginas es posible responder a las problemáticas te, o las doctrinas sectarias que apartan a los indivi-
- duos de participar activamente en el mundo social,

Macarena Torres Saavedra


nición que Panikkar establece sobre símbolo, éste con todo lo que la sociedad aporta en el desarrollo
en cuanto realidad viva que un individuo o grupo y crecimiento espiritual, mental, y afectivo de la per-
de personas experimenta dentro de su sistema de sona.
creencias, comparte y transmite desde una gene-
ración hacia otra; contribuye, mediante el diálogo Por tal motivo, una educación que se nutre del fenó-
dialógico, a aumentar los límites de la propia ex- meno de la globalización requiere también ser forta-
periencia para abrirse hacia una mayor compren- lecida con la implementación de valores destinados
sión de lo Real. De este modo, los encuentros in- a fortalece; tal como Taylor señala en su obra; no sólo
terreligiosos o intrarreligiosos se hace fructíferos, la identidad propia del individuo, sino también de la
pues posibilitan compartir miradas en torno a la comunidad, lo cual se logra mediante el reconoci-
realidad, no sólo social, civil o política, sino tam- miento auténtico del otro. Para ello, la multirreligiosi-
dad transformada en una interreligiosidad es funda-
mental para hacer que la sociedad evolucione hacia
Para lograr esto es necesario educar a la población un nivel de integración, comunicación y diálogo que
en valores que incentiven la tolerancia, el respeto permita la verdadera comunión hacia niveles cada
para aceptar la posición del otro y una sabiduría de vez más altos.
vida. Pues, tal como Parker sostiene, una educación
bien encauzada hacia la aceptación de la diversi- Por último, en términos de Anderson, los cambios,
dad religiosa promueve el cambio social positivo. que la multirreligiosidad está ocasionando en las so-
Asimismo, la contribución que la multi religiosidad ciedades latinoamericanas, han ido transformando
o plurireligiosidad hace a estos cambios es fun- el modo de imaginar la religión de cada comunidad,
invitando a que todas ellas aprendan a imaginar con
que son producto del entronamiento del poder de mayor altura de miras una religión más abierta a com-
una sola corriente religiosa, como lo ha sido hasta partir con otros credos, que una de alcance universal
ahora la Iglesia Católica en Latino América, el fun- y que cierre el paso a otras que también buscan des-
damentalismo religioso incapaz de vislumbrar los plegar su manera de vivir sus propios símbolos.

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BIBLIOGRAFÍA

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