Sei sulla pagina 1di 5

See discussions, stats, and author profiles for this publication at: https://www.researchgate.

net/publication/305413832

Comentario a Nikolas Rose: Políticas de la vida: biomedicina, poder y


subjetividad en el siglo XXI.

Article · June 2016


DOI: 10.14409/dys.v1i35.5688

CITATIONS READS

0 958

1 author:

Eugenia Bianchi
National Scientific and Technical Research Council
42 PUBLICATIONS   86 CITATIONS   

SEE PROFILE

Some of the authors of this publication are also working on these related projects:

Observatorio de Adolescentes y jovenes en relación a las agencias de control social penal View project

Global Perspectives on ADHD: Social Dimensions of Diagnosis and Treatment in Sixteen Countries View project

All content following this page was uploaded by Eugenia Bianchi on 08 August 2016.

The user has requested enhancement of the downloaded file.


Comentario a Nikolas Rose:
Políticas de la vida:
biomedicina, poder
y subjetividad
en el siglo XXI.
La Plata UNIPE, Editorial Unviersitaria.
1ª ed., 2012

Por Eugenia Bianchi

Políticas de la vida acerca a los lectores Hay en Políticas de la vida una apuesta
de habla hispana el trabajo de uno de los audaz pero consecuente, cuidadosa y sug-
más consumados exponentes de la corriente estiva, de retomar y trascender el andamiaje
anglofoucaulteana de estudios. El libro resulta teórico-metodológico foucaulteano, y generar
de una persistente preocupación investigativa, categorías y herramientas teórico-operativas
reformulando o profundizando problemáticas noveles que den cuenta de la también novel
vertidas en escritos anteriores, en un período problemática. En sus páginas se desgranan
que va desde 1999 a 2004. categorías como individualidad somática,
El texto mapea desde diferentes aristas susceptibilidad, responsabilidad genética,
las políticas vitales que se despliegan con el ciudadanía biológica, biosocialidad, yo neu-
avance del siglo XXI, por lo cual revisten aún roquímico, biovalor, ética somática, entre
un carácter emergente. Éstas se caracterizan otras que configuran un prolífico entramado
por ser políticas de la vida misma, que apelan argumentativo. También presenta una serie de
a la capacidad creciente de los individuos “de conceptos operativos, como cartografía del
controlar, administrar, modificar, redefinir y presente, molecularización, estilo de pensam-
modular las propias capacidades vitales de iento, aparato de verdad y bioeconomía, que
los seres humanos en cuanto criaturas vivas” cimentan su propuesta analítica.
(Rose, 2012:25). Y se diferencian de otra forma En esta apuesta, Rose deja expuestos los
histórica, la política de la salud, que abarcó límites del proyecto de Foucault, ya sea
desde el siglo XVIII hasta la primera mitad porque en sus desplazamientos, reconfigu-
del siglo XX, y se ocupó (frecuentemente de raciones y recentramientos analíticos, Rose
manera coercitiva) de la salud de la población. acuña o recurre a nuevos conceptos, como
156 Eugenia Bianchi | Comentario a Nikolas Rose: Políticas de la vida ...

porque las lógicas que concibió el pensador cuenta de las políticas de la vida. Su objetivo
francés ya no resultan adecuadas para descri- fue abrir el presente a una reformulación,
bir los procesos que se suscitan. pensando las contingencias, rastreando la
Así, a lo largo del volumen despliega un heterogeneidad que condujo a la aparente
andamiaje que articula nociones teóricas, her- unidad del presente, historizando aspectos
ramientas metodológicas y ejemplos empíri- presumiblemente ahistóricos, y resaltando el
cos de extrema riqueza, con los que describe rol del conocimiento.
y explica procesos que tienen diferentes áreas Frente a la actual situación, en la que el
de incumbencia, apelan a diferentes actores e presente es un constante fluir, estas propu-
instituciones, se sirven de distintos conceptos estas ven diluida su anterior radicalidad. La
y saberes, se expresan en diversas prácticas, tumultuosa coyuntura conjuga un pasado
utilizan múltiples tecnologías y suponen éticas cuya seguridad se desvanece, y un futuro de
y moralidades específicas. inseguridades apenas imaginables.
Las políticas de la vida implican una con- De allí que la realización de una cartografía,
moción profunda, un verdadero giro ontológi- propuesta que Rose entiende como más
co en las coordenadas de inteligibilidad que modesta, apunta a desestabilizar el futuro,
fueron parte del núcleo duro de las políticas reconociendo su apertura y multiplicidad. Si
de la salud anteriores. Díadas centrales como no hay un solo futuro posible, intervenir en
normalidad/anormalidad, salud/enfermedad, el presente múltiple y cruzado por la contin-
diagnóstico/tratamiento, médico/paciente, gencia puede tener resonancias en aspectos
biológico/social, orgánico/funcional, cuerpo/ de esos futuros.
mente, intervención/prevención, peligro/ries- Con el eje puesto en los saberes, y reto-
go, entre otras, son sometidas a un escrutinio mando elementos de estudios de Fleck, Hack-
analítico que las amplía y complejiza. ing y suyos propios, Rose define el estilo de
Este giro ontológico conlleva un nuevo pensamiento en las ciencias como un modo
modo de ver y de juzgar la normalidad y particular de pensar, ver y ejercer. Incluye los
anormalidad humanas, y actuar sobre ellas, modos en que se organizan las argumentacio-
que se inscribe en cinco líneas de mutaciones: nes y críticas, las formas en que se clasifican
molecularización, optimización, subjeti- y ordenan los fenómenos, las maneras en
vación, conocimiento somático especializado, que se recopilan y validan los datos y los er-
y economías de la vitalidad. Rose no otorga a rores, y otras operaciones que configuran una
estos cambios el estatuto de acontecimiento cierta forma de explicación, pero también los
con el que Foucault trabajaba la contingencia recortes de objetos, problemas o temas que se
en la inversión de las relaciones de fuerzas, y prestan a explicación.
la emergencia de un nuevo tipo de correlación. En línea con este énfasis en los saberes, co-
Aunque no advierte una ruptura fundamental bra relevancia el concepto aparato de verdad.
con el pasado, desde el punto de vista del pre- Refiriéndose a las transformaciones del saber
sente, sí sugiere que se ha cruzado un umbral. psiquiátrico, Rose menciona el soporte de esta
En línea con su propuesta de una carto- verdad ya no es predominantemente filosófico
grafía del presente, Rose entiende que estas sino de investigación, y se lleva adelante
mutaciones abren a la posibilidad de múltiples en laboratorios, hospitales y clínicas. Estas
futuros. Las historias del presente, las gene- codificaciones permiten pensar en términos
alogías que resultaron útiles para analizar la de verdad o error, refutación o confirmación
política de la salud, no son adecuadas para dar con los que los hechos, las observaciones y las
Delito y Sociedad 35 | año 22 | 1º semestre 2013 157

explicaciones ingresan al terreno de lo falsea- pañías farmacéuticas— de los descontentos


ble o verificable. De manera que este nuevo que experimentan los individuos, y cómo ese
estilo de pensamiento no sólo establece qué descontento es articulado con la promesa que
es válido como explicación; también define detenta el fármaco. También incorpora las na-
qué hay para explicar. rrativas que le dan valor y sentido a esos fárma-
Otro concepto que permite pensar más allá cos, y su entrecruzamiento con otros aspectos,
de Foucault, aunque en ineludible relación con como el de ser productos comercializados, y
él, es personalización. Retomando a Clark, generar expectativas, éticas y formas de vida.
Rose plantea un cambio relacionado con la En este marco, los trastornos son codifica-
normalización, señalando que las interven- dos y experimentados como tales en relación
ciones de la medicina solían realizarse en a una norma cultural de un yo activo, respon-
pos de curar patologías, reencauzar conductas sable, y que elige libremente, desarrollando su
desviadas o impulsar estrategias biopolíticas potencial en el mundo a través del moldeado
a través de la modificación de estilos de vida. de un estilo de vida. Los sujetos diagnostica-
Hoy día, se configura un proceso de person- dos se presentan como agentes capacitados,
alización, de la mano de la transformación prudentes y responsables por su salud mental.
de los destinatarios de tales intervenciones, En un razonamiento consecuentemente fou-
algunos de los cuales se presentan como con- caulteano, Rose reconoce que es importante
sumidores que deciden acceder a diferentes criticar el uso de fármacos como agentes de
tecnologías de mejoramiento, sobre la base control, resaltar sus falsas promesas, efectos
de deseos guiados por el mercado y no por adversos y razones bioeconómicas que justi-
necesidad médica, con un fuerte componente fican su desarrollo. Pero vale también señalar
de narcisismo, trivialidad o irracionalidad. el cambio más amplio, por el cual esas drogas
Las compañías farmacéuticas son el centro tienen un rol central en el gobierno de nuestra
de las críticas, por vender fármacos nuevos e conducta y la de los otros.
inflar los precios, por ignorar efectos colatera- La salud es también un principio ético, de
les potencialmente peligrosos, y medicalizar allí que los descontentos se expresen tan a
condiciones que no son enfermedades. Sin menudo en términos médicos o psiquiátricos.
desconocer estos argumentos, Rose1 entiende Para Rose, y de la mano de la emergencia de la
que es un simplismo considerar a los pacientes antedicha individualidad somática, no queda
reales o potenciales como meras entidades abolida ni se prescinde de la normalización,
pasivas, manipuladas por los dispositivos de sino que se da una forma nueva y específica
marketing de la gran industria farmacéutica. a los bordes de la normalidad y la patología,
Una reflexión más abarcativa requiere con- de la enfermedad mental y la salud mental.2
templar otros matices, ya que el desarrollo y Tampoco se borran los modos religiosos o
extensión de las psicofármacos incluye también psicológicos en los que se puede pensar el
la exploración y registro —de parte de las com- descontento.

1
Rose, Nikolas (2006). “Disorders without borders? The 2
Idem.
Expanding Scope of Psychiatric Practice”. BioSocieties,
N° 1, pp. 465–484.
158 Eugenia Bianchi | Comentario a Nikolas Rose: Políticas de la vida ...

Un último concepto trabajado por Rose algunos de los tópicos en los cuales avanza
que vale reseñar es el de susceptibilidad. para tratar la biopolítica no tienen anteceden-
Entendida junto con el mejoramiento como tes en los estudios de las ciencias sociales.
una tecnología de la vida, la susceptibilidad Sus reflexiones no incorporan la dimensión
“abarca los problemas provocados por los de clase, ni las nuevas formas de desigual-
intentos de identificar y tratar, en el presente, dad y explotación que también emergen con
a personas a quienes se les pronostica algún estas nuevas biopolíticas contemporáneas, ni
mal futuro” (Rose, 2012:50). El diagnóstico señala ganadores o perdedores del proceso.
basado en la susceptibilidad se orienta a iden- Rose sostiene que su preocupación es otra;
tificar las variaciones genómicas, para realizar precisamente busca pincelar los trazos gruesos
intervenciones correctivas. de una cartografía de estas formas de vida
El énfasis de la susceptibilidad como el- emergentes y de los futuros potenciales a los
emento explicativo de las conductas renueva que pueden dar lugar.
los debates que suscitaron conceptos como De modo que, aun con las incomodidades
peligrosidad, riesgo, predisposición, degener- que esta perspectiva puede generar, la lectura
ación y herencia, para hacer inteligibles tanto de Políticas de la vida tiene el mérito car-
la enfermedad como el delito. tográfico de la descripción de procesos muy
La matriz de la susceptibilidad reedita la idea recientes, y su puesta en relación con una serie
de predisposición a la debilidad heredada, a la de conceptos y tradiciones de pensamiento,
vez que reelabora algunas tecnologías de evalu- que abren espacios de análisis dejados en
ación y predicción del riesgo, e investigaciones suspenso por Rose, pero en los que el lector
epidemiológicas sobre prevalencia de enferme- interesado puede avanzar.
dades. Pero también conecta con los estudios Trabajos como el de Rose brindan claves
cerebrales que desde la genética hablan de de modalidades analíticas para reflexionar,
responsabilidad penal, y con preocupaciones dentro de las ciencias sociales, en relación
en el campo de la neuroética. Para Rose, nos a problemáticas que no tienen que ver con
hallamos frente a una nueva estrategia de los saberes biomédicos y las nuevas formas
control que no puede asimilarse linealmente a de las políticas de la vida. La articulación
una nueva eugenesia o un nuevo determinismo que propone entre medicalización, guber-
genético, porque la biocriminología contem- namentalidad y biopolítica, permite pensar,
poránea no entiende a la biología como destino por una parte, a las políticas de la vida
ineludible; sino abierta a la susceptibilidad, la como nuevas formas de poder pastoral para
predicción y la prevención. el gobierno de sí y de los otros. Un poder
Hoy en día, la biocriminología opera sobre pastoral relacional, que se reconfigura a un
un espacio de problemas perfilado por el nivel biológico-genético, pero que también
carácter epidémico atribuido a las conductas involucra la propia vida, la de las familias
antisociales y violentas que llevan adelante y los vínculos con los otros. Pero por otra
individuos susceptibles que fallan en su au- parte, esta articulación sitúa su análisis en
togobierno, a los que busca identificar, para una serie ampliable a otras áreas de investig-
intervenir y reducir el riesgo para sus familias ación, como como la criminalidad, la teoría
y comunidades. política, el desempleo, los seguros, y la ética
Hacia el final, Rose se anticipa a las críticas de gobierno liberal, con las que se vincula en
a las que su trabajo puede dar lugar. En efecto, fructíferos diálogos.

View publication stats

Potrebbero piacerti anche