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23-10-2019 EL RODRIGAZO

El lado oscuro del ajuste que cambió


a la Argentina

Gómez, Adrián Andrés


1977ADRIAN@GMAIL.COM

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RESEÑA BIBLIOGÁFICA
La siguiente reseña se realiza sobre el libro y la edición que aquí se detalla

Ficha del libro


El rodrigazo
El lado oscuro del ajuste que cambió la Argentina
Néstor Restivo y Raúl Dellatorre
128 páginas
Año 2016
2ª edición
Editorial Capín

Autores:

Néstor Restivo

Es periodista egresado del Instituto Grafotécnico de Buenos Aires y licenciado en Historia por la Universidad
de Buenos Aires, con estudios de posgrado en la Universidad de Georgetown, Washington DC, EE.UU. Ha sido
docente de grado y posgrado de la carrera Ciencias de la Comunicación Social- UBA y el Instituto del Servicio
Exterior de la Nación. Tiene varios libros publicados entre ellos el que nos atañe, escrito en conjunto con Raúl
Dellatorre.
Ha trabajado en diversos medios de Argentina y el exterior como ser: Prensa Económica, The Buenos Aires
Herald, El Periodista, Clarín, Caras y caretas, Página/12 y Radio Nacional.
Actualmente es columnista en Radio Nacional y codirector de Dang Dai, revista, portal electrónico de noticias
y programa radial dedicado a la relación Argentina - China.
En 2012 ganó el premio Conocimientos sobre China, del Instituto Confucio y Radio China Internacional, por lo
cual viajó a Beijing. En 2014 volvió a viajar en un programa de la Fundación Diálogos Estratégicos y la
Universidad de Nanjing.

Raúl Dellatorre

Estudió en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, de donde egresó como
licenciado en Economía Política en 1984. A los 21 años inició su carrera como periodista en la Gaceta
Financiera y desde entonces ejerció la profesión en el área económica de distintos medios: agencia de noticias
DyN, diarios La Voz, La Razón y Página/12. Participa además en programas radiales y es uno de los conductores
de Visión 7 Internacional en la Televisión Pública.

1
1) 4 de junio de 1975, las medidas
Después de varios años de crecimiento ininterrumpido, el modelo implementado por José Ber Gelbard 1se
derrumbaba. Entre junio de 1973 y mayo de 1975 el salario real cayó 20,5 %. La crisis financiera internacional
impactaba sobre la economía argentina. La crisis económica se agudizó con la pérdida de reservas en divisas,
la imposibilidad de sostener los acuerdos de precios y la ruptura del Pacto Social, fueron algunas de las causas
que determinaron la renuncia del ministro de Economía de Perón tras la muerte del propio líder.

El 2 de junio de 1975 Celestino Rodrigo asumía la cartera de Economía. Dos días despues de prestar juramento,
el 4 de junio, en una ceremonia a la que asistieron los influyentes cuadros de José López Rega, el nuevo
ministro dio una conferencia de prensa en la que detalló un programa que, entre otras medidas, incluía una
devaluación superior al 100%, aumento de todos los servicios públicos, liberación de los precios que en
algunos casos llega al 180% como en las naftas o el 75% en las tarifas de colectivos y suba de las tasas de
interés, un plan de “estabilización” de los “aconsejados” por el FMI sobre la base de la liberalización de los
precios manteniendo fijos los salarios. El paquete de medidas para “sincerar la economía” fue tan extremo
que se popularizó como el “Rodrigazo”. Se trataba de un ajuste que beneficiaba al capital local y financiero
más concentrado, una política de shock para revertir la crisis económica.
Otra medida que exacerbó el ánimo obrero y predispuso a los sindicatos dirigidos por la burocracia peronista
contra el plan fue el anuncio del congelamiento de las paritarias y el establecimiento de los topes salariales.
Se termina de este modo con el “Pacto Social” que desde 1973 regía en la relación entre los patrones, el
Estado y los trabajadores.
La respuesta de los trabajadores no se hizo esperar y corrió por cuenta de la 2base obrera y el activismo. Las
medidas de lucha se multiplican y se imponen paros por gremios a escala provincial que en algunos casos
toman el carácter de paros regionales. El movimiento se va extendiendo a nivel nacional y el enfrentamiento
con la burocracia cobra presión.

La burocracia sindical –encabezada por Lorenzo Miguel– se ve obligada a cambiar su actitud y exige a Isabel
la homologación de los convenios. Para ello convoca para el 27 de junio a una jornada contra el plan Rodrigo,
en apoyo a la presidente y por la rápida homologación. Sin embargo, el empuje de la base transforma la
movilización dominguera de la burocracia en un virtual paro general donde más de 100.000 manifestantes
desafían la militarización y el Estado de Sitio, copando la Plaza de Mayo reclamando la renuncia de Rodrigo y
López Rega. “Dame una mano, dame la otra, dame a Rodrigo que lo hago pelota” o “queremos la cabeza de
los traidores Isabel, Rodrigo y López Rega”, son algunas de las consignas que se agitan entre los manifestantes.
Por primera vez en toda su historia la clase trabajadora levantará demandas políticas enfrentando al gobierno
y sus medidas economicas.

Un gobierno que tiene como inflexión aquel junio de 1975 del Rodrigazo, cuando despues del vacio de poder
en el que habia caido tras la muerte de Perón, un año antes, tambaleaba en medio de una gestion

1
José Ber Gelbard asumió en 1973 como ministro de economía de Héctor Cámpora (electo por el FREJULI) y continuó en su cargo luego
de la renuncia de este y con el regreso de Juan Domingo Perón.
José Ber Gelbard puso en marcha un plan económico que consideraba central para el bienestar de los argentinos, contemplando el
crecimiento del mercado interno (modelo llamado «mercadointernista»), con sueldos altos y desarrollo de la producción industrial y
agropecuaria para abastecer el consumo.
Gelbard también fue ideólogo del denominado Plan 0, el cual implicaba que la inflación se mantuviese estable. Lo logró durante cierto
período, manteniendo más de 300 productos de la canasta básica a precios estables, y también acordando la estabilidad en los sueldos
de miles de trabajadores.

2
http://www.laizquierdadiario.com/El-27-de-junio-de-1975-primer-paro-general-contra-un-gobierno-peronista

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inusualmente caótica y en un clima de violencia brutal, alimentado por la disputa entre facciones del
peronismo.

Celestino Rodrigo se sostuvo como ministro 49 días, suficientes para quebrar el modelo que había regido hasta
entonces y anticipó el programa de la dictadura que se instalaría menos de un año después.

ANTES DEL GOLPE. EL PLAN MONDELLI3

En la madrugada del 24 de marzo de 1976, son tomadas la Casa Rosada y las principales dependencias
estatales. Isabel Martínez de Perón sin resistencia ni sorpresa es detenida camino al aeroparque. Con este
hecho tendrá inicio la dictadura más sangrienta que sufrió el país, que tuvo como objetivo devolver la
"normalidad" en medio de una situación de movilizaciones e intervención de la clase obrera, que los partidos
del régimen y las instituciones no podían contener.

Las semanas y días previos fueron de profundización de la crisis económica, social y política a la que el
gobierno de Isabel junto con los demás partidos del régimen no le encontraban salida. Esta situación que había
llegado a su punto máximo en los días de junio y julio del año anterior con las luchas contra el llamado
Rodrigazo, tendrá un nuevo episodio de ascenso en el nivel de lucha y protagonismo de la clase obrera cuando
el nuevo ministro de Economía Emilio Mondelli intenta aplicar un plan de ajuste similar al de su antecesor
Celestino Rodrigo.

Se trataba de un feroz ataque a las condiciones de vida de los trabajadores y el pueblo pobre, a través del
congelamiento salarial en un 12% de aumento, mientras el combustible y los servicios esenciales aumentaban
un 80%, además de la liberación de precios para los empresarios y otras medidas en favor del empresariado.
Todo bajo un acuerdo de subordinación al FMI.

El nuevo plan económico es anunciado el viernes 5 de marzo por Emilio Mondelli. En respuesta, las
coordinadoras se pondrán en acción nuevamente organizando asambleas, paros y movilizaciones que se
replican en cientos de fábricas del país. En varios casos también avivando el fuego de conflictos que ya estaban
abiertos en distintos establecimientos o en paralelo a éstos, que se daban en lugares donde las coordinadoras
no llegaban o no habían alcanzado a conformarse.

Los mayores niveles de organización y acción se ven sobre todo en aquellas zonas con mayor concentración
obrera y donde sí lograban reunirse las Coordinadoras. En la zona norte del GBA, en La Plata, Berisso y
Ensenada; en Córdoba; en la Zona oeste del conurbano bonaerense, sobre toda La Matanza; Mendoza, Salta
y distintos lugares del interior del país, los trabajadores replicaban aquella valiosa experiencia del año anterior
y se proponían enfrentar hasta las últimas consecuencias el plan de ajuste del gobierno.

Lograrán a los pocos días una propuesta de aumento salarial del 20% en lugar del 12% inicial, sin embargo
será rechazado y generará la profundización de la ola de protestas y huelgas a las que se veían obligados a
llamar en algunas seccionales, los dirigentes de los sindicatos y centrales como la CGT.

En medio de este clima de lucha e intervención en la escena nacional por parte de los trabajadores y el pueblo,
el gobierno y los partidos del régimen no encontraban solución por los canales institucionales, y la inminencia

3
http://www.laizquierdadiario.com/Los-dias-previos-al-golpe-la-salida-que-apoyo-todo-el-regimen

3
de un golpe de Estado era un secreto a voces al interior de la casta política de los partidos tradicionales, la
burocracia sindical y la Iglesia.

EL RÉGIMEN SE PREPARA PARA EL GOLPE

Si se observan algunos diarios en los días previos al golpe puede notarse como la salida golpista militar ya
estaba prevista por todo el arco de los partidos tradicionales del régimen y los principales diarios. La seguidilla
de algunas de las tapas va anunciando (y muchas veces pidiendo) la llegada y lo que para ellos era el desenlace
de la crisis. Los grandes medios evitarán hablar de golpe, utilizando palabras como "cambio" o "desenlace".

Pero no sólo los principales diarios del país veían venir el golpe con más esperanza que preocupación. Sino
que serán el conjunto de los partidos tradicionales del régimen los que daban muestras de saber lo que se
aproximaba sin el menor atisbo de planear evitarlo o enfrentarlo seriamente. Esto al tiempo que intentaban
mostrar una imagen de búsqueda de soluciones políticas a través de reuniones diplomáticas entre los distintos
partidos y dirigentes.

En este sentido, es innegable que tanto el peronismo en el poder (junto con su burocracia sindical adicta)
como la UCR jugaron un importante rol en el advenimiento de los militares al manejo del Estado para
implantar la dictadura.

Basta para muestra recordar que el primer decreto de aniquilamiento es firmado bajo el gobierno de Isabel,
el cual tenía como eje "aniquilar el accionar de los elementos subversivos". Siendo esto sólo un capítulo más
de la política del gobierno de Isabel que le daba cada vez más poder y concesiones a las fuerzas armadas.

Por su parte el radicalismo a través de su dirigente y principal referente Ricardo Balbín, quien llamaba
"guerrilla fabril" al activismo y la vanguardia obrera, en un discurso por cadena nacional mostrando su
preocupación y la de su clase, alertaba que la guerrilla estaba encendiendo la mecha del continente, mientras
exaltaba a las fuerzas armadas como "las más meritorias que he visto en mi vida". También señaló que el país
se encontraba naufragando, cuestión para la cual dijo no tener soluciones pero que, sin embargo, "las hay"...
en un claro guiño a la salida militar.

Por su parte, el papel jugado por la Iglesia no puede sorprender si se tiene en cuenta su historial de apoyo y
promoción de golpes y dictaduras a través de los años en todo el mundo, entre otros crímenes aberrantes. En
las semanas previas al 24 de marzo a través de su sacerdote Victorio Bonamín revelaba al común de los
mortales que “Dios le está pidiendo algo al ejército”.

Todas las instituciones y partidos tradicionales abren el camino al golpe para sostener el régimen. Es conocida
la amplia participación de los partidos patronales en el gobierno militar aportando sus propios funcionarios al
gobierno.

Asimismo, el colaboracionismo de la burocracia sindical peronista con la dictadura fue constante, entablando
negociaciones con el fin de preservar sus intereses, ya que ambas tenían un temor en común: las tendencias
clasistas y combativas que se desarrollaron a partir del Cordobazo y jugaron un rol protagónico a través de las
Coordinadoras a mediados del 75 con el Rodrigazo y a comienzos del ’76 contra el Plan Mondelli.

Con el apoyo de todo el régimen, "El nuevo gobierno" como ligeramente lo llamará el diario Clarín en su tapa
del miércoles 24 de marzo vino, así, a tomar las riendas del Estado argentino con el objetivo de poner fin a un
período de ascenso obrero que tiene inicio con el Cordobazo en mayo 69.

Para analizar los cambios que luego sucederian hay que retrotraernos al contexto regional de America Latina
entre 1971 y 1975, en esos años su geografia se pobló de dictaduras.

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Para 1976, “las situaciones de dictaduras reaccionarias eran casi la regla en America Latina. Las habia en
Argentina, Brasil, Bolivia, Uruguay, Chile, Paraguay, Perú y Ecuador”.- Por nuestro lado hubieron factores
nacionales que forzaron a esa situación, acompañados por un contexto económico mundial que
desencadenaron esta realidad.-

4
Se aportan datos adicionales complementarios a los otorgados por los autores en esta obra, efectuando un
análisis de la evolución de nuestro país según distintos indicadores económicos

Principales dictaduras de América del Sur

Bolivia Brasil
1971/1978 1964/1985
Hugo Banzer (1926-2002) Ninguno de los 4
Muere a los 76 años sin dictadores fue perseguido
ser juzgado por la justicia

Chile Paraguay
1973/1990 1954/1989
Augusto Pinochet (1915- Alfredo Stroessner (1912-
2006) 2006)
Muere a los 91 años sin Muere en Brasil a los 93
ser juzgado años sin ser juzgado

Uruguay Argentina
1973/1976 1976/1983
Juan Maria Bordaberry Jorge R. Videla (1925-
(1928-2011) 2013)
Encarcelado en 2006 Arresto domiciliario desde
1998 hasta su muerte

Si analizamos la deuda externa, nos damos cuenta que hasta el golpe militar del 24 de marzo de 1976, nuestro
país casi no tenía deuda externa, debíamos 7.875 millones de dólares, cuando en la actualidad, debemos de
pagar US$ 9658 millones de intereses de la deuda por año (77.259,9 millones de pesos)
Es que los militares del llamado Proceso de Reorganización Nacional, cuando dejaron el poder en diciembre
de 1983, además de 30.000 desaparecidos, nos legaron 45.087 millones de dólares, de deuda externa, que se
fue incrementando, debido a las malas gestiones gubernamentales, y corrupción, hasta llegar a la actualidad
a 149.011 millones de dólares de deuda externa, sin contar la deuda interna acumulada, a empresas y
organismos del Estado Nacional (llámese Anses, Banco de la Nación Argentina, Banco Central de la República
Argentina, y distintas empresas con capitales estatales), más la deuda a privados nacionales, si incluimos esa
deuda al 30 de junio del 2012, según datos de la (3) Oficina de Crédito Público del Ministerio de Economía de
la Nación, asciende la deuda externa e interna a 182.741 millones de dólares, o sea el 41,5 % del PBI.

4
Magatem, 13 de abril del 2014 - http://www.magatem.com.ar/

5
DEUDA EXTERNA
AÑO MILLONES AÑO MILLONES
DE US$ DE US$
1962 2.649 1990 57.582
1963 3.327 1991 58.841
1964 2.916 1992 66.042
1965 2.650 1993 96.057
1966 2.663 1994 87.524
1967 2.644 1995 101.462
1968 2.805 1996 114.423
1969 3.231 1997 129.964
1970 3.876 1998 147.634
1971 4.356 1999 152.563
1972 5.092 2000 155.015
1973 6.366 2001 166.272
1974 6.770 2002 156.748
1975 7.875 2003 164.645
1976 8.280 2004 171.205
1977 9.678 2005 113.768
1978 10.796 2006 108.839
1979 19.034 2007 124.542
1980 27.678 2008 124.916
1981 35.671 2009 115.554

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En un informe del Banco Mundial se indica que el bajo crecimiento económico del país durante los últimos
noventa años ha sido tema de extensos análisis por parte de los economistas. Argentina estaba entre los
países de ingresos más altos del mundo en 1913. Argentina sobresalió por su escaso crecimiento económico
en promedio, ya que el ingreso per cápita aumentó anualmente apenas 1,1% Como consecuencia, Argentina,
en su momento un país incuestionablemente avanzado, pasó a ser relativamente pobre. Si bien el PIB per
cápita era en el 2004 similar al de 1974, la pobreza era mucho más elevada en el 2004, como consecuencia de
la distribución cada vez más despareja del ingreso registrada en los últimos 30 años.-

2) La politica y la economía en los años previos


Podemos destacar en este punto como los autores analizan el modelo evolutivo que tuvo la Argentina en los
años previos a la mega devaluacion de 1975 para entender las grandes diferencias que marcaron la economia
durante el Rodrigazo y pre dictadura.

Para ello nos debemos retrotraer años antes donde el malestar social, que 5agravado por la situación
económica había puesto en jaque al presidente de facto teniente general Juan Carlos Onganía. Pero tras el
secuestro y posterior asesinato del teniente general Pedro Eugenio Aramburu por parte de la guerrilla
Montoneros, que tuvo lugar el 29 de mayo de 1970, el gobierno de Onganía sufrió un desgaste terminal, ya
que perdió el apoyo de los jefes militares, siendo destituido el 8 de junio de 1970. La Junta de Comandantes
en Jefe compuesta por el teniente general Alejandro Lanusse, el brigadier general Carlos Rey y el almirante
Pedro Gnavi que designó presidente al general de brigada Roberto Marcelo Levingston 6 pretendía que el
nuevo mandatario de facto siguiera las políticas socioeconómicas diagramadas por los titulares de las tres
fuerzas armadas. Pero el presidente llevó a cabo sus propias políticas, las mismas consistieron en
«argentinizar» el proceso de crecimiento económico y estimular la industria por medio de una consigna, el
«compre nacional», aplicada por las empresas estatales y préstamos a bajo costo. Con aumentos salariales,
Levingston intentó atraer a las bases sociales y darle algún grado de adhesión popular a su gobierno. Pero sus

5
https://es.wikipedia.org/wiki/Roberto_Marcelo_Levingston
6
Roberto Marcelo Levingston fue un militar argentino que alcanzó el grado de general de brigada, quien en junio de 1970 fue designado
por la Junta de Comandantes en Jefe de las tres fuerzas armadas (Ejército, Marina y Aeronáutica) como presidente de Argentina —el
octavo de facto— para reemplazar a Juan Carlos Onganía, quien gobernaba el país desde 1966, a partir del Golpe de Estado
autodenominado Revolución Argentina

7
medidas generaron una espiral inflacionaria, una fuga de capitales extranjeros debido a las políticas
nacionalistas y un aumento del descontento social.

Si bien Roberto Marcelo Levingston trató de llevar a cabo un acercamiento con los partidos políticos, éstos
rechazaron la propuesta. La Hora del Pueblo comenzó a exigir una salida electoral y de común acuerdo. Jorge
Paladino, delegado de Juan Domingo Perón, y Ricardo Balbín fueron los principales mentores de esta
propuesta. En la Confederación General del Trabajo (CGT), José Ignacio Rucci es designado Secretario General
y la central obrera comienza una serie de paros generales que afectan a la industria, el transporte y los
servicios. La huelga llevada a cabo por trabajadores del Chocón, que también fue apoyada por la población y
el obispo Jaime de Nevares, desmejoró aún más la ya frágil situación social.

El 10 de marzo de 1971 se inició una masiva protesta social en Córdoba tras la designación como interventor
de facto del dirigente conservador Camilo Uriburu que llevaría el nombre de Viborazo. La pueblada se
fortaleció con el paro general iniciado por la CGT regional el 12 de marzo. La población llegó a tomar el control
de unas 500 manzanas de la ciudad de Córdoba. La violencia se generalizó luego de que fuerzas de la Policía
de Córdoba y de la Policía Federal se enfrentaran abiertamente con estudiantes y trabajadores. Un día después
de que la ciudad fuera asegurada por las fuerzas policiales, el interventor Camilo Uriburu renunció.

Levingston se propone seguir con sus planes a largo plazo, pero la Junta de Comandantes le pide la renuncia
el 23 de marzo de 1971. Fue sucedido por el teniente general Alejandro Lanusse.

El nuevo presidente de facto, general Agustín Lanusse, entonces comandante en jefe del Ejército, asumió el
26 de marzo de 1971. Pertenecía a una familia tradicional y de fortuna, vinculada al negocio agropecuario, y
había participado en el intento golpista contra Perón de 1951, lo que le valió su encarcelamiento hasta el
final del gobierno peronista.

7
No obstante ello, sabía Lanusse que los planes originarios de la “Revolución Argentina” habían cambiado.
Fue entonces que anunció el Gran Acuerdo Nacional, inició un proceso de apertura política, incluyendo la
legalización del Partido Justicialista, y llamó a elecciones. Pero nunca imaginó que el peronismo ganaría
aquellos comicios con margen suficiente como para imponerse nuevamente. Eso ocurrió el 11 de marzo de
1973, convirtiendo a Lanusse en el último dictador del malogrado proyecto de Onganía.

Años más tarde, Lanusse escribió sus memorias, donde además de intentar exculparse, admitió los errores
del proyecto del cual fue el último representante. Reproducimos en el aniversario de su asunción como
presidente de facto un extracto de aquellos pasajes en donde hace alusión al momento en que Aramburu
fue secuestrado por Montoneros

3) Quien eran Rodrigo y Zinn

En este capítulo analizamos quieres fueron los mentores y artífices del plan económico que dio
lugar a los hechos examinados en este libro, su posición política y sus pensamientos.-

7
https://www.elhistoriador.com.ar/las-razones-de-lanusse/

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Celestino Rodrigo

Celestino Rodrigo nació en la capital federal en 1915, Realizó sus estudios secundarios en dos colegios: el
Nacional de Bueno sAires y el Otto Krause, el cual egresó en 1933. En 1940 se graduó en la facultad de
Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires, como ingeniero industrial con especialidad en electromecánica.

En 1944 ingresa en el Banco de Crédito Industrial Argentino.

Durante el primer gobierno Peronista fue el principal asesor de la Secretaria Técnica de la presidencia de la
Nación.

En 1947 fue accionista fundador de Somisa.

Rodrigo conoció en el Banco Industrial a quien sería su compañero principal en el programa económico de
1975, Ricardo Zinn.

8
En una entrevista realizada a Celestino Rodrigo por Juan Carlos De Pablo en Blog Foco económico, cuenta
cómo conoció a López Rega

Y ahora corresponde dar a conocer mi relación con el señor López Rega. Lo conocí en 1969, como secretario
privado del general Perón, en mi viaje a España y concerté audiencia con el general por mi condición de
funcionario peronista desde 1944 a 1955. En el gobierno constitucional de 1973, López Rega fue designado
ministro de Bienestar Social y me invitó a ocupar la Secretaría de Seguridad Social. Acepté prestando
colaboración al movimiento peronista, nunca para “recibir órdenes”, sino que respondí en esa función
trabajando intensamente para el bien del país.

En uno de sus pensamientos Rodrigo se manifiesta contrario a la “sociedad de masas” aunque,


lamentablemente, anticipa: “no es mi intención definir qué se entiende por una sociedad de masas”. A su
juicio, “está demasiado definida por el ambiente y el padecimiento de quienes la construimos”.

En semejante sociedad –afirma Rodrigo- “el hombre pierde su identidad”. A eso ha venido a contribuir el
desarrollo de la ciencia y la técnica, que no fue seguido por un reacomodamiento de la conciencia humana:
“El hombre se masifica cada vez más para intentar resolver el problema de su ser, ‘perdido’ en este nuevo
universo que tiene ahora como morada… Esto es ciencia sin conciencia. Mejor dicho, ciencia sin cambio de
conciencia”. Para peor, “hoy se produce en masa, para un consumo masivo”.

Rodrigo, quien –por vías y razones presumiblemente diferentes de las expuestas en su libro- está haciendo
mucho en contra de tal “consumo masivo”, explica claramente en qué consiste el consumismo: “Mientras yo,
productor de automóviles, pienso en usted como el consumidor eventual nº X de mi producto, usted piensa
en mí como el consumidor eventual nº Z de las camisas que vende. Pero ninguno de los dos nos conocemos.
Y lo que es peor, no sólo no nos interesa saber si necesitamos lo que cada uno de nosotros produce, sino que
tratamos de crearnos la necesidad correspondiente a la compra-venta buscada, aun a costa del vaciamiento
correlativo en horas-sueldo-vida”.

A ese contrasentido de la sociedad de masas, Rodrigo agrega lo siguiente: “En el pasado, el hombre se sentía
más seguro y ‘completo’, porque era, de algún modo, el creador y dueño de sus conocimientos. Hoy, el
artesano es reemplazado por la cinta de montajes, el erudito por la computadora, y el maestro transmisor de
una enseñanza viva, por la instrucción programada”.

8 http://focoeconomico.org/2017/06/17/entrevista-a-celestino-rodrigo-por-juan-carlos-de-pablo/

9
Es así como “el hombre esclavizado, que pierde su destino como ser consciente e individual, alienado por el
ruido, privado de paisaje y de intimidad, ignora el sentido de la vida. Se deshumaniza por la constante entrega
de sus valores a las artificiales exigencias externas. Se comporta como un ente de consumo voraz, que
satisface a esa cohorte de fieles y devotos promotores del lucro”.

De esto podría deducirse que Rodrigo se opone tanto al consumo como al progreso y auspicia el retorno a
una sociedad artesanal, dedicada a la subsistencia y la contemplación. Para evitar esa conclusión apresurada,
el mismo Rodrigo se encarga de precisar que él se opone al consumo superfluo, y no a aquél que tiende a
satisfacer las “necesidades vitales”, o sea “aquellas que son indispensables para que el hombre alcance su
pleno desarrollo como ser humano”. Si alguien quiere criticar semejante definición por vaga, puede ahorrarse
su crítica: “Reconozco que esta afirmación se puede criticar por considerarse imprecisa”, dice, y agrega: “¿Qué
es indispensable? Verdaderamente no podría responder con exactitud”.

Sería interesante que ahora, cuando la suerte de los argentinos en cierta medida depende de él mismo,
Celestino Rodrigo lograrse responder con cierta exactitud a su propia pregunta, y tratara de satisfacer, por lo
menos, las necesidades indispensables. En cuanto al libro, esa imprecisión no impide el desarrollo de la idea:
lo que el autor quiere decir es que hay una zona gris, donde se confunde lo vital y lo superfluo, entre otras
cosas porque los estímulos externos –como la publicidad- condicionan el espíritu “y, muchas veces, una simple
corbata o una blusa de moda ejercen un atractivo tan “vital” que llegamos a endeudarnos para adquirirlas”.
Pero, más allá de esa confusión, Rodrigo distingue entre aquellas necesidades que “cada ser humano, en el
fondo de su conciencia, considera imprescindibles” y “aquéllas que nos han sido impuestas por el medio”.
Contra estas últimas el actual ministro libra su batalla. Entre las necesidades superfluas quizás podría figurar,
como ejemplo, la nafta.

La propuesta de Rodrigo tiene –al margen de su tinte filosófico- un contenido económico: enemigo del
“crecimiento acelerado del consumo per cápita”, propone “la utilización inteligente de los bienes que requiere
el desarrollo de su conciencia individual de ser”. El vulgo, que difícilmente accede a niveles tan hondos de
pensamiento, tiene consagrado sin embargo, y desde antiguo, un adagio que coincide con la propuesta del
actual ministro: “No es más rico quien tiene más sino quien se conforma con menos”.

Ricardo Zinn

9
Nacido en 1926, Zinn se recibió de contador público nacional en la Universidad de Buenos Aires si bien
públicamente siempre se presentó como “economista”. Antes de su experiencia en los despachos públicos
fue ejecutivo de las empresas Sasetru, Socma y presidente de Sevel, todas ligadas al Grupo Macri. Para la
biógrafa del actual presidente, Gabriela Cerruti, fue además mentor intelectual del delfín del clan y actual jefe
de Estado de la Argentina.

Para que no queden lugar a dudas del lugar ocupado por cada uno, es sintomático que apenas establecida la
dictadura Rodrigo vaya preso mientras Zinn se transformó en uno de los principales asesores de Martínez de
Hoz, como lo fue luego de Carlos Menem y Domingo Cavallo.

Celestino Rodrigo llegó a la ceremonia de jura en Casa de Gobierno viajando en la Línea A del Subte. Había
acordado la escena con algunos periodistas para dar una imagen de transparencia y austeridad. Cuatro días

9
https://canalabierto.com.ar/2017/06/05/zinn-del-grupo-macri-al-rodrigazo/

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después anunció el peor ajuste que había conocido la historia del país. “Toda política de distribución de
ingresos mediante salarios es una farsa”, afirmó.

El conjunto de medidas anunciadas por el ministro, que asumía en un gobierno “peronista”, no fueron como
pretendió hacer aparecer en los medios, “un intento de frenar a la inflación”, sino una gigantesca
transferencia de recursos del sector asalariado y la pequeña burguesía a “los dueños de la argentina”.

El plan que presentaba Rodrigo tenía en si un autor, Ricardo Zinn, un antiperonista convencido que había
colaborado con cuanta dictadura sufrió el país y tenía un objetivo central, destruir lo que quedaba, luego de
proscripciones y dictaduras, del modelo iniciado en 1944.

10
En agosto de 1976, 14 meses después del Rodrigazo que dinamitó el gobierno de Isabel y 5 meses después
del sangriento golpe, Zinn presentaba un libro suyo (La Segunda Fundación de la República) explicando su
participación en la gestión justicialista, a la que consideraba “la más nefasta de la historia”. Señalaba allí que
cuando un país cae en la decadencia, la única salida posible es el aniquilamiento de un modelo para
reemplazarlo por otro. Esta tarea, la de arrasar con el modelo distribucionista de los ’70, es la “patriótica”
tarea que Zinn tomó a cargo al incorporarse, cual si fuera un caballo de Troya, en el gobierno justicialista. Lo
logró y le abrió el camino a la llegada de la dictadura refundadora.

Tan clara era la vinculación de Zinn con los grupos de poder y con un proyecto ajeno al justicialismo, que tras
la caída del gobierno de Isabel Martínez, mientras otros integrantes del gobierno eran desplazados y
encarcelados, incluido el propio Celestino Rodrigo, él siguió su trayectoria empresaria y se exhibió como
mentor ideológico muy cercano a la dictadura encabezada por Jorge Rafael Videla.

4) La cocina del ajuste

11
A mediados de la década de 1970 la industria ocupaba un rol central en la economía representando en 1973
el 38% del producto bruto interno (P.B.I,)1. El sector agropecuario participaba con el 12% del P.B.I, a pesar de
este bajo valor relativo, tiene la capacidad de condicionar la dinámica económica. Esto se debe a que entre el
agro y la industria se registra una diferencia de costos y precios (Diamand 1972). El agro se beneficia de la
renta diferencial de la tierra de la zona central de Argentina, muy alta a nivel internacional que le permite
operar a precios internacionales. En cambio, la industria por su baja productividad relativa trabaja a un nivel
de costos muy superior al internacional. El alto nivel de precios limita que la industria exporte, mientras que
el agro por sus costos puede exportar y generar divisas.

La mayoría de las exportaciones eran de origen agropecuario, por lo tanto, la magnitud de las divisas externas
que ingresaban dependía del volumen de los bienes agropecuarios exportados y de los precios internacionales
de estos productos (Canitrot 1975). Estas divisas eran necesarias para la producción industrial que debía
importar gran parte de la maquinaria y algunos insumos utilizados en el proceso de fabricación, que no se
elaboran internamente.

La dinámica de la economía dependía del flujo de divisas externas y de las variaciones del tipo de cambio. Esto
producía un proceso de “stop and go”: un ciclo de crecimiento seguido por uno de estancamiento. Los

10
https://www.pagina12.com.ar/diario/economia/2-70532-2006-07-27.html

11
https://publicaciones.sociales.uba.ar/index.php/entramadosyperspectivas/article/view/2926

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períodos de crecimiento requerían de mayores importaciones de bienes de capital produciendo una crisis por
caída de los saldos externos, que daba comienzo a un ciclo recesivo. A la vez el tipo de cambio (relación peso
local / divisas externas en especial el dólar) actúa como regulador entre precios internos y externos. Para
poder exportar y la vez proteger el mercado interno de la competencia internacional, se debe depreciar el
tipo de cambio. Pero esto a su vez encarece el costo de las importaciones afectando la inversión, ya que en
gran medida las inversiones dependen de compras de maquinaria en el extranjero. Sin embargo, hacia los
años 70, se habían desarrollado las exportaciones industriales como automóviles o maquinaria agrícola, pero
las exportaciones de origen agropecuario seguían siendo las mayoritarias.
El funcionamiento de esta estructura condicionaba la relación entre la burguesía agraria y la industrial y entre
estas fracciones de la clase dominante y los asalariados. Los intereses de los asalariados y la burguesía
industrial tendían a coincidir en la fase expansiva del ciclo y a diferenciarse en la recesiva. Como parte de esta
dinámica se registra una fase expansiva que finaliza en el año 1974. La crisis de 1975 muestra estos
componentes contradictorios dando origen a una fase recesiva.

Pero más allá de las fluctuaciones, la burguesía industrial y los asalariados mantenían a mediados de los años
70 coincidencias de más largo plazo que tenían su base en el rol que desempeñó el salario en la expansión del
mercado interno desde la década de 19402. Este vínculo entre ganancia y consumo fue la expresión de la
alianza social entre la burguesía industrial y los asalariados, que se corresponde en el nivel político con la
constitución del peronismo y con la creación de mecanismos estatales de regulación económica y social.
Desde el golpe de 1955, los sectores dominantes intentan efectuar un ajuste en la relación salarial con la
introducción de maquinaria, cambios en la organización del trabajo y la caída de los salarios. El aumento de la
productividad laboral y los menores niveles salariales permiten el incremento de la acumulación del capital y
de la tasa de ganancia. Se busca que la industria fuera menos dependiente de la demanda de los asalariados.
Adquiere relevancia la producción los insumos industriales y de bienes de consumo para los sectores sociales
altos y medios. Entre 1955 y 1975 los salarios mantienen su rol como factor de demanda de bienes de
consumo masivo, sin embargo, pierden en parte la funcionalidad que habían adquirido anteriormente.

Desde fines de la década de 1950 se expanden dos fracciones que resultan centrales en 1975, los grupos
económicos de capital extranjero y los de origen nacional. El crecimiento de los primeros está asociado al
significativo ingreso de empresas de ese origen que se registra entre 1959 y 19643. Estas firmas se
concentraron en algunos sectores claves, en la industria particularmente en las ramas automotriz, de
productos químicos y la petroquímica y en la minería en la extracción de petróleo. Las inversiones externas
eran atraídas por la relativa alta capacidad de consumo que presentaba Argentina en comparación con el
resto de los países dependientes. Otro factor que favorece la inserción del capital extranjero era la existencia
de mercados oligopólicos con altos niveles de proteccionismo, con la consecuente capacidad de captación
diferencial de excedentes por parte de esta fracción concentrada.

Durante 1955–1973, debido a la proscripción del peronismo se desarrollan algunas corrientes sindicales
tendientes a una mayor autonomía. Como expresión política del sindicalismo peronista se constituyen en el
año 1957 las 62 Organizaciones Peronistas. En la década de 1960, la corriente más tradicional encabezada por
el dirigente de la Unión Obrera Metalúrgica, Augusto Vandor, intenta sin éxito disputar la conducción del
General Perón. También adquieren relevancia en el ámbito sindical corrientes radicalizadas de orientación
peronista y de izquierda que cuestionan la conducción de la C.G.T.
En julio de 1974, la muerte de Perón y su sucesión por su viuda Isabel Perón, deja vacante la conducción de
este movimiento. Se registra un escenario favorable a la autonomía sindical que va a explicar en parte la
posición de los gremios en los hechos de 1975.

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La situación económica y política: 1973-1974
El Plan Rodrigo comienza el 2 de junio de 1975, apenas dos años después que el peronismo asumiera el
gobierno en mayo de 1973, con un programa de gobierno muy distinto. Ese programa se expresó en la
gestión en el Ministerio de Economía de José Ber Gelbard y en el Pacto Social. La crisis de este proyecto, con
la renuncia de Gelbard en octubre de 1974, permite entender la emergencia del Plan Rodrigo. Para describir
la situación que transcurre entre el comienzo del Plan Gelbard y el inicio del Plan Rodrigo, identificamos tres
aspectos de interés: las relaciones de fuerza sociales, la puja distributiva y algunos indicadores sobre la
situación económica.

El Plan Rodrigo
El 31 de mayo de 1975 fue aceptada la renuncia de Gómez Morales. En su reemplazo el 2 de junio Celestino
Rodrigo asume el Ministerio de Economía16; en su primer mensaje como ministro17 realiza un diagnóstico
de la situación del país.
Considera que "Dentro del marco de una estructura económica indudablemente sana y mundialmente
reconocida, la Argentina presenta problemas coyunturales". Recordemos que la estructura económica que
Rodrigo define como sana se caracterizaba por una serie de dificultades que pueden sintetizarse en los límites
que encontraba el desarrollo capitalista por la dependencia externa y las distintas contradicciones al interior
de la burguesía El ministro identifica luego los principales problemas que presenta en el país.
La inflación: "El costo de vida en el mes abril subió 9,8%, culminando una tendencia creciente que para el año
que termina en abril arrojó una tasa anual superior al 70%."

Para disminuir el déficit del estado se busca aumentar los ingresos por medio del alza de las tarifas de los
servicios públicos: gas entre un 40% y 60% en el consumo domiciliario, tarifas eléctricas entre un 40% y 50%
en el consumo domiciliario y un 75% para otros consumos. Aumenta también el precio de los combustibles:
la nafta común 181% y la especial 173%.
Se anuncia otra iniciativa que según el equipo económico permitiría aumentar la recaudación: la modificación
del sistema tributario dirigida a acentuar el peso de los impuestos al consumo.

La crisis social y política


Las medidas dispuestas tienen rápidas repercusiones en las relaciones laborales. Cuando se anuncia este
plan económico (principios de junio de 1975) estaban funcionando las comisiones paritarias, el principal
tema de negociación era el nivel salarial. La facultad de homologación de los acuerdos era el instrumento del
que disponía el estado para regular las paritarias.

Cuando se anuncian las medidas, los empleadores del sector industrial deciden retirarse de la negociación
hasta tanto el gobierno no especifique la forma en que los aumentos salariales se trasladarán a los precios. La
misma actitud adoptan los representantes por la parte empleadora de la Corporación de Empresas Estatales
al informar al sector gremial que el acuerdo salarial dependía del incremento de las tarifas públicas.

Teniendo en cuenta el grado de conflictividad que se desarrollaba en el nivel de las bases y la radicalización
de sectores gremiales, el 4 de julio la C.G.T. declara la huelga general para los días 7 y 8 de julio. Por primera
vez la central sindical decide realizar una huelga general en oposición a la política de un gobierno peronista.
Los fundamentos de esta medida eran: 1) "ratificar el respaldo a la Presidenta de Nación" y "la incondicional
defensa de la Doctrina Justicialista, médula del movimiento nacional", 2) "Reclamar a los empleadores la
inmediata aplicación a partir del 1° de junio de 1975, de los Convenios Colectivos de Trabajo acordados" y 3)
"Repudiar el uso discrecional del poder que tiende a generar enfrentamientos sin precedentes en la historia
de nuestro Movimiento, entre la Jefa del mismo y sus trabajadores, así como la concepción que se intenta
imponer a través de medidas que apuntan a desnacionalizar la economía y lo más grave, el ser nacional; que
deteriora el salario real y se opone en los hechos al principio Justicialista de una progresiva redistribución de
ingresos a favor del pueblo y la liberación de la Patria"

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Los hechos de junio y julio de 1975 se producen a menos de un año del golpe de estado de marzo de 1976
que da comienzo al "proceso de reorganización nacional". La corta duración del Plan Rodrigo muestra en 1975
la falta de legitimidad social para la implementación de esta política de corte ortodoxo. El grado de
conflictividad social y la acumulación de fuerzas que habían logrado los asalariados por medio de los
sindicatos, y la debilidad en que se encontraba el gobierno, lleva a gran parte de la burguesía a constituir una
fuerza social de carácter opositora al régimen democrático liderada por el capital financiero.

Conclusión:

Esta obra detalla los acontecimientos producidos durante el shock económico de 1975 que afectó a millones
de trabajadores argentinos dando lugar a un mega ajuste devaluatorio. Tratamos de analizar los puntos
citados en el índice del libro “El Rodrigazo” sumando notas y comentarios de otras publicaciones, en conjunto
con una opinión personal respecto a los comentarios realizados por los autores de esta obra. Desde la
perspectiva de los narradores que intentan articular la reciente historia argentina al desarrollo global del
capitalismo con los procesos económicos y sociales del ámbito nacional, hasta la crisis y posterior debacle que
vivió la Argentina como consecuencia de las medidas implementadas que dispararon los índices de inflación,
provocando una disminución enorme del poder de compra de los trabajadores, desabastecimiento de gran
cantidad de productos básicos, aumento de combustibles y otras necesidades de transporte12.-

Pueden identificarse en las medidas dispuestas por Celestino Rodrigo algunos elementos que luego serán
aplicados por el Ministro de Economía Martínez Hoz durante el gobierno militar desde 1976. El diagnóstico de
la fuerza social que ocupa el gobierno basado en el liberalismo económicoera que la economía no crecía lo
suficiente debido a las alteraciones en el funcionamiento del mercado. Estas interferencias eran asociadas a
la intervención del estado que provocaba distorsión de precios, transferencia de ingresos del agro a la
industria, exceso de gasto público y un elevado nivel de salarios con relación a la productividad laboral. Se
propone como objetivo reestructurar la economía para suprimir las distorsiones mencionadas. En el caso de
los salarios, a diferencia de Rodrigo, el gobierno militar tiene éxito y logra sentar una base del nivel salarial
muy inferior a la etapa anterior.

12 https://www.notimerica.com/politica/noticia-fue-rodrigazo-argentino-20160604082937.html

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