Sei sulla pagina 1di 2

La concepción de la sociedad derecha – izquierda, ha sido una forma, un

medio por la cual estas sociedades se organizan. Esto está dado desde las
costumbres, la cultura con la cual han sido formados. Al haber diferentes
pensamientos en los cuales se fundamentan cada una de estas
orientaciones, se tienden a crear de una u otra manera conflictos
ideológicos donde las probabilidades de llegar a un acuerdo son nulas.
Cada una quiere tener la razón y claro tener el poder, que en su afán de
lograrlo, los gobiernos crean guerras bélicas exponiendo la integridad de un
pueblo ajeno a los caprichos de quienes tienen el poder. Esto ha permitido
someter constantemente a fuertes críticas a estas dos orientaciones, que
pasaron de ser una costumbre a ser ideologías políticas. Desde el punto de
vista, así precisado, “el hombre de derecha es el que se preocupa, ante
todo, de salvaguardar la tradición; el hombre de izquierda, en cambio, es el
que entiende, por encima de cualquier cosa, liberar a sus semejantes de las
cadenas que les han sido impuestas por los privilegios de raza, de casta, de
clase, etcétera”.

A pesar de haber diferencias, estas tienden a tener grandes similitudes, pero


lo que tiende a generar una dualidad contradictoria donde la libertad y
autoridad, bienestar y austeridad, individualismo y antiindividualismo,
progreso técnico e ideal artesano, se consideran, en los dos casos, como
valores instrumentales, o sea que hay que promover y rechazar según la
contribución que ellos pueden dar, respectivamente, al fortalecimiento de
la tradición y a la emancipación de algún privilegio.

Por su parte, la izquierda plantea una idea de igualdad en todos y cada una
de las áreas, esto no quiere decir que todos deban ser iguales, sino que las
condiciones sean iguales para todos, sin generar de alguna manera el
desequilibrio social, económico y político, liberando al pueblo de las
condiciones precarias que se ha mantenido desde mucho tiempo.

Por el contrario, la derecha tiende a ser conservadora, busca mantener de


manera natural de las jerarquías, donde el el grande se come al pequeño o
quien sobrevive es el más fuerte. Desde este punto, la derecha vela por los
intereses propios de cada individuo sin importar la integridad de los mismos.
Los derechos humanos se mantienen, lo que imponen por lo contrario son
las leyes y se condiciona al pueblo. Está es una clara prueba que el pueblo
se somete a sí mismo, al permitir que aquellos sujetos permanezcan en el
poder beneficiándose a ellos mismos y no al pueblo.

Cada una de las orientaciones o pensamientos, por más diferentes que sean
pueden llegan a garantizar el bienestar común ya sea desde la igualdad o
desde lo conservador, inclusive pueden llegar a beneficiarse una de la otra.
Para que esto suceda hace falta dejar a un lado el radicalismo con que se
adoptan, enseñan y aplican estos pensamientos, ampliando el panorama,
cambiando las perspectivas que permitan la inclusión, el bienestar de toda
la sociedad.

Potrebbero piacerti anche