PARASHÁ VAIGASH

Judá se presenta ante el Virrey de Egipto (El cual era Yosef) para interceder por sus
hermanos por el suceso ocurrido con Benyamin, le hace ver que tienen un padre anciano al
cuál desean evitarle tristeza al separarlo de su hijo menor, éste acto hizo ver a Yosef que
sus hermanos habían cambiado para bien. Un gran llanto resultó el encuentro de Yosef y sus
hermanos a los cuáles consoló haciéndoles ver que todo era propósito Divino y así poderlos
ayudar en el tiempo presente, todo Egipto supo acerca de la llegada de los hermanos de
Yosef y llegó a oídos del Paró la gran noticia, la tierra de Goshem fue donada a la familia de
Yaakov porque los egipcios no podían convivir con pastores de ovejas. Mediante un sueño
Yaakov tiene permiso para descender a Egipto junto a 70 almas de Israel dónde tuvieron
abundancia y la benevolencia del Paró. Fue así que en el tiempo que correspondía llegó el
hambre a Egipto y la tierra de Canaán y mediante el gobierno de Yosef los egipcios lograron
sobrevivir mediante un canje de posesiones y hasta sus vidas al servicio del Paró. Veinte y
dos años pasaron para que Yosef y su padre Yaakov se reencontraran, los hijos de Yaakov
(Israel) se asientan y se multiplican de una forma grandiosa. Tambien la parashá insinúa el
nacimiento de Yojebed la futura madre de Moshé Rabeinu.