- La historia clínica es la base del diagnóstico: episodios de tos
(casi siempre no productiva), sibilancias ( bifásicos pero mayormente en la expiración), y opresión torácica que revierten de manera espontánea o con tratamiento. Suele presentar ciertos signos prodrómicos como: prurito debajo de la quijada, molestias interescapulares o un miedo inexplicable. Estos signos y síntomas deben de ser atribuidos y vinculados principalmente en presencia de antecedentes familiares de asma bronquial o exposición reciente a uno o varios de los mecanismos desencadenantes de asma. - La espirometría forzada con prueba de broncodilatación confirma el diagnóstico de obstrucción reversible de la vía aérea. Se denota un FEV1 < 70% o un Índice FEV1/ FVC < 0.7 .