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Management.
El management debe tener capacidad de análisis y síntesis para saber que está sucediendo en el
entorno ¿Qué cambios o circunstancias nuevas son problemas?¿ que es necesario mantener ¿Qué
es preciso cambiar etc. y las características básicas del management son
Existen muchos tipos de management y también funciones que dependen de la relación que
necesita establecer el administrador con la empresa, su entorno y objetivos. Aquí te explicaremos
las 7 funciones principales:
La dirección de la unidad consiste en decidir los objetivos específicos coherentes con las
directrices globales, en trazar el itinerario de la ruta y en realizar el recorrido.
- De comunicación y coordinación.
3. La asignación de recursos.
Para que la unidad funcione, conviene dotarla de un cierto número de medios o recursos. Pero las
atribuciones de medios, en un contexto de rareza y competitividad, suponen la búsqueda de una
dosificación óptima de los recursos asignados, en materia de calidad, naturaleza, calidad, lugar y
modo de asignación.
Se trata entonces de actuar con eficiencia, para estos objetivos de management, comparando los
resultados deseados con los medios utilizados.
Recuerda que los recursos en cuestión no son únicamente financieros, también existen recursos
en hombres, tiempo, energía, competencia, etc.
4. El control.
La función de control permite o bien regular a posteriori (y evitar degradaciones y derivados
excesivamente importantes en términos de costes, plazo, calidad, contenido) o bien prever y
anticipar cualquiera mal funcionamiento que hubiese podido sobrevenir durante dicha alarma.
El control es una ayuda y no sanción. En efecto también en este sentido debe entenderse la
función de control en el management. En cierta forma, se corresponde con la técnica de auditoría,
que consiste en examinar una situación para poner de relieve las desviaciones respecto a un
referencial dado, con vista a saber dónde aplicar las acciones correctoras.
- Control de pertinencia
- Control de conformidad.
- Control de coherencia.
- Control de eficiencia.
- Control de eficacia.
Para obtener esta doble orientación (a priori o a posteriori) la función de control debe de estar
integrada realmente en las otras funciones de Management.
5. La planificación.
6. La activación.
La activación consiste en dar vida y energía a la unidad con regularidad. Su objetivo es combatir
la rutina y la entropía, permitir la innovación y la anticipación, dirigir el cambio mas que
experimentarlo.
Efectivamente, la empresa es un sistema vivo que no puede estar anclado en un sistema estático:
si no se activa, su evolución puede ser regresiva. La activación puede referirse a la estrategia, las
estructuras o los comportamientos.
7. La animación.
La animación puede concebirse de diferentes formas. Algunos no ven más que mandos y otros
carisma paternalista por nuestra parte. La animación precisa de la utilización de dispositivos de
comunicación, de evaluación, de contrapartida a su contribución, es decir, reglas de juegos claras
y explicitas, inclusos negociadas.
Referencias
Recuperado de http://www.todomktblog.com/2013/08/management.html
http://www.soyentrepreneur.com/home/index.php?p=nota&idNota=4610
http://www.soyentrepreneur.com/home/index.php?p=nota&idNota=4901
http://www.soyentrepreneur.com/home/index.php?p=nota&idNota=5596
www.SoyEntrepreneur.com
A pesar de no ser nuevo. el management es un concepto cada vez más importante en el mundo
empresarial. Traducido al castellano y, según el ámbito, significa administración, dirección o
gestión. Es decir, antes de su aplicación formal, las empresas ya tenían roles similares al
management.
A finales del siglo XX, cuando las marcas empezaron a necesitar flexibilidad y aprovechar sus
recursos al máximo, fue necesario que distintos poderes dentro de las compañías “escapasen” de
la dirección general y permeasen toda la estructura de trabajo. Poco a poco, constituyeron el
management moderno.
Imaginemos una empresa cualquiera, con varios niveles jerárquicos, sometida a distintos
esfuerzos externos, como la demanda y la percepción de sus productos, o la llegada de un nuevo
competidor. El management es el mecanismo que conduce los esfuerzos de la organización para
adaptarse a estos cambios.
Por tanto, el management no es una única función en una empresa, sino varias distribuidas a lo
largo de los distintos niveles; y tampoco existe un único tipo de management o gestión, sino
varios, en base a la estrategia general de la empresa, a su misión, visión y valores, y a cada
proyecto concreto que analicemos.
Cojamos una empresa cualquiera, desde una pyme a una gran empresa. Salvo excepciones de
empresas “sin jefes”, todas ellas tienen una estructura, generalmente de tipo piramidal que
engloban distintas áreas. En todas puede ser aplicado el management y la gestión empresarial
para maximizar los recursos.
Management en la dirección
La dirección de una empresa grande tiene distintos roles como son el CEO, el CIO o el COO, que
en las pymes aparecen representadas en menos personas. Cada una de estas funciones gestiona en
cierta medida los recursos de la organización. Los organiza y dirige, y por tanto realiza las
funciones de manager.
La asignación de recursos
A menudo, cuando pensamos en recursos, tendemos a lo material. Sin embargo, los distintos
managers han de tener en cuenta conceptos como el tiempo, a los propios empleados o la imagen
de marca. Estos recursos se reparten “desde arriba” y caen en las distintas áreas de
especialización.
Por ejemplo, desde la dirección se realiza una labor de management para impulsar con 300.000
euros el área de ingeniería; y este área realiza una labor de management a la hora de repartir ese
capital en los distintos proyectos. Lo mismo se aplica a recursos humanos o al tiempo.
El management más allá del día a día
Todos los objetivos (KPIs) que se persiguen en las distintas áreas funcionales de la empresa
tienen plazo, la T de los objetivos SMART: corto plazo, medio plazo y largo plazo. Para cada uno
de ellos, las distintas áreas de dirección, así como los equipos bajo ellos, han tenido que gestionar
recursos futuros, trayéndolos al presente y realizando estimaciones para distintas fechas.
La asignación de recursos a lo largo del tiempo y los KPI se unen en el llamado control, que no
deja de ser un proceso iterativo de revisión constante de los objetivos para ver si se cumplen o no.
Si, tras varios meses del arranque de un proyecto se observa que tiene buenos resultados pero que
está falto de recursos, es a través del management que se plantea o no su asignación. De igual
modo, también puede decidirse su cierre.
A raíz de Internet han surgido nuevos puestos en las empresas, nuevos roles y también la
modificación de funciones ya existentes, que han tenido que ampliar su área de trabajo. El
management es una de ellas, y recibió la nomenclatura de management 2.0 cuando las
telecomunicaciones entraron en las empresas.
Este hecho dispersó en cierto modo el poder antes centralizado del management conocido hasta la
fecha, haciendo de la gestión (especialmente la del día a día) una tarea más colectiva que
personal. Si el management 1.0 se caracterizaba por decisiones “desde arriba”, el management
2.0 busca un consenso.
El management 3.0 es la evolución de los dos anteriores hacia jerarquías más difuminadas, como
comenta Jurgen Appelo, autor del libro Management 3.0 (2010). Pone el ejemplo de una empresa
con 100, 500 o miles de trabajadores que, lejos de ser una jerarquía, es una red.
En su libro, Appelo señala cómo la complejidad del día a día (la ingobernabilidad de los
mercados) necesitan una gestión distribuida en la que cada trabajador y participante en la
empresa tenga algo de gestor, por lo que el rol del manager está todavía más descentralizado.
Quizá, con la llegada de la robotización y la Industria 4.0, tengamos que actualizar el término a
un cuarto grado; pero hasta el momento el management sigue, pese a su extensión, concentrado
en los gestores, directores y mandos intermedios de las empresas, especialmente las de mediano
tamaño.
Referencias