Nº 40 • 6 . 03 .

2018 • 4,00 €

Una revista sin prisas

• LAS CONMOCIONES CEREBRALES EN EL FÚTBOL •
• HARRY KANE: UNO DE LOS NUESTROS •
• CÓMO JUGABA PUSKÁS •
• LAUREANO RUIZ, EL ABUELO DEL BARÇA •
• ENTREVISTAS: ROCÍO YBARRA, Entrevista a
PABLO
JOSÉ LUIS MARTÍNEZ •

MACHÍN

"La idea es más

importante
que el sistema"
 EDITORIAL
EL PODER DE LA PALABRA
La palabra, decíamos en enero, es una herramienta imperfecta de comunica-
ción y un arma de confusión masiva, pero no querría por ello estigmatizarla,
pues incluso esta afirmación puede llevar a engaño, como si la palabra fuese
la culpable de dicha confusión, cuando no es así. Las palabras son inocentes,
nosotros no. La palabra posee un poder prodigioso que a menudo tendemos
a desaprovechar, cayendo en el uso de términos que no reflejan con precisión
aquello que queríamos expresar. Usamos palabras equivocadas, provocando
aturdimiento en vez de precisión, pero no son ellas las culpables sino nosotros
quienes las empleamos mal o de modo inconveniente o errado. Usar la palabra
adecuada puede ser profundamente revolucionario.
Baste un ínfimo ejemplo: la sencilla reflexión de que en el fútbol no se “tiene”
nunca la pelota (salvo cuando la atrapa el portero o en los saques de banda)
elimina el concepto “posesión del balón”, por incorrecto y falso. El balón no se
tiene, sino que se dispone de él, lo que influye poderosamente en la manera de
concebir el juego, su desarrollo y dinámica, y cuanto ocurre en el mismo. Pues-
to que la posesión no existe propiamente, el fútbol es muy distinto a lo que nos
cuentan quienes recurren a palabras tópicas e inadecuadas. El fútbol es inten-
ción, ubicación y disposición, pero nunca posesión. La palabra correcta es dis-
ruptiva, de ahí que los medios de comunicación le tengan tanto miedo y gusten
de desprestigiarla.
Del mismo modo que una diferencia milimétrica en un punto se convierte en ki-
lométrica cuando se proyecta lejos, el uso de la palabra adecuada o inadecuada
produce un desarrollo del fútbol como juego radicalmente distinto, según sea
la que se emplee. La palabra puede ser revolucionaria y en este momento del
proceso evolutivo del fútbol lo es más que nunca.

Martí Perarnau

THE TACTICAL ROOM / REVISTA #40 MARZO 2018

The Tactical Room es la revista que edita el Club Perarnau. Este nº 40 se publica en marzo de 2018.
Editorial Primera Impresión.
 × F I G U R A ×
CLUBPERARNAU P3

QUINI
Queríamos abrir una nueva sección ilustrada para dedicarla a
figuras del deporte y en ese momento se marchó Enrique Castro.
Un deportista ejemplar y una persona entrañable, buena y solidaria.
Para Quini va esta primera edición de la sección “Figura” porque él
siempre será eso y mucho más. Será inolvidable.
 ÍNDICE
1. CORRESPONDENCIA DE UN NÁUFRAGO. 5
JUGAMOS TODOS O NO JUEGA NADIE
Ignacio Benedetti
2. LAS CONMOCIONES CEREBRALES EN EL FÚTBOL 12
Loles Vives
3. GRANDES MAESTROS: LAUREANO RUIZ, EL ABUELO DEL BARÇA 22
Martí Perarnau
4. ENTREVISTA A PABLO MACHÍN 31
Pablo Beltrán
5. HARRY KANE: UNO DE LOS NUESTROS 53
Tommaso Giagni
6. FUNDAMENTOS DE LA EXPRESIÓN CREATIVA DEL JUGADOR 58
Miguel Fernández
7. CÓMO JUGABA PUSKÁS 69
Alberto López Frau
8. LOS MOTORES DE JUEGO EN EL FÚTBOL 76
Ricardo Zazo
9. MASSIMO ODDO, EL REVULSIVO DEL UDINESE 82
Michele Tossani
10. SOMALIA, 28 AÑOS JUGANDO DE VISITANTE 89
Agustín Galán
11. OLYMPIQUE LYONNAIS: UN LUNA PARK 96
Alain Valnegri
12. EL CÍRCULO VIRTUOSO: ROCÍO YBARRA 107
Isaac Lluch
13. MENTES DEPORTIVAS. EL ESTRÉS 118
Rosa Coba
14. TIGER WOODS: LA DESPEDIDA DE MOZART 132
Enrique Soto
15. ENTREVISTA A JOSÉ LUIS MARTÍNEZ 139
Martí Perarnau
16. PRÁCTICAS EDUCATIVAS EN EL RUGBY 153
Juan Casajús
17. AUTORES 157

CLUBPERARNAU
 Ignacio Benedetti

JUGAMOS
TODOS O
NO JUEGA
NADIE

Carlos Peucelle, en la
portada del recientemente
desaparecido “El Gráfico”.
CLUBPERARNAU
E n la soledad del naufragio, las que-
rencias se recuerdan de otra mane-
ra. Las imágenes de todo aquello que
trajo felicidad a esta existencia tienen un
elemento en común: no hay protagonismo.
Todo lo amado y venerado por nuestra es-
pecie evoca a la comunión de intereses y
emociones. Y el fútbol, aún en los momen-
tos más sufridos, es precisamente la posi-
bilidad de trascender, no a través de la vic-
toria, sino por medio de la construcción y la
solidificación de vínculos socio-afectivos.
Esto, en castellano puro y simple, es encon-
trar los caminos para querer y ser querido.
Si nos atenemos a la naturaleza del ser hu-
mano, aquella que tan maravillosamente
describen Schopenhauer y Nietzsche, no
queda duda de que lo que domina la exis-
tencia de nuestra especie es la voluntad,
ese insaciable deseo de poseer y de ser. La
voluntad es la culpable, al igual que la ba-
nalidad, la estupidez y la mentira, de que
muchos de nosotros, una vez conseguido
el objetivo de nuestra intención, no lo dis-
frutemos; inmediatamente, casi como un
vicioso de la nicotina, nos centramos en la
próxima víctima de nuestros deseos.
Puestos a tomar estas líneas como un punto
de partida para la discusión, valdría pregun-
tarse si somos algo más que tristes y super-
ficiales depredadores capaces de destruir
hasta el más maravilloso juego creado por
nosotros mismos, con el único objetivo de
satisfacer nuestras más oscuras miserias.
En algún momento, impulsados por los es-
tafadores del espíritu, se nos hizo creer que
todo aquello que hacemos y deseamos tiene
un carácter supremo y superior. El mundo
nos pertenece, dijeron; entonces, tomemos
todo, que para pensar y reflexionar tendre-
mos tiempo tras la destrucción.
P6
El fútbol, actividad humana y humanís-
tica como pocas, no podía ser inmune a
nuestras debilidades. Lo que comenzó
como un juego ha dado paso a esta guerra
de egos protagonizada por todos aquellos
que no juegan, pero que en su inconmen-
surable soberbia han vendido el pescado
podrido de que son tan importantes como
el balón y los jugadores. Venga, que nada
de lo que aquí escribo es novedad, más
bien, mi oficio es el de recordarle al lector
que nada ha cambiado.
Al fútbol no lo estudia nadie, y con el paso
de los minutos se van acumulando los su-
cesos que nadie quiso comprender, por lo
que, citando las palabras del detective Rust
Cohle, interpretado por el genial Matthew
McConaughey en la primera temporada de
la serie “True Detective”, bien podríamos
estar “caminando, en una última mediano-
che, tomados de la mano, hacia la extinción;
hermanas y hermanos renegando un con-
trato injusto”.
Matthew McConaughey, en la serie “True Detective”.
Cuando un chico empieza a patear un balón,
quienes intentan guiar su andar no piensan
en otra cosa que mostrarle al ídolo actual.
Invitan a la criatura a imitar y superar a ese
ego que hoy domina las noticias, que es fi-
gura de las marcas y que se pasea con las
mujeres más llamativas. Salvo en contadas
excepciones, a ese niño nadie lo orienta en
CLUBPERARNAU
la comprensión de que chutar esa pelota
que tanto le gusta no tiene mayor sentido si
no tiene con quién hacerlo.
TODOS PARA UNO
Y UNO PARA TODOS
En una conferencia en Portugal, Juan Ma-
nuel Lillo expresó lo siguiente:
“Nos han dicho: ‘Hay que trabajar la técni-
ca’, pero como no existe, no sé cómo la en-
trenan. ‘El niño va a entrenar la técnica’, di-
cen. Bueno, si eres capaz de hacerlo, para
mí eres Maradona. No sé cómo se entrena
la técnica. ¡No se puede! Dicen: ‘Es que ha-
cemos trabajos con la pierna y le pega a la
pelota contra la pared’. Bueno, así puede
ser campeón del mundo de pegarle contra
la pared, eso sí que te lo digo yo. Eso segu-
ro. Pero que eso luego tenga aplicación con
una situación de juego, donde tengas que
hacer uso de esa supuesta habilidad que di-
ces que has construido, ajena al contexto,
ya me dirás…”
Llegados a este punto tengo por cierto que,
por la razón que fuere, usted decidió sumer-
girse voluntariamente en estas líneas, por
lo que el ego me invita a intuir y creer que
reconoce a Lillo como el estudioso del juego
que es, y que más que sumar estadísticas,
al tolosarra lo aceptamos y lo queremos por
lo mucho que ha dado a este deporte.
Para que sea fútbol debe ser primero
un acto colectivo. Lo contrario, es
decir, la actuación individual, será
cualquier otra cosa, mejor o peor,
pero jamás será fútbol
P7
Aunque nada de lo que aquí se lee consti-
tuye una innovación, es necesario recordar,
cada vez que veamos a dos grupos huma-
nos disputándose la titularidad de una pe-
lota, que no somos nada sin compañeros.
No importa si disponemos o no del balón,
porque para que sea fútbol debe ser prime-
ro un acto colectivo. Lo contrario, es decir,
la actuación individual, será cualquier otra
cosa, mejor o peor, pero jamás será fútbol.
El espíritu de nuestra existencia, así como la
del juego, es la vida en sociedad. En el juego
nos relacionan unos colores, pero también
la pelota. A partir de su conducción somos
y seremos y, cuando no la tenemos, cuan-
do la perdemos, somos y seremos otros. Ya
no se trata con exclusividad de reflexionar
sobre el pensamiento de Heráclito de Éfeso
(“En los mismos ríos entramos y no entra-
mos, pues somos y no somos los mismos”),
sino de comprender que somos seres situa-
cionales: ante cada coyuntura actuaremos
según lo que esta nos sugiera.
Aceptada la muerte como única verdad in-
discutible en nuestro camino, debemos de-
cidir si queremos ser una posibilidad o una
simple imitación que engorda las estadísti-
cas y nada más. Puede que ese sea el fin de
nuestra existencia. La muerte, entendida
como la extinción del espíritu originario de
este juego, está por darle al fútbol la estoca-
da final, pero mientras haya fuerzas y oxí-
geno, no ha sido dicha la última palabra.
LA MUERTE NOS DESNATURALIZA
PARA LUEGO DESTRUIRNOS
El ser humano es, en su esencia, un ente
único e irrepetible. Posee virtudes y condi-
ciones que lo hacen así. Pero sin otros, sin
la compañía de sus similares, no habría so-
CLUBPERARNAU
brevivido a los distintos cambios que ha su-
frido el mundo. Es un ente individual que
no tiene razón de ser en soledad.
El fútbol, pequeño ecosistema que ayuda a
tener una idea de lo que es la vida huma-
na, así lo demuestra. Nada, ni tan siquiera el
error del rival, se produce por la interven-
ción solitaria de un solo futbolista. Todos
dependen de todos. Y esto no se circunscri-
be únicamente a los compañeros.
Hay que insistir en que el juego es el en-
frentamiento de dos colectivos, de once vo-
luntades contra otras once voluntades, que
primero se reconocen en su particularidad,
luego se convierten en colectivo, posterior-
mente se aceptan como sociedad y, final-
mente, una vez suscrito ese compromiso,
intentarán competir de la mejor manera po-
sible. El objetivo es competir, aún cuando lo
más deseado sea la victoria.
El objetivo es competir, aún cuando
lo más deseado sea la victoria. Para
ello, la clave es la aceptación de un
plan común, de un objetivo general
Para ello, la clave es la aceptación de un plan
común, de un objetivo general, claro está,
reconociendo que serán las cualidades in-
dividuales y las que resulten de la construc-
ción de esa alianza, las que determinarán el
cómo, el cuándo, los por qué y el para qué.
Pero esto que aquí se señala y que no apa-
renta mayores dificultades para ponerse en
práctica choca contra un muro infranquea-
ble: el ego y la necesidad de pertenecer.
Debo explicarme: pertenecer tiene que ver
con relacionarse, con formar parte de algo,
y cómo no, con sentir que hay un lugar al
que siempre se puede regresar. Original-
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mente, esa búsqueda obedecía a lo más pri-
mario del ser humano, pero en estos tiem-
pos modernos y violentos, pertenecer es
un requisito para hacerse notable. Ya nada
importa más que cumplir con el objetivo de
formar parte y mostrar que se es integrante
de las corrientes actuales. Y para ello están
las redes sociales: nos muestran cómo los
borregos caminan felices, sin saberlo, hacia
su propio precipicio.
El fútbol, en su carácter colectivo, permite,
promueve y multiplica la sensación de per-
tenecer. Jugarlo implica que hay diez per-
sonas a mi lado, que están para acompañar-
me, para sostenerme y para cuidarme, de la
misma manera que yo haré eso mismo por
alguno de ellos. Perdone si esto le parece ex-
cesivamente presuntuoso, pero todo aquel
que jugó a la pelota o que jugó al fútbol sabe
que no hay sensación más conmovedora que
aquella que el fútbol proporciona.
Jugar implica que hay diez personas a
mi lado, que están para acompañarme,
para sostenerme y para cuidarme,
de la misma manera que yo haré eso
mismo por alguno de ellos
Como le decía, pertenecer, hoy en día, ha
perdido su esencia. O por lo menos así se
muestra en todo aquello que rodea a este
maravilloso deporte. Para ser parte hay que
aprenderse el guión, los lugares comunes y
hablar del juego según lo que queremos y
no según lo que este nos ofrece. Por ende,
no queda duda de que estamos en el uni-
verso de lo igual, en el drama de lo idéntico.
El filósofo coreano Byung-Chul Han, tan
célebre en estos tiempos gracias a una en-
trevista antes que por la profundidad de su
CLUBPERARNAU
obra, advierte con la fiereza de quienes ob-
servan sin otro objetivo que el aprendiza-
je, que “la proliferación de lo igual se hace
pasar por crecimiento. Pero a partir de un
determinado momento, la producción ya no
es productiva, sino destructiva; la informa-
ción ya no es informativa, sino deformado-
ra; la comunicación ya no es comunicativa,
sino meramente acumulativa”.
El filósofo coreano Byung-Chul Han.
Dentro de ese infierno que tanto ocupa el
pensamiento de Han entra el fútbol y todo
lo que le rodea. Existe un pensamiento úni-
co que no es discutido, porque el mismo avi-
sa que lo único que importa es estar. Aquel
no es otro que el que promueve la dictadu-
ra del resultado como único valor valorable.
Ganar como sea, dicen, y mientras tanto, el
fútbol se desangra casi irreversiblemente.
¿Por qué se ha impuesto la dictadura del
resultado? Han, en su libro “La expulsión
de lo distinto”, parece tener una respuesta:
“Lo numérico hace que todo resulte nume-
rable y comparable. Así es como perpetúa
lo igual”. Crear falsos debates en torno a lo
estadístico da seguridad a quienes lo prota-
gonizan: el juego es de tal complejidad que
requiere mucha atención, la misma que es-
tos ególatras comerciantes de la banalidad
P9
emplean en sí mismos para aparentar una
sabiduría que no es tal.
Crear falsos debates en torno a lo
estadístico da seguridad a quienes
lo protagonizan
No se intenta encontrar las razones que
condujeron a esa victoria que tanto dicen
adorar, por ello, y sin respeto alguno por el
juego que les da de comer, inventaron hace
mucho tiempo la Maradonadependencia, la
Messidependencia o la Cristianodependencia,
entre tantas mentiras que se venden con
aroma de caviar.
A la idiotez militante, sostenida por la ne-
cesidad de algunos muchos de estafar para
sobrevivir, le dio por crear esas ficciones,
cuando en realidad en un juego colectivo
no es posible esa relación de dependencia;
esa subordinación es absurda. Sí hay, por
el contrario, una perfecta convivencia entre
todo lo que hace posible este juego. Léase
bien: coexistencia, no dependencia.
En el juego son muchos y distintos los gra-
dos de influencia y de cooperación. Es por
ello que creer o promover soluciones épi-
cas e individuales que no son –como he-
mos expuesto anteriormente, no somos sin
compañeros que nos ayuden a existir– es
cuanto menos una conducta malintencio-
nada, destinada a sostener esa estafa de la
que muchos viven y otros aspiran a hacer
vida a través de ella.
El futbolista es el juego y el juego
es el producto de las relaciones, las
interrelaciones y las conexiones
CLUBPERARNAU
El futbolista es el juego y el juego es el pro-
ducto de las relaciones, las interrelaciones
y las conexiones. Nadie, entiéndase bien,
nadie, por sí solo, podrá ejecutar o prota-
gonizar con éxito algo que remotamente se
parezca al fútbol. O somos todos o no es na-
die. Y todo esto es incuantificable y al mis-
mo tiempo impostergable.
ENTENDERNOS PARA PODER SER
“Escuchar significa algo totalmen-
te distinto que intercambiar infor-
mación. Al escuchar no se produce
ningún intercambio. Sin vecindad,
sin escucha, no se configura ningu-
na comunidad. La comunidad es el
conjunto de oyentes”
(Byung-Chul Han)
En el fútbol hay varias formas de comuni-
cación, siendo los gestos y el pase dos de los
más reconocibles. Ahora bien, como se pue-
de inferir tras reconocer ambas conductas
como partes insustituibles de un proceso
que es la construcción de sociedades, pue-
de y debe entenderse que estas jamás se
realizarán bajo los condicionantes típicos
de una relación de subordinación.
En el Mundial de México 1986, el mundo
observó cómo Diego Armando Maradona,
capitán de la selección argentina, convirtió
uno de los goles más hermosos en la histo-
ria de este juego. Ante Inglaterra, el ‘10’ dejó
en el camino a cinco futbolistas más el por-
tero, en una jugada que todo amante de este
deporte reconoce.
Sin embargo, lo que las cámaras y el emo-
cionante relato de Víctor Hugo Morales no
alcanzan a explicar es que la monumental
P 10
jugada de Maradona no fue un acto en so-
litario, ni una jugada aislada. Para que su-
cediera, el capitán argentino contó con la
colaboración de todos sus compañeros. Son
notables los movimientos de Héctor Enri-
que, José Luis Cuciuffo, Jorge Burruchaga
y Jorge Valdano, quienes, siendo parte y
siendo todo, jugaron, es decir, se movieron,
se ofrecieron y con ello generaron los espa-
cios para que Maradona convirtiera la inol-
vidable obra de arte a la que me refiero.
El oscurantismo del fútbol, ocupado más
por su supervivencia, sin importar lo que
esta cueste, inventó que aquello fue pro-
ducto del inagotable talento del capitán ar-
gentino, cuando en realidad aquel gol cons-
tituyó una muestra más del cooperativismo
que define a este juego. Fueron todos para
uno y uno para todos y, gracias a ello, Ar-
gentina siguió su camino hacia el Olimpo.
El gol de Maradona en 1986, reproducido por “El Gráfico”.
Como aquella maniobra hay mil ejemplos
más. La actualidad nos invita a observar a
Lionel Messi y desgranar su cada vez mayor
influencia en el juego de su equipo. Aquel
devorador de récords no perdió su instin-
to asesino sino que, gracias a su crianza en
una cultura que siempre privilegió el colec-
tivo por encima de las necesidades indivi-
duales, se fue transformando de un juga-
dor de jugadas a un jugador que simboliza
la continuidad del juego.
CLUBPERARNAU P 11

Carlos Peucelle escribió que “el buen equipo
se da con el acoplamiento de valores dispa-
res que producen un funcionamiento colec-
tivo. Sin acoplamiento no hay equipo. Esto,
a veces, se consigue, otras veces se produ-
ce por casualidad. Y en otras se hace muy
difícil teniendo los mejores jugadores. Todo
depende del jugador, del material humano
que se coordina”.
El equipo, tal como expuso “Barullo” Peu-
celle, es el resultado de todo esto. Pero el
equipo también es un punto de partida,
siendo que una vez conseguida la dinámica
que ayuda a la construcción de ese sistema
vivo, abierto e inacabado, se podrá jugar al
fútbol. Antes jugaremos a la pelota o a lo
que usted quiera, pero al fútbol jugamos to-
dos o no juega nadie.

“El buen equipo se da con el Ignacio Benedetti.

acoplamiento de valores dispares -Escritor-
que producen un funcionamiento @ibenedettip
colectivo. Sin acoplamiento no hay
equipo” (Carlos Peucelle)

Acoplamiento, de acoplar, es la acción de

unir una pieza o cuerpo con otro de modo
que ajusten exactamente. ¿A qué se ajus-
ta el jugador (pieza)? A una idea, a un co-
lectivo, de la misma manera que ese grupo
(equipo) se ajustará a partir de la aparición
de esa nueva pieza.
CLUBPERARNAU P 12

LAS
CONMOCIONES
CEREBRALES
EN EL FÚTBOL
Loles Vives

En enero de 2017, durante un partido de Premier League disputado en Stamford Bridge, el

centrocampista del Hull City Ryan Mason sufrió una fractura de cráneo a consecuencia
de un violento choque, cabeza contra cabeza, con el defensa del Chelsea Gary Cahill.
Tras ser retirado del campo con asistencia de oxígeno, Mason fue trasladado al hospital
St. Mary's de Londres, donde fue sometido a una cirugía de emergencia para liberar la
presión que había en su cerebro por acumulación de sangre y líquido cefalorraquídeo a
consecuencia del trauma que puso en peligro su vida.
CLUBPERARNAU
O cho días después, Mason fue dado
de alta y a los cuatro meses retoma-
ba la preparación en vistas a incor-
porarse de nuevo al equipo. Pero la recu-
peración no evolucionó favorablemente y
Mason no pudo volver a jugar.
El pasado febrero, después de trece meses
de tratamientos e intenso trabajo para in-
tentar volver al terreno de juego, el joven
jugador de 26 años anunció su retirada:
“No tengo otra opción”, aseguró. Así se lo
confirmaron neurólogos y neurocirujanos,
“debido a los riesgos que implica la natura-
leza de su lesión”. Una resonancia magné-
tica reveló que el cerebro de Mason no so-
portaría ningún otro golpe.
El cráneo de Ryan Mason.
Mejor suerte tuvo Medhi Lacen, futbolista
del Málaga FC. El mismo día que el jugador
inglés anunciaba su retirada, el francoarge-
lino regresaba a los entrenamientos recu-
perado de un traumatismo craneoencefáli-
co sufrido el sábado anterior al chocar con
Fernando Torres en el encuentro de Liga
jugado contra el Atlético de Madrid.
Ambos sucesos acontecían pocos meses
después de que un documental de la BBC
titulado “Dementia, football and me”, emiti-
do en noviembre de 2017, hiciera saltar las
alarmas sobre los posibles daños cerebrales
que pudieran sufrir los futbolistas a conse-
cuencia de los cabezazos al balón acumu-
P 13
lados a lo largo de sus carreras deportivas.
El reportaje en cuestión se centraba en el
testimonio del exjugador internacional in-
glés Alan Shearer, que a sus 47 años sufre
demencia vascular y pérdida de memoria.
Shearer considera que sus problemas po-
drían estar vinculados a la gran cantidad
de remates de cabeza realizados durante
los veinte años de carrera como futbolista
profesional, según se desprende de las
pruebas neurológicas que le realizaron. “En
algunos entrenamientos podía cabecear
hasta cien veces”, aseguró el delantero. Las
sospechas de Shearer no han sido consen-
suadas por los médicos.
DOS MIL CABEZAZOS
Alan Shearer tiene razón en cuanto a con-
siderar que la cantidad de cabezazos al ba-
lón a lo largo de una carrera futbolística no
es baladí.
Alan Shearer, sometido a pruebas médicas.
Se ha estimado que los jugadores de fútbol
profesional juegan alrededor de 300 parti-
dos a lo largo de su carrera como promedio,
lo cual supone un total de unos 2.000 ca-
bezazos al balón. El promedio de cabezazos
por partido es de seis a doce, en los cuales
se impacta un balón que viaja a alta veloci-
dad. A dichos remates hay que sumar los
CLUBPERARNAU P 14

que se dan en los entrenamientos, durante área afectada. En el fútbol es muy habitual
los cuales es habitual cabecear de forma re- que los jugadores sufran golpes en la cabe-
petida, aunque en este caso suela ser a in- za y a consecuencia de ellos padezcan una
ferior velocidad. conmoción cerebral. La mayoría se recupe-
¿Los futbolistas y las futbolistas tienen ra sin consecuencias ni secuelas, pero han
motivos para preocuparse con tanto existido casos en los que el trauma ha des-
cabezazo? Tal como dice Shearer, ¿los ca- encadenado daños neurológicos irreversi-
bezazos repetidos al balón pueden causar bles e incluso la muerte.
daños neurológicos y desarrollar demencia
o enfermedades neurodegenerativas como
ocurre en el boxeo y fútbol americano? ¿O
en el fútbol el peligro reside en las conmo-
ciones cerebrales a causa de los traumatis-
mos craneoencefálicos accidentales y no
en el heading1, es decir los golpeos de cabeza
dados de forma consciente al balón?
Todas estas preguntas serán respondidas
en este reportaje por nuestro médico de
guardia, que en esta ocasión se trata del
doctor Xavier Valle, especialista en me-
dicina deportiva y experto en conmocio-
nes cerebrales en el deporte. Pero antes de
conversar al respecto con el doctor Valle
conviene explicar algunas cosas respecto
de esta problemática.
Aunque los tres jugadores (Mason, Lacen,
Alan Shearer, cabeceando un balón y jugando con la cabeza ensangrentada
Shearer) a los que me he referido al prin- (Fotos: AFP y EFE).
cipio han sufrido daños cerebrales, existen En el caso de Shearer, en cambio, los daños
diferencias a considerar a la hora de abor- no se habrían producido por un golpe fuer-
dar el riesgo al que están sujetos los futbo- te puntual y, en consecuencia, a causa de
listas en lo referente a daños neurológicos una conmoción, sino por la acumulación de
o enfermedades neurodegenerativos que
impactos dados al balón mediante la cabe-
puedan sufrir a lo largo de sus vidas. za, lo que supuestamente podría provocar
Los traumas de Mason y Lacen son con- lesiones cerebrales acumulativas y con el
secuencia de un traumatismo accidental e paso de los años enfermedades neurodege-
involuntario que causa conmoción cerebral nerativas.
y, como hemos visto, las consecuencias Sin embargo, Pedro Manonelles, presiden-
pueden ser de mayor o menor gravedad te de la Federación Española de Medicina
en función de la intensidad del impacto o el del Deporte (Femede), a propósito del caso
1  Heading: Movimiento ofensivo o defensivo por el cual la cabeza desprote-
gida del jugador se usa para impactar deliberadamente la pelota y dirigirla
Shearer opinó que “aunque la afectación
durante el juego.
CLUBPERARNAU P 15

neurológica en sujetos que golpean de for- fútbol está considerado un deporte más se-
ma reiterada con la cabeza es algo que se guro que otros como el fútbol americano o
debe tener en cuenta, no hay hallazgos su- el hockey sobre hielo. Una de las ventajas
ficientes para tomar ninguna medida espe- del fútbol es que es el único deporte en el
cial”. Su apreciación, como veremos, coin- que los jugadores usan de forma deliberada
cide con la del doctor Xavier Valle, quien su cabeza para golpear la pelota. Los golpes
imparte clases de conmoción en el deporte imprevistos son los más peligrosos.
en la Escuela de Medicina de la Educación Pese a que se han descrito algunos casos
Física y el Deporte (UB). de demencia y de ETC2 en futbolistas, hasta
Una de las principales preocupaciones es la fecha ninguno de los estudios realizados
que el fútbol cause encefalopatía traumá- han sido concluyentes y no se puede decir
tica crónica (ETC), una patología neurode- que el heading sea causante de deterioro
generativa llamada antiguamente “Punch- cognitivo. Se necesitan más estudios para
drunk syndrome” o demencia pugilística, evaluar los riesgos de conmociones cere-
al ser descrita por primera vez en boxea- brales pequeñas, pero frecuentes, causa-
dores. La enfermedad es causada por re- das por los cabezazos repetidos.
petitivos golpes conmocionantes y subcon-
mocionantes (golpes que están por debajo
del umbral de la fuerza necesaria para pro-
vocar una conmoción cerebral) o por una
combinación de ambos.
Dicha enfermedad también ha sido repor-
tada en los jugadores profesionales de fút-
bol americano, que al igual que los boxea-
dores sufren múltiples golpes en la cabeza
y conmociones cerebrales a lo largo de su
trayectoria [Ver el informe “NFL. La autop-
sia que cambió un deporte” de Daniel Cana
en el nº 23 de The Tactical Room]. No suce-
de del mismo modo en el fútbol.

Una de las ventajas del fútbol

es que es el único deporte en el
que los jugadores usan de forma
deliberada su cabeza para golpear la
pelota. Los golpes imprevistos son Hilderaldo Luiz Bellini, el gran capitán brasileño, jugando con una herida sufri-
los más peligrosos da en el parietal con su primer club, el Vasco da Gama.

2  El gran capitán de la selección brasileña en los Mundiales de 1958 y 1962,

En lo referente al riesgo de sufrir conmo-
ciones cerebrales de forma repetitiva, el
Hilderaldo Luiz Bellini, fue el primer caso reportado de ETC en un jugador de
fútbol. Bellini falleció a los 83 años de edad, víctima del Alzheimer o de algún
tipo de demencia. El examen neuropatológico post-mortem de su cerebro,
donado por la familia para una investigación, confirmó la presencia de ETC,
además de un moderado estado de Alzheimer y otras alteraciones.
CLUBPERARNAU
EL MAYOR PELIGRO,
LOS GOLPES PROVOCADOS
Por contra, sí están muy claras las gravísi-
mas consecuencias que pueden ocasionar
otros impactos que repercuten en el cere-
bro, como los golpes en la cabeza, cara y
cuello, tanto si son por contacto con otros
jugadores (cabeza, codo, rodilla, pie) o bien
por caída y golpeo con el suelo u otro objeto.
Por este motivo, y como nos explica el doc-
tor Valle en la siguiente entrevista, médicos
deportivos de todo el mundo se reúnen
periódicamente para establecer protocolos
de actuación ante una posible conmoción
cerebral en la competición, así como para
determinar la recuperación y el regreso se-
guro al terreno de juego de los jugadores
tras una conmoción. Asimismo, recomien-
dan sanciones (tarjeta roja y suspensión de
varios partidos) para todos aquellos juga-
dores que provocan un trauma evitable en
la cabeza de otro futbolista.
P 16
Durante la Copa Mundial de la FIFA 2014,
la segunda parte del cuerpo más lastimada
fue la cabeza, la cara y cuello, representan-
do el 18% de los traumas totales, después
del 25% sufridos por el muslo.
Muchos de estos traumas pueden evitarse,
particularmente los generados por el codo
u otras partes del cuerpo contra la cabeza
de un oponente. Incluso el contacto cabe-
za-cabeza puede evitarse cuando un juga-
dor es consciente de que no alcanzará la
pelota con su cabeza antes que el otro juga-
dor. Lo importante es minimizar el número
de golpes en cada uno de los jugadores.
CABECEAR CON BUENA TÉCNICA
Si bien es imposible eliminar todas las con-
mociones cerebrales en el deporte, ciertas
estrategias de prevención pueden reducir
el número y su gravedad en muchos depor-
tes. Por ejemplo, el uso de casco en disci-
plinas como el esquí, snowboard, deportes
de motor, ciclismo… o el protector bucal en
hockey, rugby o especialidades de saltos.
En lo referente al fútbol, el hecho de poseer
una técnica correcta del cabezazo –esta-
bilización de la musculatura del cuello, así
como la del torso para reducir las fuerzas
de rotación– protege a los jugadores de po-
sibles efectos nocivos.
Se ha constatado que jugadores con cuellos
débiles no toleran tan bien los impactos como
los poseedores de una musculatura fuerte,
lo que debe tenerse en cuenta en las mujeres
futbolistas y en los jugadores más jóvenes,
que pueden estar sujetos a un mayor riesgo
si su técnica aún no está completamente de-
sarrollada. Conviene, por lo tanto, fortalecer
la musculatura del cuello y perfeccionar la
técnica del golpeo de cabeza.
CLUBPERARNAU
ENTREVISTA AL DR. XAVIER VALLE
“En fútbol,
el único riesgo está en relación
con los traumatismos directos o
indirectos de elevada energía
que causan la conmoción”
Para profundizar en todo lo expuesto has-
ta el momento, entrevistamos al doctor Xa-
vier Valle, quien ha sido presidente de “The
European College of Sports and Exercise
Physicians” (ECOSEP, 2015-17) y miembro
de su comité científico, así como miembro
de FEMEDE (Federación Española de Medi-
cina del Deporte), de los Servicios Médicos
del FC Barcelona desde 2004 y profesor de
la Escuela de Medicina de la Educación Fí-
sica y el Deporte (UB).
Pregunta.- ¿El fútbol puede conside-
rarse un deporte de riesgo para la sa-
lud cerebral? ¿Es tan peligroso como el
boxeo o el fútbol americano?
Respuesta.- Como cualquier deporte don-
de exista el contacto, puede producirse una
conmoción cerebral, y en el fútbol ocurre.
P 17
El fútbol implica un riesgo para la salud ce-
rebral, pero a fecha de hoy, con los conoci-
mientos que tenemos, la prevalencia de la
lesión y de su repetitividad se halla muy le-
jos de la observada en otros deportes como
el boxeo o el fútbol americano.
P.- ¿El mayor riesgo de conmociones en el
fútbol es a causa de los golpes entre juga-
dores (cabeza con cabeza, codazos, golpes
en la cara…) o por el heading o los cabeza-
zos dados deliberadamente al balón?
R.- El único riesgo está en relación con los
traumatismos directos o indirectos de ele-
vada energía que causan la conmoción (ca-
beza/cabeza, o codo/cabeza). La conmoción
es una alteración temporal de la función ce-
rebral por un golpe, y eso no ocurre en los
golpeos con la cabeza al balón. Es posible
que pueda existir una lesión crónica en al-
gunos sujetos determinados y eso es lo que
últimamente se está estudiando: el efecto
de los traumatismos que no causan con-
moción (como el golpeo con la cabeza) en el
cerebro. Pero no hay datos concluyentes al
respecto en el fútbol.
“No hay una relación clara
entre la función cognitiva, la
salud psicológica y el remate
de cabeza, ni en profesionales
ni en jugadores amateurs”
P.- ¿Existe una asociación evidenciada
entre los golpes al balón con la cabeza y
anomalías en la estructura o funciona-
miento cerebral?
R.- En una reciente revisión de 2017 sobre el
tema publicada en el BJSM se concluye que
no hay una relación clara entre la función
CLUBPERARNAU
cognitiva (del cerebro), la salud psicológica
y el remate de cabeza, ni en profesionales ni
en jugadores amateurs. Algunas pruebas de
imagen han encontrado cambios en los ce-
rebros de futbolistas respecto de deportistas
de la misma edad de disciplinas sin contacto,
pero sin alteraciones de la función.
P.- ¿Los cabezazos repetitivos y su
efecto acumulativo pueden causar de-
terioros cognitivos, daños cerebrales y
enfermedades mentales a largo plazo
(ETC, Alzheimer, Parkinson, demen-
cia…) como se está evidenciando en el
boxeo y fútbol americano? ¿Pueden
detectarse a tiempo?
R.- A diferencia de como ocurre en otros
deportes más agresivos donde sí se evi-
dencia la alteración funcional y una cierta
relación con enfermedades degenerativas
en la senescencias, sobre todo cuando más
intensa y más larga ha sido la carrera del
deportista, en el fútbol, por los estudios
realizados hasta la fecha, no hay datos que
indiquen algo similar.
P.- ¿Tienen mayor riesgo los jugadores
profesionales con largas trayectorias que
los amateurs? ¿O los amateurs, al tener
peor técnica, son más vulnerables?
P 18
R.- El riesgo para el cerebro va en relación
con los años que está sufriendo el trau-
matismo. Una conmoción única puede ser
fatal, sobre todo si no se trata y no se vi-
gila; sin embargo, lo que parece evidente
es que a mayor número de episodios a lo
largo de la vida de una persona, mayor es
el riesgo de desarrollar patologías en re-
lación con la conmoción. Por eso vemos
que los jugadores de fútbol americano
que dejan el deporte a nivel de instituto
o universidad, antes de llegar a ser pro-
fesionales, presentan menores lesiones
que los profesionales que reciben impac-
tos durante más años, no por el hecho de
ser profesionales, sino por los años de
acumulación de traumatismos.
P.- ¿Las mujeres son más vulnerables a
sufrir conmociones y daños cerebrales
que los hombres?
R.- Sí, las mujeres tienen una prevalencia
superior de conmociones cerebrales en
fútbol que los varones, por diversos moti-
vos relacionados con la técnica al cabecear,
que facilita el choque con la compañera, y
porque en general el trabajo de la muscu-
latura del cuello y de la parte superior de la
espalda está menos acondicionada que en
los varones.
CLUBPERARNAU P 19

P.- ¿Y los niños y niñas? ¿Sería con- sin el tono y la técnica adecuada, sin pensar
veniente establecer un límite de edad hacia donde se dirigirá el balón. En seguida
para empezar a golpear el balón con la pensaríamos que se lesionará el tobillo, ¿a
cabeza? ¿Balones más pequeños? que sí?
R.- Los balones de los niños son de menor
peso para protegerles, el tamaño y peso del
balón progresa con el crecimiento de los ju-
gadores. En mi opinión, prohibir el golpeo
de cabeza a edades tempranas implica una
adaptación más brusca al golpeo y obliga a
una curva de aprendizaje en menor perio-
do de tiempo. Sin datos que indiquen lesión
en el cerebro de los niños, no le veo el mo-
tivo. Está claro, por otra parte, que se debe
aprender como en todas las habilidades de-
portivas a realizar la técnica correctamente
y a trabajar la musculatura apropiada acor-
de con la edad del sujeto.
P.- Tengo una hija que juega al fútbol
y siempre que da un cabezazo me
La hija de la autora, Marta Perarnau, cabeceando un balón
preocupa. ¿Debo hacerlo? (Foto: Lalu Albarrán /LFP).

R.- En mi opinión como médico no debe pre-
ocuparle el “cabezazo”. Insisto: no hay da-
tos a fecha de hoy para ello. Lo que sí debe
ocuparle es que lo haga bien, con la técnica
y las capacidades físicas (fuerza de cuello,
tronco, core) correctamente entrenadas. Si
no sabe, que no lo haga y que aprenda. En
ocasiones, cabecear es un problema técni-
co. A nadie se le ocurriría chutar con el pie
P.- A pesar de que faltan estudios y que
muchos de los realizados no encontra-
ron evidencia de deterioro de la fun-
ción cerebral en los futbolistas, ¿usted
sería partidario de aumentar las medi-
das preventivas en el juego, como dice
el consenso de Berlín?
R.- Yo estoy de acuerdo con crear reglas
que incrementen la sanción al jugador que
CLUBPERARNAU
golpea con un brazo/codo la cabeza de otro
o ser más estricto en su aplicación. Esas
conmociones sí que me preocupan y me
gustaría verlas con la menor frecuencia
posible. Desde que se puso en práctica la
sanción con tarjeta amarilla han disminui-
do las lesiones de cara, cabeza y cuello, y…
las conmociones.
“A fecha de hoy nadie tiene la
percepción de que tengamos
un problema con los futbolistas
similar al de otros deportes”
P.- ¿Habrá que esperar a disponer de
más estudios post-mortem para cono-
cer realmente el alcance de los daños
que pueda producir el heading o bas-
tarán las investigaciones mediante
marcadores bioquímicos y técnicas de
neuroimagen?
R.- Como médicos, lo que más nos importa
es la clínica, los signos y síntomas de nues-
tros pacientes, y a fecha de hoy nadie tiene
la percepción de que tengamos un problema
con los futbolistas similar al de otros depor-
tes. Algunas pruebas de imagen de nueva
aparición que tenemos a nuestro alcance
hemos de aprender a interpretarlas y sacar
el máximo provecho de ellas, sin asustar a
nuestros pacientes. No hay que olvidar que
las imágenes no implican más que lo que
son, no es funcionamiento neurocognitivo.
Lo importante son los signos y los síntomas
y eso lo ofrece la vida y la experiencia.
P.- En los pasados Juegos Olímpicos
de Río se abolió el uso del casco en el
boxeo masculino, que era obligatorio
desde Los Ángeles 84 tras la muerte
de un boxeador en un brutal combate.
P 20
Sin embargo, se mantiene en el boxeo
femenino. He leído que la decisión se
tomó al comprobar que había más inte-
rrupciones por golpes en la cabeza en
los combates en los que se usaba cas-
co que en los sin casco. ¿Qué opina al
respecto? ¿Y por qué en las mujeres se
mantiene?
R.- No soy un experto en boxeo, pero como
he dicho antes, cualquier regla en cualquier
deporte que proteja la salud del deportista
tiene mi aprobación. Los cascos en boxeo
y en rugby evitan que haya laceraciones y
abrasiones de la piel, además de la supues-
ta limitación de la potencia del golpe que se
recibe. En rugby está demostrado que no
tienen ninguna repercusión positiva sobre
la conmoción. Todo lo contrario, en ciertos
jugadores puede darles sensación de segu-
ridad llevándoles a impactar de forma más
agresiva o a no protegerse de forma co-
rrecta frente al impacto. Por eso en rugby
su uso no es para evitar la conmoción, sino
precisamente las lesiones superficiales.
“Ante la sospecha de
conmoción hay que retirar al
jugador de la competición y ser
evaluado por un experto”
P.- ¿Qué es una conmoción cerebral y
cómo se identifica?
R.- La última convención internacional
realizada en Berlín, donde se juntaron ex-
pertos de todo el mundo para avanzar en
el conocimiento de la conmoción cerebral,
definió una conmoción cerebral en relación
con el deporte como “una lesión cerebral
traumática inducida por fuerzas biome-
cánicas ya sean directa (golpe) como indi-
CLUBPERARNAU
rectas (movimiento brusco de la cabeza/
cuello) que causa un deterioro rápido de las
funciones neurológicas y que se resuelve
espontáneamente; aunque a veces la clínica
puede persistir durante minutos/horas”. La
clínica refleja una alteración en la función
de las neuronas más que una alteración de
la estructura de las mismas (las pruebas
de imagen RMN/TAC son normales), pero
pueden causar cambios patológicos con el
tiempo. Las conmociones no siempre cau-
san pérdida de conocimiento.
Mario Götze, atendido durante un partido en el Mundial 2014.
P.- ¿Cómo hay que actuar ante la sos-
pecha de que un jugador/a sufre una
conmoción?
R.- Retirarlo de la competición. No puede
seguir jugando y debe ser evaluado por un
experto en conmoción cerebral siguien-
do el protocolo marcado en el consenso de
Berlín con el SCAT5 o el HEAD (herramien-
ta que sirve para valorar y monitorizar la
evolución de la conmoción en el deportis-
ta). También existe un modelo de Retorno
Gradual al Deporte que se resume en que el
deportista no puede volver a jugar mientras
persiste algún síntoma de los relacionados
con la conmoción, puesto que eso refleja
que el cerebro no está recuperado de la le-
sión, que sigue desprotegido y puede sufrir
una nueva conmoción con un traumatismo
de menor energía con consecuencias más
P 21
graves para la salud e incluso la vida del de-
portista.
P.- Por las posibles consecuencias de
salud cerebral que pueda ocasionar a
largo plazo, ¿el fútbol puede represen-
tar un problema de salud pública, como
algunos sugieren?
R.- En relación a las conmociones, hoy en
día parece que todo lo contrario: no lo es.
Loles Vives
-Bióloga.
@iLoles
DOCUMENTACIÓN
• Shearer, el cabezazo más peligroso para el
fútbol: http://www.elmundo.es/deportes/fut-
bol/2017/11/13/5a08b12246163f27028b4619.
html
• Consensus statement on concussion in sport—
the 5th international conference on concussion
in sport held in Berlin, October 2016: http://
bjsm.bmj.com/content/51/11/838
• A systematic review of potential long-term
effects of sport-related concussion: http://
bjsm.bmj.com/content/early/2017/04/28/bjs-
ports-2017-097791
• Approach to investigation and treatment of
persistent symptoms following sport-related
concussion: a systematic review: http://bjsm.
bmj.com/content/early/2017/05/08/bjs-
ports-2016-097470
• Effects of Soccer Heading on Brain Structure
and Function: https://www.frontiersin.org/ar-
ticles/10.3389/fneur.2016.00038/full
• May Heading in Soccer Result in Traumatic
Brain Injury? A Review of Literature: https://
www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/29284906
• Mixed pathologies including chronic traumatic
encephalopathy account for dementia in retired
association football (soccer) players: https://
www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/28205009
• Soccer (Football Association) and chronic
traumatic encephalopathy. A short review
and recommendation. By Ricardo Nitrini: ht-
tps://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/
PMC5674664/
CLUBPERARNAU
GRANDES MAESTROSP 22

LAUREANO RUIZ
EL ABUELO
DEL BARÇA
Martí Perarnau
CLUBPERARNAU P 23

D urante una conversación con un

exfutbolista canario, Rinus Michels
confesó: “Yo aprendí mucho de Lau-
reano. Quizás lo que más aprendí de él fue
cómo diseñaba el fuera de juego”.
“Yo aprendí mucho de Laureano.
Quizás lo que más aprendí de él
fue cómo diseñaba el fuera de
¡El fuera de juego, nada menos que la clave juego. Laureano es un sabio, un
de bóveda del Fútbol Total holandés! genio” (Rinus Michels)
Ocurrió en 1997 y el exfutbolista canario era
Manuel Rodríguez “Tonono”, quien desde Que el considerado “padre” del Totaalvoet-
2005 ocupa la dirección de captación y for- bal holandés [ver The Tactical Room de ene-
mación de la UD Las Palmas. El propio To- ro, nº 38], una de cuyas señas de identidad
nono nos relata aquella deslumbrante char- era la ejecución precisa del fuera de juego,
la con Michels: “Fue en Bruselas, en una se refiera al entrenador cántabro como ins-
reunión del departamento de formación de pirador esencial de esta acción concreta
la UEFA [Youth Coach Course]. Rinus Mi- permite resumir la trayectoria de Laureano
chels estaba en dicho departamento de for- Ruiz: ha sido un gran maestro.
mación que dirigía Andy Roxburgh y que
entre otros técnicos contaba con Gérard
Houiller, por entonces director técnico de la
federación francesa. Estábamos un grupito
con Michels en una pequeña tertulia des-
pués de las pertinentes charlas programa-
das y salió el tema de la metodología en las
diferentes etapas de formación. Entonces,
yo saqué a relucir algunas frases de Lau-
reano Ruiz y Rinus Michels fue rotundo:
‘Este señor es un sabio, un genio’”.
Hablamos de un Michels que un año más tar-
de (en 1988) llevó a Holanda a ganar la Euro- Rinus Michels y Tonono posan para la cámara en Bruselas, durante el curso de
la UEFA mencionado en este reportaje.
copa de naciones. Tonono no se detiene ahí,
sino que explica cómo Michels continuó ha- De hecho, aún hoy a Laureano le apodan “El
blando de Laureano: “Michels nos dijo: ‘De él Maestro” y no es en vano... Por sus manos
aprendí mucho en mi etapa en el Barça. Lau- han pasado alrededor de 25.000 jugadores,
reano era coordinador del fútbol base y en- a los que ha formado futbolísticamente de
trenaba al equipo juvenil. De vez en cuando, manera integral, rompiendo tabúes y tópi-
mi primer equipo del Barça y los juveniles de cos. Laureano siempre fue por delante de
Laureano jugábamos partidos de entrena- los tiempos y de los convencionalismos.
miento entre semana y yo veía cómo hacían Autodidacta, a los 16 años dirigió a su pri-
ellos el fuera de juego y observé detalles que mer equipo, el juvenil del Racing de San-
más tarde apliqué en mis equipos. Realmente, tander, donde también jugaba: la ausencia
Laureano era un verdadero maestro’”. de recursos motivó que la directiva le nom-
CLUBPERARNAU P 24

brara jugador-entrenador. Con 19 años se
asombró viendo jugar al Honved de Buda-
pest en Bilbao, ante el Athletic, en Copa de
Europa. Por aquellas fechas, la revolución
contra el gobierno comunista húngaro ya
había sido sangrientamente aplastada y el
Honved afrontaba largos meses de exilio,
rupturas, giras y sanciones. Si bien emo-
cionalmente el equipo se había quebrado,
aún conservaba el brillo de la gran Hungría
que había aplastado a Inglaterra tres años
antes en Wembley. En San Mamés, el pi-
vote Bozsik, los interiores Kocsis y Puskás
y el extremo Czibor –las cuatro flamantes
estrellas– todavía componían un gran fút-
bol, aunque mentalmente sus cabezas estu-
vieran en Budapest o haciendo planes para
exilarse. En cualquier caso, Laureano Ruiz
estaba en las gradas, absorbiendo detalles
de aquellos magos.
cierto en los adversarios (…) que se sumían
en un estado de gran indecisión. El central
no sabía si seguir al delantero centro que
se retrasaba o permanecer atrás marcan-
do a los dos interiores. Los laterales no se
decidían a seguir a los extremos, tan retra-
sados, pero tampoco se venían atrás para
arroparse con sus compañeros (…) Esta
desorganización hacía que muchos equipos
encajasen rápidamente dos o tres goles, sin
tiempo para tomar medidas. Cuando al fin
se percataban del planteamiento, la moral
y el juego de los húngaros era tan elevado
que la goleada llegaba indefectiblemente”.

San Mamés. Athletic-Honved, Copa de Europa, 22 de noviembre de 1956. Victo-

ria bilbaína por 3-2. Laureano Ruiz estaba en la grada.

Hungría, explica el propio Laureano, “colo-

caba su ataque de forma diametralmente
opuesta a la clásica, con los interiores Koc-
sis y Puskás totalmente en punta (…) los ex-
tremos arrancando desde atrás y abiertos y
dos hombres en el medio campo (el delante-
ro centro teórico Hidegkuti y Bozsik), for-
mando un 4-2-4 que sembraba el descon- Un joven Férenc Puskás, con el chándal del Honved.
CLUBPERARNAU P 25

“Algunos de esos técnicos les gritaban:

‘¡Hay que jugar bien!’. Pero no les explica-
“Yo puse al 9 de delantero
ban cómo se juega bien”.
retrasado y en cuanto se perdía
un partido me criticaban. Lo
hice copiando de la selección
húngara” (Laureano Ruiz)

El fútbol húngaro fue la inspiración de Lau-

reano, que a partir de esta vivencia desarro-
lló su propio método de entrenamiento y su
modelo de juego: “El 4 y el 6 son los medios,
el 8 y el 10 los interiores. Yo puse al 9 de Laureano Ruiz, con los juveniles de la UD Las Palmas, durante una clase ma-
delantero retrasado y en cuanto se perdía gistral en 2014 (Foto: Mario García).

un partido me criticaban. Lo hice copiando

de la selección húngara de Kocsis y Puskás, UNA HUELLA PROFUNDA EN
que eran 8 y 10, y de Hidegkuti que era el
9 retrasado” [Hidegkuti jugaba en el MTK, EL BARÇA
por lo que no disputó aquel partido de Copa Laureano desarrolló un método para en-
de Europa contra el Athletic, pero Laureano señar a jugar bien y para preparar la de-
Ruiz le conocía bien de sus actuaciones con fensa y el ataque [ver su libro “Fútbol
la selección húngara]. profesional y mi modelo de juego”] y fue
aplicándolo por allí donde pasó, pero su
En 1957 implantó el rondo en el Racing de
gran huella quedó indeleble en el FC Bar-
Santander: “El motivo fue enseñar a des-
celona, adonde llegó poco más tarde que
marcarse a mis jugadores”. El marcaje y el
Rinus Michels, en 1972, para ocuparse de
desmarcaje han sido dos obsesiones para
un fútbol base que andaba en declive. Lo
el técnico cántabro, que siempre ha con-
primero que hizo fue arrancar un cartel
siderado que el juego puede prepararse y
colocado en los despachos de la secre-
entrenarse en su integridad. Laureano ha
taría técnica. El propio Laureano quiso
sido muy crítico con aquellos entrenado-
explicarme la filosofía que había detrás
res que proclaman que la defensa puede
de aquel cartel: “Jugadores altos y fuer-
prepararse y, sin embargo, el ataque debe
tes. Había un técnico del club que en su
ser libre: “Me parece un gravísimo error:
despacho tenía colgado un cartel que de-
se puede preparar la defensa y se puede
cía textualmente: ‘Si vienes a ofrecerme
preparar el ataque. Orden e inspiración en
un juvenil que mida menos de 1,80 date
defensa y orden e inspiración en ataque”.
la vuelta’. Esto es lo que había. Yo fiché
Claro que para él “muchísimos entrenado-
jugadores pequeños y altos, pero madre
res no conocen la organización del juego.
mía la que se montó. Incluso cuando ya
La causa de esta ignorancia se debe a que
seguían mi método, decían que me equi-
fueron futbolistas y ninguno de sus técni-
vocaba rotundamente”.
cos tenía un sistema de juego”. Dice más:
CLUBPERARNAU P 26

testarudez, en ocasiones hasta niveles épi-

Los primeros éxitos de Laureano Ruiz en el Barcelona juvenil, reflejados en la
prensa de la época.
cos, para romper las estructuras organiza-
tivas del club, profundamente anquilosadas
y contrarias a la evolución que proponía el
técnico santanderino. De hecho, la plasma-
ción real de sus ideas no alcanzó la pleni-
tud mientras él estuvo en el Barça sino que
lo hicieron cuando llegó Johan Cruyff mu-
chos años más tarde, vio el trabajo de base
promovido por Laureano y lo consideró im-
prescindible. Entonces sí, con el aval de Cru-
yff las ideas de Laureano fueron abrazadas
sin remilgos: “Conmigo se implanta el 3-4-
3 en todos los equipos del Barça. Después,
cuando me marcho, desaparece. Y cuando
llega Cruyff volvió a implantarlo”.

“Conmigo se implanta el 3-4-3

en todos los equipos del Barça.
Después, cuando me marcho,
desaparece. Y cuando llega Cruyff
volvió a implantarlo”
(Laureano Ruiz)
Laureano Ruiz, dirigiendo un entrenamiento del primer equipo del Barça, con
Laureano revolucionó el fútbol formativo Cruyff y Torres en primer término (Foto: Rafa Seguí).

del Barça. No solo conquistó títulos de for-
ma constante con los equipos juveniles, sino
que implantó conceptos generales para to-
dos los conjuntos, impuso el rondo, el “toco
y me voy”, las dobladas y pasillos, el juego
con extremos, la apuesta por la excelencia
técnica –lo que a su vez conducía a poten-
ciar jugadores de calidad aunque no fue-
sen altos ni fuertes– y un modelo de juego
con fuerte reminiscencia húngara, lo que
en algunos ámbitos del club fue bien valo-
rado gracias al buen recuerdo que habían
dejado Kocsis y Czibor en su paso por el
Barça. Pero en su conjunto, Laureano tuvo
que emplear grandes dosis de persuasión y
Laureano recuerda especialmente lo que le
ocurrió seis años después de haberse mar-
chado del Barcelona: “Yo entrenaba en 1984
a los Escolapis de Sarrià y vinieron los in-
fantiles del Barça a jugar contra nosotros.
Lógicamente, nos ganaron. Y al terminar,
durante la merienda, le dije al entrenador
de ellos, que era Roca, un antiguo colabora-
dor mío: ‘¡Caramba, Roca, qué bien los has
preparado! Nos habéis metido dos goles con
esas jugadas de córner que os enseñé’. Y
Roca me contesta: ‘No, no, estos chicos han
empezado a entrenar hace cuatro días y no
hemos preparado nada’. Yo no le creí, así
que pregunté quiénes habían sido los de las
CLUBPERARNAU
jugadas ensayadas y dos niños levantaron
la mano. ‘¿De quién habéis aprendido estas
jugadas?’, les pregunto. Y responden: ‘Las
hemos visto hacer a los mayores y nosotros
mismos hemos decidido copiarlas’. ¿Sabes
cómo se llamaba uno de aquellos chicos?
Pep Guardiola”.
LA TÁCTICA DEL FUERA
DE JUEGO
Entre las muchas ideas que componían su
modelo de juego se hallaba el célebre “fuera
de juego”. El propio Laureano explica cuál
fue el origen de dicha propuesta: “En 1969,
siendo entrenador de la Gimnástica de To-
rrelavega, conocía que los equipos vascos
practicaban el típico fútbol inglés: pases
largos a los extremos, centros de estos al
área, remates de cabeza… y si se despeja-
ba el balón, con gran codicia se hacían con
él otra vez, llevándolo nuevamente al área
y con peligro de gol. Buscando solucionar
el problema decidí, cuando estábamos en el
área o sus cercanías y despejábamos el ba-
lón, que todos los defensas corrieran hacia
el medio campo para alejar a los atacantes…
El libro “Táctica y
estrategia del fútbol”
de Osvaldo Zubeldía y
Argentino Geronazzo.
P 27
o dejarles en “fuera de juego”. Este movi-
miento colectivo tuvo mucho éxito ya que
los delanteros incurrían en claros “offsi-
des”, quedando asombrados y avergonza-
dos. Pero, en ocasiones los árbitros no lo
sancionaban –también desconcertados–, y
encajábamos goles ilegales, pero válidos”.
La solución a este problema la encontró en
un libro: “Terminada la temporada leí un
libro del argentino Zubeldía –un gran en-
trenador–, en el que reflejaba sus ideas so-
bre el fútbol y su sistema de juego. Cuando
habló de la estrategia se refirió a esta juga-
da: ‘El rival va a lanzar un castigo sobre tu
área. Dejas atrás el meta y los cuatro defen-
sas –los medios estarán más adelantados–
y cuando el contrario corra para golpear el
balón, los defensas buscando el offside es-
printarán hacia el medio campo, mientras
el meta sale en busca del balón, por lo que
pueda ocurrir’. Al leer lo anterior vi claro lo
que debía hacer en “salida”: a la vez que los
jugadores de campo corrían hacia el balón
para “presionar” al rival que lo tuviera e in-
tentar quitárselo, lo que suponía un abier-
to contraataque, el guardameta les acom-
pañaba “llenando” el campo y basculando
como si se tratara de un “escoba”. Todos
los pases que rebasaban a sus compañe-
ros eran interceptados por él, con los pies,
manos e incluso en estirada –la utilización
de las manos o el agarrón, entonces no su-
ponía amonestación, ni menos expulsión–.
He sido, por tanto, el primer entrenador en
sacar al meta fuera del área. Fue en 1970…”.
Así se fraguó la táctica del fuera de juego que
la Naranja Mecánica holandesa, dirigida por
Rinus Michels, dejó como sello de identidad
en el Mundial de 1974. Fue una idea que Lau-
reano Ruiz puso en práctica en Torrelavega
y que pulió gracias a la lectura del célebre
CLUBPERARNAU P 28

“Táctica y estrategia del fútbol” de Osvaldo fuera de juego de manera sistemática. El

Zubeldía, el cerebro del gran Estudiantes de defensa Luis Cardoso explicó de dónde lo
La Plata. Años más tarde, ya como entrena- había aprendido Osvaldo Zubeldía: “Con
dor del filial barcelonista, el Barcelona At- Osvaldo, compañeros en Boca, nunca ol-
létic, Laureano Ruiz utilizó dicha táctica y vidamos el papelón que pasaron nuestros
Rinus Michels –entrenador del primer equi- delanteros en 1957 cuando vino a un amis-
po– se hizo asesorar por él hasta el punto toso un equipo sueco, el Norrköping, cuyos
que a continuación el entrenador neerlandés defensores tiraban el offside cada vez que
aplicó dichos conocimientos a la selección un mediocampista nuestro metía un pase
que entusiasmó al mundo en 1974. en profundidad. (Luego) Zubeldía empezó
a practicarlo en Atlanta en 1962 mientras
ambos hacíamos el curso de técnicos; fui-
mos pioneros en la Asociación (de Fútbol
Argentino), en tanto daba risa cómo caían
los rivales en la acción del offside provoca-
do”. Por su parte, Zubeldía llegó a explicar:
“Creo en la táctica del offside porque aplas-
ta moralmente al adversario; el delantero
que cae cinco veces en fuera de juego acaba
teniendo miedo de ir al área”.
Osvaldo Zubeldía, junto a su plantilla en Estudiantes En este punto se hace imprescindible saber
(en primer plano, Carlos Bilardo).
que el IFK Norrköping encabezó el fútbol
Para mayor profundidad histórica, seña- sueco durante la década dorada que trans-
lemos sin embargo que tampoco Zubeldía currió entre 1948 (oro olímpico en Londres)
fue el primero en emplear la táctica del y 1958 (selección subcampeona mundial)

Foto del Norrköping campeón de Suecia en 1946. En la fila trasera, a la izquierda, con gabardina, Lajos Czeizler.
El gran goleador Gunnar Nordahl es el cuarto jugador por la izquierda.
CLUBPERARNAU
y que los entrenadores que impusieron su
sello en el Norrköping fueron un húngaro y
un austriaco con raíces comunes.
El húngaro Lajos Czeizler había jugado en
el MTK de Budapest a las órdenes de Jimmy
Hogan –si bien era un guardameta de poco
nivel– y entre los años 1942 y 1948 entrenó
al Norrköping con gran éxito: cinco ligas y
dos copas suecas, amén de ser el hombre que
descubrió y dirigió a dos “gigantes” del fút-
bol como Gunnar Nordahl y Nils Liedholm.
El austriaco Karl Adamek también se había
formado cerca de Jimmy Hogan: fue en 1932
en el Austria de Viena, un equipo de ensueño
en el que militaba nada menos que el mágico
Matthias Sindelar y en el que Adamek ocupó
la posición de defensa. Bien, pues Adamek
fue el entrenador que insufló la táctica del
fuera de juego al Norrköping entre los años
1952 y 1957, en los que conquistó tres títulos
de liga.
Los orígenes del “fuera de juego”
con el que Holanda sacudió al
mundo del fútbol en 1974 no solo
entroncan con Laureano Ruiz
y Osvaldo Zubeldía, sino que
se remontan al espíritu austro-
húngaro del Norrköping sueco
Así pues, los orígenes del “fuera de juego”
con el que Krol, Haan, Rijsbergen, Suurbier,
Jansen, Neeskens y compañía sacudieron al
mundo del fútbol en 1974 no solo entroncan
con Laureano Ruiz y Osvaldo Zubeldía, sino
que se remontan al espíritu austro-húngaro
del Norrköping sueco y, cómo no, al maes-
tro entre maestros: Jimmy Hogan, auténti-
co “big bang” del fútbol mundial.
P 29
La selección neerlandesa, poniendo en práctica el fuera de juego ante Argen-
tina, en el Mundial 1974.
EL MAESTRO ICONOCLASTA
Volvamos a Laureano Ruiz.
Cierto día me habló de tres aspectos que a
su entender son malinterpretados o bien se
ejecutan de forma defectuosa: “Primero, no
se puede entrenar igual a niños de 10 años
que a chicos de 18. Segundo, está bien en-
señar conceptos, pero hace falta entrenar
jugadas. No solo los conceptos, sino las ju-
gadas. No hay que esperar a que la jugada
aparezca por magia; yo creo que las jugadas
de ataque deben ensayarse y ejecutarlas. Y
tercero, el juego aéreo, entendiendo por tal
el juego de cabeza, las voleas, las chilenas,
etc., son un déficit del fútbol mundial en ge-
neral porque apenas se entrenan”.
Digamos que Laureano es bastante icono-
clasta. Frente a criterios establecidos, él
siempre se ha desmarcado: “En el fútbol
actual, realizar una falta táctica en el cen-
tro del campo es un error. Lo que hay que
hacer es intentar robar el balón a base de
presionar, no hacer faltas”. O, por ejemplo:
“Es falso que a partir de los veinte años
no se pueda mejorar en el fútbol. Si tienes
una buena técnica, a esa edad existe un
gran margen de mejora táctica y de com-
prensión del juego. Éric Abidal es un gran
ejemplo de ello”.
CLUBPERARNAU P 30

camos esta sección hace dos meses. Pero

su influencia habrá sido determinante y no
solo para los 25.000 jugadores a los que
enseñó, sino por el poso innovador de las
medidas que adoptó, destacando entre ellas
el rondo o la propia creación de los juegos
de posición; la difusión casi misionera del
credo húngaro, auténtica biblia del fút-
bol moderno; o la siembra decisiva de sus
ideas disruptivas en el FC Barcelona, lo que
permite catalogarle sin la menor discusión
como el “abuelo del Barça”, entendiendo
que el papel de padre en dicho árbol genea-
Laureano Ruiz, en el banquillo del Camp Nou. lógico le corresponde a Johan Cruyff y el de
Laureano no ha aceptado “verdades in- hijo predilecto a Pep Guardiola.
tocables” como la de que el sistema debe Por todo ello, Laureano Ruiz ocupa proba-
adaptarse siempre a las características de blemente el puesto de maestro en mayús-
los jugadores: “Los grandes entrenadores – culas del fútbol español.
dice– han “marcado” a sus equipos, hacién-
doles jugar de una forma muy determinada.
Martí Perarnau.
Y si cambiaban de club, su “sello” personal –
@martiperarnau
sus ideas, estilo y características– aparecía
nuevamente”. O su refutación del axioma
de que hay que jugar siempre a un toque: “A
veces sí, pero otras muchas veces es mejor
jugar a dos toques que a uno. Y otras veces
hay que controlar, conducir y regatear. Es
decir, realizar la jugada más conveniente”.
En la historia del fútbol mundial, Laureano
Ruiz no aparecerá entre los grandes nom-
bres ni los triunfos brillantes, como tampo-
co lo hará Jany van der Veen, al que dedi-

REFERENCIAS
• Fútbol profesional y mi modelo de juego. Laureano Ruiz (MC Sports, 2010)
• Senda de campeones. Martí Perarnau (Columna Edicions, 2011)
• Laureano Ruiz y el FC Barcelona, una época de fútbol-fútbol: https://www.martiperarnau.com/laureano-
ruiz-y-el-f-c-barcelona-una-epoca-de-futbol-futbol/
• Luis Cardoso y el fuera de juego del Norrköping: http://www.libreexpresion.net/60989-2/
 Pablo Beltrán
entrevista a

PABLO
MACHÍN

"La idea es más

importante
que el sistema"

"Jugar bien es jugar a lo

que tú quieres: tu idea
de juego, tu propuesta"
CLUBPERARNAU P 32

E n el acogedor y coqueto PGA Re-

sort Golf de Girona, en una mañana
fría, muy fría, nos citamos con Pablo
Machín (Soria, 1975). El sol parece querer
asomarse tras una noche lluviosa de pleno
bloque que, en su conjunto, cuenta en sus
espaldas con más partidos en Segunda o
Segunda B que en Primera.

invierno. De algún modo, como cualquier

tarea que se inicia, pensamos que era la
ocasión de cerrar en cierto modo un círculo
que se abrió en el verano de 2016. En aque-
lla ocasión explicamos que la “moda” del
1-3-5-2 [ver The Tactical Room nº 24: Pa-
blo Machín y el 3-5-2] que muchos equipos
en la Eurocopa de Francia o en la Premier
League habían retomado también tenía un
técnico seguidor de la misma en España, Pablo Machín, con el autor de la entrevista, en el PGA Resort de Girona.

pues cree en su eficacia para plasmar su Pregunta.- Esta es su primera expe-

ideario futbolístico. Por dos veces consecu-
tivas, su Girona se había estrellado contra
el muro de los play off de ascenso a Primera
División, pero en verano de 2017 ya por fin
logró una plaza en la máxima categoría del
fútbol español, por vez primera en su histo-
ria. Ahora es momento de cerrar el círculo
alrededor de su 1-3-5-2.
Antes de iniciar la conversación, el técni-
co del Girona recibe una llamada telefó-
nica, mientras los jugadores van llegando
para desayunar juntos, como paso previo a
la penúltima sesión preparatoria de la se-
mana. Anthony Lozano, el único fichaje del
mercado invernal, se asoma para saludar
al entrenador soriano. Una vez concluida la
llamada, nos ponemos a conocer más en de-
talle cuál es el secreto que explica cómo un
club que flirteaba con descender a Segunda
B, sin una directiva al mando y con una or-
ganización interna caótica, consigue cuatro
años después (curiosamente, este mes de
marzo se cumple la efeméride de su llegada
al banquillo rojiblanco) que el primer equipo
se codee con los mejores clubes del mundo,
mostrando una enorme personalidad y un
riencia como técnico de Primera Divi-
sión, ¿hay muchas diferencias con la
Segunda?
Respuesta.- Bueno, realmente mi prime-
ra experiencia como primer entrenador sí,
pero también estuve en un banquillo de la
máxima categoría cuando, en mi segundo
año como ayudante en el Numancia, estu-
vimos en Primera División. Logramos el
ascenso en la temporada 2007-2008 y tra-
bajé como segundo de Sergio Kresic en la
2008-2009. Es cierto que no es lo mismo;
hay muchísimas diferencias, pero sí que
esa experiencia me ha servido mucho para
estar en cualquier categoría como primer
entrenador y, como ocurre ahora, para co-
nocer en profundidad cómo y qué es ser el
técnico de un banquillo de Primera.
P.- Su currículum vitae futbolístico se
remite a dos clubes, el CD Numancia
y el Girona FC. ¿Con quién compartió
trabajo en su etapa en Soria?
R.- He tenido la fortuna de estar a la sombra
de muy buenos entrenadores de los cuales
he podido aprender muchas cosas. También
CLUBPERARNAU
he tenido mi época en la que me correspon-
dió llevar las categorías inferiores del club, el
filial. Se puede decir que fue un poco donde,
de manera autodidacta, aprendí a volar solo, a
tener mis experiencias particulares, aunque
sí es cierto que más tarde esas experiencias
vividas, los sentimientos, las anécdotas y vi-
vencias como segundo entrenador, me han
ayudado mucho. Estuve inicialmente como
entrenador adjunto e incluso encargado de la
preparación de porteros con Enrique Martín
Monreal (hoy técnico del Albacete) y Andoni
Goicoetxea (ex jugador de Athletic de Bilbao
y Atlético de Madrid, así como ex entrenador
de varios conjuntos en la elite). Sin embargo,
mi primer año profesional fue con Gonzalo
Arconada (actual técnico del primer equipo
femenino de la Real Sociedad), que fue la cam-
paña en la que logramos el ascenso a Prime-
ra (2007-2008). Ese logro le llevó a aceptar
una oferta de la UD Almería en Primera. En
mi caso decidí continuar en Soria porque me
ofrecieron seguir, esta vez con Sergio Kre-
sic, en un año que, pese a una buena primera
vuelta, se complicó en la segunda. Le destitu-
yeron y junto con Pacheta, entonces director
deportivo del club, establecimos un tándem
hasta final de campaña. Sin embargo, a pesar
del cambio lamentablemente no logramos la
permanencia y el equipo descendió a Segun-
da. Finalmente, coincidí con Juan Carlos Un-
zué una campaña, antes de decidirme ya por
ser primer entrenador.
P.- En una entrevista publicada en El
País, en 2011, explicaba que Miguel Án-
gel Lotina fue la persona que le animó
a decidirse por encaminar su carrera
como técnico, una vez tuvo que retirar-
se con 22 años del fútbol en activo por
una grave lesión de rodilla. ¿Por qué se
decidió por esta opción?
P 33
Pablo Machín y Enrique Martín Monreal.
R.- Bien, realmente, por lo que dicen todos
los entrenadores con los que coincidí en mi
corta etapa de jugador y, posteriormente,
ya de ayudante en distintas facetas, siem-
pre me había mostrado como una persona
inquieta. Siempre ponía en cuestión mu-
chas cosas, siempre desde el punto de vista
de querer aprender. Me saqué la titulación
cuando Lotina era el entrenador del primer
equipo y yo tenía 18 años. Él era el “profesor”
y me abrió las miras a lo que era el fútbol
táctico y a comprender el por qué teníamos
que hacer determinadas cosas. Fue quien
me ayudó a ser mejor jugador a través de la
táctica, saber qué hacer en cada momento.
Es cierto que en aquella época el 80% de lo
que trabajamos era aspectos relacionados
con la táctica defensiva, pues en ese perio-
do la gran mayoría lo hacía así y, en cierta
medida, permitió abrir mi estimulación ha-
cia la táctica y querer ser entrenador.
A partir de ahí, de todos los entrenadores
que pasaron por Soria he aprendido cosas
y quizá quien me marcó en cuanto a la me-
todología de trabajo más “moderna” fue
Gonzalo Arconada, con el que coincidí en
dos etapas distintas, una de ellas la del ci-
CLUBPERARNAU
tado ascenso y luego mi última época como
segundo, antes de tomar las riendas como
primer entrenador en el CD Numancia, con
Juan Carlos Unzué, que me vino muy bien
pues venía de la escuela del FC Barcelona,
donde había colaborado en distintas facetas
con Frank Rijkaard y Pep Guardiola, lo que
me ayudó a que todo lo que anteriormente
habíamos trabajado, en cuanto a táctica en
la fase defensiva, me abriera las miras del
juego de posición y la táctica ofensiva.
“Lotina era el “profesor” y me
abrió las miras a lo que era el
fútbol táctico y a comprender
el por qué teníamos que
hacer determinadas cosas.
En aquella época, el 80% de lo
que trabajamos era aspectos
relacionados con la táctica
defensiva”
Juan Carlos Unzué, en su etapa como entrenador del Numancia, en la que Ma-
chín fue segundo entrenador.
P 34
P.- Usted llega a Girona en una situa-
ción muy delicada, con el equipo como
farolillo rojo de Segunda División. Una
de las primeras decisiones que toma es
utilizar como módulo de juego el 1-3-5-
2, poco habitual en España en los últi-
mos tiempos. ¿Por qué ese sistema y
qué aspectos del mismo facilitan o po-
tencian su idea de juego?
R.- Es un sistema que siempre me había
gustado y que había trabajado desde mis
inicios como jugador, precisamente, en el
Numancia con Lotina. Conozco la solidez
que ofrece en fase defensiva cuando en el
repliegue es un 1-5-3-2, pero poco a poco, a
la hora de aplicarlo en el Girona hemos ido
evolucionándolo. A mí me gusta el hecho
de que seamos más bien tres atrás que cin-
co; que los carrileros ocupen el campo rival
antes que el propio, pues más que carrile-
ros o defensas, son extremos. Por ejemplo,
cuando tú ves un partido y la disposición
del equipo es más un 1-3-5-2 o, actualmen-
te, un 1-3-6-1 o un 1-3-4-3, con dos de esos
tres de la zona de ataque que ocupan zonas
intermedias, a modo de enlace. Si ese dibu-
jo se ve plasmado en el campo es cuando
nosotros realmente dominamos y somos
un equipo que tenemos muchas opciones
de ganar. Creo que es un sistema muy ver-
sátil, que facilita la salida de balón porque,
una vez se puso “de moda” la salida lavol-
piana (de 3) que planteaba Guardiola en el
FC Barcelona o hicieron Rijkaard u otros
técnicos, lo único que nosotros matizamos
con nuestro módulo de juego es que el “ter-
cer hombre” en esa salida es un central y no
el mediocentro que retrasa su posición, con
características más defensivas.
De este modo, te permite tener un juego más
escalonado en el que el pase horizontal no se
CLUBPERARNAU
ve mucho por lo que evitas riesgos defensivos
y, al mismo tiempo, tienes la opción de jugar en
corto o de sorprender en largo porque tú eres
consciente que uno de tus jugadores siempre
va a estar en banda, con lo que el juego pue-
de ser muy variado. Es decir, puedes aprove-
char siempre toda la anchura del campo y eso
te facilita generar y tener espacios interiores
intermedios por los que puedes sorprender.
A partir de ahí, si juegas con dos delanteros
siempre tienes a la defensa rival preocupada
de esos dos y muchas veces cuatro rivales es-
tán vigilando a dos de nuestro equipo y como
tenemos a los dos jugadores específicos de
banda que tienen una función principal que
es, de una forma u otra, la de surtir balones a
esos dos delanteros, es por esta razón que es
muy importante que cómo mínimo esos dos
jugadores estén en el área, a lo que sumamos
la llegada a la zona de rechace de los centro-
campistas para ganar la segunda jugada y
evitar los contraataques.
“Me gusta que seamos más
bien tres atrás que cinco; que
los carrileros ocupen el campo
rival antes que el propio,
pues más que carrileros o
defensas, son extremos (…) La
disposición del equipo es más
un 1-3-5-2 o, actualmente, un
1-3-6-1 o un 1-3-4-3”
P.- Habla de evolución, siempre del sis-
tema o módulo de juego, pero la idea
siempre ha sido y es la misma. Porque
no es lo mismo lo primero que lo se-
gundo, aunque muchas veces se tiende
a pensar que sí lo es…
P 35
R.- Cierto. En mi opinión, se le da mucha im-
portancia al sistema, a los números, cuando
lo más importante es la idea que transmites
para llevar a cabo ese sistema. Muchas ve-
ces esa idea se ve ya no sólo en el cómo jue-
gas sino con qué tipo de jugadores lo haces.
Nosotros, si jugáramos con unos carrileros
que habitualmente fueran laterales, esta-
ríamos más minutos de cualquier partido
defendiendo que atacando, pues nuestra lí-
nea defensiva sería de cinco y no de tres.
Habitualmente todos los carrileros que he-
mos tenido siempre han sido más extremos
que laterales. Quizá ahora la excepción sea
Pablo Maffeo, pero es un chico que vino con
18 años la primera vez y jugando de lateral
hemos conseguido que se convierta en ca-
rrilero y que sea peligroso en fase ofensiva.
Pablo Maffeo, pugnando con Leo Messi.
P.- Pero usted ha evolucionado el mó-
dulo. ¿Cómo ha sido esa metamorfosis?
R.- La evolución táctica es una consecuencia
de las plantillas que hemos ido disponiendo
cada campaña, de las características de los
jugadores… En cierta medida, todo parte de
que cuando llego había una situación muy
comprometida para el equipo, pero también
para mí. Yo era una apuesta arriesgada: falta-
ban trece partidos, estábamos a 8 o 9 puntos
CLUBPERARNAU
de la salvación, íbamos últimos y el equipo
había perdido 4 o 5 a 1 en Sabadell, jugando
toda la segunda parte con un jugador más.
En ese momento, lo primero que había que
dar era un giro a todo lo que había para que
los jugadores adquirieran confianza y pensé
que la mejor manera de lograrlo era utilizar
un sistema que nos ofreciera solidez defen-
siva, que es la base para ser un equipo com-
petitivo y sentar las premisas para lograr el
objetivo, que era salvar la categoría, que sin-
ceramente tenía claro que sería muy difícil,
pero era la primera vez que salía de casa y
sentía que necesitaba una experiencia per-
sonal para demostrarme a mí mismo, y tam-
bién a mucha gente que había tenido dudas
a la hora de contratarme después de mis dos
años como primer entrenador del Numancia
en Segunda, porque yo era un técnico inex-
perto que solo había entrenado en Soria. En-
tonces sabía los jugadores que tenía. Nor-
malmente cuando llegas a un equipo nuevo
lo primero que tratas de hacer es poner a fut-
bolistas que no habían jugado para que vean
que hay un cambio. Pienso que los entrena-
dores, habitualmente, solemos poner a los
mejores porque no creo que ningún técnico
sea tonto. A algunos nos pueden gustar más
o menos unos jugadores que otros, pero nor-
malmente a lo largo del tiempo solemos po-
ner a los “buenos”. A partir de ahí creía que
en la plantilla había jugadores que se podían
adaptar a este sistema y además de cambiar
otros aspectos en el día a día, en la dinámi-
ca de trabajo de entrenamientos y del club, lo
más significativo fue el cambio de sistema.
Conseguimos que el equipo se diera cuenta
que era competitivo y logramos el objetivo.
El año siguiente ya decidimos fichar a futbo-
listas que tenía claro que se podían adaptar
bien a esta forma de jugar.
P 36
“Se le da mucha importancia al
sistema, a los números, cuando
lo más importante es la idea
que transmites para llevar a
cabo ese sistema”
¿La evolución cómo ha sido? Hemos tenido
ese tipo de carrileros porque hemos buscado
que sean de largo recorrido, con desborde y
buen uno contra uno por banda, y siempre
me ha gustado jugar con dos atacantes que
puedan considerarse delanteros centro, que
posean poderío físico para ganar las dispu-
tas aéreas, pues nosotros jugamos con mu-
chos centros al área, pero que también nos
sirvan para jugar bien de espaldas. Poco a
poco los rivales nos han ido buscando al-
ternativas para contrarrestar nuestro jue-
go y, al mismo tiempo, nosotros (el cuerpo
técnico y yo como entrenador) hemos ido
buscando alternativas que nos permitieran
seguir siendo competitivos y nos ha ido bas-
tante bien. En ocasiones, nos hemos decan-
tado por jugar con un futbolista que, siendo
falso extremo, jugara de delantero. Otras
veces, con un ariete como, por ejemplo, Fe-
lipe Sanchón ejerciendo de media punta; a
veces con un doble mediocentro clásico y él
de media punta, junto con dos referencias
(Mata-Sandaza). Ya más recientemente,
tanto la pasada campaña como en la actual,
tuvimos bajas como la del propio Sandaza
y buscamos una fórmula para poner a los
“buenos” o los que en mejor forma estaban
que, en este caso, eran Portu y Borja y que
lo hicieron como lo está viendo la gente este
año en Primera. Hasta hace pocas fechas,
no hemos tenido la posibilidad de tener dos
‘9’ con las características de Stuani para, en
algún partido, haber dispuesto de esos dos
jugadores de referencia a los que, en un mo-
CLUBPERARNAU P 37

mento puntual, cuando hemos ido perdien- lo consigues, te hace ser también mejor
do o necesitábamos ganar el encuentro, los futbolista y ser más reconocido, pues no
hemos buscado. hemos tenido la tentación de cambiarlo.
P. - ¿Ha valorado variar su disposición Sin embargo, a pesar de toda esta expli-
táctica a, por ejemplo, una línea de cua- cación, no estoy cerrado a hacerlo más
tro atrás como variante como hacen adelante.
otros técnicos, pongamos el caso de Por otra parte, me gustaría añadir, al res-
Guardiola al que ha citado en varios pecto de lo que comentas de Guardiola,
momentos, y al que se cataloga como con el que he tenido la oportunidad de
ejemplo de un entrenador fiel sólo al hablar y trabajar en dos pretemporadas
módulo 1-4-3-3? en Mánchester, que puedo confirmar una
idea que tengo al respecto. Para mí, uno de
R.- Sí, sí, lo tenemos trabajado En mi
los entrenadores más ricos tácticamente
caso, siempre he utilizado las dos opcio-
en los últimos años, si no el que más, es
nes: jugar con tres (cinco) o con cuatro.
Pep. Es capaz de buscar variantes de ma-
Por ejemplo, siempre recuerdo que en mis
nera continua. Por ejemplo, en el Barça,
inicios como primer entrenador, en Soria,
recuerdo que además de jugar con el 1-4-
las dos temporadas jugábamos con 1-4-2-
3-3 lo más significativo es que atacaban
3-1, a veces 1-4-4-2 y siempre teníamos
de una forma ordenada para luego defen-
como alternativa jugar con 1-3-5-2. Sin
der mejor y que esa presión tras pérdida
embargo, por las circunstancias o por los
ahogara a los rivales y les siguiera dando
futbolistas o porque no lo necesitamos,
un grado de posesión altísimo que al fi-
nunca lo pusimos en práctica, excepto en
nal, con la calidad de esos futbolistas que
algún momento puntual para defender
tenía, propiciaba estar cerca del área ri-
un resultado, pero no habíamos jugado
val, desgastar al contrario y, con esa cali-
con tres centrales. En Girona es todo lo
dad, generar continuas ocasiones de gol.
contrario: llegué y trabajé directamen-
Pero es que se va al Bayern y “se inven-
te este módulo porque no había tiempo
ta” una situación en la que los laterales
para más. Sin embargo, también trabaja-
jugaban por dentro y prácticamente eran
mos la alternativa de jugar con una línea
centrocampistas con Lahm, por ejemplo,
de cuatro atrás en momentos puntuales.
como caso más significativo. Y además,
Incluso en el partido más importante de
luego llega al City y, contra nosotros, en
esa campaña para salvar la categoría, el
el partido de presentación ante nuestra
penúltimo de liga ante la Ponferradina,
afición, que conseguimos ganarles aun-
en Ponferrada, jugamos con una línea de
que fuera un ensayo de pretemporada,
cuatro debido a las circunstancias que te-
juega de una manera muy similar a como
níamos y poca gente habla de que aquel
lo hacemos habitualmente nosotros, con
partido lo jugamos así. Lo hemos traba-
tres atrás y dos carrileros... En la Premier
jado y lo seguimos trabajando, pero como
o en la Champions también lo ha utilizado
nos ha ido realmente bien y, además, creo
alguna vez. Por eso es un entrenador que
que los futbolistas tienen claro que nos
tiene una gran riqueza táctica.
ha permitido ser mejor equipo y, cuando
CLUBPERARNAU P 38

nerable. Nosotros, en banda, solo tenemos

un futbolista que muchas veces tiene que
recibir la ayuda de alguno de los jugadores
cercanos a su posición, ya sea alguno de los
mediapuntas, algún mediocentro o incluso
algún central. Sin embargo, contamos con
una gran densidad de gente por dentro, que
es por donde nos van a hacer el gol. Quizá de-
jamos desprevenidas las zonas desde donde
Pep Guardiola y Pablo Machín, en el partido amistoso que enfrentó a Girona y Manchester City.
nos pueden generar peligro, pero a cambio
ocupamos los espacios desde los que pueden
P.- Cada vez los rivales estudian mejor hacerme gol. Por lo tanto, es más importante
el módulo de juego del Girona. ¿Cuáles evitar las zonas más determinantes que no
cree que son sus carencias y por dónde las más lejanas a la portería.
se le puede hacer más daño?
R.- Como cualquier sistema de juego y como “Poco a poco los rivales han
cualquier idea tiene puntos débiles, sus pros ido buscando alternativas
y sus contras. Lo que hace falta es que eso
que los entrenadores vemos muy bien en la
para contrarrestar nuestro
pizarra y les ponemos a los jugadores en el juego y, al mismo tiempo,
video y ensayamos en los entrenamientos, nosotros hemos ido buscando
que después haya un jugador capaz de ha-
cerlo y que además sea superior a los riva-
alternativas que nos
les, pues muchas veces nos olvidamos que permitieran seguir siendo
jugamos ante un contrario. Si bien nosotros competitivos”
podemos hacer muy bien las cosas, quizás
él lo hace mucho mejor que nosotros. Segu- P.- La despedida del CD Numancia fue
ro que el sistema tiene sus puntos flacos y uno de los momentos más complicados
tal vez soy el primero que los conozco, pero en su corta carrera en los banquillos ¿Sa-
cuando hay un rival que nos trata de hacer lir de casa y ampliar la zona de confort,
daño por ahí, nosotros tenemos la previ- visto con perspectiva, ha sido una de las
sión de cómo evitar que nos puedan hacer mejores decisiones que ha tomado?
ese daño. Ahora bien, quizá para evitar eso
R.- Sí. Llevaba 13 años, como jugador y en-
tenemos que suprimir alguna de nuestras
trenador, en distintas facetas, en mi equipo,
virtudes en el aspecto ofensivo.
el equipo de mi tierra, el club al que le tengo
P.- ¿Son los carriles la zona del campo que agradecer el haber confiado en mí, no
donde un rival puede encontrar alguna solo para hacerme un proyecto de entrena-
de las carencias que presenta este sis- dor, sino porque me dieron la oportunidad
tema de juego? de llegar al primer equipo y estar dos tem-
R.- Al final, los dibujos marcan claramen- poradas consecutivas, lo cual siempre re-
te por dónde el equipo puede ser más vul- cuerdo y agradezco No obstante, después
CLUBPERARNAU
del segundo año sentía que lo que servía en
una primera temporada, producía más du-
das en la segunda. Podía percibir que exis-
tía un cierto acomodamiento, primero qui-
zás en mí y después en lo que rodeaba al
club. Fui el primer entrenador que estuvo
dos temporadas consecutivas completas en
el Numancia (actualmente, Jagoba Arrasa-
te cumple la tercera y supera esta marca).
Por otra parte, también me quería marcar
nuevos retos profesionales y no me quería
acomodar. Siempre me he considerado un
entrenador valiente, que asume retos ac-
cesibles y a partir de ellos puedes crecer,
lo que en mi caso era inimaginable cuando
empecé. Es una experiencia muy enrique-
cedora y al mismo tiempo bonita entrenar
en tu ciudad, por la responsabilidad que tie-
nes a la hora de entrenar, porque no eres
solo un técnico sino también un seguidor,
un aficionado, un fan, un vecino de la ciu-
dad y todo lo que le pasa al equipo te puede
repercutir más, tanto en lo bueno como en
lo malo. Y otra cosa que afecta mucho es
el ámbito familiar. Ahí, quieras que no, tu
familia siempre sufre tus malos momentos
y también disfruta un poco los “buenos”
momentos, pero en casa padecer los malos
se multiplica por diez y disfrutar los bue-
nos no tanto, por lo cual se tomó la decisión
de no asumir un compromiso que tenía el
presidente de renovarme porque creía que
era lo mejor.
Lo que sucedió es que a partir de ese ins-
tante llegó el hecho de que hubo equipos
que se interesaron por mí, por mi situación,
pues estaba habitualmente en la terna con
otros entrenadores para ocupar la vacante
de algún banquillo libre o por destitución
de un compañero, pero no cuajaba por ar-
gumentos como que “no tiene experiencia”
o “es cierto que lo ha hecho bien dos años,
P 39
ha trabajado bien como segundo, tiene ju-
ventud, nos habla todo el mundo bien de
él, pero dudamos que esto lo pueda hacer
en otro sitio porque no lo ha hecho”. Por
eso tenía que buscar esa experiencia o esa
oportunidad que llegó con el Girona y que,
en cierta medida, era venenosa pues en un
90% de casos tenía visos de “fracasar” en
el intento. Salvar la categoría era un reto
duro, pero consideraba que era importante
en el ámbito personal y como entrenador a
la hora de darme cuenta que era capaz de
cambiar y revertir una situación tan com-
prometida. Aunque no hubiéramos man-
tenido la categoría, solo el hecho de haber
devuelto la moral al equipo y convertirlo en
un conjunto con unas señas de identidad
nuevas y claras, para mí ya era gratificante
y satisfactorio.
Machín, en su despedida del Numancia.
P.- ¿Las señas de identidad del Girona
tienen relación directa con su persona-
lidad?
R.- Sí. Tal vez todo junto se transmite en el
día a día. Cuando tú eres capaz de trans-
mitir unos valores –y para comunicarlos lo
primero que necesitas es tener una perso-
nalidad que los incluya–, posteriormente
en el campo se pueden ver reflejados. Con
el paso del tiempo lo que se ve del equipo
es lo que siempre he tratado de transmitir
CLUBPERARNAU
porque yo soy así y también me han educa-
do en esa línea. Tenemos que ser un equi-
po humilde, saber lo que tenemos, pero no
pensar que esa humildad tiene una carga
o significado negativo. Al contrario: saber
que con trabajo y esfuerzo, que eso es in-
negociable, se puede siempre mejorar y que
esa mejora individual al final permite que
mejoremos colectivamente y viceversa. Y a
partir de creernos que somos un buen equi-
po, mejorarlo y tratar de salir a competir de
tú a tú en todos los campos, sin ir a tumba
abierta o ser unos alocados, pero sabiendo
que si no nos arriesgamos tampoco vamos
a lograr grandes logros.
P.- ¿Cómo transmite un entrenador su
idea de juego a un grupo de jugadores?
R.- Recuerdo que cuando llegué aquí, al
Girona FC, con un vestuario en el que ha-
bía futbolistas muy veteranos, con ex-
periencia en Primera, y llego yo siendo
un chaval semidesconocido, les dije que
no iba a hacer que salvaran la categoría,
sino que les iba a ayudar y convencer que
eran mejor equipo, pues a unos futbolis-
tas no los podía cambiar en cuatro meses.
Lo que sí puedo es ayudar a que crean en
una forma de jugar y que todos ponga-
mos lo mejor que tenemos a nivel indi-
vidual al servicio de ese equipo para que
seamos un grupo, un equipo más com-
petitivo. Creo que cuando tú explicas el
porqué de las cosas a un jugador, y él lo
comprende, has multiplicado por diez el
mensaje. Y esto hace que ellos mismos,
en el campo, se puedan ayudar. Siempre
he pensado que todos tenemos que saber
qué es lo que tiene que hacer el compañe-
ro en cada situación porque así también
le podemos ayudar en el terreno de juego.
Nosotros, los entrenadores, estamos en la
P 40
banda y hacemos muchos gestos, damos
muchos gritos, en un estadio con 10.000
personas, pero es que el jugador no tiene
muchas ganas de estar oyéndote, sobre
todo si eres muy pesado, y no te va a es-
cuchar. Sin embargo, el jugador que ve el
juego desde atrás sí te puede ayudar, reu-
bicar y eso pasa por la condición de que
todos sepamos lo que tenemos que hacer
en cada momento, que no es otra cosa que
la táctica.
“Cuando tú explicas el porqué
de las cosas a un jugador y él lo
comprende, has multiplicado
por diez el mensaje”
P.- ¿El fútbol son ideas y no números,
sistemas?
R.- Sí, sin duda. Creo que es más importan-
te la idea que el sistema. La idea de juego
siempre va a estar plasmada, juegues con el
sistema que juegues. Los números, al final,
son eso: números, pero también creo que un
equipo tiene que ser versátil. Has de tener
un pensamiento principal, que es tu forma
de actuación habitual, pero luego tienes que
saber qué hacer en cada momento que se
produce en los partidos. No es lo mismo ir
0-0 que ir ganando, que ir perdiendo, que
jugar ante un rival o ante otro… La idea es lo
fundamental y siempre he pensado, y así lo
trabajamos, que nosotros tenemos que ac-
tuar bajo nuestro método de juego, no va-
riar mucho, pero hay veces que tenemos
que saber cuáles son las virtudes del rival
y buscar alguna fórmula, dentro de nuestra
idea, para poder contrarrestarla y ponernos
más fácil el objetivo final, que es ganar.
CLUBPERARNAU
Machín, en un momento de la entrevista.
P.- ¿Y cuál es la idea de juego de Ma-
chín, pues ha insinuado que parte de
ella es la valentía?
R.- En cierta medida. Ahora bien, también
digo que “de valientes, el cementerio está
lleno”. Me explico: valiente en su justa me-
dida. Sabemos que en España hay algunos
entrenadores que pueden primar su ima-
gen o idea personal y que sea innegociable.
Ser siempre valiente puede ser, quizás, algo
suicida, temerario. Lo que tienes que ser
es inteligente, saber que si no eres valien-
te es más difícil conseguir los logros que te
marques. Pero también tienes que ser equi-
librado y conseguir saber cuándo un equi-
po tiene que hacer una determinada cosa y
cuándo tiene que hacer otra. Eso es ya el
culmen de lo que es un entrenador: es llevar
su sello a un equipo.
“La táctica es que todos
sepamos lo que tenemos que
hacer en cada momento”
P.- Esta matización sobre la valentía de
un entrenador, ¿es lo que conceptúa
como ADN Girona, incluyendo momen-
tos de gran decepción (ascenso frustra-
P 41
do, play off perdido, remontada inespe-
rada ante el Alavés…)?
R.- Esos momentos vividos son como mues-
cas en el revólver. Son cicatrices que te
forjan una personalidad y permiten que se
forje un equipo y unos futbolistas con más
experiencia. Cuando hablo del ADN Girona,
que algunas veces nos ha venido en contra
por ser excesivamente ambiciosos, siempre
digo que me ha costado mucho tiempo in-
culcarlo y creo que por eso estamos aquí, así
que no voy a renegar de ello aunque en un
momento dado vayamos 0-0 fuera de casa
cuando faltan cinco minutos para el final o
estemos en casa ganando. En esas situacio-
nes pretendo que sigamos intentando robar
el balón y salir rápido buscando la portería
rival y el gol. Es cierto que algunas veces
hemos podido tener el disgusto de vernos
sorprendidos por un contraataque adver-
sario que nos ha impedido sacar los pun-
tos que teníamos ganados. Pero creo que,
en general, es más beneficioso que seamos
ambiciosos hasta el último momento, que
queramos hacer un gol más. Ese es el ADN
Girona del que hablo: no optar por venirnos
atrás y que nos puedan hacer gol.
Los jugadores del Girona, celebrando un gol.
P.- ¿Cree que está mal utilizado el con-
cepto de buen y mal entrenador?
R.- Sí, por supuesto. Igual que he hablado de
buenos o malos jugadores, también en esto
CLUBPERARNAU
depende de lo que tú consideres. En Prime-
ra División todos los futbolistas son buenos;
no hay ninguno que pueda calificarse como
malo: hay unos buenos, otros muy buenos y
otros excelentes. A partir de ahí, los entre-
nadores tenemos gustos que nos hacen de-
cantarnos por un tipo de futbolistas u otro,
pero habitualmente el entrenador pone al
jugador que le va a dar rendimiento. Y el ju-
gador que más rendimiento le va a dar es
aquel que a partir de un trabajo que, bajo mi
punto de vista, es lo mínimo que se le puede
exigir en el aspecto físico, táctico y mental
–pues cuando hablamos de futbolistas fí-
sicos, si corres mucho, pero corres sin con-
trol, estás desaprovechando los esfuerzos–,
a partir de ese esfuerzo en los tres ámbitos
que expongo, la calidad determina y marca
la diferencia entre unos jugadores y otros,
entre unos equipos y otros. De lo que se tra-
ta es de poner a esos futbolistas que tienen
talento, pero que también den ese mínimo
de esfuerzo en los aspectos que he citado.
P.- Además de los resultados, ¿el peor
enemigo de un entrenador es encon-
trarse a un grupo de jugadores acomo-
dados?
R.- Sí, sí, por supuesto. Siempre he creído
que en el fútbol, como en la vida, nos te-
nemos que plantear retos. Lo que pasa es
que en el fútbol no tienes tiempo para po-
derlos conseguir y la inmediatez manda. El
hecho de la autocomplacencia o el hecho de
decir o pensar “mira qué buenos somos, ya
es suficiente” o “ya estoy siendo titular, me
acomodo”, es un hecho negativo y nunca
lo tenemos que permitir ni siquiera entre-
ver en nuestro equipo. También considero
que estar muchos años en un mismo club
te puede acomodar como técnico si no eres
ambicioso a la hora de seguir marcándote
P 42
retos en una situación de mejora progresi-
va. Esto está en contraposición con lo que
pueda pensar la gente de “bueno, pero es
que llevas cuatro años ya en Girona, ¿no te
parecen muchos?”. Sí, pero como en estos
cuatro años ha ido cambiando el equipo, el
club… y nos hemos ido marcando retos tan
ambiciosos que seguimos teniendo margen
de mejora, considero que es el sitio ideal
para seguir creciendo como lo hemos ido
haciendo hasta ahora.
P.- Por lo tanto, más que los resultados
o un vestuario acomodado, ¿el tiempo
es quien genera mayor desgaste a un
técnico en un equipo?
R.- Depende. Cuando quieres transmitir
mucho y lo tienes que hacer en poco tiem-
po, por supuesto que el desgaste es muy
grande. Cuanto más arriba estás, más des-
gaste sufres, no solo por el día a día, sino
por lo que rodea a un equipo de Primera Di-
visión como pueden ser los tops de la Liga
(FC Barcelona o Real Madrid, por ejemplo).
Hasta que no lo sientes, no puedes darte
cuenta. En mi caso, con el cambio de cate-
goría puedo intuir este detalle, pero seguro
que en el FC Barcelona es lo mismo, aun-
que multiplicado por diez. El tiempo creo
que va en contra del entrenador, sobre todo
cuando en un principio no eres capaz de
llevar a cabo la forma de entender el juego,
no logras que se vea plasmada en el campo
semana a semana y no consigues los resul-
tados que deseas en función de ese traba-
jo previo. Cuando ya tienes un margen que
has adquirido, que te conocen, que has ob-
tenido buenos resultados, etc., entonces no
lo considero tan malo, siempre y cuando el
entrenador sea consciente que no se tiene
que acomodar y tiene que fijarse él mismo
nuevos retos para que los futbolistas evo-
CLUBPERARNAU
lucionen, crezcan y puedan hacer que esos
retos se lleven a cabo.
“En el fútbol, como en la
vida, siempre nos tenemos
que plantear retos. Lo que
pasa es que en el fútbol no
tienes tiempo para poderlos
conseguir y la inmediatez
manda”
P.- De manera indirecta ha planteado la
importancia que tiene la competencia
interna. Aunque cuenta habitualmente
con un once tipo, ¿es clave que sientan
en el día a día que tienen compañeros
dispuestos a arrebatarles esa etiqueta
de titulares indiscutibles?
R.- Mira, lo más difícil para un entrenador,
y es complicadísimo conseguirlo, es tener
“contentos” a los futbolistas que menos jue-
gan. El jugador siempre quiere jugar y nun-
ca va a estar contento cuando no lo hace,
pero si eres capaz de lograr que todos los
futbolistas se entrenen a su máximo nivel,
especialmente si hablamos de un equipo
más modesto, eso te permite a largo pla-
zo ser un conjunto más competitivo en los
partidos oficiales. Si tú no dejas que los “ti-
tulares” se relajen, porque tienen a otro de-
trás que está apretando, eso hace que siem-
pre ese jugador tenga que dar lo máximo
para conseguir lo que quiere, que es jugar
domingo sí y domingo también. A partir de
ahí, el trato con el futbolista, la honradez, el
respeto, es fundamental y sobre todo den-
tro de que tú como entrenador piensas por
veinticinco y el futbolista, solo por uno. Ser
lo más justo posible con todos y pensar que
P 43
el beneficio tiene que ser siempre para el
equipo y no individual.
P.- En las retransmisiones televisi-
vas, en ocasiones, se le ve cómo realiza
apuntes en una pequeña libreta, ¿se
puede saber qué anotaciones realiza?
R.- Es una costumbre personal que vie-
ne de mucho tiempo atrás, desde cuando
me encargaba de las categorías inferiores,
cuando no disponía de los medios con los
que contamos hoy en día. Apunto jugadas
concretas o aspectos tácticos que quiero
volver a ver, valorar o corregir, incluso en el
propio descanso. En la actualidad, entre pri-
mera y segunda parte tengo la posibilidad
de ver esas imágenes e incluso ponérselas
en el vestuario a los jugadores si es algún
aspecto muy claro para tratar de corregir
algo. Luego, también es verdad que también
te ayuda para estructurar lo que les quieres
decir en el descanso, para cuando analizas
el partido en el video confirmar que esto
que estás viendo en directo se ve también
en la televisión. Iba a decir que es una ma-
nía, pero más bien se trata de una manera
de trabajar y siempre la sigo haciendo.
Pablo Machín, tomando notas en su libreta durante un partido (Foto: EFE).
P.- ¿Analizan solo aspectos negativos o
también positivos del juego del equipo?
R.- Un poco de todo, tanto resaltar o poten-
ciar los detalles hablados que hemos hecho
CLUBPERARNAU
bien, como corregir aquellos que no. Una de
las evoluciones que he tenido como entre-
nador es que, también por lo que había vi-
vido como jugador y como segundo técnico,
se hacía hincapié en corregir lo que hacía-
mos mal, pero pocas veces se potenciaba lo
que se ejecutaba bien. Pienso que se apren-
de tanto o más con un refuerzo positivo que
con uno negativo. Es evidente que cuando
hacemos las cosas mal hay que decirlo y
corregirlo, pero cuando hacemos las cosas
bien no tenemos que darlo por supuesto.
Hacer las cosas bien también es difícil, es-
pecialmente cuando estás trabajando una
serie de automatismos que –el otro día lo
hablamos analizando los entrenamientos–
en el 80% de nuestro trabajo es más ofen-
sivo que defensivo y es uno de los detalles
que a la gente que estaba aquí, del cuerpo
técnico del Girona, les llamó la atención.
Soy de los que creo que si atacamos bien, de
una forma ordenada, estamos favoreciendo
también el defender rápido y bien. El hecho
de que en los partidos se vea reflejado lo que
estamos trabajando en los entrenamientos
semana a semana, lo que también forma
parte de nuestras señas de identidad, eso
al futbolista también le reconforta y ratifica
que lo que estamos haciendo nos está dan-
do buenos resultados y es la forma de ser
un equipo más competitivo y nos permite
que podamos ganar.
“Lo más difícil para
un entrenador, y es
complicadísimo conseguirlo,
es tener ‘contentos’ a los
futbolistas que menos
juegan”
P 44
P.- Pensando en sus inicios como ayu-
dante de un primer entrenador, ¿qué
importancia tiene para usted la totali-
dad del cuerpo técnico en un equipo?
R.- Desde mi punto de vista, hoy en día
el entrenador no es nada sin su cuerpo
técnico. Pero hablando de él, involucro a
todos, desde los fisioterapeutas, ya que el
cuerpo médico para mí es importantísimo,
al gabinete de análisis de los rivales, pero
también otras personas que hemos ido in-
corporando más recientemente, como un
nutricionista, un antropólogo, un podólo-
go, los propios utileros que generan buen
ambiente y que conocen muchas veces
algunos aspectos más personales que no
nos llegan y que no es obligatorio que te
llegue a ti... Creo que cuando hablamos de
un equipo o de un entrenador hablamos
de una figura que es la cabeza visible de
un gran grupo y que los éxitos que lle-
gan, sin duda, se tienen que repartir entre
toda esa gente.
En el Girona FC el cuerpo técnico lo forma-
mos Jordi Guerrero (segundo entrenador),
Jordi Balcells (preparador físico), Omar Ha-
rrak (preparador de porteros), Carlos Mar-
tínez, ayudado por Daniel Villar (analistas),
Emilio Gutiérrez (director de innovación),
Santi Pou (director de metodología), Juan
Carlos Moreno (jefe de scouting), el doctor
Antoni Mora, el jefe del departamento de fi-
sioterapia, Oriol Balaña, los fisioterapeutas
Borja Oreja, Martí Moreno, Daniel Sánchez
y Javier Vidal, los recuperadores, Lluís Sala
y Néstor Salmerón, el delegado Javier Galia-
no y los utileros Josep María Luis y Carlos
Quintero, así como los últimos en llegar, el
nutricionista Sergi Mateo, y los podólogos y
hasta un antropometrista.
CLUBPERARNAU P 45

Otros no piensan igual. Ahora bien,

¿los resultados tapan en ocasiones las
carencias de algunos equipos?
R.- Sí, sí, también. El resultado enmascara
muchas cosas, para lo bueno y para lo malo.
También te digo que un mal juego con un
buen resultado seguro que hace crecer al
equipo. Nosotros tenemos que saber anali-
zar bien el por qué llegan los resultados y
somos conscientes de que jugando bien, y
jugar bien es jugar a lo que tú quieres jugar,
es decir, tu idea de juego, tu propuesta, yo
Una parte del cuerpo técnico del Girona. De izquierda a derecha, Santi Pou, Jor-
di Guerrero, Omar Harrak, Pablo Machín, Jordi Balcells, Emilio Gutiérrez y Javier ya no hablo ni de una forma ni otra, te da
Galiano.
más garantía de conseguir el resultado que
P.- Es por esta razón que muchos en- es el éxito, pues a la larga la suma de resul-
trenadores de fútbol, pero también de tados te da los puntos que es lo que busca-
otras disciplinas deportivas, ven cómo mos todos los entrenadores, cada uno con
a sus equipos se les nombra como el sus objetivos (ganar la Liga, lograr la per-
“equipo de” y eso no les agrada. ¿Sería manencia…).
mejor eliminar la parte final y dejar
solo la palabra equipo? “Tenemos que saber analizar
R.- Sí, posiblemente sí. En mi caso, siem- bien el por qué llegan los
pre he tratado de hacer partícipe de los resultados (…) Jugar bien es
éxitos a toda la gente que trabaja conmi-
go, pues al final se le tienen que dar a una jugar a lo que tú quieres jugar,
persona, como el trofeo que me dio la LFP es decir, tu idea de juego, tu
por ser el mejor técnico de la Liga: lo recibí propuesta”
yo, pero porque no pueden dárselo a diez
o quince personas. No obstante, cualquier P.- Es decir, jugar bien o mal siempre
premio o éxito siempre lo extrapolo y hago es hacerlo en función de la idea de cada
un reconocimiento a la gente que trabaja entrenador que se va trabajando, corri-
conmigo. Es evidente que soy la cabeza vi- giendo, mejorando, semana a semana
sible, quien coordino y confío en esa gente, con cada entrenamiento…
en todos, pero son ellos quienes me hacen
tenerlo todo más fácil y, a la larga, poder R.- Por supuesto. Y cuando hay equipos
ser un “mejor entrenador”, que es el que que tienen un largo periodo con un entre-
se lleva los éxitos y, no hay que negarlo, nador a los mandos se ve claramente cuál
también los varapalos y fracasos globales es el ideal de ese técnico y se va viendo si
del equipo cuando llegan. ese entrenador va evolucionando y no está
anclado en una sola idea, si ese equipo a lo
P.- Para algunos compañeros, los re-
largo del tiempo también va evolucionando.
sultados son consecuencia del juego.
CLUBPERARNAU
Siempre he pensado que cuando se habla,
muchas veces a la ligera, en los medios de
comunicación que “este equipo juega bien
o este equipo juega mal o este entrenador
es muy ofensivo o este muy defensivo o
este es muy cagón y este es muy valiente”,
a mí me da mucha rabia porque creo que
se ha valorado al entrenador bueno única-
mente por si su equipo marca muchos go-
les. Pero es que hay muchos entrenadores
muy buenos que no tienen los futbolistas
capaces de jugar como otros técnicos que
sí disponen de ellos y, sin embargo, están
sacando mucho rendimiento a las planti-
llas que tienen. Para mí, el buen entrena-
dor es el que saca el máximo rendimiento
a la plantilla de la que dispone o le han con-
feccionado desde la dirección deportiva
del club: unos les sacarán rendimiento ju-
gando de una manera y otros, de otra. Por
supuesto que soy el primero que le gus-
ta hacer más goles que el rival, practicar
un juego vistoso, elaborado, combinativo…
Creo que eso nos gusta a todos, pero hay
veces que tienes que ser lo suficientemen-
te inteligente para saber que con los ju-
gadores que tienes no puedes jugar como
lo hacía el Dream Team. Por eso, te tienes
que buscar la vida para hacer goles de al-
guna forma, porque si no consigues goles
es imposible que llegue la victoria. Un as-
pecto importante de los equipos que quizá
no tengamos tanto potencial, en cuanto a
la calidad de los futbolistas, y que siem-
pre he trabajado y me ha dado muy buen
resultado son las jugadas a balón parado,
pues es la faceta donde todos los equipos
nos podemos igualar. Un buen trabajo en
esta faceta sí te puede dar un plus, un va-
lor añadido a lo que es el equipo.
P 46
“Las jugadas a balón parado
es la faceta donde todos los
equipos nos podemos igualar”
P.- ¿Disponer de más tiempo para tra-
bajar las acciones a balón parado del
que disponen los equipos grandes les
ayudaría a ser más superiores de lo que
son por la calidad de sus jugadores?
R.- Sí, por supuesto. Creo que es un va-
lor añadido y un aspecto diferenciador
que puede hacer que entre dos equipos
muy similares, uno sea mejor que otro.
Los mejores equipos tienen a los mejo-
res futbolistas y los mejores futbolistas
tienen mejor balón parado, disponen de
mayor precisión y potencia a la hora de
los lanzamientos. Y también a la hora de
rematarlos, al disponer de mucho poderío
físico y técnico. Creo que cada vez más
se trabaja el balón parado. Sé que el FC
Barcelona de la última época, con Luis
Enrique, lo trabajaron porque Juan Car-
los Unzué era el encargado de hacerlo y
cuando coincidí con él en el Numancia in-
cidía mucho en esta faceta. Tal es así que
ha habido partidos determinantes que los
ha ganado o ha abierto la puerta gracias
a este tipo de acciones, con lo cual todos
somos conscientes de que es importante.
Ahora bien, quizás a los futbolistas de los
equipos más grandes, sea por la cuestión
que sea, no soy quién para enjuiciarlo, les
cuesta estar más concentrados y atentos
en este tipo de tareas, que habitualmente
no gusta mucho a los futbolistas.
P.- Afirma el entrenador del Saski Bas-
konia de baloncesto, Pedro Martínez,
que en el deporte no todo es ganar ni
perder. Entiendo esta frase como que
CLUBPERARNAU
hay otros aspectos adicionales que van
en la mejora de un equipo, su evolución
en el tiempo, el crecimiento de jugado-
res a nivel individual y colectivamente.
¿Qué opinión le merece esta reflexión?
R.- Me parece muy interesante y la sus-
cribo. Todos los entrenadores, lo primero
que queremos y buscamos en cada parti-
do es ganar. Nos preparamos todas las se-
manas para encarar cada partido y lograr
el domingo los tres puntos. Pero además,
esto es un proceso. Una temporada en el
fútbol es como la vida: vas evolucionando,
todas las experiencias que estás pasando
te hacen crecer y te hacen ser mejor per-
sona y mejor jugador. Muchas veces deci-
mos que tal futbolista no ha jugado en este
equipo más que cuatro o cinco partidos. Sí,
de acuerdo, pero no ha estado perdiendo
el tiempo, se ha estado entrenando bien,
ha estado con gente de nivel, ha estado co-
nociendo una idea de juego, tal vez nueva
para él, ha conocido a un entrenador que
le ha explicado cosas, que le ha exigido de
una determinada forma, que le ha tratado
de inculcar unos valores… Todo esto tam-
bién forma parte del proceso de formación
de los futbolistas en el cual los entrenado-
res tenemos mucho que ver. Y cuando un
equipo como el nuestro, que está vincula-
do de una forma muy directa con el Man-
chester City y tenemos ahora a jugadores
que tienen un talento innegable, pero que
han llegado a una liga que es de un nivel
top –en mi opinión la española es la liga de
más nivel–, no es fácil que lleguen y jue-
guen un montón de partidos. Sin embargo,
seguro que para su formación y su apren-
dizaje les va a resultar muy positivo que
puedan jugar 10, 15 o 20 partidos, aunque
no sean los 38 de competición.
P 47
Jugadores del Girona, en un saque de esquina.
P.- De qué está más orgulloso de su
plantilla, ¿de su crecimiento y mejora
respecto al año anterior o que piensen
que gracias al trabajo con usted son
mejores futbolistas?
R.- Creo que más con lo segundo. El méri-
to de todo lo que se hace, no voy a decir el
100%, pero sí el 90%, es de los futbolistas. El
entrenador puede tener muy buenas ideas,
muy buen método, pero si los jugadores no
son capaces de llevar al campo las ideas y
lo que tú estás trabajando, el entrenador es
malísimo. Ahora bien, el técnico de cual-
quier equipo de fútbol sí es cierto que pue-
de ayudar, como he explicado antes, a que
futbolistas que parecen normales puedan
llegar a ser de alto nivel. En mi caso, ver to-
dos los días cómo entrenan mis jugadores
es el mayor reconocimiento personal que
posteriormente, sin duda, se refleja en los
partidos de competición. O que los jugado-
res, cuando les estás explicando una char-
la táctica, te miren y te estén transmitien-
do: “No te preocupes, míster, que esto que
nos estás explicando lo vamos a hacer por-
que cada vez que dices algo, normalmente,
ocurre y muchas veces llegamos a ganar el
partido así”. Eso creo que es muy valioso o
por lo menos es de lo que más orgulloso me
puedo sentir.
CLUBPERARNAU
“El entrenador puede tener
muy buenas ideas, muy buen
método, pero si los jugadores
no son capaces de llevar
al campo las ideas y lo que
tú estás trabajando, el
entrenador es malísimo”
P. El caso de Portu es un ejemplo bas-
tante paradigmático de su respuesta…
R.- Aquí hay muchos jugadores que se es-
tán labrando un futuro que, seguramente,
años atrás era imposible que lo imagina-
ran. Por ejemplo, el caso de Álex Granell. Le
fichamos de un equipo de Segunda B que
había bajado a Tercera División y se con-
vierte en esa pretemporada en un jugador
que lo juega todo y que consigue, junto al
equipo, 82 puntos en Segunda División, y
no subimos a Primera por la diferencia de
goles con el Sporting de Gijón. Otro caso:
Pere Pons; es un jugador de la cantera, que
juega cedido en el Olot en Segunda B y llega
para quedarse. No sorprende a todos mu-
chas veces porque las dificultades econó-
micas impiden que podamos traer a otros
futbolistas. Por lo tanto, el entrenador tiene
que sacar el mayor rendimiento de los juga-
dores de los que dispone que, en este caso,
muchos son llegados de Segunda B. Por
lo que respecta a Portu, lo fichamos de un
equipo que desciende, el Albacete, ya que lo
habíamos seguido mucho porque siempre
jugábamos contra el rival que dejaba el equi-
po manchego. Desde el primer momento te-
nía claro que iba a encajar bien en nuestro
sistema porque era muy válido, no solo por
su calidad, sino por su coraje y su forma de
competir. Además conseguimos adaptarle
P 48
a una nueva posición y pasar a ser más que
un mediocentro, un jugador de mayor des-
pliegue y llegada al área, para aprovechar
su velocidad. Hay muchos jugadores… Otro
ejemplo: Pablo Maffeo llega con 18 años de
la cantera del Manchester City sin haber te-
nido muchas opciones de competir oficial-
mente, ya que estaba en el segundo equipo,
y da un salto de calidad muy grande que nos
permite ser un conjunto más competitivo. Y
así, con un montón de jugadores que no por
el hecho de estar en una categoría inferior,
en un momento puntual, no están capacita-
dos para poder llegar a una superior o in-
cluso, como nosotros, a Primera.
Celebración tras un gol de Portu.
P.- ¿La inteligencia es un factor clave
en el fútbol?
R.- Desde mi punto de vista, la inteligen-
cia es clave en la vida y, en el fútbol, tanto
o más. Siempre hay una frase que habitual-
mente comentamos los entrenadores que es:
“Este jugador es listo”. Es un valor añadido
más. El futbolista tiene que ser disciplinado,
por supuesto; tiene que ser trabajador, por
supuesto; tiene que tener unos valores, por
supuesto; tiene que ser ambicioso, también…
pero el entrenador no debe cortarle al futbo-
lista el talento que tiene. La diferencia está
en eso último, precisamente, en el talento. Y
éste va íntimamente ligado a la inteligencia:
un jugador talentoso y con inteligencia sabrá
CLUBPERARNAU
buscar las situaciones para que ese talento
se pueda ver en el campo. Y el entrenador te
puede dar algunas líneas por donde cree que
te puede favorecer tu juego y el del equipo,
pero en un momento puntual la inteligencia
del jugador es la que va a hacerle encontrar
esas situaciones con más asiduidad.
“El entrenador no debe cortarle
al futbolista el talento que
tiene. La diferencia está en
eso último, precisamente, en el
talento. Y éste va íntimamente
ligado a la inteligencia”
P.- Mi pregunta anterior iba referida
más al hecho de que los técnicos ponen
en valor, y de manera muy destacada,
el contar con jugadores que toman de-
cisiones acertadas por encima de los
que llaman la atención a los aficiona-
dos, por sus regates, goles…
R.- Hablando de inteligencia, he hablado de
la futbolística o inteligencia táctica. Pero al
entrenador también le ayuda la inteligencia
personal de los jugadores a la hora de cono-
cer idiomas, por ejemplo, a la hora de tener
una buena cultura, una buena formación y
educación que permite y facilita llevar una
vida más ordenada. Si eres inteligente, rá-
pidamente vas a interiorizar los conceptos
que el entrenador te trata de inculcar. A un
futbolista inteligente, con repetir un auto-
matismo o una jugada dos veces se le va a
quedar grabado en la memoria. A otro que le
cueste más, que sea más disperso, vas a te-
ner que estar repitiéndoselo muchas veces.
En el aspecto del balón parado, por ejemplo
saber en qué situación tenemos que hacer
cada jugada o acordarse de los movimientos
P 49
que hay que hacer, un jugador inteligente y
responsable nos ayuda al equipo a que las
cosas salgan mejor en esta faceta del juego.
P.- ¿Cuánto de valor cree que tiene la
mentalidad para que un jugador sea
más de lo que a priori se puede pensar
de él por sus cualidades técnicas, tácti-
cas o físicas?
R.- La mentalidad de un jugador me atre-
vería a decir que es casi el 50%. Un buen
futbolista, si no está mentalizado, si no está
concentrado, si no está pendiente de lo que
tiene que estar, pierde mucho rendimiento,
muchísimo. Exactamente igual que un ju-
gador que no es excesivamente talentoso:
si él tiene claras las cosas que tiene que ha-
cer, a partir siempre del trabajo y el esfuer-
zo diario, sus virtudes se pueden potenciar.
Alguna vez me han recordado que en algu-
na otra entrevista dije: “Ojo con un burro
motivado”. Esta frase refleja que tú puedes
ser muy bueno, pero si no estás con la men-
talidad correcta, cualquier equipo normali-
to, con una mentalidad muy buena, te pue-
de poner en dificultades e incluso ganarte.
Todos sabemos que en el fútbol ha habido
muchos ejemplos en los que un equipo de
Primera División o un superequipo que jue-
ga desconcentrado va al campo de un equi-
po de inferior categoría y lo pasa fatal. Eso
seguramente tiene que ver más con la men-
talidad que con la capacidad.
“Un buen futbolista, si no
está mentalizado, si no está
concentrado, si no está
pendiente de lo que tiene
que estar, pierde mucho
rendimiento, muchísimo”
CLUBPERARNAU
P.- A propósito de la frase del burro,
me viene a la memoria una frase que si
no me equivoco se le atribuye a Javier
Clemente cuando respondió a un pe-
riodista: “Bien, dices que llevas veinte
años viendo fútbol y sabes de lo que
preguntas. En los campos de alrede-
dor de Lezama hay vacas todos los días
viendo cómo entrenamos y, por tanto,
también tienen que saber de fútbol lo
mismo que tú”.
R.- [Risas]. ¡Es cierto! Una cosa es mirar y
otra es ver. Tú puedes mirar y los dos es-
tamos mirando lo mismo, pero vemos di-
ferentes cosas. Quizás puedo ver algunas
cosas más que tú o algunas más determi-
nantes. Por eso creo que hoy en día todos
los entrenadores podemos tener acceso a
mucha información, a muchos tipos de en-
trenamiento, de metodología para llevarlos
a cabo. Pero la diferencia la da lo que yo ca-
lifico como ojímetro y esto es particular de
cada entrenador.
P.- Comenta la vinculación con el Man-
chester City y, desde distintos ámbitos
y lugares en España, se etiqueta al Gi-
rona como un equipo filial del conjunto
inglés y que disponía en verano de un
notable músculo económico, lo que su-
pondría la llegada de grandes jugado-
res, una gran inversión para reforzar el
equipo. ¿Solo con dinero se garantiza
que un equipo sea mejor?
R.- Si estuviéramos hablando de ese aspec-
to y la relación dinero-clasificación, noso-
tros tendríamos que estar últimos en la cla-
sificación, no habríamos ascendido nunca,
no habríamos estado compitiendo dos años
de manera consecutiva en sendos play off
por subir a Primera. Sería inviable. Una de
las mayores grandezas, o tal vez la mayor
P 50
de este deporte y que pasa en muy pocas
actividades, es que el dinero no te garan-
tiza quedar más arriba en la clasificación.
Es evidente que ayuda a tener a los mejores
jugadores y éstos son caros y pueden ayu-
darte a ser mejor equipo. Pero la grandeza
del deporte rey, que por eso también se co-
noce con ese nombre al fútbol, es que un
equipo pequeño puede competir con uno
grande hasta, como en nuestro caso u otros
muchos, poder incluso, en un partido pun-
tual, ganarle al Real Madrid.
Victoria del Girona ante el Real Madrid en la presente temporada.
P.- La gran trayectoria del equipo ha
llevado al Girona a salvar matemática-
mente la categoría en su primer año en
Primera división cuando apenas acaba
de empezar el mes de marzo. Pero más
allá de esta permanencia, ¿el objetivo
a medio y largo plazo es mirarse en el
espejo, tal vez, de un Eibar?
R.- Sí. Lo más sensato es vernos en un Le-
ganés, en un Éibar… Son el reflejo que he-
mos de tener. No obstante, como siempre
queremos ser ambiciosos, también por las
similitudes podemos ser, por qué no, aun-
que suene a utopía lejana, si logramos asen-
tarnos varios años en Primera División, un
Villarreal. Realmente el Villarreal CF era un
club de Segunda División, de un pueblo, y
ha llegado a jugar Champions League. Para
CLUBPERARNAU
ello, seguramente necesitaremos la ayu-
da de nuestro nuevo propietario o máximo
accionista, que es el Manchester City, pero
creo que las bases están puestas para in-
tentar acceder a ese nivel que, de momento,
todavía es un sueño.
“Lo más sensato es vernos
en un Leganés, en un Éibar…
Son el reflejo que hemos de
tener (…) También por las
similitudes podemos ser, por
qué no, aunque suene a utopía
lejana, si logramos asentarnos
varios años en Primera División,
un Villarreal”
P.- ¿Cómo es la relación con el City
desde el punto de vista, ya no accio-
narial-económico, sino en la vertiente
deportiva (jugadores cedidos, colabora-
ción, comunicación…)?
R.- Realmente llevamos dos años de cier-
ta proximidad. En la presente campaña se
confirmó la venta del gran paquete accio-
narial al City, aunque anteriormente, ya
hace dos pretemporadas realizamos parte
de la preparación en su ciudad deportiva.
Este año es en el que se están uniendo más
lazos y existe una comunicación más direc-
ta y más fluida. Hay gente en el club que
siempre tiene reuniones, viene gente de In-
glaterra aquí y viceversa; hay mucha gente
que se conoce directamente desde nues-
tro cuerpo técnico al suyo y también gen-
te que les rodea. Esto no quiere decir que
Pep Guardiola vaya a estar pendiente de los
entrenamientos que vayamos a hacer aquí,
ni yo me voy a volver loco por saber lo que
P 51
están haciendo allí.
P.- ¿Ha hablado personalmente con
Guardiola en alguna ocasión?
R.- Sí, por supuesto. El haber realizado gran
parte de las dos últimas pretemporadas allí
nos ha permitido coincidir algunos días con
el primer equipo en las instalaciones de su
ciudad deportiva en Mánchester. También
cuando vinieron a jugar un amistoso de pre-
temporada, que servía de presentación ante
nuestro público, charlamos e intercambia-
mos información y opiniones. Tanto ellos
como yo sabemos que si en algún momento
hace falta el número de teléfono lo tenemos
y el hilo es directo.
Pablo Maffeo y Leroy Sané, durante el amistoso Girona-Manchester City.
P.- ¿Y el día que charlaron con motivo
de la visita del City a Girona, ¿preguntó
usted más a Guardiola o fue al revés?
R.- Creo que somos dos personas que ha-
blamos bastante. Sin embargo, en mi caso,
me interesaba más saber la opinión que te-
nía él y cómo ve el fútbol pues le considero
como uno de los mejores entrenadores del
mundo, sin duda, y cada charla que pueda
tener con él seguro que me enriquece mu-
cho. También le pude recordar el primer día
que me estrené como entrenador, eso sí,
ayudante en Primera: “No sé si recordarás
CLUBPERARNAU P 52

aquel chavalito que estaba al lado, en el otro nace, pero también de donde pace, de don-
banquillo, en Soria, cuando os ganamos el de vive, de donde le dan de comer, de don-
primer partido de Liga”. [Risas]. Él se acor- de se siente muy a gusto… Y yo a Girona la
daba perfectamente, tal vez no de mí, pero considero así.
sí de su primera derrota como entrenador
en Primera División.
Pablo Beltrán.
P.- Entonces, entre sus referentes @PabloBeltran79
como entrenadores en la actualidad,
Pep Guardiola es uno de ellos, ¿cuál se- Ilustración:
ría otro u otros si los hubiera? Herr Ralf
R.- Sí. Podemos aprender más de los entre-
nadores con los que hemos estado. De to-
dos ellos he aprendido, como he explicado
al inicio de la entrevista. Gonzalo Arcona-
da es quien me enseño un poco el método;
de Andoni Goicoetxea, el carisma que te-
nía como entrenador; Miguel Ángel Loti-
na me enseñó a diferenciar y a compren-
der el aspecto táctico del juego en la fase
defensiva; con Sergio Kresic conviví con
un entrenador experto y con muchas ho-
ras de vuelo; y Juan Carlos Unzué me abrió
las miras del juego de posición y la táctica
ofensiva. Hilando con esto, creo que Unzué
es muy similar a Guardiola y en el aspecto
técnico-futbolístico es súper enriquecedor
porque Pep es capaz, en cada momento, de
cambiar cosas para mejorar el equipo. Creo
que es eso a lo que tenemos que aspirar los
entrenadores: a no ser cerrados en un úni-
co aspecto y ser lo suficientemente versáti-
les para, en un momento puntual, cambiar
para favorecer al equipo que dirigimos.
P.- ¿Qué significa Girona y el Girona FC
para usted?
R.- Es mi segunda casa. Con todo lo que
aprecio Soria, decir que Girona es mi se-
gunda casa… En mi pueblo dicen que uno
no es de donde nace, sino de donde pace.
Pues bien, yo creo que uno que es de donde
 Colaboración especial de la revista
L’Ultimo Uomo

HARRY
KANE:
UNO DE LOS
NUESTROS
Tommaso Giagni

Harry Kane. Su nombre inspira

temor en las filas adversarias. No
en vano fue el máximo goleador
europeo del año 2017, con 56
goles en 52 partidos, por delante
de Messi, Lewandowski, Cristia-
no Ronaldo y Cavani, superando
además ampliamente a todos
ellos en promedio de tantos
(1.08 por partido). La trayectoria
del jugador del Tottenham ha
sido menos lineal de lo que pare-
ce, pero ahora mismo es uno de
los delanteros más prolíficos del
fútbol mundial.
CLUBPERARNAU
U no de los mejores delanteros del
mundo. 148 goles en 264 partidos
con equipos de club y 12 goles en 23
apariciones con el equipo nacional. Conti-
nuo, inteligente, completo. Objeto del deseo
de los clubes más prestigiosos. Joya de la
corona del equipo en el que creció y fue pu-
lido con palabras de afecto y estima.
Y sin embargo, no siempre ha sido así. Lle-
gó al Tottenham con serias dificultades, sin
una línea clara, después de una serie de fra-
casos. Fue recibido de niño en 2004, pero
su debut con esa camiseta en la liga solo
se produjo diez años después, el 7 de abril
de 2014. Cuando los Spurs compraron por
30 millones de euros al delantero Roberto
Soldado, sus aficionados cantaban: “Solda-
do / vino de la soleada España / para jugar
en White Hart Lane”. Era verano de 2013.
Unos meses más tarde, el estribillo cambió
radicalmente: “Soldado / vino de la soleada
España / para entrenar con Harry Kane”.
101 goles en Premier League con la camiseta
del Tottenham. Hace pocas semanas, Kane
David Beckham y Harry Kane en 2004. Harry tenía 11 años.
P 54
superó el récord de Edward Paul Sherin-
gham, un hito de gran importancia porque
“Teddy”, icono del fútbol inglés en los años
noventa, “Teddy”, el delantero centro de
la selección nacional, fue nada más y nada
menos que su modelo.
Harry Edward Kane nació a quince kilóme-
tros de White Hart Lane, de padres irlan-
deses provenientes de Galway. Pronto se
aficionado intensamente por el Tottenham,
como la mayoría de su familia. Para describir
la relación entre él y su hermano mayor, la
madre dirá que son “una sola alma dividida
en dos, que camina sobre cuatro piernas”.
Harry asistió a la misma escuela que Bec-
kham, en Chingford, al noreste de Londres.
En 2014, cuando ya se ha convertido en la
estrella emergente del Tottenham, regresa-
rá a Chingford sin previo aviso para ver un
partido como espectador, permaneciendo
solo durante todo el encuentro en un rincón
del campo. En esa escuela había conocido a
quien años más tarde se convertiría en es-
posa y madre de su hija.
CLUBPERARNAU
TEDDY, SU MODELO
El día del nacimiento de Kane, el 28 de julio
de 1993, el delantero titular del Tottenham
es Teddy Sheringham. A los veintisiete
años ya había escrito su nombre en la histo-
ria de Millwall (220 apariciones, 93 goles) e
incluso dos meses antes había debutado en
el equipo nacional.
Cuando Kane acaba de nacer, Sheringham ya
está viviendo su segunda temporada en los
Spurs, la plataforma de prestigio que nunca
antes había tenido. Permanecerá ahí hasta
1997, para a continuación irse a ganarlo todo
a Mánchester (gol y asistencia en la legen-
daria final de la Champions League contra el
Bayern...) y después regresar a los Spurs.
Marzo de 2011. Grande y torpe, “delantero desgarbado”, Kane juega como cedi-
do en el Leyton Orient (Foto: Dan Istitene / Getty Images).
P 55
Kane da sus primeros pasos futbolísticos
en el Ridgeway Rovers, un equipo juve-
nil de Chingford. Nueva coincidencia: es el
mismo club donde Beckham dio los prime-
ros puntapiés al balón. Hoy los niños que
juegan en el club tuitean: “Harry Kane, uno
de los nuestros”.
A los ocho años, está a prueba en el Arsenal
durante todo un año intentando quedarse,
pero todo sale mal. A continuación prueba
en el Tottenham, pero finalmente también
sale mal, con lo que se marcha a la acade-
mia juvenil de Watford, pero al cabo de un
mes los Spurs cambian de opinión y le in-
corporan nuevamente.
Una sombra quedará fija en el camino de
Harry Kane. Justo cuando está entrando en
la cantera del Tottenham es inmortalizado
en la calle festejando con la camiseta del
Arsenal, durante las celebraciones del títu-
lo de Premier League conquistado por los
hombres de Wenger en 2004. Luce el pelo
rojo como Freddy Ljungberg y solo tiene
once años. Desde entonces, los “gunners”
no han vuelto a ganar la liga…
Arsène Wenger llevaba dirigiendo al Ar-
senal desde 1996. Es decir, ya estaba allí
cuando Kane fue descartado, aunque ob-
viamente no era Wenger quien se respon-
sabilizaba de seleccionar o descartar a los
niños de ocho años. Fueron los periódicos
los que descubrieron, tiempo después, que
la estrella del equipo rival había pasado por
delante de las narices de Wenger, que reac-
cionó a ello con una mezcla de ironía e ira.
Como adolescente, Kane recordaba inevi-
tablemente el estilo y los movimientos de
Sheringham. Recientemente, Les Ferdi-
nand, que le entrenó en el equipo sub21 del
Tottenham, hizo hincapié en esa similitud
de movimientos: “Se desliza en los espacios
CLUBPERARNAU P 56

y automáticamente encuentra la posición gham. Para Harry, será una buena expe-
correcta”. Ferdinand, de la misma edad que riencia y la demostración de saber estar en
Sheringham, sabe de lo que está hablando, un entorno complicado.
considerando que fueron compañeros de
club y de equipo nacional.
“Si hay una palabra para definir su
forma de finalizar es: impecable”,
CUATRO CESIONES dijo un duro fajador del club como
es Alan Dunne
Harry vive cuatro cesiones en dos años y
medio. Parece quemar las etapas y también
las alabanzas que le dedicaban los técnicos Marca muchos goles en esos seis meses.
de categorías inferiores (“Tenía un mara- Remates precisos, detrás de los cuales se
villoso deseo de mejorar, se volvió obsesi- adivina un buen trabajo. “Si hay una palabra
vo”, según el director de la Academia de los para definir su forma de finalizar es: impe-
Spurs). Las cuatro cesiones hacen que Kane cable”, dijo un duro fajador del club como
se mueva entre la League One (3ª división) es Alan Dunne (10 expulsiones y 79 amo-
y la Championship (2ª división). Y si prime- nestaciones en su carrera con los “leones”
ro permanece en Londres (Leyton Orient, del Millwall). Dunne añadió que había visto
Millwall), más tarde se desplazará a otras a jugadores paralizarse dentro de The Den,
zonas de Inglaterra (Norwich, Leicester). el estadio construido donde antes hubo una
En el invierno de 2012 llega a Millwall, el iglesia. Pero no Kane. A pesar de su extre-
equipo que catapultó a su ídolo Sherin- ma juventud, Kane no se dejó intimidar por

7 de febrero de 2015. Kane acaba de empatar contra el Arsenal en el minuto 56. Más tarde, al final del partido, logrará el 2-1 final. Es su primer derby del norte
de Londres como futbolista. Su hermano Charlie lo sigue desde un pub: tras el silbido final será izado en el aire e invitará a bebidas para todos los presentes
(Foto: Ian Kington / Stringer).
CLUBPERARNAU
los epítetos que llegó a escuchar (“Palabras
que un futbolista nunca escuchó antes”, se-
gún Dunne).
Un año después, “Hurricane” se enfrenta
al Millwall como oponente, vistiendo la ca-
miseta del Leicester. Para marcarlo se en-
cuentra precisamente Dunne, quien le su-
surra frases como: “Acércate a esa pelota
y te parto en dos”. Para decepción del rudo
defensor, Kane no se inmuta y permanece
impertérrito: ni le mira, ni siquiera se enco-
ge de hombros.
En 2014, Kane explicó que había hablado
con Sheringham una sola vez, el año an-
terior, durante un evento de beneficencia.
Quedó deslumbrado: “Cuando conoces a tu
ídolo no sabes qué decir”. Hablaron sobre el
Millwall. Teddy le dio solo un consejo para
su carrera: “Marca goles”. Sencillo de decir.
En septiembre de 2017, Sheringham bendi-
jo a Kane: “Harry tiene lo que yo tenía y aún
más”. Hasta el pasado 24 de enero, Sherin-
gham fue el entrenador del ATK, club indio
fundado en Calcuta en 2014 que tiene como
copropietarios a tres industriales hindúes,
una leyenda del cricket y el dirigente del
Atlético de Madrid, Miguel Ángel Gil Ma-
rín. Un equipo que declaró que “no quiere
competir, sino solo jugar”. Pero una serie
de malos resultados continuados termina-
ron por el momento con la etapa de Teddy
como entrenador.
En septiembre pasado, Sheringham
bendijo a Kane: “Harry tiene lo que yo
tenía y aún más”
En 2018 Tottenham tendrá un nuevo hogar.
White Hart Lane fue demolido después de
118 años de vida, pero está renaciendo en
P 57
el mismo lugar. Los arquitectos que ya di-
señaron el Emirates Stadium del Arsenal
también han diseñado las nuevas instala-
ciones de los Spurs.
101 goles en la Premier League con el mai-
llot de Tottenham en 142 partidos. Cuatro
goles más que Sheringham, con cien parti-
dos menos… Harry ahora puede apuntar al
récord de Jimmy Greaves (266 goles), que
nació en Manor Park, o sea, a solo cinco ki-
lómetros de donde lo hizo Kane. Greaves,
que ha sido el jugador más prolífico en la
historia del Tottenham y de todo el fútbol
inglés, pero que nunca ganó una liga…
“Harry Kane es uno de los nuestros”, canta
ahora la gente del Tottenham. Quien conoce
bien los asuntos internos del norte de Lon-
dres dice que semejante identificación, en-
tre un jugador y los aficionados, no se daba
desde la época de Steve Perryman (655
partidos disputados en los años setenta y
ochenta). Y él, “Hurricane”, no se molesta lo
más mínimo cuando la gente lo detiene por
la calle y le pide una foto: “Estoy feliz por-
que yo también soy un fan”.
Tommaso Giagni.
Colaboración especial
de la revista L’Ultimo Uomo
@lUltimoUomo
CLUBPERARNAU Ilustración: Marc Vicens
P 58

Miguel Fernández

FUNDAMENTOS DE LA EXPRESIÓN
CREATIVA DEL JUGADOR DE FÚTBOL
CLUBPERARNAU
E n el número 37 de The Tactical Room
hicimos una introducción al concep-
to de creatividad e inteligencia en el
jugador de fútbol. En el presente artículo,
que complementa al anterior, vamos a tra-
tar varios conceptos que se asocian a la
creatividad en los jugadores.
La creatividad no es un concepto universal,
sino que en el fútbol existe una creatividad
específica que deriva de las características
motrices y psico-emocionales del propio jue-
go y de quien participa en él. Si esto es así,
entrenar en la especificidad del juego puede
mejorar el acto creativo del futbolista.
Desde el punto de vista cerebral, la crea-
tividad no es solo una forma diferente de
actividad mental, sino que también está
presente en todos los jugadores (aunque al-
gunos crean que es privilegio de unos po-
cos). Esta permite al futbolista adaptarse a
las circunstancias cambiantes del juego y
con ella se pueden modificar las circuns-
tancias cuando es necesario.
La creatividad en el fútbol debe facilitar la
flexibilidad, la improvisación y la habilidad
de tener nuevas perspectivas de actuación,
pero siempre dentro de un contexto colec-
tivo de relaciones. En este sentido, Coca
(1985) apunta la importancia del elemento
creativo y posibilitador de respuestas en
contra de la rutina habitual o del automatis-
mo despersonalizante.
Pero, ¿qué se considera un futbolista crea-
tivo?
Cuando hago referencia a futbolistas con
personalidad creativa no me refiero solo a
los genios del fútbol (que son muy creati-
vos), sino también a aquellos jugadores que
improvisan, que intentan, que ensayan y que
realizan acciones innovadoras; a los jugado-
P 59
res originales a la vez que comprometidos
con el funcionamiento óptimo del equipo.
Leo Messi y Tata Martino, en la temporada 2014-2015.
Llegas a un club y te encuentras con gran-
des futbolistas juntos en el vestuario. ¿Qué
se le puede enseñar a jugadores como Mes-
si, Zidane, Pirlo, Neymar o Iniesta? Segu-
ramente a ellos más que entrenarlos habría
que gestionarlos y, sobre todo, ¡¡¡no cohibir-
les su creatividad!!!
Casais y Lago (2008) distinguen, entre los
rasgos de las personas creativas, cuatro as-
pectos:
• Fluidez: centrada en la habilidad para
producir un elevado número de respues-
tas novedosas en un tiempo determinado.
• Flexibilidad: como capacidad para pro-
ducir ideas diferentes y utilizar diversas
estrategias de resolución de problemas.
• Originalidad: referida a la capacidad de
ofrecer soluciones poco convencionales,
lejos de lo establecido o de lo usual.
• Elaboración: capacidad para desarro-
llar, completar una respuesta.
Un jugador creativo es aquel que sabe ac-
tuar en variadas situaciones y en distintos
espacios. Es un jugador inteligente que faci-
lita las acciones de los compañeros con sus
actos y agiliza el juego mediante una varie-
CLUBPERARNAU
dad de acciones técnico-tácticas que son
interpretadas por los compañeros, aunque
puedan parecer desordenadas en el parti-
do. Es un orden-ordenado que será inter-
pretado por el equipo y que debería haber
sido fomentado por el entrenador.
Por lo tanto, el jugador creativo es aquel que
es capaz de realizar acciones inéditas, pero
de una manera eficaz y adaptada a las di-
ferentes situaciones que ocurren en el jue-
go. Es decir, acondiciona sus acciones a las
necesidades del juego y lo hace de manera
novedosa. Pero hay un aspecto importante,
y es que la solución que encuentre debe ser
óptima y debe ser aplicada de forma ade-
cuada, resolviendo problemas que aparecen
en el juego. Este jugador crea acciones nue-
vas que también deben ser exitosas, ya que
de nada serviría que las acciones originales
no fueran en beneficio propio o del equipo,
perdiendo el balón o fallando ocasiones de
gol que requieren gestos más simples.
El jugador creativo es aquel que es
capaz de realizar acciones inéditas,
pero de una manera eficaz y
adaptada a las diferentes situaciones
que ocurren en el juego
David Silva, celebrando un gol en la presente temporada.
P 60
Para Castelo (1999), la creatividad del juga-
dor sería la capacidad de idear y ejecutar
nuevas soluciones que fueran imprevisi-
bles, aumentando el factor sorpresa (inicia-
tiva) del juego.
Los futbolistas creativos suelen encontrar
soluciones donde otros ven la oscuridad; las
ideas les fluyen, pudiendo encontrar con
mayor facilidad las respuestas adecuadas a
las situaciones novedosas a las que se en-
frentan. Es decir, en situaciones adversas
son capaces de crear respuestas inéditas
que les ayuden a resolver la incertidumbre
de la jugada.
“El jugador debe tomar conciencia de sus
acciones y descubrirse capacitado para
realizar algo nuevo, distinto, original, en
favor del equipo y, por supuesto, de uno
mismo” (Coca, 1985). Señala este autor
que deberíamos interesarnos más por el
“proceso creativo” o por la personalidad
creativa del futbolista que por la respuesta
creativa en sí misma. Comprobar cómo el
jugador se adapta a los cambios del juego o
cómo se adapta a los desafíos variables del
partido. Un futbolista creativo, aunque fa-
lle, se mostrará en todas las ocasiones di-
ferente, confiado en sí mismo, enteramen-
te dispuesto a comprometer su decisión en
un intento de lograr un resultado positivo,
sin miedo a fallar, con ganas de hacer lo
imposible por ser él mismo en esa faceta
creativa que le caracteriza.
Pero el proceso creativo o la personalidad
creativa del jugador se expresa en el juego
mediante unos fundamentos que desarro-
llamos a continuación.
CLUBPERARNAU
1.- LIBERTAD DE MOVIMIENTO
(PARA CREAR)
Las tareas de entrenamiento deben facili-
tar la libertad de movimiento para que los
jugadores tengan un amplio abanico de po-
sibilidades para resolver situaciones de jue-
go que no son estáticas ni repetitivas. Su-
primir tareas lineales, repetitivas, espacios
restringidos a jugadores o combinaciones
en las que se sepa cómo acabarán pueden
retraer la posibilidad de explorar el espacio
de juego.
Guardiola se refiere a Messi en los siguien-
tes términos: “Messi siempre está bien. Su
toma de decisiones siempre es acertada. En
instancias decisivas de Champions, el pe-
queño ganaba el partido solo. Daba el paso
al frente. Y es que los jugadores como Mes-
si se encuentran ellos mismos sus espacios.
Me daría vergüenza decirle dónde jugar”.
Pep Guardiola y Leo Messi, en mayo de 2012 (Foto: Miguel Ruiz).
Hasta el mejor entrenador es incapaz de
coartar la libertad de movimientos del fut-
bolista creativo, ya que es consciente de que
este buscará su hábitat natural en el mo-
mento exacto para realizar la acción más
correcta, más brillante. Resulta conveniente
P 61
que los jugadores tengan un espacio aproxi-
mado donde situarse, pero que este no sea
su mazmorra sino su punto de partida.
Hasta el mejor entrenador es incapaz
de coartar la libertad de movimientos
del futbolista creativo, ya que es
consciente de que este buscará su
hábitat natural en el momento exacto
para realizar la acción más correcta,
más brillante
Resulta curioso que muchos jugadores no
se perciben como creativos. Sin embargo,
durante los entrenamientos y partidos sus
acciones están llenas de creatividad. Hacen
jugadas originales y novedosas y que son
significativas para el funcionamiento del
equipo; por lo tanto, están creando. Resolver
una acción del juego, manejar la dificultad
de esta y lograr dar una respuesta acertada
son ejemplos de una creatividad que no es
reconocida por muchos futbolistas.
Aunque el futbolista no perciba estas ac-
ciones como creativas, verdaderamente lo
son, ya que la creatividad es intrínseca al
fútbol y es una capacidad básica para sub-
sistir en el juego.
Señala Castelo (1999) que la colocación es-
cogida por el jugador en las diferentes si-
tuaciones de juego refleja la fase cualitati-
va del pensamiento creativo y de madurez
táctica, basada en la capacidad de leer y va-
lorar rápidamente las situaciones, con el fin
de poder adoptar, de forma operativa, las
soluciones más eficaces para la tarea tácti-
ca de su propio equipo.
Para jugar con la movilidad de espacios sin
encorsetarse en una posición determina-
da, lo indispensable es que los jugadores
CLUBPERARNAU
se sitúen juntos en los espacios determi-
nantes, pudiendo intercambiar posiciones
y dinámicas entre ellos. De este modo, se
eliminan los especialistas, no existe lo pre-
decible y las interacciones aumentan las
posibilidades de acción. Esto provocará el
desasosiego en el equipo contrario, ya que
no sabrán qué jugador será el origen de las
jugadas, sobre el que podría aplicarse una
atención especial.
De este modo, el equipo se organiza sin in-
coherencias internas, generando un orden
propio en base al balón, pero a la vez tam-
bién un comportamiento variado dentro de
los cánones del estilo de juego que se utilice.
Los jugadores deben tener un sentimiento
conjunto del juego pretendido, pero a la vez
libertad para que su talento individual varíe
la actividad en cada momento, y todo esto
sin separar el juego en fases o transiciones,
ya que el juego es un todo y en esa globali-
dad hay que crear e innovar.
Los jugadores deben tener un
sentimiento conjunto del juego
pretendido, pero a la vez libertad
para que su talento individual varíe la
actividad en cada momento
Decía Guardiola que al Barcelona lo or-
denaba el balón, mientras que a otros
equipos les ordena el espacio. Ambos
conceptos son respetables. Por lo que no
abogamos es por equipos esclavos de un
sistema y de posiciones encorsetadas que
resten libertad de acción a los futbolistas.
Hay que promover actuaciones basadas
en la movilidad y variabilidad de acciones
que hagan a los jugadores más brillantes
desde el punto de vista táctico, desechan-
P 62
do ideales tan triviales como que un juga-
dor solo sirve para jugar en una sola posi-
ción y “de ahí no puede salir”.
La especialización del futbolista es un arma
de doble filo. Por un lado, son jugadores co-
nocedores de su posición o labores, pero
por otro son jugadores que desconocen la
globalidad que es característica del juego
en otras situaciones o zonas del campo.
Se puede argumentar que la especializa-
ción genera en el jugador procesos adapta-
tivos a una zona del campo, desde la cual
crea conexiones neuronales en aspectos de
distancias, movimientos, espacios, etc., que
lo convierten en un “experto”. Pero, ¿y si
por una acción de juego tiene que actuar en
otra parcela del campo? ¿Sabría sustituir a
un compañero que por circunstancias del
juego se ha movido buscando un espacio
que consideraba más adecuado?
El equipo que consideramos ideal es aquel
que compite “sin o desde las posiciones” en
base a un estilo de juego (modelo, filosofía
o ideal… como queramos llamarlo). Jugar de
esta manera genera un fútbol más dinámi-
co, ordenado bajo la referencia del balón, el
espacio, el compañero y el adversario, más
que a través de las zonas del campo o de un
sistema de juego estanco.
2.- EL ENGAÑO
El engaño es parte de la creatividad en el
fútbol. Tenemos que intentar que el contra-
rio no conozca nuestras intenciones y si las
conoce, innovamos y lo confundimos para
que no pueda contrarrestarnos. El futbolis-
ta, a través del entrenamiento, debe acos-
tumbrarse a crear respuestas diferentes en
función de la interpretación que haga de la
jugada; y eso se logra entrenándolo.
CLUBPERARNAU
Durante el entrenamiento el jugador debe
ganar en “experiencias de incertidumbre”,
explorando acciones nuevas que provoca-
mos con las tareas y dando respuestas al-
ternativas a las acciones que se proponen.
Al no tener un patrón de movimiento o de
actividad cerrado, el jugador innova para
adaptarse a las fluctuaciones que el propio
juego genera.
Al no tener un patrón de movimiento o
de actividad cerrado, el jugador innova
para adaptarse a las fluctuaciones que
el propio juego genera
Pelé, durante el Mundial de 1958.
Te hago pensar que voy a hacer una cosa y
resulta otra, me muevo para quedarme en
el sitio, te enseño el balón por la derecha y
me lo llevo por la izquierda… De eso se trata.
Los jugadores ingeniosos y atrevidos son
también los más propensos a engañar uti-
lizando su capacidad creativa para resolver
los problemas del juego.
3.- IMPROVISACIÓN
Un aspecto importante para la expresión
de la creatividad es la improvisación. Cas-
telo (1999) indica que los jugadores de fút-
P 63
bol actual expresan comportamientos téc-
nico-tácticos que, en términos generales,
se caracterizan por su adaptabilidad a las
situaciones momentáneas del juego en la
búsqueda de soluciones heterogéneas y
eficientes, por su anticipación (la capacidad
de discernir y prever las modificaciones de
las situaciones de juego) y, por último, por
su creatividad, que implica la capacidad de
idealizar y ejecutar nuevas soluciones que
sean imprevisibles, aumentando el factor
sorpresa del juego.
Aunque tengamos unas nociones tácticas
colectivas, nunca existirá un modelo o estilo
de juego que pueda prever todos los acon-
tecimientos que suceden en un partido, por
lo que el jugador debe estar acostumbrado
a decidir y a improvisar.
La improvisación es un proceso creativo
que facilita que el jugador pueda actuar de
manera espontánea (sin preparación pre-
via) en acciones novedosas que ocurren du-
rante el juego y que le puede ayudar a des-
cubrir nuevas formar de actuar, de pensar
o crear originales patrones (motrices) que
posibiliten que su juego se haga más fluido
y acorde a la situación experimentada.
Pero improvisamos con una intención…
4.- INTENCIONALIDAD
El futbolista improvisa las acciones sin ha-
berlas preparado con anterioridad, pero esa
improvisación tiene una intención; es más,
esta intención evita una improvisación ca-
rente de sentido. Así, las acciones inten-
cionales y voluntarias permiten al jugador
adaptarse a los cambios del partido y actuar
conforme al ideario de juego pretendido,
pero siempre con la posibilidad de variarlo;
y esto se hace a través de movimientos no
CLUBPERARNAU
rígidos sino inventados (improvisados).
Por lo tanto, el jugador realiza sus accio-
nes creativas mediante movimientos que
tienen una intención. Y son la novedad y
la originalidad de estos lo que provocan el
momento cuando decimos que se están ha-
ciendo acciones creativas. Toda esta inven-
tiva o creatividad necesita consciencia. Sin
consciencia no hay creatividad, no hay me-
canismo de relación social, no hay talento,
no hay inteligencia colectiva (Coca, 2006).
Johan Cruyff y Wim van Hanegem, en un Ajax-Feyenoord de 1969.
Si el jugador no es consciente de la inten-
cionalidad de sus acciones y solo reproduce
una indicación o solución del entrenador no
podrá encontrar la solución creativa o no-
vedosa para enfrentarse a situaciones im-
previsibles, por lo que el entrenador, aún sin
pretenderlo, coarta su potencial de acción.
Si el jugador no es consciente de la
intencionalidad de sus acciones y solo
reproduce una indicación o solución
del entrenador no podrá encontrar la
solución creativa o novedosa
Indican Casais y Lago (2008) que la es-
tructura expresivo-creativa se manifiesta
en cada movimiento intencional cuando el
sujeto valora desde su interpretación per-
sonal cada episodio del juego en que está
P 64
presente y selecciona, entre el repertorio
de planes de actuación que la situación le
ofrece, aquel que aparentemente mejor se
acomoda a su propia personalidad.
Para estos autores no existe un plan de ac-
tuación ideal y único para resolver cada si-
tuación del juego. Cada jugador, al interpre-
tar personalmente una situación, elabora
un proyecto de actuación propio que para él
es el mejor (sin olvidar la intención del co-
lectivo del que forma parte).
5.- CLARIDAD
“Los jugadores geniales han sido siempre, y
son, los que actúan con un sentido más cla-
rividente, más vigilante, más conscientes
del juego. Y cuando alguien afirma de uno
de esos futbolistas “qué fácil lo hace todo”
está reconociendo, entre otros aciertos, la
perspicacia y sagacidad de su conciencia”
(Coca, 1985 p. 264).
Un jugador debería tener en su cabeza varias
opciones de pase antes de que el balón le llega-
ra a los pies. La claridad para discernir entre
las distintas oportunidades de acción ayuda a
que tenga que elegir la óptima para su equipo
en función de su capacidad técnico-táctica.
Andrés Iniesta afirma en una entrevista
que “…es cierto. La presión hace el juego
cada vez más complicado, por lo que siem-
pre intento tener una jugada más, una al-
ternativa en la cabeza para cuando reciba
el pase al pie”.
Esta genial referencia hace mención a as-
pectos ya comentados, como el hecho de
crear en beneficio colectivo, hacerlo de for-
ma eficaz y original, generar acciones mo-
trices innovadoras, anticipar las jugadas…
que provocan que jugadores creativos como
Iniesta sean distintos de los demás.
CLUBPERARNAU P 65

6.- INTUICIÓN • La intuición como “juicio experimenta-

“El fútbol necesita más de la
intuición que del físico”
(Andrés Iniesta).
do”. Suele ser característica de jugado-
res más veteranos o con más partidos
disputados, ya que con solo observar una
acción de juego se hace cargo de esta y
sabe cómo hay que actuar. Estos jugado-
res, con solo ver la dinámica de la jugada,
ya saben hacia dónde derivará.

Para Coca (1985), “el futbolista intuitivo es

creador, y proporciona al fútbol una diná-
mica y una espectacularidad de la que fre-
cuentemente carece con jugadores rutina-
rios, con comportamientos mecanizados y
distraídos, que no se da cuenta de lo que
sucede en el campo hasta que no lo tiene
delante mismo de su posición o sitio en el
esquema táctico de su equipo. Y reacciona-
rá tarde, cuando ya no haya tiempo de re-
plicar al oponente, por la sencilla razón de
Andrés Iniesta, en la presente temporada. que no supo prever, intuir, suponer justifi-
Intuir la jugada oportuna es verla instan- cadamente lo que se le venía encima”.
táneamente con claridad y sin necesidad
de razonarla. Por una especie de inspira-
ción, el genio sabe lo que necesita hacer
en cada momento, como si una luz interior
lo guiara (Olivós, 1997). Para este autor la
intuición se encuentra en el polo opuesto
al razonamiento, es decir, se trabaja en el
subconsciente, el cual ofrece al jugador
(tras observar y procesar) soluciones de
una manera automática.
Hay dos tipos de intuiciones:
• La intuición como “sospecha”. Esta es
el presentimiento de que una acción de
juego es la más adecuada en una deter-
minada situación. Este tipo de intuición
es muy válida para generar alternativas.
Es la intuición propia de los jugadores Günter Netzer conduce el balón, bajo la mirada de Wolfgang Overath. Dos de
creativos. los mejores centrocampistas de la historia del fútbol alemán.
CLUBPERARNAU
Por lo tanto, la intuición facilita el desarrollo
de los procesos creativos. Así, la intuición de-
riva de la calidad y creatividad del futbolista.
7.- FLEXIBILIDAD
El jugador de fútbol creativo se caracteriza
por su flexibilidad psicomotriz. Este tipo de
jugador es aquel capaz de observar, de rela-
cionar acontecimientos y asociar estímulos
internos y externos con las posibilidades de
acción que percibe durante el juego. Si se
las coartamos en los entrenamientos me-
diante ejercicios lineales con finales prefija-
dos limitamos esta capacidad.
Cuando estas asociaciones entre el juego, sus
posibilidades y las necesidades (individuales
y colectivas) no se han realizado antes, se dice
que el jugador ha realizado una acción origi-
nal, lo que significa que es capaz de realizar
conexiones nuevas entre los anteriores ele-
mentos (juego-posibilidad y necesidad).
Por último, los jugadores creativos demues-
tran su flexibilidad mediante el manejo de
variadas respuestas frente a situaciones
parecidas. Son capaces de adaptarse a dife-
rentes situaciones, por lo que no tiene senti-
do entrenarlos como lo hemos hecho tradi-
cionalmente, es decir, por medio de órdenes
rígidas o condicionando los ejercicios de tal
manera que no tengan la posibilidad de in-
novar. Aunque necesitemos una respuesta
válida (en función de lo que pretendamos),
esta debe ser variada.
No tiene sentido entrenarlos como
lo hemos hecho tradicionalmente, es
decir, por medio de órdenes rígidas
o condicionando los ejercicios de tal
manera que no tengan la posibilidad
de innovar
P 66
Por lo tanto, ¿cuál es la labor del entrena-
dor como responsable de la conservación
de estos “fundamentos de la creatividad” de
los futbolistas?
Todo niño cuando empieza a jugar al fút-
bol es un sistema creativo. La clave es man-
tener la creatividad mientras crece. El en-
trenamiento tradicional se ha dedicado a
ahuyentarla en vez de fomentarla, consi-
guiendo inhibirla conforme se iban supe-
rando etapas. El principal cometido del pre-
parador debería ser presentar el juego en
los entrenamientos sin constantes órdenes
o mandamientos, y será el niño mediante
su expresión motriz el que pueda generar
soluciones creativas a los acontecimientos
que se le van presentando. De este modo
la creatividad aparece en el jugador princi-
palmente como un método de subsistencia
y será mediante su constante convivencia
con la incertidumbre conforme va buscan-
do alternativas, apareciendo una potencial
capacidad de solución que le permitirá sos-
tenerse en el juego.
El comportamiento del entrenador como
promotor de la creatividad se basa en:
1. Saber transmitir dinamismo y pasión en
los entrenamientos. El entusiasmo y la fir-
meza en su labor despertarán el deseo del
jugador por aprender nuevas facetas del
juego y con ello aumentar sus capacidades.
2. En la medida de lo posible, los comporta-
mientos novedosos deben ir acompañados
de una reacción positiva del entrenador.
3. Adaptar el nivel de las tareas del entre-
namiento al nivel de los jugadores y el
equipo para no crearles ansiedad al sen-
tirse superados por los retos que se les
propone. Siempre el reto debe percibir-
se por el jugador como alcanzable y este
CLUBPERARNAU
creará la forma de conseguirlo. Hay que
adaptar el entrenamiento a los jugadores
y no al contrario.
4. Proporcionar variadas y novedosas ex-
periencias de acción. Se deben introducir
variantes que ayuden al jugador a crear
modelos adaptativos a las nuevas situa-
ciones propuestas.
Hay que adaptar el entrenamiento a
los jugadores y no al contrario
El entrenador tiene que ser innovador y
debe fomentar acciones inspiradoras en los
futbolistas con talento para que el equipo
progrese en su ideal de juego. También es
importante la voluntad del entrenador de
no obstaculizar para que el equipo pueda
explotar al máximo sus talentos.
El entrenador debe fomentar comportamien-
tos innovadores de los jugadores. Para ello, el
entrenamiento debe ser un proyecto de mo-
delo basado en la innovación, dejando, en la
medida de lo posible, a los jugadores libres en
sus actuaciones, pero dentro de la propia “pro-
tección” de los comportamientos dispuestos
en la forma de jugar que se pretende.
De este modo, la singularidad de la creati-
vidad funciona cuando, gracias al talento
organizado de los futbolistas, estos confían
en que actúan con libertad para aplicar sus
actuaciones y habilidades, mientras que el
entrenador es capaz de controlar estas no-
vedades de acción en base a una forma de
jugar. Así, el entrenador debe variar sus
grados de intromisión e implicación en las
acciones que se realizan por los futbolistas
durante el juego.
Para actuar de esta manera se necesita un
entrenador atrevido, no intervencionista,
P 67
bien informado de la complejidad del juego
y que tenga la suficiente confianza en sus
jugadores para permitir que puedan inno-
var sin perder el orden requerido por el co-
lectivo.
El propio entrenador debe ser creativo a la
hora de plantear las tareas. Es decir, dentro
de la planificación elegida, al proponer un
ejercicio se deben potenciar las respuestas
y actitudes no lineales, promoviendo pos-
turas y comportamientos creativos. Entre
estos comportamientos también cuentan
los del entrenador como, por ejemplo: saber
rectificar a tiempo o modificar una tarea en
base a situaciones circunstanciales que se
den en el entrenamiento. Las adaptaciones
y fluctuaciones para interpretar si seguir o
no una tarea es un elemento de ductilidad
del que la propone. Si un ejercicio está sa-
liendo bien, ¿por qué pararlo si la dinámica
es la adecuada? ¿Porque estaban estipula-
dos dos minutos y no cuatro? ¿Por qué te-
nemos que controlarlo todo? La creatividad
y la optimización deportiva dimanan más
de la interpretación que del control. El arte
de entrenar, lo llaman…
Uli Hoeness y Helmut Schön, durante un entrenamiento de la selección de
Alemania Federal, en 1974 (Foto: DPA).
El entrenador no debería utilizar tareas ni
órdenes inflexibles. Debe tener en conside-
ración que la imposición sin justificación de
comportamientos a los jugadores para que
CLUBPERARNAU P 68

actúen de determinada manera no debe ser
el fin de la preparación de los futbolistas. No
estamos para imponer, sino para lograr una
apertura de conocimientos y para que estos
los desarrollen dando soluciones creativas
en la trama del juego.
No estamos para imponer, sino para
lograr una apertura de conocimientos
y para que estos los desarrollen
dando soluciones creativas en la
trama del juego
Por último, el preparador debe huir de lo que
Coca (1985) denomina “ritualismo o rutina-
rismo”. Si el jugador siempre responde de la
misma manera a los ejercicios por las cos-
tumbres adquiridas e impuestas, se coaccio-
na su creatividad. Si se entrena siempre de la
misma forma, siempre tendrá la misma res-
puesta, convirtiendo el entrenamiento en una
obligación rutinaria de su quehacer diario.
Para evitar estas situaciones el entrenador
debe innovar y variar, para que a la vez que
intenta conseguir el juego que pretende no
coarte la capacidad creativa del futbolista.
Miguel Fernández.
-Entrenador-
@MiguelDknol

REFERENCIAS
Casais, L., y Lago, C. (2008). La creatividad motriz en los deportes de equipo: una apli-
cación al fútbol. Revista fútbol: cuadernos técnicos. 43, 79-95.
Castelo, J. (1999). Fútbol. Estructura y dinámica del juego. Barcelona. INDE.
Coca, S. (1985). Hombres para el fútbol. Madrid. Gymnos.
Coca, S. (2006). Dirección de Equipos. Curso Nivel 3 de Entrenador Nacional de Fútbol.
Madrid: Real Federación Española de Fútbol.
Olivós, R. (1997). Fútbol: Análisis del juego. Sevilla. Wanceulen.
Alberto López Frau

CÓMO
JUGABA
PUSKÁS
CLUBPERARNAU P 70

H ay mucha literatura sobre el gran

Ferenc Puskás, pero conocemos
menos sobre su juego. ¿Cuáles eran
sus cualidades futbolísticas? Vamos a in-
tentar aportar un poco de luz sobre la for-
Hidegkuti jugaba en la línea media, junto a
Jozséf Bozsik, el verdadero mediocentro,
en tanto József Zakariás actuaba como un
medio que se convertía en cuarto defensa.
Puskás lo hacía en medio de la línea de cua-
ma en la que se desenvolvía en el terreno tro atacantes, cayendo a la banda izquierda.
de juego, cómo se adaptó tácticamente a la Desde ahí orientaba el cañón que tenía por
selección y años más tarde al Real Madrid, pierna izquierda para perforar las redes
su relación futbolística con Hidegkuti, Koc- contrarias. No se puede entender el éxito
sis o Czibor, por un lado, y con Di Stéfano y de Puskás en la selección sin nombrar a Hi-
Gento, por el otro… degkuti y analizar su cambio de posición en
La selección húngara que nace a comienzos el campo, primero con Bukovi y más tarde
de la década de los cincuenta es referencia consolidado por Sebes.
obligatoria en la historia del fútbol. Podría-
mos denominar aquel sistema de juego que
empleaban como un 4-2-4 que se desdobla-
ba en 3-3-4 si tenían el balón. Puskás, que
había debutado en el ya lejano 1943, cuando
la formación más utilizada era la WM (3-2-
2-3), supo adaptarse de maravilla a su nuevo
rol de interior de punta [en aquella Hungría,
él y Czibor eran los interiores y al mismo
tiempo, los hombres más adelantados].
Estamos en una fase intermedia del falso
9 tal y como lo conocemos ahora. Márton
Bukovi, en el MTK de Budapest, lo utilizaba
asiduamente. Lo explica muy bien Nándor
Hidegkuti, delantero húngaro en la década Puskás en 1954. A su espalda, Hidegkuti.

de los cincuenta y jugador del MTK, en el li-
bro “Puskas sobre Puskas”, escrito por Rogan
Taylor y Klara Jamrich. Bukovi comenzó a
utilizar a Hidegkuti de segundo punta, por-
que arriba del todo era más fácil marcar-
le. A su vez, Gusztáv Sebes, seleccionador
húngaro, lo implantó en la selección.
La principal virtud de Puskás era
precisamente esa: su facilidad para
entender el juego
Puskás era un jugador muy inteligente. Los
cuatro delanteros en línea sólo aparecían
en la pizarra. Sobre la hierba asistíamos a
un intercambio de posiciones permanen-
te, sobre todo entre Kocsis, compañero de
Puskás por dentro, e Hidegkuti. Puskás era
fundamentalmente un jugador muy inteli-
gente. Las grandes ideas sólo triunfan con
grandes jugadores y, por encima de todo,
con jugadores inteligentes. La principal vir-
tud de Puskás era precisamente esa: su fa-
cilidad para entender el juego.
CLUBPERARNAU
ENTENDIMIENTO DEL JUEGO
Siendo jugadores radicalmente distintos,
una de las características que más me fasci-
nan de Andrés Iniesta es su capacidad para
hacer lo que más conviene en la posición
donde le toque jugar. En ocasiones veíamos
a Iniesta partir de la posición de falso ex-
tremo izquierdo y convertirse en un orga-
nizador natural de juego desde ese reducto
de la banda izquierda. Años después, como
interior, sigue ofreciendo un máster diario
de cómo, cuándo y por qué, da un pase rá-
pido, aguanta más o elige una conducción.
No hay una acción mejor que otra, sino una
decisión más correcta que otra. Andrés no
se equivoca casi nunca.
A cada jugada aplica un sentido común sólo
al alcance de los más grandes. Con Puskás
sucedía algo parecido. Solía ir allí dónde ha-
bía un espacio. Esa inteligencia táctica es
clave para que un equipo, independiente-
mente del dibujo, esté equilibrado.
Puskás activaba su radar de alrededores
para ir a la posición que más podía ayudar
a su equipo. Y desde allí poner al servicio
del mismo sus cualidades. Hay partidos que
explican de maravilla el esplendor del jue-
go de Puskás. Uno de los más espléndidos
en este sentido es la semifinal de los Juegos
Olímpicos de Helsinki, en 1952.
PRECURSORES DEL FÚTBOL TOTAL
Hungría fue una sinfonía perfecta frente
a Suecia, a la que venció por 6-0. Puskás
reconoció aquel encuentro como una de
los más corales que jugó en su carrera de-
portiva. De hecho sólo se enfadó por erro-
res sencillos de sus compañeros a la hora
de ejecutar pases fáciles. No porque no
le dieran el balón, sino porque esos fallos
P 71
no permitían desarrollar la idea colectiva
como equipo.
No podemos reducir a Puskás a un jugador
con un gran disparo con la pierna izquierda,
que por supuesto lo tenía. Fue mucho más.
Y para entender su juego hay que comen-
zar destacando su inteligencia táctica.
La Hungría de los Juegos de 1952 se acer-
có mucho a lo que años después conocimos
como “Fútbol Total”. Fue un equipo com-
pleto en el que atacaban todos y defendían
todos. Por eso el enfado de Puskas cuando
se fallaba en lo fácil, pues esos errores no
permitían desplegar la idea en su totalidad.
Otro partido que explica muy bien el carác-
ter de Puskás dentro del campo y su forma
de entender el juego es el Italia-Hungría de
1953 (victoria húngara por 0-3, con doble-
te de Puskás), para la inauguración de las
nuevas instalaciones del Olímpico de Roma.
Hungría ganaba por 0-2 y Grosics, el por-
tero magiar, aguantaba el balón ganándole
segundos al cronómetro. Contra este tru-
co, Puskás le gritaba denodadamente para
continuar atacando. Todos atacando y de-
fendiendo a la vez. Quería jugar de la mis-
ma forma siempre, resultado al margen.
CLUBPERARNAU
LECTURAS DISTINTAS
EN LOS PARTIDOS
En lo estrictamente futbolístico, Puskás,
que fue un jugador potente, pero no muy
veloz, retrasó su posición, más si cabe, en
aquel partido. Se sumó al toque corto que
caracterizaba a los Mágicos Magiares. Era
un toque para distraer, no para acumular
posesión. Cuando la defensa de Italia iba a
buscarles, Puskás ponía balones a sus es-
paldas y los restantes atacantes jugadores
húngaros, más veloces, atacaban esos es-
pacios, desnudando a su rival para termi-
nar ganando por 0-3.
Los capitanes del Inglaterra-Hungría de 1953: Billy Wright y Ferenc Puskás.
En el famoso 3-6 de Wembley ante Ingla-
terra, Hidegkuti, jugando de falso 9, se iba
constantemente hasta el mediocampo y el
central inglés Harry Johnston no sabía qué
hacer. A veces s iba tras él, pero en la si-
P 72
guiente jugada de repente dudaba. Y en la
duda, Inglaterra sucumbió con estrépito.
Ese día fue un Puskás distinto que leyó el
partido de otro modo. No hacía falta sacar
a los ingleses a base de toques, a diferen-
cia del enfrentamiento con Italia. Hidegkuti
les hizo dudar de tal forma que les descolo-
có. Puskás lo aprovechó, recibiendo mucho
más cerca del área. Así llegó uno de sus go-
les más famosos. El que marcó pisando el
balón hacia atrás, sentando al capitán inglés
Billy Wright, y disparando al palo del porte-
ro, acción que mereció este cruel e históri-
co comentario de Geoffrey Green, reputado
periodista de The Times: “Billy Wright se
precipitó tanto como un bombero corriendo
hacia el fuego equivocado”.
VÍDEO:
El histórico gol de Puskás
en Wembley
ADAPTARSE A LOS COMPAÑEROS
Otra virtud de Puskás era su capacidad para
adaptar su juego a las virtudes de sus com-
pañeros. Hemos analizado la especial socie-
dad que compartía con Hidegkuti. También
fue capaz de conectar muy bien con Sándor
Kocsis, Cabeza de oro.
Kocsis era lo más parecido a lo que hoy co-
nocemos como un ‘9’ de área, especialmen-
te bueno en el remate de cabeza, de ahí su
apodo, aunque formalmente partía desde la
posición de interior derecho.
Puskás no era un extremo, sino que rehuía
la banda, especialmente la izquierda, por-
que la velocidad nunca fue su punto fuerte.
Pero las veces que caía a banda en la selec-
ción era en gran parte para poner balones
en la cabeza de Kocsics.
CLUBPERARNAU P 73

El propio Puskás lo reconocía en una en- DE PUSKÁS A PANCHO

trevista con la BBC en 1977: “Nunca fui un Para Di Stéfano y Gento, Puskás siempre
jugador puro de banda, no me gustaba ver fue Pancho. Pancho por aquí, Pancho por
reducidos los espacios en el campo, pero allá. Di Stéfano se deshacía en elogios hacia
tener como compañero un rematador de él. Gento habla con devoción sobre Pancho.
cabeza tan maravilloso como Sándor me Puskás se adaptó de maravilla a los dos. Su
hizo replantearme este hecho en más de genialidad permanecía intacta y lo que hizo
una ocasión”. en el Madrid fue adaptar su habilidad a es-
pacios más reducidos: tenía tanta que se lo
podía permitir.
Puskás llegó a Madrid en 1958. No hizo
buenas migas de inicio con Carniglia, el
técnico. Sus problemas con el idioma y el
exceso de peso fueron un inconvenien-
te al principio. Pero Pancho fue humilde.
No tardó en adaptarse e ir convenciendo a
todo el mundo.

El alemán Werner Liebrich entra por detrás a Puskás en partido de la fase preli- Carniglia le colocó de interior
minar del Mundial 1954 y le produce una grave lesión en el tobillo.
izquierdo y desde allí se tuvo que
La derrota ante Alemania en la final del adaptar al equipo. Di Stéfano era en
Mundial de Suiza en 1954 fue el principio parte el Hidegkuti del Madrid
del fin de un equipo glorioso. Puskás jugó
mermado y eso influyó en la derrota, sin
Carniglia le colocó de interior izquierdo y
duda. Aunque a nivel de resultados Hungría
desde allí se tuvo que adaptar al equipo. Di
se recuperó y llegó a encadenar otra racha
Stéfano era en parte el Hidegkuti del Ma-
magnífica de goles y partidos sin perder,
drid, incluso abarcando más metros que el
algo mágico se rompió en aquel equipo de
falso 9 húngaro. Puskás se adaptó al rol de
ensueño. Dentro y fuera del grupo. Sebes,
Alfredo y perfeccionó su puntería. En su
el técnico, y Puskás se mantuvieron unidos,
primer curso consiguió 21 goles, por 22 de
pero fueron años duros y la desconfianza
Di Stéfano. En las cuatro temporadas si-
se apoderó del grupo. La inestabilidad polí-
guientes, Pancho fue el máximo goleador
tica no ayudó. Si ganaban, eran el espejo de
de la liga española.
un régimen político muy duro. Si perdían, el
apoyo se reducía a la nada. En algunos partidos, con Kopa y Rial en el
once, era Puskás quien caía muchas veces a
Puskás fue adquiriendo peso y eso le obli-
la banda derecha, para desde allí buscar un
gó a convertirse en un futbolista distinto.
disparo y sobre todo dejar el pasillo izquier-
Se reconvirtió para jugar en menos metros.
do liberado para las carreras de Gento. Gen-
Estaba naciendo el Puskás que triunfó en el
to era diferente a Czibor. El extremo húnga-
Real Madrid.
ro que fichó por el Barça era más técnico e
CLUBPERARNAU
Di Stéfano y Puskás.
imaginativo, en tanto el español era más ver-
tical y directo. Puskás detectó rápido seme-
janzas y diferencias entre ambos.
Más tarde, ya con Mateos y Del Sol como
compañeros, Puskás esperaba los mo-
vimientos de Di Stéfano antes de decidir
dónde se movería él. Eso les convirtió en
una doble punta mortífera, en la que Pus-
kás actuaba casi siempre como el jugador
más adelantado.
De hecho, hay un detalle que define a la per-
fección cómo Puskas aceptó el rol de líder
indiscutible de Di Stéfano. Con ambos em-
patados a 21 goles, el tanto número 22 de Al-
fredo en la liga llegó tras un pase de Pancho
ante el Granada, en una jugada en la que po-
dría haber marcado él perfectamente.
Con Gento aprendió a correr sin balón. Me
explico: Gento pedía siempre el balón al
espacio, dado que su velocidad era incon-
P 74
tenible. Puskás le asistió en innumerables
ocasiones por la banda izquierda. Según
lanzaba el pase, Pancho corría hacia el área
sin la pelota, en busca del posterior centro.
Eso fue algo inédito en él hasta aquella épo-
ca, pero como declaró en una entrevista al
siario ABC en 1980: “Me tuve que adaptar
a Paco y Alfredo, ¿Cómo no hacerlo? Eran
los mejores en lo suyo, los tres éramos más
fuertes así”.
Atrás quedó el Puskás tan asociativo, capaz
de ir a la posición que más interesase al co-
lectivo en cada jugada. Así había sido con
Hungría. En el Madrid fue un jugador más
práctico, igual de decisivo, pero con carac-
terísticas distintas en el campo.
LA FINAL DE LA
COPA DE EUROPA 1960
La final de la Copa de Europa de 1960 está
inscrita con letras de oro en la historia de la
competición. El Madrid doblegó por 7-3 al
Eintracht de Frankfurt. Es probablemente
el partido más redondo de aquel equipo que
se coronó por quinta vez consecutiva como
campeón de Europa en un partido excelso.
Canario, Del Sol, Di Stéfano, Puskás y Gen-
to. De carrerilla, la delantera mágica del
Madrid. Años antes hubo futbolistas más
técnicos en la posición de Canario, como
fueron Kopa o Didí, pero los tres “mons-
truos” nunca funcionaron tan bien como
con Canario y Del Sol en el once. Canario
abría el campo en la derecha, generaba es-
pacios por dentro, Del Sol era vertical, inci-
sivo, un abrelatas en diagonal, conduciendo
el balón.
Eran cinco jugadores absolutamente com-
plementarios y para Puskás no era nove-
doso adaptarse a las características de sus
CLUBPERARNAU P 75

Uno de los goles de Di Stéfano en la final de 1960, con Puskás al fondo.

compañeros, pues precisamente de ese en lo técnico, potente, que no rápido, hábil

modo había contribuido a fabricar la mejor en espacios cortos y con una cabeza privi-
Hungría de la historia. legiada. Su forma de entender el juego le
hizo grande. Mientras el físico le acompañó
tuvo un plus, pero cuando su cuerpo ya no
Fue un jugador extremadamente fue un aliado continuó siendo un grande.
inteligente dentro y fuera del campo,
sensible a su entorno Puskás fue distinto, Pancho es eterno.

Alberto López Frau.

Puskás hizo cuatro goles en la final, Di @Albercampeontv
Stéfano tres. Fue tremendo. Igual que
nada fue igual después de la final del
Mundial de 1954 para Hungría, tampo-
co lo fue para el Real Madrid después de
aquella final de Glasgow.
Pero quedándonos con lo importante, el
Puskás futbolista, podemos establecer va-
rias conclusiones. Fue un jugador extre-
madamente inteligente dentro y fuera del
campo, sensible a su entorno. Muy bueno
“Todas las
CLUBPERARNAU P 76

religiones,
artes y
ciencias son
ramas del
mismo árbol”
(Albert Einstein)

Estructurar un equipo de fútbol no es tarea sencilla. El entrenador

tiene varias ideas en su cabeza y tiene que ir descomponiéndolas
una tras otra, devanándose los sesos hasta conseguir que todo
funcione. A veces ni siquiera él mismo sabe cómo se ha logrado. Pura
alquimia. Así, en este saber que es el dudar y el intentarlo a la vez,
surge el papel del entrenador a la hora de construir su equipo.

LOS MOTORES DE JUEGO

EN EL FÚTBOL
CLUBPERARNAU P 77

M uchas veces el equipo funciona

como un coche: hay que engrasar
las piezas y ponerlas en el engra-
naje correcto; y otras muchas veces no es
fácil, es como intentar la cuadratura del cír-
culo. Esa titánica tarea del entrenador es la
que repercute a la hora de diseñar su cade-
na de montaje, al crear los cimientos de lo
que será su equipo de fútbol.

“EPPUR SI MUOVE”
(Y SIN EMBARGO, SE MUEVE)
Esta frase, supuestamente enunciada por
Galileo Galilei al defender la teoría helio-
céntrica (el Sol es el centro en torno al cual
giran los planetas), puede servirnos para
entender lo que de alquimia tiene la crea-
ción de un equipo de fútbol, donde nada
se intenta dejar al azar. Galileo nos guiará
para hablar de otro tipo de teoría más hu-
mana: el holismo o la teoría holística. De la
suma de ambas teorías podremos extraer
conocimiento para que el entrenador logre
su objetivo. Iremos de lo amplio a lo espe-
cífico en un viaje donde lo concreto y lo di-
fuso se entrelazarán, pues todo, desde las
estrellas más remotas del universo hasta el
animal más pequeño de la Tierra, está com-
puesto del mismo material: átomos. Y vere-
mos cómo en esa encrucijada entre ciencia
y arte la alquimia del fútbol alumbra vida.
El Sol que calienta a todos:
los motores de juego primario
Cuando un entrenador está moldeando su
equipo siempre tiene en la cabeza quiénes
serán los jugadores importantes y el rol que
les asignará a cada uno. Lo que hemos deci-
dido llamar “motores de juego primario” no
son más que aquellos que ordenan a través
Galileo, obligado a abjurar de sus ideas
(Pintura de Joseph-Nicolas Robert-Fleury).
del balón a su equipo. Y lo hacen mediante
dos variables: el volumen de juego y la velo-
cidad de balón.
Entendemos por “volumen de juego” la ca-
pacidad que tiene el equipo, mediante pases,
para organizarse en posiciones adecuadas
para atacar la portería contraria. “Velo-
cidad de balón” sería, por lo tanto, cuánto
de rápida o lentamente se genera ese volu-
men. Ambos conceptos están relacionados
con otros dos más conocidos para el gran
público: amplitud y profundidad. El uso de
la amplitud, para ordenar al equipo, y de la
profundidad, para superar líneas rivales,
nos determinará el volumen de juego final.
Lo que hemos decidido llamar
“motores de juego primario” no son
más que aquellos que ordenan a
través del balón a su equipo
Los cuerpos celestes:
los motores de juego secundario
Igual que el Sol calienta la Tierra, la Luna
es decisiva en otras parcelas, como su in-
CLUBPERARNAU
flujo en las mareas o el aumento de la du-
ración del día. E igual que los “motores de
juego primario” permiten generar volumen
de juego, los secundarios permiten “esti-
rarlo”, ser la siguiente pieza del engranaje.
En ocasiones pueden llegar a ser primarios,
dependiendo del club en el que estén y su
ascendencia sobre el grupo.
Las órbitas: los ventiladores
Los planetas giran alrededor del Sol, pero
no de cualquier manera y no todos del mis-
mo modo. Dado que el volumen de juego y
la velocidad de balón deben determinar un
fin, esto es, la consecución del gol, se nece-
sita que existan trayectorias que permitan
su camino, aquellos “caminos” que el balón
deberá recorrer para alojarse en la red. Cual
electrones libres, a veces con velocidades
distintas, los “ventiladores” son quienes
permiten que todo llegue a buen término
gracias a sus movimientos.
El Sistema Solar.
La gravedad: las constantes
Igual que la gravedad ejerce su influjo so-
bre la materia, las “constantes” hacen exac-
tamente lo mismo. Siempre están ahí cuan-
do su equipo las necesita y siempre hay que
contar con ellas cuando se presente la ecua-
ción (el partido), estén en un gran momento
de forma o no.
P 78
La materia oscura: el armazón
La materia oscura no emite ninguna ra-
diación electromagnética, al contrario que
la luz, pero sabemos que está ahí. Pasa lo
mismo con el “armazón”. Quizá sus funcio-
nes no son las más placenteras para los es-
pectadores, pero son el pegamento que une
todo lo demás.
EQUIPOS Y EJEMPLOS
El Barça de
Guardiola tenía
a Xavi Hernán-
dez como “mo-
tor de juego pri-
mario”, él era
quien mecía la
pelota de lado a
lado y supera-
ba líneas (am-
plio-profundo), Xavi e Iniesta.
y cuando se
encontraba una pequeña rendija, actua-
ba Andrés Iniesta, “motor de juego secun-
dario” (sin Xavi, Iniesta ha tenido que ser
“motor de juego primario”), mediante sus
conducciones de balón para atraer al rival y
resquebrajar la defensa. Todo eso se podía
hacer gracias a que el volumen de juego per-
mitía a Dani Alves, Eto’o, Henry o Pedro, los
“ventiladores”, poder asentarse en los luga-
res óptimos para su desempeño. Así, Andrés
iniciaba la carrera con balón y Alves y Pedro
corrían a los espacios determinados. Y si el
ataque se atascaba, de la nada podía surgir
Messi, cual “constante”, para decidir que el
partido lo ganaba él. Y cuando el equipo per-
día el balón, ahí estaban Busquets, Puyol o
CLUBPERARNAU
Piqué, siempre alerta, permitiendo que todo
siguiera unido, el “armazón” que permite el
funcionamiento del equipo.
Modric y Kroos.
Luka Modric es un “motor de juego prima-
rio” en el Real Madrid. Su capacidad para
ordenar al equipo a través del balón está
fuera de toda duda. Toni Kroos, igual que
Iniesta, podrían ser motores primarios si
fuera necesario, pero ellos han continuado
la labor de Xavi o Modric en las etapas en
las que el equipo logró sus mejores éxitos.
Marcelo recorre la banda infatigable, mien-
tras Benzema revolotea cayendo a los cos-
tados y Cristiano Ronaldo siempre aparece
para definir. Si algo va mal, Casemiro o Ser-
gio Ramos estarán al quite.
Pirlo dominaba el equipo a su antojo en la
Juventus de Conte, mientras que Vidal y
Marchisio eran perros de presa que conti-
nuaban la labor de su compañero. Lichtstei-
ner agrandaba el campo, mientras Tévez y
Llorente picoteaban y Chiellini oteaba todo
desde la retaguardia. Y si no se lograba un
resultado positivo, al menos no se perdía,
pues estaba Buffon, “constante” desde la
portería, bajo los palos.
P 79
Pirlo y Marchisio.
Igual que cada planeta es distinto y tiene
sus peculiaridades que lo distinguen de los
otros, cada “motor”, “ventilador” o “cons-
tante” es distinto. Así pues, no es igual Xavi
que Modric o Verratti, Iniesta que Kroos o
Saúl, o Messi que Cristiano Ronaldo. Cada
uno tiene sus particularidades.
Messi y Cristiano, sus diferencias
Bajo mi punto de vista, la mayor diferencia
entre el argentino y el portugués es su capa-
cidad para generar juego. Cristiano Ronaldo
era un “ventilador” que azotaba a los rivales
desde la banda en el Manchester United y
que explotó todas sus cualidades en el Real
Madrid y ha sido, mediante sus goles, como
se convirtió en la “constante” del Madrid.
“Una cosa es un equipo y otra cosa es un
equipo con Messi”, dijo José Mourinho y te-
nía razón. Y es que Lionel Messi es otra cosa.
Su capacidad para ser “constante” apenas
necesita ser definida. En un principio “ven-
tilador” como Cristiano, su nueva ubicación
como falso nueve determinó un jugador
capaz de ser “motor de juego primario” si
CLUBPERARNAU
la situación lo requería, “secundario” para
encontrar huecos en las defensas rivales y
tener una cifra de goles espectacular.
La Vía Láctea:
las estructuras de animación
Igual que existen muchas galaxias en el
universo, hay muchos equipos de fútbol.
Y cada uno se organiza de un modo distin-
to y correcto dentro de su funcionamiento.
Nuestra galaxia, la Vía Láctea, tiene su pro-
pio orden y se articula mediante sus plane-
tas y satélites. Igual pasa en los equipos de
fútbol, en los que el esqueleto se basa en los
mecanismos que el entrenador sitúa para
que el resultado de los contextos propues-
tos sea eficaz. Así, un equipo puede articu-
larse a través de sus “estructuras de ani-
mación”, que no son más que la disposición
que el entrenador propone y que permiten
contextos a sus jugadores.
Pongamos por ejemplo un equipo en el que
los interiores sean importantes en un sis-
tema 1-4-3-3. Los laterales, interiores y
extremos tendrían dos estructuras de ani-
mación, una en el lado derecho y otra en el
izquierdo; en un sistema 1-4-2-3-1 el doble
pivote sería el eje que movería al equipo y
sus conexiones con el mediapunta y centra-
les forjarían la propuesta elegida. Podría-
mos resumir las estructuras de animación
como la “combinación ganadora” que tiene
un equipo a la hora de ser decisivo. Los an-
damios que el entrenador pone para que los
jugadores den lo mejor de sí mismos.
La Tierra: las interacciones
Abandonamos a Galileo y sus consignas
para abrazar al hombre de Vitruvio de
Leonardo Da Vinci, pues el deporte es una
P 80
mezcla de ciencia y arte. Dejamos el ámbito
de lo macro, de lo mensurable, de las gran-
des esferas, del continente que permite la
vida, y nos adentramos en lo micro, en lo
intangible, en el contenido, el terreno de las
emociones, con el hombre como medida de
todas las cosas. Y ponemos el foco en los
futbolistas, en cómo se retroalimentan e
influyen unos a otros, al igual que los se-
res vivos en la Tierra. Así como los lobos
son capaces de cambiar el curso de los ríos,
los contextos que el entrenador crea son el
caldo de cultivo para que los jugadores di-
señen, establezcan y fortalezcan vínculos
entre ellos con la finalidad de ganar los par-
tidos e imaginar nuevos caminos que reco-
rrer. Esas “interacciones” deben ser “pro-
vocadas” por el cuerpo técnico a través de
las tareas que se realizan en la sesión aten-
diendo a distintos paradigmas, teniendo en
cuenta la complejidad del ser humano.
El hombre de Vitruvio, de Leonardo da Vinci.
Los contextos que el entrenador
crea son el caldo de cultivo para
que los jugadores diseñen,
establezcan y fortalezcan vínculos
entre ellos con la finalidad de ganar
los partidos e imaginar nuevos
caminos que recorrer
CLUBPERARNAU
Así pues, las teorías sistémicas de las cien-
cias de la complejidad nos facilitarán el ca-
mino si entendemos que el futbolista es un
ser humano con incontables aristas. Un es-
tudio pormenorizado nos daría la verdadera
dimensión de cómo se pueden diseñar se-
siones donde la complejidad aparece en cada
uno de los apartados y cómo el crecimiento
cuantitativo y en especial la madurez cua-
litativa crece exponencialmente, pero no es
objeto de este artículo profundizar en ellos,
solo cabe desde aquí mencionarlos.
Desde el último recodo del universo hasta
la partícula más elemental de nuestro pla-
neta, todo está interrelacionado. Un equi-
po de fútbol no es ni más ni menos que un
tipo de estructura-organización que tiene
distintos planos en los que el entrenador
puede influir en mayor o menor medida. Lo
que Galileo observaba desde su telescopio
no difería en mucho de lo que los Guardio-
P 81
la, Zidane, Mourinho o Conte hacen en sus
equipos: observan, apuntan, diseñan, pro-
ponen. Después, el camino que recorren
sus equipos es el mismo que el universo lle-
va caminando desde el Big Bang o un feto
a punto de nacer: con la vida abriéndose
camino. En la duración de esa vida habrá
mucho de ciencia y mucho de arte, en esa
dualidad que es el ser humano.
“Estudia la ciencia del arte
y el arte de la ciencia”
(Leonardo Da Vinci)
Ricardo Zazo.
@RichiZazo
MASSIMO
ODDO
Michele Tossani

A lo largo de un trimestre tenso, pero fecundo,

Massimo Oddo ha conseguido liberar al Udine-
se de cualquier temor a un cataclismo en la

EL REVULSIVO
Serie A y situarlo en una zona tranquila de la
tabla. Al mismo tiempo, ha insuflado confian-
za en los jugadores blanquinegros, que de la
DEL UDINESE mano de Delneri protagonizaron un pésimo ini-
cio de curso. No solo ha transmitido confianza
desde la óptica anímica, sino también desde
la perspectiva técnico-táctica. Udinese es hoy
un equipo de fiabilidad contrastada, seguro de
lo que hace aunque no esté haciendo excesi-
vas cosas novedosas. Paso a paso, Oddo sigue
avanzando como uno de los entrenadores más
interesantes de la “nouvelle vague” italiana.
CLUBPERARNAU P 83

“Q uiero agradecer al club por elegirnos primero a Delneri y des-

pués a mí: me habría ocurrido lo mismo que a él, la culpa no es
solo suya. Y lo que yo me encontraré será el fruto de su trabajo”.
En noviembre pasado, Massimo Oddo se presentó con estas palabras
como nuevo entrenador del Udinese. El ex jugador del AC Milan y Lecce
(41 años) fue convocado por la familia Pozzo, dueña del conjunto blan-
quinegro del Friuli y asimismo del club inglés Watford, en un intento por
revivir el destino del equipo que alguna vez fue el equipo de Zico.
La experiencia de Luigi Delneri se cerró después de trece meses al frente
del Udinese, período durante el que consiguió primero salvar al equipo
del descenso, al final de la temporada 2016-2017, para luego encadenar
un mal comienzo del siguiente campeonato, el actualmente en curso, du-
rante el cual el veterano ex entrenador de la Juventus (67 años) no logró
sumar más que 12 puntos en 12 partidos…
Para Oddo fue su gran oportunidad. Catapultado a la máxima categoría
del calcio con la reputación de ser uno de los entrenadores más promete-
dores de la “nueva ola” italiana, reputación obtenida después de lograr el
ascenso a la Serie A del Pescara en la temporada 2015-2016, el joven en-
trenador abruzzese tampoco fue capaz de repetir ese buen rendimiento
en los comienzos de la 2016-2017, recolectando solo nueve puntos en los
24 partidos que dirigió al Pescara en primera división.
A pesar del pobre resultado obtenido, el regreso de Oddo a un banqui-
llo de Serie A solo era cuestión de tiempo. De hecho, los conocedores y
también los periodistas habían quedado impresionados –a pesar de la
falta de resultados– con el tipo de juego propuesto por el campeón del
mundo de 2006. Un juego colectivo, propositivo, resultado de una visión
moderna del fútbol. Así que la llamada del Udinese no fue realmente in-
esperada. Lo que sí resultó inesperado fue la velocidad con la que Oddo
logró imponerse en Friuli, cambiando radicalmente la forma de jugar y el
destino del equipo blanquinegro.

Lo que sí resultó inesperado fue la velocidad con la que Oddo logró

imponerse en Friuli, cambiando radicalmente la forma de jugar y el
destino del equipo blanquinegro

Baste pensar que a continuación de la derrota sufrida en su debut contra

el Napoli, el nuevo equipo de Oddo encadenó una serie de resultados po-
sitivos que le permitió acumular 16 puntos en los primeros siete partidos
de liga jugados bajo la dirección del nuevo técnico.
CLUBPERARNAU P 84

LA TRANSFORMACIÓN
¿Cómo fue posible semejante transformación? Más allá del aspecto psi-
cológico y la comprobada capacidad de Oddo para influir en el equipo en
actitud y convicción, el trabajo del nuevo entrenador también fue rele-
vante a nivel táctico.

Los jugadores del Udinese celebran una victoria, ya con Oddo en el banquillo.

Desde este punto de vista, el Udinese que dirigía Delneri parecía casi en-
cajonado en el rígido 4-4-2 o 4-5-1 dibujado por el técnico de Aquileia,
que planteaba una fase de construcción inicial más bien escolástica, mar-
cada por la búsqueda inmediata de la verticalidad.
Sin embargo, con Oddo el Udinese ha virado hacia un juego más posicio-
nal. Mientras dirigió al Pescara el pasado curso, Oddo había tratado de
replicar el tipo de fútbol ya experimentado con éxito durante la tempora-
da anterior, la exitosa que había concluido con el ascenso del equipo blan-
quiazul a la máxima categoría del fútbol italiano. Un juego de posesión,
ambicioso en algunos aspectos, basado en un 4-3-2-1 que quería combi-
nar fases de consolidación con el balón en su poder con otras en las que
se privilegiaba la maniobra en profundidad. Un tipo de juego basado más
en principios que en esquemas, pero que había chocado con una plantilla
que simplemente no estaba a la altura de la Serie A.
Sacando buenas conclusiones de aquella experiencia, el Oddo que se pre-
sentó en Udine en noviembre pasado parecía más decidido a establecer
un compromiso –sinónimo de inteligencia táctica– entre su idea de fút-
bol y la realidad de una plantilla que, aunque cualitativamente superior a
la del Pescara, también tiene limitaciones estructurales.
CLUBPERARNAU P 85

Como primer punto para empezar, Oddo resucitó la defensa de 3

suprimida por su predecesor

Como primer punto para empezar, Oddo resucitó la defensa de 3 supri-

mida por su predecesor y que, desde los días de Alberto Zaccheroni, ha-
bía sido una seña de identidad en Udine.
Adiós igualmente al 4-4-2 y 4-5-1 de Delneri y bienvenida a un 3-5-1-1
que, en la fase de no posesión, se convierte en un 5-3-1-1. Del mismo modo,
todo lo relacionado con la fase de no posesión ha mostrado esa capacidad
antes mencionada de Oddo para adaptarse al material humano disponible.
En este sentido, el entrenador no dudó en hacer retroceder el centro de
gravedad medio del equipo, apoyándolo en una línea de 5 que garantizaba
la cobertura blanquinegra tanto en amplitud como en profundidad.
Gracias a esta elección, el Udinese se ha beneficiado a todos los niveles,
tanto en lo colectivo –encajando sólo cuatro goles en siete partidos frente
a los 23 que recibió en 12 encuentros con Delneri– como en lo individual,
con los defensores sintiéndose más a gusto al tener menos campo a sus
espaldas que cubrir.
No menos significativos fueron los cambios introducidos por Oddo en la
fase ofensiva.
La base de la idea táctica del
Udinese reside en la búsque-
da de la verticalidad. Esto no
significa que los hombres de
Oddo no busquen la posesión
en la primera parte de la ac-
ción ofensiva. De hecho, in-
cluso en el marco de un fútbol
físico y vertical, el entrenador
está tratando de implemen-
tar una construcción de juego
(“build up”) más compleja.
Massimo Oddo, durante su primer entrenamiento con el
Udinese (Foto: Simone Ferraro).

La base de la idea táctica del Udinese reside en la búsqueda de la

verticalidad
CLUBPERARNAU P 86

En este contexto, es muy importante tanto el trabajo del portero, llama-

do a garantizar una posible descarga hacia atrás, como el del mediocen-
tro, constituido en vértice avanzado de un cuadrilátero que incluye a los
defensores centrales. En la posición clave de mediocentro, Oddo puede
contar con dos jugadores como Seko Fofana y Valon Behrami. El marfi-
leño proporciona más precisión en la fase de configuración (81,4% frente
a 81,9% en precisión de los pases), mientras que el suizo garantiza una
mejor cobertura cuando no se tiene el balón en poder blanquinegro (3,1
tackles y 1,1 intercepciones por partido frente a 0,7 y 1 de Fofana).
Veremos a largo plazo cuáles son los efectos de esta propuesta ya que los
defensas centrales del Udinese no son utilizados para iniciar la acción
desde abajo, incluso si las estadísticas nos muestran cómo alguno de ellos
puede responder positivamente a una posible solicitud en este sentido de
Oddo, comenzando por Jens Stryger Larsen (83,1% de pases exitosos) o
Bram Nuytinck (86%). El Udinese intenta construir desde atrás, incluso
si el balón en largo continúa siendo una alternativa válida para evitar la
presión alta del oponente.
La verticalidad del equipo friuliano también se evidencia por los datos
medios sobre la posesión de la pelota (46,5%) y por el hecho de ser deci-
motercero en cuanto a número de pases de balón por minuto de posesión,
con 14,5 (misma cifra que la Roma) [Fuente datos: Instat].

DOS PUNTAS O 1+1

La fase ofensiva del Udinese no se basa únicamente en los centros –efectúa
13 de promedio por partido, misma cantidad que Napoli–, pero esto no es
equivalente a usar poco el juego por las bandas: de hecho, una de las com-
binaciones ofensivas más usadas por Oddo es la que manda a los centro-
campistas interiores abandonar los espacios entre líneas para moverse en
amplitud, de forma coordinada con los medios exteriores [Ver imagen].
CLUBPERARNAU P 87

Puede apreciarse aún con mayor

evidencia en la siguiente secuencia
de movimientos. VÍDEO

Es interesante observar asimismo cómo Oddo alterna, en fase de po-

sesión del balón, la alineación de dos puntas con una disposición de
1+1 que prevé un trequartista por detrás del delantero centro. El papel
del ‘10’ es esencialmente una prerrogativa de Rodrigo De Paul, otro
jugador que se ha beneficiado de la propuesta de Oddo. Relegado con
Delneri al papel de centrocampista exterior, posición en la que el ar-
gentino no se mostró cómodo, con Oddo su papel se transformó hacia
una posición más avanzada. En esta posición más adelantada, el ex
jugador del Valencia ha sido más efectivo y útil para el equipo, incluso
si Oddo no siempre le ha alineado, alternándolo con Maxi López. En
realidad, hoy por hoy el único delantero que tiene la camiseta titular
asegurada es Kevin Lasagna, que con Oddo se ha convertido en pieza
pivotal del proyecto Udinese.
Lasagna es otro futbolista revitalizado por la llegada del nuevo entrena-
dor: se mueve desde la primera o la segunda punta asegurando profundi-
dad a las maniobras blanquinegras gracias a su velocidad, lo que le per-
mite estirar fuertemente la línea defensiva rival. Desde el punto de vista
técnico su prestación es mejorable (sólo tiene un 60,7% de precisión en
los pases), pero el joven delantero está siendo muy eficiente en la realiza-
ción, con 7 goles marcados hasta la fecha, tras un promedio de dos rema-
tes por encuentro.
La fase de posesión del
balón de los friulianos se
relaciona directamente
con la de no posesión. Su
juego vertical les permite
ser agresivos para ir a re-
conquistar de inmediato
la pelota una vez que se
pierde. Cuando la recupe-
ración inmediata de la po-
sesión no es posible, el
equipo de Oddo tiene una
gran habilidad para re-
gresar a su propio campo.
Massimo Oddo, hablando con sus centrocampistas en un entrenamiento
(Foto: Simone Ferraro).
CLUBPERARNAU P 88

Los tres defensas centrales en particular garantizan una cobertura natu-

ral en profundidad que desemboca en una magnífica capacidad para ce-
rrar la zona central y los “half spaces” espacios durante las transiciones
defensivas. [Ver imagen].

A Massimo Oddo le corresponde el indiscutible mérito de haber vuelto a

encarrilar al Udinese, mejorando el rendimiento individuo y del grupo en
general. En el poco tiempo que ha tenido, el ex entrenador de Pescara ha
dotado a los blanquinegros de una identidad precisa, orientándolo hacia
un juego basado en la intensidad y la verticalidad.
El siguiente paso será ver si Oddo logrará, con el material humano de que
dispone, instalar en Udine también algunos de los fundamentos del juego
posicional que mostró en su etapa en el Pescara. En el momento de cerrar
esta edición, los de Friuli han mostrado un bajón en rendimiento y re-
sultados (6 puntos ganados en los últimos ocho partidos jugados), sobre
todo tras el boom inicial vivido bajo el nuevo entrenador.
De cualquier modo, e independientemente del desarrollo posterior del
Udinese, Oddo ya ha demostrado una vez más sus conocimientos, confir-
mándose por completo como uno de los proyectos más interesantes entre
los entrenadores italianos del momento.

Michele Tossani.
@ArrigoSacchi442
 El Estadio Mogadiscio,
invadido por las hierbas.
CLUBPERARNAU P 89

SOMALIA,
28 AÑOS JUGANDO
DE VISITANTE
Agustín Galán

Abdiqani Said Arab es el presidente de la Federación de Fútbol Somalí, además del

encargado de anunciar una noticia histórica el pasado 23 de diciembre. Después de
veintiocho años jugando lejos del territorio nacional, la selección de Somalia volverá
a disputar en 2018 un partido de fútbol frente a los suyos en Mogadiscio, la capital
del país. Un evento insignificante por común para cualquier otro país, pero que su-
pone un paso de gigante para Somalia, una nación que busca desprenderse de la
etiqueta de estado fallido.
CLUBPERARNAU
L a última vez que Somalia jugó un
partido frente a su afición fue el 30
de noviembre de 1990. Se estaban
disputando las fases clasificatorias para los
Juegos Olímpicos de Barcelona y en la pri-
mera ronda de la zona africana se cruzaron
Mauricio y Somalia. Los somalíes tenían
que remontar un 1-0 en contra cosecha-
do en la ida y consiguieron vencer por 2-1,
pero el valor doble de los goles en campo
contrario terminó clasificando a Mauricio
para la segunda ronda. En los archivos de
la FIFA referentes a esta eliminatoria no se
especifica cuál fue la sede, por lo que para
el máximo organismo del fútbol mundial
las Estrellas del Océano llevan más de tres
décadas siendo visitantes.
En ese momento no se tenía la certeza de
que aquel iba a ser el último partido del si-
glo jugado en casa, aunque se venían pro-
duciendo señales desde años anteriores. En
1986, Somalia debía organizar la Copa CE-
CAFA, torneo que incluye a las selecciones
del este y centro de África y que pasa por
ser el certamen de selecciones más antiguo
del continente. Aquella edición no se dispu-
tó por los problemas económicos alegados
por el gobierno del dictador Mohamed Siad
Barre, y la CECAFA no consiguió encon-
trar un país sustituto para albergar el tor-
neo (Kenia y Uganda se ofrecieron y fue-
ron rechazados, y las peticiones a Malawi
y Sudán fueron declinadas). Fue la primera
vez que el torneo no se celebró desde que
se fundara en 1973.
La guerra que mantenía el país con Etiopía
por la región del Ogadén se mantenía acti-
va desde 1977 y se alargó hasta 1988, tres
años antes de que Siad Barre abandonara
el país tras un golpe de Estado. Sin el dic-
tador, el país entró en una guerra civil que
P 90
terminaría desembocando en una sucesión
de catástrofes naturales y provocadas por
el ser humano que situaron el país a la cola
de todos los índices internacionales de de-
sarrollo humano.
La presencia de Somalia en los medios de
comunicación está motivada únicamente
por la hambruna provocada por las recu-
rrentes sequías, la piratería o el terrorismo;
tres fenómenos que han segado la vida de
cientos de miles de personas en las últimas
décadas. Desde la caída de Barre, el país ha
conocido ocho presidentes distintos entre
interinos y transicionales, además de un
vacío de poder entre 1995 y 2000. El pre-
sidente actual, Abdullahi Mohamed, acaba
de cumplir su primer año en el cargo, con
la principal promesa electoral de derrotar al
grupo terrorista Al Shabab (vinculado a Al
Qaeda). En octubre y noviembre de 2017,
dos atentados terminaron con la vida de
más de 800 personas.
La presencia de Somalia en los
medios de comunicación está
motivada únicamente por la
hambruna provocada por las
recurrentes sequías, la piratería o el
terrorismo
Con este escenario como telón de fondo, la
selección de Somalia desapareció del radar
entre 1990 y 1994, año en el que volvió a
participar en la Copa CECAFA, jugando úni-
camente sus partidos internacionales lejos
de sus fronteras. En su reencuentro con la
competición, Somalia quedó tercera en un
grupo compartido con Kenia –anfitriona en
1994– y Tanzania, superando únicamente
a Yibuti, selección a la que derrotó por 2-1.
CLUBPERARNAU P 91

ESTANCAMIENTO Y CORRUPCIÓN
Dentro de Somalia, el estadio Mogadiscio
apenas era reconocible después de que
las tropas estadounidenses y paquistaníes
utilizaran la instalación como base mili-
tar durante la intervención de la ONU tras
la caída del dictador Barre. La federación
consiguió rehabilitarlo tras la salida de los
soldados extranjeros del país y se volvieron
a disputar partidos de fútbol en aquel esta-
dio construido por el gobierno de China en
1978, aunque nunca con la selección como Farah Addo, el dirigente somalí que acusó a Joseph Blatter
protagonista, ni en horario nocturno dada de intentar comprar votos.

la inseguridad reinante en la capital. de Joseph Blatter había contactado con un

Mogadiscio era el único lugar en el que se
podían organizar partidos, por lo que en la
década de los 90 la mayoría de los equipos
eran de la capital, lo que contribuyó a un
empobrecimiento del fútbol somalí.
En 1995 Somalia comenzó a aparecer en la
clasificación mundial de la FIFA gracias a
dos partidos amistosos disputados contra
Tanzania. Las dos derrotas somalíes hi-
cieron que la selección se estrenara en el
ranking en la posición 165, un listón que
no ha conseguido superar desde entonces
por su nulo desarrollo y por la aparición
de nuevas federaciones que entraron a
formar parte de la FIFA desde aquella fe-
cha. En la actualidad, Somalia aparece en
el puesto 206, sin puntos, igual que otras
selecciones que apenas compiten, como
Tonga, Eritrea o Bahamas.
Todos los intentos de implantar algo pare-
cido a un plan de desarrollo en la federa-
ción somalí fueron echados por tierra por
la falta de un gobierno estable y la corrup-
ción presente en cada rincón de la fede-
ración. Farah Addo, presidente de la fe-
deración a principios de siglo, declaró en
una entrevista al Daily Mail que el entorno
grupo de veinte o veinticinco personas en
las federaciones africanas para ofrecerles
5.000 dólares por su apoyo en las elec-
ciones a la presidencia de la FIFA de 1998,
a las que João Havelange no se presentó
y en las que Blatter se impuso a Lennart
Johansson, que también denunció irregu-
laridades en una entrevista a la televisión
sueca SVT años después. Addo también
desveló que el embajador somalí en los
países del Golfo le aseguró que había al-
guien dispuesto a entregarle un millón de
dólares si votaba por Blatter.
Aquella entrevista fue publicada en febre-
ro de 2002 e investigada por la Comisión
Disciplinaria de la FIFA en mayo del mismo
año. El Código Disciplinario había entrado
en vigor el 1 de mayo, por lo que la FIFA
dejó sin investigar ni sancionar las graves
declaraciones de Addo. Dos años después,
fue la propia FIFA la que devolvió el golpe
al expulsar al mandatario somalí de toda
actividad relacionada con el mundo del
fútbol durante diez años por malversar los
fondos destinados para el desarrollo del
fútbol en su país.
CLUBPERARNAU
TERRORISMO SIN RESPIRO
Tras la muerte de Addo en 2008, Joseph
Blatter publicó una carta en la página web
de la FIFA en la que se refería al somalí como
“una figura clave de la FIFA y del movimien-
to olímpico”, además de levantarle la sanción
que aún pesaba sobre él y “a nivel personal,
perdonar el pasado”. En los años posteriores,
Blatter escribió cuatro cartas más de pésa-
me dirigidas a la federación somalí. En 2011,
un atentado suicida mató en febrero a Abdi
Salaan Mohamed Ali, futbolista internacio-
nal sub-20, y dejó heridos a dos compañeros
suyos. En diciembre se sumaron cinco vícti-
mas tras un accidente de tráfico sufrido por
un camión que transportaba a un centenar
de aficionados después de un partido al que
habían acudido 45.000 espectadores. En
abril de 2012, otro atentado con bomba dejó
numerosos muertos en Mogadiscio, entre
ellos el presidente de la federación, Said Mo-
hamud Nur, y el presidente del Comité Olím-
pico Somalí, Aden Yabarow Wiish. Tres me-
ses después, la barbarie del terrorismo llegó
hasta la sub-17, siendo asesinado el portero
Abdulkader Dheere Hussein después de un
entrenamiento. No había respiro para So-
malia, donde los atentados eran la estampa
habitual, y el deporte, uno de los enemigos
principales para los terroristas.
Abdiqani Said Arab, presidente de la Federación de Fútbol Somalí.
P 92
Hasta 2013 no se volvió a disputar un par-
tido en el Banadir, un estadio de categoría
internacional. En 2006 albergó su última
liga de fútbol hasta aquel momento, ya en
un estado deplorable, y siete años después
fue Abdqiani Said Arab, el hoy presiden-
te y por entonces secretario general de la
federación, el encargado de dar la bienve-
nida de nuevo a la competición local en el
estadio inaugurado por el Comité Olímpico
Nacional Italiano en 1956 –Mogadiscio se
encontraba bajo administración italiana– y
reconstruido por la FIFA.
SIGNOS DE RECUPERACIÓN
Mientras tanto, la selección comenzó a al-
canzar cierta regularidad en cuanto a la
disputa de partidos, siempre en territorio
extranjero y bajo el manto de la Copa CE-
CAFA, único vínculo con el fútbol interna-
cional que ha mantenido en estas últimas
décadas. Etiopía (2002), Yibuti (2005 y
2008) y Tanzania (2009) son los únicos
países que han sido derrotados por las Es-
trellas del Océano en lo que va de siglo. An-
tes de que el Banadir terminara de ser re-
construido por la federación, la selección
tenía que entrenarse en el vecino Yibuti. El
Mogadiscio, el estadio más grande del país,
fue ocupado nuevamente en 2007, en esta
ocasión por los soldados etíopes, para ser
usado de nuevo como base militar en apo-
yo del gobierno transicional, en aquel mo-
mento en apuros. Aún hoy es la base de los
cuerpos de paz de la Unión Africana.
Lejos aún de vivirse una situación de nor-
malidad en el país del cuerno de África, So-
malia va dando pasos hacia adelante poco
a poco. En 2012, Turkish Airlines anunció
una línea de vuelos comerciales en el país, la
primera en dos décadas, que ayuda a paliar
CLUBPERARNAU P 93

Situación actual del Estadio Mogadiscio, que ha estado ocupado por tropas estadounidenses, paquistaníes, etíopes y actualmente de la Unión Africana
(Fotos: Somali Football Press Department).

ligeramente el aislamiento internacional so- bre el terreno. Para el gobierno somalí es

malí. Los avances en cuanto a infraestruc- una prioridad mantener a la juventud sobre
tura deportiva también han sido evidentes, los terrenos de juego, lejos de la tentación
realizados sobre todo por la FIFA, que in- de unirse a los grupos terroristas que aún
cluso volvió a enviar a Mogadiscio una de- amenazan la paz social.
legación propia para comprobar in situ la si-
tuación de la federación, algo que tampoco
ocurría desde hace décadas. En 2015 la FIFA comenzó a instruir a
los árbitros para seguir apuntalando
En 2015 la FIFA comenzó a instruir a los el crecimiento del fútbol local, lo que
árbitros para seguir apuntalando el creci- en Somalia fue recibido como una
miento del fútbol local, algo que en Soma- señal inequívoca de apoyo
lia fue recibido como una señal inequívoca
de apoyo. Ahmed Al Shanawi, represen-
tante de la FIFA durante el curso de arbi- Un año más tarde, volvió a saltar la voz de
traje impartido en Mogadiscio, reconoció a alarma en el entorno del fútbol africano
VOA News que, si todo sigue así, cada vez tras una información de la BBC en que se
se impartirán más cursos de desarrollo so- dejaba entrever la posibilidad de que la fe-
CLUBPERARNAU
deración aceptase a un equipo de fútbol del
grupo terrorista Al Shabab. La única fra-
se textual de Said Arab al respecto fue: “No
estamos contra ellos y ellos no están con-
tra nosotros”, además de apuntar que cada
vez había más jugadores extranjeros en
la liga. La federación emitió rápidamente
un comunicado en el que dejaba claro que
“el presidente no pidió a Al Shabab que se
uniera a la liga somalí. Nadie está llamado
al fútbol, excepto los que quieren jugarlo. El
fútbol no tiene nada que ver con la política.
Es vergonzoso que los medios internacio-
nales quieran mezclar las cosas”.
Aclarado este aspecto, la liga local sigue
prosperando, hasta el punto de que en el
inicio de la pasada temporada los árbitros
estrenaron sistemas de comunicación ina-
lámbricos donados por la confederación
africana (CAF). Si esta incorporación tec-
nológica fue histórica, lo vivido el pasado 8
de septiembre lo superó con creces.
El estadio Konis, también rehabilitado por
la FIFA, albergó un torneo juvenil para ju-
gadores entre 16 y 18 años, y la federación
se vio en disposición de poder organizarlo
en un horario nocturno. Desde 1988 no se
había jugado un partido en Somalia con los
focos encendidos y la noche cubriendo la
capital, según aseguró el portavoz de la fe-
deración Omar Ibrahim Abdisalam. Los te-
rroristas de Al Shabab seguían –y siguen–
amenazando el día a día en Mogadiscio,
pero el partido se desarrolló sin mayores
problemas. “Si Somalia puede volver a con-
siderar de nuevo organizar partidos por la
noche en Mogadiscio, entonces no estamos
tan lejos de volver a los días de paz”, asegu-
ró el residente local Hanad Gullled a un pe-
riodista de AFP, aunque prefirió ser cauto y
seguir el partido por televisión.
P 94
Los periodistas somalíes también eran
conscientes de que en ese momento se esta-
ba haciendo historia, y así lo expresó Abdi-
fatah Arizona: “Es la primera vez en treinta
años que quiero cubrir de verdad el parti-
do, no sólo por la competición, sino también
por el fervor de los que estén en el estadio
en esta noche histórica”.
A la derecha, Haruna Mawa, seleccionador somalí.
Bajo el mando de Abdiqani Said Arab, el
fútbol somalí está empezando a alcanzar
velocidad de crucero, y el empujón definiti-
vo hacia una normalidad tanto tiempo des-
conocida se produjo el pasado mes de di-
ciembre con el anuncio de que en 2018 se
volverían a organizar partidos en casa con
la selección. Las Estrellas del Océano son
el símbolo en el exilio, el retorno necesario
para mandar el mensaje al mundo de que
todos los avances realizados no están sien-
do en vano.
Somalia decidió no formar parte de la úl-
tima Copa CECAFA, disputada del 3 al 17
de diciembre en Kenia. Nicholas Musonye,
secretario general de la CECAFA, arguyó
que los somalíes están reconstruyendo su
equipo nacional para volver a competir con
cierta dignidad en un futuro cada vez más
cercano. Los últimos partidos de la selec-
ción se disputaron en abril del año pasado
frente a Sudán del Sur (dos nuevas derro-
CLUBPERARNAU P 95

tas), pero el seleccionador Haruna Mawa ya un discurso del primer ministro Hassan Ali
está trabajando en la reaparición de Soma- Kheyre. Los 22.000 soldados de los cuerpos
lia en su propio hogar. de paz de la Unión Africana presentes en el
El presidente Said Arab tiene grandes pla- país abandonarán el Estadio Mogadiscio du-
nes, y así lo hizo saber en el discurso en el rante 2018 y el gobierno ya tiene preparados
que anunció el retorno del fútbol interna- los planes para reconstruir por completo el
cional a Somalia: “El pueblo somalí tiene vetusto estadio, con capacidad para 65.000
derecho a ver jugar a su selección en casa espectadores. Se buscan rivales, Somalia
y tenemos que lograrlo ahora que el país vuelve a jugar en casa.
está saliendo adelante. 2018 será un año de
grandes cambios para Somalia y estamos Agustín Galán.
pensando en invitar a otras selecciones del @Agustin_Galan
este de África para jugar amistosos”.
A medio plazo, el objetivo de la federación
es que los avances permitan que Somalia or-
ganice una Copa CECAFA en los próximos
años, lo que reescribiría una edad dorada del
fútbol somalí, según el presidente. El espal-
darazo definitivo llegó dos días después, en
CLUBPERARNAU OBSERVATORIO VALNEGRI P 96

Alain Valnegri

OLYMPIQUE LYONNAIS:
UN LUNA PARK
Nos hallamos ante un equipo explosi- asociativo, pero desde el inicio del ciclo
vo, capaz de prodigiosas actuaciones y de Bruno Génésio, el OL sufre a nivel de-
también de noches aciagas, pero frente fensivo. A pesar de haber reforzado tres
al que nunca puedes permanecer impa- puestos sobre cuatro de la defensa, el
sible. El Olympique Lyonnais que preside equipo no ha logrado encontrar el pun-
Jean-Michel Aulas, entrena Bruno Géné- to de equilibrio en su organización. Más
sio y lidera Nabil Fekir es como un par- aún: la fase donde más sufre el equipo
que de atracciones.
THE TACTICAL ROOM / REVISTAEn fase #21 ofensiva,
FEBRERO 2016es en las transiciones defensivas, pues
sabe
The cambiar
Tactical Room esde registro,
la revista permutando
que edita trasnº 21
el Club Perarnau. Este cualquier pérdida
se publica en febrero dede balón, el OL
2016.
entre un
Editorial estiloImpresión.
Primera directo y vertical –donde no destaca por su velocidad en la reco-
se siente muy cómodo– y un estilo más locación.
CLUBPERARNAU P 97

E l Olympique Lyonnais versión 2017-2018 es como visitar un Luna Park.

Cada partido se parece al espectáculo de un parque de atracciones. Los
días en los que el equipo deleita con su juego vertical vertiginoso nos
aportan las sensaciones de subir a una montaña rusa. En aquellos otros donde
brilla por su juego asociativo coordinado, parece invitarnos a dar una vuelta
en una noria colorada con el sol despejado. Los días plagados de errores de-
fensivos nos recuerdan los trenes fantasmas, mientras que si el equipo peca
de soberbia y a nivel colectivo no percibimos un mínimo esfuerzo, parece in-
vitarnos a visitar el museo de los espejos.
El pasado verano la entidad decidió vender a algunos de sus canteranos de ma-
yor talento, como Corentin Tolisso y Alexandre Lacazette, y a su capitán Max
Gonalons, para reconstruir un equipo competitivo. Jean-Michel Aulas enfocó
buena parte de su mercado en comprar a algunos jugadores que se habían en-
frentado al conjunto del Ródano. Kenny Tete llegó procedente del Ajax para
reforzar la banda derecha, mientras Marcelo llegó desde el Besiktas. Como de-
lantero centro se apostó fuerte por
Mariano Díaz para permitir al equipo
cambiar de sistema de juego.
A nivel nacional, la secretaría técni-
ca trabajó muy buen fichando a Tan-
guy Ndombèlé del Amiens, en tanto
Ferland Mendy llegó para confirmar
la buena cantera que es el decano
del fútbol francés, el AC Le Havre.
Nabil Fekir, el entrenador Bruno Génésio
y el presidente Jean-Michel Aulas.

MODELO Y SISTEMA DE JUEGO

El equipo suele alternar el 4-2-3-1 con un 4-3-3. El cambio de sistema de-
pende de la posición o de la presencia de Nabil Fekir. El modelo de juego está
basado en un equipo versátil que domina tanto el juego combinativo como
el juego directo. En la mayoría de los partidos se encuentra a rivales que se
encierran en su área y en estos casos el OL consigue elaborar sus jugadas a
través de un ritmo moderado, con numerosas posesiones largas. Domina bien
el juego por la banda, con mucha participación de los laterales, y consigue
densificar la zona axial con una presencia masiva de jugadores escalonados
para encontrar líneas de pases en corto y progresar.
Entre la velocidad por bandas, la fantasía en el juego interior y las llegadas
desde segunda línea, el equipo posee abundantes alternativas cuando tiene
el balón. El Olympique Lyonnais se distribuye en el campo con un posiciona-
miento atrevido, volcado a la ofensiva y en el que no se perciben rasgos con-
servadores de ningún tipo.
CLUBPERARNAU P 98

Tiene una dinámica variable de posiciones. Así, durante un partido vemos a

la mayoría de jugadores ocupar más de una posición: los laterales se convier-
ten en carrileros, dejando que los extremos jueguen por dentro; Tousart suele
meterse entre los dos centrales durante la fase de construcción del juego, y
cuando ocupa la posición de mediocentro posicional según sea su pareja de
baile alterna entre estar en la misma línea que él o bien escalonarse, mientras
a Nabil Fekir se le ve por todo el campo según sean las necesidades del equipo.

Entre la velocidad por bandas, la fantasía en el juego interior y

las llegadas desde segunda línea, el equipo posee abundantes
alternativas cuando tiene el balón

Una de las dificultades del equipo es mantener una cierta distancia entre lí-
neas. Solo en algunos partidos ha logrado mantener un bloque compacto res-
petando esta dinámica variable de posiciones, pero conservando el espíritu
de ser un equipo solidario y preocupado por mantener una estructura sólida.
Sin dicha disciplina, el equipo tiene problemas durante la reorganización de
las posiciones tras perder el balón.

FASE OFENSIVA
En fase ofensiva, el OL sabe cambiar de registro, permutando entre un estilo
directo y vertical –donde se siente muy cómodo– y un estilo más asociativo,
en el que sin embargo se detectan varias carencias a la hora del reposiciona-
miento defensivo.
En salida de balón, el equipo inicia de diferentes formas. La más usual es la de
salir en corto a través del pivote, que se adelanta a los dos centrales mientras
el otro mediocentro viene en su ayuda. Los laterales se sitúan en la misma lí-
nea para recibir, ya que el equipo suele salir por las bandas [Ver imagen].
CLUBPERARNAU P 99

Frente a equipos que usan el repliegue defensivo intenso, el OL suele salir

mediante los dos centrales, con Tousart ofreciéndose, y los laterales coloca-
dos en la misma línea que el joven mediocentro [Ver imagen].

En la zona de creación, el equipo se siente más cómodo a través de combi-

naciones en vertical que usando largas posesiones. A través de las combi-
naciones verticales, el OL busca continuamente al jugador más alejado para
conseguir saltar las líneas de pase adversarias y sobre todo buscar los 1v1, un
ámbito donde el equipo posee muchos argumentos a su favor.
Cuando se encuentra frente a rivales organizados en un bloque bajo sabe
cambiar de registros para activar un estilo más asociativo. El éxito de domi-
nar los partidos depende, en este sentido, mucho de los movimientos sin balón
a nivel colectivo. Cuando Nabil Fekir puede disfrutar de una alta movilidad,
combinada con libertad de movimientos para caer por las bandas y moverse
entre líneas, el cuadro de Lyon gana mucho en creatividad y sobre todo en
imprevisibilidad [Ver secuencia de imágenes].
CLUBPERARNAU P 100

Otro concepto ofensivo que domina muy bien el equipo de Génésio es la ex-
plotación del juego por banda. Los laterales y los extremos consiguen mover-
se con mucho criterio. Cuando los extremos buscan los espacios por dentro,
los carriles exteriores quedan abiertos y por allí el OL se mueve con acierto.
No solo llegan bien, sino que consiguen tener una presencia masiva en el área
para rematar las jugadas y aprovechar los eventuales despejes de la defensa
rival gracias a tener dos jugadores en el balcón del área para finalizar la juga-
da. Del mismo modo dominan cuando los extremos vienen a recibir en la línea
de cal, abriendo en estos casos el carril central escorado para las subidas de
los laterales.

FASE DEFENSIVA
Desde el inicio del ciclo de Bruno Génésio, el OL sufre a nivel defensivo. En
la presente temporada mostró algunos signos de mejora, pero fueron incons-
tantes y el equipo ha vuelto a caer en los mismos errores.
CLUBPERARNAU P 101

A pesar de haber reforzado tres puestos sobre cuatro de la defensa, el Olym-

pique Lyonnais no consigue encontrar el punto de equilibrio en la organiza-
ción defensiva. Con el modelo de juego dibujado, el equipo sufre sobre todo por
las bandas. Según sean los partidos se advierten varias formas de defender.
En aquellos encuentros en los que el equipo fue contundente y disciplinado, la
organización defensiva funcionó adecuadamente aunque acabara perdiendo
fuerza en la fase ofensiva. Desde el momento que el OL pierde el balón, Genesio
insiste sobre varias maneras de defenderse, que cambian según sea el rival:
1. Contra rivales que tienen un portero que no domina el juego con los pies y
donde el centro del campo rival no destaca por su juego aéreo, el OL activa
la presión en un bloque alto para forzar al oponente a jugar en largo y así
ganar las segundas jugadas, sobre todo por el eje central, donde se sitúan
Marcelo, Ndombèlé, y Tousart, grandes cabeceadores que permiten la rá-
pida recuperación del balón.
2. Contra rivales que tienen dificultades en la salida de balón a ras de césped,
el OL sitúa el bloque en medio, permitiendo al portero dar el primer pase en
corto, para activar de inmediato la presión con objeto de robar lo más alto
posible e ir hacia la portería rival rápidamente.
3. Contra rivales con buena calidad en la salida de balón, se organiza en un
bloque bajo esperando en campo propio. Inicia la presión en los últimos
metros para activarse tras el robo y jugar en largo intentando sorprender
la espalda de la defensa rival. Gracias a la velocidad de sus extremos y a la
potencia de Mariano, que cae muy bien por banda, esta es probablemente
la manera de defender que le suele dar mejores resultados.
Uno de los limites defensivos se sitúa en las ayudas defensivas cuando el
equipo tiene el bloque bajo. Cuando no repliegan lo suficiente, los laterales
tienen que bascular a nivel horizontal dejando la banda totalmente libre. Eso
permite al equipo rival llegar con solvencia por banda con un jugador y tener
presencia masiva en el área para finalizar los centros [Ver imagen].
CLUBPERARNAU P 102

El mayor defecto en fase defensiva es la velocidad en el reposicionamiento

defensivo. En la imagen vemos el mal reposicionamiento del conjunto lionés.
Ello obliga a uno de los centrales, en este caso Diakhaby, a salir de su zona
para seguir al delantero centro, lo que deja huecos libres en el carril central
de la defensa. Si el rival consigue tener precisión en el pase, eso le garantiza
llegar hasta la portería de Anthony Lopes con relativa facilidad [Ver imagen].

TRANSICIONES DEFENSIVAS
Quizás la fase donde más sufre más el equipo sea en las transiciones defen-
sivas. Tras una pérdida de balón, el OL no destaca por su velocidad en la reco-
locación defensiva, y tiene dificultades para efectuar un correcto reposicio-
namento. El equipo alterna los tres tipos de presiones más comunes. Según
el momento y las necesidades que requiere el partido, se activa una presión
conjunta donde van a presionar muy alto sin retroceder su bloque, preocu-
pándose solo de tapar las líneas de pase. En estas fases de juego, el equipo
se expone mucho, ya que frecuentemente falta solidaridad en los repliegues
defensivos [Ver imagen].
CLUBPERARNAU P 103

Cuando Génésio quiere ubicar su bloque en el centro del campo, la presión se

orienta hacia el poseedor de balón rival con dos jugadores del OL que saltan a
presionar, mientras el bloque se repliega, convirtiendo la estructura con una
dinámica posicional fija donde cada jugador mantiene la posición [Ver imagen].

El tercer concepto de repliegue es el menos usado por el equipo de Génésio,

aunque en algunos partidos se ha utilizado: a través del repliegue intensivo,
el equipo se preocupa solo de replegar, olvidando por completo cualquier atis-
bo de presión. Curiosamente, y a pesar de ser un conjunto de características
ofensivas, quizás es la manera de defender que ha tenido más éxito esta tem-
porada [Ver imagen].
CLUBPERARNAU P 104

ANÁLISIS INDIVIDUAL
NOMBRE CARACTERÍSTICAS TRAYECTORIA MAPA DE CALOR

ANTHONY
Portero plástico y ágil, de
LOPES
grandes reflejos y algo kami- OL.
Givors 1990
kaze en las salidas.

Buena anticipación en las

marcas. Con balón tiene difi-
MAPOU cultades. Es despistado en los Montpellier,
YANGA-MBIWA movimientos colectivos de re- Newcastle, AS
Bangui 1989 pliegue defensivo. Más adap- Roma, OL.
table a equipos con un estilo
defensivo

Dinámico, capacidad de repe-

Fluminense,
RAFAEL tir los esfuerzos repetidos por
Manchester Uni-
Petropolis 1990 banda. Sufre con los balones a
ted, OL.
su espalda.

Gran físico, su juego aéreo es

impresionante y posee muy
MOUCTAR
buena conducción. Dificultad USSA Vertou, FC
DIAKHABY
de mantener la concentración Nantes, OL.
Vendome 1996
90 minutos y cierta falta de
agresividad.

Fuerte físicamente, líder,

dominante en lo aéreo e in- Santos, Wisla
teligente en los movimientos Cracovia, PSV
MARCELO
colectivos. Puede sufrir ante Eindhoven, Han-
Sao Vicente 1987
delanteros con velocidad en nover 96, Besik-
carreras largas. Con balón no tas, OL.
da siempre seguridad.

Central reconvertido después

haber jugado mucho tiempo
JÉRÉMY como lateral. Bueno en la an-
MOREL ticipación y en la lectura del Lorient, OM, OL.
Lorient 1984 juego. Sufre en el juego aéreo
y tiene errores en la salida de
balón.
CLUBPERARNAU P 105

NOMBRE CARACTERÍSTICAS TRAYECTORIA MAPA DE CALOR

Portuguesa,
Corinthians,
Lateral ofensivo rápido, técni- Gremio, Guara-
FERNANDO camente bueno y solvente en tingueta, SCU
MARÇAL los duelos 1v1. Frágil frente a Torrense, CD Na-
Sao Paolo 1989 extremos potentes, poco dis- cional, Benfica,
ciplinado a nivel defensivo. Gaziantepspor,
EA Guingamp,
OL.

Potente, muy buena zurda,

FERLAND
personalidad fuerte, zanca- PSG, Man-
MENDY
da impresionante. Tiene que tes-La-JOlie,
Meulan-En-Yvelines
mejorar su juego con la pierna LE Havre, OL.
1995
derecha.

Lateral derecho menos ofen-

sivo que Rafael, mantiene bien
la posición, equilibrado en la
KENNY toma de decisión sobre cuán-
TETE do subir y cuándo proteger su Ajax, OL.
Ámsterdam 1995 banda. Necesita mejorar en
cuanto a personalidad en el
juego ofensivo y su juego aé-
reo defensivo.

Jugador polivalente, técnica-

HOUSSEM mente muy fino, con buena
AOUAR visión de juego. Le falta defi-
OL.
Lyon 1998 nirse en una posición concreta
y aumentar la intensidad en
los duelos.

Centrocampista de buena con-

JORDAN dición física, agresivo y con
FERRI buena llegada. Necesita encon- OL.
Cavaillon 1992 trar un equipo para tener con-
tinuidad para afirmarse.

Una de las revelaciones de la

Ligue 1. Impacto físico, bueno
TANGUY
en la recuperación, calidad en
NDOMBÈLÉ
los pases verticales y llegada Amiens, OL.
Longjumeau 1996
desde segunda línea espec-
tacular. Gran margen de pro-
gresión en el juego asociativo,
CLUBPERARNAU P 106

NOMBRE CARACTERÍSTICAS TRAYECTORIA MAPA DE CALOR

Pese a su edad juega con la

experiencia de un veterano,
LUCAS
gran lectura de juego, hábil en Valenciennes,
TOUSART
la construcción y el control del OL.
Arras 1997
juego. Necesita trabajar sobre
su dinamismo.

Potente, vertical, móvil, gran

MARIANO disparo desde fuera del área. Badalona, Real
DÍAZ Puede mejorar en la gestión Madrid Castilla,
Premià de Mar 1993 de las transiciones ofensivas OL.
en cuanto a altruismo.

Técnica muy fina, dominante

BERTRAND
en los 1v1, altruista, y ve porte-
TRAORÉ Vitesse, Chlesea,
ría. A veces desaparece de los
Bobo-Dioulasso 1995 Ajax, OL.
partidos, lo que le hace perder
consistencia.

Genial, fantasioso, de disparo

potente y preciso desde fuera
MEMPHIS
del área. Necesita mejorar en
DEPAY PSV, Manchester
el juego colectivo y ser más
Moordrecht 1994 United, OL.
constante en sus tomas de de-
cisión, donde a veces peca de
individualismo.

Extremo potente, ha mejorado

MAXWEL en los desmarques de rup-
CORNET tura. Tiene gol. Debe mejorar Metz, OL.
Bregbo 1996 el primer control y la toma de
decisiones.

El diamante del equipo. Domi-

na todos los registros del me-
NABIL diapunta: gran regate, calidad
FEKIR en el juego corto, inteligentes
OL.
Lyon 1993 en el desmarque y buen go-
leador. Puede mejorar en la
continuidad y regularidad de
su rendimiento.

Alain Valnegri.
@alvalnegri
CLUBPERARNAU P 107

Entrevista a
Rocío Ybarra
Isaac Lluch

“En Holanda hay

tiendas solo de hockey
y vendían nuestras
camisetas. ¡Están
locos!”
CLUBPERARNAU
R ocío Ybarra es una leyenda viva del
hockey hierba español. Con 17 años
fue una de las primeras profesio-
nales de este deporte en su país y siem-
pre destacó por tomar decisiones fuertes,
tanto dentro como fuera del campo. Ense-
guida comprendió que nunca sería la me-
jor jugadora de su equipo, porque ni era
la más rápida, ni la más fuerte, ni la más
técnica, ni la más talentosa. Pero dedicó
su carrera a un objetivo igualmente muy
elevado: convertirse en la mejor versión
de sí misma. Y eso le alcanzó, entre otros
éxitos, para coronarse, con 266 partidos,
como la internacional con más recorrido
en la selección española. A sus 33 años, y
después de una trayectoria que la ha lle-
vado a competir en tres Juegos Olímpicos
(Atenas 2004, Pekín 2008 y Río 2016) y
a consagrarse entre las mejores del cam-
peonato español, alemán y holandés, Ro-
cío Ybarra sigue compaginando su carre-
ra deportiva –de nuevo en el club de sus
orígenes, el Jolaseta– con su profesión de
maestra en una escuela trilingüe. Ro, como
la conocen sus allegados, sigue siendo un
referente del hockey hierba como lo fue,
sin darse cuenta, desde el inicio. Apenas
era una adolescente y ya dejó huella en por
aquél entonces incipientes jugadoras como
Leticia Canales, entrevistada en el pasado
número de The Tactical Room, ahora ya
convertida en una surfista de élite.
A su paso por esta sección del “Círculo Vir-
tuoso”, Rocío Ybarra reflexiona sobre el rol
de líder, sobre la importancia de las expe-
riencias vitales que acompañan a cualquier
deportista y sobre la ilusión de continuar
luchando para que el hockey hierba deje de
ser un deporte minoritario.
P 108
Pregunta.- Leticia Canales tuvo claro
enseguida que quería pasarle justa-
mente a usted el relevo en este Círculo
Virtuoso.
Respuesta.- Qué gracia. La conocí cuando
era una enana, un bicho. Es curioso porque
ella tiene una hermana mayor y luego una
gemela, y yo tengo un hermano mayor y
una gemela. Cuando ella empezó en el Jola-
seta yo ya vivía fuera, en Madrid, pero ve-
nía cada fin de semana a Bilbao a competir.
Yo iba mucho a verlas, porque mis amigas
las entrenaban. Quieras o no, al ser ellas
dos gemelas y jugar al mismo deporte que
nosotras, pues nos veíamos reflejadas.
P.- ¿Para seguir con las coincidencias
me dirá que usted también practica
surf?
R.- Pues de pequeña, en verano, lo practi-
caba bastante. Mi padre es un surfista em-
pedernido y nuestro premio por sacar bue-
nas notas en el colegio era una tabla. Por
parte de mi padre nos hemos dedicado al
surf. Por parte de mi madre nos viene lo del
hockey hierba. Ella sigue jugando en cate-
goría de más de 50 años. Mi hermano ma-
yor también sigue jugando, en el Pedralbes.
Y mi hermana gemela Lucía también juega,
en París. Y, antes, también lo hicieron mi
abuelo y mi tío abuelo.
“Por parte de mi padre nos
hemos dedicado al surf. Por
parte de mi madre nos viene
lo del hockey hierba. Ella sigue
jugando en categoría de más
de 50 años”
CLUBPERARNAU P 109

P.- Julio Solaun, su tío abuelo, fue in- nera, con la que vivimos la revolución de
cluso destacado olímpico. que se empezaba a jugar por dinero. Luego
nos movimos otras. Al principio no sabía-
R.- Así es. Y jugaba con el número 3. Cu-
mos muy bien en qué consistía, pero tras
riosamente, cuando yo elegí ese dorsal, no
un periodo de ensayo-error acabas apren-
tenía ni idea de que él lo llevó. Se han dado
diendo. Hoy en día hay managers y agen-
muchas coincidencias divertidas. Él jugaba
tes, pero en aquellos tiempos no había nada
de lateral derecho y yo me inicié también en
de eso. Con 17 años tenías que espabilarte;
esa demarcación.
tú te lo guisabas y tú te lo comías.
P.- Aquellos eran tiempos, los de su tío
P.- ¿Le cambió la vida de un día para otro?
abuelo, de puro amateurismo. Para en-
trenarse daban cuatro vueltas al campo R.- Completamente. Recuerdo incluso que
y luego tiraban un poco a portería y ya mis hermanos me decían: ‘Bah, te pagan por
está. En su familia habrán vivido como jugar’. Y les contestaba: ‘¡No solo por jugar.
pocas el proceso de profesionalización Para mí es un trabajo! Entreno cada día, in-
del hockey. cluso si llueve. Tengo que mantenerme en
buen estado físico, entrenarme incluso en
R.- Diría que en mi familia se ha visto la pro-
vacaciones de verano, etc.’
fesionalización del deporte en general. El pa-
dre de mi abuelo y de mi tío abuelo era fut-
bolista del Athletic Club [Luis María Solaun].
Él compaginaba el fútbol con su profesión.
Cuando el fútbol empezó a profesionalizarse
no le gustó y dejó el Athletic. Mi madre siem-
pre se dedicó al hockey amateur y, si tenían
que hacer un viaje con el equipo, se lo paga-
ban ellas. Cuando mi hermano empezó con
este deporte y le llamaron para la selección
ya nos dimos más cuenta de la dimensión de
todo, de que había que entrenarse sistemáti-
camente, que te podían convocar y luego no
llamar para competir. Eso es lo que más me
impactó entonces. Yo he tenido la suerte de
vivir en mis carnes lo que fue pasar de ju-
gar como un divertimento en el club social
del Jolaseta a pasar a ser una de las primeras
profesionales en España.
P.- ¿Cómo se compagina lo de ser profe-
P.- Sin duda era muy joven cuando fir-
sional con el hecho de que la mayoría de
mó su primer contrato profesional.
compañeras seguían siendo amateurs?
R.- Diecisiete años tendría. Creo que Núria
R.- Cobrábamos muy poquitas, cierto.
Camón fue la primera en cambiarse de club
Pero la mentalidad se fue cambiando a
de forma totalmente profesional. Fue la pio-
CLUBPERARNAU
base de trabajo y dedicación. De entrada,
el ser profesional implicaba que todas las
compañeras vieran que tú tenías que dar
más de sí. Luego se fue profesionalizando
poco a poco. En España, aún no, pero en la
mayor parte de los clubes de Europa todo
el mundo cobra algo. En España, la gran
mayoría de jugadoras que cobran están in-
volucradas en el club como entrenadoras
de otras categorías, o como preparadoras
físicas o educadoras. Al final, los desequi-
librios de las que tienen sueldo y las que
no es complicado de llevar.
P.- Y más cuando empiezas a cobrar
con 17 años y tus compañeras, no.
R.- Mi situación era aún peor: era de las
que más cobraba del equipo, vivía en Ma-
drid y jugaba en Barcelona. Entre semana
entrenaba en el Centro de Alto Rendimien-
to de Madrid y el fin de semana competía
con el Club de Polo de Barcelona. No en-
trenaba con el equipo y jugaba de titular
todos los minutos.
P.- ¿Se tuvo que poner un impermeable
para los dimes y diretes?
R.- Era complicado. Pero me siento afortu-
nada. Aprendí enseguida a hacer mi trabajo,
a demostrar quién soy en el campo. Intenté
que no me afectara fallar una bola, porque
es muy fácil entrar en eso, caer en eso. Es
muy fácil que todo un error te venga enci-
ma, demasiado fácil, y que, al final, no sepas
ni agarrar el palo. Pero me salió la parte de
chula, me imagino, de decir: ‘Bueno, tú, yo
he venido aquí porque me queréis, esto es
lo que hago yo’. Aprendí mucho en el Cen-
tro de Alto Rendimiento, eso me dio un gran
ritmo. Pero luego llegaba el campo y sabía
que debía rendir.
P 110
“Aprendí enseguida a hacer mi
trabajo, a demostrar quién soy
en el campo. Intenté que no
me afectara fallar una bola,
porque es muy fácil entrar en
eso, caer en eso”
P.- Realmente debe ser complicado no
convivir con las compañeras, pero sí
competir junto a ellas.
R.- Sí, mucho. De hecho, hoy en día ya no
se hace así. Pero, bueno, a mí al final me sa-
lió bien. El hecho de no haberme empeque-
ñecido, de haber podido sacar mi hockey y
poder demostrar como jugadora quién soy
me benefició. Ese primer año en el Polo me
salieron bien las cosas. En otros años no
siempre me salió todo rodado. Ser profesio-
nal es complicado, sobre todo cuando unos
cobran mucho y otros no cobran nada. Es
complicado porque tú también tienes días
malos de entrenamiento, semanas donde
no quieres estar haciendo eso que haces,
donde no te salen las cosas, en las que estás
todo el rato pensando en el entrenamiento
y, en vez de darle con el stick, le das con el
pie y las miradas caen todas sobre ti. Que le
dé con el pie una profesional que viene de
fuera significa más que el hecho que le dé
una jugadora de casa. Sobreponerte a eso
es lo más complicado.
P.- ¿Y cómo lo consiguió, siendo, como
quien dice, una mocosa?
R.- Si le digo la verdad, si echo la mirada
hacia atrás, no sé cómo lo hice. Recuerdo mi
primer partido con el Polo. Había tenido va-
caciones porque venía de no sé qué torneo
con la selección y llegué solo para la final
del campeonato. Mis compañeras se habían
CLUBPERARNAU
currado llegar a la final y mi entrenador de-
cidió que yo sería titular y que jugaría en
una posición clave. Y me dije: ‘Oye, tú, aquí
hay que jugar’. Con 17 años o eres chula o
no juegas, directamente. Nos enfrentába-
mos al Junior, un equipo muy, muy fuerte.
La final era potente. Recuerdo perfecta-
mente que me jugué una bola que para mí lo
cambió todo. Una bola de central izquierdo
a central derecho pero que estuvo a nada
de interceptarla la delantera frente a mi
portera. Pasó a 50 centímetros de mi por-
tera. Solo eso, atreverme a hacer ese pase,
marcó la diferencia: me sirvió para ver que
lo podía hacer bien. Aquella fue una situa-
ción muy arriesgada. Si analizas la jugada
de forma madura probablemente no haces
ese pase, pero como eres pequeña y te han
venido a buscar de fuera, dices: ‘¿Tú ya sa-
bías que yo me arriesgo, no? Pues, ya está,
me arriesgo’. Ganamos el partido, salió todo
perfecto y para mí, jugarme esa bola, fue
una declaración de intenciones. Me dije: ‘Yo
he venido a esto’.
“Con 17 años o eres chula
o no juegas, directamente.
Recuerdo perfectamente que
me jugué una bola que para
mí lo cambió todo. Pasó a 50
centímetros de mi portera. Solo
eso, atreverme a hacer ese
pase, marcó la diferencia”
P.- ¿Cómo aprendió a ser líder?
R.- A base de golpes. Creo que he toma-
do muchas decisiones. A veces no sabía
si eran las correctas, pero el hecho de to-
marlas me ha ayudado mucho. También
P 111
recuerdo que después de esa temporada,
el Polo, bajo mi punto de vista, no se portó
bien a nivel de gestión de mi traspaso con el
Jolaseta. Y como yo me sentía muy partíci-
pe de mi club anterior, aun ganando la liga
con el Polo y clasificarnos para la Copa de
Europa del año siguiente, decidí volverme a
casa. De alguna forma tenía que demostrar
mi disconformidad con lo que creía que no
era correcto. Creo que esos valores me han
caracterizado como jugadora. Mis valores
son estos fuera y dentro del campo.
P.- El carácter es la mitad del destino.
R.- Yo creo que sí. Y, luego, también apren-
des mucho de jugar en otros países. En Ale-
mania, por ejemplo, probablemente no fui
la líder que tenía que ser, pero teníamos ya
gente muy líder en el equipo. Aprendí mu-
cho de ellas y aprendí a acaparar diferen-
tes roles, saber encajar cuál es el rol en cada
momento, que no siempre es el de líder o no
siempre es el de persona que sigue a las de-
más. Moverme de un lado a otro, estar en
países con lenguas y culturas diferentes me
ha ayudado a leer el rol a interpretar en cada
momento y a saberme adaptar. Cuando es-
taba en la selección sabía perfectamente que
me tocaba ser líder. Ahora, cuando estoy en
mi club, también. Cuando jugué en Holan-
da, a veces me tocaba ser líder y a veces no.
Creo que saber adaptarse a eso es un logro.
P.- Aparcar el protagonismo para po-
nerse al servicio del equipo.
R.- Un equipo es un puzle. Y no debes tener
cinco esquinas, porque solo necesitas cua-
tro. Si tienes cinco porteras, aunque sean las
mejores cinco del mundo, solo jugará una.
Necesitas cada pieza de puzle en su momen-
to y en su lugar. Y saber ser esa pieza de
puzzle que necesita el equipo es la clave.
CLUBPERARNAU
“Un equipo es un puzle. Y no
debes tener cinco esquinas,
porque solo necesitas cuatro.
Si tienes cinco porteras,
aunque sean las mejores cinco
del mundo, solo jugará una.
Necesitas cada pieza de puzle
en su momento y en su lugar”
P.- Cuando volvió al Jolaseta una tem-
porada, ¿dejó de cobrar?
R.- Sí, renuncié a mi sueldo por mis valores.
Fue un problema entre clubes por mi tras-
paso. Luego se solucionó y regresé al Polo,
donde podía aprender más. Mis compañe-
ras entendieron los motivos por los cuales
marché y fueron ellas las que pidieron que
volviera.
P.- Usted siempre ha tenido claro el
leitmotiv de su carrera: ser la mejor
versión de sí misma.
R.- Esa ha sido siempre mi máxima. No soy
la mejor físicamente ni técnicamente. Pro-
bablemente no tenga una cualidad mejor
P 112
que otras, pero siempre buscaba ser la me-
jor Rocío Ybarra que podía ser. En el Jolaseta
tuvimos una generación excepcionalmente
buena, donde María López de Eguilaz fue
durante mucho tiempo la portera de la selec-
ción española y Bárbara Malda, con 15 años,
ya era internacional absoluta. Eran compa-
ñeras mías de clase y de equipo. Yo nunca fui
referente en categorías inferiores. Yo sabía
que nunca iba a poder ser la mejor del equi-
po, pero que iba a implicarme todo lo posible
para poder llegar a algo. Aunque fuera jugar
en División de Honor, pues sería División de
Honor. Siempre he querido saber hasta dón-
de puedo llegar con algo. Mi forma de ver el
hockey ha sido a base de retos, no tanto el
hecho de ganar títulos sino de probar, por
ejemplo, si era suficientemente buena para
jugar en la liga alemana o la holandesa. Pro-
bablemente cuando me fui a Holanda nadie
pensaba que podía tener nivel para jugar ahí,
porque verdaderamente no era la mejor.
P.- Algo tendrá bueno para retirarse de
la selección española con 266 partidos
a sus espaldas.
R.- Siempre he pensado que lo mejor que
tengo es que me amoldo muy bien a todo.
CLUBPERARNAU
Muchos entrenadores que he tenido no han
sabido nunca decir cuál es mi mejor posi-
ción, si soy defensa, media o delantera.
“Yo sabía que nunca iba a
poder ser la mejor del equipo,
pero que iba a implicarme
todo lo posible para poder
llegar a algo. No soy la mejor
físicamente ni técnicamente.
Probablemente no tenga una
cualidad mejor que otras, pero
siempre buscaba ser la mejor
Rocío Ybarra que podía ser”
P.- Cierto es que ha jugado de todo.
R.- Por eso. Intento dar lo mejor de mí en
todos los sitios. Soy una pieza del puzle,
un comodín. No soy la mejor en nada, pero
puedo encajar en el puzle.
P.- Cuando llegó a Hamburgo se le de-
bió abrir un mundo nuevo.
R.- Lo cierto es que tenía muy buenas ofer-
tas para irme a otros clubes del campeo-
nato español, donde no quería jugar más, y
también de Holanda, que es el paraíso del
hockey femenino. Pero quería ir a Alema-
nia, aunque ahí no tuviera grandes ofertas.
P.- ¿Por qué?
R.- Primero, porque me encanta la tácti-
ca. Yo siempre decía: ‘A las alemanas les
pones una venda en los ojos y saben dón-
de están sus compañeras’. Me parece es-
pectacular y quería aprender eso, a jugar
sin mirar. Segundo, me apetecía mucho la
experiencia vital de ir a un sitio donde no
supiera el idioma.
P 113
P.- Podía haber ido a Holanda. Tampo-
co sabía holandés…
R.- Pero en Holanda me hubiera espabilado
con el inglés del colegio. Ir a Alemania que-
ría decir empezar de cero sin conocer nada.
Y, una vez más, me pregunté si yo sería ca-
paz de eso. Aprendí alemán y me encantó
Hamburgo.
P.- ¿Y aprendió los conceptos tácticos
que fue a buscar?
R.- Sí, pienso que sí. Pero también me
ha enriquecido pasar por otros clubes y
países. En Alemania también tienen sus
carencias. Aplican demasiada táctica in-
cluso cuando no la necesitan. Por ejem-
plo, juegan al segundo poste y juegan al
desvío incluso cuando no hay portero
en vez de tirar a portería. A veces se fa-
lla por pasar demasiado a tu compañera.
En España, en cambio, se peca de falta de
confianza entre compañeras. Como hay
pocos referentes por equipo, a veces tien-
des a jugártela tú. Y en Holanda, es todo
más individualista. Hay un pensamien-
to de querer ser yo la mejor y, entonces,
tiro yo todo, hago yo todo, y apenas hago
combinaciones. Por eso creo que haber
mezclado todas las experiencias en Espa-
ña, Alemania y Holanda me han hecho la
jugadora que soy.
“A las alemanas les pones
una venda en los ojos y saben
dónde están sus compañeras.
Me parece espectacular
y quería aprender eso, a jugar
sin mirar”
CLUBPERARNAU P 114

P.- ¿Cómo le resultó al final la expe- to muy personalizado. Luego me cambié a

riencia en Hamburgo? un club más pequeñito, el HDM de La Haya,
pero que competía al mismo nivel. Fue todo
R.- Fue curioso porque fui perdiendo di-
más familiar y me sentí como en casa du-
nero. En Holanda me daban un cheque en
rante cuatro años. Finalmente me fui al sur
blanco. Me daban lo que quisiera de dinero,
de Holanda, al Oranje Zwart de Eindhoven,
casa y coche. En Alemania me comentaron
que también fue todo un descubrimiento
que me podían poner en un piso compartido
por el carácter alegre de la gente.
con otras compañeras y llegar a un máximo
de 500 euros al mes. Me fui allí a pesar de P.- ¿Le reconocía la gente por la calle
que perdí una beca en España con la que en Holanda?
cobraba 15.000 euros. El club en Hamburgo R.- Sí, allí el hockey hierba es como el de-
me buscó un sueldo durante un tiempo tra- porte rey en categoría femenina.
bajando en el puerto.
P.- ¿Se consigue más paridad entre ca-
P.- ¿Y qué hacía? tegoría masculina y femenina ahí?
R.- Buf. Poner códigos de barras y organizar R.- Yo he sentido poca diferencia. Los ho-
cosas. Eran unos almacenes enormes, casi rarios son muy buenos tanto para chicos
a la intemperie, así que iba forrada de ropa. como para chicas, la televisión está tanto en
Pero como experiencia de vida me fue sú- los partidos femeninos como masculinos y
per útil. Luego, deportivamente, tuve un año sales igual en las noticias de prensa. Los
malo por las lesiones, me perdí la temporada chicos ganan más y los sueldos deberían
de hockey sala. El club me trató fenomenal, cambiar, pero hay una gran profesionaliza-
pero yo no lo pasé del todo bien con la con- ción en todas las categorías.
vivencia de algunas compañeras de equipo.
No pude mantener ese plan en Alemania.
P.- ¿Le esperaba el cheque en blanco
en Holanda?
R.- Ya, no [Ríe]. Pero llegué con una bue-
na oferta. Yo renegaba de jugar en Holanda,
pero me pregunté: `¿Tendré nivel para ju-
gar aquí, que es como una NBA del hockey
hierba femenino?’.
P.- ¿Y qué resumen hace de su etapa
holandesa?
R.- Mi primer año fue en el club más gran-
de de Holanda, el Kampong de Utrecht, el
club donde hay más jugadores de hockey
por metro cuadrado en el mundo. A pesar
de ser un fichaje, me sentí como un número
más. Lo pasé muy bien, pero no fue un tra-
CLUBPERARNAU
P.- ¿Qué va a hacer con todo ese tesoro
de experiencias acumulado?
R.- Mi sueño sería traer a España lo que
he aprendido. Aquí nos llevamos las ma-
nos a la cabeza y decimos: ‘¡Pobres de no-
sotros, que somos un deporte minorita-
rio!’ Pues lo somos porque queremos. La
forma de trabajar de Holanda, Alemania
o incluso otros países como Inglaterra es
muchísimo mejor. El marketing es muy
importante en deportes como el nuestro
y me gustaría ayudar a que el hockey sea
más visible. A las jugadoras nos piden di-
nero para hacer las concentraciones, pero
es muy injusto que no usen nuestra ima-
gen. Me produce tristeza que en mi club
haya jugadoras internacionales con la se-
lección absoluta y que los niños no sepan
ni quiénes son. Deberíamos hacer más
campus por toda España, revalorizar a las
jugadoras. Así cada vez más niños cono-
cerían más este deporte y a sus depor-
tistas y aumentaría el número de fichas
federativas. Así la liga nacional sería más
fuerte. No se puede funcionar solo por-
que cuatro enamoradas del hockey den
su vida por este deporte.
P.- Hay países como Argentina donde
no deben tener más recursos que en
España y, sin embargo, el hockey tiene
más relevancia.
R.- Eso es. Argentina tiene a dos grandes
jugadoras referentes como Luciana Aymar
y Delfina Merino y las utilizan. Lo mismo
pasa con Carla Rebechi, Florencia Habif o
Gonzalo Peillat. Los revalorizan por todo el
país, no solo donde más se juega, en Bue-
nos Aires.
P 115
“Aquí nos llevamos las manos
a la cabeza y decimos: ‘¡Pobres
de nosotros, que somos un
deporte minoritario!’ Pues lo
somos porque queremos”
P.- Usted está deseando ser embajadora
del hockey hierba español.
R.- Me encantaría. El hockey me ha dado mu-
cho y quiero devolver mi parte. A mí me ha
dado muchas experiencias, poder hacer mu-
chos viajes ¡y no por ser buena, sino por jugar
a este deporte! El hockey es capaz de regalar
buenas experiencias a todo el mundo.
P.- Con el número de fichas federativas
de España es casi un milagro que ha-
yan competido a tan buen nivel a nivel
de selecciones.
R.- Es para estar más que orgullosos de
nuestro papel. Un dato: el primer club de
Holanda donde estuve tiene más fichas fe-
derativas que toda España. Yo cuando vol-
vía a casa de entrenarme en ese equipo de-
cía: “Son tontos. Tienen más gente que en
toda España y me vienen a buscar a mí”
[Ríe]. Está claro que luego me tenía que ha-
cer valer y que vieron algo en mí que les
faltaba. Pero pensaba que, con tanta gen-
te, habría muchos que deberían jugar muy
bien al hockey.
“El primer club de Holanda
donde estuve tiene más fichas
federativas que toda España.
En los clubes tienen lista de
espera de niñas interesadas
para jugar a hockey”
CLUBPERARNAU P 116
CLUBPERARNAU P 117

P.- Holanda debe ser un auténtico pa- P.- Habrá mucho de lo aprendido con el
raíso para las jugadoras de hockey hockey que le servirá ahora como pro-
hierba. fesora.
R.- Un paraíso. Me enamora hablar de esto. R.- La verdad es que sí. De entrada, doy
En los clubes tienen lista de espera de niñas clases de inglés, idioma que perfeccioné
interesadas para jugar a hockey. Vas por la fuera. Este es mi segundo año de profeso-
calle y ves a chavales jugando con su palo ra en España y aún no estoy tan suelta en
y su bola y haciendo las porterías con sus el aula como en el campo, pero aprendo de
mochilas. Vas a la playa y ves a gente que las compañeras y busco mi sitio ¡como en el
deja colgado los sticks al lado de los bares. hockey! [Ríe].
Yo me hinchaba a hacer fotos de todo esto.
En Vizcaya, de donde soy, solo había un
Isaac Lluch.
club cuando empecé.
@isaac_lluch
P.- Menudo contraste.
R.- En Holanda hay tiendas solo de hockey,
tiendas donde vendían las camisetas de
nuestro equipo con nuestros nombres. ‘¡Es-
tán locos!’, me decía. Cuando recibía visitas
de fuera las llevaba siempre a las tiendas.
Y luego hay muchos niños que en sus bi-
cis llevan un utensilio para transportar los
palos. ¡Piensan en todo para el hockey! Yo
todo eso lo he vivido con mucha emoción.
CLUBPERARNAU P 118

EL ESTRÉS Rosa Coba

El protagonista de esta entrega de “Mentes Deportivas” es un asunto tan de actualidad
en cualquier ámbito de la vida, y por supuesto del deporte, que cuando hablamos de él lo
hacemos en muchos casos quizás despojándolo del verdadero significado que supone en la
vida de quien lo padece. Y créanme que no es algo baladí.
CLUBPERARNAU P 119

“E s el mal de las sociedades modernas”, “queremos

abarcar más de lo que podemos”, “cada vez aguan-
tan menos”… Son comentarios que se pueden es-
cuchar de forma habitual en torno a este término: el estrés.
EL ESTRÉS ESTÁ
ASOCIADO A
UN PERFIL DE
EXPERIMENTACIÓN,
Para empezar no debemos olvidar que puede constituir una
patología en sí misma y, como tal, está recogido en los ma- EXPRESIÓN Y
nuales de psicodiagnóstico que utilizamos los profesionales RE-EXPERIMENTACIÓN
de la salud mental. También podemos referirnos al estrés EN FORMA DE
como un síntoma de otra patología y otras tantas veces está SÍNTOMAS QUE TIENEN
íntimamente asociado a situaciones traumáticas.
QUE VER CON LA
Sea como fuere, el estrés está asociado a un perfil de expe-
rimentación, expresión y re-experimentación en forma de SOBREACTIVACIÓN
síntomas que tienen que ver con la sobreactivación psicofí- PSICOFÍSICA, EL
sica, el bloqueo mental y el sufrimiento. BLOQUEO MENTAL Y EL
No obstante, como bien dijo el célebre fisiólogo francés Claude SUFRIMIENTO
Bernard, “no hay enfermedades, sino enfermos”. Y tal como
veremos, los factores intrínsecos de personalidad, los estilos
cognitivos y de vida serán factores precursores o protectores
ante el estrés. Es curioso, pero viniendo dicho aforismo de
uno de los precursores del método hipotético-deductivo, in-
tentaré aportar al lector elementos que le puedan ser de utili-
dad en sus hipótesis de trabajo ante deportistas, por ejemplo,
con un irregular rendimiento, con sensación de estar sobre-
pasados, cansados o con alteraciones psicofísicas.

TRÍADA ESPACIO-TIEMPO-PERSONA Y ESTRÉS

Empezaré por una clave positiva en relación al estrés: es una
de las respuestas psicofisiológicas que ofrece un margen de
mejora enorme cuando es correctamente gestionada. Ya te-
nemos dos conceptos importantes: es una respuesta y puede
ser modificada. La pregunta que siempre debemos hacernos
en primer lugar es qué factores, situaciones o interacciones
generan estrés en torno a la tríada espacio-tiempo-persona.
El estrés no es universal, es decir, lo que resulta un factor desen-
cadenante de estrés a una persona no lo es para otra, ni tampoco
la misma persona reacciona con estrés siempre ante un mismo
estímulo, ni por supuesto en cualquier momento de su vida.
Como ven, y para ser coherentes con la idiosincrasia huma-
na, la complejidad no nos abandona.
CLUBPERARNAU P 120

Entonces, ¿cómo observamos el estrés? El estrés genera a SENTIR ESTRÉS

quién lo siente sensación de estar desbordado, de que le su- ENGLOBA UNA SERIE
pera algo. Esto es diferente a estar nervioso o preocupado.
DE SENSACIONES
Sentir estrés engloba una serie de sensaciones que general-
mente llevan al individuo a sentirse sobrepasado y a perder QUE GENERALMENTE
la perspectiva de su capacidad de gestionar adecuadamente LLEVAN AL INDIVIDUO
la situación ante la que se encuentran. A SENTIRSE
En definitiva, es una respuesta adaptativa ante una amenaza SOBREPASADO
que percibimos. La segunda parte, y en gran medida la que Y A PERDER LA
puede depender de nosotros, hace referencia a las opciones y
capacidades que tenemos para hacer frente a esto que perci- PERSPECTIVA DE SU
bimos. Por eso comentaba anteriormente que el abordaje te- CAPACIDAD
rapéutico del estrés ofrece un margen de mejora muy eficaz
ya que permite avanzar a la persona en el control de algo que,
de entrada, siente no puede controlar. Para ello, como vere- DEBEMOS
mos, es esencial utilizar diversas técnicas psicológicas que DESCONECTAR Y,
se convertirán en herramientas, no sólo para arreglar el pin- POR SUPUESTO,
chazo del momento, sino que las técnicas de afrontamiento
y control del estrés nos permiten aprender a modificar cog- “DESENCHUFARNOS”.
niciones, que muchas veces son la clave que falla: cómo per- ¡QUÉ PELIGROSA ES LA
cibimos una amenaza, cómo valoramos nuestras respuestas HIPERCONEXIÓN!
de afrontamiento y, por supuesto, cómo decidimos.
Ni todo vale ni todo hay que relativizarlo sin más y por ello
esperar que no nos perturbe, pero sí debemos aprender a ge-
nerar cogniciones útiles y saludables. Sabemos que no hay un
stop fácil y a veces ni tan siquiera difícil al alcance de nuestro
dedo índice cuando más lo necesitamos y que con tan solo
pulsarlo, como por arte de magia, pudiéramos fulminar los
pesos que nos doblan las rodillas. Aún así, entre ese polo y el
contrario… podemos y debemos desconectar y, por supues-
to, “desenchufarnos”. ¡Qué peligrosa es la hiperconexión! No
sólo hay que hacer esto, pero sin esto no arrancamos. Te-
nemos la obligación de poner a salvo nuestra integridad y
sin pretender ser alarmista, créanme cuando les digo que el
estrés puede llegar a ponerla en jaque. Si nos referimos a la
vertiente mental, como vamos a ir viendo, los síntomas psi-
cológicos son rápidos, muy visibles a corto plazo y pueden
ser graves. Las formas de expresión más físicas, o algunas
de ellas, son más lentas y menos ruidosas, pero cuando se
hacen visibles lo hacen “a lo grande” y las consecuencias al-
gunas veces son también devastadoras.
CLUBPERARNAU P 121

¿TAN SERIO ES PADECER ESTRÉS? EL ESTRÉS ES

Hoy en día se considera que el estrés es el principal factor UN CONJUNTO
causante de trastornos psicológicos y uno de los principa- DE RESPUESTAS
les de las alteraciones orgánicas. ¿Por qué? Porque afecta ANTE ESTÍMULOS
a nuestro entramado psicofísico por cuatro vías que incluso
pueden ser sumatorias: QUE PERCIBIMOS
• Facilitando la aparición de enfermedades.
AMENAZANTES O
• Acelerando el progreso de enfermedades crónicas. QUE SOBREPASAN
• Fomentando de forma sigilosa conductas nocivas. NUESTROS RECURSOS
• Reduciendo hábitos saludables.
En torno al deporte, el estrés cobra un sentido muy espe-
cial porque es un compañero de viaje, incluso un “necesario” AUTOMÁTICAMENTE
acompañante, pero hasta cierto punto, claro está. Llegados NOS SENTIMOS
a un límite, pasa de ser necesario a ser un obstáculo. Este DESARMADOS ANTE
planteamiento nos conecta con una aproximación a lo que es
LA IDEA DE QUE SE
el estrés y sus subtipos.
DINAMITE NUESTRO
BIENESTAR
¿QUÉ ES EL ESTRÉS?
Se puede considerar un conjunto de respuestas psicofisiológi-
cas que nos preparan para afrontar una interacción. Y no utilizo
el término “acción” porque actuar ante algo implica en primer
lugar percibirlo y, a su vez, lo hacemos en base a nuestra expe-
riencia y sensaciones. No es un mecanismo de acción-reacción.
El proceso que regula ese tándem en sí mismo ya constituye un
elemento diferenciador. ¿Cómo se llama?: sistema nervioso.
Quizás es muy arriesgado afirmar tal planteamiento… No nos
ponemos de acuerdo en torno a si fue antes el huevo o la ga-
llina. Por eso, invito a la inquietud del lector a que sea crítico
con dicho planteamiento. La ciencia no nos da todavía una
respuesta unánime al respecto. Desde Malho y su “acto tácti-
co” hasta hoy, ha habido un progreso espectacular en mate-
ria de neurociencia y ahí la tenemos, calentando en la banda,
presta a saltar al campo. Les advierto que ni se enfada, ni se
frustra, ni se cansa de esperar.
Volviendo al estrés, ya sabemos que es un conjunto de res-
puestas ante estímulos que percibimos amenazantes o que
sobrepasan nuestros recursos y a niveles moderados, estas
respuestas son muy útiles. ¿Pero qué pasa cuando este me-
canismo se convierte en crónico?
CLUBPERARNAU P 122

Empecemos por comprender que las respuestas psicofisio- DIFERENCIAMOS

lógicas que se activan ante los estímulos estresores lo hacen ENTRE EL ESTRÉS
de forma coordinada e implican distintos órganos y sistemas.
“BUENO”, TAMBIÉN
Generalmente, estos estímulos que activan este sistema son
LLAMADO “EUSTRÉS”,
los que nos generan lo que percibimos como cambios impor-
tantes o un sobreesfuerzo para el que sentimos que no esta- DEL ESTRÉS
mos preparados. Y automáticamente nos sentimos desarma- “PATOLÓGICO” O
dos ante la idea de que se dinamite nuestro bienestar. “DISTRÉS”. QUE
¿Recuerdan la tríada espacio-tiempo-persona? Pues es, ni APAREZCA UNO U
más ni menos, la responsable de que el estrés tenga con- OTRO VA A DEPENDER
secuencias negativas o no. Cuando no las tiene o cuando
se aprende a afrontar correctamente, resulta ser una gran DE DISTINTOS
oportunidad para el cambio o para descubrir herramientas FACTORES
que no sabíamos que teníamos. En ese caso, el estrés tiene
un resultado adaptativo y, por eso, diferenciamos entre el es-
trés “bueno”, también llamado “eustrés”, del estrés “patoló-
gico” o “distrés”. Que aparezca uno u otro va a depender de
distintos factores tales como la personalidad, cómo evalua-
mos y tomamos conciencia y las capacidades que ponemos
en marcha para hacerlo, el estilo cognitivo y la red de apoyo
que percibamos.

ALOSTASIS, CARGA Y SOBRECARGA ALOSTÁTICA

Para seguir escrutando los confines del estrés y poder crear
sobre él un mapa mental claro y directo, vamos a acercarnos
a un concepto interesantísimo a nivel neurocientífico que es
el de alostasis y su carga-sobrecarga.
La alostasis no es otra cosa que un proceso que involucra un
complejo sistema de autorregulación con el que respondemos
a los cambios. Su objetivo primordial es mantener la homeos-
tasis y para ello, el sistema nervioso central coge la batuta y
dirige al sistema nervioso autónomo, al entramado que for-
ma la hipófisis, el hipotálamo y las glándulas suprarrenales,
al sistema cardiorrespiratorio, metabólico e inmunológico.
El conjunto de las modificaciones que el organismo pone en
marcha ante estresores para evitar daños es lo que llama-
mos carga alostática, pero cuando la carga alostática no es
resolutiva porque la respuesta adaptativa es insuficiente o
excesiva para llegar a la homeostasis, entonces hablamos de
distrés o lo que es lo mismo: sobrecarga alostática. De ahí que
CLUBPERARNAU P 123

se pueda considerar el estrés como el conjunto de estímulos LA ALOSTASIS NO

y respuestas de un organismo frente a los cambios y modifi- ES OTRA COSA QUE
caciones que atentan contra la homeostasis.
UN PROCESO QUE
En un principio, el estrés constituye un mecanismo necesario
INVOLUCRA UN
que no provoca daño, pero cuando la magnitud del estrés su-
pera la capacidad adaptativa aparecen los daños psicofísicos. COMPLEJO SISTEMA
DE AUTORREGULACIÓN
CON EL QUE
ESTRESORES PSICOSOCIALES Y AUTOESTIMA
RESPONDEMOS A LOS
Actualmente, se considera a los estresores psicosociales
como las experiencias estresantes más potentes. Yo prefiero
CAMBIOS
llamarles “discípulos de la percepción subjetiva entre las ex-
periencias internas y externas”. Ya sé que es un poco largo
el nombre, pero las cuestiones de alto abolengo tienen mu- SU OBJETIVO
chos apellidos, que supongo les da empaque. En definitiva, y PRIMORDIAL ES
al margen de la longitud del nombre, hablamos de cómo nos MANTENER LA
anticipamos y leemos los estímulos “negativos”, cómo tra- HOMEOSTASIS Y PARA
ducimos las recompensas y el papel de la comunicación y la
autoestima como autorreguladores que, entre otros, forman
ELLO, EL SISTEMA
una orquesta sinfónica en nuestro cerebro de dimensiones NERVIOSO CENTRAL
alucinantes. La sobrecarga alostática convierte la batuta en COGE LA BATUTA
una mezcla de plomo y hormigón armado. A ver qué ilustrí-
simo supera semejante cuestión.
Los lectores de esta sección (“Mentes Deportivas”) saben de
la importancia que siempre otorgo a la autoestima y, en re-
lación al tema que nos ocupa en esta ocasión, debemos te-
ner en cuenta que numerosos estudios confirman que la baja
autoestima es un factor de gran peso a la hora de elegir de
forma improductiva ante situaciones que percibimos estre-
santes y, por tanto, como pasa siempre a nivel psicológico, si
no elegimos de forma productiva aparecen daños colatera-
les. Un ejemplo claro son la culpa o, en el extremo opuesto,
ignorar lo que pasa: “yo-solo-pasaba-por-aquí”.
Es más que evidente que las creencias de cada cual incidi-
rán sobre el proceso de estrés, modulando los procesos de
valoración sobre los estresores. Cada vez observamos más
que el abuso de sustancias está relacionado con estos meca-
nismos y el mundo del deporte no escapa a ello. Pensemos
en la disonancia que ocurre en el cerebro de un deportista
cuando se plantea y culmina llevando a cabo el dopaje. Y, por
favor, quiten de su mente el estereotipo en forma de imagen
CLUBPERARNAU P 124

de persona cabizbaja asociada a la baja autoestima. Muchas LA BAJA AUTOESTIMA

veces la baja autoestima se disfraza de malote. ES UN FACTOR DE
Por eso, y permítanme la licencia, crean. Aunque, claro, cui- GRAN PESO A LA HORA
dado con las creencias que vayan más allá de la más podero-
DE ELEGIR DE FORMA
sa y menos sencilla: uno mismo. Ofrece resistencias, algunas
tremendas, y a veces nos da disgustos, pero es la más po- IMPRODUCTIVA
tente y certera. El resto, hasta las más divinas, pasan por la ANTE SITUACIONES
aceptación del que cree. QUE PERCIBIMOS
Volviendo a lo terrenal, todo lo expuesto nos lleva a concluir ESTRESANTES
que hay un claro componente subjetivo ante el estrés: depen-
de de cada persona. Lo que sí es unánime es cómo reacciona
nuestro organismo y lo hace a través de respuestas fisioló- NUESTRO ORGANISMO
gicas, cognitivas, emocionales y conductuales. Y de forma REACCIONA A TRAVÉS
nada despreciable.
DE RESPUESTAS
FISIOLÓGICAS,
QUÉ NOS PASA CUANDO SENTIMOS ESTRÉS COGNITIVAS,
Lo primero que ocurre es que la amígdala, una parte impor- EMOCIONALES Y
tantísima de nuestro cerebro que procesa todo lo relativo a
CONDUCTUALES
nuestras reacciones emocionales, cumple su función a rajata-
bla: regula nuestra conducta. ¿Cómo? Detectando, generan-
do o manteniendo emociones e incorporándolas si le parecen
relevantes a nuestra memoria. Es la encargada de hacernos
un libro de recuerdos de nuestros miedos. De ese modo, ante
una próxima vez, la amígdala nos abre el libro y nos recuerda
que ya tenemos repetido ese miedo, es decir, lo conocemos
“para bien” (alivio, este lo controlo) o “para mal” (¡otra vez,
no!) o bien lo desprecia por irrelevante (los miedecillos, al fi-
nal del pasillo, por favor) o bien nos presenta uno nuevo y lo
incorpora al libro. Ante este panorama, a la par que el libro
va cogiendo consistencia, se sobreactiva el hipotálamo, el rey
del repertorio de jugadas más amplio que existe.
¿Saben por qué? Es una glándula de nuestro cerebro que,
con el tamaño de un guisante, alberga la mayor diversidad
de neuronas que cualquier otra estructura cerebral. Controla
nuestro sistema endocrino y el sistema nervioso autónomo
y, por tanto, las expresiones fisiológicas de las emociones. A
partir de ahí, el hipotálamo envía la orden a través de nuestra
médula espinal a las glándulas suprarrenales (riñones), que
serán las que activan la química en este proceso de estrés.
¿Cómo? Secretando hormonas, principalmente de dos tipos,
CLUBPERARNAU P 125

coticoesteroides y catecolaminas. Las más importantes de LA AMÍGDALA ES

estos grupos son la adrenalina, la noradrenalina y la dopami- LA ENCARGADA DE
na y los cambios que se generan afectan tanto a nivel central
HACERNOS UN LIBRO
como a nivel periférico.
DE RECUERDOS DE
Hasta ahí no ha de pasar nada negativo en especial, por tan-
to, estaríamos ante un estrés normal e incluso positivo, del NUESTROS MIEDOS
que nos ayuda a adaptarnos. Aumentará moderadamente la
presión arterial y la frecuencia cardíaca, lo que conllevará un
mejor riego sanguíneo, nuestros músculos y cerebro estarán LA DOSIS CORRECTA
mejor irrigados, oxigenados, nutridos, estaremos más con- DE ESTRÉS NOS
centrados y en estado óptimo de alerta. Los vasos sanguí- AYUDA A ESTAR
neos de la piel se contraen para que haya el menor sangrado
PREPARADOS Y LISTOS
posible en el caso de lesión, los carbohidratos almacenados
se transforman en glucosa presta a circular por la sangre, PARA EL PISTOLETAZO
los glóbulos blancos que combaten las infecciones se ponen DE SALIDA EN
en alerta por si precisaran actuar y el toque de excelencia lo CONDICIONES
pone nuestro lóbulo frontal, ya que en este estado nos ayuda ÓPTIMAS
a anticipar una amenaza porque nos permite confrontar la
experiencia que tenemos con la capacidad de inferir.
A este “sarao” se unen las marchosas por excelencia, las en-
dorfinas y las encefalinas, que son neurotransmisores, pero
no unos cualquiera: son nuestros opiáceos endógenos por
excelencia, tan útiles, por ejemplo, para disminuir la percep-
ción de dolor y fundamentales en la práctica deportiva no
sólo en el “post” y la recompensa, sino también en el “duran-
te”. ¿Casualidad que en plena “faena” no percibamos tanto
el dolor? O sea, la dosis correcta de estrés nos ayuda a estar
preparados y listos para el pistoletazo de salida en condicio-
nes óptimas.
Ahora bien, cuando los estímulos y percepciones estresan-
tes se cronifican, o los sentimos mega-excesivos, aparecen
los problemas importantes. A esto ya le llamaríamos distrés
y es lo que normalmente identificamos como estrés porque
ocurren dos eventos a la vez: nos sentimos sobrepasados y
detectamos señales psicofísicas que pensamos que escapan
de nuestro control.
En esta situación, además del hipotálamo en acción, sale en
su ayuda la hipófisis, otra glándula endocrina de nuestro ce-
rebro, y ambas crean el llamado eje hipotalámico–hipofisario
(HHP), que en combinación con las suprarrenales segrega la
conocida como la hormona del estrés: el cortisol. Su absor-
CLUBPERARNAU P 126

ción es mucho más lenta y por eso nuestro organismo la li- EL ESTRÉS
bera en este estado, ya que la sobreactivación es mucho más GENERA CAMBIOS
prolongada. No nos vale sólo la adrenalina, que es de acción
ESTRUCTURALES EN
inmediata y que tenemos a raudales en el estrés positivo. Y
claro, ya ha advertido el lector que aquí la clave va a resi- EL CEREBRO, DE AHÍ
dir en la cronicidad. El cortisol a corto plazo no tiene que ser QUE ESTÉ VINCULADO
perjudicial, tiene efectos positivos como antiinflamatorio y A LA PÉRDIDA DE
está, por ejemplo, asociado a factores de reparación del daño
MEMORIA
celular, pero niveles elevados y mantenidos en el tiempo de
cortisol en sangre generan importantes problemas de salud.
Y fíjense en un detalle: cuando pensamos en la palabra “es- EL DISTRÉS
trés” acuden a nosotros sinónimos de “sobreactivación”, que
DISMINUYE NUESTRA
son absolutamente certeros, como la tensión arterial dispa-
rada, corazón bombardeando más rápido, pero… también CAPACIDAD
ocurre el fenómeno de la inhibición, como por ejemplo para PARA RAZONAR,
que el organismo se deshaga de la grasa acumulada, o la re- CONCENTRARNOS,
ducción de la activación del sistema inmunitario, lo que nos RESOLVER PROBLEMAS
deja más vulnerables ante agentes patógenos (de ahí la proli-
feración de dermatitis, la artritis reumatoide, ciertas alergias Y LA CREATIVIDAD SE
y tumores). También ocurren otros fenómenos, como que las EVAPORA
reservas hepáticas de glucosa empiezan a descompensarse,
la sangre tiende a ser más trombótica (veremos a continua-
ción la importancia en relación a accidentes cerebrovascu-
lares), la reducción del oxígeno en órganos esenciales como
por ejemplo corazón y cerebro. Y hablando de este último,
¿qué pasa con él ante el distrés? Pues ni más ni menos que
en primer lugar disminuye nuestra capacidad para razonar,
concentrarnos, resolver problemas y la creatividad se evapo-
ra. El estrés genera cambios estructurales en el cerebro, de
ahí que esté vinculado a la pérdida de memoria, ¿saben por
qué? Porque el hipocampo se reduce, se hace más peque-
ño, por increíble que parezca. Las neuronas sufren procesos
de oxidación similares a los que ocurren en fases incipientes
de la enfermedad de Alzheimer. Todo esto lleva en los casos
más graves al deterioro cognitivo. Esto, que no cunda el páni-
co, no es lo que nos pasa cuando no encontramos las llaves o
nos sorprendemos con un tenedor en la mano sin saber para
qué lo hemos cogido.
Nuestro estado de ánimo es un clarísimo indicador muy tem-
prano de que andamos superados, ya que la ilusión, la mo-
tivación, la vitalidad, la chispa, dan paso a un estado en el
CLUBPERARNAU P 127

que nos sentimos más lentos, ineficaces y apáticos. A estas HEMOS DE TENER MUY
alturas, las endorfinas en nuestro cerebro son una especie CLARO QUE ESTRÉS
en vías de extinción. ¿Por qué? Porque el cortisol inhibe
Y DEPRESIÓN SON
neurotransmisores como la serotonina y la dopamina, am-
bos relacionadísimos con las respuestas anteriormente men- COMPATIBLES Y QUE
cionadas. Hemos de tener muy claro, por tanto, que estrés y ANSIEDAD NO ES
depresión son compatibles (a veces es una falacia inducida SINÓNIMO DE ESTRÉS
por la asociación que tendemos a hacer entre estrés y sobre-
activación y por eso les explicaba anteriormente que con el
estrés también ocurren fenómenos inhibitorios) y que ansie- PARA EL AÑO 2020
dad no es sinónimo de estrés. ¿Entendemos mejor titulares
EL ESTRÉS SERÁ EL
sensacionalistas como: “cambie su terapeuta por ir al gimna-
sio”? Yo más bien diría: “Ponga un terapeuta y un gimnasio SEGUNDO FACTOR
en su vida”. Y sentido común, por favor. CAUSANTE DE
Por cierto, y hablando de cerebro, estrés y deporte, el lec- ENFERMEDADES EN
tor asiduo a esta sección conoce las moléculas BDNF, que les TODO EL MUNDO,
recuerdo que son un factor neurotrófico de nuestro cerebro ENTRE OTROS
muy relacionado con el aprendizaje y que la práctica depor-
tiva estimula. Pues bien, debemos saber que el estrés dis- FACTORES POR LA
minuye la segregación de esta molécula. He aquí una expli- RELACIÓN ALARMANTE
cación-consecuencia más de los efectos negativos del estrés ENTRE EL ESTRÉS
sobre el aprendizaje. COMO FACTOR DE
RIESGO DE UN ICTUS
EL ESTRÉS, UN PROBLEMA DE SALUD MUNDIAL
La OMS prevé que para el año 2020 el estrés será el segun-
do factor causante de enfermedades en todo el mundo, entre
otros factores por la relación alarmante entre el estrés como
factor de riesgo de un ictus.
Les aconsejo (y esta vez no les pido permiso) que estén in-
formados y atentos ante esta nueva epidemia. Un ictus puede
ser de origen hemorrágico (hemorragia cerebral) o isquémi-
co (infarto cerebral). Los primeros se producen cuando una
vena o arteria se rompe y los segundos, cuando hay un coá-
gulo o trombo que obstruye (muchas veces este trombo se
origina en el corazón y se desplaza hasta el cerebro, como
ocurre en las fibrilaciones auriculares).
Conocer los síntomas y cómo actuar, así como tener muy
presente que la rapidez a la hora de actuar, en este caso es
sinónimo de salvar vidas o de que las secuelas sean menores,
no es algo que debamos obviar.
CLUBPERARNAU P 128

Según el Observatorio del Ictus, “uno de cada seis españoles

va a sufrir un ictus a lo largo de su vida, y en la actualidad
es la primera causa de discapacidad grave en el adulto (tanto
física como intelectual) y de dependencia; la segunda causa
de muerte en España y la primera en mujeres. Cada vez se
registran más casos entre adultos jóvenes, debido a hábitos
de vida incorrectos e insanos”.
Abundando en este aspecto, estudios muy rigurosos ya nos
advierten, como el publicado en Journal of Neurology, Neu-
rosurgery and Psychiatry (2012) por un prestigioso grupo
de investigadores del Hospital Clínico Universitario San Car-
los (Universidad Complutense de Madrid), que aquellas per-
sonas que habían tenido un episodio de estrés importante
durante el año anterior al estudio, presentaban un riesgo de
ictus casi cuatro veces mayor que el grupo de control sano
(estrés importante = estrés crónico).

¿PODEMOS PARAR EL AVANCE DEL ESTRÉS?

Hemos de ser conscientes de que no se pasa de un estrés
positivo a uno crónico en un instante, sino que nos permi-
te cierto margen de maniobra, de ahí que la información y
formación al respecto sea esencial para detectar factores de
riesgo. Podemos considerar que hay tres estaciones por las
que podemos pasar y que si nos bajamos del tren en la prime-
ra, mejor que en la segunda, pero que si llegamos a la terce-
ra también nos podemos bajar. Por eso señalaba al principio
que trabajar el estrés, pese a su complejidad, nos da mucho
margen de mejora y aprendizaje.
• Estación 1: Alarma y reacción
• Estación 2: Encaje (nos intentamos adaptar)
• Estación 3: Agotamiento
A nivel deportivo, aplicar este modelo de estaciones me pa-
rece del todo apropiado ya que puede ayudar mucho a identi-
ficar factores de riego e incluso poder llegar a hacer preven-
ción, una panacea que en el contexto deportivo, con mucha
más agilidad que en otros contextos, podemos conseguir ya
que disponemos de todos los elementos a priori negativos,
pero también los positivos, para este objetivo a la par que una
fluidez en la presentación de estímulos cambiantes y una ne-
cesidad de respuesta eficaz que no admite parangón.
CLUBPERARNAU P 129

¿QUÉ PODEMOS HACER PARA PREVENIR EL ESTRÉS? TRABAJAR EL

1. Revisar cómo estamos evaluando. ESTRÉS, PESE A SU
2. Revisar nuestro funcionamiento ante la resolución de COMPLEJIDAD, NOS
problemas, la toma de decisiones y entrenamiento en DA MUCHO MARGEN
este sentido.
DE MEJORA Y
3. Concepto sano de reto o desafío.
APRENDIZAJE
4. Mejorar la capacidad de autocontrol.
5. Técnicas de inoculación al estrés (generan una respues-
ta de relajación psicofísica incompatible con las respues-
tas psicofisiológicas de afrontamiento).
6. Sueño/descanso: El descanso es un antídoto natural
frente al estrés y entre otros beneficios, en él se activan
mecanismos de reparación neuronal.
7. Alimentación correcta. Debe incluir no sólo salubridad y
equilibrio nutricional en torno a lo que comemos y bebemos,
sino prestar atención a elementos importantes del contexto,
como el tiempo que le dedicamos, cuidar los detalles, rituali-
zar, mimarnos en ese sentido y… ¡no mirar pantallas!
8. Meditación: practicar meditación, yoga o taichí pueden
activar una respuesta fisiológica contraria a la producida
por el estrés y contrarrestar sus efectos.
9. Desconexión digital: desconectarnos de los dispositivos
electrónicos mínimo media hora antes de ir a dormir y
evitarlos durante ciertos momentos del día no sólo por
la obligación de las circunstancias, sino además por vo-
luntad propia, asociando esta desconexión a momentos
rutinarios de nuestro día a día. Estamos llegando a un
punto para hacérnoslo mirar.

EN RELACIÓN AL DEPORTE Y ESTRÉS

Es fundamental considerar tres aspectos:
• La información y formación que el propio deportista y sus
técnicos deben manejar para reconocer y reconocerse ante
respuestas compatibles con el estrés.
• La competición en sí misma es un factor de riesgo ante el
estrés.
• Cómo manejar ciertas variables que pueden ser la gota que
colma o el desagüe que libere. Me refiero, por ejemplo, a va-
riables que tienen que ver con la comunicación, la gestión
CLUBPERARNAU P 130

del tándem entre presión interna y externa, el ambiente de LA COMPETICIÓN EN SÍ

trabajo, el momento competitivo y el sentirse respetado. MISMA ES UN FACTOR
El estrés competitivo lo asemejo a una “sirena” que nos pone DE RIESGO ANTE EL
en sobre aviso ante algo que el deportista debe manejar a la
ESTRÉS
perfección: la capacidad de adaptarse. Competir mejor o sa-
ber competir entraña saberse adaptar mejor o muy bien. Se
trata de ser un estupendo equilibrista ante un camino con
COMPETIR MEJOR
obstáculos. Y el equilibrista no sólo es bueno si no se cae, sino
haciendo lo más difícil: sabiéndose sobreponer a la caída. O SABER COMPETIR
El deportista debe saber percibir. ”Percibir” es un verbo ma- ENTRAÑA SABERSE
ravilloso que da sentido completo a una adecuada capacidad ADAPTAR MEJOR O
que tenemos de comunicarnos con nosotros mismos y con MUY BIEN
lo que nos rodea, ya que implica dar valor semántico y, por
tanto, valor emocional a nuestras sensaciones. Por eso, es
complicadísimo determinar el alcance de las emociones, los
sentimientos y las resistencias racionales, pero sí debemos
poder detectar cuándo el natural desorden se ordena en for-
ma de interacción estática. Las interacciones estáticas en re-
lación al deporte son una señal de alarma y constituyen un
sistema erróneo psicológicamente hablando, fuente clara de
frustración, sufrimiento y de estrés seguro.

FACTORES PREDISPONENTES EN EL
CONTEXTO DEPORTIVO
Sabemos que el estrés es un conjunto de respuestas involun-
tarias para sobrevivir en situaciones extraordinarias. Pero,
¿qué sucede cuando en la “normalidad” de la vida de alguien
las situaciones “extraordinarias” son frecuentes? Esto es lo
que les sucede a muchas personas que trabajan vinculadas
al mundo del deporte, ya sean los deportistas/jugadores en
sí o sus técnicos. El estrés del técnico es muchas veces inhu-
mano y poco considerado. Se da por hecho que dispone de
mecanismos de defensa y no siempre es así. No hay más que
ver la mancha de cortisol que van dejando algunos a su paso…
y aunque se podría pensar que “te acostumbras”, o sea, que
en parte normalizas tu respuesta ante estas situaciones, sólo
es en parte. En gran medida va a depender de la presencia o
no de factores predisponentes:
• Presión externa (ambiental).
• Percepciones de amenaza.
CLUBPERARNAU P 131

• Alteración fisiológica. EL ESTRÉS DEL

• Aislamiento. TÉCNICO ES MUCHAS
• Presión interna (intereses bloqueados y frustración).
VECES INHUMANO Y
• Presión grupal.
POCO CONSIDERADO.
SE DA POR HECHO
¿QUÉ LE OCURRE AL CEREBRO DEL QUE DISPONE DE
DEPORTISTA ESTRESADO? MECANISMOS DE
Cuando hablamos de estrés positivo, lo predispone a aumen- DEFENSA Y NO
tar su rendimiento, pero cuando hablamos de distrés ocurre
lo contrario ya que se ve comprometida la capacidad de res-
SIEMPRE ES ASÍ
puesta de las regiones cerebrales implicadas en mantener el
esfuerzo, cambiar el foco de atención con rapidez o atender a
varios estímulos simultáneamente.
No obstante, el deporte en sí mismo es beneficioso ante el es-
trés. Ya saben de las bondades de las endorfinas, el aumento de
la oxigenación e irrigación cerebral, entre otras, pero hay con-
troversia en torno a si el “exceso” está vinculado al desgaste de
reservas naturales de serotonina que resultan ser beneficiosas
para protegernos del estrés. Por cierto, apunten en la lista de
deseables a las norepinefrinas. Lo único terrible que tienen es el
nombre. Las endorfinas son las populares y éstas que acabo de
presentarles son mucho más discretas. Ahí andan los expertos,
debatiéndose ya que parecen tener una potencia enorme en re-
lación a la regulación de las respuestas emocionales y el estrés.
Seguiremos la pista a las norepinefrinas.
En cualquier caso, creo que no son tan determinantes las re-
servas o no de tal o cual sustancia, sino más bien lo es cómo
el deportista realiza el abordaje de la exigencia competitiva a
nivel psicológico y, por tanto, se deberían poder entrenar las
respuestas emocionales ante el estrés; es decir, ser “buenos”
percibidores y traductores. Sólo así podemos ser eficaces to-
mando decisiones compitiendo ante la plaga de dudas, mie-
dos e inseguridades que de forma más que natural muchas
veces se sienten. ¿Quién lo entrena?
Seguiremos calentando en la banda.

Rosa Coba.
-Psicóloga-
@RosaCoba
CLUBPERARNAU Enrique Soto
P 132

LA DESPEDIDA
DE MOZART

Ilustración: Marc Casasús

CLUBPERARNAU P 133

L os bebés suelen comenzar a andar

entre los nueve y los doce meses
de edad. Algunos esperan un poco
más, hasta el año y medio. Cuando Tiger
Woods contaba con solo dos años apare-
tadamente. Otros se van desvaneciendo
en el olvido y terminan afrontando vie-
jos traumas; la vida acelerada e intensa
del talento. Algunos, sin embargo, apro-
vechan ese don y consiguen superar to-
ció por primera vez en la televisión nacio- das esas pruebas que la vida les pone por
nal. Probablemente llevara un año de vida adelantado, elevan su campo de acción
siendo capaz de mantenerse en pie, pero y deslumbran al mundo. Esto es justo lo
ya estaba bajo la luz de los focos. Fue en que Earl Woods tenía en la cabeza para
el “The Michael Douglas Show” y corría el su hijo: el Dorado.
año 1978. También tenía ya un palo de golf No se puede entender a Tiger sin Earl. Ofi-
entre las manos. cial de Infantería del Ejército de Estados
No tenía mucha más edad Mozart cuando Unidos, veterano de guerra en Vietnam
compuso sus primeras piezas y aprendió a y, ante todo, un hombre con una misión
tocar el violín y el piano. Su padre, Leopold, en mente cuando en 1975 nació Eldrik
lo llevó de gira por Europa cuando aún era Woods. La diferencia entre otros niños
un crío. Muchos por aquel entonces no prodigio y Tiger es que él no solo sabía
sabían leer ni escribir, pero este peque- que era el mejor cuando competía contra
ño nacido en Austria bailaba de partitu- el resto, sino que le habían educado para
ra en partitura a una velocidad endiablada, creerlo. No tenía ni un atisbo de dudas.
absorbiendo un mundo de sonidos que el Desde que le llevó a aquel programa de
resto probablemente no podamos escuchar televisión a los dos años, Earl le susurra-
muy bien. ba al oído: Tiger, tú has nacido para ser el
La lista de niños prodigio a lo largo de la mejor jugador de golf de la historia. Las
historia es amplia y sus trayectorias vi- personas nacen con un propósito, y yo
tales muy diversas. Muchos ascienden al te estoy enseñando el tuyo. Nadie puede
Olimpo de sus campos para caer precipi- apartar esto de ti.

Tiger Woods, a los dos años de edad, durante el “The Michael Douglas Show”. Wolfgang Amadeus Mozart, a los cinco años de edad.
CLUBPERARNAU
La diferencia entre otros niños
prodigio y Tiger es que él no solo
sabía que era el mejor cuando
competía contra el resto, sino que le
habían educado para creerlo
Earl Woods, con su hijo Tiger (13 años), en 1989.
Así pasaron los años el uno junto al otro, cre-
yendo en ese destino, hasta que después de
ganar tres US Amateur Championship se-
guidos, el torneo más importante en el que
se puede vencer antes de ser jugador profe-
sional de golf, Tiger ya se sabía el mejor del
mundo. “Creo que voy a ganar siempre que
juego”, decía. En el PGA Tour, el circuito que
alberga a los mejores jugadores del mun-
do, se burlaban de él antes de su llegada.
“Bienvenido a la realidad”, le dijeron antes
de su primer torneo. “Hola, Mundo”, respon-
dió él en sus primeras palabras en la rueda
de prensa antes de su debut. Pocas veces
se podrán retractar aquellos jugadores con
tanta facilidad. Todos estaban equivocados.
Earl tenía razón.
Al igual que todas las historias, la vuelta de
Tiger a la competición el pasado noviembre
después de 301 días en el dique seco comen-
zó ahí, en el momento en que Earl comen-
zó a susurrarle al oído. No podía imaginar
el padre que, aparte de una convicción ca-
paz de dominar su deporte durante más de
P 134
una década hasta extremos impensables, y
que aparte de revolucionar una industria y
un modo de entrenarse para la competición
en el resto de sus rivales, a Tiger también
le estaba dejando en herencia una venera-
ción hacia su progenitor que rozaba el culto.
Pocas veces se pudo ver a Woods tan triste
como después de ganar el Open Británico
de 2006, meses después de su muerte, llo-
rando en el green del 18. Por primera vez se
sentía solo.
[Earl] le estaba dejando en herencia
una veneración hacia su progenitor
que rozaba el culto
La admiración, al igual que el talento precoz,
puede adquirir muchas formas. La historia
de Tiger en la actualidad tiene que ver mu-
cho con ella. Es curioso, porque el jugador
que cambió por completo la preparación fí-
sica de los golfistas antes y después de los
campeonatos, que realmente introdujo ci-
clos y cargas de entrenamiento para llegar
en mejor forma a los majors, es también de
los que más lesiones ha sufrido a lo largo de
su carrera deportiva. Había algo raro en todo
aquello y muchos nos preguntábamos cómo
era posible que en julio de 2007 se rompie-
ra el ligamento cruzado anterior de la rodilla
echando una carrera, cómo en 2008 tuvo
que volver a pasar por el quirófano para re-
parar daños en sus cartílagos, o cómo en
junio de aquel mismo año le avisan de que
tenía dos pequeñas fracturas en la tibia… No
eran lesiones normales de un profesional de
golf que cuida su cuerpo, su dieta, hasta el
modo en que respira, antes de cada golpe.
Había algo más.
CLUBPERARNAU P 135

El jugador que cambió por completo la pre- uno de sus cartílagos. Decide no interve-
paración física de los golfistas antes y des- nir el ligamento para no perderse los otros
pués de los campeonatos, que realmente tres grandes.
introdujo ciclos y cargas de entrenamiento →→ Junio de 2008. Dos semanas antes
para llegar en mejor forma a los majors, es del US Open, le avisan de que tiene dos
también de los que más lesiones ha sufrido pequeñas fracturas en su tibia izquierda
a lo largo de su carrera deportiva generadas por estrés, y que debería es-
Algo de luz se desprendió en 2012, cuando tar parado durante tres semanas (y otros
el que fuera su entrenador, Hank Haney, tres más sin jugar al golf). Él prefiere jugar
desveló en un libro titulado The Big Miss en Torrey Pines.
algunos detalles de aquellos entrenamien-
tos. Tiger no solo se preparaba para la
competición, sino que se preparaba tam-
bién para aquello que fue su padre, para
lo que más admiraba en el mundo. Earl
falleció en 2006 y los verdaderos pro-
blemas de Woods, esto es, las cirugías,
comenzaron al año siguiente. Todavía es-
taba ahí el chico de dos años. Tiger salía a
correr al campo con botas militares, hacía
stages de entrenamiento con el ejército es- Tiger, sujetándose la rodilla izquierda lesionada.
tadounidense, seguía los mismos planes de
→→ Julio de 2008. Ocho días después
entrenamientos que los SEALS, un cuer-
de ganar el US Open en un playoff de
po de operaciones especiales de la marina
19 hoyos frente a Rocco Mediate, Woods
americana. Earl ya no estaba, pero el pe-
vuelve a someterse a cirugía reconstruc-
queño Eldrik le andaba buscando todavía a
tiva en el ligamento cruzado anterior de
su alrededor.
su rodilla izquierda, así como a una repa-
Esa herencia inesperada de Earl dejó a Ti- ración de daños en el cartílago. Se pierde
ger una enorme lista de disgustos, que fue- el resto de la temporada: fuera de compe-
ron mermando su cuerpo sin descanso. He tición durante ocho meses.
aquí un resumen:
→→ Diciembre de 2008. Seis meses des-
→→ Julio de 2007. Woods se rompe el pués de ganar el US Open, se rompe el
ligamento cruzado anterior después de tendón de Aquiles de su pierna derecha.
tropezar en una carrera por el campo.
→→ Mayo de 2010. Tiger se retira en el
Después, ganó cinco de los seis torneos
séptimo hoyo de la última jornada del The
que disputó antes de finalizar el año, in-
Players con lo que cree que es una infla-
cluyendo el PGA Championship.
mación en una vértebra. Más tarde se
→→ Abril de 2008. Dos días después de confirmó que era una inflamación de una
finalizar segundo en el Masters, Tiger se articulación en su cuello. Vuelve un mes
somete a una cirugía artroscópica en su más tarde a competir, en The Memorial.
rodilla izquierda para reparar daños en
CLUBPERARNAU
→→ Diciembre de 2010. Días después de
perder frente a Graeme McDowell en el
Chevron World Challenge, Woods recibe
una inyección de cortisona en su tobillo
derecho por un dolor persistente en el
tendón de Aquiles.
→→ Abril de 2011. Tiger revela que tiene
un esguince leve en los ligamentos colate-
rales de la rodilla izquierda, así como mo-
lestias en el tendón de Aquiles.
→→ Mayo de 2011. Después del Masters,
Woods se retira del The Players tras fir-
mar 42 golpes en sus nueve primeros
hoyos. “Me resentí de la rodilla y luego
del tendón de Aquiles, y tenía calam-
bres”, declaró. “Todo comenzó a tensarse,
fue una reacción en cadena”. Se vio obli-
gado a perderse, por primera vez, el US
Open.
→→ Marzo de 2012. Se retira del Cadillac
Championship en Doral después de su
salida en el hoyo 12. Posteriormente, dijo
que era una lesión en el tendón de Aqui-
les izquierdo (no el derecho, que le había
dado problemas antes).
→→ Junio de 2013. Woods dice que se le-
sionó el codo izquierdo en el The Players
Championship, y que el daño fue a más
durante el US Open de Merion, cuando
intentó salir del rough. Se perdió el AT&T
National para descansar hasta el The Open
Championship.
→→ Agosto de 2013. Durante la última
jornada del The Barclays, Tiger tiene do-
lores en la espalda tras haber dormido en
un colchón “demasiado blando”. Le había
estado dando problemas los días anterio-
res, pero el domingo por la tarde se le vie-
ron gestos ostensibles de dolor.
P 136
Tiger, estirando su dolorida espalda.
→→ Marzo de 2014. Se retira después de
13 hoyos del Honda Classic por un dolor
en las lumbares que describe similar a
los sufridos durante The Barclays. Firma
la tarjeta más alta de su carrera en una
vuelta final de un torneo: 78 golpes. Se
retira también del Arnold Palmer Invi-
tational por los mismos dolores. El día 31
de ese mes se somete a una cirugía por un
nervio pinzado.
→→ Septiembre de 2015. Se vuelve a so-
meter a una cirugía consistente en una
micro-disectomía para extraer un frag-
mento de disco que estaba pinzando el
nervio. Un mes después anuncia que se
somete a otro procedimiento para “aliviar
la incomodidad” en la espalda. También
dice que no establece una fecha de vuelta
para competir en el PGA Tour.
→→ Abril de 2017. Tiger se somete a una
cuarta cirugía en la espalda, una “fusión
cervical”. Fue etiquetada como un éxito
y le alivió el dolor que había estado ex-
perimentando en espalda y pierna.
Pocos golfistas profesionales, si no ningu-
no, pueden presentar un parte médico tan
amplio y variado. El golf es un deporte tra-
dicionalmente duro con las lumbares, la
parte de la espalda que más sufre cuan-
do se pegan muchas bolas seguidas du-
CLUBPERARNAU
rante horas. Otras lesiones típicas son las
del codo (también llamado “de tenista”) o
la muñeca, aunque en estos casos suelen
deberse a un mal impacto con la bola o el
suelo. La lista de Woods, quitando la posi-
bilidad de una herencia genética desastro-
sa, se debió a algo más.
En noviembre de 2017, después de casi
un año sin competir, pegó otro golpe de
salida en competición oficial, feliz de no
sentir dolor. “Me siento fantástico. No me
había dado cuenta de lo mal que estaba mi
espalda. Ahora que me siento así, es di-
fícil creer cómo era capaz de vivir antes”,
declaró. El hermético Woods, que más que
compartir con la prensa declara aquello
que mejor le viene a su carrera, que se pro-
tege mentalmente a través de sus propias
palabras, parecía feliz. Se le vio sonreír
en el campo, pegar golpes al 90% de su
capacidad, arriesgar en lies complicados…
Algo había cambiado definitivamente con
respecto al último par de años, un calvario
de recuperaciones.
El retorno, en 2017.
El panorama que se encuentra por delante,
sin embargo, también se ha transformado.
El golf, tal y como lo revolucionó él, nos lle-
va cada temporada a un deporte de atletas
más fuertes y flexibles que nunca, en el que
P 137
la distancia y la velocidad de la cara del palo
en el impacto tienen mayor protagonismo.
Dustin Johnson y Jon Rahm [ver The Tacti-
cal Room nº 34, septiembre], números uno
y dos del mundo en la actualidad, son de los
cinco más pegadores del circuito. Ante esto,
el herido Tigre tiene que luchar para inten-
tar cazar a su vieja y eterna presa: Jack Nic-
klaus, 18 grandes por 14 de Woods.
El horizonte no se plantea muy positivo con
sus posibilidades. Tiene 40 años. A lo lar-
go de la historia, la edad media de ganado-
res de uno de los cuatro majors que tiene
el golf es de 32 años. Es una cifra muy
constante a lo largo del último medio siglo
y se podría calificar como la edad dorada
del golfista de élite. Otro dato: solo el 10%
de los jugadores que superan los cuarenta
han conseguido ganar un major. Es más,
el 75% de los golfistas que han ganado
desde 1960 tenían 35 años o menos. Y un
último apunte: solo dos hombres han sido
capaces de ganar uno a los 46 años o más:
Nicklaus en 1986 y Julius Boros en 1968.
¿Es imposible para Tiger, entonces? Bueno,
la historia nos dice que no. Nicklaus ganó
tres (dos de ellos a los 40), Mark O’Meara
dos (con 41) y Ben Hogan otros tres (a los
40). Tampoco, al fin y al cabo, hay tantos
golfistas con más de uno o dos grandes.
Woods se enfrenta a partir de estos días
a su último gran reto como golfista pro-
fesional: volver a levantar un gran trofeo,
como lo hiciera por última vez en 2008,
y seguir esa caza y captura a través del
tiempo del viejo Jack. A favor tiene al pe-
queño Eldrick Woods, ese chico que sabe y
siente que es el mejor golfista de la historia.
En contra, a su actual cuerpo, lastrado por
unas viejas guerrillas que, probablemente,
no tenía ni que haber comenzado.
CLUBPERARNAU
El último major ganado por Tiger: el US Open de 2008.
Woods se enfrenta a partir de estos
días a su último gran reto como
golfista profesional
Y luego estamos nosotros, contemplando
esta batalla como espectadores atentos,
del mismo modo que escuchamos tam-
bién a veces viejas partituras de grandes
músicos. El golf, el deporte o la vida, que
durante muchos momentos son lo mismo,
nos han dado la oportunidad de ver cómo
Mozart se marcha andando orgulloso, va-
liente y en soledad. Algunos lo hacen así,
P 138
como Bogart en Casablanca. Otros, de un
modo más triste, en forma de réquiem.
Tiger, el niño prodigio, el adolescente des-
lumbrante y el adulto campeón, egoísta e
intratable, comienza ahora su última gran
obra. El niño, el adolescente y el adulto co-
mienzan su adiós.
Enrique Soto.
-Profesional de la PGA Británica-
@esoto
 José Luis Martínez, en su
despacho del centro de alto
rendimiento de Madrid
(Foto: Loles Vives)

Entrenar es
conocer a tu
atleta
El
entrenador
únicamente
es un
catalizador

Martí Perarnau entrevista a

JOSÉ LUIS MARTÍNEZ

CLUBPERARNAU P 140

J osé Luis Martínez (Puente de Alba,

León, 1938) ostenta una plusmarca di-
fícilmente medible, pero que apenas
admite discusión: es el mayor sabio que ha
dado el atletismo español. Como atleta ba-
tió seis récords de relevos en los años 50 y
se especializó en mediofondo (800 y 1500),
pero abandonó muy pronto para ser entre-
nador, su auténtica vocación. Desde 1965
no ha parado de formar atletas, empeñado
por igual en corregir la posición del codo
de una lanzadora juvenil de jabalina que en
modular las cargas de grandes campeo-
nes de decatlón. Su vida han sido las pistas,
pero siempre desde una perspectiva huma-
nística del deporte, donde el ser humano ha
tenido prioridad sobre el campeón.
A los 24 años y con un prometedor futu-
ro atlético por delante, José Luis Martínez José Luis Martínez, por delante del célebre Tomàs Barris,
realiza un viaje que cambiaría su vida: “A en el estadio de Montjuïc.

quienes obtuvimos medalla en los Campeo-
natos Iberoamericanos de 1962 nos ofre-
cieron irnos al extranjero. A mí me manda-
ron a Francia. Aunque no hablaba francés,
conocía la gramática y tuve la suerte de es-
tar protegido directamente por Gaston Me-
yer, el redactor jefe de atletismo del diario
L’Équipe. Meyer nos firmó una recomenda-
ción para entrenarnos un tiempo en Volo-
dalen, el paraíso sueco de entrenamiento en
montaña, y allí estuve tres meses a las ór-
denes de Gösta Olander, el gran entrenador
de la época, que desarrolló metodologías
alrededor del fartlek y dirigió a leyendas
como Gunder Hägg”.
Francia resultó crucial: “Hice los cursos de
consejero técnico especializado en atletis-
mo que otorga el ministerio de Deportes,
algo formidable que tiene Francia. Mi expe-
riencia en Francia fue mucho más dirigida
a ser entrenador que atleta. De hecho, como
atleta cometí varios errores de bulto por
meterme en el grupo de Jazy [Michel Jazy,
subcampeón olímpico de 1500 en 1960, 9
veces recordman mundial], hacer de liebre
en competiciones, algunas de ellas corrien-
do con hándicap, correr cross, en fin, una
serie de errores… Pero eran otros tiempos,
muy apasionantes. Si Jazy acudía a una
competición era seguro que iban diez mil
espectadores más a verlo. O el sueco Dan
Waern, que se especializó en correr 1.000
metros (tuvo el récord del mundo en 2.17.8,
en 1959) y que cobraba una corona sueca de
la época por cada espectador que acudía a
verle. ¡Y acudían 50.000 en cada carrera!”
Martínez aprovecha esta introducción para
rememorar un duelo que hizo historia en
el atletismo europeo: “Francia era enton-
ces la meca del enfrentamiento entre Jazy
y Bernard. Michel Bernard era una especie
de oso, feo, con las patas torcidas. Y Jazy
CLUBPERARNAU P 141

era el fino estilista. De vez en cuando cam- El atletismo español perdió un buen atleta,
biaban al adversario y en vez de Bernard le pero ganó a un extraordinario entrenador.
enfrentaban al alemán Norpoth o al belga Pregunta.- ¿Qué es el entrenador? Re-
Roelands. Había un mitin cada semana y flexionemos sobre ello, sobre la expe-
eran auténticos festivales. El dinero estaba riencia y la sabiduría. A veces consi-
prohibido, pero todos cobraban bajo cuer- deramos buen entrenador al que sabe
da. Estuve tres temporadas en Francia. En mucho y otras veces, al que tiene mu-
abril de 1965 me contrató la federación es- cha experiencia.
pañola de atletismo y hasta hoy. En aque-
lla fecha existía una norma según la cual si Respuesta.- El entrenador entrena tal
eras entrenador no podías ser atleta al mis- como él es. Pero como todo ser humano, la
mo tiempo, por lo que tuve que abandonar la formación académica es un punto de par-
competición con apenas 26 años. Más tar- tida. Luego tiene una etapa de 4-6 años en
de, cuando ya había cumplido 33, se elimi- la que sigue creyendo en los principios bá-
nó dicha norma y regresé a competir, pero sicos que le han enseñado. Para entrenar a
en decatlón y relevos. Es decir, abandoné el un velocista de 11 segundos en 100 metros,
atletismo por una norma federativa”. el entrenador saca sus apuntes y dice: “Hay
que entrenar de esta manera”.

Gösta Olander, en el centro de la imagen, corriendo por el

Michel Jazy, por delante de su gran rival, Michel Bernard. bosque sueco de Volodalen en 1962 (Foto: Hallings).

Michel Jazy, seguido por Jean Wadoux,

haciendo cuestas en Volodalen.

Dan Waern, recordman mundial de

los 1.000 metros en 1959.
CLUBPERARNAU
Pasados esos cuatro-seis años, se da cuen-
ta que A + B no es igual a C. Y entonces
muchos abandonan porque sufren una de-
cepción. Otros deciden seguir, pero se han
descreído. Dejan de creer en la “Gran Biblia
de la Teoría del Entrenamiento”. De hecho,
incluso los más convencidos de ello ahora
mismo reconocen que no son más que un
montón de libros sin utilidad. Poco a poco,
como sucede con la formación humana en
cualquier campo, la experiencia se impone
a las teorías de los libros. Y el entrenador
comprende que su eficacia como tal depen-
derá de la experiencia que adquiera y de la
posibilidad de especializarse. Especializar-
se depende de que puedas profesionalizar-
te, cosa que no ocurre en España. Si no te
profesionalizas, no puedes especializarte.
“El entrenador entrena tal
como él es (…) El entrenador
comprende que su eficacia
como tal dependerá de la
experiencia que adquiera y de
la posibilidad de especializarse”
P.- Este es el proceso habitual. Pero,
¿solo con la experiencia basta?
R.- No, pero ¿qué incluye la experien-
cia? Es estar al lado del enfermo (que en
este caso es el atleta) y en paralelo es es-
tar permanentemente documentándose.
Actualizándose sin parar. El deporte, y en
especial el atletismo, ha evolucionado de
una forma enorme desde los años 50. Hay
mucha investigación y se han incorporado
a los programas de entrenamiento nuevas
visiones. Hay un abismo desde la visión del
“sportmen” de los años 50 a la profesiona-
lización actual.
P 142
Pensemos que para acudir a los Juegos
Olímpicos de 1948 los soviéticos crearon su
gran centro de investigación con Matveev
[Lev Pavlovich Matveev fue el autor de la
Teoría General del Entrenamiento Depor-
tivo, la primera gran biblia del atletismo
mundial, en 1965], que era un investigador
sin relación con el deporte, y ahí empieza el
progreso en el entrenamiento. Por lo tanto,
tú tienes que acceder a publicaciones es-
pecializadas para documentarte correcta-
mente. Y saber espigar lo que es una inves-
tigación sobre alumnos de educación física
–que es la más habitual– y lo que es una
investigación sobre atletas de élite, que no
abundan. No tienen nada que ver una con
otra desde ningún punto de vista, ni fisioló-
gico, ni psicológico.
José Luis Martínez, durante la entrevista con el autor (Foto: Loles Vives).
P.- Esta documentación se obtiene a
través de experiencias que tienen otros
técnicos. ¿En qué se basa la credibili-
dad de dicha documentación? ¿En el
éxito de los resultados?
R.- La experiencia no se adquiere en los li-
bros, sino en los viajes. Los entrenadores
comenzaron a viajar, acudiendo a Juegos
Olímpicos y campeonatos continentales,
creando un movimiento global, mediante el
CLUBPERARNAU
que se convierte en habitual ir a entrenarse
al hemisferio sur en invierno, por ejemplo.
Se crean los centros de alto rendimiento,
donde viendo entrenar a otras personas ad-
quieres la mejor experiencia. Porque en los
libros y en los congresos se maquilla mu-
cho. Cuando en un congreso se invita a tres
o cuatro entrenadores que han tenido éxito
–nunca se invita al que no ha tenido éxito–,
hay que distinguir lo que es el prestigio y lo
que es el éxito.
El éxito lo puede obtener cualquier entre-
nador que encuentra un atleta de talento
excepcional en unas circunstancias deter-
minadas. Pero el prestigio es otra cosa y lo
poseen algunos entrenadores, que quizás
en un momento determinado no están di-
rigiendo a ningún deportista, pero que son
gente que tocan el terreno y además po-
seen una gran preparación científica, gente
como Arthur Lydiard [quizás el entrenador
más prestigioso de la historia; dirigió a Pe-
ter Snell, John Walker, Rod Dixon…] o Jenö
Koltay [el “Papa” de los lanzadores húnga-
ros de jabalina, con numerosos medallistas
olímpicos].
Y que además han aplicado sus teorías so-
bre el campo y han tenido éxito.
“Poder entrenar a un
individuo es conocerlo más.
Y eso no lo puedes transmitir
por libros. La mayoría de
entrenadores son ágrafos”
La diferencia de formación de los entrena-
dores occidentales respecto de los técnicos
del Este ha sido tremenda. En los países del
Este había una formación común de 2-3
años y luego se bifurcaban en dos grupos:
P 143
unos se iban dos años al lado del entrena-
dor nacional de la especialidad y otros, a la
rama de ser formadores de entrenadores.
Cuando entrabas en contacto con dichos
países detectabas rápidamente esta doble
vía que usaban: los entrenadores de campo
y los formadores. Unos trabajaban el terre-
no y otros, la formación.
La suerte es poder ir a ver a estos maestros
cuando están trabajando sobre el terreno y
no en los congresos, donde todo el mundo
maquilla y relaciona causas y efectos con ex-
cesiva facilidad. Lo de los libros es otro pro-
blema bastante relevante: hoy en día todo el
mundo es capaz de hacer un libro a base de
navegar por internet. La mitad de las publi-
caciones rusas son de gente que nunca ha
entrenado a nadie, aunque era gente que es-
taba muy bien informada porque formaba
parte del equipo de metodólogos, pero no te-
nían contacto con el individuo.
Poder entrenar a un individuo es conocerlo
más. Y eso no lo puedes transmitir por li-
bros. La mayoría de entrenadores son ágra-
fos. O como mucho han publicado algún ar-
tículo porque les obligan a ello.
P.- Usted menciona que el entrenador
progresa y mejora con una combina-
ción de factores que inevitablemen-
te resulta idéntica a la que sucede en
el fútbol: una combinación de viajar,
observar (cómo entrenan otros) y re-
flexionar sobre ello.
R.- Y leer. Contrastas lo que lees con la rea-
lidad que compruebas. Pero cada deporte
puede ser distinto. Por ejemplo, los entre-
nadores de fútbol tienen menos ocasiones
de aprender que los técnicos de deportes
paramétricos y de temporadas más cortas.
Menos ocasiones de viajar para conocer,
de aparecer en centros de alto rendimiento
CLUBPERARNAU
observando a los mejores. Si en atletismo
viajas en nuestro invierno al núcleo que se
organiza en Sudáfrica, vas a una maravilla:
hay quinientos atletas de élite entrenándose
con treinta técnicos de primer nivel. Es una
experiencia fascinante. Eso es inviable en
fútbol, aparte de que los deportes de equipos
tienen problemáticas distintas a los indivi-
duales y, dentro de los individuales, quizás
la gimnasia, la halterofilia y el atletismo son
muy paramétricos y la prestación del entre-
nador en estas disciplinas ha de tener un
componente humanístico muy elevado.
Tan es así que yo creo, después de tantos
años por aquí, que hay deportes en los que
el entrenador es un puesto para solteros…
[Risas]. Sí, porque los deportes paramétri-
cos donde el resultado es medible, obsesio-
nan por igual al deportista como al entre-
nador. Y eso te hace perder la perspectiva
de la vida familiar y genera consecuencias
importantes. Un entrenador de atletismo
de alto nivel tiene cuarenta fines de semana
ocupados al cien por cien, física y mental-
mente, de gran tensión adquirida volunta-
riamente. Y este ritmo se extiende durante
muchos años. Te fijas unas metas muy du-
ras en una especialidad donde todo se mide
y se acaba convirtiendo casi en una obse-
sión, de ahí que la mayoría de entrenadores
de éxito poseen una fuerte vocación. Todo
ello influye poderosamente en la vida del
técnico, sobre todo en la vida familiar.
Esto se ha incrementado en las últimas dé-
cadas cuando se ha comprobado que el éxi-
to en el resultado daba pie a la progresión
social y económica. Añadamos que ha ate-
rrizado también la presión política, lo que
conduce a que hayan sobrevivido los en-
trenadores de mayor edad porque tienen
una perspectiva vital y de progresión social
P 144
agotada. Curiosamente, son ellos quienes
tienen mayores posibilidades de éxito por-
que son los que trabajan con más tranquili-
dad. Después de la caída del Telón de Acero,
los entrenadores del Este, que tenían una
experiencia y una formación envidiables,
vivieron una diáspora y emigraron a todas
partes, pero en los últimos tiempos cada uno
ha regresado a su hábitat natural, a su país
de origen, y están teniendo otra vez un éxi-
to gigantesco. ¿Por qué? Porque trabajan sin
presión. Ya tienen su status y su jubilación
garantizadas y no necesitan reconocimiento
social. Pero todos ellos han pagado un precio
alto en sus vidas familiares.
P.- En un magnífico informe que publi-
camos el pasado noviembre [“La deter-
minación benevolente”, ver The Tacti-
cal Room nº 36], el investigador Sergio
Lara-Bercial describe la obsesión del
entrenador de élite por el detalle y el
perfeccionismo, el que se gasta el suel-
do en pagar sobrepeso aéreo transpor-
tando exactamente las pesas que nece-
sita su atleta…
R.- El año pasado estuvo en Madrid Die-
go del Real, el lanzador de martillo mexi-
cano que terminó cuarto en los Juegos de
Río 2016. Vino con su fisioterapeuta perso-
nal y su entrenador cubano. Vivían en un
apartamento en la Gran vía y, por supuesto,
vino aquí con un montón de artefactos de
lanzamiento (cada uno de ellos pesa 7,260
kilos). Estuvo dos meses en este centro de
alto rendimiento preparándose de forma
minuciosa, espartana, exhaustiva. Y luego
en el Mundial de 2017 los resultados no le
acompañaron y fue un fracaso monumen-
tal, sin pasar ni siquiera a la calificación.
Imagínate. Un grupo de élite, enjaulados
mañana y tarde como preparación, con to-
CLUBPERARNAU P 145

dos los medios a su disposición. En el ciclo Vamos al asunto. Hay un libro formida-
anterior, cuando no era nadie, iba tranquilo ble titulado “Training”, obra de Ben Ta-
y surgió el éxito. En el ciclo actual, con todos bachnick [coordinador de los velocistas
los medios y la dedicación, caída estrepito- soviéticos en tiempos de Valeri Borzov,
sa. La presión para él y para su entrenador doble campeón olímpico 100-200 metros
era tremenda. Hoy en día es muy duro ser en Múnich 1972] y Rick Brunner, donde
entrenador en cualquier deporte a causa de comparan la formación de los técnicos del
la repercusión social, económica y política Este con la recibida por los occidentales.
que supone, a menos que tengas una edad Explica que la formación del técnico aquí
en la que tus únicas aspiraciones sean ha- en Occidente se hace siempre a través de
cer mejor tu trabajo, sin más. fotocopias ¡y siempre falta alguna fotoco-
pia! En el Este, los entrenadores pasaban
tres años internos en formación básica
de ciencias auxiliares y a continuación,
dos años de prácticas pagadas al lado de
un entrenador de la selección nacional.
La diferencia es abismal. La formación
de los técnicos del Este fue excelente. El
nivel de polacos, checos y demás es altí-
simo comparado con nosotros. ¿Por qué?
Porque cuando la política decidió que el
deporte era una buena promoción lo deci-
dió con todas las consecuencias. Aquí, en
Occidente, nos hemos llenado la boca cri-
ticando aquello porque eran “deportistas
de Estado”, pero estábamos a años luz de
José Luis Martínez, dirigiendo un entrenamiento de la heptatleta Olatz Egiguren.
sus técnicos. Ahora, aquí se ha acentuado
también lo del “deportista de Estado”, con
P.- Volvamos a la Unión Soviética y de- la diferencia que no se han puesto los me-
más países del Este. A menudo asimila- dios para ello. Aquí no existe la más mí-
mos el gran éxito que tuvieron en todos nima planificación. No tenemos ninguna
los deportes exclusivamente con el do- estructura consecuente con lo que quere-
paje. El dopaje fue una evidencia indis- mos conseguir. Ni en España, ni en Italia,
cutible. Existió en dosis colosales. Pero ni en Francia. Bueno, con Francia noso-
hablemos también de la categoría de tros no podemos ni compararnos. Aquí
aquellos entrenadores. Más allá de las tenemos la gran suerte que hay gente de
ideologías, ¿podemos decir que el Este talento que por decisión propia o familiar
fue la gran escuela de entrenadores? surge: Nadal, Alonso, Jon Rahm… Nuestro
deporte está basado en las iniciativas in-
R.- Por supuesto que sí. Déjame añadir un
dividuales o familiares, pero sin estructu-
matiz sobre el dopaje. Indiscutiblemente allí
ra ni planificación.
existió. Pero también aquí.
CLUBPERARNAU P 146

“La formación de los lento e inspiración, pero no tenemos la pro-

ducción planificada de resultados.
técnicos del Este fue
Estuvimos una vez en Kienbaum, el centro
excelente. El nivel de polacos, de alto rendimiento de Alemania Oriental,
checos y demás es altísimo a unos 40 kilómetros de Berlín. Matizo: no
comparado con nosotros. era un centro, era una “ciudad” del alto ren-
dimiento. Era tremendo. Era una fábrica de
Ahora, aquí se ha acentuado deportistas. Un barrio de chalets para los de-
también lo del ‘deportista portistas jóvenes; otro barrio para los depor-
de Estado’, con la diferencia tistas casados… Ulf Timmermann [primer
lanzador de peso que superó los 23 metros,
que no se han puesto los campeón olímpico 1988] y Jürgen Schult
medios para ello” [vigente plusmarquista mundial de disco y
campeón olímpico 1988] estaban allí y pudi-
Fred Vergnoux, el entrenador de Mireia mos seguir y fotografiar sus entrenamien-
Belmonte, lo ha explicado muy claro: no tos. Era una ciudad, con un edificio enorme
hay mentalidad en los centros de alto rendi- para albergar concentraciones de equipos,
miento, pero no solo mentalidad del depor- un lago de tres kilómetros de ancho, nece-
te, sino tampoco en el entorno. El Consejo sitabas una bicicleta para poder recorrer el
Superior de Deportes no hace nada. Ni para centro de tan enorme que era. Todas las no-
bien ni para mal. Está ahí. Expectante. Mi- ches te consultaban a qué horas querías co-
rando por dónde sale cada uno. Pero si nos mer al día siguiente y cuántas comidas harías
centramos únicamente en los técnicos hay y qué menús. Nos consultaban si queríamos
que decirlo claro: estamos muy mal forma- que nos controlaran el entrenamiento del día
dos. Y luego, cada uno puede tener la ge- siguiente con cronometraje eléctrico o no…
nialidad de una intuición y obtener grandes No, no era solo el dopaje. Era una estructura
resultados. Sí, tendremos resultados por- sensacional, con una formación excepcional,
que nuestra sociedad tiene un gran nivel y que aquí ni tenemos, ni nadie se ha preocu-
siempre habrá familias e individuos con ta- pado nunca por facilitarla.

El triple campeón mundial de lanzamiento de disco, Robert Harting, en el centro de Kienbaum, que fue visitado por la canciller Angela Merkel antes de los JJOO de Río 2016.
CLUBPERARNAU
“Era una estructura
sensacional, con una
formación excepcional, que
aquí ni tenemos ni nadie se
ha preocupado nunca por
facilitarla. Aquí no existe la
más mínima planificación. No
tenemos ninguna estructura
consecuente con lo que
queremos conseguir”
P.- Regresemos a otro punto de esta
conversación. Usted ha dicho: “Entre-
nar es conocer a tu atleta”.
R.- Sí. Y la empatía.
P.- Es decir, hablamos de emociones,
de psicología, quizás de filosofía tam-
bién…
R.- Exacto. La relación entrenador-atle-
ta es una prestación humanística. Jürgen
Schult todavía tiene el récord mundial de
lanzamiento de disco (74.08 m): de acuer-
do, con dopaje, sin duda, pero lo que quiero
señalar es que él y su entrenador hicieron
aportaciones técnicas fantásticas para la
disciplina. Desde los 14 años hasta que
cumplió 40 (cuando fue finalista en los
Juegos de Sydney 2000), Schult estuvo
siempre con el mismo entrenador. ¿Qué
hacían los alemanes orientales? Todo en-
trenador de élite solo dirigía a uno o dos
atletas de primer nivel, pero a cambio de
poder focalizarse en él también asumían
la obligación de dar dos horas semanales
de clase a niños pequeños, enseñándoles
esa disciplina.
P 147
Jürgen Schult, en Seúl 1988, donde se proclamó
campeón olímpico de lanzamiento de disco.
Los húngaros practicaban una política si-
milar. Recuerdo haber estado en Budapest
acompañando a Gergely Kulcsár [triple me-
dallista olímpico en lanzamiento de jabali-
na], que cuando solo era atleta ya tenía la
obligación federativa de dar clases de lan-
zamiento a niños pequeños. ¿Qué ocurrió?
Pues que tras retirarse, obviamente pasó a
entrenar y al poco tiempo consiguió conver-
tir a Miklós Németh en campeón olímpico
de la especialidad (Montreal 1976). Los paí-
ses del Este tenían esa política de dar “rele-
vo” en la transmisión del conocimiento.
P.- Un ejemplo como el que menciona,
el del entrenador de Schult, que estuvo
dirigiéndole desde los 14 hasta los 40
años… Eso es como una relación pa-
dre-hijo.
R.- Sin duda. Quizás incluso mejor que la
relación padre-hijo porque se trata de una
empatía elegida. Más la integración de un
objetivo común. Uno de los defectos más
comunes aquí, y lo mismo ocurre en Italia
y Francia, es que el atleta ya no cree en el
entrenador como tal: solo busca entrenarse
CLUBPERARNAU
con el entrenador de éxito del año. Un caso
clamoroso ha sido el de Renaud Lavillenie,
el pertiguista, que ha navegado de mano en
mano yendo cada vez hacia el entrenador
de mayor éxito momentáneo. Ese ir y venir
acaba siendo muy negativo porque arrasa
con la empatía y te mete en un maremág-
num emocional, cuando no técnico.
“El entrenador tiene la
posibilidad de tocar la tecla
para que salga aquello que
el atleta tiene en su interior.
Pero eso solo se consigue con
tiempo y una buena y larga
programación”
Conocemos las teorías de Zygmunt Bau-
man sobre el mundo líquido y la ausencia
de compromiso, y eso es muy negativo para
el crecimiento personal. El éxito deportivo
requiere afinar mucho y no cometer errores
groseros de falta de empatía. El entrenador
es un catalizador, únicamente. No crea al
atleta, ni mucho menos. El entrenador tie-
ne la posibilidad de tocar la tecla para que
salga aquello que el atleta tiene en su inte-
rior. Pero eso solo se consigue con tiempo y
una buena y larga programación. El entre-
nador ha de tener un modelo técnico y sa-
ber trasladarlo al atleta. Hay varios mode-
los técnicos para el éxito. Si analizamos la
final olímpica de una disciplina, pongamos
los 110 vallas, vemos que no hay dos atletas
que corran igual ni pasen igual los obstácu-
los. La apariencia del movimiento, la parte
cinemática, es diferente. Pero la eficacia de
ambos está ahí. Y por eso es clave el modelo
técnico que tenga el entrenador para que su
atleta lo interiorice. Y en el momento en que
P 148
un deportista establece un programa mo-
tor sólido, en cuanto lo cambie y pase a otro,
eso es muy difícil de aprehender y requiere
del atleta una gran capacidad de autodisci-
plina, entendimiento y mucho tiempo. Por
eso es tan negativo el “baile” actual de atle-
tas y entrenadores.
P.- El término “baile de entrenadores”
sugiere que estuviéramos hablando de
fútbol…
R.- Hombre, claro. Imagínate lo que ocurre
en aquellos equipos que ven pasar dos, tres
y hasta cuatro entrenadores en una misma
temporada. ¡Y entrenadores de ideas distin-
tas cada uno de ellos! Eso es inmanejable,
sobre todo para aquellos jugadores que tie-
nen más experiencia. Es muy difícil colocar
al futbolista en la posición precisa donde
aporta sus mejores capacidades. Para eso
hay que observar mucho y bien. Cuantas
más veces ves, mayor capacidad de ob-
servación adquieres. Colocar a un jugador
en su sitio es dificilísimo. Solo aciertas a
través de la experiencia y la observación.
Por esa razón hay antiguos jugadores que
cuando pasan a ser entrenadores tienen
cierta “ventaja”. La tienen si es su momento
fueron jugadores que “comprendían” el jue-
go, que observaban lo que ocurría y cómo
rendía cada uno en su posición y, de algu-
na manera, “ayudaban” al entrenador en el
campo. Ahora mismo, Sergio Busquets es
un caso muy evidente. Parece que no está y
siempre resuelve del modo más útil porque
comprende todo lo que ocurre en el juego.
A su vez, el entrenador necesita tener una
capacidad elevada de observación.
Al fin y al cabo, la experiencia es saber ob-
servar, analizar y a continuación proponer.
CLUBPERARNAU P 149

“Cuantas más veces ves, R.- Sí, exagerando un poco podríamos ha-
blar de orfebrería humana. ¡Eso es el éxito!
mayor capacidad de El éxito está en entrar en ese detalle. Se ha-
observación adquieres. Al fin bla a menudo de la importancia de las neu-
y al cabo, la experiencia es ronas espejo. ¡Es que eso existe! Si tú eres
capaz de meterte en el cuerpo de tu atleta
saber observar, analizar y a consigues que se activen las mismas áreas
continuación proponer” cerebrales y comprendes qué cosas puede
hacer él y qué cosas no. El atletismo es uno
P.- Podemos concretar que la relación de los deportes en los que este fenómeno
entrenador-deportista es una relación de las relaciones humanas es más intenso,
paterno-filial con la ventaja de que es especialmente en las disciplinas de mayor
elegida por ambos… complejidad técnica. De ahí la necesidad
R.- Con la ventaja de que el entrenador no de que el entrenador dirija a pocos atletas,
ha de ser padre, por lo que el rol de uno y para que pueda personalizar de veras su
otro no se oponen. Uno no está por encima dedicación.
del otro. Están uno al lado del otro. Eso es la El problema en España es que no hay pro-
empatía, que se valora muy poco. fesionalización de los entrenadores y en
Yo he tenido un montón de gente a lo largo consecuencia no hay especialización y si
de tantos años, pero si lo reviso veo que hay la hay, no puede alcanzar su máximo nivel
una serie de atletas con los que hubo más porque debes dedicarte a demasiados atle-
empatía. Eso no se impone, se encuentra. tas. Es una pirámide obvia.
Se trata de encontrarse… P.- Hay una frase de Johan Cruyff que
resulta muy sugerente: “No es lo mismo
entrenar que enseñar”.
R.- Estoy de acuerdo. Me recuerda a lo que
antes he mencionado sobre países del Este,
donde después de tres años de asignaturas
comunes y formación básica se dividía el
trayecto de los entrenadores entre aquellos
que iban a enseñar y los que iban a entrenar.
Unos formaban a los futuros formadores y
otros entrenaban a los deportistas. Ense-
ñar es un capítulo nada fácil. Debes ense-
ñar aquello que tú crees que el alumnado
José Luis Martínez, con dos de sus atletas: la heptatleta Olatz Egiguren y el lan-
zador de disco Mario Trapiello (Foto: Loles Vives). es capaz de aprender. La enseñanza tiene
una valoración añadida: no se trata de que
P.- Al mismo tiempo, la modelación del tú enseñes mucho, sino que consigas que
atleta por parte del entrenador pode- aprendan muchos. Son dos cosas distintas.
mos considerarla como artesanía sofis- Normalmente encontramos a expositores
ticada… brillantes que no son capaces de llegar a la
CLUBPERARNAU
mente del alumno. Hoy en día, la enseñan-
za transita a través de la imagen, cuando
en realidad la buena enseñanza reside en
la presencia y la interacción. Pero el ma-
quillaje superficial oculta la realidad, sobre
todo si va acompañado de un lenguaje in-
comprensible repleto de palabras rimbom-
bantes. Pero si usas ese lenguaje imposible,
¡¿quién te va a entender?! Los conceptos
son una cosa, pero el lenguaje has de adap-
tarlo a quienes han de aprender…
Cruyff fue un personaje excepcional que
comprendió a la perfección cuál era su mi-
sión. Que Sotil, un ratoncito, fuera el juga-
dor del Barça que más goles marcara de
cabeza, siempre a pase de Cruyff, desde la
izquierda, era algo milagroso. Cruyff daba
ese pase para una persona concreta, para
Sotil, lo que era una muestra de inteligencia
suprema como futbolista.
“La buena enseñanza reside en
la presencia y la interacción.
Pero el maquillaje superficial
oculta la realidad, sobre todo si
va acompañado de un lenguaje
incomprensible repleto de
palabras rimbombantes”
P.- Hay otra frase de Johan que refle-
ja bastante lo que venimos hablando:
“Hay entrenadores que consiguen re-
sultados, pero es lo único que consi-
guen. No dejan nada en el alma de na-
die, ni enseñanzas, ni legado, ni estilo”.
R.- Eso es. Esa es la diferencia entre éxito
y prestigio.
P.- A usted le escuché decir lo siguien-
te: “La principal causa de los fracasos
P 150
es querer adelantar los éxitos. El éxito
llega cuando ha de llegar”.
R.- Eso lo dijo Amado Nervo, un célebre
escritor mexicano. Y es que es así. Se
cometen errores muy corrientes de ma-
nera constante: no hay calidad del entre-
namiento, ni en volumen ni en los conte-
nidos. Todo está precipitado. Valoramos
mucho los resultados en la edad evolu-
tiva, entre los 12 y los 16-17 años, cuan-
do el objetivo en esas edades nunca debe
ser el resultado, sino que lo es la práctica
de ese deporte y más adelante debe lle-
gar la formación técnica, pero aquí nos la
saltamos. ¿Por qué? Debería ser el obje-
tivo auténtico entre los 16 y los 19 años
(estoy centrándome en atletismo), en los
que adquieres la técnica adecuada para el
rendimiento. Sin embargo, en esos años
priorizamos los resultados competitivos,
en vez del nivel técnico. Si hiciéramos al
revés y nos centráramos en la formación
técnica sería mucho más adecuado para la
evolución posterior del atleta. Pero como
se prioriza el trabajo de fuerza, se mejora
rápidamente, pero después llega el gran
estancamiento, que coincide con que ya
no eres capaz de aprender correctamen-
te la técnica adecuada. Una técnica es la
incorporación del mayor número posible
de grupos musculares a un esquema mo-
tor específico. Eso requiere una atención
prioritaria. Cuando ya la has aprendido
es cuando puedes maximizar rendimien-
tos, pero eso ha de ocurrir a partir de los
19 años, cuando el nivel técnico ya lo per-
mite. Aquí se hace al revés.
“El carácter no se hereda:
se forma”
CLUBPERARNAU P 151

P.- ¿Y cuál es la razón de esa precipi-

tación constante y permanente? ¿Es
una razón ligada a la sociedad y a esos
tiempos precipitados?
R.- Es la valoración del éxito momentáneo.
Tiene una gran influencia el culto a la ima-
gen. Es asombroso. Que salgas en los perió-
dicos, en la televisión, las fotos, el ego… Es
el culto a lo momentáneo. El éxito de quince
días… Y la sobrevaloración del resultado de-
portivo de la gente joven en lugar de consi-
derarlo una etapa de formación. Una de las
cosas que más me llamaron la atención en
el libro que te he citado de Ben Tabachnick
es que menciona que en los países del Este
se valoraba mucho que el deportista joven
fuese a entrenar en transporte público y
regresara a su casa, cansado y con la mo-
chila a cuestas, porque eso también es for-
mación del carácter. Aquí, muy prontito le
ponen coche al niño o le llevan los padres José Luis Martínez fue el presentador del célebre programa “Campeones de
Olimpia” emitido por Televisión Española en 2004.
para que no se canse… El carácter no se he-
reda: se forma. El carácter se forma en el R.- Lo que formaban los griegos, sin que im-
primer año de vida y más adelante alrede- portara demasiado el medio a utilizar, era el
dor de los 15-17 años, que es cuando llega la carácter de la persona. La formación a tra-
tormenta hormonal, que tiene una influen- vés de la capacidad de esfuerzo, sacrificio
cia tremenda en el chico, la confianza en sí y sufrimiento. En la Grecia clásica, aunque
mismo, la famosa “edad del pavo”. Son las apenas se ha hablado de ello, dentro de la ac-
dos ocasiones en que el ser humano puede tividad deportiva había una carrera de una
formar su carácter. Y en esta segunda eta- distancia similar a los 800 metros dedica-
pa es cuando la actividad deportiva tiene da solo a efebos, es decir, lo que hoy enten-
una influencia importante. deríamos como “júniors”. ¿Qué motivaba a
Los griegos clásicos valoraban mucho el los griegos a aquella singularidad? Pues el
adquirir buenos hábitos de vida porque eso hecho de que la carrera de 800 metros re-
tiene una gran influencia en la formación quería un esfuerzo de alta intensidad, pero
del carácter. con un componente muy alto de estrategia
(como comprobamos ahora, si observamos
P.- Usted es un conocedor exhaustivo a los corredores actuales). Y esa era una
de la Grecia clásica y de su actividad manera que tenían los griegos de desarro-
deportiva. ¿Podemos entender que llar la capacidad de planificar y pensar de
aquella filosofía continúa siendo un pi- los jóvenes, además de haber mejorado su
lar crucial en la práctica del deporte?
CLUBPERARNAU P 152

desarrollo físico. No se trataba de modelar sino si conseguimos que se forme comple-

jóvenes fuertes, sino que supieran utilizar
esa fuerza.
“Aquí se educa en el valor de
la medalla, pero el éxito no es
solo la medalla. El éxito es la
mejora de cada individuo y que
pueda descubrirse a sí mismo”
De Grecia se ha destacado demasiado el as-
pecto llamémosle “romántico”, pero no se
ha analizado suficientemente bien su gran
aportación al ser humano. Tengo un libro
adquirido en una pequeña librería griega
que se titula “La educación en la Grecia clá-
sica” que ilustra cómo lo que movía a los
griegos siempre era la formación del ser
humano en todas sus capacidades. Hoy no
tenemos nada de todo eso. Ni siquiera tene-
mos en cuenta el valor de la práctica depor-
tiva competitiva como medio de educación,
de formación de la persona. No debería
importarnos tanto si un hombre puede co-
rrer los 100 metros en 10 segundos o en 12,
tamente como ser humano de acuerdo con
sus capacidades concretas.
El valor de la actividad atlética en la forma-
ción del individuo tendría muchas posibili-
dades si lo enfocáramos de manera conve-
niente. Se trata de descubrir tus capacidades
y las del adversario. Puedes ser último en la
competición o primero, pero debes aprender
a analizarte a ti mismo y al contrincante. Pero
no parece importarle a nadie y menos que
nadie, a las autoridades. Aquí se educa en el
valor de la medalla, pero el éxito no es solo la
medalla. El éxito es la mejora de cada indi-
viduo y que pueda descubrirse a sí mismo.
Hay una frase espléndida de Haile Gebrse-
lassie que lo resume bien: “Antes de desafiar
a los otros te tienes que desafiar a ti mismo”.
Y ya después de desafiarte a ti mismo, inten-
tas ganar a los otros.
Martí Perarnau.
@martiperarnau

REFERENCIAS
• Volodalen Training Camp: http://www.racingpast.ca/john_contents.php?id=228
• Lev Pavlovich Matveev: http://www.efdeportes.com/efd100/matveev.htm
• Arthur Lydiard: http://running.competitor.com/2015/11/training/three-secrets-of-legendary-coach-arthur-ly-
diard_140178
• Jenö Koltai: https://www.iaaf.org/news/news/legendary-hungarian-javelin-coach-passes-away
• Ben Tabachnik: http://articles.latimes.com/1990-05-25/sports/sp-258_1_soviet-union
• Sports Centre Kienbaum: http://www.kienbaum-sport.de/en/about-us/sports-centre-kienbaum/
CLUBPERARNAU P 153

PRÁCTICAS
EDUCATIVAS
EN EL RUGBY
Juan Casajús

Existe una creciente preocupación por

elaborar sistemas y programas de for-
mación de jugadores y jugadoras de
rugby de países donde la necesidad de
omitir etapas y lograr rápidos resulta-
dos para llegar a instancias superiores
se impone como prioridad.
CLUBPERARNAU
S e esgrimen argumentos que sostie-
nen los diversos juicios expresados
sobre la práctica infantil de alto nivel,
advirtiéndose en ellos como criterio para su
refutación o su defensa que se utiliza o se
escuda bajo aquel lema de “esto o aquello es
apto para el niño”.
Desde esa opinión se propone un análisis
basado en disminuir los problemas causa-
dos al niño y trabajar a largo plazo en procu-
ra de la erradicación de otros problemas y
las consecuencias. Entonces, se desea com-
partir la siguiente idea: el deporte infantil
de alto nivel plantea un problema desde el
punto de vista educativo.
Como muchas otras cosas que le crean
problemas a la infancia, por ejemplo, de-
masiadas horas de uso de la televisión, la
computadora, los celulares, las tabletas, etc.
y apoyados sobre distintas referencias, la
práctica deportiva infantil de alto nivel no
nace por razones educativas.
P 154
La práctica deportiva infantil de alto
nivel no nace por razones educativas
La discusión sobre ella refleja, y no sor-
prende, la dificultad de analizar el problema
desde un punto de vista educativo.
De hecho, este análisis puede realizarse solo
a posteriori, en efectivo cuando han crecido.
Y los argumentos en favor y en contra solo
pueden proponerse cuando los niños tienen
realmente los problemas, se piensa que los
tengan o que los van a tener.
El interés principal del deporte de alto ni-
vel (como sistema social) no es solamente
de naturaleza educativa o, por lo menos, no
es este el elemento fundamental. Su interés
reside, ante todo, en su conservación como
sistema y en el continuo mejoramiento de
los resultados deportivos, siempre ligado a
razones culturales, políticas e ideológicas.
CLUBPERARNAU P 155

A veces, los argumentos educativos, sin em-

bargo, son útiles si sirven para preservar y
mejorar el sistema. Sin lugar a dudas, otras
veces no son agradables porque tienen una
acción de perturbación sobre el sistema, o,
mejor dicho, no son funcionales en su con-
servación y su desarrollo.
Para alcanzar este objetivo de conservación
del sistema y mejoramiento constante de
los resultados, al menos en el rugby que es
el deporte que me ocupa e invito a los lecto-
res que puedan hacerlo extensible a sus de-
portes de interés, se apartó en el período de
la infancia la práctica de alto nivel, con su
entrenamiento particular y con sus exigen-
cias de competición. Esta es una exigencia
de los adultos.
También se pueden hacer abordajes de as-
Los niños jamás pensarían en someterse a pectos importantes, desde el punto de vista
una forma tan organizada de deporte que educativo. Si al problema se lo contempla
busca un resultado a largo plazo, y a la or- desde el punto de vista de la pedagogía, se
ganización del programa cotidiano, sema- comprende por qué es tan controvertida la
nal y anual necesario para obtener un re- discusión que nace del desarrollo y de la di-
sultado de alto nivel. Esto no quiere decir fusión de una práctica de alto nivel infantil.
que los niños no se alegren con los resulta- Se comprende menos por qué las opiniones
dos que obtienen. positivas y negativas sobre esta práctica se
basan exactamente en el mismo argumen-
Los niños jamás pensarían en to, o sea, en el de lo “apto para el niño”.
someterse a una forma tan Las estrategias sobre competencias están
organizada de deporte que busca un cerca de las de reclutamiento. Aceptar la
resultado a largo plazo competencia reglada y cómo realizarla des-
de sus inicios es el tema por analizar. Las
distintas uniones y asociaciones de rugby
No obstante, el proceso que lleva a estos re- en el mundo están en movimiento. Si siem-
sultados y a mantenerlos requiere una pla- pre tienen en cuenta sus propias realidades
nificación precoz de la vida infantil y una están en buen camino.
notable autoorganización que los niños no
pueden brindarse por sí solos. De manera Sirve estudiar mucho, consultar especialis-
que es necesaria e imprescindible la asis- tas y argumentar. Luego necesariamente
tencia de padres, profesores, entrenadores, mejorar para poder avanzar.
médicos, clubes y escuelas.
CLUBPERARNAU P 156

El método, establecido después de un estu-

dio de dos años en asociación con Sydney
Junior Rugby Union, Brumbies y la Univer-
sidad Católica de Australia, se basa en la
idea de que el peso no es el único determi-
nante de dónde debería jugar un jugador.
Indudablemente, contemplar la historia
motriz previa, la edad biológica, la edad
cronológica, el peso y la altura dictará las
matrices para una correcta organización
del juego.
Mientras se sigue analizando y mejorando,
lo importante sigue siendo que los niños y
niñas se diviertan y que el rugby sea prac-
ticado de manera segura.
Recientemente, la unión australiana de ru-
gby propuso que los jugadores juveniles de
entre 10 y 15 años que se encuentren fue- Juan Casajús.
ra de un rango de altura y peso específi- -Profesor Educación Física-
co, inferior o superior, sean evaluados de @JuanCasajus
forma independiente para determinar en
qué grupo de edad deberían jugar. Ante-
riormente, los jugadores podían moverse
de dos grupos de edad hacia arriba o de un
grupo de edad hacia abajo desde su verda-
dera edad y no existía un método estándar
para determinarlo.
 CLUBPERARNAU

AUTORES ILUSTRADORES

Ignacio Benedetti Michele Tossani Ralf Wandschneider

@ibenedettip @ArrigoSacchi442 @herrralf

Loles Vives Agustín Galán Xavi

@iLoles @Agustin_Galan @XaviCaricatura

Martí Perarnau Alain Valnegri Marc Vicens

@martiperarnau @alvalnegri
Marc Casasús
Pablo Beltrán Isaac Lluch
@PabloBeltran79 @isaac_lluch

Tommaso Giagni Rosa Coba DIRECTOR

@lUltimoUomo @RosaCoba Martí Perarnau

Miguel Fernández Enrique Soto SUBDIRECTOR

@MiguelDkno1 @esoto Isaac Lluch
@isaac_lluch
Alberto López Frau Juan Casajús
@Albercampeontv @JuanCasajus EDITA
María Victoria Hernández
Ricardo Zazo @ehmaribrie
@RichiZazo
DISEÑO Y
MAQUETACIÓN
Dale al coco
@masay8

Para consultas o intercambio de opiniones, escribir a: club@martiperarnau.com