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9 REGLAS PARA EL ÉXITO

1. LA VIDA ES UN JUEGO CON REGLAS.


La vida es como un juego y es importante ser consciente de que estoy
jugando mi partida y ganar o perder depende de mí. Siempre estamos
jugando, ya que es imposible no jugar o no mover ficha. Y si no lo haces tú,
alguien lo hará por ti y te empujará a una partida que no has elegido,
sintiéndote manipulado por ello.

En cada juego, como en la vida, perseguimos un objetivo. Es importante


tenerlo claro, definirlo y ser consciente de ello, para que así podamos
mover bien nuestras fichas y estudiar nuestra jugada. Planificar nuestras
decisiones, tener un plan y avanzar también es parte de la vida.

La vida es como un juego en el que no estás solo

Siempre, en el juego y en la vida, cualquier decisión que tomamos influye


a otras personas. En ocasiones, contar con otras personas y llegar a
acuerdos con ellas para aunar esfuerzos, complementar trabajo y unir
ilusiones, es una buena forma de conseguir el éxito en la partida. Así que,
benefíciate de la experiencia y del consejo de los jugadores más
experimentados que tú.

2. PON LA VIDA EN MODO DIFÍCIL


Dice Yokoi, la clave de su éxito ha dependido de poner su vida en modo
difícil. Siguiendo las enseñanzas colombianas de su madre, encuentra que
si una persona busca enfrentarse a dificultades, desarrolla otro tipo de
habilidades blandas que actualmente son muy demandadas en el mundo
laboral.

Las personas que se someten a riesgos o se ponen en situaciones difíciles


de forma constante, logran desarrollar habilidades de resolución, que les
permite aprender a vivir la vida de una forma más tranquila.
Nuestros estudiosos del programa de Psicología han encontrado que
poner la vida en modo difícil, es una buena estrategia en el proceso de
aprendizaje infantil ya que en la época de infancia, el cerebro está más
dispuesto a adquirir nuevas formas de entender y afrontar el mundo.

En la edad adolescente o madura, el proceso de incorporación de esta


actitud de vida es mucho más complicada, ya que las estructuras de
personalidad, valores y principios con los que se rige la persona han
tomado un rumbo y modificarlos para ser más flexibles es un proceso
arduo.

Puedes poner en práctica esta actitud de vida de forma consciente y


encontraras que a largo plazo estarás más preparado para afrontar
dificultades y serás más creativo para proponer soluciones.

3. AHORRA DINERO
Recuerda que el ahorro es una reserva que se guarda o se cuida
en el presente para gastarla o invertirla en el futuro. Puedes
ahorrar dinero y otros recursos, que te servirán para cumplir tus
sueños o atender una emergencia o un gasto inesperado.

El ahorro es progreso, reza un famoso dicho que a pesar de ser


muy certero, pocos ponen en práctica. Ahorrar no tiene por qué
ser un dolor de cabeza, ya que es necesario administrar bien tu
dinero para lograr comprarte el auto de tus sueños o juntar para
la inicial de tu departamento. Para conseguir estos y otros
sueños solo necesitas organizarte bien.

 Establece un presupuesto (con un objetivo a alcanzar): es


importante que tengas en cuenta tus gastos fijos mensuales
para calcular una meta de ahorro. Si no se te dan muy bien los
números, hazte con una hoja de cálculo para tener las cuentas
al día. Así, podrás controlar las cantidades (más o menos
elevadas) que puedas guardar. ¡No te olvides de incluir un
porcentaje para gastos variables!
 Compara precios y busca ofertas: no es necesario que vayas
de un supermercado a otro mirando los precios (aunque nunca
es mala idea). Puedes preguntar a tus familiares, amigos y
compañeros de trabajo dónde compran y comparar la relación
calidad-precio de los productos. Probablemente cuando
conozcas lo que se ahorran los demás, te empieces a interesar
más en lo que te gastas cada mes.
 Evita las compras por impulso (casi nunca lo necesitas):
muchas veces nos compramos cosas por darnos un capricho
bajo el lema “para algo estoy trabajando”. El consumismo
impulsivo es el peor enemigo del ahorro y puede alterar tu
presupuesto sin que te des cuenta. Si no te hace falta
inmediatamente, espera a final de mes e invierte parte de tus
ahorros. Consejo: deja la tarjeta de crédito a buen recaudo.
Está para lo que está.
 Compras online (de cosas que necesites): casi de la mano con
el anterior punto. Es cierto que en internet podemos encontrar
ofertas escandalosamente buenas de hasta el 75% o, por qué
no, 90% en productos de todo tipo. Eso sí, antes de hacer click
sin medida, plantéate si verdaderamente lo necesitas:
cualquier gasto imprevisto no reflejado en tu presupuesto
mensual afectará directamente a tu capacidad de ahorro.
 Reducir los gastos en casa: puedes ahorrar agua y energía
contando con electrodomésticos eficientes y ecológicos. Lo
notarás en tu balance de facturas. Para mantener la casa en
una temperatura idónea reduciendo el consumo en
calefacción o aire acondicionado, recuerda no dejar entrar el
calor en verano y el frío en invierno con buenos cerramientos.
4. PERSEVERANCIA
La perseverancia es necesaria para alcanzar los propósitos más
grandes en la vida, entonces si queremos avanzar hacia el
desarrollo personal, debemos luchar todos los días, hacerlo con
entrega, amor y mucha alegría.

Cuando una persona está en el camino equivocado le resulta


difícil aplicar el valor de la perseverancia, porque desde su
interior hay esa sensación de inconformidad, lo que ocasiona que
se generen una serie de bloqueos que finalmente llevará a una
persona a desistir de un proyecto.

Si quieres estar completamente seguro que podrás perseverar


con mucha disciplina en un objetivo, es esencial que elijas el
camino que es adecuado para ti. Encuentra tu misión de vida y
una vez que la tengas clara, no habrá nada que te pueda
detener, porque tendrás el impulso espiritual que provocará que
logres metas impresionantes.

5. HONESTIDAD E INTEGRIDAD
La honestidad es un valor que una vez aprendido y asimilado, se
convierte en una actitud que siembra confianza en uno mismo y
en aquellos que están en contacto con esta persona. Ser honesto
hace con que los niños actúen siempre con base en la verdad y
en la justicia.

Para ofrecer una educación en la honestidad a los hijos, tanto los


padres como los educadores tienen en manos una gran misión.
Sigue algunos consejos para que el despertar de la honestidad en
los niños sea una realidad:
Para ser honestos debemos conocernos a nosotros mismos,
expresarnos sin temor a lo que sentimos o pensamos, no perder
la vista de la verdad, cumplir nuestras promesas, luchar por lo
que queremos jugando limpio, reflejando coherencia de lo que
decimos con lo que hacemos y siendo transparentes con
nosotros mismos y con los demás.

6. DECIDE SER FELIZ


El sufrimiento y la desdicha parecen ser la condición natural del
ser humano, no ves tu felicidad porque no crees en ella. Pero la
felicidad es tu naturaleza, está en tu esencia, puedes ser
totalmente feliz porque eres un ser humano con conciencia,
utilízala, decide ser feliz.

Ser lo que eres y convertirte en lo que eres capaz de llegar a ser


es el secreto de una vida feliz y eterna.
Toda persona tiene diferentes talentos, diferentes deseos,
diferentes facultades. Sé tú mismo, original como el mar, la tierra
y las estrellas, como un grano de arena o un bosque húmedo.

7. LA DISCIPLINA VENCERÁ LA INTELIGENCIA


La mayoría del ser humano tenemos una vida desordenada, algo
que nos caracteriza al latino es la impuntualidad, de hecho el
venezolano es reconocido por llegar tarde o por no llegar así
como hacía mención Yokoi Kenji en su oratoria. Pero más allá de
los mitos y leyendas, de las verdades y las mentiras hay algo que
es cierto (la disciplina y la inteligencia) deberían de estar
presente en nuestras vidas, no solo por el éxito personal sino
también en lo profesional, ahora que vamos camino a ser futuros
docentes.
Un docente es el ejemplo a seguir de un niño, todos los niños
desean ser como su profesor; entonces si un docente es
disciplinado, organizado, comprometido y carismático, es allí
donde está el secreto al éxito. Dándoles a los niños valores y
disciplina, porque ya inteligentes somos es cuestión de
dedicación.

8. EL ÉXITO SE RELACIONA CON NUESTROS PRINCIPIOS


Los valores y principios morales y éticos son la piedra angular del
éxito seguro y consistente que garantizan un crecimiento
estable y una administración sensata de todos los recursos con
los que cuenta el ser humano para tener una vida productiva y
abundante.

En una sociedad como la actual donde lo que prima es la


consecución de dinero, consumo y placer a cualquier precio,
como las máximas aspiraciones de riqueza que para nada
satisfacen los anhelos humanos de plenitud y felicidad
verdaderas y producen individuos frustrados, explotados y
fracasados.

Los valores para empezar no son un conjunto de normas


tradicionales que cada quien debe obedecer como un androide o
robot para cumplir con un requisito social o complacer a otros,
sino que comprenden los más profundos principios morales de
paz y bienestar que todo ser humano debe tener consigo mismo
y con sus semejantes para que su vida adquiera un significado
mayor fuera de las realidades temporales de esta vida.
9. TRABAJA DURO.
Para mantener nuestros logros y ver los resultados tenemos que acabar lo
iniciado. Siempre hay que estar resueltos a concluir, a terminar lo
empezado. La mente de quienes trabajan duro se concentra en que las
cosas se hagan y en lograr cantidad y calidad en su ejecución.

La seguridad

Significa que mediante trabajo duro hemos ganado el derecho a nuestra


disposición en la vida. Podemos disfrutar de nuestra influencia y podemos
relacionarnos con personas esforzadas.

Aproveche para desarrollar un sentido integral del trabajo humano. El


trabajo nos permite abastecer a nuestras familias, generar ideas, servir a
otros, ser fructíferos, alcanzar mejores posiciones, aprender, el trabajo en
una gran escuela de vida. Hay que aprender de una buena vez que el
trabajo no es sólo rutina y salario.

Las personas que se esfuerzan ven en su trabajo o en su negocio una


oportunidad para aprender más, ser más rápidos, más hábiles, encontrar
formas nuevas para hacer las cosas. No trabajan sólo por lo que pagan. La
cantidad y calidad de su trabajo no depende de la abundancia del pago.

Ellos saben que el que trabaja según lo que pagan, no merece ni lo que le
pagan, ni nunca considerará suficiente su paga o el ingreso que reciban en
su negocio.

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