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6301208GR01A01
La investigación en la práctica educativa sitúa el foco en su carácter social, sea cual fuere el ámbito en el
que se desarrolle. La educación es social porque su interés está en la idea de dar poder a las personas:
reconocerse poderosos, tener poder de decidir y poder de transformar las relaciones sociales. Desde esta
perspectiva, la investigación se convierte en estrategia privilegiada de indagación y aprendizaje,
ISBN: 978-84-362-7401-1
01208
Editorial
9 788436 274011
6301208GR01A01
Investigación social
desde la práctica educativa
www.uned.es/publicaciones
Introducción
Bloque I
INVESTIGACIÓN SOCIAL
DESDE LA PRÁCTICA EN EDUCACIÓN
Bloque II
METODOLOGÍAS DE INVESTIGACIÓN
Objetivos
Un ejemplo inicial
Mapa de ruta
Información
1. En torno al concepto de diagnóstico socioeducativo .
1 .1 . Quién realiza el diagnóstico
1 .2 . Desde qué modelo se hace el diagnóstico
1 .3 . Qué rol tienen los participantes
1 .4 . Desde qué nivel realizamos el diagnóstico: ¿indivi-
dual, familiar, grupos, colectivo, comunidad? .
2 . El análisis de necesidades: un tipo de diagnóstico
2 .1 . Concepto de necesidad
2 .2 . Clasificación de las necesidades humanas
2 .2 .1 . Escala funcional de las necesidades humanas
de Maslow (Relativista)
2 .2 .2 . Teoría de las necesidades sociales de Bradshaw
(Relativista)
2 .2 .3 . El enfoque de la escuela de Desarrollo a Escala
.
Objetivos
Un ejemplo inicial
Mapa de rutaI
Información
1. ¿Qué es etnografía?.
1 .1 . Breves apuntes sobre la historia de la etnografía
1 .2 . Características de la etnografía
.
Investigación social desde la práctica educativa
Objetivos
Un ejemplo inicial . Aprendizaje y práctica de la ciudadanía a
través de la historia de Miguel
Mapa de ruta
Información
1. ¿Qué son las historias de vida?: recorrido histórico
y situación actual
1 .1 . La historia de las historias
1 .2 . La actualidad de las historias de vida
1 .3 . La investigación con historias de vida en el horizonte
de la Educación Social
1 .4 . El sentido ético transversal
Objetivos
Un ejemplo inicial
Mapa de ruta
Información
1 . Características clave de la IAP
1 .1 . Qué es la investigación-acción participativa
1 .2 . ¿Por qué y para qué desarrollar un proceso de IAP?
1 .3 . El papel de los participantes en el proceso
2 . Fases de trabajo
2 .1 . Formulación del problema-demanda de colaboración .
Toma de contacto y negociación compartida de la
demanda
2 .2 . Detección de necesidades: diagnóstico y análisis
compartido.
2 .3 . Propuesta y planificación de la acción
2 .4 . Puesta en acción y seguimiento
2 .5 . Evaluación del proceso IAP
2 .6 . Difusión del proceso
3. Orientaciones para poner en marcha y cuestiones
de reflexión .
3 .1 . Tiempos y espacios para la participación: sobre proce-
sos y herramientas de trabajo
3 .2 . Relaciones entre profesionales y comunidad educativa
(agentes del contexto) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Materiales y recursos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
FAQ. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Referencias bibliográficas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Investigación social desde la práctica educativa
Objetivos
Un ejemplo inicial
Mapa de ruta
Información
1. Del caso, al estudio de caso, al estudio de caso en educación
social. .
1 .1 . ¿Qué es un caso?
1 .2 . ¿De qué hablamos cuando empleamos la expresión es-
tudio de caso?
1 .2 .1 . El estudio de caso como enfoque y metodología .
1 .2 .2 . El estudio de caso como técnica
Bloque III
TÉCNICAS DE PRODUCCIÓN DE INFORMACIÓN
Objetivos Información
1 . ¿A qué nos referimos con observar?
Referencias bibliográficas .
1 . Introducción .
2 . Dinámicas
2 .1 . Línea del tiempo
2 .2 . Mapeo social
2 .3 . Rueda socrática
2 .4 . Felicito, critico, propongo
2 .5 . Técnica de espejo
2 .6 . Bola de nieve
2 .7 . Hoja giratoria
2 .8 . Lluvia de ideas
2 .9 . Seminario colaborativo
Referencias bibliográficas .
1 . Introducción
2 . Censos
2 .1 . Definición y breve historia de los censos
2 .2 . Características y usos actuales de los censos
2 .3 . Un ejemplo de censo: el Instituto Nacional de
Estadística (INE) .
2.4. Actividad 1: Extracción de datos censales de una población.
3 . Datos abiertos
3 .1 . Definición y breve historia de los datos abiertos
3 .2 . Características de los datos abiertos
3 .3 . Tipologías y usos de los repositorios actuales de datos
abiertos
3 .3 .1 . Repositorios orientados al gobierno abierto
(open government)
3 .3 .2 . Repositorios orientados a la ciencia abierta (open
science) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
3 .4 . Actividades con open data . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Investigación social desde la práctica educativa
4. Indicadores. .
4 .1 . Definición y breve historia de los indicadores
4 .2 . Aproximación a la construcción de indicadores
4 .3 . Características de un buen indicador
4 .4 . Sobre una posible dimensión cualitativa de los
indicadores
4 .5 . Actividad 5: Análisis crítico de indicadores en el ámbito
educativo. .
5 . Conclusiones
6 . Referencias bibliográficas
ANEXO
Transcripción. Diálogo sobre Investigación en Educación Social
(diálogo de 9/05/2018) .
1
Quienes escribimos esta obra abordamos la cuestión del género en el lenguaje desde distintas
perspectivas: masculino o femenino genérico, duplicidad de género… Son diferentes estilos, que res-
petamos, pero que en todos los casos pretenden transmitir el uso de un lenguaje inclusivo.
Introducción
Mayo, 2018
Bloque I
INVESTIGACIÓN SOCIAL
DESDE LA PRÁCTICA EN EDUCACIÓN
SENTIDO Y FORMA DE LA INVESTIGACIÓN
EN EDUCACIÓN SOCIAL
Objetivos
Mapa de ruta
Información
Materiales y recursos
FAQ
Referencias bibliográficas
Objetivos
Mapa de ruta
sociales aterrizara para dar cuenta de cómo hubiera que hacer y proce-
der: desde fuera del contexto, dando soluciones que otros controlan de
forma remota.
Otro grupo de imágenes nos muestra cierta proximidad de la inves-
tigación social con el mundo de lo concreto, haciendo un guiño tímido
a las personas y grupos con los que trabaja. Lo reviste en ocasiones de
medidas, lupas, artefactos…, símbolos de un anhelo de precisión que
suele estar asociada a las ciencias reconocidas como duras o fuertes.
Una investigación más de bata que de bota, que no acaba de emba-
rrarse en el mismo charco de las personas que investiga.
Sentido y forma de la investigación en Educación Social
Información
1
Nuestro agradecimiento a las personas que, junto con nosotros, han participado en este diá-
logo: Teresa Aguado, Alberto Izquierdo, Inés Gil-Jaurena, Beatriz Malik, Patricia Mata, Javier Mo-
rentin, Héctor S. Melero. La transcripción del texto completo puede ser consultada en el anexo 1.
Investigación social desde la práctica educativa
Albert Camus,
El primer hombre
resultados educativos para todos. Así, esta otra cita retrata con mucho
acierto el sentimiento y crítica generados a partir de la experiencia es-
colar cuya deriva enlaza más con la preocupación por actuar como me-
canismo de selección y certificación al servicio de intereses marcados
por el mercado laboral.
Ngũgĩ wa Thiong’o,
Descolonizar la mente
… creo que lo que tenemos que hacer a través de las asignaturas, a través de
esta asignatura concreta, es darle la vuelta y pensarla desde el enfoque que
estamos proponiendo: que la educación es una y que tenga un componente
transformador.
2
El documento que se cita contiene, en nuestra opinión, contradicciones importantes, donde
se pone en tensión la asimetría de la relación en la intervención socioeducativa con esta idea de
igualdad y desarrollo de conciencia democrática.
Investigación social desde la práctica educativa
Todo aquello que te permite generar un conocimiento bueno para ti, que
genera un conocimiento que sirva para aquello que tienes entre manos... es
investigación. Tú tomas conciencia de dónde estás, con quién estás, qué co-
sas pasan donde estás, y tratas de comprenderlo. Y ahí es muy importante la
mirada porque comprenderás una cosa u otra en función de tu mirada, de
dónde mires, cómo y para qué. Si además esto te lleva a practicar o hacer las
cosas de otra forma... Al final todo eso para mí es investigación, y muy en el
contexto, que es donde se dan las cosas.
Justo por esto, además de optar por otros tipos de enfoque, es ne-
cesario recurrir a técnicas de investigación que por una parte nos per-
mitan abordar y analizar las diferentes interacciones sociales y anali-
zarlas en su contexto y en toda su complejidad; y por otra confieran
poder a nuestros «investigados» si realmente mantenemos el propósito
de transformar y mejorar la situación de partida:
Investigación social desde la práctica educativa
por el esquema:
problema ↔ investigación ↔ respuesta.
Materiales y recursos
FAQ
Referencias bibliográficas
METODOLOGÍAS DE INVESTIGACIÓN
Objetivos
Mapa de ruta
Información
Materiales y recursos
FAQ
Referencias bibliográficas
Objetivos
Objetivos específicos:
Determinar las necesidades de actuación socioeducativa de los/las
mayores que frecuentan los centros de mayores municipales.
— Identificar qué necesidades socioeducativas se están cubriendo con la
oferta de los centros (con qué actividades, qué profesionales intervie-
nen, y en qué medida se cubren) y cuáles no.
— Detectar cuáles son los obstáculos presentes en el entorno que dificul-
tan dar respuesta a los problemas existentes.
— Distinguir cuáles son las potencialidades y recursos existentes en los
centros de mayores que puedan favorecer la acción.
— Definir líneas alternativas. De mejora o innovadoras, que puedan
adoptar los centros de mayores para dar cobertura a las necesidades
socioeducativas de los mayores a través de nuevos programas o nuevos
proyectos de programas ya existentes.
Primero fue la idea, sobre qué quería investigar y el porqué, los objeti-
vos que perseguía, estableciendo así la finalidad del trabajo, que requería un
análisis de necesidades en un contexto concreto como eran los centros de
mayores municipales de Alcobendas.
Me interesaba estudiar las necesidades, carencias y demandas asociadas
a los centros de mayores del municipio de Alcobendas, siempre desde el en-
foque de la educación social, saber qué papel habían desempeñado desde su
creación, plantear alguna línea de actuación y mejora y aventurar qué papel
podrían jugar en un futuro a medio plazo, es decir, su proyección de futuro.
Mi experiencia me dice que no hay una única manera de diseñar un trabajo
de investigación en lo que se refiere al diagnóstico de necesidades, pero es
absolutamente necesario un diseño y una planificación previa en la que nos
posicionamos dentro de un contexto determinado, al tiempo que nos basa-
mos en una metodología y un modelo conceptual que nos dé seguridad y
aporte rigor en la recogida y análisis de la información, en la labor investi-
gadora en sí.
Para realizar el análisis de necesidades planeé tres fases. Una primera de
recogida de la información y análisis de la misma. Viéndolo ahora con pers-
pectiva, este punto de partida fue crucial para el posterior desarrollo del tra-
bajo y, estoy convencida de que fue su piedra angular y su motor, lo que sos-
tiene al conjunto a la vez que lo impulsa.
Diagnóstico socioeducativo y análisis de necesidades-potencialidades
Rosario Muñoz
Máster en Intervención Educativa en Contextos Sociales
Especialidad: Calidad de Vida en Personas Adultas y Mayores
Investigación social desde la práctica educativa
Mapa de ruta
Por ello, nuestra propuesta pasó a tener este nuevo enfoque: diag-
nóstico socioeducativo y análisis de necesidades-potencialidades.
Para abordarlo hemos destacado la complejidad de esta expresión,
analizando las múltiples formas de ser entendida: según el nivel en
que se opere (individual, familiar, grupal, comunitario), según sea
amplio o reducido el contexto de referencia, según el nivel de parti-
cipación de los implicados… No obstante, aunque encontramos esta
Diagnóstico socioeducativo y análisis de necesidades-potencialidades
Información
1. En torno al concepto de diagnóstico socioeducativo
Ámbito personal
Ámbito personal
11.1. Autoestima-autoconfianza.
11.2. Estado de ánimo / humor.
11.3. Motivación-sentido de vida.
11.4. Ejercicio de responsabilidad.
Dimensión 11.
11.5. Actitudes fundamentales de resiliencia
Dinamismos vitales
11.5.1. Actitud optimista.
11.5.2. Actitud de aceptación.
11.5.3. Actitud de orientación a la búsqueda de soluciones.
11.6. Percepción subjetiva de la situación relacional.
Ámbito personal
En síntesis:
El diagnóstico es un concepto que se abre a múltiples interpretacio-
nes y prácticas dependiendo de factores como: quién lo realiza, con qué
propósito, desde qué modelo, cuál es el rol de los participantes…
Ello lleva a justificar distintas formas de diagnóstico de entre las
cuales creemos necesario enfatizar aquellas que suponen una lente de
ampliación para la acción socioeducativa desarrollada por los educa-
dores sociales. Nos movemos con frecuencia en una perspectiva limi-
tante donde el diagnóstico es concebido como la identificación de un
problema, carencia, deficiencia, limitación…, para buscar una solu-
ción externa, individual y constante. Desde ahí, proponemos avanzar
hacia un diagnóstico socioeducativo con los siguientes rasgos distin-
tivos:
— Pone énfasis en las potencialidades, como vía que facilita la acción so-
cioeducativa, orientándola hacia qué conseguir.
En relación con las grandes corrientes teóricas que explican las ne-
cesidades humanas, la mayoría de aportaciones contemplan las nece-
sidades humanas como constructo social, vinculado con el contexto
socio-histórico, posicionándose en la postura relativista de las necesi-
dades.
En este sentido, resulta de ayuda contemplar las necesidades hu-
manas desde una perspectiva ecológica. Esta perspectiva, como hemos
visto, concibe al ambiente ecológico como un conjunto de estructuras
seriadas y estructuradas en diferentes niveles, en donde cada uno de
esos niveles contiene al otro. La necesidad no es un constructo estático;
la necesidad moviliza y manifiesta a la vez potencialidades.
Merece la pena detenerse en conceptos muy ligados al de necesidad,
como son: carencias, demandas, expectativas y potencialidades. En una
investigación en la que vayamos a detectar necesidades, es importante
tener en cuenta su distinción.
Por otra parte, distintos autores han elaborado teorías acerca de las
necesidades humanas y sus tipos. Es importante que en todo trabajo de
investigación diagnóstica se concrete el modelo conceptual elegido para
la identificación y análisis de necesidades. A continuación se recogen al-
gunos autores que nos parecen apropiados dentro de ese «mirar» ecoló-
gico y sus teorías:
Investigación social desde la práctica educativa
Este enfoque nos parece muy interesante en tanto que se pone la mi-
rada en la potencialidad y en la identificación de satisfactores como ejes
para orientar la acción socioeducativa.
Diagnóstico socioeducativo y análisis de necesidades-potencialidades
a) Identificar
las necesidades, centros de interés y oportunidades de
mejora
La detección de necesidades requiere indagar sobre la naturaleza de
las mismas, ofreciendo una respuesta a las siguientes cuestiones:
b) Contextualización de la situación
Poner en contexto las necesidades, intereses y oportunidades es ne-
cesario porque todo cuanto acontece se produce en relación con todos
los elementos que configuran la vida social. Como indicábamos, lo que
es necesidad en una situación no lo es en otra; igual ocurre con los inte-
reses y oportunidades, dinámicos en función de momentos y contextos.
Al contextualizar no solo tratamos de recoger datos e información,
sino que tratamos de establecer relaciones entre los elementos identifi-
cados. Entre ellos distinguimos:
— Identificación de recursos.
En segundo lugar, después de decidir los puntos anteriores, me pregunté
de dónde recogería los datos para nutrir cada uno de ellos y cómo lo haría.
Determiné con qué fuentes de información primaria o directa podía contar
(profesionales y personas mayores de los centros), y con qué fuentes indirec-
tas, es decir, las que ya existían, material elaborado (resultados de encuestas,
estudios, censos, etc.). De estas segundas, elegí las que consideré más apro-
piadas, más completas, las que contenían datos de relevancia para identifi-
car necesidades. Igualmente, decidí las técnicas e instrumentos de recogida
de información que iba a emplear. Para mí era muy importante que fueran
abarcables, es decir, que con el tiempo y los medios de que disponía, escasos
ambos, me ofrecieran garantías de consecución. Considero que esta elección
fue fundamental, definiendo así la estrategia de recogida de datos (en qué
momento lo haría, dónde, cómo, con qué instrumentos, con quién...).
Fuentes de información: webgrafía; encuestas municipales sobre mayores
a disposición en la página web municipal http://www.alcobendas.org; memo-
ria anual del servicio de mayores; bibliografía; material impreso facilitado
por el servicio de mayores; manuales de mano; profesionales de los centros
de mayores; informantes clave; personas mayores de los centros.
Técnicas empleadas:
— Observación directa
— Reuniones-entrevistas semiestructuradas con los profesionales.
— Aplicación de un cuestionario (Se realizó a 5 personas mayores en cada
uno de los cinco centros)
— Entrevista semiestructurada grupal con informantes claves.
— Trabajo de reflexión, análisis y elaboración.
Investigación social desde la práctica educativa
d) Pronóstico
Establecer un pronóstico implica dibujar un escenario de futuro,
aun teniendo en cuenta las sorpresas y la aleatoriedad que subyace en
el orden y aparición de los hechos sociales. Necesitamos avanzar sobre
las posibles consecuencias que pueden derivarse de la situación inicial
y establecer cierta perspectiva en la evolución de los hechos. Este paso
es especialmente importante en el diagnóstico de contexto amplio, por-
que nos ayuda a ver cómo será ese escenario si no se trabaja para modi-
ficarlo y mejorarlo. Por ello, el pronóstico se revela de gran utilidad en
dos sentidos:
f) Propuestas de acción
El diagnóstico se orienta a la acción y, por ello, debe ser pensado
como una estrategia que nos permite tomar decisiones y definir líneas
de actuación para conseguir aquellos objetivos que pretendemos.
Todas las tareas previas aportan información necesaria. Ahora co-
rresponde ponerlas en relación, analizando debilidades y fortalezas,
para una toma de decisiones acertada.
Diagnóstico socioeducativo y análisis de necesidades-potencialidades
Materiales y recursos
FAQ
Diagnóstico de contexto amplio y diagnóstico de contexto
reducido ¿Se tienen que dar siempre? ¿Ha de realizarlos el
educador social?
Referencias bibliográficas
3
Inmaculada Antolínez Domínguez
María García-Cano Torrico
Belén Ballesteros Velázquez
Objetivos
Mapa de ruta
Información
1. ¿Qué es etnografía?
Materiales y recursos
FAQ
Referencias bibliográficas
Objetivos
Mapa de ruta
Información
1. ¿Qué es etnografía?
1
Nos referimos a corrientes de pensamiento que coinciden en un posicionamiento epistemoló-
gico que prioriza la compresión de los significados fruto de la interacción de las personas, conciben
la realidad como una construcción social por lo que se interesan por interpretar los significados de
lo que la gente piensa, dice y hace.
Aproximación al método etnográfico
Fuente: https://www.facebook.com/Antroporate/?fref=nf
que percibe con o por medio de, o a través de él» (Geertz, 1983:58 cit.
por Velasco y Díaz de Rada, 1997).
— Intención holística. Hace referencia al estudio de la cultura como un
todo integrado, de forma que las conductas culturales de las personas
no se separen del contexto donde se producen. La intencionalidad de
aprensión al todo no se puede entender si no es como una tendencia,
una utopía (Velasco y Díaz de Rada, 2007), por ello el trabajo etno-
gráfico reconoce que el conocimiento que proporciona es, en parte,
fragmentado. El objetivo no es acumular o recopilar información sin
más, sino precisamente producir y elaborar dicha información para
comprenderla e interpretarla. La «magia del etnógrafo» consiste pre-
cisamente en:
como ellos, no sabía qué decir. Era un sábado de marzo del año 2011
cuando una de las chabolas que estaban emergiendo irregularmente al lado
del CETI de Melilla, ardió con tres personas en su interior. Aquella tarde,
como todos los sábados, fui al campo de fútbol de la Espiguera para apoyar
al equipo del CETI con el que entrenaba durante la semana. Los chicos del
equipo se pusieron una cinta negra en el brazo para recordar a sus com-
pañeros fallecidos. Uno de los que había muerto entrenaba con el equipo
y, en algunas ocasiones, habíamos hablado de fútbol y otros temas, unos
más banales que otros. En uno de esos días me llegó a contar que cuando
pudiera salir de Melilla pensaba ir a Londres, donde él creía tener más po-
sibilidades de trabajo.
Cuando llegó Ben, se me acercó y, en voz baja, me habló de lo ocurrido
en las chabolas. Ben era un joven subsahariano que yo había conocido ha-
cía ya casi un año. Los dos solíamos hablar a menudo, podría incluso decir
que era, de entre todas las personas que entrevisté, con quien llegué a tener
mayor relación, puede que por afinidad personal. Ben, que es de Camerún,
tiene mi edad, le gusta el fútbol, las mujeres, tocar la guitarra y viajar. Me
dijo: «Francesco, ¿te acuerdas de lo que hablamos el otro día, de los guetos
y del hecho de que debería evitar vivir allí una vez entrara en Europa? Des-
pués de lo que ha pasado en las chabolas no paro de pensar en ello». Sentí
que efectivamente mi rol de investigador, al que siempre había tratado de
aferrarme —pues eso es lo que me habían enseñado los manuales y libros
de la carrera—, había evolucionado, pues era evidente que no había podido
quedarme al margen del todo y que, de una u otra manera, me había ido de-
jando involucrar por el trabajo, convirtiéndome en un activista y en una per-
sona de confianza del grupo reducido de personas con los que había compar-
tido reflexiones, momentos y sensaciones. (Bruno, 2014: 13-14)
En síntesis:
La etnografía surge a partir de los primeros encuentros con socieda-
des no occidentales en un intento por comprender quiénes son y cómo
se comportan «esos otros y otras». Sin embargo, a partir de esas prime-
ras experiencias en contextos exóticos, podemos encontrar estudios et-
nográficos en contextos urbanos como son los trabajos de la Escuela de
Chicago sobre la realidad migratoria a principios del siglo xx en los Es-
tados Unidos así como en nuestros propios contextos abordando rea-
lidades diversas tales como movimientos alternativos y de resistencia,
grupos minorizados o los propios procesos escolares y educativos, en-
tre otros. El carácter científico de este método basado precisamente en
la relación con los otros y las otras en su contexto ha generado varios
momentos reflexivos en el seno de la Antropología. Uno de los más im-
portantes se vivió en la década de los sesenta por la colaboración detec-
tada entre etnógrafos/as y los intereses gubernamentales de los Estados.
A partir de dicho momento se cuestiona la capacidad de la etnografía
de explicación sobre los otros y las implicaciones de poder/desigualdad
que generan planteándose nuevas propuestas como etnografías dialógi-
cas, reflexivas o colaborativas.
En este tiempo de desarrollo y práctica del método etnográfico po-
demos detectar algunas características fundamentales como son:
Aproximación al método etnográfico
2. Cómo
hacer etnografía. Orientaciones para su
planificación y desarrollo
Propuesta de informantes
2
Veáse al respecto Hale, R. (2008). Engaging Contradictions: theory, politics, and methods of ac-
tivist scholarship. Berkeley, CA: University of California Press.
Investigación social desde la práctica educativa
y recién llegada era la que asumía una gran parte de tareas domésticas; que
una de ellas parecía tener un estatus mayor y ciertas cuotas de libertad ya
que se permitía llamarnos al teléfono o desplazarse con cierta autonomía;
que había una de ellas con un claro rol de control sobre las otras o; que las
conversaciones mantenidas en las constantes llamadas telefónicas solían ba-
sarse en una explicación sobre dónde estaban, con quién y qué estaban ha-
ciendo a alguien a quien llamaban «mami». Todo ello, a lo largo del tiempo,
se fueron convirtiendo en indicadores claros de trata así como en elementos
de interés para comprender sus redes de cuidados y estrategias de resisten-
cia en dicha situación.
— ¿Qué tiene que saber la gente para ser capaz de hacer eso que hace
en tal situación? Implica considerar el significado local. Situacio-
nes sociales que aparentemente pudieran parecernos similares
pueden adquirir un significado diferente según el contexto local
donde se producen. Algo que puede ser habitual en un contexto o
situación puede resultar totalmente excepcional en otro marco de
referencia.
2.6. El producto
3
La etnografía colaborativa y dialógica parte de las corrientes postmodernas en la Antro-
pología Social. La antropología dialógica, según Tedlock reivindica la importancia de la pre-
sencia textual de la persona nativa siendo la etnografía un diálogo entre la persona nativa y la
persona intérprete, en este caso, el/la etnógrafo/a. Por otro lado, la etnografía colaborativa su-
pondría que la persona investigadora está alineada con los objetivos sociopolíticos de los grupos
sociales y, por tanto, la investigación se construye de forma dialógica y polifónica entre todos
los participantes. Para mayor información sobre etnografías dialógicas y colaborativas véase
Hernández (2007).
Investigación social desde la práctica educativa
car una intervención. Rescatando una vez más el ejemplo que ha ilus-
trado transversalmente este capítulo, el trabajo de observación reali-
zado en el asentamiento rural en Huelva formó parte de un diagnóstico
que la ONG Mujeres en Zona de Conflicto realizó sobre la trata de se-
res humanos en Andalucía y Ceuta (MZC, 2015). En dicho informe se
detectaron las dificultades en el fenómeno de la trata en ambas regio-
nes incluyendo, a su vez, las potencialidades y fortalezas a partir preci-
samente de los factores de resiliencia detectados en el trabajo de obser-
vación con las mujeres del mencionado asentamiento. Por otro lado, no
podemos obviar que, en materia de trata, el trabajo etnográfico puede
tener como resultado clave la elaboración del informe de detección de
posibles víctimas de trata que es enviado a los agentes encargados de la
identificación definitiva, esto es, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, Fis-
calía y/o directores/as de centros de internamiento, en su caso. Dicha
identificación permitiría que la persona adquiriera una categoría reco-
nocida jurídicamente que posibilitaría comenzar el proceso de protec-
ción, regularización administrativa e intervención integral.
Consideramos que hay dos presupuestos fundamentales en interven-
ción social que se ven ampliamente fortalecidos gracias a la utilización
del método etnográfico. Por un lado, analizar la realidad desde la pers-
pectiva de las personas implicadas en ella y, por tanto, poniendo a la
gente primero. Trabajos como los de Cernea (1991) en relación a los pro-
yectos de cooperación al desarrollo en contextos rurales o la compilación
de Díaz de Rada (2014) sobre etnografías diversas de la educación mues-
tran cómo el hecho de analizar un fenómeno desde lo que hemos deno-
minado «punto de vista de nativo» no sólo le da validez a los datos pro-
ducidos en el campo sino también mayor legitimidad y autoridad a la
hora de poder planificar una posible intervención en el contexto con di-
chas personas. En segundo lugar, por su enfoque holístico, entronca di-
rectamente con el modelo ecológico de intervención en el que la persona
y el contexto se encuentran interconectados. Trabajos como los de Ogbu
(1993) recogen dicho enfoque en el marco de la educación señalando que
mucho de lo que pasa en la escuela tiene que ver con lo que sucede fuera
de ella. En este sentido, la etnografía resulta un método especialmente
útil en las investigaciones socioeducativas apuntando a la relación entre
el rendimiento o el absentismo escolar con la existencia de minorías, ma-
yorías y procesos y políticas de integración o segregación.
Investigación social desde la práctica educativa
Para finalizar, asumimos que hay personas que pueden tener una
mayor sensibilidad y aptitudes para observar, describir, analizar e inter-
pretar un fenómeno y su contexto; sin embargo, apostamos porque con
rigor metodológico, cualquier profesional puede hacer una buena apro-
ximación etnográfica al servicio de la transformación social.
Materiales y recursos
FAQ
¿Dónde observo cuando hago una aproximación etnográfica?
¿Tengo que dar cuenta de todo lo que ocurre en un escenario,
solo en parte?
Referencias bibliográficas
Objetivos
Mapa de ruta
Información
FAQ
Referencias bibliográficas
Objetivos
La historia de Miguel:
Un proyecto de vida comprometido con su entorno físico
y social, como estrategia de construcción de su identidad.
Los escenarios
1
Se reproduce el texto narrativo sobre el que se seguirán ejemplificando las posibilidades de
análisis. Evidentemente, se evita cualquier referencia que pudiera identificar a las personas por el
respeto a su privacidad. Esta cuestión es delicada. En cursiva ilustraciones literales de la persona
informante.
Investigación social desde la práctica educativa
sino también extensa, ocupa un lugar preferente en sus relatos: las dinámi-
cas familiares (el caso es que, claro, mi madre bastante tenía con todo, se ocu-
paba de todos y tal… y mi padre… era pluriempleado), con una atención par-
ticular a la idiosincrasia de sus abuelos, mi abuelo Domingo, era sacristán …
era una persona superbuena, muy buena.
Los vínculos familiares de origen siguen siendo un transversal en el de-
sarrollo de su vida; como la segunda pareja de la madre, antiguo novio, su ca-
rácter ligón como el abuelo. El sentido de clan. Las familias que ha formado…
La juventud, dual
Su vida familiar está desdoblada por el territorio; una tía le acoge como
hijo los fines de semana; con sus hermanos comparte estudio y trabajo. Cier-
tas ausencias, del padre y de la madre. Hay respeto, referido ante la manera
de actuar de Miguel; no referencia a conflictos, silencio: más que una rebe-
lión generacional, parece que hay una protección generacional.
La madurez, inconclusa
La percepción de que la vida es difícil que hay que luchar para ir forján-
dose un futuro: labrarte… lo que ibas a ser.
Apegado a la tierra, se siente ciudadano del mundo; por eso es tan im-
portante proyectar un viaje —y viajar como inquietud, siempre que le resulta
posible— que le abra nuevas perspectivas, nuevas formas de vivir y pensar.
Aunque respeta las instituciones más clásicas: la familia (pues hemos tenido
que apoyarnos mucho unos en otros); su madre (ahí está… viva, la mujer y
aquí también está echándonos una mano … en su calidad de patriarca da pro-
pina a sus sobrinas); la escuela que promovió arreglarla y de la que le gusta-
ría ser maestro aunque no pueda; la iglesia de la que se dio de baja por cohe-
rencia con sus creencias actuales.
Persona de organizaciones y asociaciones en las que participa con la dis-
ciplina de la mayoría, hay que seguir siendo un poco coherente … no se puede
estar en un sitio… eternamente; pero enfatizando el poder del poder: Yo pacto
con quien sea lo que haga falta, pero yo pacto… bueno, no sé… Pero si no…
no, y para tener poder, porque si no tienes poder, ¿qué haces ahí?, ¿chupar de
la rueda? Mmm… pues no, … tener poder, pero poder para cambiar las cosas.
Equivocándote o no.
Resistente: [En] momento de crisis, pues entonces eso… pues lo abando-
nas y ya está, hay que ser realistas. Entonces, bueno… esto otro… bueno, pues
también … nos ha atraído también un poco más… el decir, bueno, pues igual
hasta nos viene bien, ¿no? Buscarte algo sin necesidad de quejarte mucho:
o sea, estás trabajando, estás luchando por una cosa…
Persona de asociaciones cuestionando: Hay que fomentar el asociacio-
nismo y tal … pero aquí… ha sido y es rancio porque se ha entendido mal, des-
pués de que se ha recuperado con la transición, se ha entendido mal y luego no
ha sido realmente potenciado, ¿no?, por la democracia …
Persona de acción, de proyectos y productos: La implicación siempre es
buena; la participación activa siempre es buena. Hay que orientarle a lo mejor,
¿no? Pero yo, por ejemplo, al pequeño mío le digo, «Tú… tú vas a ser lo que
quieras ser. Y… tienes … que estar ahí, tienes que tocar las cosas, implicarte…
Si hay que estudiar, se estudia; si hay que… eh».
Con un sentido de dignidad ante el trabajo: El trabajo es algo más de esta
vida y, por lo tanto, tenemos la suerte de vivir en una sociedad donde incluso
Investigación social desde la práctica educativa
Mapa de ruta
Este tema pone el foco en las trayectorias vitales de las personas como
fuente privilegiada de aprendizaje. Entendemos que la educación social
trabaja con personas y construye su sentido en torno a ellas, por lo que una
investigación que recupere la experiencia y reflexión sobre historias de vida
se convierte en una estrategia clave en la praxis socioeducativa. El interés
de estas historias de vida en nuestro ámbito profesional se justifica desde
tres perspectivas: como investigación en sí, en tanto que nos permite com-
prender un tema desde la mirada de quienes lo han vivido; como forma-
ción y desarrollo profesional, pues nos facilita la mejora de nuestra prác-
tica a través del análisis y reflexión de la carrera de otros compañeros-as;
como acompañamiento y apoyo a la intervención en casos específicos.
La versatilidad de las historias de vida hace complejo la formulación
de un enfoque único en su planteamiento, desarrollo y análisis. En los
siguientes apartados proponemos un breve recorrido sobre el concepto
y la construcción de las historias de vida a modo de mapa general, su-
jeto a las particularidades del contexto de utilización.
Información
1. ¿Qué
son las historias de vida?: recorrido histórico
y situación actual
2
Esta tradición se mantiene hoy en día en programas televisivos sobre viajes culinarios alre-
dedor del mundo en el que se alaba la cocina local, programas de aventuras hacia el descubrimiento
de nuevos parajes, etc. En todos ellos, una de las claves de éxito sigue siendo la narración, con aires
exóticos, de la vida por parte de los «nativos».
Investigación a través de historias de vida
3
La película de François Truffaut (1970), L’enfant sauvage, cuenta la historia de Victor, aban-
donado en los bosques franceses, hasta los 12 años.
4
Los intocables de Eliot Ness de Bryan de Palma (1987) ambienta muy bien el escenario real.
Investigación social desde la práctica educativa
5
Es un buen compendio sobre el tema.
Investigación a través de historias de vida
6
En nuestro caso, podemos dar testimonio de la utilidad de historias de vida desde esta pers-
pectiva se realizó, en una intervención profesional, de manera no formal pero efectiva, en el diag-
nóstico de las condiciones de vida de temporeros en una campaña de recogida de fruta en el Bajo
Aragón. El profesional en cuestión prefiere mantener el anonimato.
Investigación social desde la práctica educativa
7
Detallar en su mínima expresión los referentes epistemológicos de la ciencia actual desborda
las pretensiones del capítulo. Nos remitimos a la distinción kuhniana entre los dos paradigmas do-
minantes que, en nuestro caso, se reducen a las características más elementales expuestas (Sabirón,
2006; Arraiz y Sabirón, 2012).
Investigación a través de historias de vida
8
Una de las diferencias entre el emigrante polaco, y el desplazado actual es que, este último,
dispone teléfono móvil con conexión a internet.
Investigación social desde la práctica educativa
9
Sugerimos alguna lectura sobre la teoría del cierre categorial de Gustavo Bueno (disponible en
http://nodulo.org/ec/2011/n108p02.htm; desde la fuente original, en Bueno, 1990). Para nada se pretende
aquí establecer ninguna relación entre la verdad científica (gnoseológica) y la vertebración entre diseños
en el campo de las ciencias sociales. Pero sí que, la aportación del Prof. Bueno nos permite distinguir
dos cuestiones muy vinculadas a nuestras distintas verdades personales: como veremos a continuación,
las historias de vida, las entrevistas, o la investigación etnográfica (entre otras múltiples), son eminente-
mente emergentes; es decir, el cómo se desarrolla la investigación prima sobre lo previsto por el inves-
tigador y el diseño por el que opta. Ahora bien, se se mantiene la apertura total, el proceso puede resul-
tar inabarcable; y conforme se va cerrando, cada vez se reduce más el potencial emergente. Este dilema
sobre el grado de apertura, ha llevado en ocasiones a entender, de manera errónea, que en el término
medio está la solución, dando lugar a los denominados «métodos mixtos». Cuando aquí se plantea com-
binar modalidades, en absoluto se referencia a mixtura alguna, porque la lógica dominante en la inter-
pretación de los resultados, así como los criterios de cientificidad son comunes a las modalidades que se
vertebran. En Sabirón y Arraiz (2014) se entra en detalles.
10
Véanse los capítulos dedicados a estas dos modalidades de investigación.
Investigación social desde la práctica educativa
11
Una persona sabe lo que el «saber evaluado» determina a través de un título (acreditación
para ejercer una profesión), a través de un reconocimiento (acreditación de competencias), etc. Pero
existe un sentido del saber en tanto que «saber construido», fruto de la relación e interacción con los
demás y que define nuestra propia realidad. Sobre esta cuestión gira la indagación sobre la relación
entre la persona y los distintos saberes (en Sabirón y Arraiz, 2013; disponible en http://espritcritique.
uiz.ac.ma/Dossiers/dossier.asp?idcode=84).
Investigación social desde la práctica educativa
12
Entiéndase por falta de rigor metodológico, el establecimiento a priori del tipo de análisis
a realizar, así como el sentido de la utilización de las historias de vida en una investigación dada.
Metodológicamente, recuérdese, las historias de vida se incluyen dentro de los considerados diseños
emergentes de investigación; es decir, aquellos susceptibles de cambio conforme evoluciona el pro-
ceso de investigación. A diferencia de los considerados apriorísticos que establecen desde el primer
momento las hipótesis y el procedimiento para su refutación o confirmación (por ejemplo, los dise-
ños cuasi-experimentales).
Investigación social desde la práctica educativa
En suma,
13
Desde el enfoque de la historia de vida como investigación Cornejo, Mendoza y Rojas sugie-
ren: «de acuerdo a nuestra experiencia y la de otras investigaciones, no debería pensarse en un nú-
mero inferior a 12 participantes» (2008:33).
Investigación social desde la práctica educativa
(Inicio de la primera entrevista con una de las personas con la que cons-
truimos su historia de vida)
Entrevistadora: Como esto no va a ser una entrevista tal cual, se trata
de hacer una historia de vida, pues…, pues eso…, queríamos que nos con-
taras un poquito tu vida en relación con estos temas de participación, de
implicación y, sobre todo, en qué contextos, con qué personas y qué gru-
pos piensas que lo has aprendido, con quiénes te has ido vinculando y
cuáles han sido tus motivaciones, las ideas que te han movido, todo eso,
mezclado con lo que te vaya surgiendo, así la primera cosa que te venga
a la cabeza…
Pautas Características
Marco
psicosociológicas individuales: sí mismo
microsociológico
de la vida (self) y personalidad
Autodescripciones e in-
Perspectiva temporal Familias y grupos
terpretaciones
Pautas culturales de valo- Intereses, actividades
Ecología social
res, normas, expectativas ocupacionales y tiempo
y roles libre
Condiciones socioeconó- Fines, aspiraciones y con-
Situación institucional
micas de vida flictos
cio pasa a ser ocupado por otros que han adquirido mayor significativi-
dad en las vidas.
En ello reside la complejidad de la historia de vida, ya que no se
trata de una sencilla sucesión de eventos sino de una reconstrucción
que aspira a explicar por qué una persona llega a ser lo que es. Resulta
por tanto muy recomendable que quien investiga con historias de vida
haya tenido la experiencia de reconstruir su propio relato y haya po-
dido apreciar los aprendizajes y retos que conlleva la elaboración de
su historia. El relato es un ejercicio donde el pasado es leído desde el
presente, desde un tiempo diferente al que ocurrió, en otro contexto,
con otra edad…, por eso, no podríamos pensar en un relato único y
definitivo, sino en conexión con las circunstancias y el momento en
que se produce.
La trayectoria de un individuo no es un itinerario lineal, sino que se
compone de diferentes etapas marcadas por lo que llamamos «bifurca-
ciones» (Chaxel, Fiorelli y Moity-Maïzi, 2014). Un momento de duda
o incertidumbre marca el inicio de una bifurcación. Estas mismas au-
toras diferencian entre transiciones y encrucijadas. Una transición es
una sucesión de una etapa a otra, cuya llegada es previsible: por ejem-
plo, el final de los estudios. Una encrucijada nos sitúa ante un escenario
de múltiples salidas ante las cuales es necesario hacer una elección. Es-
tos momentos van por tanto asociados a un cambio de rumbo en la vida
de la persona, pudiendo ser considerados como «incidentes críticos»,
como los denomina Bolívar (2012). Su interés es notable, porque per-
miten identificar tanto momentos de fuerte impacto en la vida como la
aparición de personas críticas que han sido referentes en sus trayecto-
rias vitales.
Abril, D. (2012).
Educación y ciudadanía activa.
Reflexiones y propuestas a partir de historias de vida (p.69)
intenciones del sujeto. Aconseja incorporar una introducción con las ca-
racterísticas del contexto social, familiar, laboral y comunitario del in-
formante; así como, notas aclaratorias de las expresiones y términos jer-
gales. Cuando la historia va a difundirse, deben también añadirse los
análisis y otros documentos utilizados.
El segundo momento, implica un proceso polisémico y polifónico
por la diversidad de opciones, funciones y referentes a contemplar para
lograr resultados que cubran los objetivos del estudio. La transparencia,
vinculada con la dimensión ética transversal a la que se hacía referencia
en epígrafes anteriores, se impone como presupuesto de partida. Desde
esta perspectiva, el análisis debe responder a tres cuestiones básicas: el
sentido, el texto y el procedimiento.
Perspectivas y enfoques
14
Los ejemplos se esbozan; para entrar en detalles, visualizar y comprender el conjunto del
proceso de análisis temático consúltese Arraiz, Azpillaga y Sabirón (2016).
Investigación social desde la práctica educativa
De la infancia:
— lo rural-lo mundial,
— la experiencia colectiva-la reflexión,
— desarraigo-apego al territorio,
— responsabilidad-toma de consciencia,
— dureza-sensibilidad.
Investigación a través de historias de vida
De la adolescencia:
— competencia para adaptarse a circunstancias diversas (perspectiva en
positivo),
— importancia de la condición de miembro con poder en las organizacio-
nes,
— inquietud por experiencias nuevas,
— necesidad de integrar ideas,
— anclajes familiares.
De la juventud:
— necesidad de ir más allá de la realidad que está viviendo (abrirse,
aprender),
— la diversidad como fuente de aprendizaje (necesidad de viajar),
— necesidad de implicación en primera persona,
— desarrollo familiar (ser padre),
— consolidación laboral y política.
De la madurez:
— planificación por etapas (corto, medio, largo plazo),
— el valor de contar historias y de lo colectivo (varios grupos),
— el sentido de dar las estrategias, las posibilidades pero también auto-
nomía,
— muy próximo a los otros pero sin perder su yo,
— la diversidad como valor.
Acción
— liderazgo y poder,
— empatía y diálogo,
— iniciativa e innovación.
Investigación social desde la práctica educativa
Compromiso
— vitalismo y vitalidad,
— sensibilidad y responsabilidad,
— regeneración y transformación.
Identidad
— situada,
— discursiva,
— dialéctica.
Materiales y recursos
Guía de intervención
http://www.observatoriodelainfancia.es/oia/esp/descargar.aspx?
id=3368&tipo=documento
FAQ
Abril, D. (2012).
Educación y ciudadanía activa.
Reflexiones y propuestas a partir de historias de vida (p. 68)
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Investigación social desde la práctica educativa
5 AL TERRITORIO1
Objetivos
Mapa de ruta
Información
2. Fases de trabajo
2.1. Formulación del problema-demanda de colaboración.
Toma de contacto y negociación compartida de la demanda
2.2. Detección de necesidades: diagnóstico y análisis compar-
tido
2.3. Propuesta y planificación de la acción
2.4. Puesta en acción y seguimiento
2.5. Evaluación del proceso IAP
2.6. Difusión del proceso
1
Este trabajo se enmarca en el proyecto I+D+I financiado por el Ministerio de Economía y
Competitividad y al Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), con referencia EDU2015-
68004-R (MINECO/FEDER, UE).
3. Orientaciones para poner en marcha y cuestiones de reflexión
3.1. Tiempos y espacios para la participación: sobre procesos y
herramientas de trabajo
3.2. Relaciones entre profesionales y comunidad educativa
(agentes del contexto)
Materiales y recursos
FAQ
Referencias bibliográficas
Objetivos
2
Para más información se puede visualizar el video «Missions Interculturals» (https://www.
youtube.com/watch?v=j0g_vdcRuBQ) y los artículos de Alcañiz, Segarra y Trilles (2014), Segarra,
Traver y Lozano (2015), Terol (2016) y Traver, Segarra y Lozano (2017).
Investigación social desde la práctica educativa
Para ello, echamos mano de los recursos más cercanos y que tenían cierta
tradición en voluntariado social e implicación comunitaria de la ciudad de
Castellón. Preparamos materiales y carteles para la difusión y nos acercamos
a cada uno de los colectivos donde realizar la difusión. La respuesta nos sor-
prendió gratamente.
En el proyecto han participado cerca de cincuenta personas de diversos
colectivos distribuidos en tres grupos de trabajo. En primer lugar, tenemos
a la «red local», conformada por los miembros de las redes de participación
ciudadana de las dos poblaciones. De sus debates y trabajo previo, surgieron
las problemáticas a trabajar y compartir con los otros dos colectivos. En se-
gundo lugar, contamos con el colectivo de los «nómadas culturales» confor-
mado por voluntariado de la Cruz Roja, del «Casal Popular3» de Castellón,
y estudiantes de los grados de maestro y del Máster Internacional en Estu-
dios de Paz, Conflictos y Desarrollo de la Universidad Jaume I. Este segundo
grupo nos aporta la mirada de la alteridad, del contraste, descentrando y
abriendo el debate desde enfoques primariamente localistas a otros afina-
dos en claves más globales. Finalmente, el tercer colectivo lo identificamos
como el «grupo coordinador» que está formado por personal investigador y
técnicos de cultura de la UJI y responsables municipales de las poblaciones
implicadas. Este tercer grupo coordina las acciones a realizar, prepara los
materiales, acompaña el proceso y realiza las tareas de documentación nece-
sarias para investigar y aprender con el proyecto.
Las «Misiones Interculturales» se desarrollan en la dimensión local, ám-
bito en el que se dan la mayoría de las necesidades ciudadanas. Su propuesta
se centra en la «problematización de lo cotidiano», mediante el diálogo com-
partido entre los miembros de las comunidades locales y los agentes exter-
nos (nómadas culturales) para, después, conjuntamente buscar alternativas
de mejora y transformación. Desde estos presupuestos, la participación de-
mocrática y la implicación ciudadana son dos factores clave sobre los que
descansa la propuesta.
3
El «Casal Popular» de Castelló es un centro social autogestionado en el que, como se afirma
en su página web, conviven diferentes colectivos e individualidades que comparten espacio, recursos
y pensamiento. En él, con una estructura de funcionamiento y organización asamblearia, se reali-
zan actividades cívicas y culturales como conferencias, conciertos, ciclos de cine, debates, tertulias,
presentaciones de libros o talleres (https://www.facebook.com/pg/casalpopulardecastello/about/).
Investigación social desde la práctica educativa
Los «nómadas culturales» fueron acogidos por algunas familias de las redes
locales con las que compartieron su cotidianeidad, con la finalidad de facili-
tar su integración e implicación en la vida del municipio.
Finalmente, y dentro de esta semana de convivencia, iniciamos la cuarta
fase. En ella se realizó una dinámica de reflexión, intercambio de opiniones
y evaluación del proyecto en la que participaron todas las personas y los di-
ferentes colectivos que lo han hecho posible (redes locales, grupos de nóma-
das y grupo investigador). En esta sesión, se juntaron los participantes de los
dos pueblos en una dinámica asamblearia que realizó un análisis crítico de
los procesos seguidos, los resultados alcanzados y las vivencias experimenta-
das. Las evidencias recogidas en esta sesión y a lo largo del proyecto en gra-
baciones audiovisuales, entrevistas y diarios de trabajo forman parte del ma-
terial que, desde una vertiente investigadora, nos han permitido estudiar el
proyecto de manera plural, sistemática y rigurosa.
Mapa de ruta
Este tema lo hemos planteado como una aproximación teórico-prác-
tica a las características y los fundamentos de la investigación acción
participativa en el ámbito socioeducativo o comunitario. Para ello, he-
mos optado por realizar un relato situado. Empezamos con la descrip-
ción de un ejemplo real en el que utilizamos la IAP como herramienta
de análisis y trabajo comunitario para la transformación y el desarro-
llo local en el ámbito de la cultura y la educación no formal. Se trata
del proyecto «Misiones Interculturales». Este proyecto, junto con otros
ejemplos de acciones socioeducativas que hemos realizado en entornos
escolares, nos sirven como ejemplo y concreción de la descripción teó-
rica que realizamos de este modelo de investigación participativa. En
un principio optamos por mostrar solo el proyecto de Misiones Inter-
culturales por centrarse en aspectos de la educación no formal, más cer-
canos a las características de la titulación de Educación Social. No obs-
tante, pensamos que los ejemplos reales extraídos del ámbito escolar
nos ofrecían un contexto diferente que nos permitía mostrar otra con-
creción del desarrollo de la IAP, que aumentaba la riqueza y diversidad
del correlato práctico como ejemplificador de esta propuesta.
Investigación social desde la práctica educativa
Información
Como señala Oscar Jara (2012: 62), «las propuestas que se nos pre-
sentan bajo este concepto, tienen una diversidad de enfoques y de ma-
tices, producidos por posturas epistemológicas o ideológicas diferen-
tes o marcadas por el espacio desde donde se elaboraron (si fue en
Investigación-acción participativa: Ciudadanía crítica y vinculación al territorio
Esta fase, según Suarez y Gómez (1999), está integrada por las accio-
nes, tareas y/o indicadores propuestos para alcanzar los resultados espe-
rados y el cumplimiento del objetivo. Presentan un carácter operativo o
educativo, cuantitativo o cualitativo; según se relacionen con las evalua-
ciones de los diferentes momentos de la investigación o con aquellas ac-
ciones relacionadas con el proceso formativo. Los que participan en la in-
vestigación elaboran y ejecutan el plan para cada objetivo, trazan metas y
actividades que deben realizarse, se decide quién es el responsable y quié-
nes participarán, que recursos se necesitan y cuándo debe cumplirse.
a) La publicación del «Libro del Pueblo»: se decidió que sería un libro es-
crito con las diferentes voces de los abuelos, padres, niños… sobre luga-
res emblemáticos y su evolución a través del tiempo.
a) Desarrollo de la acción
En el caso del CRA, la acción desarrollada dio lugar al Libro del Pueblo
fue realizado y publicado durante el curso y finalmente distribuido entre la
comunidad con motivo del acto homenaje de jubilación de uno de los maes-
tros del centro.
b) Seguimiento de la acción
4
Hemos optado por ubicar la sistematización de las experiencias dentro de la última fase de la
IAP siendo conscientes que este proceso también está fuertemente vinculado a la evaluación de la
experiencia realizada puesto que de él se derivan aprendizajes para todas las personas participantes.
Investigación-acción participativa: Ciudadanía crítica y vinculación al territorio
1. El punto de partida.
2. Las preguntas iniciales.
3. Recuperación del proceso vivido.
4. La reflexión de fondo.
5. Los puntos de llegada.
También puede ser útil abordar en esta etapa los criterios que propo-
nen Kemmis y McTaggart (1992) para la elaboración del informe de la
investigación-acción y que se sintetiza en lo siguiente: «se realizan gene-
ralmente al dar por terminada una espiral de investigación-acción y se
publican bajo la forma de un estudio de caso. Debe adoptar un formato
histórico y narrar los hechos cronológicamente, abarcando los aspec-
tos siguientes: evolución de nuestra idea general y de la comprensión del
problema, acciones emprendidas, problemas de implementación, efectos
pretendidos e imprevistos, técnicas utilizadas, entre otras».
No es el fin del proceso, puesto que la IAP es un proceso circular y
ello implica que se deben repetir las etapas.
Este libro ha sido diseñado y realizado entre todos los colectivos participan-
tes que, además colaboraron en un proceso de revisión no ciega entre pares,
que tenía la misión de mejorar el producto entre todos y todas para todos
y todas. Procesos colectivos que debemos tener en cuenta son mucho más
complejos, problemáticos y dilatados en el tiempo, pero increíblemente gra-
tificantes. Este libro actualmente está en fase de negociación editorial para
su próxima publicación. Con respecto a la difusión de este tipo de experien-
cias en el mundo académico, hay que subrayar las dificultades que encon-
tramos cuando intentamos difundir materiales que utilicen voces no acadé-
micas en su forma de relatar la experiencia, ya que topan con las rigideces
del mundo académico. Finalmente, desde el ámbito académico, también se
han realizado tareas de difusión en distintos congresos internacionales (por
ejemplo: Segarra, Ortells, Traver y Lozano, 2014; ….) y en revistas científi-
cas (por ejemplo: Alcañiz, Segarra y Trilles, 2014; Segarra, Traver y Lozano,
2015 y Traver, Segarra y Lozano, 2017).
De nuestra experiencia en el CRA, la fase de difusión puede tener diver-
sos formatos, informantes y destinatarios. En nuestro caso se ha llevado a
cabo mediante:
________________________________________________________________
_______________________________________________________________
Yo, ________________________________________________________,
como colaborador/ tutor legal del menor, declaro estar informado y
autorizo a los miembros del equipo de investigación del proyecto a
la recopilación, custodia y tratamiento de los datos necesarios para
el desarrollo de este estudio, así como en las actividades de difusión
de los resultados en contextos formativos y de investigación.
En …………………………………., a …… de ………………… de
20…..
Colaborador/a en la investigación /
Tutor/a legal (en caso de menor ) Investigador Principal
Fdo.:........................................ Fdo:……………………………
DNI n.º……………………….... DNI n.º: ………………………
Investigación social desde la práctica educativa
Materiales y recursos
FAQ
¿Y si no veo cambios?
¿Y si no participan?
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Terol, E. (2016). Nómadas culturales. Cuadernos de Pedagogía, 470, 16-22.
Investigación social desde la práctica educativa
6 SOCIOEDUCATIVA
Héctor S. Melero
Belén Ballesteros Velázquez
Objetivos
Mapa de ruta
Información
Materiales y recursos
FAQ
Referencias bibliográficas
Objetivos
Mapa de ruta
Información
1. Del
caso, al estudio de caso, al estudio de caso
en Educación Social
— por ser un caso típico, un caso que se repite marcando una tendencia
general y que acentúa el interés del estudio por cuanto representa lo
que está ocurriendo;
— o, por el contrario, un caso atípico, que choca y se escapa de lo esta-
blecido y nos hace situar el interés por comprenderlo desde su parti-
cularidad;
— por ser un caso que ayuda a teorizar sobre un eje de reflexión;
— por ser un caso diferente que facilita contrastar los conocimientos
que tenemos sobre determinado tema buscando en él lo que se escapa
de la uniformidad y abre otra vía de conocimiento.
Esta otra consideración del estudio de caso lo concibe como una téc-
nica de recolección de información, Muñiz (2010). Toda investigación
El estudio de caso aplicado en el proceso de intervención socioeducativa
1
Aguirre García-Carpintero, A., Moliner Miravet, L., Traver Martí, J. (2012). La Educación
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Investigación social desde la práctica educativa
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Louzao Suárez, M. (2009). Diseño, desarrollo y evaluación de un proyecto de educación inter-
cultural en un centro asturiano de educación primaria. Una perspectiva de la investigación en la acción
y el estudio de caso. Oviedo: Universidad de Oviedo
El estudio de caso aplicado en el proceso de intervención socioeducativa
Por ejemplo, supongamos que trabajamos con una persona que ha es-
tado varios años en una situación de «abandono» por diversas razones y,
durante este tiempo, se han deteriorado sus habilidades básicas para la vida
diaria y de cuidado personal (diagnóstico), por lo que, aprovechando que
vive solo y le gusta el baloncesto (potencialidades), pretendemos recuperar
esas habilidades (objetivo) mediante (actividades): su incorporación a un
grupo de deportes realizado en un polideportivo y entre cuyas rutinas se en-
cuentra la ducha, aspecto que queremos trabajar; un grupo de cocina que
realizamos en el centro para recuperar hábitos de alimentación sana; e inter-
venciones individuales en su casa para el desarrollo de habilidades como la-
var ropa, o mantener la higiene en el hogar. En este ejemplo nuestro «caso»
es el individuo junto al que pretendemos desarrollar una intervención so-
cioeducativa para que recupere las habilidades deterioradas.
la terapeuta nos informa de que en los resultados del último análisis tenía el
colesterol muy alto además del sobrepeso y, por otra parte, nos da a conocer
que el trabajo en el domicilio va muy bien. Tras debatir entre todas decidimos
no hacer cambios en las actividades, aunque sí en el planteamiento. Cocina
parece necesario para desarrollar una alimentación sana, pero se propone
que se refuerce proponiéndole modificar la intervención en el domicilio para
acompañarle a la compra y ayudarle a preparar otro tipo de menús más sa-
nos. En cuanto al grupo de deporte parece interesante ir eliminando la presen-
cia del educador para que gane en autonomía, pero el equipo propone hacerlo
muy poco a poco y hablándolo primero con todas las personas participantes.
Técnicas:
Hay distintas técnicas que se pueden usar para facilitar la toma de deci-
siones colectivas, para llegar a acuerdos y consensos entre distintas personas.
Muchas de ellas han sido desarrolladas para procesos de investigación acción
e investigación acción participativa (tema 5 y tema 10), así como para la di-
namización de procesos de participación. Aquí te presentamos una propuesta
por Aguirre, Benet, Moliner, Sales, Sanahuja y Traver (2018:49-52):
— El punto de partida
— Las preguntas iniciales
— La recuperación del proceso vivido
— La reflexión de fondo: ¿por qué pasó lo que pasó?
— Los puntos de llegada
Introducimos en los siguientes puntos las ideas clave sobre cada una
de estas etapas.
Registro diario
Actividades Observaciones
Fecha Objetivos Participantes Resultados
desarrolladas e impresiones
Registro semanal
c) Aprendizajes (1/2 página sobre las enseñanzas que ese momento nos ha
dejado y cómo nos podrían servir para un futuro).
Materiales y recursos
— Red Alforja: viene definida en la propia web como una red que « im-
pulsa procesos de formación política, comunicación popular y sistema-
tización de experiencias, desde la concepción metodológica de la edu-
cación popular, apostando al fortalecimiento de las organizaciones y
movimientos sociales de la región mesoamericana en las luchas por
la emancipación de los pueblos…». Destacamos su sección de libros
donde se pueden encontrar documentos sobre la teoría y la práctica
de la sistematización de experiencias (Roberto Antilón, Ana Bikel, Ós-
car Jara, entre otros autores): http://www.redalforja.net/libros/
El estudio de caso aplicado en el proceso de intervención socioeducativa
FAQ
Referencias bibliográficas
Aguirre, A., Benet, A., Moliner, O., Sales, A., Sanahuja, A., & Traver, J. (2018).
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El estudio de caso aplicado en el proceso de intervención socioeducativa
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rica Programa Alianzas.
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lógica de la investigación en Psicología y Educación. Madrid: McGraw Hill.
Montero, I. y León, O. G. (2002). Clasificación y descripción de las metodologías
de investigación en Psicología International. Journal of Clinical and Health
Psychology, 2, 3, 503- 508.
Muñiz, M. (2010). Estudios de caso en la investigación cualitativa. División de
Estudios de Posgrado Universidad Autónoma de Nuevo León, México. Fa-
cultad de Psicología.
Rodríguez, A. y González, J. (coords.) (2016). Guía de Funcionamiento y Calidad
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Madrid. Consejería De Políticas Sociales Y Familia. Comunidad De Madrid.
Dirección General de Atención a Personas con Discapacidad. Recuperado de:
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San Fabián, J.L. y Álvarez Álvarez, C. (2012). La elección del estudio de caso en
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rado de: http://www.gazeta-antropologia.es/?p=101
Van de Velde, (2008). Sistematización. Texto de referencia y de consulta. Nicara-
gua: Centro de Investigación, Capacitación y Acción Pedagógica http://www.
cepalforja.org/sistem/documentos/sistematizacion_de_experiencias_-_III_edi-
cion.pdf
Bloque III
TÉCNICAS DE PRODUCCIÓN
DE INFORMACIÓN
MIRAR PARA VER: LA OBSERVACIÓN
COMO TÉCNICA DE INVESTIGACIÓN
7 EN CONTEXTOS SOCIOEDUCATIVOS
Objetivos
Mapa de ruta
Información
Referencias bibliográficas
Objetivos
Información
Ahora, tras haberla observado, podéis dialogar sobre ella para com-
probar que aunque habréis visto la misma imagen, no os habéis fijado
necesariamente en los mismos detalles (ej.: ¿número de cañones de es-
copeta?; ¿hay algo detrás del muro?; ¿alguno de los personajes parecería
estar sonriendo?). Además, es probable que tampoco haya despertado
en vosotras y vosotros las mismas reacciones emocionales (angustia por
la vivencia del fusilamiento; divertimento por la manera de representar
la situación...) ni exáctamente los mismos pensamientos (¿qué hace ese
personaje tomando notas en el paredón?; ¿por qué les van a fusilar?; ¿los
agujeros en el muro son muestra de que ya ha habido ejecuciones pre-
vias?; ¿qué se trata de transmitir con la escena?, etc.).
Precisamente sobre estas cuestiones (y «muchas más», como se
suele decir) reflexionaremos a lo largo del capítulo, así como acerca de
otras que pueden extraerse de la viñeta mostrada, como aquellas que gi-
ran en torno a la posición desde la que observamos en investigación so-
cial y desde nuestra práctica socioeducativa cotidiana. En este sentido,
esperando que las líneas que siguen resulten útiles para orientar obser-
vaciones enmarcadas en procesos de investigación educativa en contex-
tos sociales, comenzaremos por aproximarnos a lo que entendemos por
algo tan aparentemente sencillo y, a la vez, profundamente complejo,
como es la acción de observar.
1
Sistematización del proceso observacional que podrá ser más o menos exhaustiva depen-
diendo de las características de la investigación, pudiendo diferenciar, siguiendo a la autora citada:
observación no sistematizada, ocasional o no controlada, observación sistematizada o controlada y
observación muy sistematizada (Anguera, 1989).
Mirar para ver: La observación como técnica de investigación en contextos socioeducativos
2
El paréntesis ha sido añadido por nuestra parte.
Investigación social desde la práctica educativa
3
Los paréntesis han sido añadidos por nuestra parte.
Investigación social desde la práctica educativa
4
El paréntesis ha sido añadido por nuestra parte.
Mirar para ver: La observación como técnica de investigación en contextos socioeducativos
quién se lo dicen (incluso a quién no), dónde y cuándo se sitúan las ac-
ciones y durante cuánto tiempo, qué objetos y documentos relevantes
están implicados en la acción, de qué manera se configuran los escena-
rios sociales que acogen la acción… y cómo se interrelaciona todo ello.
— Ya que, como dijimos, la observación se enmarca en proposiciones
más generales que le dan un sentido, debemos tener en cuenta los ob-
jetivos de la investigación para elegir cuidadosa y justificadamente los
momentos, lugares y posicionamientos desde los que observar.
— Nuestra posición como observadoras (e investigadoras) afectará a la
situación social en la que nos encontremos presentes, como también
mencionamos. Además, contamos con una serie de «filtros» implíci-
tos en la «mirada» que trataremos exclusivamente en el apartado 4
(«Algunas reflexiones sobre cómo y con qué gafas miramos»). Si con-
seguimos identificarlos, comprenderlos y, de esta manera, dejarlos
momentáneamente de lado, seremos capaces de mirar desde el «extra-
ñamiento», como actitud que pasa por considerar que ninguna forma
institucional o situación social se produce de manera natural, es decir,
al margen de acciones comunicativas, generadas biográfica e históri-
camente (Velasco y Díaz de Rada, 2006).
— La necesidad de revisar(nos) como forma de contribuir a la generación
de un conocimiento abierto y rebatible, en construcción permanente,
implica apostar por la construcción intersubjetiva del conocimiento.
Para ello, las interpretaciones de lo observado deben ser contrasta-
das con otras formas de producir información (revisión bibliográfica,
entrevistas…), así como con la realización de observaciones en otras
condiciones (espacios y momentos distintos) y con investigaciones lle-
vadas a cabo por otras personas. Latour (2012) también apuesta por
un (re)pensar colectivo y dialógico sobre las situaciones sociales como
forma de construcción intersubjetiva de conocimiento que nos apro-
xime a la comprensión de las mismas. Es por ello que el autor enfatiza
el cogitamus («pensamos») frente al cogito ergo sum («pienso luego
existo») de Descartes, como manera de señalar la importancia de cons-
truir unas Ciencias Sociales desde el pensar colectivo y colaborativo.
— Observar, como técnica de investigación social, recoge un conjunto de
acciones más amplio. Entre ellas, mencionamos sintéticamente las si-
guientes:
Investigación social desde la práctica educativa
— Dedicar todos los días en nuestro trabajo, durante por ejemplo diez mi-
nutos (o un periodo de tiempo determinado), a este tipo de observación.
— Seleccionar un momento en el que la observación que vaya a realizar
pueda pasar inadvertida (comidas, lecturas, trabajos en grupos, jue-
gos, espacios de ocio…).
— Seleccionar a la persona a la que voy a observar.
— Recoger aquellos datos sobre su «forma de estar» que me llamen la
atención (gestos faciales, lenguaje no verbal, entonación de la voz,
tipo de mirada, velocidad a la hora de hablar, gesto corporal, interac-
ciones que realiza con el resto…).
— Reflexionar en un primer momento sobre lo que me ha llamado la
atención y preguntarme si tiene que ver con «las gafas» con las que
estoy mirando (como veremos en el siguiente punto).
— Analizar la observación recogida con otra u otras compañeras o com-
pañeros estableciendo relaciones entre lo recientemente observado y
lo anteriormente observado.
— Establecer indicadores que al observarlos nos adviertan sobre el es-
tado de ánimo, comportamiento, etc., de la persona observada.
Investigación social desde la práctica educativa
tros. Al igual que hacen estas personas al reconocer su defecto visual para
ponerle una solución, es nuestro trabajo reconocer estos filtros y tenerlos
«diagnosticados» para no observar sin saber con qué miramos.
Los filtros y perspectivas, las gafas con las que miramos, pueden lle-
varnos a hablar de prejuicios y estereotipos, ¿qué diferencias hay? Sim-
plificando considerablemente, podríamos afirmar que la diferencia
esencial entre uno y otro es la misma que puede haber entre lo indivi-
dual y lo grupal. El prejuicio es un sentimiento o emoción que alguien
presenta sobre otra persona, grupo, situación, lugar, etc. El estereotipo
es un consenso de opinión que un grupo social presenta sobre un grupo.
Los dos son filtros en la mirada cuya aceptación acrítica nos lleva a juz-
gar a las y los demás sin haberles conocido. Normalmente el estereotipo
se da en primer lugar para, más tarde, manifestarse en forma de prejui-
cio.
5. «Cacharreando»: herramientas y formatos
para el registro de información
El diario de campo
DÍA 5
FECHA: 14 de noviembre 2013
HORAS EN EL CENTRO DE PRÁCTICAS: 7,50 h.
ACTIVIDAD 33: Reunión semanal.
PARTICIPANTES: Profesor colaborador, educadora social, profesorado
(3 personas) y yo.
RECURSOS: Oficina de la Escuela-Taller.
OBJETIVOS: Conocer aspectos organizativos sobre la reunión semanal.
APROVECHAMIENTO:
Las reuniones de equipo son los jueves.
Antes se hacían por las mañanas pero coincidía que era este día en el que
más faltas de asistencia a clase se daban durante la semana. Así que optaron
por cambiar la hora y poner la reunión a última hora. Con esta medida se re-
dujeron las faltas de asistencia. Problema-Solución-Cambio.
El calendario laboral es semestral para tener una mayor flexibilidad.
El alumnado tiene espacios y momentos para fumar. Todo está orientado
al ambiente laboral y tiene que haber restricciones también de este tipo.
Existen problemas anteriores a la reunión que, evidentemente, descono-
cemos.
5
Corresponde a la Observación planificada número 3 dentro de un mismo día de Observación.
Investigación social desde la práctica educativa
6
Tomado de: Navarro, R., López, A. y Barroso, P. (1998). El análisis de incidentes críticos en
la formación inicial de maestros, en Revista Electrónica Interuniversitaria de Formación del Profeso-
rado, vol. 1 Núm. 1.
Investigación social desde la práctica educativa
Lista de control
7
Tomada de: McClellan, Diane E. & Katz, Lilian G. Source: ERIC Clearinghouse on Elemen-
tary and Early Childhood Education Urbana IL. El Desarrollo Social de los Niños: Una Lista de Co-
tejo. ERIC Digest. (Young Children’s Social Development: A Checklist. ERIC Digest.)
Mirar para ver: La observación como técnica de investigación en contextos socioeducativos
I. Atributos individuales SÍ NO
Escalas de estimación
— Numérica: 12345
— Verbal: siempre / frecuentemente / a veces / pocas / nunca / no
sé /excelente / bueno / medio / regular / malo
— Gráfica: ----.---------------.----------------.----------------.----------------.----
Siempre Casi siempre Con frecuencia Pocas veces Nunca
COMPORTAMIENTO EN CLASE
Nunca Alguna Varias Muchas
(Número de veces que se da durante la clase)
OTRAS OBSERVACIONES
Como hemos dicho, esto sólo ha sido una pequeña muestra de las
formas de registro existentes para los procesos observacionales. Ade-
más, quedan otras muchas más por inventar. Desde aquí os animamos
a que encontréis aquellas con la que más cómodos y cómodas os sintáis,
dependiendo, eso sí, de vuestros objetivos y de las características que
ofrezca la situación concreta a observar. Porque la investigación social
debe ser un proceso abierto al cambio y a la creatividad.
Mirar para ver: La observación como técnica de investigación en contextos socioeducativos
Referencias bibliográficas
Objetivos
Información
Referencias bibliográficas
Objetivos
Información
2. Tipos de preguntas
3. Valore también los siguientes aspectos marcando la opción que considere
Pocos Demasiados
Le han parecido
Sí No
Ventajas: Ventajas:
Inconvenientes: Inconvenientes:
Datos de identificación
CENTRO DE TRABAJO:
LOCALIDAD:
AÑOS DE EXPERIENCIA:
1
Por lo general son preguntas que guardan similitud en todos los cuestionarios (sexo, edad,
profesión…) y que nos permiten no solo describir la muestra sino también hacer análisis compa-
rados por grupos en torno a las cuestiones de estudio. Sin embargo, tenemos que reflexionar qué
es lo que describe mejor a la muestra y si son esas variables significativas para establecer com-
paraciones. En este sentido, señalamos la proliferación de estudios basados en cuestionarios que
toman como referencia la edad, sexo, o niveles de estudio para comparar los resultados…, ¿son
estas las variables más relevantes para establecer diferencias en las opiniones o valoraciones re-
cogidas?
Preguntas y respuestas: cuestionarios
Sí No
Sí No NS/NC
1 2 3 4
Valoración de conflictos en el aula
Nada Poco Bastante Mucho
1. Se respetan las normas en el centro edu-
cativo.
2. Existen conductas disruptivas en el aula.
3. Existen comportamientos desafiantes en
el aula.
4. Aparecen problemáticas socio familiares
en el aula.
5. Existen actitudes negativas del profeso-
rado que afecten a la convivencia escolar.
6. Hay evidencias de conductas violentas en
el aula.
7. Existen casos de absentismo escolar en el
aula.
3. Orientaciones
para la redacción de las preguntas
y alternativas de respuesta
a) Juicio de expertos.
Una vez elaborada una versión primera del cuestionario debe-
mos someterlo a la valoración de expertos en la temática que
trata el cuestionario así como en técnicas de investigación y, en
consecuencia, pueden evaluar los rasgos del mismo. La valora-
ción que se recaba tiene un doble carácter:
— Sintético, cuando se pretende valorar si los ítems en su con-
junto son adecuados y su distribución en el cuestionario si-
gue una estructura coherente, determinando si adolece de
alguna cuestión importante o si hay partes que pueden ser
excluidas.
— Específico, a través del que se inspecciona si cada una de las
preguntas de forma aislada responden a la función prevista
y están formuladas de forma conveniente (véase el siguiente
ejemplo).
Suele incluirse un apartado final donde se les invita a los exper-
tos a comentar aspectos de mejora del cuestionario.
Preguntas y respuestas: cuestionarios
Valore en una escala de 1 a 4 los siguientes criterios para cada uno de los
ítems del cuestionario. Señale con un círculo su respuesta.
Observaciones:
5. Procedimientos
de aplicación del cuestionario
y tratamiento de los datos
La aplicación del cuestionario, sea cual sea la vía que se haya es-
cogido para administrarlo a la muestra seleccionada, precisa que se
establezcan una serie de instrucciones previas destinadas al encues-
tado con el objetivo de que conozca brevemente la naturaleza del es-
tudio en el que participa y se le dirijan algunas precisiones respecto
a los tipos de ítems sobre los que habrá de responder y las opciones
de respuesta. Para Álvarez, Álvarez y Molpeceres (2004) tradicional-
mente han existido tres tipos de encuestas: las personales, las posta-
les y las telefónicas, siendo difícil para estos autores establecer qué
tipo es más recomendable, aunque hoy en día y debido a los avances
en el uso de las tecnologías las vías de acceso están cambiando (el
correo postal está siendo sustituido por correo electrónico y la telefo-
nía fija se complementa con la móvil). Como se verá a continuación,
hay pros y contras en cada una de estas vías de contacto con la reali-
dad social.
De acuerdo con Arribes (2004) se ha de tener en cuenta que es ha-
bitual recibir una mayor tasa de respuesta cuando el cuestionario se
efectúa a través del teléfono en tanto que la administración a cargo
de un entrevistador va a facilitar que se cumplimente totalmente;
además, de acuerdo con García Ferrando (2002) la encuesta telefó-
nica puede ser realizada masivamente, si bien impide que se con-
trole que efectivamente los individuos que responden forman parte
de la muestra que se había segmentado, circunstancia que para Álva-
rez et al. (2004) puede ser controlada; no obstante, en este sentido se
han de considerar los costes en los que se incurre, que son más eleva-
dos cuando se requiere que el entrevistador esté al teléfono con el en-
cuestado, aunque en la actualidad los costes son bajos. Álvarez et al.
(2004) refieren que la encuesta telefónica ha de contar con preguntas
sencillas y cortas dado que se efectuará de forma oral y sin posibilidad
de volver atrás. En efecto, esta cuestión ha sido también reflejada por
García Ferrando (2002) que ha expuesto que cuando la encuesta se
Preguntas y respuestas: cuestionarios
Encuesta personal
Ventajas: Inconvenientes:
— Se controla que el investigado es la — Es más caro.
persona a la que se había considerado — Se requiere más tiempo tanto en la
encuestar. formación del investigador como en la
— La tasa de respuestas es elevada. implementación del cuestionario.
— Se puede proporcionar información — La presencia del investigador puede
y recurrir a objetos o recursos inducir a respuestas «deseables».
adicionales durante la investigación. — Puede ser más difícil estandarizar
— Se mantiene contacto personal, lo que las respuestas a consecuencia
mejora la actitud del encuestado. de los matices aportados por los
— La información que se obtiene puede investigados.
ser más específica.
— Es posible introducir algún cambio
sobre la secuencia de preguntas.
Investigación social desde la práctica educativa
Encuesta telefónica
Ventajas: Inconvenientes:
— Rapidez. — Sólo se dispone de la información
— Precio asequible. de las guías telefónicas para
— Se puede reintentar si no se encuentra individualizar la muestra.
disponible el encuestado. — El encuestado puede no ser parte de la
— Gran alcance geográfico. población investigada.
— La información que se obtiene es más
limitada.
— El investigado puede aburrirse, es
difícil mantener su atención.
— No se puede utilizar material
adicional.
Encuesta por correo/ correo electrónico
Ventajas: Inconvenientes:
— Bajo coste — Lentitud en la obtención de resultados
— No hay interferencia del investigador (solo en el correo postal).
— Puede cubrirse con la investigación un — Difícil de conocer si responde una
área geográfica muy amplia persona que sea parte de la muestra.
— Rapidez en la respuesta (solo en el — Baja tasa de respuesta. En el caso
correo electrónico). del correo electrónico esto mejora
— La tasa de respuesta es elevada (solo notablemente.
en el correo electrónico). — Es difícil motivar a los encuestados.
Referencias bibliográficas
Objetivos
Información
Referencias bibliográficas
Objetivos
Información
2. ¿Qué
es una entrevista cualitativa y qué es lo que la
diferencia de otras formas de diálogo?
Proponemos tres ideas clave para entender qué es, de forma especí-
fica, una entrevista cualitativa:
— No es sonsacar información.
— No es únicamente una conversación amistosa.
— No es una versión oral de una encuesta rápida.
Respuestas y preguntas: la entrevista cualitativa
1. ROMPER EL HIELO
Saludo inicial, agradecimiento, small talk.
2. PRESENTACIÓN DEL OBJETIVO DE LA ENTREVISTA
Explicación sobre el uso que se le darán a los datos recogidos
Garantía de confidencialidad
3. PRESENTACIONES: DATOS PERSONALES DEL/DE LA INFORMANTE
Nombre (o pseudónimo) del/de la informante
Datos personales que quiera compartir (en respuesta a la pregunta: ¿cómo te
gustaría presentarte)
4. DESARROLLO TEMÁTICO DE LA ENTREVISTA
Diálogo / interacción
Atención al objetivo que justifica el uso de la entrevista en la investigación
5. FINAL DE LA ENTREVISTA
1. Introducción a la despedida.
2. Metapregunta: pregunta de cierre sobre el contenido.
1. ¿Hay algo que no te haya preguntado y que debería haberlo hecho?
2. ¿Hay algo que quieras añadir?
3. Agradecimiento.
4. Despedida.
Investigación social desde la práctica educativa
6. AUTOEVALUACIÓN DE LA ENTREVISTA
Una vez acabada la entrevista, y al tiempo de haberla realizado, procederé a
realizar una autoevaluación de la misma. Me haré las siguientes preguntas:
— ¿El entrevistado tuvo dificultad para entender las preguntas formuladas?
— ¿Mi vocabulario fue comprensible?
— ¿Controlé demasiado la situación?
— ¿Estuve alerta a la conducta no verbal del entrevistado?
— ¿Establecí una relación de confianza?
— ¿Realicé una escucha activa?
— ¿Cómo manejé los silencios?
— ¿La entrevista logró sus metas?
6. Reflexiones adicionales
Lo que las personas dicen forma parte de lo que las personas hacen,
en la medida en que decir no es sino una forma más de hacer. No hay
solo un interés por la dimensión referencial o informativa, sino un inte-
rés por descubrir el significado desde las posiciones sociales de las per-
sonas que lo enuncian.
Respuestas y preguntas: la entrevista cualitativa
7.2. Categorizar
1
De la misma manera son múltiples (¿infinitas?) las posibilidades de incluir ítems en un cues-
tionario, escala o test que pretenda medir un constructo concreto.
Respuestas y preguntas: la entrevista cualitativa
Referencias bibliográficas
Objetivos
Información
1. Introducción.
2. Dinámicas.
2.1. Línea del tiempo
2.2. Mapeo social
2.3. Rueda socrática
2.4. Felicito, critico, propongo
2.5. Técnica de espejo
2.6. Bola de nieve
2.7. Hoja giratoria
2.8. Lluvia de ideas
2.9. Seminario colaborativo
Referencias bibliográficas
Objetivos
Información
1. Introducción
2. Dinámicas
¿Qué es?
¿Quién participa?
¿Cómo se desarrolla?
¿Qué es?
¿Cómo se desarrolla?
Temporalización
¿Qué es?
¿Quién participa?
¿Cómo se desarrolla?
Tiempo
¿Qué es?
¿Quién participa?
¿Cómo se desarrolla?
Tiempo
— https://goo.gl/szPs6C
— HYPERLINK «https://goo.gl/zK8hJa»
Investigación social desde la práctica educativa
¿Qué es?
Antecedentes y fundamentos
¿Quién participa?
¿Cómo se desarrolla?
¿Qué es?
¿Quién participa?
¿Qué necesitas?
Temporalización
http://www.elizalde.info/wp-content/uploads/izapideak/CA-ACpro-
grama.pdf
García López, R.; Sales Ciges, A.; Traver Martí, J.A.; García
López, J.; Moliner García, O.; Candela Pérez, I. y Llopis Bueno, E.
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el Ámbito Escolar. Madrid: Ministerio de Educación y Cultura. Minis-
terio de Trabajo y Asuntos Sociales y Fundación de Ayudacontra la
Drogadicción.
Estrategias de investigación-acción participativa para la transformación
¿Qué es?
¿Quién participa?
¿Cómo se desarrolla?
¿Qué es?
¿Quién participa?
¿Cómo se desarrolla?
¿Qué es?
¿Quién participa?
¿Cómo se desarrolla?
Estructura:
Para sistematizar y rentabilizar las reuniones se intenta, desde un
inicio, establecer unos puntos básicos que deben estar presentes en
cada reunión para que el tiempo de encuentro sea fructífero y responda
a los objetivos planteados. Así pues, la estructura se basa en cuatro ejes:
Traver, J.A.; Sales, A.; Moliner, O.; García, R. y Fortea, M.A. (2007).
Mejora de la docencia en la Universidad Jaume I: del modelo de forma-
ción de expertos a los seminarios permanentes basados en procesos de
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Gallego, M; Traver, J.A y Moliner, L. (2010). La Agenda 21 de la
Cultura como herramienta de potenciación de los aprendizajes a lo
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herramienta-de-potenciacic3b3n-de-los-aprendizajes-alv_gallego-traver-
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Moliner, L.; Traver, J.A. y Marco, F. (2011). Construcción de una
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Rebollo, O. (2001). «El Plan Comunitario de Trinitat Nova: una experiencia de
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Investigación social desde la práctica educativa
11 Marcos Román-González
Objetivos
Información
1. Introducción
2. Censos
2.1. Definición y breve historia de los censos
2.2. Características y usos actuales de los censos
2.3. Un ejemplo de censo: el Instituto Nacional de Estadística (INE)
2.4. Actividad 1: Extracción de datos censales de una población
3. Datos abiertos
3.1. Definición y breve historia de los datos abiertos
3.2. Características de los datos abiertos
3.3. Tipologías y usos de los repositorios actuales de datos
abiertos
3.4. Actividades con open data
4. Indicadores
4.1. Definición y breve historia de los indicadores
4.2. Aproximación a la construcción de indicadores
4.3. Características de un buen indicador
4.4. Sobre una posible dimensión cualitativa de los indicadores
4.5. Actividad 5: Análisis crítico de indicadores en el ámbito
educativo
5. Conclusiones
Referencias bibliográficas
Objetivos
Información
1. Introducción
1
Entiéndase, a lo largo de todo el capítulo, que con «educador social» o «educadores sociales»
nos referimos tanto a mujeres como a hombres que desempeñan esta maravillosa profesión.
Análisis de censos, datos abiertos e indicadores
2
Entiéndase «actual» en el sentido amplio de «real», no en el sentido restringido de «presente».
Es decir, cuando decimos «estado actual», abarcamos todo aquello que ‘es’ o ‘ha llegado a ser’ en al-
gún momento. En este sentido, siguiendo el ejemplo del texto, un censo proporciona los sucesivos
estados actuales de la población de tu Comunidad Autónoma: en 2015, en 2016, en 2017, en 2018,
etc…
Análisis de censos, datos abiertos e indicadores
2. Censos
3
http://dle.rae.es/?id=8DvFfDl
Análisis de censos, datos abiertos e indicadores
4
De ahí el término ‘Estadística’.
5
Una breve historia sobre los censos en España, confeccionada por el Instituto Nacional de Es-
tadística (INE), se puede consultar en: http://www.ine.es/explica/docs/historia_censos.pdf
Investigación social desde la práctica educativa
6
http://www.ine.es/
Análisis de censos, datos abiertos e indicadores
7
En el momento de escribir este capítulo, los datos censales del INE se encontraban actualiza-
dos hasta fecha 01 de julio de 2017.
8
Videotutorial explicativo disponible en: https://youtu.be/xjU_F7VVRcQ
9
Videotutorial explicativo disponible en: https://youtu.be/MPuxBk60Nfw
10
Videotutorial explicativo disponible en: https://youtu.be/51XaTaMem8I
Análisis de censos, datos abiertos e indicadores
http://bit.ly/2LsnDOP
3. Datos abiertos
11
Así, el ‘open data’ arrastra una ética similar a otros movimientos y comunidades abiertas
como el software libre (‘free software’), el código abierto (‘open source’), o el acceso libre (‘open ac-
cess’) a determinados bienes culturales y científicos.
Investigación social desde la práctica educativa
12
https://www.fundacionctic.org/
13
https://okfn.org/
14
Posteriormente revisada por la Directiva 2013/37/EU.
Análisis de censos, datos abiertos e indicadores
— Son datos referidos a contenidos muy diversos, mucho más allá del
ámbito demográfico y socioeconómico característico de los censos.
Muy particularmente, el ‘open data’ ha incorporado nuevas tipologías
de datos vinculadas a la digitalización de la sociedad, proceso que ha
‘sensorizado’ multitud de objetos (y casi la totalidad de los sujetos, a
través de su correspondiente ‘smartphone’), multiplicando y diversifi-
cando, respectivamente, la cantidad y la naturaleza de los datos pro-
ducidos y susceptibles de recolección.
— Son datos que pueden haber sido recogidos tanto desde institucio-
nes públicas, como desde instancias privadas (empresas), ciudada-
Investigación social desde la práctica educativa
15
La conexión entre distintos conjuntos-matrices de datos (‘datasets’) posibilita la emergencia
de los llamados ‘datos enlazados’ (‘linked data’): https://es.wikipedia.org/wiki/Datos_enlazados
Investigación social desde la práctica educativa
LECTURA COMPLEMENTARIA
BiciMAD: un ejemplo del poder transformador de los
‘datos abiertos’ en el Ayuntamiento de Madrid
http://www.microsiervos.com/archivo/mundoreal/250000-rutas-gps-bicimad-
bicicletas-alquiler-madrid.html
Análisis de censos, datos abiertos e indicadores
— Escala global:
— Escala nacional:
16
Una interesante lectura introductoria al respecto puede encontrarse en: http://www.
microsiervos.com/archivo/mundoreal/resource-watch-planeta-recursos.html
Análisis de censos, datos abiertos e indicadores
a ésta para que pueda realizar una reutilización efectiva de los mismos.
En esa línea, varias administraciones públicas están promoviendo con-
cursos17 para premiar las mejores iniciativas ciudadanas de reutiliza-
ción de su ‘open data’.
LECTURA COMPLEMENTARIA
La visión androcéntrica implicita en la ciudad de Madrid, puesta de
manifiesto a través de un análisis ‘open data’ de los nombres de sus calles
https://callesdemadrid.cc/
17
Véase, por ejemplo, el ‘Premio Dataton de la Ciudad de Madrid’, promovido desde el área de
gobierno de ‘Participación Ciudadana, Transparencia y Gobierno Abierto’ del Ayuntamiento de Ma-
drid: https://www.medialab-prado.es/noticias/premio-dataton-ciudad-de-madrid-2017
Investigación social desde la práctica educativa
18
Léase, por ejemplo, el famoso caso de fraude científico sobre células madre protagoni-
zado por el científico coreano Hwang Woo-Suk: http://www.microsiervos.com/archivo/ciencia/
hwan-woo-suk-condenado-por-falsificar-experimentos-celulas-madre.html
Análisis de censos, datos abiertos e indicadores
19
El correspondiente repositorio de la UNED se llama ‘e-spacio’: http://e-spacio.uned.es
Investigación social desde la práctica educativa
LECTURA COMPLEMENTARIA
La depresión del Excel: ¿Puede un error en una hoja de cálculo haber
destruido casi por completo la economía de Occidente?
En el siguiente artículo, publicado en El País el 21 de abril de 2013, Paul Krugman
(profesor de Economía de la Universidad de Princeton y Premio Nobel de Economía en
2008) cuenta cómo un fallo en la codificación de los datos en Excel cometido por dos
investigadores-economistas de Harvard, les llevó a afirmar erróneamente la existencia
de un umbral crítico para la deuda pública de un país; afirmación que fue posterior-
mente usada por numerosos políticos para justificar sus duras medidas de austeridad
durante la crisis económica. El error fue detectado una vez los datos fueron liberados
y sometidos a replicación por otros investigadores-economistas de la Universidad de
Massachusetts. La lección a extraer tras la lectura del artículo es doble: la necesidad
de asegurar la replicabilidad de la ciencia para, entre otras cosas, prevenir errores; y la
existencia siempre de audiencias interesadas que instrumentalizan los resultados cien-
tíficos a conveniencia.
https://elpais.com/economia/2013/04/19/actualidad/1366398440_370422.html
20
Disponible en: https://datos.madrid.es/sites/v/index.jsp?vgnextoid=337541000be13410Vgn
VCM2000000c205a0aRCRD&vgnextchannel=374512b9ace9f310VgnVCM100000171f5a0aRCRD
21
Videotutorial explicativo disponible en: https://youtu.be/jUoGbKsHplM
22
Videotutorial explicativo disponible en: https://youtu.be/qqJG8A-Hhd0
23
Videotutorial explicativo disponible en: https://youtu.be/7gno2eLNGJM
Investigación social desde la práctica educativa
24
Una lectura introductoria al tema puede encontrarse en: https://www.microsiervos.com/
archivo/arte-y-diseno/calentamiento-global-barras-color.html; que, a su vez, remite al blog «Climate
Lab Book: Open Climate Science» (http://www.climate-lab-book.ac.uk/), punto de encuentro de refe-
rencia entre investigadores climáticos que practican la ‘ciencia abierta’.
25
Disponible en: https://www.metoffice.gov.uk/hadobs/hadcet/data/download.html
26
Videotutorial explicativo disponible en: https://youtu.be/uBKPKJ1uirg
27
Videotutorial explicativo disponible en: https://youtu.be/HyWxkDaGtyA
Análisis de censos, datos abiertos e indicadores
(≈ datos brutos) de las encuestas del CIS, dicho acceso no es senci-
llo y está mediado por una solicitud expresa que el usuario debe ha-
cer de los mismos. En contraste, el acceso preferente y por defecto
que se presenta al ciudadano es el que lleva a los datos ya procesados,
como resultados netos, y a sus visualizaciones predeterminadas co-
rrespondientes, algo más propio de las antiguas filosofías y prácticas
cerradas.
En cualquier caso, consideramos que la exploración y utilización
del Banco de Datos Online del CIS es de extraordinario interés y utili-
dad para el educador social, ya que le aporta gran cantidad de informa-
ción acerca de las opiniones, actitudes, valores, etc… de la población,
así como de su evolución a lo largo de los años. Toda ella es informa-
ción potencialmente relevante para el ANP socioeducativo y el posterior
diseño de proyectos de intervención y/o mediación. Más concretamente,
en esta cuarta actividad os invitamos a:
— Analizar los resultados del estudio-encuesta n.º 2854 del CIS deno-
minado «Actitudes de la juventud ante la diversidad sexual»28. Más
concretamente, os proponemos segmentar los resultados relativos a
la pregunta 37 del cuestionario («Y si alguien cercano a ti, por ejemplo
tu mejor amigo [varón], te dijera que es homosexual, ¿cómo crees que
reaccionarías tú?»)29, y reflexionar sobre sus implicaciones para la ac-
ción socioeducativa.
— Analizar la evolución de los resultados de la serie histórica
n.º F.1.04.01.001, relativa a la pregunta «¿Cómo se considera Vd. en
materia religiosa?»30, y reflexionar sobre sus implicaciones para la ac-
ción socioeducativa.
28
Videotutorial explicativo disponible en: https://youtu.be/dKja816kLzI
29
Videotutorial explicativo disponible en: https://youtu.be/_SnCoffQGBc
30
Videotutorial explicativo disponible en: https://youtu.be/J6D0GPu6LPE
Análisis de censos, datos abiertos e indicadores
4. Indicadores
LECTURA COMPLEMENTARIA
Un ejemplo de indicador social compuesto: el Índice de Gini
El índice de Gini es un indicador compuesto, ideado por el estadístico italiano
Corrado Gini y acometido por el Banco Mundial, que se utiliza como medida de la
desigualdad económica interna de un país. Más concretamente, el índice de Gini es
un indicador que refleja la ‘desigualdad de ingresos’ dentro de un país, expresando
en qué medida los ingresos entre los individuos de una economía nacional se des-
vían de una distribución perfectamente igualitaria. El índice de Gini es un indica-
dor compuesto a partir de dos datos básicos objetivos: población e ingresos; y queda
expresado en una escala derivada 0-100, en la cual ‘0’ representa ‘perfecta igualdad
de ingresos’ (todos los individuos del país tienen los mismos ingresos), y ‘100’ re-
presenta ‘perfecta desigualdad de ingresos’ (una persona tiene todos los ingresos del
país, y las demás no tienen ninguno). Una variación al alza de 2 unidades en el ín-
dice de Gini equivale a un desplazamiento del 7% de la riqueza de la mitad más po-
bre del país a la mitad más rica.
El Índice de Gini también se puede expresar divido entre 100, como coeficiente
de Gini, en una escala 0-1. El mapa y la leyenda que se muestran a continuación, se
refieren al coeficiente de Gini por países con datos actualizados al año 2016. Tal y
como puede verse, España destaca tristemente por presentar un nivel de ‘desigual-
dad de ingresos’ superior a los países europeos de su entorno.
Investigación social desde la práctica educativa
Fuentes:
https://resourcewatch.org/data/explore/GINI-Index
https://es.wikipedia.org/wiki/Coeficiente_de_Gini
Percepción de bienestar
Baja (–) Alta (+)
Alta (+) DISONANCIA CONFORT
Renta per cápita
Baja (–) CARENCIA ADAPTACIÓN
Adaptado de García Martínez, 2000.
31
Disponible en https://www.mecd.gob.es/inee/dam/jcr:9eaf6023-809c-4ae0-840b-c4a01fa6e
656/2017-seie-final-16-agosto-2017r.pdf
32
Videotutorial explicativo disponible en: https://youtu.be/bz_phJH95Fw
33
http://www.shanghairanking.com
34
Videotutorial explicativo disponible en: https://youtu.be/9OMCGFN2U3Q
Análisis de censos, datos abiertos e indicadores
5. Conclusiones
Referencias bibliográficas
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data: su impacto en el área de bibliotecas y documentación. El profesional de
la información, (20)2, 164-172. https://doi.org/10.3145/epi.2011.mar.06
Análisis de censos, datos abiertos e indicadores
¿La educación social es algo específico? ¿Tiene que haber una mi-
rada en educación social que nos oriente de alguna manera sobre qué es
lo que nos interesa investigar y cómo?
En nuestro enfoque de educación social quedará implícito un com-
promiso ético, además de una forma de construir conocimiento y, por
tanto, unas metodologías de investigación.
Héctor. Parte de la pregunta tiene que ver con los códigos deonto-
lógicos que tienen los profesionales, que luego no se traducen, pero que
tienen que ver con el compromiso por la justicia social, por la igualdad,
por la transformación social. Para mí eso evita verlo como un meca-
nismo para «encauzar» a la gente que se va «saliendo» dentro de donde
a «mí» me interesa (en este caso, el neoliberalismo).
Teresa. Ese compromiso no es solo del educador social. Es tam-
bién del maestro. Me niego a aceptar esos límites. Y es por eso por lo
que no estoy de acuerdo cuando desde la academia distinguimos entre
lo que es educación social y lo que es formación de educadores. Para mí
tiene que ver más con una idea de educación, transformadora, emanci-
padora, crítica. Esa es mi idea de educación y tiene que estar en todo.
Para mí, lo más sorprendente que vi cuando empecé a formar en educa-
ción social es que estaba concebida como una forma de poner parches
a situaciones que tienen que ver más con lo formal o lo especial, apa-
gando fuegos. Me dio agobio, pero me di cuenta de que no, no, había
que hablar del mismo concepto de educación, ya estés dentro o fuera de
la escuela. Por eso me obliga a buscar temas como ciudadanía, partici-
Investigación social desde la práctica educativa
que estoy trabajando más para poner ese parche que para transformar
lo que queremos.
Beatriz. Estaba pensando en que cuando se puso en marcha el
Grado de Educación Social lo que hicimos fue pasar las mismas asig-
naturas que teníamos en Pedagogía y ponerle «social». En algún caso
había alguna similitud con Pedagogía Social, pero en lo demás no. Así,
pasamos a proponer, por ejemplo, asignaturas, como «Diagnóstico y
orientación» (que la teníamos) y le añadimos «en contextos desfavoreci-
dos». Todo se trasladó al estudio de la marginación.
Teresa. Es curioso porque cuando se ha planteado una asignatura
que lo que cuestiona es la mirada sobre la educación, como intercul-
turalidad o diversidad, no se sabe dónde adscribir. En lugar de consi-
derar que son básicas o globales, o se adscriben a optativas que sirven
para todo. Eso es curioso, porque lo que para ti es esencial, se convierte
en un añadido bonito, folclórico, en forma de optativa al final de la ca-
rrera.
Javier. Es curioso que cuando en 2.º, tras un primero común, eli-
ges qué grado hacer, Pedagogía o Educación Social, ves que los libros
eran iguales. Y era curioso porque yo lo que sentía era una exclusión del
educador social estudiando Educación Social. Pasaba en casi todas las
asignaturas; solo se hablaba de escuela… La primera asignatura que te
pone en contacto con la Educación social son las Prácticas. El alumno
se busca dónde hacer las prácticas; elige el centro según su interés.
Patricia. Yo eso lo cuestiono, porque si la formación que te da es
sobre desfavorecidos, minorías, etc., uno no se plantea en las prácticas
buscarse un colegio de élite, por ejemplo, para hacer otro tipo de cosas
como educador social.
Javier. Para hacer prácticas te piden que haya un educador social
en el centro. A mí el ámbito que me interesaba era el escolar y como
en él no había educadores sociales no pude. Tuve la oportunidad de ir
a una escuela taller de empleo porque la escuela taller de empleo quiso
incorporar al educador social.
Alberto. Otra preocupación que tengo sobre la educación social es
que el ámbito de trabajo es siempre la persona desfavorecida, como si
Investigación social desde la práctica educativa
Y como tal, requiere registros, fichas… pero todo eso ¿qué nos
aporta si lo hacemos porque toca hacerlo? ¿Qué hay en educación so-
cial que verdaderamente pudiera ser considerado investigación? ¿Qué
se está haciendo desde las prácticas de educación social que pueda
ser considerado educación social y qué se debería hacer?
Teresa. Todo aquello que te permite generar un conocimiento
bueno para ti, que genera un conocimiento que sirva para aquello que
tienes entre manos... es investigación. Tú tomas conciencia de dónde es-
tás, con quién estás, qué cosas pasan donde estás, y tratas de compren-
derlo. Y ahí es muy importante la mirada porque comprenderás una
cosa u otra en función de dónde mires, cómo y para qué. Si además,
esto te lleva a practicar o hacer las cosas de otra forma... Al final todo
eso para mí es investigación, y muy en el contexto, que es donde se dan
las cosas.
Belén. Para mí el comprender dónde estás, con quién estás, era
una base, pero me he sentido osada al incluir una introducción a la et-
nografía y las historias de vida en educación social, porque antes no lo
había visto. ¡Esto en técnicas de investigación social no está!
Héctor. ... Y no solo no está, y hablo desde mi experiencia en salud
mental, no solo es que no esté, es que no vale. Ha calado la idea de que
investigación es poner numeritos y hacer una validación, algo que es in-
útil y no casa con la educación... ¿Para qué me interesa saber si algo
afecta al 100% de la población si al final quien importa es a quien tengo
delante, y no le han preguntado?
Como educador social, al final determinado tipo de investigaciones
perjudican mi trabajo, porque por un lado te etiquetan, y no ven a la
persona. En cambio, la investigación de carácter etnográfico sí que es la
«útil», la que me vale, la que si me hubieran enseñado hubiera aprove-
chado, porque hay cosas que las hacía cada día... Tú vas a una actividad
con quince chavales, hablas con todos, y sacas un montón de informa-
ción en el día a día, que luego tal vez aprovechaban los psicólogos y pe-
dagogos...
En determinados contextos, la información que se comparte es muy
distinta, hay una profundidad y una riqueza que permite hacer otro tipo
de intervención, pero eso no te lo enseñan y además no vale, cuando es
muy útil. Simplemente llegar después de una actividad, y haber com-
Transcripción: Diálogo sobre investigación en Educación Social (diálogo de 9/05/2018)
Por eso poner ejemplos en un manual, por muy virtual que quede, es
necesario hacerlo, algo que permita ver que eso o aquello se hace.
Héctor. Volviendo a la animación sociocultural, yo me crié organi-
zando campamentos en los que no se empezaba organizando activida-
des, sino debatiendo para qué debía ser esta u otra actividad en función
de las características de los niños con los que trabajábamos: si trabajá-
bamos con adolescentes que empiezan a consumir drogas, tienen sus
primeras experiencias sexuales... ¿Qué vamos a hacer con ellos? Y en-
tonces se ensaban actividades: vamos a hacer esta actividad para tratar
este tema, o aquel, y eso se hacía en ocio y tiempo libre. Ahora en cam-
bio, ¿qué se hace y para qué?
Hay que recuperar eso, ¿qué hacemos y para qué? Porque si no ha-
cemos actividades de tirolina, pero eso ¿para qué sirve?
Belén. La última pregunta tiene que ver con cómo, ¿qué es lo que
valida la investigación científica? ¿cuáles son los criterios que te per-
miten decir que esta investigación que has hecho es una investigación
científica?
Teresa. ¿Y por qué no prescindimos en la pregunta del verbo «vali-
dar» y del adjetivo «científica»?
Patricia. Es que la investigación... ¡que sea científica o no me im-
porta poco!
Belén. Es que creo que es al revés... Lo que hacemos es científico,
no identifiquemos lo científico con lo numérico...
Inés. Ahora está de moda la investigación «basada en evidencias»,
deberías hablar de eso, porque es lo que se van a encontrar que les van
a pedir.
Patricia. A mí hablar de evidencias y certezas sí las asocio a la idea
de ciencia.
Héctor. Pero está bien que utilicemos el término ciencia, aunque
no lo compartamos...
David. Yo ayer estuve en la biblioteca del CSIC, y entre dos millo-
nes de libros, entre los libros de sociología y los de antropología hay un
montón de estanterías sobre costumbres, tradiciones y... brujería... En
Transcripción: Diálogo sobre investigación en Educación Social (diálogo de 9/05/2018)
el CSIC, toda una cuna de la ciencia... ¿Qué quiero decir con esto? Que
más que negar o cuestionar el conocimiento científico, que habrá que
mirarlo críticamente, lo que hay que hacer es tener en cuenta otras for-
mas de pensamiento válido. Y eso es lo que debe considerar la educa-
ción social, otras formas de conocimiento. Y si su vocación es la trans-
formación social, y cambiar las relaciones de poder...
Belén. Pero eso es importante, si hay que llamarlo o no conoci-
miento científico, porque para mí lo es...
Javier. ¿Pero cómo definís la ciencia?
Teresa. La ciencia es un invento de alguien en determinado mo-
mento con unos determinados intereses.
David. Es un tipo de conocimiento...
Patricia. ¿Pero qué es evidencia?
Héctor. Para mí, evidencia es cualquier dato recogido de forma sis-
temática y revela algo que ha pasado...
Patricia. No me sirve que utilices evidencia para definir evidencia...
Teresa. Eso es como cuando la gente habla de gestionar la diversi-
dad... Es que gestionar está ligado a un determinado modelo económico...
Héctor. Pero se lo van a tener que comer con patatas...
Teresa. ¡Pero me da igual! Si tenemos la oportunidad de decirles a
Belén y David lo que pensamos para mí la noción de ciencia no la com-
parto.
David. Lo que hay que intentar es, desde el máximo respeto a la
ciencia, que otras formas de conocimiento sean conocimiento pero no
las reconozcamos como conocimiento válido... también son conoci-
miento.
Teresa. Deberíais hablar del diálogo de saberes, al diálogo episte-
mológico, y desde ahí cuestionando lo que llamamos ciencia desde el
pensamiento occidental...
Inés. Yo no veo tan importante hablar de ciencia o no, pero sí
ahora, al irme fuera, a cómo se usa el tema de las «evidencias», es un
Investigación social desde la práctica educativa