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Pero esto es una de las muchas falsedades producto del manejo que de la
realidad efectúan los medios de propaganda.
Ante todo hay que distinguir las injusticias sociales provocadas por el
individualismo capitalista, del problema machista. Los marxistas han tratado
siempre de unificar los dos problemas en un planteamiento materialista común:
machismo es una forma de explotación capitalista. Este concepto, como el de
'Arte y Cultura como superestructura del capitalismo' o bien la teoría del
orgasmo revolucionario: 'libertad sexual como parte de la liberación contra el
capitalismo', forman parte de las idioteces clásicas del marxismo, una serie de
utopías y neurosis que no tienen nada que ver con la realidad.
Desde luego existió una injusticia de trato en muchos temas concretos con la
mujer como tal, productos en parte de malos entendidos, la fuerza bruta y
manías absurdas, errores que podrían haberse solucionado de forma natural y
rápida en un ambiente de comunidad. Pero no es este el asentamiento del
problema feminista.
Para hablar de machismo hay que hablar de 'supremacía' y para ello de la
medida de valoración que da esa supuesta supremacía. La base del machismo es
la creencia de que el hombre 'vale' más que la mujer, y ese 'valer' se basa en una
medida de comparación. Y ahí está el error y el problema causante de los males
actuales.
Poco a poco llegamos a la situación de una mujer que no tiene 'valor' económico
igual al del hombre, pues sus 'trabajos' o contribuciones comunitarias han
dejado de valorarse en dinero. En ese momento aparece el machismo moderno,
el que se conoce como problema machista. El hombre acapara los trabajos
renumerados y se cree con 'valor superior' respecto a la mujer que no alcanza
ese valor dinerario. El hombre, seducido por las ideas materialistas y marxistas
va despreciando o minusvaluando las contribuciones no dinerarias de la mujer,
de forma que en la familia el 'peso' del hombre se hace totalitario, al sólo valorar
el dinero y al crearse la idea individualista: cada individuo como portador de su
propio valor dinerario, acabando con la concepción comunitaria de familia,
estirpe y pueblo.
La mujer se encuentra que desea alcanzar esos valores asalariados, que son los
que 'dan valor' en la mentalidad liberal, y se crea el feminismo como
reivindicación de la mujer de 'abandonar los valores no dinerarios a cambio de
poder acceder a los valores económicamente rentables'. Las feministas JAMÁS
pedirán ayuda para que las mujeres puedan realizar adecuadamente sus valores
no económicos, sino que exigirán ÚNICAMENTE poder disponer del valor
dinero en igual derecho al hombre.
El problema no es que no sea justo que la mujer 'gane' lo mismo que el hombre,
el problema es que no se valora más que los que produce 'ganancia dineraria'. La
mujer ya no sopesa lo que 'gana' al trabajar de asalariada frente a lo que pierde
por renunciar a otras facetas de su vida. El hombre ya no valora las actividades
de la mujer que no sean recompensadas en dinero. Con ello la mujer es
realmente devaluada y arrojada a un combate por la recompensa económica que
la degrada y la limita absolutamente.
El mundo actual no valora en nada a una mujer con 5 hijos que debe cuidarlos y
amarlos, y que por ello no puede trabajar más que tangencialmente, pero valora
en mucho a una mujer sin familia que trabaja ganando mucho dinero.
Una Alternativa al Sistema debe plantear que la mujer y el hombre 'valen' cada
uno distinto en tanto los valores de medida no son sólo económicos sino de
diversos tipos, y la riqueza de valor no está pues sólo en la capacidad de aportar
dinero sino en otros varios temas. En ese sentido, destruido el Mercado como
nuevo dios, hombre y mujer recuperan sus valores. La mujer puede decidir si
quiere dinero u otros valores, y una sociedad que haya abandonado la
mentalidad economicista fomentará tanto o más que el 'salario' otras
aportaciones comunitarias.
Un día llegará que tener una familia feliz, aportar una cultura y una
sensibilidad, dar amor y tener responsabilidades, serán el motivo de orgullo,
mientras que ganar dinero será una necesidad más sin valor superior a otros
temas más profundos.