HACIA UNA EDUCACIÓN PRODUCTIVA

Hablar de educación en el Perú, implica muchas cuestiones; como por ejemplo: ¿Qué
porcentaje de la población estudiantil culmina sus estudios básicos?,¿Cuánto invierte el
actual gobierno en educación?, ¿Las instituciones educativas a nivel nacional cuentan
con maestros capacitados para desempeñar este papel?, etc.
Actualmente, no hace falta hacer ningún estudio estadístico ni tampoco ser erudito en el
tema para emitir opinión acertada sobre el descenso del rendimiento académico de los
alumnos, solo basta dar un vistazo a los registros académicos de evaluaciones de
cualquier institución educativa para darse cuenta de ello.
Los casi once años de escolaridad no son de gran utilidad para gran parte de los
alumnos; egresados que en su mayoría salen de las aulas sin ninguna competencia útil;
no pueden emplearse en una empresa moderna, no tienen formación para realizar su
propio negocio, etc. Muchos se emplean vendiendo su fuerza física para trabajos
menores, este tipo de empleo está siendo despreciado en el mercado porque no tiene
un mínimo de competencias, en fin, nuestra escuela no prepara de forma eficiente para
el mundo laboral ni para la vida.
La realidad de la educación en nuestro país es que la juventud no continua estudios
superiores y solo se dedican a trabajar en ocupaciones informales o sencillamente no
trabajan, aumentando la carga de desocupación y pobreza. A mi parecer la educación
peruana debe reformular sus contenidos curriculares y plantear también contenidos
técnicos o de formación ocupacional acordes con la demanda laboral y el sector
productivo.
Por otra parte, a esto se suma la capacidad de los docentes para desempeñar el rol que
se requiere en el proceso enseñanza – aprendizaje; ya que hoy en día muchos de los
docentes han llegado a la profesión de educación, frustrados por no haber accedido a
otras carreras que consideraban más rentables o socialmente estaban mejor vistas.
Hoy encontramos en el sector educación, profesionales que han fracasado en sus
ansias por alcanzar una vacante a cierta carrera universitaria o no encuentran
oportunidad laboral por su incompetencia y se anclan en educación; es el caso de
ingenieros, abogados, administradores, psicólogos, sociólogos, enfermeras, etc. La
crítica no es porque estén fundamentalmente, sino porque están los que no califican
como los primeros en sus especialidades o los más competitivos y es que muchos han
recalado en educación como última opción.
Según el Premio Nobel en Economía, James Heckman, la educación es un factor
esencial para el crecimiento como sociedad y país. La educación que se imparte a los
jóvenes, determina en gran medida los resultados de su vida como adultos y, por ello,
es tan importante que el aprendizaje que reciban por parte de los maestros sea el
mejor.
Es por ello que el gobierno debe brindar una mejor remuneración salarial a los docentes
ya que si no hay profesores bien preparados y motivados, no hay escuela. Al igual que
se reconoce la necesidad de tener profesores capacitados se considera la obligación de
asignarles sueldos adecuados a sus funciones y que permitan una vida digna con la
cual educar al capital más importante que tiene una sociedad: los niños y jóvenes.
Si, ha habido un avance en el aspecto educativo con respecto a gran parte de los
docentes y a la regla general que siguen sobre no permitir recibir ningún tipo de
“incentivo” a cambio de favorecer a algunos de sus alumnos ya que antes, esto se daba
frecuentemente a través de la Pitanza, cuando los hijos de los caciques iban a la
escuela y sus padres ofrecían materiales a los profesores para verse favorecidos.